Aldo Mariátegui
Perú21, 4 de julio del 2025
“La caviarada ha metido una pregunta sobre qué idioma uno aprendió en la niñez, (…) buscan inflar el número de los no-hispanoparlantes para luego hacer negocios (…) con sus ONG”.
-¿Hasta cuándo la caviarada va a seguir oprimiendo al Perú? Es una vergüenza cómo el resto de peruanos aguanta como gallinas que esta casta siga capturando al Estado. La última de estas incesantes maniobras caviares es una pregunta sobre idiomas en el próximo censo. Resulta que la caviarada ha metido una pregunta sobre qué idioma uno aprendió en la niñez y ponen al castellano en séptimo lugar, tras varios idiomas indígenas, hasta tapado por una quinta pregunta que lleva tres espacios en blanco para registrar otro idioma local. Como bien explican en Wiñaq, así buscan inflar el número de los no-hispanoparlantes para luego hacer negocios y demagogias con sus ONG. Además, la pregunta es hasta idiota porque lo importante es el idioma en el que te expresas en la actualidad. Si algo he aprendido en España es que no existe mejor estrategia para dividir y confundir a una nación que impulsar idiomas subalternos (vasco, catalán, gallego) para socavar a la lengua mayoritaria. Nadie va a llegar a ningún lado hablando quechua, aimara o aguaruna en lugar de castellano que te comunica con 600 millones de personas. Es más, ahora lo más urgente es aprender inglés a toda costa, que ya no es una lengua más sino un instrumento de trabajo. Todo profesional pierde mucho en estos días si no sabe inglés.
-Dina Boluarte se está comprando todos los tickets para que la vaquen. Ha osado subirse así el sueldo a más del doble por necia, irresponsable y ambiciosa, pero esta señora no parece darse cuenta de que la gran mayoría la aborrece más que al árbitro Chechelev en su momento, y que aún sigue en la Presidencia porque unos mantienen sus cuotas de poder tranquilos, y otros porque piensan que peor hubiese sido adelantar elecciones (sobre todo ante la perspectiva de que el “electarado” elija a otro peor aún que ella). Esta señora no se percata de que la van a meter presa en el momento que entregue la banda y de que le espera un larguísimo martirio judicial al cual se enfrentará sin amigos.