Pablo Bustamante Pardo
Expresidente de IPAE
Director de Lampadia
¿Cómo es posible que un expresidente de la Sociedad Nacional de Industrias (SNI) afirme, no en un café, en El Comercio, que el Perú, la minería peruana exporta piedras?
Jesús Salazar Nishi no es el primero que afirma tal barbaridad, por ejemplo, lo hacía cotidianamente, Efraín Gonzales de Olarte, el vicerector académico de la PUCP, la Prepotente Universidad Caviar Progresista.
La misma letanía de la antigua SNI, pre Pedro Olaechea, quién como su presidente reconoció el muy positivo encadenamiento productivo de la minería con la industria peruana.
Jesús Salazar Nishi, El Comercio, 11 de agosto de 2025 Glosado por Lampadia
“Es momento de mirar con crudeza una realidad que no queremos seguir escondiendo bajo la alfombra. Importamos industria, exportamos subdesarrollo.
Hoy, de los 16 grandes sectores industriales, solo tres (alimentos, metales comunes e impresiones gráficas) tienen una balanza comercial positiva. ¿Qué significa esto? Que no estamos produciendo lo que consumimos y que dependemos cada vez más de bienes industriales importados.
Eso nos resta soberanía económica y profundiza las brechas de productividad.
¿Dónde está la transformación productiva? ¿Dónde están los bienes industriales con valor agregado?
Desde el Instituto de Desarrollo Industrial Sostenible creemos que esta situación es insostenible.
El Perú necesita una industrialización con orientación exportadora, basada en innovación, valor agregado y articulación productiva.
Tenemos que dejar de ser un país que exporta piedras
y empezar a ser un país que produce ciencia, tecnología y manufactura avanzada.
Proponemos que el Gobierno impulse un sistema nacional de zonas económicas especiales modernas y conectadas al comercio internacional; programas robustos de innovación tecnológica e ingeniería industrial; y financiamiento competitivo para la transformación productiva de las pymes.
Y, por último, una alerta: el megapuerto de Chancay puede ser un catalizador de desarrollo o una puerta de entrada a la invasión industrial asiática. Si no conectamos esa infraestructura con un tejido productivo que exporte manufactura, solo habremos construido un gran ‘shopping’ industrial chino”.
Yo me he cansado de mostrar y repetir que el valor agregado de la minería es de dos veces el del sector industrial. Según el IPE este llega a 69%.
Ver en Lampadia: No más mitos, relatos y mentiras, por favor – El sorprendente valor agregado de la minería (14 de julio 2017).
Otra forma menos académica de ver el valor de la minería es con los siguientes datos:
- Si exportas un polo de algodón fino, que en Miami se vende en US$ 80, en el Perú queda por todo concepto el 10%.
- Si exportas paltas a Londres, en el supermercado se venden a US$ 2.5 c/u, en el Perú queda el 60%.
- Si exportas concentrados de cobre a China, en el Perú queda el 86%.
Ver el estudio del IPE, titulado El Valor Agregado de la Minería en el Perú.
Ver la relación entre el valor del concentrado y el producto fundido y refinado.
Otro análisis, el efecto multiplicador de la minería en el PBI.
Y por si acaso salgan con la monserga del menor empleo:
Todos los sectores productivos son muy importantes. En el sector privado el que invierte en industria es diferente al inversionista minero o al que funde y refina metales. No se trata del Estado inversionista limitado que invierte en uno u otro sector.
Tampoco se puede promover un sector en contra de otro. No se trata de un modelo ganar-perder, sino de uno ganar-ganar.
Con un Estado que no tiene una visión de desarrollo productivo y que promueva la inversión, los miembros del sector privado tienen que hacer un mejor esfuerzo para promover el espacio de crecimiento de nuestra economía. Lampadia