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Para ingenuos, los empresarios

Para ingenuos, los empresarios

Fausto Salinas Lovón
Para Lampadia

La candidez política o la tibieza de ciertas élites empresariales las ha colocado en una situación sumamente embarazosa este fin de semana.

Saludaron con una ingenuidad impropia para este tiempo, el mensaje de Pedro Castillo (en la CADE) que “aseguró a los empresarios que tienen todas las garantías para invertir en el país”, y  proclamaron que “las empresas privadas no pueden trabajar solas para construir un Perú mejor, sino articular con el Estado y organizaciones sociales”, el mismo día en que la primera Ministra, desde el Estado, le propinaba el punta pie más certero a la minería peruana anunciando el cierre de 4 minas en Ayacucho, las cuales habían sido previamente incendiadas por organizaciones sociales con la tolerancia del Estado.

Sólo un total desconocimiento de los usos de la política, podría explicar tamaña candidez.

Castillo, Cerrón, Mendoza, Arana y Vásquez, la coalición que ocupa y desangra el Poder Ejecutivo, no han venido a gobernar, han venido a tomar el poder, cosas que son muy distintas.  Los actos de gobierno son la coartada mientras se consolidan en el poder. Ya llegaron al poder. Están buscando mantenerse en él. Ejercerlo no es su prioridad por el momento. Ejercerlo bien, mucho menos.

Hablarles entonces a Castillo, Vásquez o Francke de mesas ejecutivas multisectoriales, de la importancia del turismo, de la equidad de género en el ámbito gerencial, de alianzas público privadas, de sostenibilidad o de diálogo con el Estado sub nacional, es hacerles el juego, es participar de los fuegos artificiales que ellos han montado para que no se vea como toman el poder, para no soltarlo nunca. Es ponerse en el mismo papel de LR, de Exitosa o de RPP, la prensa funcional.

Si, desde las élites empresariales no se tiene claro esto, si no se entiende que las principales armas de la política son el engaño y el doble discurso,

  • si no se recuerda que las dictaduras socialistas comienzan con los hidrocarburos (Brea y Pariñas / Camisea)
  • y el agro (Primera/ Segunda Reforma Agraria),
  • para luego pasar a las minas (Cerro de Pasco Corporation / Apumayo – Inmaculada, etc.),
  • la pesca (Banchero Rossi – Diario Correo),
  • las finanzas (Banco Popular)
  • y hasta la prensa que apoyó el golpe de 1968 (El Comercio)

Queda claro que quienes lideran a los empresarios peruanos no están sentados en la mesa para compartir el almuerzo con el gobierno y llevarse bien como ellos creen, sino que están en el menú.

No advertir que Castillo y su coalición le han declarado la guerra al país, es no tener idea de qué batalla se está librando en este momento en el Perú. Elites así, no solo empresariales, sino intelectuales, periodísticas, culturales, son tremendamente funcionales a la destrucción institucional. Ya las tuvimos, en los 70s. Parece que las tenemos también ahora.

El Perú necesita liderazgos empresariales claros, de principio, enérgicos como el que tuvo Raymundo Duarte contra Juan Velasco en los 70s, desde la Sociedad Nacional de Industrias. Las élites empresariales deben ser las primeras en advertir y combatir los riesgos del experimento político económico que Castillo y sus aliados quieren hacer en el país. No pueden ser parte de la corte de turno, ni sus habilitantes. Lampadia




¿100 días no te parece suficiente?

¿100 días no te parece suficiente?

Fausto Salinas Lovón
Para Lampadia

Después de 100 días el Perú puede ver el daño que las ideas de izquierda nos están causando: inflación, devaluación, falta de inversión, desempleo, más corrupción, impunidad para los amigos, incapacidad clamorosa, desconfianza y desgobierno. Sin embargo, todavía quedan algunos para quienes, por ignorancia, necedad o interés, todo lo vivido no les parece suficiente.

Para todos ellos, conviene hacer una proyección, lo más fría posible, de lo que puede suceder en otros 100 días de desgobierno socialista, solamente siguiendo la tendencia actual:

A esto podemos agregar:

  • Contracción dramática de la inversión privada. El propio gobierno en el Marco Macroeconómico Multianual, estima que apenas crecerá en 5% el año 2022, cifra que podría pasar a ser negativa si se consuman las amenazas de nuevos impuestos, regulaciones y estatizaciones de empresas.
  • En minería, más minas sitiadas por el chantaje social impulsado por las propias facciones del gobierno y menos ingresos fiscales.
  • Deuda pública bordeando el 40% del PBI, luego de haber llegado a estar en 19% en la década anterior.
  • Calificación crediticia del Perú deteriorada
  • Riesgo País en crecimiento
  • Corrupción regional y municipal multiplicada para sostener políticamente al gobierno
  • Reparto de bonos, dádivas y programas sociales para asegurar la clientela electoral
  • Intento de cambio constitucional para mantenerse en el poder indefinidamente
  • Captura de las fuerzas armadas, policía nacional, instituciones públicas y organismos reguladores.

Para quienes enfrentamos el reto de mantener a nuestras familias con nuestro trabajo, emprendiendo día a día, poniendo en riesgo nuestros pequeños capitales y sobre todo nuestra fuerza de trabajo y empeño, estos 100 días si han sido más que suficientes.  100 días más de destrucción macroeconómica y de crisis institucional no son soportables. La aventura izquierdista avalada por el odio de algunos sectores de nuestras clases medias debe terminar. Otros 100 días, son demasiado para los peruanos. Lampadia




De la confianza a la vacancia

De la confianza a la vacancia

Fausto Salinas Lovón
Para Lampadia

El Congreso no pisó el palito.  La derecha del Congreso, la misma que con su división, su miopía y su achoramiento ha puesto al país en manos de Castillo, felizmente no logró lo más absurdo que pretendía hacer: gastar pólvora en Mirtha Vásquez.

