Por: Ing. Luis Vargas Barbieri
Minas y Petróleo, 16 de diciembre de 2019
En su columna diaria “UN DÍA COMO HOY HACE 100 AÑOS”, “El Comercio” publicó el sábado 7 de diciembre la siguiente nota:
“Junto con la fundición, una de las más grandes del mundo, la Cerro de Pasco Copper Corporation hará de La Oroya, una ciudad modelo. En lugares donde hoy no hay ni una choza se construirán magníficos edificios. No tendrá tierra en las calles, como las tiene Lima, sino pavimento de asfalto que será lavado todos los días. La electricidad pública no colgará de cables, sino que tendrá postes con redes bajo tierra. Habrá edificios nuevos para el municipio, para el cuartel de policía, para la Casa de Correos y Telégrafos, para las escuelas y para un hospital”
91 años después, en el 2010 – época en la que el financiamiento para completar la adecuación ambiental del complejo metalúrgico de La Oroya estaba en problemas y los antimineros estaban por lograr el cierre definitivo de sus instalaciones – el IDH de la provincia de Yauli (departamento de Junín), donde se ubica La Oroya, ocupaba con un valor de 0.5411 el 10º lugar entre las 195 provincias del Perú. Comparativamente la provincia de Huancayo, capital de Junín, ocupaba con un valor de 0.4887 la 26º ubicación en ese ranking. Cabe agregar, que en el 2010 el ingreso familiar per cápita de la provincia de Huancayo era de 579.4 soles, mientras que la de Yauli era de 775 soles.
Lo que más llama la atención es que en el 2010, con una esperanza de vida al nacer de 74.68 años, la provincia de Yauli ocupaba el puesto 53º en el ranking correspondiente, mientras que Huancayo con 71.93 años el 110º. Más aún, a nivel de distritos La Oroya tenía una esperanza de vida al nacer de 74.10 años y el distrito de Huancayo de sólo 71.48 años.
Luego de 9 años del cierre casi total de La Oroya, en el 2019, la provincia de Yauli ha caído 3 puestos en el IDH y ahora con un valor de 0.6369, no obstante mayor al del 2010, ocupa el puesto 13º entre todas las provincias del Perú, mientras que Huancayo con 0.5761 ocupa el puesto 35º. En cuanto a esperanza de vida al nacer Yauli ahora tiene 76.74 años y Huancayo 72.65 años.
En consecuencia, la caída por Yauli de 3 puestos en el ranking del IDH provincial, no es consecuencia de una reducción en el valor de ese índice para esta provincia, que siguió incrementándose, sino de un mayor avance de otras provincias, como es el caso de Cañete que paso del 22º al 4º lugar, Huaura del 16º al 8º, Cusco del 11º al 7º e Ica del 13º al 12º. Cañete y Huaura impulsadas por su cercanía a la capital, Cusco favorecida por el turismo y el canon gasífero, e Ica por el desarrollo agro industrial.
La lección que nos deja lo ocurrido con Yauli y especialmente La Oroya, es que el desarrollo humano alcanzado por un espacio geográfico, como consecuencia del impulso de la industria minera o metalúrgica, no se reducirá necesariamente, cuando esa industria se cierre, sino que lo más probable es que no solo se mantendrá, sino que seguirá creciendo. Este comportamiento se explicaría por el siguiente enunciado: cuando una población ya alcanzó un nivel de desarrollo humano elevado, sus habitantes están capacitados para mantenerlo, ya sea en el mismo entorno con otras actividades o emigrando a otras localidades, donde se requiera la experiencia adquirida. Esto último también se comprueba en el caso de Yauli, que pasó de una población de 48,401 habitantes en el 2010 a 34,589 en el 2019 y del distrito de La Oroya que pasó de 17,218 en el 2010 a 12,488 en el 2017.