Oscar Fernández Orozco – Orfo
Periodista
Para Lampadia
Si bien es cierto que 100 enanos juntos no hacen un gigante, también lo es que ningún grande debe mediatizar o impedir el desarrollo de los enanos, porque ellos reúnen la mayor fuerza de trabajo del país y sus hijos profesionales son una esperanza.
El Estado en los hechos es una especie de socio de cada empresa privada a través de los impuestos que nutren sus arcas. Gracias al esfuerzo empresarial, el Estado ha logrado un poderoso respaldo de miles de millones de dólares y una deuda externa bastante baja. Todo un meritorio esfuerzo privado de 20 años que el gobierno está en la obligación de defender.
Hoy tenemos una minería paralizada y la incertidumbre política que ha generado que Fitch Rating, la clasificadora de riesgo, haya rebajado nuestra calificación internacional a BBB+. Además, el mal gasto de los recursos del Estado, el mayor endeudamiento externo. Subiremos nuestra deuda por encima del 30% y aumentaremos la desocupación en más de 2 millones de personas, la quiebra de cientos de empresas y esa sensación popular promovida por la izquierda del supuesto fracaso del modelo y la reforma de la constitución del 93.
Da la impresión que a muchos empresarios les interesa poco la ideología liberal y, también poco, influir en la conducción política del país cuando se trata de buscar la unidad de las fuerzas democráticas para defender el modelo económico. Incluso existen algunos empresarios que fueron seducidos por la corrupción organizada por los comunistas brasileños a través de empresas como Odebrecht.
También, se ha valorado muy poco el accionar asesino de Sendero Luminoso y permitido que laven las banderas de sus crímenes y esté preso Fujimori pese al indulto presidencial y constitucional que ordenó su libertad.
Hay que unir acciones ante la demagogia populista y socialista que quiere poner fin al desarrollo, a la disminución de la pobreza, al incremento del trabajo y crecimiento del país logrado con tanto esfuerzo.
¿Qué hacer para para que los peruanos seamos menos “desconcertados” y tengamos una idea más clara y consecuente con lo avanzado? Debemos meditar en los horribles tiempos populistas de las colas, la inflación, la devaluación que hemos dejado atrás. Que nunca más elijamos a un demagogo que dijo “agua si, oro no. Qué evitemos otro presidente megalómano que solo le interesa seguir siendo presidente a cualquier costo y que violó el ordenamiento constitucional.
Un presidente que nadie eligió, que nadie sabía cuál era su plan para gobernar y que mordió la mano de quien lo puso en la plancha presidencial.
Meditar, pensar en el país de los hijos.
La libertad necesita ser consolidada, el Gobierno debe participar al lado de su principal contribuyente e inversionista que es la empresa privada y saber direccionar los gastos públicos y sin corrupción. Nunca dejar de recordar y tener presente que nos fuimos al diablo con el populismo y la administración estatal entre 1968 a 1990. Tener en cuenta la desgracia que vive Venezuela gracias al Socialismo del siglo XXI y el comando rojo que dirige Maduro.
Los gremios y empresas privadas del Perú se están defendiendo del Estado pese a que el sector privado es el motor del trabajo y la economía.