Felizmente, como sucedió con la confianza a Guido Bellido, la mayoría del Congreso no desperdició una de sus dos balas, pese al esfuerzo de la derecha parlamentaria de dispararse a los pies.

Esta vez, estuvimos más cerca de caer en el juego de Castillo, Cerrón y sus aliados. Para lograrlo movieron varias fichas:

  • Pusieron de ministro del Interior al que acusó a Fujimori y lo mandó a prisión (nada
    más urticante para Fuerza Popular),
  • Agitaron las protestas antimineras y las dejaron avanzar para dar la señal de desgobierno.
  • Decapitaron las Fuerzas Armadas removiendo a dos comandantes generales para poner a allegados
  • Mandaron a 16 de ellos, Bellido y Bermejo incluidos, a votar en contra de su propio gabinete.

Con todo eso, ¿la derecha parlamentaria no podía darse cuenta de que le estaban poniendo un palito para que lo pise? ¿tan cándida, miope o cortoplacista puede ser la derecha que nos representa en el Congreso? ignoran que defenestrada Mirtha Vásquez, Castillo podría poner a Bermejo, Najar, Valdemar Cerrón u otro peor de Premier, ¿obligándolos a usar la segunda bala constitucional?

Castillo, Cerrón y sus aliados Arana, Mendoza y la izquierda caviar que se va metiendo poco a poco en el gobierno, están haciendo política y lo están haciendo bien. No quieren gobernar, quieren tomar el poder y perpetuarse en él con un cambio constitucional. La derecha en cambio, está haciendo hígado, arengando para convencer a conversos, cuidando votos y discursando para conseguir likes de los mismos que ya votaron por ellos. Así no se logrará lo que realmente importa.

El camino no pasa por quedarse sin armas para enfrentarlos. Para lograrlo hay que hacer política y eso implica retroceder si es necesario, calcular, tragar sapos también. Hay que crear las condiciones. Antes hay que mostrarle al pueblo que se equivocó.

  • El pueblo tiene que saber que la izquierda es pan más caro (no hablarle de inflación).
  • Que gracias a Pedro Castillo y sus amigos el repuesto para tu Torito (motokar) o la llanta de tu taxi cuestan más porque hizo subir el dólar.
  • Que los gobernadores presos por ladrones y corruptos no son norteamericanos sino aliados de Castillo.
  • Que el prosor en el primer mes cobró 8 veces lo que ofreció cobrar de sueldo.
  • Que los dinámicos del Centro han huido por la puerta que les abrió el gobierno y con la ayuda de Evo a quien visitó hace días.

El Congreso tiene que hacer política, no hígado (ahora que está de moda este órgano humano). Tiene que mostrarle al país que Castillo y sus aliados nos dejan con chosicanos y combis asesinas por 10 años más, sin multas, sin sanciones y con permisos renovados.

  • Mostrarle al país que a Pedro Francke le gusta andar en un Lexus de 150,000 dólares, pero no le gusta que tu lo hagas. Que quiere que tu pagues más si ganas algunos soles o alquilas un cuarto en tu casa.
  • Mostrarles a los peruanos que nos dejarán sin ingresos mineros, sin canon, sin recursos
  • Mostrarle que las regiones no tienen caja para pagar sus obligaciones.

Solo cuando esto se haya mostrado, aun al precio que implica para la economía y el bienestar de muchos peruanos, se podrá pasar de la CONFIANZA A LA VACANCIA y se volverá el péndulo en el lugar que corresponda.

Lo que si queda claro es que no lo lograremos con Porky, con Fujimori, ni con la veleidad de Hernando de Soto. Con una derecha de este tipo, Castillo quedará en el poder. Lampadia




Se viene el PAQUETAZO TRIBUTARIO

Se viene el PAQUETAZO TRIBUTARIO

Fausto Salinas Lovón
Para Lampadia

La promulgación de la ley 31355 por el Congreso, que reglamenta la cuestión de confianza, ha dado lugar a que algunos cuestionen esta ley, afirmando que el Congreso no puede interpretar ni reglamentar la Constitución, que se trata de una reforma constitucional, pidiendo que el TC la declare inconstitucional y alegando que la facultad del Poder Ejecutivo de hacer cuestión de confianza ante el Congreso y por ende, de cerrarlo, se puede dar sobre cualquier materia.

Aquí algunas respuestas:

Desde el punto de vista constitucional, que no es un punto de vista jurídico cualquiera, se puede decir lo siguiente:

  • La Constitución es un conjunto de normas usualmente genéricas, abiertas, que enuncia, pero no desarrolla conceptos jurídicos determinables. Si hay un tipo de normas que requieren ser interpretadas son precisamente las normas que están en la Constitución.
  • Las disposiciones de la Constitución también son reglamentadas y esa es tarea del Congreso. Hay reglamentaciones expresas cuando la Constitución así lo indica (reserva de ley) y hay otras que se dan por la necesidad de la cuestión a desarrollar. Ejemplos: La Ley 25593 y su modificatoria la Ley 27912 han regulado el artículo 28 de la Constitución sobre la sindicalización, negociación colectiva o huelga. ¿Alguien podría sostener que se violó la Constitución al interpretar, reglamentar y regular la huelga en el país mediante leyes?
  • La ley 31355 no reforma la Constitución. No modifica lo que esa norma dice. Reglamenta, regula lo que ella no precisa. Eso no es Reforma. Sólo una lectura poco atenta de la naturaleza del texto constitucional podría llevar a pensar que toda reglamentación es una reforma.
  • El Tribunal Constitucional tiene un criterio errado sobre esta materia, al haber considerado a propósito de la modificación del Reglamento del Congreso y la disolución inconstitucional del Congreso anterior, que la facultad de hacer cuestión de confianza no tiene límites. Está a tiempo de cambiar ese errado criterio y establecer un precedente adecuado, que todavía no existe.
  • La regla básica de toda Constitución es la separación de poderes y por ende de las funciones que tocan a cada poder del Estado. La armonía del texto constitucional en su conjunto, el respeto a la formula política de la Constitución y el principio de corrección funcional, todas ellas reglas imprescindibles para cualquier interpretación de la Constitución, nos dicen que ningún poder del Estado puede atribuirse la función de otro y por ende, no puede hacer cuestión de confianza sobre lo que no le compete. Afirmar lo contrario sería como decir que, a través de la cuestión de confianza, el Poder Ejecutivo puede hacer todo lo que la Constitución les ha encargado a otros poderes. Una verdadera estupidez constitucional.

