Por: Moisés Navarro
G de Gestión, 21 de Abril del 2023
“NO SERÍA AVENTURADO DECIR QUE LA ETAPA DE MAYOR ESTABILIDAD POLÍTICA DE BOLUARTE YA QUEDÓ ATRÁS. Y EL ESPACIO QUE TIENE PARA LA TOMA DE DECISIONES IMPORTANTES SE SIGUE REDUCIENDO”.
El tercer Barómetro de los CEO de Gestión e Ipsos, publicado a principios de abril, reveló que el 44% de los encuestados opina que el crecimiento de las compañías que lideran estará por debajo de lo proyectado, tomando en cuenta los resultados de su empresa en el primer trimestre (44% indicó que se llegará al nivel previsto, y apenas el 12% dijo que estará por encima).
Otro dato revelador, desde el lado del empresariado nacional, es el que trajo la Encuesta de Expectativas Económicas del BCRP de marzo del 2023. El informe mensual mostró que una de cada tres empresas encuestadas espera reducir sus inversiones este año.
Las protestas contra el gobierno de la presidenta Dina Boluarte y el impacto de las lluvias en el norte asentaron el pesimismo respecto de los resultados económicos del 2023. Así, se cerró un primer trimestre que podría marcar la pauta del resto del año.
Igual de preocupante es que los sectores de minería y construcción presenten una mayor proporción de respuestas en el tramo correspondiente a una contracción de inversiones para el presente año, como indica el BCRP.
La actividad minera en el Perú es una de las principales generadoras de riqueza y de ingresos fiscales. Diversas informaciones también precisan que el escenario para dicho sector en específico no es favorable.
El Ministerio de Energía y Minas (Minem) señaló que en febrero la inversión en minería alcanzó los US$ 254 millones; es decir, una caída de 22% respecto del mismo mes del año pasado. La cifra también representa el nivel más bajo registrado en 22 meses.
A detalle, las inversiones mensuales en exploración permanecen en niveles bajos. En enero se registraron US$ 25 millones, poco más de la mitad del mes anterior y la cifra más baja desde el mismo mes del 2022. Además, ya empieza a hacerse más notorio el freno en el ingreso de nuevas compañías dedicadas a la exploración de minerales.
Si alguien consideró, sobre simplificando la dinámica política local, que con Pedro Castillo fuera del cargo de presidente las inversiones llegarían solas, este primer trimestre demuestra que no es así y que el escenario involucra factores que trascienden lo ideológico.
No sería aventurado decir que la etapa de mayor estabilidad política del gobierno de Boluarte ya quedó atrás. Y, aunque su destitución se hace cada vez más remota, de todas formas el espacio que tiene para la toma de decisiones importantes se reduce.
Ante esta situación, priorizar el desarrollo de las actividades mineras es urgente. El Gobierno, a través del Minem, ya ha intentado algunas aproximaciones a las empresas durante abril. Es necesario que estas acciones sean recurrentes en el corto plazo y que culminen en medidas concretas que permitan sacar adelante proyectos largamente postergados. Goldman Sachs avizora un superciclo de commodities. No podemos dejar pasar la oportunidad de atraer nuevas inversiones.