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¿Lima sin Agua?

Por: Abraham Levy
Perú21, 3 de Diciembre del 2022

Tarde o temprano una sequía severa nos obligará como en 2004 a racionar el agua.

Katia Ochoa, vocera de Sedapal, declaró que Lima (y el Callao) podrían quedar sin agua (en realidad con poca agua) si no mejoran las lluvias. De hecho, estamos en este momento con unos 100 millones de metros cúbicos de agua almacenada (de un parque de reservorios de unos 285 millones) y seguimos descargando pues no llueve. De hecho, si no empezamos a recargar en diciembre, no hay forma de llenar los embalses en verano.

Aunque podemos vivir sin un llenado pleno, necesitaríamos que las lluvias desde enero sean aceptables para empezar a recargar mientras las precipitaciones que caen en la cuenca abastecen a la población.

Como ya lo indicamos más de una vez en este diario, no hemos construido ningún otro reservorio para la capital desde la inauguración de Yuracmayo hace casi 30 años. Es muy reducida nuestra oferta y creciente nuestra demanda.

El reservorio del sistema Huascacocha, que puede aliviar la demanda de Lima y Callao, sigue sin operar –varios años- por los problemas derivados de una mala asociación pública-privada. Otro asunto sin atención…

Tarde o temprano una sequía severa nos obligará como en 2004 a racionar el agua. Si las lluvias no mejoran radicalmente y pronto, ese sería el caso.

Sedapal requiere una atención seria de las autoridades.




Sin agua para lavarnos las manos

Sin agua para lavarnos las manos

Fernando Cillóniz B.
CILLONIZ.PE
Ica, 10 de abril de 2020
Para Lampadia

Aparte de provocar fiebre, tos seca, pérdida de olfato y gusto, dificultad para respirar, y – en algunos casos – hasta la muerte, el Coronavirus ha resultado ser un gran encubridor. Muchos problemas que venían ocupando la atención de la gente han quedado en el olvido. La corrupción… por ejemplo. Como que el virus – pareciera – ha eliminado la palabra “corrupción” de nuestro diccionario.

Asimismo, la pandemia ha encubierto completamente la discusión de algunos otros temas candentes, como la desaceleración económica de los últimos años en nuestro país. Pero no sólo eso. La pésima gestión gubernamental en materia de porcentaje de ejecución presupuestal, la pusilanimidad presidencial frente a los movimientos anti mineros, el incremento desmedido de la burocracia estatal inútil y corrupta, las pintorescas puyas entre el Congreso y el Ejecutivo, y muchos otros temas más… todo quedó traspapelado en algún lugar remoto de nuestras memorias. Podría ser que – aparte de los síntomas antes mencionados – el Coronavirus también provoque la pérdida de la memoria. ¿Cómo será?

Sin embargo – contrario a lo anterior – el Coronavirus también resultó ser un gran descubridor. Como que descubrió algunas falencias que estaban pasando un tanto inadvertidas frente a la ciudadanía. El agua potable y alcantarillado… por ejemplo. Mejor dicho, el fracaso estrepitoso – a nivel nacional – del suministro de agua potable para la población.

¡Qué mala suerte! Resulta que la recomendación más importante para combatir al Coronavirus es – precisamente – lavarse las manos frecuentemente. Lavarse las manos con agua y jabón. Ahora bien… jabón tenemos. Pero ¿cómo lavarse las manos… sin agua? ¡He ahí el problema!

El hecho es que el suministro de agua potable en nuestro país está a cargo de las Entidades Prestadoras de Servicios de Saneamiento (EPS). SEDAPAL es una de ellas… y ciertamente la más grande, y la más conocida. Pero hay alrededor de 50 EPS más. La mayoría son empresas de propiedad de las municipalidades provinciales. Es decir, de los municipios de las principales ciudades del interior del país.

A nivel rural, el agua potable está a cargo de las Juntas Administradoras de Servicios de Saneamiento (JASS). Hay alrededor de 6,000 JASS a nivel nacional. Y la mayoría son manejadas por los municipios distritales.

A lo que quiero llegar, es que ese esquema – el de las empresas municipales de agua potable – fracasó. La mayoría de EPS y JASS están quebradas financieramente. La corrupción y el clientelismo político las quebró. Yo puedo dar fe de ello. Las EPS y JASS de la Región Ica son – casi todas – antros de corrupción e inoperancia. Por eso los iqueños no tienen agua en sus casas. Por eso mismo, la mayoría de peruanos tampoco tiene agua potable… 24 horas al día.

Dejémonos de hipocresías. La institucionalidad del agua tiene que cambiar. La salud de millones de peruanos está en juego. Una entidad pública autónoma, especializada, y meritocrática – tipo Banco Central de Reserva (BCR) – que no dependa de los ministros o alcaldes de turno. Eso es lo que se necesita. Los ministros y alcaldes cambian a cada rato. Y con ellos cambia – también – gran parte del personal de las EPS y JASS. Clientelismo político en su máxima expresión.

