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La Rumba del Rombo

La Rumba del Rombo

Por: Elmer Cuba, Director de Macroconsult

(Caretas, 4 de Septiembre del 2014)

Entre 2004 y 2013 la economía peruana casi se ha duplicado en tamaño. Ha sido una década muy importante. El crecimiento económico ha hecho posible que muchas familias dejen la pobreza monetaria. Este hecho no es menor y ha comenzado a cambiar las estructuras sociales.

Sin embargo, aún se necesita por lo menos dos décadas de acelerado crecimiento y una mejora sustancial en la calidad de los servicios públicos para que tengamos una sociedad con mejor cohesión social.

Según el INEI, en 2013 la pobreza monetaria comienza por debajo de los 292 soles mensuales por persona. Es decir, en el Perú se considera pobre si el gasto mensual por persona es inferior a ese número. Asimismo, la pobreza extrema aparece debajo de los 155 soles mensuales por persona. Estos son promedios nacionales y el umbral varía según cada región geográfica.

En 2003 la mayoría de familias peruanas eran consideradas pobres. Hay otra categoría, que podemos llamar “ex pobres”. Es decir, familias que ganan o gastan por encima del umbral de la pobreza monetaria, pero cualquier evento (una enfermedad, muerte, robo, etc.) los puede volver a una situación de pobreza. [También se le llama clase media no consolidada].

Existe también una clase media, que está más alejada de la línea de pobreza monetaria.

Entre 2004 y 2013 la forma de la pirámide de ingresos ha cambiado a un rombo. Ello refleja una mayoría de clase media. Tal vez por primera vez la sociedad peruana está teniendo otra estructura.

En la década en mención, los hogares se han incrementado en 28%. Pero el crecimiento de la clase media ha sido notable. De hecho ha aumentado en 118%. Una velocidad mayor a la disminución de familias pobres, que han caído en 30%. Ello se ha reflejado en el boom inmobiliario y boom de ventas de automóviles, entre otros.

También seha incrementado la clase social “ex pobre” [o clase media no consolidada].Ha crecido en 25%. Ello lleva a una mayor presión sobre los servicios públicos de calidad que en estado aun no provee.

Lima

Pero el Perú sigue siendo una sociedad geográficamente muy heterogénea. Si Lima fuese el Perú, ese “país” tendría un PBI per cápita (en dólares de paridad de compra) parecido al que presenta Chile hoy en día.

En Lima casi no hay pobres. Tiene una clase media ampliamente mayoritaria. De hecho, tiene el 45% del total de las familias de clase media nacional, con una población que es sólo el 30% del país.

Es decir, más que un rombo, Lima se parece más a un diamante.

Resto Urbano

En del resto de ciudades vive la gran mayoría del país, 44% de las familias del Perú. Estas ciudades tienen una estructura social más parecida al promedio nacional. Son más “representativas” de la actual sociedad peruana.

Perú Rural

En 2004, el mundo rural presentaba una estructura social que bien podría reflejar el Perú colonial. En la última década ciertamente se observan  cambios, aunque la forma de pirámide sigue siendo dominante. Es decir, si bien el crecimiento ha hecho parte del trabajo, se necesitan intervenciones inteligentes por parte del Estado. La mayoría de productores practica la agricultura de subsistencia o son pequeños agricultores. En general, presentan una muy baja productividad.

No es casualidad que la mayoría de conflictos sociales ocurra en el mundo rural, donde también hay menor presencia estatal. El Baguazo y Conga son los sucesos de mayor repercusión nacional, con impactos directos en la caída de tres gabinetes ministeriales en el período en mención.

En definitiva, en nuestro país la economía -en su mejor década productiva- ha comenzado a alterar el ADN de la sociedad peruana. Sin embargo, el camino por recorrer todavía es largo, sobre todo para el llamado “interior” del país.

Este interior presenta un PBI per cápita (en dólares ppp) parecido al boliviano. Por ello, medio en broma medio en serio, económicamente Perú es como una combinación de Bolivia y Chile. 




Perú es el país en el que más creció la clase media

Perú es el país en el que más creció la clase media

Hace unos días el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) hizo  público su informe: “Perfil de estratos sociales en América Latina: pobres, vulnerables y clase media”. Los resultados del estudio fueron espectaculares. En doce años 56 millones de latinoamericanos dejaron la pobreza extrema. 

Recogiendo esta extraordinaria conclusión, El País de España tituló: “Más de 56 millones de ciudadanos dejaron la pobreza en Latinoamérica”. Para que no queden dudas de que esta es una fantástica noticia, en el primer párrafo de la nota reitera con entusiasmo: “Más de 56 millones de personas salieron de la pobreza extrema en América Latina entre 2000 y 2012. No se trata de una propaganda a favor de algún gobierno, sino del informe mundial de Desarrollo Humano 2014 del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), titulado Sostener el Progreso Humano: Reducir Vulnerabilidades y Construir Resistencias, divulgado en julio de este año”.

Más adelante el diario español detalla: “Naciones Unidas explica que los ciudadanos en pobreza extrema son los que reciben hasta cuatro dólares al día. Los latinoamericanos en esta situación eran 189.9 millones en 2000, el 41.7% de una población de 454.9 millones de personas. En 12 años, 56.2 millones dejaron ese grupo, de modo que el número de pobres bajó a 133.7 millones en 2012, el 25.3% de los 528.3 millones de habitantes de la región, subraya el PNUD. Ese progreso es resultado sobre todo del crecimiento económico de la última década, pero el estudio revela que el 38,3% se debió también a políticas redistributivas”.

Como se puede apreciar, la nota del país muestra positivamente y como un indudable logro de las políticas económicas los resultados del citado informe del PNUD. A diferencia de ello, y realmente de forma inentendible, la prensa peruana decidió mostrar las conclusiones del estudio sobre Perú de forma absolutamente negativa.

El martes 26 de julio, Gestión tituló: “El 40% de peruanos es vulnerable de regresar a la pobreza, según el PNUD”; La República: “Un 40% de peruanos puede regresar a la pobreza” y El Comercio: “PNUD: 20 de cada 100 personas son pobres en el Perú”.

Para estos diarios, lo importante no es que el Perú haya reducido la pobreza de 50.5% a 24.2%, que la clase media consolidada que llegaba en el 2000 a apenas 15.2% hoy sea de 34.3% y que sea la que más haya crecido en la región con 19 puntos porcentuales adicionales. Tampoco les parece resaltante que el PNUD señale que este se deba al crecimiento de la economía.

Para los medios peruanos, lo importante parece ser que tengamos un 40% de población vulnerable.Este porcentaje de la población no es pobre, pertenece a la clase media no consolidada, que ante una crisis económica, podría revertir su condición de no-pobre, como lo vimos cuando el propio Banco Mundial y el BID reportaron resultados muy similares. Ver en Lampadia (L): Más allá de los paradigmas – Mayoría de peruanos es de Clase Media. En vez de resaltar el indudable logro de que se sacó a millones de peruanos de la pobreza, se insiste en mostrar lo negativo. Esta difusión, poco rigurosa, de la prensa limeña, rebota en las radios de provincias, que no necesariamente tienen otras fuentes de información. ¿Se quiere desmoralizar a la población, ahora que justamente estamos pasando por meses de restricción en el crecimiento? ¿Pesimismo o deseo de apoyar campañas políticas? ¿Qué dicen los directores de estos diarios?