Desde el punto de vista político, esta ley permite evitar que en la interacción política entre gobierno y Congreso se den escenarios tan absurdos como estos:

  • Sin esta ley, el Poder Ejecutivo podría hacer cuestión de confianza para que el Congreso de una ley de Amnistía a terroristas, antauros o dinámicos, cuando la facultad de dar amnistía sólo es del Congreso (artículo 102 inciso 6 de la Constitución).
  • Sin la ley 31355, el hombre del sombrero podría hacer cuestión de confianza para que el Congreso apruebe un presupuesto para comprar votos, conciencias y autoridades locales, pese a que la facultad de aprobar el presupuesto es exclusiva del Congreso (artículo 102 inciso 4 de la Constitución).
  • Si desaparecen la ley 31355, el señor Castillo podrá hacer cuestión de confianza para que el Congreso no ejerza la facultad de investigación que le otorga el artículo 97° de la Constitución o para que no se pida informe sobre los asuntos del estado, como lo permite el artículo 96 de la Constitución.
  • Sin la ley 31355, el inquilino de Palacio podría hacer cuestión de confianza cuando el Congreso lo investigue a el o a sus partidarios de la comisión de algún delito, impidiendo que se ejerza la atribución parlamentaria prevista en el artículo 99 de la Constitución.
  • Sin la ley 31355, el gobierno podría vetar la elección de los nuevos magistrados del Tribunal Constitucional, exigiendo que ingresen los que son de su confianza.
  • Sin una ley como la 31355, el aliado de Maduro y Evo podría conminar al Congreso a que apruebe el ingreso de tropas de esos países, pese a que la competencia para autorizar el ingreso de tropas extranjeras es solo del Congreso.

  • Sin esta ley, mañana podrían hacer cuestión de confianza para que se les otorguen facultades legislativas y aplastarnos a todos los peruanos con el PAQUETAZO TRIBUTARIO que anuncia sin rubor Pedro Francke y que ya advertimos. Ver en Lampadia: Delegación sería Traición.

La ley entonces, más allá de su validez constitucional, tiene una conveniencia política inocultable, por lo que es necesario que el país cierre filas para lograr que la misma sea respetada por el Tribunal Constitucional. Lampadia




Delegación sería traición

Delegación sería traición

Fausto Salinas Lovón
Para Lampadia

¿Te imaginas si para colocar tu perfil en LinkedIn tendrías que previamente pagar una detracción a la SUNAT?, ¿Si antes de hacer una reserva por Airbnb tendrías que llenar un formulario en el Banco de la Nación?, si antes de suscribirte a NETFLIX o Spotify tendrías que llenar un formulario aprobador por SUNAT, exhibir RUC y pagar una percepción? o, si antes de comprar en Ali Express, Amazon tendrías que pasar por SUNAT a que te sellen el formulario y declares para que, por que y de donde compras?

¿Te imaginas si todo esto también se repitiera cuando hagas un pedido de delivery al mercado de tu barrio?, ¿te imaginas al repartidor convertido en agente de retención, cobrándote el impuesto y haciéndote llenar el formulario cada vez que te trae un pollo a la brasa? ¿Cómo verías al chofer de Uber, haciéndote llenar un formulario antes de bajar del taxi para que detraigas el IGV?

Nada de esto te lo imaginas tu. Crees que por fin hemos llegado a un mundo sin papeles, sin formularios, sin colas. Crees que la pandemia logró un boom de interacción digital que ha agilizado la interacción comercial y simplificado las cosas a las personas y reducido mucho los costos.

Sin embargo, lo que tu no has pensado es qué desde hace años, los estados y no solo los que son gobernados por la izquierda, están buscando más dinero. Hace años buscan cobrarles impuestos a las multinacionales que te brindan estos servicios: Facebook, LinkedIn, Airbnb, Amazon, Uber, Netflix, Spotify, entre otros. El apetito de recursos nunca termina. Y, como no es factible cobrarles impuestos a empresas que no tienen domicilio en el Perú y la solución peruana siempre le carga la responsabilidad al ciudadano, te lo cobrarán a ti, al consumidor.

¿No me crees?

Te doy algunas razones:

  • La presión tributaria en el Perú no supera el 14% del PBI (aunque es mucho mayor para el formal y el gran contribuyente que paga 1 de cada 3 soles que gana y 1 de cada 5 soles que consume).
  • La recaudación del IGV es la principal fuente tributaria del Estado. De lejos. Un impuesto a las grandes fortunas no cambia esto.
  • Juntos por el Perú, el partido de la señora Mendoza que nunca debe haber pagado IGV, propone que la presión tributaria suba al 18% del PBI.
  • Sólo subiendo el IGV o gravando a más productos con este impuesto es posible acercarse a esta meta.

