Por: Roque Benavides, Presidente del Directorio de Compañía de Minas Buenaventura S.A.A.
Gestión, 30 de abril de 2019
Un artículo publicado en el 2018 por el American Economic Journal dio a conocer un importante dato: los países que logran incrementar en diez puntos porcentuales la cobertura de saneamiento reducen la tasa de mortalidad infantil en ocho puntos.
En el Perú, que cuenta con más de 32 millones de habitantes, el 10.6% y el 25.5% de la población no cuenta con acceso a agua ni a saneamiento, respectivamente. Y estas cifras se elevan a 37.8% y 75.7% en el ámbito rural.
Por su parte, Cajamarca alberga a más de 1.3 millones de habitantes. Es decir, cerca del 5% de la población nacional, según los Censos Nacionales 2017 del INEI. Cabe destacar que esta es la segunda región del país con mayor porcentaje de población rural (64.6%), después de Huancavelica (69.5%).
Precisamente, a inicios de este mes concluyó la ampliación de la Planta de Tratamiento de Agua Potable “El Milagro”, en Cajamarca, la cual abastece al 70% de la población de dicha ciudad, que cuenta con 180,000 habitantes. Esta infraestructura está ubicada en el caserío de Huambocancha Baja, a cinco kilómetros de la ciudad y a una altitud de 2,844 metros sobre el nivel del mar.
Esta inversión aumentará la capacidad de tratamiento del agua a 160 litros por segundo, lo que se traducirá en más horas de agua y mejor calidad de vida para la población, con el consiguiente impacto positivo en la salud pública, el desarrollo infantil, la reducción de enfermedades y la economía local.
Aplicación de nueva tecnología
La ampliación de la mencionada planta se llevó a cabo con la instalación de dos nuevas plantas modulares –sistema integrado de tratamiento en etapas– que funcionan bajo el método de flotación por aire disuelto. Es decir, liberan aire a presión en el agua para generar pequeñas burbujas que hacen flotar los desechos, de manera que estos pueden ser removidos.
Estos modelos de plantas son controlados automáticamente con tecnología de punta (Sistema de Supervisión y Adquisición de Datos, o SCADA, por sus siglas en inglés), lo que permite monitorear el tratamiento de agua de manera oportuna y eficiente.
Trabajo colaborativo
La instalación de estas plantas modulares ha sido posible gracias a un convenio suscrito entre la Municipalidad Provincial de Cajamarca, Sedacaj, la Asociación Los Andes de Cajamarca y Yanacocha. Esta iniciativa conjunta forma parte del programa Agua para Cajamarca, que incluye 11 proyectos para mejorar el abastecimiento de agua potable en los hogares.
Esta nueva infraestructura es un claro ejemplo de lo que se puede lograr cuando las autoridades y la empresa privada identifican metas comunes en beneficio de la población.
El acceso al agua es un derecho que todos debemos y necesitamos percibir. Ciertamente, los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), que promueven las Naciones Unidas, plantean el acceso universal y equitativo al agua hacia el año 2030. Como organización, nos encontramos plenamente comprometidos con el cumplimiento de esta meta, y es en ese sentido que destacamos esta gran obra, que es, sin duda, una importante contribución.
Somos un país privilegiado por la naturaleza. Si bien es cierto que el Perú posee el 1.89% del agua dulce disponible en el mundo, de acuerdo a cifras de la Autoridad Nacional del Agua (ANA), es deber de todos los peruanos gestionarla de manera apropiada, integral y responsable, procurando que se logren conjugar dos aspectos clave: tecnología de punta e infraestructura de almacenamiento, en este caso, como embalses y represas, dado que estos últimos permiten “sembrar y cosechar agua”. Es decir, captar el recurso en época de lluvias para ponerlo a disposición del consumo humano y otros usos durante el estiaje.
Una alternativa efectiva para terminar con la escasez de agua que sufren alrededor de 8 millones de peruanos es la buena práctica –y replicable– que compartimos aquí: construir plantas de tratamiento, las cuales, sumadas a otras infraestructuras como represas y embalses, entre otros activos, beneficien a las familias más necesitadas de nuestro país.
Reconocemos la importancia y necesidad de fortalecer el diálogo e interacción entre el Estado, autoridades a todo nivel y empresa privada. En este sentido, consideramos que si unimos esfuerzos podremos cumplir con la meta de garantizar, finalmente, el acceso al agua para todos los peruanos, meta que hoy es una prioridad en la agenda del país.