El Perú, además es el país en el que más creció la clase media (19.1%) y el segundo que más redujo la pobreza (26%). Estos resultados confirman las cifras del INEI y de varios especialistas nacionales que afirman que estos resultados se deben al crecimiento económico que ha traído el modelo de libre mercadoaplicado en el país desde los 90 (ver en (L): Al menos 80% de la reducción de la pobreza es por el crecimiento).

Ya va siendo hora de que la prensa nacional, que muchas veces se jacta de su neutralidad, sea más equilibrada y rigurosa y queno oculte nuestros logros. Lampadia




Destrabemos megaproyectos para recuperar el crecimiento

Destrabemos megaproyectos para recuperar el crecimiento

Hasta el 2008 el Perú había mostrado un franco crecimiento. Hemos sido -y en cierta medida seguimos siendo- la estrella de la región. Dicho año crecimos 9.1%, luego estas tasas se fue reduciendo. Así, hemos pasado de 8.5% en el 2010 a apenas 4.2% en el 2014, si es que nos dejamos llevar por la última proyección anunciada por el ministro Luis Miguel Castilla.  Ver en Lampadia (L): Gobierno anuncia nuevo MMM y reduce la proyección de crecimiento.

Por el momento podemos prever que la estructura misma del PBI ha variado. En el 2008 la minería representaba el 14% del PBI y el 58,4% de las exportaciones. Para el 2013 la minería representó solo el 12% del PBI y el 55,1% de las exportaciones. O sea, la importancia de este sector se ha visto reducida en estos años. Esto no es difícil de explicar. Desde que entró el nuevo gobierno se han frenado las exploraciones mineras y se ha dificultado la inversión en los grandes proyectos. Asimismo, el discurso anti-minero oficializado por el Primer Ministro Lerner, que ofreció una nueva minería que nunca se formuló, espantó los capitales.

Todo esto no solamente tumba la producción del sector minero, sino además perjudica a las demás empresas pequeñas, medianas y grandes que son parte de la cadena de producción de este sector. Después de todo, el crecimiento del sector minero ha ayudado al surgimiento de un sector industrial que es el más grande, fuerte, competitivo, innovador y exportador de nuestra historia. Por otro lado, no olvidemos que por cada puesto de trabajo creado por la minería se crean 9 puestos en los demás sectores, entre directos, indirectos e inducidos.

Esta situación no se va a revertir con los proyectos que ya tenemos en marcha, su efecto será solo temporal, en la medida que vayan entrando en producción. Lo que necesitamos es que el gobierno tome la decisión política de destrabar algunos de los grandes proyectos mineros, petroleros y energéticos que se encuentran parados por diversas razones.

Según la información del Ministerio de Energía y Minas, algunos proyectos de gran envergadura podrían salir adelante en un periodo relativamente corto de contar con apoyo político. Por ejemplo, Conga en Cajamarca representa una inversión de US$4,800 millones que bien podrían ejecutarse si es que el Estado hiciera su parte. Otros proyectos, como Tía María, podrían ser bloqueados si es que no velamos por su desarrollo.

Mucho más conveniente que estar descubriendo nuevos motores de producción o apostar por proyectos de inversión en infraestructura que son muy de largo plazo, es jugar con lo que ya se conoce y ya ha generado puestos de trabajo y tantos otros beneficios para el país en los años pasados. Ver en (L): La minería tiene un alto valor agregado. El Gobierno podría comprometerse a sacar adelante apenas dos grandes proyectos en lo que le queda de tiempo y esto tendría un impacto reactivador bastante fuerte. Es más, incluso tendría un gran impacto positivo en la recaudación tributaria. Ver (L): El impacto macroeconómico de la minería.

El sector privado e incluso estudios internacionales tienen identificado lo que hace falta resolver para que la inversión fluya.  Ver en (L): A pesar de nuestro gran potencial minero, seguimos a media tabla.  Por ejemplo, Colombia está creciendo casi el doble que el Perú sobre la base de la desregulación de su economía y la promoción de la inversión en minería. Lo que faltaría, entonces, es que hagamos algo concreto al respecto o este gobierno nos dejará para el próximo periodo gubernamental en condiciones clamorosas y muy distintas a las que encontró. Lampadia




Gobierno anuncia nuevo MMM y reduce proyección de crecimiento

Gobierno anuncia nuevo MMM y reduce proyección de crecimiento

El ministro de economía Luis Miguel Castilla bajó la proyección del crecimiento del PBI peruano para este año a apenas 4.2%, debido a una menor inversión privada y la reducción de las exportaciones, especialmente las tradicionales. Tan solo hace cuatro meses el gobierno  proyectaba un crecimiento de 5.7%, sin querer entender que la economía se estaba yendo a pique. Como lo anunció Lampadia en marzo pasado. Ver en (L): Otra vez La Parada (esta vez en la inversión). 

El Consejo de Ministros anunció que se ha incrementado el presupuesto de la República en 12% para el 2015 con respecto al del 2014, llegando a S/.130 mil millones.  La mayor parte del presupuesto se financiará con recursos ordinarios.  También se anunció un Proyecto de Endeudamiento del Sector Público para el 2015 que incluye una deuda de US$2,162 millones con entidades externas y S/.7.5 mil millones de deuda interna.  Castilla espera que la deuda pública peruana continúe reduciéndose a 19.6% para el 2015 y a 17% en el 2017. 

Anunciaron que el presupuesto para el 2015, cuyo proyecto debe ser aprobado por el Congreso, se sostiene en seis ejes:

1 Más recursos para educación: Incremento de S/. 4,200 millones.  Incluye costos de la reforma magisterial, reubicación de 50 mil plazas docentes y Plan de Infraestructura Educativa.

2. Más recursos para salud: Incremento de S/. 2,647 millones.  Necesarios para continuar con la reforma del sector.

3. Más recursos para financiar inclusión social: Adicional de S/. 1,000 millones.

4. Fortalecimiento de acciones de seguridad, orden público, defensa nacional y justicia: Incremento de S/. 1,300 millones.

5. Más recursos para cerrar la brecha de inversión en infraestructura: Incremento de S/. 36,000 millones.

6. Más recursos para la reforma del servicio civil: Entrega de S/.850 millones.

La proyección de 4.2% para el PBI se sostiene en un incremento del 5.2% para el segundo semestre del año, debido a una recuperación del entorno internacional y a la estabilización de los precios de las materias primas.  En ese sentido, el ministro reconoció la influencia que tendrán los avances en grandes proyectos mineros como Toromocho o la expansión de minas que ya están funcionando como Antamina. 

También se espera que las políticas fiscales y monetarias tengan un impacto en un menor crecimiento de la demanda interna.  Sin embargo, sabemos que el verdadero impulso al crecimiento viene por el apoyo a la inversión privada, por lo que se debería insistir en solucionar los problemas que tienen parados a grandes proyectos mineros.

Finalmente, quizás más importante es que en la reciente sesión del Consejo de Ministros también se aprobó un nuevo (MMM) Marco Macroeconómico Multianual 2015-2017, el cual incluye según el ministro Castilla, importantes novedades, que no ha explicado. (Ver las novedades anteriores (L): Novedades del MMM 2015-2017).

