Que nadie diga después
OSCAR FERNANDEZ OROZCO, periodista
Para Lampadia
Vivimos los peruanos entre la mentira y la ineficiencia, que cubren hipócritamente toda una estrategia de empujar al país hacia el populismo y estatismo.
Veamos algunos hechos y manipulaciones, que se conocen bien y ante los cuales muchos peruanos se hacen los tontos:
- La inversión minera está paralizada. Esta riqueza de todos los peruanos no puede ir en auxilio de nuestra economía porque un grupo de agitadores impide su explotación y exportación. Millones de dólares, que se necesitan para cubrir los millones perdidos por Vizcarra, son impedidos de ingresar al país.
- Vizcarra es vacado por inmoral y ladrón por una contundente votación del Congreso (105 votos) y las empresas privadas, dueñas de los Medios, lanzan una feroz campaña de supuesto “golpe” contra el gobernante inmoral.
- Se convoca, desde estos Medios, a la protesta y violencia de los jóvenes en favor de un gobernante corrupto.
- Se busca la asonada social y se logra, con dos muertos, la caída del gobierno constitucional de Merino.
- La fiscalía acusa al presidente Merino, Primer ministro y al ministro del interior por la muerte de los dos jóvenes. Solo han gobernado 5 días y ya violaron los derechos humanos. Personajes impecables, son mencionados como asesinos.
- Se inventa con los dos muertos una “generación del bicentenario” y se ordena una investigación de los hechos violentos. Investigación que no avanza, pero cumple el objetivo de enlodar.
- Esta maniobra nos lleva a la destitución de 18 generales de la Policía para poner a uno amigo del gobierno. El presidente Sagasti, elegido (97 votos) por la constitución, igual que Merino, cuando asume el cargo promete cumplir 3 puntos en su gobierno transitorio, pero pronto sale con la modificación de las Fuerzas Policiales y la Fuerzas Armadas (¿¡¡¡?).
- Por debajo, se monta toda una campaña de desprestigio de la Policía y se envía a sus efectivos, casi maniatados, a defender la libertad de tránsito en las carreteras.
- Nuevo muerto en el norte, pero este ya no interesa porque ya se tumbaron a Merino.
- Un paro de agricultores de empresas de services toman las carreteras, incendian vehículos, atacan propiedad y la emprenden a pedradas con la Policía ante la indiferencia del Gobierno.
- Brillante oportunidad para que el Congreso anule la Ley Agraria confirmada a principios del año y los analistas como Zegarra, el teniente alcalde de la inmoral Villarán, alcaldesa de Lima, dice que todo está bien y que recomienda se otorgue lo que piden los trabajadores golondrinos, porque significa solo el 20% de las utilidades de los empresarios.
- El juego en pared con el Congreso populista es claro. Esta vez para tirarse al suelo una actividad que da cerca de un millón de puestos de trabajo y que ha llegado a vender el año 19, más de 7 mil millones de dólares y generado una serie de negocios en torno a su actividad.
- Poco importa que sea un negocio de exportación, que depende y se la juega en el mercado internacional, a través de los precios y cantidades que decidan en el extranjero y en plena crisis derivada del covid.
- Los industriales agrícolas reinvierten el 80% de sus utilidades, pero la idea de los rojos es que inviertan menos para traerse abajo esta actividad y aumente la pobreza que ellos sabrán usar para sus objetivos políticos.
- Mientras, la Premier defiende al sinvergüenza y mentiroso Vizcarra, que no gestionó ninguna vacuna, el presidente volando y avanza la maquinaria totalitaria ante la mirada de esas desconcertadas gentes que somos los peruanos.