¡Qué se puede esperar de ello! Pues lo que tenemos ahora. ¡Millones de peruanos sin agua! O sea, millones de peruanos sin poder lavarse las manos. Lampadia




Ay SEDAPAL…

Ay SEDAPAL…

Carlos E. Gálvez Pinillos
Ex presidente de la SNMPE
Para Lampadia

En cualquier país civilizado del mundo que desee influir (educar) en el usuario respecto al consumo de agua o cualquier recurso escaso, se aplica reglas que induzcan al consumidor a tomar medidas correctivas.

Las medidas aplicables pasan por; precios escalonados que harían que el consumo en exceso pague un precio marginal alto que disuada a limitar el consumo. También es plausible el cobro de una tarifa por alcantarillado que te induzca a reusar el agua de los lavatorios y duchas para riego de jardines, por ejemplo, y con ello reducir la demanda de servicios de alcantarillado de la ciudad.

Por supuesto que, para poner en práctica estas reglas, la entidad prestadora de estos servicios está obligada a cumplir también reglas estrictas que eliminen malas prácticas y el abuso de su posición de dominio, tal como lo hace el monopolio de SEDAPAL.

En Lima, SEDAPAL ha instaurado la tarifa escalonada por consumo de agua: así, los primeros 20 m3 pagan S/ 1,499 por m3, los siguientes 30 m3 (de 20 a 50) pagan S/ 2,128 por m3 y el exceso sobre los 50 m3 paga S/ 5,438 por m3.  Y por alcantarillado, cobra sobre la misma gradualidad de volumen, S/ 935 por m3, S/1,309 y S/ 2,592 por m3.

Aquí tenemos que observar que la medición y oportunidad del volumen facturado es fundamental, pues los hábitos de uso de agua por ejemplo son normalmente muy estables y una variación en magnitudes importantes, resulta absurdamente anómalo y materia de autorregulación del proveedor del servicio. Lo grave es que una alta variación en el reporte de consumo y facturación, hace que pases de una tarifa regular de escalas menores, no facturada en un mes, a otra de castigo facturada al mes siguiente. Se ha verificado que, de un mes a otro, cambian el volumen facturable de 1 a 4 veces, que vuelve a reducirse al subsiguiente para multiplicarse nuevamente en los posteriores.

Adicionalmente debemos resaltar que, SEDAPAL no ha instalado medidores de flujo de desagüe para facturar el alcantarillado y la pregunta es: ¿Cómo adoptar una medida correctiva para minimizar el uso de alcantarillado y evitar que SEDAPAL esquilme a los usuarios por un servicio no usado?

En la ciudad de Lima no hay disponibilidad de agua de regadío para riego de jardines y consecuentemente se usa agua potable para este propósito, por lo tanto, si el volumen facturado por alcantarillado es el mismo que el de suministro, te están robando al cobrar por alcantarillado (servicio no brindado), hasta casi el doble del precio facturable por el agua que consumes, usada, insisto, en regar jardines.

En esencia, el regulador de SEDAPAL debe normar que las prácticas en las mediciones y aplicación de precios, permitan al usuario en su calidad de “agente económico racional”, adoptar medidas correctivas que le permitan optimizar sus decisiones económicas y que beneficie a la ciudadanía en su conjunto en la disponibilidad y uso de un recurso escaso como el agua y el sistema de alcantarillado.

Lo antes dicho debe forzar a esta entidad a evitar el abuso de su posición dominante de mercado, en su calidad de monopolio y rectificar sus malas prácticas.

Ay SEDAPAL, por qué te portarás tan mal! … y LA SUNASS, bien gracias. Lampadia




Decisiones políticas con consecuencias sociales y morales

Un niño que muere por diarrea, un adulto mayor que sufre una intoxicación, un barrio inundado, cortes diarios de agua, sobrecostos por compra de baldes de agua, escasez permanente, pérdidas de flujos de agua, perdidas de facturación; una larga lista de impactos sociales que no vienen del aire; vienen de malas decisiones que se toman con alegría y sin sentido moral.

Aguas servidas en San Juan de Lurigancho

Después de la desgracia de San Juan de Lurigancho, muchos dicen que es culpa de SEDAPAL. Pero eso no es correcto. Sus gerentes y trabajadores pueden ser más o menos responsables de lenidad, desidia y falta de capacidades; pero no son los principales responsables de las desgracias que trasuntan las primeras líneas de esta nota.

Los verdaderos responsables son los políticos que diseñaron y mantienen la empresa pública llamada SEDAPAL. Ellos tomaron la decisión de crear y mantener SEDAPAL y las demás EPS que a lo largo y ancho del país siembran desastre tras desastre.

Ellos, los políticos, son los responsables de haber tomados decisiones que se acomodaban a intereses políticos de corto plazo, confundiendo la popularidad, el populismo y la ideología, con decisiones de gobierno. Ellos tienen que asumir las consecuencias sociales y morales de los males que terminan imponiendo a una población inerme ante su gran irresponsabilidad.