Lamentablemente, hasta ahora, ni el ministro Castilla puede reconocer que hemos apagado el motor de crecimiento más grande, la inversión minera. Mientras que no la reactivemos con nuevos proyectos, no recuperaremos el ritmo de crecimiento. Ver en (L): Volvamos a prender el motor de la economía. Lampadia




Cediendo la posta del crecimiento

Cediendo la posta del crecimiento

Colombia supera al Perú y se convierte en la economía de mayor expansión en la región

Mientras se alista para empezar su segundo mandato como presidente de Colombia el 7 de agosto, el primer nombre que Juan Manuel Santos ha escrito para su gabinete es el de Mauricio Cárdenas, quien mantiene su puesto como ministro de Finanzas. Era de esperarse, pues impulsada por un auge de la inversión, la economía del país creció 6.4%. 

Esta es una grata excepción a una tendencia regional: América Latina en conjunto crecería menos de 2% este año, la peor cifra desde el 2009. El ?n del auge de los commodities que sustentó a la región por más de una década, el desvanecimiento de la era del dinero barato en tanto los países ricos se preparan a subir las tasas de interés y una serie de factores locales han pasado su factura.

La caída ha sido especialmente abrupta en Perú, donde la economía está sufriendo lo que Luis Miguel Castilla, el ministro de Economía, llama un “traspié”. Incluso si se recupera en el cuarto trimestre, como espera Castilla, una proyección de crecimiento de más del 4% este año parece demasiado optimista. Para un país que ha tenido un crecimiento al estilo asiático, con un promedio de 6.4% anual entre el 2003-13, la des- aceleración es una sorpresa desagradable. Colombia ha superado al Perú para convertirse en el país de mayor crecimiento entre las economías  más grandes de América Latina.

Ambos países son exportadores de materias primas. Ambos son miembros del bloque de libre comercio llamado Alianza del Pací?co. Entonces ¿por qué a Colombia le está yendo mejor que al Perú?

La respuesta comienza con lo que Victor Bulmer-Thomas, historiador británico de economía de América Latina, ha llamado “la lotería de los commodities”. Las principales ex- portaciones de Colombia son el petróleo y el carbón, cuyos precios se han mantenido en los últimos años; mientras que la mitad de las exportaciones peruanas dependen del cobre y el oro, cuyos precios se han reducido. Por lo tanto, el valor de las exportaciones peruanas cayó en 9% el año pasado, mientras que el de Colombia se redujo ligeramente.

Al momento de explicar el crecimiento de Colombia, Cárdenas también apunta a una serie de reformas. El año pasado el Gobierno dispuso tasas hipotecarias más bajas y una subvención pública. Una ley del 2012 redujo los onerosos impuestos sobre la nómina (mientras que aumentó los impuestos para los más ricos). Las asociaciones público-privadas planean invertir hasta US$ 25,000 millones para el 2018.

Por el contrario, el Perú está sufriendo lo que Castilla llama un año “complicado”. En primer lugar, el sol se depreció alrededor de un 9% en el 2013. Otros contratiempos han incluido contracciones relacionadas con el clima en la pesca y la agricultura, un estancamiento en la inversión de los gobiernos regionales a causa de los escándalos de corrupción e inesperados problemas técnicos en dos grandes minas de cobre. En respuesta, el Gobierno está paleando dinero para la economía. Boni?caciones adicionales y aumentos salariales para empleados estatales, así como préstamos adicionales para pequeñas empresas equivalen a más del 1% del PBI. Castilla reitera  que la economía se recuperará en el cuarto trimestre y volverá a crecer un 6% en el 2015 y el 2016. Con nuevas minas de bajo costo a punto de ponerse en marcha, la producción de cobre aumentaría en 20% el próximo año, mientras que se espera el inicio de las obras de construcción en las asociaciones público-privadas por un valor de US$ 18,000 millones.

La mayoría de analistas predicen que el Perú pronto recuperará su ventaja sobre Colombia. Pero eso no es seguro. Francisco Rodríguez, economista de Bank of America, sostiene que la potencial tasa de crecimiento del Perú va a ser menos del 5% y puede caer aún más. Solo “si no hacemos nada”, responde Castilla. 

Las loterías dan oportunidades a los países. El desarrollo proviene de su utilización para crear economías más productivas. En ese sentido, Colombia ahora tiene una ventaja sobre Perú; pero ambos están en mejores condiciones que muchos de sus vecinos sudamericanos.




“Presupuesto público para el 2015 se incrementará en S/. 11,000 millones”

“Presupuesto público para el 2015 se incrementará en S/. 11,000 millones”

Entrevista a Luis Miguel Castilla Rubio, Ministro de Economía y Finanzas

Por: Julio Lira Segura y Luis Hidalgo Suárez

(Gestión, 31 de julio del 2014)

El último mensaje del presidente Humala en el Congreso ha generado temores de populismo y críticas de falta de audacia en adoptar algunas medidas, por ejemplo tributarias, en el Ministerio de Economía. El titular del MEF en entrevista a Gestión responder a los cuestionamientos y revela los número del mayor gasto.

Una de las críticas a las medidas reactivadoras es que es por el temor a que sean populistas. ¿Cuál es costo fiscal de dichas medidas?

Descarto, tajantemente, cualquier manejo populista de la economía peruana si de algo nos podemos preciar, en los últimos quince o más es un manejo responsable de la política fiscal, lo que nos ha valido el reconocimiento de las calificadoras de riesgo. Si hubiera algún indicio de populismo, no tuviéramos estas mejoras; y de hecho, esto hay que verlo en el contexto en que se modificaron las reglas fiscales.

¿Se refiere a los cambios que se hicieron el año pasado?

Así es. Se aprobó, el 31 de octubre del 2013, un nuevo marco de reglas fiscales que ya estará en vigencia plena en el 2015, el cual elimina el componente cíclico y da mayor predictibilidad a las fuentes de ingresos permanentes para, justamente financiar gastos permanentes.

¿Qué dice la regla?

Permite hasta un déficit estructural de 1% del PBI, como tope, lo cual fue aprobado vía decreto supremo y donde ya se ha establecido cuáles van a ser los topes de gasto de acá hasta el 2017.

¿En cuánto se incrementará el presupuesto del 2015?

Tiene un crecimiento para el 2015 de más o menos 11% en términos nominales. Son unos S/.11,000 millones de incremento, de los cuales ya se han asignado los presupuestos de educación y salud: S/.4,000 millones y S/.2,500 millones respectivamente. El resto va a ser repartido en otros sectores. Evidentemente la seguridad será el tercer pilar de esta agenda priorizada.

¿Cuál es la proyección de crecimiento económico para el próximo año?

Mantenemos una tasa del 6%, que fue el dato que se utilizó para la formulación del presupuesto inicial, los techos de gasto que se dieron en junio se mantienen.

¿Son sostenibles algunos gastos que se están autorizando a raíz de las medidas que se han adoptado?

Descarto también que muchos de los proyectos de inversión vayan a introducir gastos que no se puedan mantener en el tiempo, porque estamos dando un empuje fuerte a las asociaciones público privadas, lo cual libera recursos públicos, y son contratos de largo plazo, que permiten mantener niveles de servicio en sectores clave.

¿A cuánto asciende el Fondo de Estabilización Fiscal?