Si el pedido de Pedro Francke, el ministro de Verónika en el gabinete, de tener facultades legislativas, planteado por primera vez el 22 de setiembre y repetido hace algunos días, con el pretexto de “simplificar la tributación”, “gravar a las grandes fortunas” o “hacer una reforma tributaria justa” tiene acogida por el Congreso, les habremos dado a los representantes del 4.4% [i]del padrón electoral, la posibilidad de arruinar la economía del 100% de los peruanos. Vía delegación podrían, sin ningún rubor, cambiar en 180° el esquema económico de todos los peruanos, gravándonos con más impuestos, tributos, tasas, multas, sanciones y trámites. Habrían conseguido a través de una ley de delegación, lo que las urnas electorales les negó en dos elecciones:2016 y 2021.

¿Podría el Congreso, por decisión mayoritaria, conceder a quienes no representan ni la mayoría ni los intereses del país, la facultad de arruinar la economía del resto de los peruanos?

Yo particularmente creo que no. Eso sería una traición. La delegación de facultades sería una traición.

Si hay algo que hacer en materia tributaria es dejar de seguirnos persiguiendo a los mismos contribuyentes. Vayan por sus socios, amigos de la izquierda que están en el desgobierno.

  • Cobren a los dinámicos de las regiones,
  • a las empresas fantasmas que se crean para ganar licitaciones que ustedes mismos les otorgan.
  • Vayan al Vraem, cobren a sus financistas.  
  • Cobren a los mineros ilegales y sus fortunas escandalosas.
  • Vayan a Tacna, Juliaca y Puno, sus principales bastiones y cobren a sus electores.

Y, sobre todo, no dilapiden los recursos que los formales contribuimos en el país.

Y si hay algo que legislar, que lo sometan al Congreso y que este lo debata y apruebe, si corresponde al bien de todos los peruanos. Lampadia

[i] Juntos por el Perú. Resultado electoral 2021: 1´090,000 votantes. 4.4% padrón electoral.




La Inflación y la izquierda, siempre juntas

La Inflación y la izquierda, siempre juntas

Fausto Salinas Lovón
Para Lampadia

La inflación ha llegado al Perú, como siempre, de la mano de la izquierda y sus ideas.

Al 30 de setiembre, el Índice de Precios al Consumidor de Lima Metropolitana del año 2021 (IPC en lo sucesivo) ha llegado al 4.62%. El IPC anualizado (set 2020- set 2021) del último año llega a 5.23%. A nivel nacional la cifra es mayor. EL IPC Nacional de los últimos meses llega al 5.12% en los últimos 9 meses. De seguir la tendencia, es previsible que a fin de año superemos largamente el 7 % de inflación.

La inflación estuvo por debajo del 4% desde 1999 (con la única excepción del año 2008 donde la crisis financiera mundial llevó el índice al 5.8%). Han sido 22 años en los cuales una generación entera no supo lo que es el alza de precios.

Fuente: Banco Central de Reserva del Perú, INE y adaptación propia​

La izquierda no viene sola. Trae la inflación como su fiel compañera. En el Perú y en todo el mundo. Veamos algunos ejemplos.

ALAN de IZQUIERDA. 1985-1990. Con controles de precios, restricción de importaciones, control de cambios y ataque a la inversión privada.

ALAN 2006-2011. con libre mercado, libre importación, sin control de cambios y con respeto a la inversión privada.

La diferencia es clarísima entre el mismo político, pero con ideas distintas.

En VENEZUELA, con Maduro y sus ideas, que son las mismas del ideario de Perú Libre y de toda la izquierda que ha llegado al poder, las cifras son las siguientes, sólo en los últimos 4 años.

En la ARGENTINA, donde las ideas del control de precios, las restricciones a las importaciones, el control de cambios y el ataque a la inversión privada se han hecho institución desde hace 75 años, con la llegada de Perón, el promedio anual de inflación es del 105%.  

Alberto Fernández, actual presidente argentino, de la izquierda peronista, en 21 meses de gestión, tiene acumulada una inflación del 90%.

La inflación es desatada por las ideas de izquierda que limitan mercados, restringen la competencia, restringen las importaciones, controlan los precios, controlan el tipo de cambio. Estas ideas llegan con la izquierda y sus efectos trascienden a sus gobiernos. Las padecen los pueblos y los siguientes gobiernos.

El riesgo de que la espiral inflacionaria en el Perú se desate, no es por lo tanto un refrito electoral de la derecha, ni mucho menos un “castigo por que un hijo del pueblo ha llegado al poder”. La espiral inflacionaria se desata cuando las viejas ideas que trajeron inflación en el Perú y en otras partes del mundo se ponen en práctica.

Con cambio constitucional (al cual no renuncia Castillo), con segunda reforma agraria que controlará los precios de la importación de alimentos y destruirá el agro moderno, con controles de precios a ciertos productos, con nacionalizaciones de recursos naturales y otras perlas del ideario de la coalición de izquierda que nos desgobierna, llegar a cifras argentinas sería cosa de meses y a cifras venezolanas, cuestión de pocos años.

Estamos a tiempo de evitarlo.

5,12% de inflación hasta setiembre y un estimado de 7% para este año 2021 son dos alarmas que deben obligar al gobierno a cambiar el rumbo. Ya. No basta cambiar nombres, hay que cambiar el rumbo, el libreto y el objetivo.