Pero los políticos no son los únicos responsables de esta situación. También llevamos culpa en la sociedad en su conjunto, especialmente en la clase dirigente no política, por no combatir el error.

Hoy por hoy, de poco sirve ya, señalar responsables de las decisiones del pasado. Hoy tenemos que hacer responsables a los políticos que no corrijan esta barbaridad, sobre todo, siendo conscientes de que hay estructuras de servicio alternativas.

Veamos:

Una empresa privada, en una o más concesiones bien diseñadas, pueden ofrecer cobertura universal de agua y desagüe, servicio de agua las 24 horas, agua de buena calidad, y menores costos de servicio a los más afectados que hoy tienen que comprar el agua en baldes, mejor disposición de aguas servidas, y menos desperdicio del recurso; que SEDAPAL y todas las EPSs.

Un buen contrato de concesión establece ‘KPIs’ detallados o indicadores clave de rendimiento o performance, con los que se miden los alcances de la concesión en aspectos de inversión, mantenimiento y servicio. Según ellos se puede remunerar y castigar al concesionario. Además, por supuesto, en los contratos se incluyen las responsabilidades sobre todo tipo de contingencias. (KPI = key performance indicator).

En resumen, así como la calidad de servicio eléctrico y de telecomunicaciones cambió en el Perú, luego de las respectivas privatizaciones y concesiones, una concesión moderna puede ser muy específica en la fijación y monitoreo de los respectivos estándares.

Como con todas las trampas políticas que llevan a situaciones como las del servicio de agua y desagüe en el país, para salir de ellas solo hace falta liderazgo político. Un liderazgo que debe basarse en una comunicación efectiva a los ciudadanos de los pro y contra de de las estructuras alternativas del servicio público, así como el combate de ideas a los trasnochados que hasta ahora pululan sin ser contrastados.

Pero además del requisito de liderazgo, desde hoy, luego de las reiteradas desgracias producidas por el servicio de agua y desagüe en el Perú, tenemos que hacer responsables de cualquier nuevo evento y de la pésima calidad de servicio, a los políticos, en cuyas manos está cambiar la organización actual.

No reaccionar ahora, e iniciar la ruta de corrección de los defectos que nos impactan todos los días es, sin dudas, inmoral.

Hay responsables, señalémoslos. No más decisiones políticas con consecuencias sociales y morales. Lampadia




Las relaciones del Estado con los medios de comunicación

Las relaciones del Estado con los medios de comunicación

El proyecto de ley del congresista Mauricio Mulder (proyecto de ley N° 2133), que prohibiría a entidades del Estado contratar publicidad en medios privados, ha traído al debate las relaciones del Estado con los medios de comunicación. Esta iniciativa busca eliminar el uso de la herramienta publicitaria de manos del Estado, así sea para fines informativos. Una propuesta fuera de lugar, pero que permite revisar algunos procesos que sí pueden ser negativos para la salud de la democracia.

Para analizar este tema, debemos distinguir: por un lado, la publicidad y la comunicación del Estado, y la necesidad de evitar usos indebidos de la publicidad estatal, cómo el aprovechamiento político, patrimonialismo, y venta de sapos por culebras. Y por otro, la cooptación de periodistas y medios en las regiones con recursos del Estado.

Fuente: blogspot.com

Publicidad y comunicación

El objetivo del proyecto Mulder es prohibir “toda la publicidad en medios privados” y que, de hacerlo, “será considerada delito de malversación”. ¿Debe el Estado hacer publicidad? Para esto, debemos hacer una diferencia entre la publicidad y la comunicación en los medios de comunicación.

El Perú adolece de una gran falta de comunicación desde el Estado a la población en aspectos tan importantes como, iniciativas legislativas que tomen cierta posibilidad de transitar a convertirse en normas, o las razones que expliquen las iniciativas legislativas del Ejecutivo, etc.

El Estado debe usar sus medios de comunicación para comunicar a la opinión pública, las políticas y los avances que permitan tener ciudadanos bien informados.

El Estado, ya sea a través del gobierno nacional o de los gobiernos regionales y municipales, no debe privilegiar a determinados medios a cambio de favores políticos. Sin embargo, tampoco se le puede impedir al Estado que utilice los medios de información para hacer algo de publicidad, y, sobre todo, comunicación informativa.

Lo que no se debe hacer es utilizar publicidad pagada para encubrir a instituciones ineficientes, como las recientes campañas de Sedapal, EsSalud y el SUNEDU.

Algo que si debe prohibirse es el uso de trolls para atacar a opositores o crear líneas de opinión pública. Esta es una forma de interacción perversa con los ciudadanos, que no puede justificarse en ningún caso. Esto se refiere a aquellas personas dedicadas a emitir falsedades y a manipular los contenidos de las redes sociales, con el propósito de obstaculizar, bloquear, desvirtuar y opacar a personas o hechos; así como tergiversar el ambiente digital con información ambigua y no verificada con el fin de manipular a los ciudadanos según designios políticos.