No se ha tocado un céntimo de esos recursos. Hay reglas para tomar esos recursos: que hayan trimestres que haya contracción en el PBI, o que haya un terremoto de alta dimensión o un fenómeno El Niño complicado. Somos conscientes de la necesidad de tener colchones de ahorro público, las medidas anunciadas por el presidente están en el marco de nuestra previsión.

¿Se han tomado recursos del Fondo de Estabilización Fiscal (FEF) para financiar los nuevos gastos?

El FEF actualmente está en 4.2% del PBI, en una cuenta en el Banco Central.

En esa perspectiva, ¿en cuánto se está previendo el déficit fiscal para éste año y para el próximo?

Para este año, se prevén cuentas balanceadas (0% del PBI). Para el próximo año, estamos previendo ir hacia un déficit no mayor a 1% observado, es un déficit de 0.7%, congruente con un déficit estructural de 1% del PBI.

Si se desacelera el crecimiento, cómo se explica que los ingresos fiscales, justamente cuando la actividad económica está cayendo. Por tanto, ¿no se tocará el FEF?

No puedo descartar que no se toque, pero ese fondo tiene reglas muy claras y hay que respetarlas. Estamos en una fase coyuntural de menor crecimiento, pero las fuentes de menor crecimiento se van a disipar.

Ya se comienzan a disipar, especialmente en lo que resta del año, y se espera en todo el año entrante. Entonces, mal haría en tocar nuestros ahorros para crisis, cuando no estamos en una crisis. La proyección que tenemos de los ingresos (fiscales) indica que irán de la mano con los gastos.

¿La nueva regla macrofiscal también fija un tope para el crecimiento de los gastos corrientes?

Sí, para las remuneraciones y a las pensiones, y eso se va a cumplir. El crecimiento de la planilla de remuneraciones y pensiones no puede crecer más que el crecimiento del PBI potencial.

Hay el temor que la expansión del gasto público tendrían un objetivo electoral. ¿Ud. puede descartar esto?

Tajantemente. Porque si yo tuviera problema de deuda, diría hay que ser mucho más cuidadoso. Si cerrar la brecha en capital humano se llama populismo, eso no tiene mucho asidero, porque eso no es aumentar a rajatabla los ingresos, como sería un aumento de 100% de sueldos para funcionarios públicos. No es eso. Son aumentos en el marco de las reformas que estamos haciendo.

En cuanto al crecimiento del gasto, ¿con las medidas ya estamos en el tope establecido?

No. Todo está encajado de tal manera que haya un cumplimiento de las reglas fiscales. Obviamente, hay cláusulas de salida, en casos que haya una recesión, o un fenómeno natural. Si uno desvía del techo de gasto, que es lo vinculante, existe la necesidad de poder tomar medidas correctivas, tanto a nivel de gobierno nacional como los subnacionales.

¿Cuál es la preocupación central en cuanto a la expansión fiscal?

Acá el tema central es cómo logramos gestionar el impulso fiscal, que de hecho, cuando hicimos el presupuesto para éste año ya venía con un impulso fiscal importante, de 0.7% del PBI.

¿Ahora cuánto será?

Ahora le añadimos casi un punto, estará en 1.7% (el impulso fiscal) para este año, el impulso fiscal fue 2% del PBI en la crisis financiera global del 2009). Pero, el tema central es cómo lograr la efectividad, es decir, que este impulso fiscal efectivamente se materialice.

Entonces, el diseño de los últimos decretos de urgencia ha estado dirigido a evitar ser pro cíclicos.

La vez pasada (2009) se inyectaron muchos recursos públicos a la economía, pero hubo un rezago en la ejecución y se vio recién en el 2010 cuando la economía ya creció de vuelta entre 8 y 9%, es decir, fue procíclico.

¿Cuál es el objetivo del último decreto de urgencia publicado el 28 de julio?

Tiene como finalidad varios temas, pero se trata de adelantar tramos de reformas que ya estaban establecidas. El caso más representativo es el adelanto del tercer tramo de la reforma de las remuneraciones de la Policía y las Fuerzas Armadas previsto para diciembre de este año. Lo adelantamos para agosto significa una inyección de S/.500 millones.

Pero eso no significa un mayor gasto…

Entre agosto y diciembre, pero es un impulso, es una inyección de recursos. Lo mismo ocurre con bonificaciones en el marco de la reforma de salud, y una serie de medidas en el sector de educación.

Quizá las dos medidas de costo (fiscal) permanente, pero que en términos de monto no son grandes cosas fundamentales, que es la actualización que se ha hecho de la pensión mínima para las viudas del régimen de la Ley 19990, donde se sube la pensión mínima de S/.270 a S/.350.

Inversión pública

¿Por qué se ha contraído tanto la inversión de los gobiernos regionales?

Una razón que se aplica a la inversión de gobiernos regionales y locales es la disminución de los recursos provenientes del canon.

¿En cuánto se estima que cerraremos el año en lo que se refiere al crecimiento de la inversión pública?

Queremos llegar a un grado de ejecución similar al del año pasado, que fue más o menos 75% del presupuesto de inversión pública, pero esto va a ser determinado de la forma como las regiones puedan volver al tren de gastos anterior -se están recuperando muchas de ellas-, y del retraso que hubo en algunos proyectos que estaban previstos que se implementen por parte del gobierno nacional a principios de año.

¿Qué ejemplo puede dar?

Es el caso de la Línea 2 del Metro de Lima. Inicialmente, cuando se formuló el presupuesto para este año, se preveía que el proyecto sería adjudicado en diciembre del 2013 y empezaba la ejecución.

Pero se adjudicó meses después, y se van a hacer los primeros adelantos en el último trimestre del año. Entonces se ha corrido un poco.

¿Cree que al gobierno le faltó audacia para aplicar medidas tributarias además de las anunciadas?

A veces, por ser demasiado audaces, podemos introducir elementos de incertidumbre y los inversionistas quieren reglas claras que les permita reanimar sus expectativas e invertir. Nuestro país es atractivo a la inversión y siempre lo ha sido con el marco tributario que tenemos. Los problemas pasan por la permisología y los trámites que pueden ser muy onerosos. Hasta hace muy poco no estuvo en discusión la tributación, salvo la corrección que estamos haciendo a algunos temas. El proyecto de ley que hemos enviado al Congreso tiene cuatro medidas tributarias muy puntuales.

¿Por qué no rebajar, por ejemplo, un punto porcentual el IGV, o el Impuesto a la Renta?

Tenemos que son muy consecuentes en no reducir nuestra base de ingresos permanentes, que son los que se gastan, y no los ingresos transitorios, que son los que se ahorran. Hay que ampliar la base tributaria, no gravar a los mismos contribuyentes. Hemos empezado a racionalizar todo el esquema de percepciones y detracciones, no se puede hacer de golpe sino de manera gradual porque representan un monto importante de la recaudación.

Pero tenemos que ser un país competitivo para captar inversiones, lo que implica una revisión de nuestro marco tributario y otras regulaciones.

Tuvimos una misión hace poco del FMI a quienes les solicité que revisaran las tasas tributarias y su competitividad. Según el estudio, las tasas están en el promedio y debemos procurar seguir luchando contra la evasión.

¿Somos más competitivos que Chile o Colombia entre los países de la Alianza del Pacífico?

Si Chile aprueba su reforma tributaria vamos a ser más competitivos que ellos, con Colombia estamos en los mismos niveles de competitividad tributaria.