Ya probamos, en muy pocos meses, que la inflación y la izquierda vienen juntas.  Ahora les toca a ellos desmentirnos y hacernos ver al Perú es posible un proyecto de izquierda que conviva con la sensatez macroeconómica, con el mercado y con las libertades económicas.  Lampadia




De la provocación a la mecida

De la provocación a la mecida

Fausto Salinas Lovón
Para Lampadia

La estrategia de usar a Bellido como el anzuelo para provocar al Congreso y que este gaste su primera cuestión de confianza en él, no funcionó. El cumplió a cabalidad su papel:  provocó al Congreso, a la oposición, a la opinión pública, a la prensa, al país. Primero lo hizo al pedir la confianza (Lampadia: De la hoja de coca al Babel político.

Luego al lanzar una amenaza que el como Premier no está en capacidad de hacer: expropiar el gas, que no se puede hacer con la actual Constitución y sin una ley del Congreso. Finalmente lo hizo la semana pasada, amenazando con hacer cuestión de confianza por Iber Maraví.  Bellido cumplió con su encargo: provocó. ¿Gobernar? No, para eso no había asumido el cargo.

La primera estrategia de la coalición roja que nos desgobierna no funcionó. El país no pisó el palito y el Congreso no gastó pólvora en Bellido. La estrategia de Castillo, Cerrón, Vero y el ex cura Arana no pudo concretarse, por ahora.

La devaluación y la inflación (signo distintivo de la izquierda en todo el mundo y en particular en el Perú) y la presión judicial sobre el cogollo central de Perú Libre, han obligado a Castillo a pasar al plan B:  dejar la provocación y pasar a la mecida.

Sus socios, han cobrado con creces el reacomodo. Vero ha mantenido su cuota de poder y la ha consolidado. El ex cura también, pese a que electoralmente desapareció, ahora pone a una de sus alfiles en la PCM. Cerrón resignó un par de puestos, pero puso a su defensor en el Ministerio de Interior. Castillo trajo a más amigos del movimiento magisterial al gabinete.  En suma, tenemos más de lo mismo: izquierda pura, dura y anti inversión, que seguirá el libreto, pero esta vez, por un camino menos achorado, menos provocador. El camino de la mecida, que adormece a muchos.

¿Bellido, Bermejo, Cerrón han perdido poder? Para nada. Han quedado en la posición que les acomoda mejor: radicales libres, preparando la toma del poder sin “pelotudeces democráticas”. Bellido construirá su propio relato acerca de la salida y hará creer a más de un incauto, que salió por “presión de los poderes económicos fácticos” o por “enfrentar la corrupción”.

Como en la salud, en la política hay también patologías originadas por los radicales libres que quedan sueltos. Generan metástasis si no son extirpados a tiempo.

Ahora, vendrá la apariencia de moderación. Hay nombres que confrontan menos.  Hay desconocidos que generan dudas antes que temor. Algunos ingenuos abrirán el espumante para celebrar la caída de los radicales libres del gobierno. Otros le darán el beneficio de la duda a Castillo. Los más cándidos, pensarán que estamos en suelo firme. En el Congreso, algunos intonsos bajarán la guardia.

Solamente hemos pasado de la confrontación a la mecida con un gabinete para ese fin.

Mientras Castillo no esté dispuesto a jugar dentro de la cancha constitucional, el estado de derecho y el modelo económico que ha revertido la pobreza y nos ha dado estabilidad económica por 30 años, e insista con cambiar la Constitución para imponer su modelo y enquistarse en el poder, Castillo sigue siendo un radical libre más al que hay que combatir por las vías constitucionales.

Las democracias se defienden con los anticuerpos que la Constitución, el Estado de Derecho y las Instituciones prevén. No hay que renunciar a ellos. Frente a un mal no se renuncia al tratamiento, salvo que se quiera morir. La cándida creencia de que el mal no causará tanto daño no cura enfermedades ni salva democracias. Al cáncer no se le da el beneficio de la duda. Las patologías se extirpan, se irradian, se combaten, no se convive con ellas. Lampadia




Hora de pasar de las palabras a los hechos

Hora de pasar de las palabras a los hechos

Fausto Salinas Lovón
Para Lampadia

La gira por México y USA ha engañado a muchos.

A unos los ha engañado la vestimenta y el sombrero. Han creído estar frente a un hombre de pueblo y no frente a un político astuto.  Estos no se han dado cuenta que estaban frente a un disfraz. El hombre que usa sombrero sea de paño inglés, de jerga o de paja, o que usa un chullo, sabe quitárselo por respeto cuando llega, no lo exhibe como blasón.

A otros los han engañado los dislates, los errores y las limitaciones conceptuales. Han caído de inmediato en la descalificación, la burla y el meme, que no hace otra cosa que convertirlo en víctima y afirmar su afinidad con el peruano que no lee, no comprende lo que lee y por supuesto, no puede pensar lo que dice.

A otros, en el mundo de la política internacional y la diplomacia, también los ha engañado.   Sus discursos vacuos y lleno de lugares comunes, como le gusta escuchar a los diplomáticos para responder elegantemente sin decir nada, han sido bien recibidos por diplomáticos y el secretario general de la OEA. La única digna excepción es la del Vice Canciller Luis Enrique Chávez, que nos ha recordado que el Perú no reconoce la dictadura venezolana.

A los banqueros internacionales también. Ya han tocado las puertas del Banco Mundial y del Banco Interamericano de Desarrollo para pedir dinero, dinero para el clientelismo político que se viene. Dinero que ellos no pagarán, que pagaremos los contribuyentes y nuestros hijos. A los banqueros no les importa ser engañados mientras haya un pagaré firmado, total, los estados no caducan y el Perú sigue pagando la deuda contraída por Velasco.

A los empresarios, siempre tan cándidos en política, ha sido más fácil engañarlos. La sede de AmCham ha sido el teatro. Sin mover una línea de su ideario político donde habla de economía popular con mercados y propiedad social, en lugar de economía de mercado y propiedad privada, les ha dicho que respetará sus inversiones y su propiedad. Han aplaudido. Y los áulicos, que tiraban piedras en la campaña a las inversiones privadas y los mineros, han salido a hacernos un recuento de los empresarios que no se irán y los que vendrán al país.