Cooptación mediática

El peso del gasto que realiza el Estado y los gobiernos regionales y/o municipales en comunicación a través de medios impresos, radiales o televisivos en las regiones es aúnmás preponderante, por lo que debieran mejorarse los procesos de rendición de cuentas.

Además, hay que tomar en cuenta el uso de mecanismos escondidos de influencia en los medios, vía la contratación de servicios personales de periodistas y otros profesionales, que conllevan compromisos y acciones mediáticas subterráneas.

Regulación

No obstante, somos conscientes que no se puede esperar que la autorregulación funcione, y menos aun dentro del Estado mismo. Consiguientemente es necesario colocar frenos en la conducta del Estado para evitar excesos.

Para lograrlo, se debe establecer un tope para restringir la cantidad de publicidad que puede hacer el Estado con el presupuesto público y no debería sobrepasar un porcentaje determinado del pliego presupuestal correspondiente. Y tampoco, debería superar un cierto porcentaje de los ingresos un medio de comunicación en particular. Además, el gobierno podría hacer más transparente sus gastos de publicidad estatal (al igual que los medios podrían ser más transparentes con sus ingresos), para así dejarle la libertad a la población de usar su propio criterio sobre la validez de la información brindada. Lo mismo debería suceder con las asesorías y consultorías, como el número de asesorías de la PUCP en el MINEDU, entre otros ejemplos.

Sin embargo, el método más efectivo (y el más difícil de lograr) para evitar caer en estas manipulaciones es educar al público. Los medios tienen la obligación de ayudar al público a convertirse en consumidores más críticos de la información. La manipulación de los medios es uno de los mayores riesgos para todos nosotros, y nuestra labor es evitar que interfieran en la neutralidad de los espacios mediáticos. Lampadia




Agua para todos sí, pero en la tubería

Agua para todos sí, pero en la tubería

El Perú es el octavo país con más agua dulce del mundo. Además contamos con más de 200 cuencas hidrográficas, 70% de los glaciares tropicales del mundo, 1,000 ríos y 12,200 lagunas. Sin embargo gran parte de nuestra población no tiene un acceso adecuado a servicios de agua potable y saneamiento. Nuestra cobertura y calidad de este servicio deja muchísimo que desear. El servicio de abastecimiento se mide por horas y las pérdidas de agua (ya sean físicas o por facturación) son de aproximadamente 50%.

Fuente:  www.proagua.org.pe

¿Qué debemos hacer para tener agua todo el año? Fernando Cilloniz, en su reciente columna de opinión “En nombre del Agua…” propone reservorios. Para esto, han creado un proyecto denominado “La Hermandad del Agua” en el que se busca trasvasar aguas sobrantes de las cuencas atlánticas hacia las vertientes occidentales de nuestra cordillera, específicamente hacia Ica. esto ayudaría a marcar el camino a seguir para el sector de Agua y Saneamiento, la cual Cilloniz sintetiza como “mucho floro y ni una gota de agua almacenada”.

Uno de los motivos más importantes es que la mitad de las EPS en el Perú están en falencia financiera, por lo que no pueden brindar un servicio adecuado a la población, ni llegar a más peruanos que todavía carecen de agua y desagüe. Y la solución no es reflotarlas sin cambiar su estructura. Sin embargo, es importante resaltar que el plan del Ministro de Vivienda, Construcción y Saneamiento (MVCS), Edmer Trujillo, de reflotar las Empresas Prestadoras de Servicios (EPS) que no estén funcionando bien en el abastecimiento de agua potable a la población en provincias es simplemente una pérdida de recursos y tiempo. Es simplemente más de lo mismo.

La solución es clara. De la misma manera que se reestructuró el manejo de los servicios públicos de electricidad y comunicaciones (mediante las privatizaciones de los años 90) para lograr brindar una mejora sustancial de los servicios, ahora debemos despolitizar el manejo de las empresas, profesionalizar su gestión e involucrar, mediante APPs u otros mecanismos,  al sector privado en la operación de los servicios de agua y saneamiento.

Además, la operación de Sedapal es excesivamente ineficiente, la empresa estatal responsable de los servicios de agua potable y alcantarillado en Lima y las EPS en las regiones. Las malas instalaciones hacen que gran cantidad de habitantes sufran la escasez de este recurso. Existe una insuficiencia de cobertura y además la población peruana no tiene por qué ser víctima de insuficientes horas de servicios, baja presión de agua, agua no apta para el consumo humano, aniegos de aguas servidas y muchos otros factores que reflejan un mal servicio de saneamiento.

El diagnóstico del sector es el mismo que hace 23 años, según el propio ministro. Queda claro, entonces, que fue un error mantener el servicio de agua potable y alcantarillado en manos del Estado. Lo principal es el servicio de calidad para todos los peruanos, sin importar quién lo otorgue. Lo que es más, si el servicio estuviera en manos privadas, la fiscalización del estado sería más exigente y se podría asegurar un avance sustancial en calidad y cobertura. Ver en Lampadia: Cambiemos los paradigmas sobre el agua.