Pero tenemos que proyectarnos más allá de los países de la Alianza, por eso vamos a revisar no solo para las personas jurídicas sino también naturales, pero eso no es parte de una política de reactivación sino una reforma estructural porque estamos viendo cómo pueden cambiar los ingresos permanentes hacia el futuro.

Esta revisión requiere un consenso político importante porque pasa por el Congreso, no se puede sacar decretos de urgencia en materia tributaria, debe haber un proyecto de ley.

¿Cree que eso se pueda hacer en este gobierno?

Estamos en la fase de evaluación pero donde pensamos que puede haber un efecto reactivador es en las medidas que hemos aprobado y las que presentamos al Congreso, que tienen un efecto inmediato.

¿Cómo se van a mantener los ingresos tributarios si la economía se está desacelerando? ¿Se va a usar el Fondo de Estabilización Fiscal (FEF)?

El FEF tiene reglas muy claras y estamos en una fase coyuntural de menor crecimiento, pero las fuentes de menor crecimiento se están comenzando a disipar y especialmente lo harán en los últimos meses del año, y en todo el año entrante.

Mal haría en tocar los ahorros para crisis ahora que no estamos en crisis. Estamos en una fase del ciclo en el que se han alineado un conjunto de factores que hacen que el crecimiento esté por debajo de lo que debería.

¿La Sunat va a presionar más?

No es que la Sunat vaya a presionar más, la proyección de ingresos que tenemos va a ir de la mano del gasto. Hay cuentas balanceadas, lo que nos da un poco de espacio es que se ha subejecutado la inversión pública, pero al final vamos a tener ingresos del sector público no financiero al igual que los gastos cumpliendo la regla fiscal que tenemos para este año de transición.

Uno de los reclamos empresariales es hacer cambios en la legislación laboral

Hay una revisión de todas las regulaciones que impiden que las empresas puedan crecer, no queremos que incentiven el enanismo porque finalmente pongo la valla baja e incentivo que se partan en dos o tres empresitas para poder cumplir la legislación.

En el marco del Plan de Diversificación Productiva, en el pilar de la productividad y desregulación, hay normas y estamos haciendo evaluaciones, se requiere consenso político pero también una propuesta que sea viable.

¿Qué están trabajando al respecto?

El MEF, con los ministerios de Trabajo y de la Producción, estamos planteando cambios que serán anunciados en su oportunidad.

En el tema tributario y laboral trabajamos en algunas reformas pero reconociendo que estamos en el año cuatro del gobierno y el capital político que uno tiene es menor que en el año uno.

No nos vamos a correr a los desafíos y, por lo menos, comenzaremos el debate de estos temas.




El Perú es Infinito

El Perú es Infinito

Comentario de Lampadia:

Julio Velarde, Presidente del Banco Central de Reserva del Perú (BCRP) declaró en una reciente entrevista: “El Perú tiene un gigantesco potencial de desarrollo, (…)”.

Nos alegra mucho leer las declaraciones de Julio Velarde sobre las capacidades del Perú. Él ha sido siempre un estudioso de nuestra realidad, y después de su experiencia en el BCRP, un conocedor del mundo amplio, el que fue y el que se está construyendo, especialmente en el Asia, donde ya nació una clase media de más de 2,500 millones de personas.

Efectivamente, nuestro país tiene un potencial gigantesco, desperdiciarlo, sin aprovechar nuestros recursos para eliminar la pobreza puede ser calificado de inmoral. 

Nota de La República

BCR: Perú muestra gigantesco potencial de desarrollo

(La República, 24 de Julio del 2014)

En los últimos 50 años el Perú ha atravesado por momentos difíciles; sin embargo actualmente se encuentra en una posición expectante, pues tiene un gigantesco potencial de desarrollo, según Julio Velarde, presidente del Banco Central de Reserva (BCR).

“Se ha logrado, en el país, un consenso de que una política macroeconómica sólida es indispensable para el crecimiento de la economía”, dijo.

Asimismo, proyectó que la actual década será favorable para el país. “Ha sido importante el arduo aprendizaje colectivo y la situación de una economía abierta y un importante potencial en el exterior”, indicó.

Estas declaraciones las ofreció durante la presentación de la moneda conmemorativa por el 50° aniversario de creación de la Escuela de Negocios para Graduados (ESAN), reunión que contó con la presencia del rector de dicha entidad educativa, Jorge Talavera.




MEF alista importante modernización del Estado para impulsar la inversión y el crecimiento

MEF alista importante modernización del Estado para impulsar la inversión y el crecimiento

El gobierno se ha dado cuenta que, ante la parálisis de la economía, debe actuar cuanto antes para mejorar el clima de inversión, reanimar la confianza e impulsar la inversión privada. Para ello está emprendiendo un programa de modernización del Estado que debería redundar en mejores espacios de promoción y coordinación con el sector. Este programa estará dirigido a las pequeñas y grandes empresas. En Lampadia ya habíamos comentado que la desaceleración no tiene un origen determinante en el contexto externo, sino básicamente en factores internos (Ver: “¡Es el Estado, … estimado!”). 

Las medidas propuestas por el MEF pueden agruparse en cuatro grandes ejes: i) tributario; ii) reducción de costos regulatorios y ambientales; iii) promoción de inversiones y reducción de procedimientos burocráticos; y, iv) una nueva Ley de Contrataciones del Estado. Este plan ha sido aprobado por el Consejo de Ministros y lleva el mandato específico del propio Presidente de la República, Ollanta Humala. Ahora el MEF va a trabajar con la Comisión de Economía y la Comisión de Fiscalización del Congreso para conseguir sus dictámenes y pasar a la comisión permanente. No se ha querido recurrir al pedido de facultades legislativas.

En el ámbito tributario, el MEF plantea eliminar el efecto desincentivador de la capitalización anual de intereses relacionada a la deuda tributaria  que se acumuló entre 1998 y el 2005. Además, se plantea una modificación en la estructura de los contratos de estabilidad tributaria para permitir procedimientos transparentes, rápidos y eficientes, y ampliar sus efectos a otras actividades. También se propone simplificaciones en el régimen de percepciones del IGV, en las tasas por trámites, licencias y derechos municipales, entre otros.

En lo relacionado a la reducción de costos regulatorios y promoción de la inversión en materia ambiental, se elimina el incentivo perverso que tienen las entidades regulatorias al financiarse vía multas. Asimismo, se establecen disposiciones para regular las funciones de la OEFA, y plazos para la emisión de opiniones vinculantes sobre los Estudios de Impacto Ambiental (EIA). También se propone que se modifique la Ley de Areas Naturales Protegidas para que las zonas reservadas no se determinen mediante resolución ministerial, sino que se aprueben en el Consejo de Ministros.

Otras medidas incluyen la simplificación de los procedimientos para la ejecución de las obras de infraestructuras; la creación del fondo MIPYME (para facilitar garantías a los créditos e instrumentos de difusión tecnológica, innovación empresarial y mejora de la gestión, entre otros); eliminación de los EIA para construcción de viviendas, oficinas y comercios; simplificación de la tramitología para el sector construcción y las inspecciones técnicas de seguridad, etc.

