Cristiano Sampaio
El Comercio, 7 de mayo del 2025
“Cada campaña es una oportunidad para transmitir conceptos poderosos que no solo nos conectan con los consumidores y fortalecen nuestras marcas, sino que también pueden generar un impacto duradero y positivo en la vida de las personas”, comenta Cristiano Sampaio, CEO de Gloria.
El Día de la Madre y el Día del Padre suponen para las empresas de consumo masivo desplegar nuestras mejores piezas publicitarias y promociones para acompañar una de las fechas comerciales más importantes del año. Las marcas planifican con meses de anticipación sus campañas para atraer la atención de los consumidores. Mamá y papá son el foco de nuestra atención.
Pero más allá del esfuerzo comercial, ¿podemos hacer más por ellas y ellos? Creemos que sí. Las empresas de alimentos jugamos un rol clave no solo porque ponemos al alcance de la población productos de alta calidad y valor nutricional, sino también porque tenemos a nuestra disposición plataformas potentes para impulsar temas clave en la agenda ciudadana en beneficio de las familias y, por ende, de la sociedad. Debemos apostar por una comunicación responsable que revalorice el rol de la maternidad y la paternidad en el país.
Ponerlos al centro supone no solo entenderlos como consumidores, sino también comprender el impacto que tienen en la crianza de los hijos, en las nuevas generaciones. Diversas investigaciones han demostrado que el tipo de interacción con los hijos tiene efectos duraderos sobre sus habilidades socioemocionales y sus conductas, así como sobre sus resultados educativos y laborales. Si queremos un país mejor, debemos apostar por fortalecer la conexión filial entre madres, padres e hijos.
Esto se logra incentivando momentos reales de vínculo y presencia. Las mamás y los papás cumplen un rol fundamental con su protección, atención y guía emocional, cuyo impacto está directamente relacionado con el crecimiento de niños seguros, respetuosos, con valores y sentido de comunidad. Cuando ese lazo se cultiva, criamos ciudadanos más plenos y felices, personas de bien que contribuyen activamente a una sociedad más justa.
En nuestro caso, buscamos que nuestras campañas promuevan mensajes que generen un clima positivo y destaquen este rol clave de las madres —y también de los padres— en el desarrollo de sus hijos. “Lo estás haciendo bien” y “Nos das todo” son campañas que impulsamos actualmente para recordar el papel central que las mamás tienen en la formación de sus familias. En nuestras piezas publicitarias reconocemos su entrega incondicional, su amor y esfuerzo diario, y cómo son pilares fundamentales en nuestras vidas.
Pero las ideas, por sí solas, no bastan: deben ir acompañadas de inversión. Para lograr una acción efectiva, destinamos recursos significativos a la investigación, el desarrollo creativo, la planificación y la ejecución de cada campaña. No se trata solo de buscar rentabilidad o maximizar indicadores como la conversión; el verdadero valor aparece cuando logramos comunicar con propósito, impulsando valores que trascienden lo comercial y generan un impacto real en la sociedad.
Cada campaña es una oportunidad para transmitir conceptos poderosos que no solo nos conectan con los consumidores y fortalecen nuestras marcas, sino que también pueden generar un impacto duradero y positivo en la vida de las personas. Ese es el verdadero valor de comunicar con propósito. Eso no tiene precio. ¡Feliz día, mamás!