Como afirmó Jaime de Althaus en un reciente artículo para Lampadia (Ver: Agua Potable: Un servicio público menoscabado por la política), “el problema central de las EPS es que no son capaces de mantener adecuadamente las redes que manejan y menos aún de ampliarlas, porque tienen tarifas bajas o gastos de personal excesivos o mucha corrupción, y carecen de capacidad profesional para formular proyectos. Según la Sunass, las EPS no tienen proyectos ni proyectistas. La propia Sedapal sólo puede ejecutar 400 millones al año de los 650 millones que tiene disponibles.”

Como analiza el artículo del Banco Mundial, compartido líneas abajo, la actual oferta de productos de saneamiento es insuficiente y no satisface las necesidades reales de la gente, “9,7 millones de habitantes no tienen servicio de agua y saneamiento, respectivamente, de los cuales 60% reside en el ámbito rural en uno de los 73,500 centros poblados”. Asimismo detalla una serie de acciones que podrían ayudar a desarrollar el sector, como fortalecer el liderazgo del ente rector y su capacidad de coordinación, establecer una política de financiamiento y fortalecer la autonomía operativa y financiera de las EPS.

Entonces, ya no quedan excusas para evitar que Sedapal y las EPSs se conviertan en holdings de administración de concesiones privadas, debidamente fiscalizadas por todas las instancias correspondientes. Eso solucionaría los problemas de cobertura, calidad y precio. No hacerlo es irresponsable, ineficiente y va en contra de los intereses de todos los peruanos, especialmente de los más pobres. Lampadia

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PERÚ

Universalización de servicios de agua y saneamiento sostenibles

Una publicación del Banco Mundial

Notas de Política

Garantizar la disponibilidad de agua y saneamiento (A y S) sostenible para todos es uno de los principales motores de la salud pública y puede tener efectos profundos en el estado de nutrición de las mujeres y los niños. Asegurar la provisión de servicios confiables y eficientes contribuye al desarrollo y competitividad de diferentes sectores de la economía.

Si bien las coberturas de los servicios de A y S se incrementaron sustancialmente en los últimos años, la calidad y eficiencia de los servicios todavía no están acordes a los niveles esperados de un país de ingresos medios como el Perú, y requieren importantes mejoras para lograr servicios continuos de 24 horas diarias.

Atender los desafíos en A y S requiere importantes reformas institucionales, así como políticas públicas que introduzcan incentivos adecuados para el desarrollo progresivo y sostenido del sector.

Logros

Se incrementó la cobertura de A y S

Según el Programa de Monitoreo Conjunto de los Objetivos de Desarrollo del Milenio al 2015, el Perú alcanzó las metas de A y S.

Las coberturas de A y S entre los años 1999 y 2014 se incrementaron en 16% y 14% respectivamente, contribuyendo a reducir la pobreza en alrededor de un 25% y la tasa de Enfermedades Diarreicas Agudas (EDAs) en un 0,5%

La instalación de grandes Plantas de Tratamiento de Aguas Residuales

En el 2015, se produjo un importante aumento en el tratamiento de aguas residuales (TAR) como resulta- do de la puesta en marcha de dos grandes plantas de tratamiento de aguas residuales (PTARs) de Lima: Taboada y La Chira. Sin embargo, la cobertura y niveles de TAR en el resto del país son deficitarios, ya que 89 localidades administradas por empresas prestadoras de servicios de saneamiento (EPS) no cuentan con PTARs y las existentes operan deficientemente, descargando efluentes que contaminan los cursos de agua.

La introducción de un marco legal

El Perú ha logrado construir un marco institucional y regulatorio para gestionar el A y S en concordancia con buenas prácticas internacionales, diferenciando los principales roles: rector (Ministerio de Vivienda, Construcción  y Saneamiento-MVCS), regulador (SUNASS), prestadores (EPS) y el organismo  técnico especializado a cargo de cautelar la ejecución de la política del Estado en materia de prestación  de los servicios de saneamiento (OTASS). Sin embargo los desafíos del sector requieren mejorar la organización y capacidad de liderazgo del MVCS para la implementación de políticas y de coordinación.

Desafíos

  • Incrementar el acceso a A y S. Unos 3,8 y 9,7 millones de habitantes no tienen servicio de agua y sanea- miento, respectivamente, de los cuales 60% reside en el ámbito rural en uno de los 73 500 centros poblados. Asimismo, es necesario ampliar la cobertura del servicio de TAR en localidades urbanas.
  • Lograr la autonomía operativa y financiera de las EPS y la mejora de su gobernanza corporativa mediante la acción conjunta de SUNASS y OTASS. De igual manera, es vital profesionalizar los cuadros gerenciales y técnicos, eliminando las barreras a la posibilidad de ofrecer salarios competitivos
  • Mejorar la coordinación entre las instituciones  sectoriales y con los gobiernos locales y regionales a los efectos de alinear los incentivos de mejora del servicio.
  • Eliminar la discrecionalidad del financiamiento  y cofinanciamiento  de la inversión pública en A y S
     
  • Solucionar el alto nivel de endeudamiento de las EPS, principalmente  con el Fondo Nacional de Vivienda (FONAVI) y la Superintendencia Nacional de Administración  Tributaria (SUNAT).