Como se puede apreciar este conjunto de medidas está orientado a  facilitar la inversión, con lo que se espera un impacto significativo en el mediano plazo. En el corto se podrían empezar a ejecutar los proyectos paralizados, generándose rápidamente empleo, demanda por maquinaria, equipos e insumos, con sus naturales impactos de encadenamiento inter-sectorial. Así la economía recuperaría su dinámica. El MEF ha remarcado que promueve este reordenamiento al menor costo fiscal posible. Este no es un paquetazo tradicional. Con la aprobación del crédito suplementario de S/. 3,100 millones para inversión pública en el 2014, el impulso fiscal estaría entre un moderado  1,2% y 1.5% del PBI. Lampadia




No es “chorreo”, son “manantes”

No es “chorreo”, son “manantes”

En la última década, muchos analistas han criticado nuestro modelo de crecimiento económico porque se suponía que reducía la pobreza mediante el llamado “chorreo”. Campañas políticas completas se han basado en esta tesis. Se sostenía que a través de este proceso, la riqueza generada por la inversión privada en la parte más moderna del país“chorreaba” hacia los niveles más pobres de la pirámide social, beneficiándolos paulatina y residualmente, ya sea por el propio crecimiento o por una limitada acción del Estado.

Con la reciente publicación del informe técnico del INEI que da cuenta de la evolución de la pobreza al año 2013, diversos expertos han afirmado que al menos 80% de la reducción de la pobreza es por el crecimiento económico. De esta forma, el impulso de la inversión privada, la apertura de los mercados y las políticas económicas que nos han permitido aprovechar el “súper-ciclo” del viento a favor, han sido ideales para reducir la pobreza. Sin embargo, se sigue hablando de chorreo.

¿Hubo “chorreo” o, más bien, habría otros factores que explicarían una reducción tan pronunciada de la pobreza fuera de Lima y especialmente en el sector rural?

Conviene recordar que la reducción de la pobreza mantiene una relación sensible, no lineal y positiva con el crecimiento económico (ver: Crecer para reducir la pobreza y Los nombres de la pobreza, artículo del ex Ministro Luis Carranza). Esto significa que la pobreza se reduce en una mayor proporción cuando el crecimiento es más acelerado. La razón es que las tasas más altas de crecimiento generan cambios cualitativos en la productividad, encadenamientos, integración territorial y de servicios (como lo muestra Richard Webb en su libro: Conexión y despegue rural). Asimismo, se sofistican los mercados laborales, generando efectos multiplicadores en el bienestar. Es por ello que se destaca la necesidad de crecer entre 6% y 7% para reducir sostenidamente y a buen ritmo la pobreza.

Lo que reflejan las cifras del INEI se puede sintetizar como una dinámica de crecimiento pro pobre mucho más aguda en las zonas rurales. En efecto, “la película de nuestro crecimiento” de los últimos años, muestra que los ingresos se han incrementado a tasas mayores en las zonas  más alejadasde la capital. En la selva crecen más rápido que en la sierra, y en la sierra más rápido que en la costa, al tiempo que las zonas rurales lo hacen a mayor velocidad que las urbanas.

Otro aspecto a resaltar es que en el último lustro el ingreso proveniente del trabajo ha crecido a tasas elevadas en todo el territorio nacional, beneficiando especialmente a las zonas rurales, donde creció 40%, mientras que en las zonas urbanas lo hizo al 26%. Este fenómeno sólo sería explicable por aumentos en la productividad. Tal situación elimina el concepto del supuesto “chorreo”. Lo que se habría generado, es más bien, un afloramiento de riqueza en las zonas rurales. En consecuencia debiéramos hablar de “manantes” (como se usa en el Cusco para llamar a una fuente natural de agua) y no de chorreo.

Igualmente, los mercados laborales -que constituyen la instancia que vincula el crecimiento al mayor bienestar de la población-, muestran una reducción significativa del subempleo (en cualquiera de sus definiciones), tanto en el ámbito urbano como rural. Esto sería evidencia de que hemos experimentado un crecimiento “transformador”, mucho más significativo que un modelo basado en lasupuesta, y ahora desacreditado chorreo.

Las cifras del INEI deben llevarnos a evaluar mejor las relaciones causa-efecto de este fenómeno. Se hace evidente que mantener un ritmo acelerado de crecimiento económico puede ser una magnífica política “social”, que se debe complementar con mejor educación, un esfuerzo extraordinario de capacitación, mejores regulaciones laborales, instituciones más sólidas y una acelerada inversión en infraestructuras, para que los “manantes” rurales se conecten al Mar de Grau, conectando a los pobres con la modernidad y con los mercados más eficientes, fuente fundamental de un bienestar duradero.




Al menos 80% de la reducción de la pobreza es por el crecimiento

Al menos 80% de la reducción de la pobreza es por el crecimiento

Hace unos días el INEI publicó un informe técnico que da cuenta de una disminución de 1.9% en la pobreza total el año pasado y de 1.3% en la pobreza extrema. Así, al cierre del 2013 las cifras oficiales indican que en el Perú la tasas de pobreza alcanzan un mínimo histórico de 23.9% y 4.7%, respectivamente, habiendo alcanzado la pobreza extrema un nivel inferior a la meta de 5% trazada para el 2016. Estas reducciones de la pobreza del 2013, si bien menores a las de años anteriores, han sido tomadas por muchos analistas como una mala foto, pero el análisis tiene que tener una mayor perspectiva, la de una década (cual película) que ha producido excelentes resultados.

El reporte del INEI nos indica que la reducción de la pobreza ha venido además, acompañada de una reducción adicional de la desigualdad. La pobreza en la sierra y en la selva se redujo más que en la costa, y en el área rural, las reducciones fueron mayores que en el ámbito urbano. Además, el ingreso de los deciles más pobres creció más rápido que el de los deciles más ricos.

Más allá del número alcanzado en un año dado, es importante entender los procesos que explican la notable mejora en las condiciones de vida de la población. Nos estamos refiriendo a las relaciones causa-efecto que han hecho que la pobreza, que alcanzaba al 59% de los peruanos hace 10 años, haya caído 35 puntos porcentuales en tan poco tiempo, acompañada de una reducción de la desigualdad.

Según Juan Mendoza, profesor de la Universidad del Pacífico, casi 85% de la reducción de la pobreza desde el 2004 se debe exclusivamente al crecimiento económico. Según este investigador, si no hubiera habido crecimiento económico al día de hoy tendríamos al menos 52% de pobres. Mendoza remarca: “Los datos sugieren que la manera más eficaz de combatir la pobreza no es diseñar programas de transferencias sino fomentar la inversión privada y el funcionamiento de los mercados, que han sido los motores del crecimiento desde 1990.”

Por su parte, el investigador de Grade Javier Escobal destaca que La evidencia muestra que la mayor contribución al incremento de los ingresos rurales de los pobres proviene de los ingresos laborales. Las transferencias y donaciones públicas han tenido un rol importante en la explicación de la reducción de la pobreza extrema, pero no son el factor más importante para explicar la reducción de la pobreza en el segmento de pobres no-extremos.” Este especialista enfatiza además -contra lo que muchos piensan- que la tasa de pobreza rural viene disminuyendo mucho más rápido que la urbana. En palabras de Escobal:como nunca antes, vemos que brechas históricas vienen acortándose.”

La ex Ministra de Desarrollo e Inclusión Social, Mónica Rubio  señala que para el Perú el rol del crecimiento económico escentral, estimándose que este es responsable por el 75% al 85% de la reducción de la pobreza.” Aún más, agrega: “para el mundo, se estima que el crecimiento explica entre el 70% y 95% de la reducción de la pobreza”. 