Hay otros que viven del engaño. Para ellos todo esto no es nuevo. Saben que todo es un embauque, pero buscan hacernos creer que no. Viven de eso. Con pauta publicitaria, consultorías, cargos en la OEA, fajines ministeriales, nombramientos o contratos.

Felizmente, hay millones de peruanos que no caemos en el engaño. Que sabemos ver los hechos y no nos encandilan las palabras. Sabemos que lo dicho en la gira es sólo eso, un engaño.

Si no fuera así y no se trata de un embuste más, habría que dejarse de palabras y pasar a los hechos que den coherencia a lo dicho. Aquí sugiero tres, para comenzar:

  • Renunciar a Perú Libre, con lo cual desaparecerá la sujeción conceptual a un ideario que contradice totalmente lo dicho en México, Washington o Nueva York.
  • Designar un Directorio independiente en el BCR, con Julio Velarde a la cabeza.
  • Despedir a Bellido y la mayor parte de su gabinete.

Lampadia




Ya tienen el cuerpo del delito

Ya tienen el cuerpo del delito

Fausto Salinas Lovón
Para Lampadia

Cuando escribí La afrenta moral más seria  hace dos semanas, Abimael Guzmán estaba vivo. Hoy, que su cuerpo inerte yace en espera de disposición final, tenemos el cuerpo de un delito contra el país.

En el artículo citado alcancé las cifras de muertos causados por Sendero Luminoso, la magnitud del daño causado al país y la similitud de su mensaje con el discurso del partido gobernante y de Pedro Castillo. Señalé que colocar a senderistas en el gobierno, no removerlos pese a su comprobada participación en actos de violencia y su ausencia de arrepentimiento frente a la violencia, era la afrenta moral y permanente más seria de la cual había sido víctima el país y que el Congreso no debería tardar en la Vacancia.

Hoy, si al Congreso le faltaba pruebas para actuar, las tiene y en sus narices.

El ocupante de Palacio de Gobierno se niega a tomar una decisión sobre el destino final del cadáver y en lugar de enfrentar este problema, sale de gira por México y la ONU, donde seguramente, con los disparates que diga, sepultará la imagen ya deteriorada de nuestro país que costó 30 años reconstruir luego del terrorismo, el estatismo y la hiperinflación. Hace tiempo para que un juez, un fiscal o alguien entregue el cadáver a quienes lo convertirán en trofeo. ¿No es esto complicidad? ¿La omisión dolosa no es acaso también un crimen, por lo menos moral y político?

Bellido, hábil en la provocación y la distracción, hace todas las muecas necesarias para distraer a la prensa y hacer que siga pasando el tiempo.

Los congresistas de Perú Libre, confirmando su entraña moral, se oponen a que sea incinerado como lo han sido los genocidas en todo el mundo.

En el gobierno, sólo Dina Boluarte, la Vice Presidenta y el ministro de Justicia, Aníbal Torres, tienen una posición clara a favor de la incineración de los restos y lo llaman terrorista.

Si les faltaba pruebas y querían el cuerpo del delito más grave cometido contra la moral del país, allí lo tienen. ¿Qué esperan?

El Congreso, tiene entonces, ante sí, no solo la responsabilidad de definir el destino final del ser que más daño le ha hecho a nuestra nación. Tienen la responsabilidad de definir el destino del país, antes de que sea tarde. La Vice presidenta ha marcado una distancia que debiera ser entendida como corresponde y dar paso, ya, a la VACANCIA. Lampadia




Esta es la izquierda

Esta es la izquierda

Unida en un solo puño para destruir el país

Fausto Salinas Lovón
Para Lampadia

La división de la izquierda era proverbial. Su espíritu de facción le impidió tener relevancia en la Constituyente de 1979, la redujo en el Congreso de 1980, le obligó a renunciar a la segunda vuelta en las elecciones de 1985 y los obligó a servir de tontos útiles de Fujimori para derrotar a Vargas Llosa en 1990, a cambio de dos fajines y algunos puestos que perdieron muy pronto. Barrantes ganó la Alcaldía de Lima, pero su llegada a Palacio fue impedida, ante todo, por la propia izquierda.

En la década del 90, luego de la caída del muro de Berlín, que significó la mayor derrota del comunismo real en la historia, a su división se unió su intrascendencia. Se tuvo que refugiar en regiones, alcaldías, sindicatos, frentes de defensa y comenzó su nueva estrategia: infiltrar partidos, instituciones y medios. En este tiempo y en los primeros años de los 2000, tuvo que buscar vientres de alquiler para figurar políticamente. Javier Diez Canseco, su máximo referente, tuvo que ponerse bajo la sombra de Javier Pérez de Cuellar para llegar al Congreso en el 2001 y luego, se cuadró, sin despeinarse, ante las pocas luces del comandante Humala que ensayó la nueva y exitosa forma de acción política de la izquierda: el camuflaje. Henry Pease, también se tuvo que poner bajo la sombra de Pérez de Cuellar para llegar al Congreso en 1995 y se puso a las órdenes de Alejandro Toledo en el 2001, con el mismo objetivo.