¿Cómo avanzar?

1. Fortalecer el liderazgo del ente rector y su capacidad de coordinación

  • Revisar la organización interna, aclarar roles y responsabilidades, dotando a los organismos del sector de recursos y capacidad profesional para llevar adelante la transformación sectorial.

2. Establecer una política de financiamiento

  • Incluir tarifas  y subsidios eficientes,  y requisitos  de cofinanciamiento  que potencie  la asignación de los recursos presupuestales del gobierno nacional (MVCS)
  • Incorporar incentivos ligados a la mejora de la gestión, coberturas de A y S y TAR mediante programas por resultados.

3. Fortalecer autonomía operativa y financiera de EPS

  • Realizar un estudio organizacional de los entes nacionales, regionales y de las EPS
  • Mejorar la política de remuneraciones para el nivel nacional y de EPS y atraer profesionales con experiencia para implementar las políticas sectoriales
  • Desarrollar un programa nacional dirigido a EPS para alcanzar niveles de micro-medición al 100%
     
  • Establecer incentivos y mecanismos para promover la agregación de EPS.

4. Establecer la política de TAR y reutilización de efluentes

  • Revisar las normas de calidad correspondientes.

5. Formular políticas y programas de A y S para poblaciones rurales

  • Proveer de soluciones de saneamiento (tradicionales y no tradicionales) en el ámbito rural disperso.

6. Formular políticas y programas de A y S para poblaciones periurbanas

  • Desarrollar e implementar un programa con soluciones no convencionales para mejorar el acceso de la población en zonas periurbanas.

Este documento  se basa en el “Informe sobre la Situación actual y Perspectivas de Desarrollo del Sector de Agua y Saneamiento del Perú” (2016), preparado por el equipo de la Práctica Global de Agua, basado en los trabajos técnicos que viene desarrollando con el sector. Para más información contactar a Sandra Arzubiaga (511) 622 2339, sarzubiaga@worldbank.org

 

 




Banco Mundial rompe los mitos de saneamiento en el Perú

El Perú es uno de los diez países con mayor disponibilidad de recursos hídricos en el mundo, sin embargo gran parte de nuestra población no tiene un acceso adecuado a servicios de agua potable y saneamiento. Nuestra cobertura y calidad de este servicio deja muchísimo que desear. El servicio de abastecimiento se mide por horas y las pérdidas de agua (ya sean físicas o por facturación) son de aproximadamente 50%.

Uno de los motivos más importantes es que la mitad de las EPS en el Perú están en falencia financiera, por lo que no pueden brindar un servicio adecuado a la población, ni llegar a más peruanos que todavía carecen de agua y desagüe.

Además, la utilización del agua es excesivamente ineficiente por Sedapal, la empresa estatal responsable de los servicios de agua potable y alcantarillado en Lima y las EPS en las regiones. Las malas instalaciones hacen que gran cantidad de habitantes sufran la escasez de este recurso. Existe una insuficiencia de cobertura y además la población peruana no tiene por qué ser víctima de insuficientes horas de servicios, baja presión de agua, agua no apta para el consumo humano, aniegos de aguas servidas y muchos otros factores que reflejan un mal servicio de saneamiento.

El gran problema es que el diagnóstico del sector es el mismo que hace 23 años, según el propio ministro. Queda claro, entonces, que fue un error mantener el servicio de agua potable y alcantarillado en manos del Estado. Lo principal es el servicio de calidad para todos los peruanos, sin importar quién lo otorgue. Lo que es más, si el servicio estuviera en manos privadas, la fiscalización del estado sería más exigente y se podría asegurar un avance sustancial en calidad y cobertura. Ver en Lampadia: Cambiemos los paradigmas sobre el agua.

Como afirmó Jaime de Althaus en un reciente artículo para Lampadia (Ver: Agua Potable: Un servicio público menoscabado por la política), “el problema central de las EPS es que no son capaces de mantener adecuadamente las redes que manejan y menos aún de ampliarlas, porque tienen tarifas bajas o gastos de personal excesivos o mucha corrupción, y carecen de capacidad profesional para formular proyectos. Según la Sunass, las EPS no tienen proyectos ni proyectistas. La propia Sedapal sólo puede ejecutar 400 millones al año de los 650 millones que tiene disponibles.”

