Por: Aaron Salomón
Expreso, 5 de mayo de 2021
A pesar de que los “dignos” caviares se ilusionen con que el comunista Pedro Castillo modere su discurso, tal como lo hizo Ollanta Humala en el 2011, en tanto se acerque el 6 de junio, el “profesor” cajamarquino ha radicalizado su propuesta, abrazando el ideario marxista-leninista del corrupto Vladimir Cerrón.
Ello quedó acreditado en el debate en Chota del sábado pasado, en donde Castillo no solo vociferó que estatizará todos los sectores estratégicos y que, además, las empresas transnacionales tendrían que entregar el 70% de sus utilidades (¡no van a querer invertir un mango en el país!), sino que amenazó que el Perú no importaría nada de lo que produce. Esto último quiere decir que, en un eventual gobierno de Perú Libre, la economía estará completamente cerrada, lo que provocará que haya escasez de productos de primera necesidad.
Pedro Castillo también confirmó en la polémica con Keiko Fujimori que no sabe absolutamente nada de números. Si antes no pudo acertar en una operación matemática simple, no es extraño que sea tan iluso de pensar que el Producto Bruto Interno (PBI) es un fondo, cuando, en realidad, es un medidor macroeconómico. Por eso es que prometió destinar el 10% del PBI para el sector Educación y otro 10% para Salud, ignorando que todo el presupuesto nacional es un poco más del 23% del PBI.
Otro dato que no puede pasar desapercibido es que, no obstante Castillo ha tratado de deslindar del suspendido exgobernador de Junín, la mano derecha de Cerrón, Richard Rojas García, le ordenó al candidato presidencial que haga su berrinche y fanfarronee con bajarse del estrado porque Keiko no llegaba a la Plaza de Armas de Chota, al verse bloqueada por los partidarios de PL que le arrojaban orines.
A su vez, en una reciente actividad proselitista en Bagua, Pedro Castillo tuvo el descaro de aseverar que recién mostrará a su equipo técnico -que no tiene, por supuesto- cuando le dé la reverenda gana. Un discurso totalmente autoritario que desnuda a Castillo. Ya estamos advertidos de lo que sería la satrapía comunista del lapicito, pues Cerrón, prácticamente, también ha anunciado que cerrarán el Parlamento para llamar a un referéndum, en pos de elaborar una nueva Constitución para entornillarse en Palacio de Gobierno.
Volvamos al debate. Keiko Fujimori fue la evidente ganadora de la polémica al pechar en su propia cancha al deslucido nuevo correlón, quien pretende huir de los cuatro eventos que busca organizar el Jurado Nacional de Elecciones. La aspirante a la presidencia por Fuerza Popular sumó dos nuevas propuestas dirigidas a los sectores D y E: ‘Bono Oxígeno’ y 40% del canon para el pueblo. Estas promesas son populistas, es cierto, pero necesarias para convencer a un electorado que pretende patear el tablero, arrastrándonos a todos a la pobreza. No hay nada más cierto que “el poder es como el violín, se toma con la izquierda, pero se toca con la derecha”.
Otrosí digo: los grandes empresarios peruanos no pueden seguir sentadotes en sus casas de playa de Asia mientras los de clase media tratamos de defender el modelo económico. ¡Suelten hoy billete para auspiciar think tanks de derecha que contrarresten las caviares Wayka e IDL! Mañana será muy tarde.