Por último, según cálculos del Instituto de Economía y Desarrollo Empresarial –IEDEP, de la Cámara de Comercio de Lima, el 94% de la caída de la pobreza publicada por el INEI se atribuye al crecimiento económico, mientras que el otro 6% se debe a las transferencias de los programas sociales.

Queda entonces claro que la clave para derrotar a la pobreza es crear riqueza. El crecimiento económico ha sido la mejor política de inclusión social. Esta es la razón por la cual Apurímac dejó de ser la región más pobre: ahí se está ejecutando Las Bambas (que involucra una inversión superior a los US$ 5 mil millones) y la inversión pública se ha incrementado considerablemente con recursos originados en el mismo sector privado. Lo contrario lo tenemos en Cajamarca, la región que menos ha crecido entre el 2008 y 2013 según el IPE, hoy, la más pobre del Perú con el 52,2% de la población en situación de pobreza, “destronando” justamente a Apurímac. En Cajamarca la inversión pública está estancada porque el sector privado ya no genera riqueza, la productividad del agro es de las más bajas del país, seis veces menos que en Arequipa, y su presidente regional con su socio (y a veces enemigo, el ex cura Arana) han impulsado una agenda política anti-minera que ha paralizado un proyecto de US$ 4,800 millones en Conga, que hubiera generado miles de empleos y encadenamientos productivos en la región. Peor aún, de paso, se paralizaron prácticamente todos los demás proyectos. Una región mágica, que podría ser la más rica del Perú, se encamina a vivir en la miseria.

Algunos dicen que en cuanto al crecimiento y reducción de la pobreza, tuvimos suerte, que fue por los precios de los commodities, pero no nos olvidemos, que solo hace unas semanas, tanto Nouriel Roubini como Paul Krugman, nos dijeron que no fue solo por suerte. La misma la tuvieron todos en la región y sus resultados están muy lejos de los nuestros. Nuestra prosperidad fue también por las buenas políticas públicas que supimos mantener consistentemente.

Hemos experimentado un proceso muy positivo que debemos fortalecer, precisamente, por lo que aún falta lograr. Todavía existen 7.3 millones de personas en situación precaria y 1.4 millones de pobres extremos. Motivo por el cual, nuestra agenda pendiente debe seguir privilegiando el crecimiento económico, apostando por la mejorar la educación, cerrar las brechas de infraestructuras y lograr un avance importante en la calidad de nuestras instituciones. Lampadia




Predicciones de Malthus y Marx fallaron espectacularmente

Predicciones de Malthus y Marx fallaron espectacularmente

Comentario de Lampadia

En el siguiente artículo publicado en Portafolio, de El Comercio, el reconocido economista norteamericano Kenneth Rogoff explica los retos y desafíos que enfrenta el actual proceso de crecimiento moderno. El ex economista jefe del FMI destaca que todas las predicciones hechas sobre el colapso demográfico, alimentario y económico de la humanidad han fallado. “Hasta ahora, todas las predicciones hechas en la edad moderna de que la suerte de la humanidad empeoraría, desde Thomas Malthus hasta Karl Marx, han fallado espectacularmente”. No obstante, aclara que la trayectoria de crecimiento que se ha observado en el pasado enfrenta amenazas, principalmente por deficiencias y disfunciones políticas, que van a requerir del diseño de políticas públicas adecuadas. Por ejemplo, Rogoff señala que la degradación ambiental, la sostenibilidad política y legitimación social del sistema económico, el envejecimiento de la población y la reforma de los sistemas de pensiones, son asuntos que los estados van a tener que resolver en un futuro cercano, especialmente los países avanzados. Rogoff concluye que los países emergentes que aún no han llegado a la frontera tecnológica continuarán disfrutando de una mejor calidad de vida, mientras que en el caso de las economías avanzadas seguirán enfrentando dificultades.

La globalización económica no ha sido acompañada, hasta ahora por instituciones globales que representen una versión moderna de las que se diseñaron después de la II Guerra Mundial. Cada día se hace más evidente que el mundo necesita instituciones modernas que acompañen la evolución de la economía global y promuevan una mejor gobernanza global.

 

 

 

Artículo original:

 

 

 

Malthus, Marx y el crecimiento moderno

 

Todas las predicciones de que la suerte de la humanidad
empeoraría han fallado espectacularmente.

 

 

Por: Kenneth Rogoff, Project Syndicate

 

(Portafolio, El Comercio, 23 de marzo de 2014)

 

La promesa de que toda nueva generación gozará de mayor prosperidad que la anterior es un postulado de la sociedad moderna. En general, la mayoría de las economías más avanzadas han cumplido dicha promesa y el nivel de vida de las últimas generaciones ha aumentado, pese a los reveses provocados por guerras y crisis financieras.

 

También en el mundo en desarrollo la inmensa mayoría de las personas han empezado a experimentar una mejoría sostenida del nivel de vida y están concibiendo rápidamente esperanzas similares de crecimiento, pero ¿podrán hacerlas realidad las generaciones futuras, en particular las de las economías avanzadas? Aunque la respuesta más probable es que sí, los riesgos de deterioro parecen mayores que hace varios decenios.

Hasta ahora, todas las predicciones hechas en la edad moderna de que la suerte de la humanidad empeoraría, desde Thomas Malthus hasta Karl Marx, han fallado espectacularmente. El progreso tecnológico ha superado los obstáculos al crecimiento económico. El reequilibrio político periódico, unas veces pacífico y otras no, ha garantizado que la inmensa mayoría de las personas se haya beneficiado, si bien unas mucho más que otras.

A consecuencia de ello, las preocupaciones de Malthus por una mortandad en masa por inanición no se han materializado en ninguna economía capitalista pacífica y pese a la desconcertante disminución en los últimos decenios de la proporción correspondiente a la mano de obra en la renta el panorama a largo plazo sigue desafiando la predicción de Marx de que el capitalismo resultaría depauperador para los trabajadores.

Pero los resultados del crecimiento en el pasado no son una garantía de que se pueda mantener una trayectoria en gran medida similar en todo este siglo. Dejando de lado los posibles trastornos geopolíticos, hay amenazas formidables que superar, debidas en su mayor parte a deficiencias y disfunciones políticas.

El primer conjunto de cuestiones comprende los problemas —que se van fraguando poco a poco— debidos a externalidades, el principal ejemplo de las cuales es la degradación del medio ambiente. Cuando los derechos de propiedad no están bien definidos, como en el caso del aire y el agua, el Estado debe intervenir para ofrecer una reglamentación apropiada.

Un segundo conjunto de problemas se refiere a la necesidad de velar porque se considere que el sistema económico es fundamentalmente justo, pues es algo decisivo para su sostenibilidad política. Ya no se puede dar por sentado que así sea, pues la combinación de la tecnología y la mundialización ha exacerbado la desigualdad de los ingresos y la riqueza dentro de los países, aun cuando los desfases entre los países disminuyeran.

Hasta ahora, nuestras sociedades han resultado notablemente aptas para adaptarse a tecnologías que ocasionan trastornos, pero el ritmo de cambio en los últimos decenios ha causado tensiones tremendas, reflejadas en disparidades enormes dentro de los países, con desfases casi sin precedentes entre los más adinerados y los demás. La desigualdad puede corromper y paralizar el sistema político de un país y con él el crecimiento económico.