Como analiza el artículo del Banco Mundial, compartido líneas abajo, la actual oferta de productos de saneamiento es insuficiente y no satisface las necesidades reales de la gente, y este sector sí ofrece condiciones atractivas para alianzas público privadas. Entonces, ya no quedan excusas para evitar que Sedapal y las EPSs se conviertan en holdings de administración de concesiones privadas, debidamente fiscalizadas por todas las instancias correspondientes. Eso solucionaría los problemas de cobertura, calidad y precio. No hacerlo es irresponsable, ineficiente y va en contra de los intereses de todos los peruanos, especialmente de los más pobres. Lampadia

El negocio del saneamiento en el Perú

Por el Banco Mundial
16 de diciembre de 2015
Glosado por Lampadia

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Actualmente, 3 de cada 10 peruanos aún no tienen un inodoro. Pero, si hay un mercado tan amplio para el saneamiento, ¿qué impide a los empresarios invertir en el sector?
Fuente: Banco Mundial

Un reciente estudio del Banco Mundial revela que más de 2 millones de viviendas del país necesitan instalaciones para acceder a servicios de agua y desagüe. ¿Es un mercado atractivo para los empresarios e inversionistas?

Durante toda su vida, usted hará uso, varias veces, de una de las invenciones más útiles de la historia: el inodoro. Lamentablemente, ese momento tan privado y tan necesario para los seres humanos no forma parte de la vida de todos nosotros. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, aún unas 2,600 millones de personas en el planeta carecen de acceso a instalaciones de saneamiento básico.

En el Perú, uno de los países que más ha crecido económicamente durante los últimos años,  la situación no es diferente. 3 de cada 10 personas aún no tienen un inodoro. Y en las zonas rurales, sólo el 53% del país cuenta con acceso a saneamiento, ubicándolo entre los más bajos de América Latina y limitando su desarrollo debido, principalmente a las enfermedades producidas por huecos en la arena, letrinas improvisadas y pozos sépticos, es decir, por falta de saneamiento.

Pero, si hay un mercado tan amplio para el saneamiento, ¿qué impide a los empresarios invertir en el sector? 

Los 5 grandes mitos del mercado de saneamiento

El recientemente publicado estudio del Banco Mundial: “Mitos y Realidades sobre el mercado de saneamiento en el Perú” enumera cuales son los principales problemas a los que se enfrenta el mercado de saneamiento en el país.

Mito 1:       El Mercado de saneamiento es pequeño.
Realidad:   Atender el mercado de saneamiento podría generar ventas por más de 2 mil millones de soles en el 2015.

Mito 2:       El mercado para el saneamiento es geográficamente inaccesible.
Realidad:   La mayoría de potenciales clientes se concentra en áreas urbanas.

Mito 3:       Los pobres no quieren ni pueden comprar baños.
Realidad:   Las personas están dispuestas a comprar si se le ofrece la oportunidad.

Mito 4:       El mercado de saneamiento tiene suficientes ofertantes y productos.
Realidad:   La actual oferta de productos es insuficiente y no satisface las necesidades reales de la gente.

Mito 5:       Las políticas públicas no promueven la inversión privada en el mercado de saneamiento.
Realidad:   El saneamiento ofrece condiciones atractivas para las alianzas público privadas.

“En el Perú no existe una cadena articulada para la prestación de servicios de saneamiento, lo que limita ofrecer servicios empaquetados. Esto genera otra oportunidad para que los empresarios puedan articularse con los diferentes grupos de interés de la cadena para abastecer a los pobres y pobres extremos con alternativas de baños y soluciones acordes a sus posibilidades”, menciona el informe.

“Al finalizar el informe, el lector podrá concluir que dotar de un baño no solo representa un enorme beneficio para las familias que no lo tienen, sino también para quienes buscan iniciar emprendimientos rentables en un sector que por tanto tiempo ha sido ignorado por los empresarios” agrega. 

Avances

El Gobierno de Perú, con el apoyo del Banco Mundial, ha logrado importantes progresos en el tema de saneamiento. Gracias a estas inversiones, el acceso a saneamiento, desde 1990, ha crecido 39% en el área rural y 12% en el área urbana, dónde se concentra casi el 80% de la población nacional.

Los resultados de este estudio fueron determinantes para convocar al sector privado e impulsar la iniciativa MiBaño, fundada por el Banco Mundial y encabezada por la Sociedad Nacional de Industrias del Perú. Este proyecto promueve el saneamiento en todo el Perú a través de baños prefabricados y completos que se pueden comprar listos para usar.

Tener un baño significa menos contaminación ambiental y menos focos infecciosos causantes de diarreas, desnutrición u otras enfermedades, principalmente en los más pequeños. Con estos y otros proyectos esperamos que más peruanos podrán acceder a un baño digno en sus hogares.

Lampadia




La politiquería y el Estado sabotean los servicios de agua

La politiquería y el Estado sabotean los servicios de agua

Ya anteriormente hemos reportado sobre las escandalosas deficiencias de los servicios de agua y desagüe en el país, especialmente en lo vinculado a Sedapal. Ver en Lampadia: Agua Potable: Un servicio público menoscabado por la política, Cambiemos los paradigmas sobre el agua y Superemos los mitos sobre el agua. En esta ocasión presentamos el informe del ex Ministro de Vivienda, Construcción y Saneamiento, Milton von Hesse, ‘Las Empresas Prestadoras de Servicios de Saneamiento’ en el evento organizado por AFIN el 13 de octubre pasado.

