Por: Federico Cúneo, Socio de Amrop Perú
Gestión, 17 de enero de 2018
El avance tecnológico de la última década ha roto con los conceptos clásicos de espacio y tiempo. La disrupción digital nos obliga a revisar constantemente nuestras estrategias en tanto las herramientas disponibles y, por consiguiente, las condiciones de mercado, varían sin dar tregua.
La velocidad del progreso tecnológico se acentúa permanentemente. Fuencisla Clemares, directora de Google España, da un ejemplo simple en ese sentido: Google Translate ha mejorado en los últimos ocho meses tanto como en los últimos ocho años. Herramientas como machine learning (que se ocupa del análisis de los miles de datos y hábitos que dejan los usuarios en las diversas plataformas online en las que participan) permiten este potente progreso.
Lo mencionado revela el contexto que hace necesario que los colaboradores de una compañía estén al día en cuanto a los avances digitales. Debemos ser conscientes de que, por ejemplo, machine learning se está convirtiendo en una herramienta mucho más eficiente para conocer en profundidad a los consumidores que las tradicionales encuestas o focus groups. No saberlo equivale a darle ventaja a la competencia.
Es un hecho que los modelos de negocios cambian: los canales para vender un producto o un servicio están virando hacia lo digital. De pronto, Walmart compite con Amazon, Fox con Netflix, Harvard con Coursera, Western Union con PayPal y Marriott con Airbnb. Mientras las empresas del primer grupo parecen mantenerse incólumes en el tiempo, las segundas cambian constantemente.
‘Surfear’ esta vorágine tecnológica exige mente abierta y en permanente estado de alerta. Esto último va de la mano con el concepto de agilidad para tomar decisiones, dado que la velocidad de cambio es constante. De hecho, cada vez más empresas ‘tradicionales’ están organizando sus equipos de trabajo con esquemas de planeamiento de cada 90 días, al mismo estilo de la metodología scrum. Nadie se queda fuera de juego; todo debe ser revisado persistentemente.
Cabe anotar, que detrás de nosotros hay decenas de innovadores tecnológicos planteando nuevas formas de ofrecer lo mismo, pero mejor y más ágil. No vale quedarse dormido.