El tercer problema es el del envejecimiento de las poblaciones, asunto que plantearía amenazas graves incluso al sistema político mejor concebido. ¿Cómo se asignarán los recursos para el cuidado de los ancianos, en particular en las economías con un crecimiento lento, en las que los sistemas públicos de pensiones y los planes de salud para la vejez son claramente insostenibles? No cabe duda de que unas deudas públicas desorbitadas exacerban el problema, porque se está pidiendo a las generaciones futuras que salden nuestra deuda y paguen nuestras jubilaciones.

La última amenaza se refiere a una amplia diversidad de cuestiones que requieren la reglamentación de unas tecnologías en rápida evolución por unos Estados que no necesariamente cuentan con la competencia o los recursos para hacerlo eficazmente. Ya hemos visto adónde puede conducir una reglamentación deficiente de unos mercados financieros que evolucionan rápidamente. En muchos otros mercados hay deficiencias paralelas.

Un ejemplo destacado es la oferta de alimentos, sector en el que la tecnología ha seguido produciendo cada vez más alimentos elaborados y genéticamente perfeccionados que los científicos tan solo están empezando a evaluar. Lo que se sabe hasta ahora es que la obesidad infantil ha llegado a ser una epidemia en muchos países, con un aumento alarmante de las tasas de diabetes tipo 2 y de las enfermedades coronarias Las intervenciones estatales, consistentes en impartir una mejor formación al respecto, han resultado hasta ineficaces en gran medida. La adicción autodestructiva a los alimentos elaborados, que los economistas considerarían una “internalidad”, pueden reducir la calidad de vida de los afectados por ella y puede acabar creando externalidades para la sociedad.

Todos esos problemas tienen soluciones. Un impuesto mundial al carbono mitigaría los riesgos climáticos, además de aliviar las cargas de las deudas estatales. Para abordar la desigualdad, hace falta una mayor redistribución mediante los sistemas impositivos nacionales, junto con programas mejorados de educación de los adultos, probablemente recurriendo en gran medida a nuevas tecnologías. Se pueden mitigar los efectos negativos de la reducción del crecimiento demográfico relajando las restricciones de las migraciones internacionales y fomentando la entrada de más mujeres en la fuerza laboral o la permanencia de jubilados en ella, pero la de cuánto tardarán los Gobiernos en actuar es una pregunta aún sin respuesta.

Las economías capitalistas han sido espectacularmente eficientes para lograr el aumento del consumo de bienes privados, al menos a largo plazo. En cuanto a los bienes públicos —como, por ejemplo, la educación, el medio ambiente, la atención de salud y la igualdad de oportunidades—, la ejecutoria no es tan impresionante y, a medida que las economías capitalistas se desarrollaban, parecen haber aumentado los obstáculos políticos.

¿Seguirá toda generación futura disfrutando de una mejor calidad de vida que su predecesora inmediata? En los países en desarrollo que aún no han llegado a la frontera tecnológica, la respuesta es casi con toda seguridad que sí. En las economías avanzadas, aunque la respuesta debería ser también que sí, las dificultades están llegando a ser formidables.

 

Publicad en El Comercio, 23 de marzo de 2014.

 




Una década de desarrollo a pesar de sus políticos

Una década de desarrollo a pesar de sus políticos

Arequipa en una década ha duplicado su PBI, a pesar de que sus políticos no han hecho lo necesario para impulsar su desarrollo e incluso le han puesto más de una zancadilla. Aún así, su Índice Compuesto de Actividad Económica (IICAE) que elabora el IPE se expandió a tasas cercanas al 20% en los últimos doce años. Hoy mantiene elevadas tasas de crecimiento que duplican el promedio nacional. 

El día de ayer, 5 de febrero, el Presidente Ollanta Humala dio inicio a la ejecución de Majes Siguas II. El proyecto permitirá ampliar la frontera agrícola en 38,500 hectáreas y generará energía eléctrica para el desarrollo industrial del sur. Este proyecto, largamente esperando y que tantos conflictos ha generado, permitirá que la región Arequipa mantenga la velocidad de crecimiento que viene demostrando en los últimos años.

De acuerdo a un informe del IPE, recientemente difundido, “Arequipa está experimentando un elevado crecimiento económico, bastante mayor al promedio del país. Según el Índice Compuesto de Actividad Económica (ICAE) del IPE, Arequipa se expandió 13% en el tercer trimestre del 2013, comparado con el mismo trimestre del año anterior (ver cuadro). Este crecimiento señala una aceleración con respecto al ya elevado crecimiento de 12.4% acumulado en los primeros nueve meses del 2013. Estimamos que Arequipa ha sido una de las regiones con mayor crecimiento en el 2013, con un ritmo cercano al doble del estimado para el Perú”.

Lo cierto es que en una década del 2002 al 2012, Arequipa duplicó su PBI. De 9,300 millones de soles (a precios constantes de 1994) a 18,700 millones respectivamente. Algo realmente sorprendente, para una economía que se hallaba recesada a fines de los noventa y comienzos del presente siglo.

Este vertiginoso crecimiento también es destacado por el IPE, “si observamos el crecimiento promedio del ICAE de Arequipa durante los últimos doce años, se puede detectar que Arequipa ha presentado épocas de auge con tasas cercanas al 20%”.

De acuerdo a las proyecciones del mencionado instituto, Arequipa seguirá creciendo a ese mismo ritmo el 2014 y probablemente más ahora que Majes Sihuas se echó a andar y si es que se consigue, como es esperable, que también Tía María se ponga en marcha.

Lo interesante del crecimiento de esta región está en que si bien la minería ha sido la locomotora de este proceso, otros rubros se han sumado: El sectror construcción es el segundo más dinámico del país, su industria es la más diversificada y su agricultura de exportación una de las más rentables.

El crecimiento se ha expresado también en altas tasas de empleabilidad y mejoras sustanciales en los índices de desarrollo humano. Es decir, el progreso ha venido aparejado de mejoras en la calidad de vida de los ciudadanos de esta región.

Como será de robusto el desarrollo económico de Arequipan, que incluso ha resistido algunas zancadillas que sus políticos (como el actual presidente regional Juan Manuel Guillén), le pusieron. En el 2002, un reaccionario movimiento se opuso a la privatización de las empresas eléctricas Egasa y Egesur y luego al proyecto Tía María en el 2011. La política parroquiana de los líderes arequipeños, llevo a la ciudad a entrar tarde en la agroexportación y la construcción de centros comerciales, que ya se había desarrollado en Trujillo, Huancayo y Cajamarca.

Luego se pudo establecer una relación ganar-ganar con la minería (Cerro Verde) y todo esto ha creado unimpulso de crecimiento que se mantiene muy alto, por encima del promedio nacional y por supuesto de una región como Cajamarca que no han entendido que el potencial de su despegue se halla en generar condiciones adecuadas para que los proyectos de inversión se desarrollen, y ha desperdiciado los mejores años de la propensión a invertir de la industria minera moderna y formal.

Arequipa, gracias a la visión de sus empresarios y al esfuerzo de sus ciudadanos viene alcanzando el potencial que tiene, pero aún hay mucho por hacer para mejorar su competitividad. Lampadia