Entre el 2006 y el 2016 el camuflaje fue el nacionalismo. A este se subieron, sin ningún remordimiento, todos los camaradas, carnívoros y vegetarianos[i]. El antifujimorismo sumó a más acólitos: caviares, académicos, presupuestívoros, antimineros y otros. Sin embargo, ni siquiera en ese tiempo de “borrachera de poder”[ii]estuvieron unidos. La Veró, secretaria de no se qué en el partido y fiel compañera en los viajes a Caracas, se desembarcó muy rápido cuando Humala aceptó, presionado por Vargas Llosa y Toledo, jugar en la cancha democrática y no llevarnos al desvarío chavista para el cual había sido concebido. Los Movadef, los proseguir, los cerrones, los santos y la otra izquierda y el ala dura nunca lo vieron con buenos ojos:  los desvaríos burgueses de su consorte eran incompatibles con el “actuar revolucionario”.

En el 2016, intentaron unirse para pasar a la segunda vuelta. No lo lograron. Sin embargo, lograron algo mejor: gobernar gracias a la candidez otoñal de PPK y sus funcionarios de lujo, la complicidad de Vizcarra, el actuar hepático de Keiko y la complicidad manifiesta del ex rehén que pedía autógrafos, el segundo Caballo de Troya con el cual terminó de desembarcar la izquierda este año. La más grande estupidez política que la historia política peruana haya visto es que un país, que en un 80% voto por las libertades económicas, la propiedad, la empresa, le terminó regalando el poder a la izquierda.

En la primera vuelta de las elecciones de 2021, la división los siguió marcando. Había izquierda para todos los gustos. Desde Lezcano, el marxista infiltrado en el partido de FBT hasta Castillo y Ciro Gálvez, a quienes el Oráculo de la izquierda había calificado como “representantes del folklorismo de izquierda que la derecha necesita”[iii], la “izquierda aldeana, ensimismada, telúrica, que se mueve sólo para arrancar algunos aplausos condescendientes en el periodismo tradicional”[iv].

Sin embargo, la segunda vuelta de las elecciones de 2021 hizo la magia que no hubo en 42 años, desde 1979. La proverbial división se acabó. Se unieron. Hasta el Oráculo, que muchos tontos de la derecha comparten en sus posts, consintió que los “aldeanos”, “telúricos”, “folklóricos” tomen el poder. Hoy, están todos en él poder. Los Movadef, los proseguir, los Cerrón, los “telúricos”, la Vero, los nacionalistas, los susanistas, el cura Arana, los camaradas dinosaurio activos en entrevistas y desde el Facebook y ya no desde las relaciones exteriores, todos, unidos, en un solo puño, para destruir el país. Los caviares, sus primos pitucos, quieren tomar distancia al no recibir su pedazo de pastel, pero ahí estuvieron, haciendo posible lo que estamos viviendo.

¿Esta es la izquierda, unida como nunca, que les parece?

Hago este recuento antes de que el barco se hunda o nos lleve a aguas tormentosas, para que en el momento en que empiecen a huir o haya que asumir consecuencias, como siempre sucede en la política, no nos digan: yo no fui y se asilen en algún otro partido. Ahora están todos, como nunca antes, unidos, destruyendo el país.  Compartiendo el poder, porque gobierno no existe. Tomemos nota. Lampadia

[i] Como los clasificaron Plinio Apuleyo Mendoza, Carlos Alberto Montaner y Álvaro Vargas Llosa en el Manual del Perfecto Idiota Latinoamericano.

[ii] Frase atribuida a Isaac Humala sobre su yerna, la primera dama Nadine.

[iii] César Hildebrandt dixit.

[iv] César Hildebrandt dixit.




La afrenta moral más seria

La afrenta moral más seria

Fausto Salinas Lovón
Desde Cusco
Para Lampadia

Sendero Luminoso causó la muerte de por lo menos 70,000 personas al desatar su sanguinaria aventura terrorista en 1980 y pretender tomar el poder “desde el campo hasta la ciudad”. Su accionar fue subrepticio, nocturno, alevoso y aun en el campo, después de ajusticiar policías, maestros, autoridades o dirigentes comunales, se “escondía detrás del pueblo” y simulaba ser parte de él.  Esta cifra corresponde a la Comisión de la Verdad y Reconciliación y, aún cuando para muchos es una cifra discutible que ha sido hallada por estimaciones estadísticas antes qué por conteos oficiales, nos da cuenta de las graves consecuencias sociales y morales de la aventura política iniciada por un fanático profesor universitario seducido por el maoísmo. Esta cifra incluye también los muertos del MRTA y los que se atribuyen a la represión policial y militar.

La amenaza terrorista empezó a desmoronarse a partir setiembre de 1992, con la caída del sanguinario cabecilla Abimael Guzmán, el desarmado de la cúpula senderista a partir de ese año y en abril de 1997, con la liberación de la Embajada del Japón secuestrada por el MRTA por parte del Comando del Ejército denominado “Chavín de Huantar”. A partir de ese momento, el terrorismo dejó de ser una amenaza para la gobernabilidad del país y se convirtió en un problema de seguridad focalizado en los valles del Huallaga y el VRAE, donde el senderismo se convirtió en el brazo militar del narcotráfico. Desde entonces, se han capturado o abatido a sus mandos: en 1999 a Feliciano, en los años siguientes a los camaradas Clay, JL, Piero y Rubén. El 2012 a Artemio y este mismo año, a uno de los Quispe Palomino, el Camarada Raúl.

Sin embargo, el terrorismo no desapareció como irresponsablemente cantó victoria el fujimorismo con fines electorales el año 2000. El auge económico de las primeras dos décadas del siglo 21 nos hizo olvidar que estaba allí, como siempre, infiltrado “escondido detrás del pueblo”.

Sus mandos medios quedaron. Sus simpatizantes quedaron. Los hijos y las viudas resentidos de sus caídos quedaron larvando el resentimiento más abyecto contra “el sistema” que los abatió. Sus cuadros se volvieron a esconder “en el pueblo” y “en el campo”. Comenzaron a infiltrar instituciones, gremios y lo que es más serio, la mente de los peruanos hasta hacerlos olvidar sus crímenes y atrocidades. Hoy Sendero Luminoso no se reduce a sus rezagos en el VRAEM o al Movadef y sus satélites. Es más que eso y le ha declarado la guerra al país, nuevamente. Ya no desde la clandestinidad, incendiando las ánforas en Chusqui (Cangallo – Ayacucho) como lo hizo en 1980. Ahora ha tomado todas las ánforas necesarias, las actas, los padrones, las autoridades electorales y ha llegado al poder, sin haber soltado un solo disparo.

La estupidez de los tontos útiles, ahora desesperados clamando cambios ministeriales y pidiendo deslindes con el senderismo, lo hizo posible. Aquí estamos. Cruzaron los puentes, están adentro y desde allí nos han declarado la guerra.
  • ¿Ha existido mayor afrenta a la moral del país en toda su historia?
  • ¿Existe mayor enemigo para nuestro país que este, que originó la muerte de más de 70,000 compatriotas?
  • ¿Esta afrenta es un mero episodio aislado que nuestra democracia pop del tweeter y los influencer sin historia querrán relativizar?
  • ¿Es este un hecho fortuito de una democracia débil que se puede corregir?
  • ¿No estamos acaso ante un ataque permanente a la nación? ¿No es esta una guerra que el Perú enfrenta desde 1980, que no ha cesado y que hoy se desenvuelve en un plano distinto?

Ninguna felonía grupal, individual o traición que registra nuestra historia ha tenido la magnitud de esta afrenta que consumió DOS DÉCADAS de nuestra historia, que destruyó nuestra moral, que nos puso al borde de la ingobernabilidad y que hoy, desde el poder, está poniendo los cartuchos para dinamitar el edificio institucional de nuestro país.

No hay mayor afrenta moral al país que la complicidad con Sendero Luminoso.

Por ello, creo que el CONGRESO está demorado en su verdadera y tal vez única tarea. La VACANCIA de PEDRO CASTILLO. Insistir en mantener en el gabinete a autores materiales de actos terroristas no es un error político que se corrige con la censura, no es una afrenta que se limpia con la interpelación, no es solo una provocación que se resuelve denegando la confianza. Es la evidencia que faltaba para mostrar la permanencia de esta grave afrenta moral. La Constitución lo llama “incapacidad moral permanente”. El sentido común lo llama: VACANCIA. Lampadia




De la hoja de coca al Babel político

De la hoja de coca al Babel político

Fausto Salinas Lovón
Desde Cusco
Para Lampadia

Mi paisano Guido Bellido, experto en el arte de tomar campus universitarios o de bloquear caminos en protestas anti mineras, ayer hizo lo que sabe hacer: provocar.  Fue al Congreso a provocar y lo hizo, muy bien. Provocó con su indumentaria, con su discurso en runa simi que ni sus ministros entienden, sus hojas de coca en bolsa de plástico y sobre todo, con un discurso que sus acciones, sus ideas y su semiótica personal desmienten. Le faltaron nada más las ojotas y la soga para completar la vestimenta y la llipta, para aderezar el picchado y completar toda una escenografía de provocación y conflicto.

¿Porque ir a provocar cuando lo que se busca y predica es la unidad?

Por lo obvio. Se busca la denegatoria de la confianza, para que el Congreso gaste pólvora en Bellido. No hay que ser egresado de la Escuela de Gobierno de Harvard ni PHD en Ciencia Política para darse cuenta de lo que se busca.

El encargo de Castillo, la orden de Cerrón y la tarea de Bellido están cumplidas, a cabalidad y con creces. Sólo la miopía de parlamentarios termocéfalos la podría premiar con la denegatoria de Confianza y como se tiene dicho, gastar pólvora en Bellido. Debe ser investido, se le debe otorgar la confianza, se le debe obligar a gobernar y a asumir el precio del ejercicio del poder. Acto seguido, al día siguiente, en runa simi, se le debe decir: MANAN WAYQEY (No hermano), pidiéndole a él y a sus ministros, cuenta y respuesta por todo lo que han hecho, lo que no han hecho y lo que deberían hacer y no hacen.

Así de simple.

Sin embargo, ¿esto se agota ahí? ¿No hay algo más detrás de todo esto?

A mi juicio los guionistas de esta escena, presos de complejos adánicos, espíritus mesiánicos y aires refundacionales, parecen creer y ciertamente le quieren hacer creer a sus electores y al núcleo duro de su base política (11% del padrón electoral) que esta escenificación es única, nunca vista y un gran logro de la reivindicación andina en el corazón del poder político limeño, criollo, blanco y de derecha.

Falso señores.

Lo que ayer hemos visto no es más que una nueva puesta en escena de ese Babel comunicativo y político al cual llegan las sociedades luego de una gran tragedia como un diluvio o una pandemia. Una muestra más del caos en el cual sume la historia a las sociedades que no se entienden y con mayor razón a las sociedades que no se quieren entender. Los guionistas olvidaron que ya en el Génesis 11: 1-9, en la Biblia Católica y no en el Libro Rojo de Mao, esta escrito que para que un pueblo no se entienda y sea un solo pueblo se busca dividirlo, “se busca confundir su idioma para que ya no se entiendan entre ellos mismos”.

¿O será que Cerrón, Castillo y Bellido tienen tal mesianismo que crean que nos pueden castigar como Dios lo hizo en el relato bíblico, con la confusión, el caos, la división y la lengua distinta?

Pueden creer lo que les parezca. El 89% de los electores de este país no lo creemos y solo cabe decirles MANAN WAYQEY.

El Perú es uno sólo y no lo vamos confundir. Lampadia