Ver el informe completo y las conclusiones del evento por su presidente, Gonzalo Prialé en nuestra sección ‘Documentos’: EPSs y Afin-Agua.

Como puede verse en la siguientes láminas, las cifras sobre los servicios de las EPSs muestran pobrísimos estándares de servicio: Cobertura de agua y desagüe insuficientes; discontinuidad de la provisión de agua de no más de 21.9 horas por día en Lima y un promedio de 16 horas en las regiones y; 36% de pérdida de facturación del agua producida (de 29% a 42% según la empresa).

 

 

 

Todos estos pésimos indicadores, que von Hesse califica además como no confiables, se deben fundamentalmente a la estructura de gestión de las empresas, una empresa pública sin controles en Lima y las EPSs en las regiones, controladas por los municipios.

Dada esta realidad, es inexplicable y sorprendente que el gobierno de PPK esté disponiendo reflotar financieramente estas empresas y dotarlas de recursos de inversión, sin corregir previamente la falta de profesionalismo y probidad con la que se manejan estas organizaciones, que en ningún otro país podrían llamarse empresas. Estas son, de alguna manera, una suerte de haciendas privativas de toda suerte de mafias.

Por ejemplo, en el mismo evento, Fernando Cilloniz, el Gobernador de la Región Ica informó, que teniendo la región la facultad de nombrar un Director de la EPS de Ica, su incorporación al directorio no se puede hacer efectiva, porque simple y llanamente, el directorio anterior no le da pase. Un grupo de mafiosos se han apoderado de la EPS y no pasa nada. Encima se piensa darles más recursos. Otro escándalo, oportunamente reportado por von Hesse mientras ejercía el cargo de ministro, es la ‘facultad’ de dar en herencia los cargos, que tienen algunos funcionarios de Sedapal. 

Es evidente que esto no puede continuar. Milton von Hesse propone las siguientes alternativas de solución: Desarrollar inicialmente contratos de gestión, puesto que la calidad de la información sobre las empresas es imposible de determinar y, una vez que se tenga una mejor apreciación sobre la situación de las empresas, hacer concesiones, APPs u OXIs (Obras por Impuestos), descartando eventuales privatizaciones por ser políticamente complicadas e innecesarias para corregir las deficiencias de los servicios.

Por su lado, el presidente de AFIN, Gonzalo Prialé, indicó que teniendo las necesidades que tenemos, durante los últimos cinco años (Humala), solo se ejecutaron 57% de los montos transferidos para obras en las EPSs. Según Prialé las EPSs pierden o no cobran el 75% del agua que distribuyen, y Sedapal el 40%. Esto determina un amplio margen de maniobra para la mejora de los servicios por aumento de productividad, sin la necesidad de eventuales aumentos de tarifas en otras estructuras empresariales.

Según AFIN, se debería establecer un objetivo concreto y ambicioso (que hacemos nuestro) para transformar esta realidad: “Cerrar la brecha quiere decir, brindar al 2025, 24 horas de agua con desagüe, a tarifas razonables, en todos los hogares del Perú”. Lampadia

 




Sedapal: Otro monstruo sin control

Sedapal: Otro monstruo sin control

Al igual que Petroperú, Sedapal goza de privilegios abusivos e indebidos, como no reportar al Fonafe, el holding que agrupa las empresas del Estado. Pero ojalá fuera solo eso, Sedapal tiene un grupo de trabajadores que pueden dejar en herencias sus puestos. Entre desperdicios de agua y facturación pierden cerca del 40% del agua que producen. No cubren a toda la población; muchos tienen un servicio por horas y otros, los más pobres, se ven precisados a comprar el agua en baldes a un costo 12 veces mayor del que pagan los más pudientes.

Con estos resultados, nadie se imaginaría que, gobierno tras gobierno, se vaya renunciando a implantar un profundo cambio que remedie todos estos desastres.

Batalla ecológica en playa Arica: así luce el balneario [FOTOS]

Hoy comentamos otro caso clamoroso, que solo una empresa muy poderosa puede darse el lujo de manejar sin la menor vergüenza.

Resulta que la empresa estatal ha perdido un caso contencioso con unos supuestos invasores que han tomado control de instalaciones esenciales para mantener un mínimo de servicio. Más allá del caso, esto era previsible y se debió buscar una solución efectiva.

Pero esta empresa poderosa decidió tirar los desagües a la playa y dar dos horas de plazo a las industrias de la zona para que suspendan sus actividades empresariales en forma indefinida. Tal cual. ¿Parece chiste o ciencia ficción?

El gobierno de PPK espera llamarse el ‘gobierno del agua’. Señor presidente, esto no da más. Es el momento de actuar para que el agua llegue a los pobres y cortar la ineficiencia, el abuso y la prepotencia de una empresa que debiera pasar a la lista de malos recuerdos.

Líneas abajo publicamos el reporte de un operador industrial y la carta notarial de Sedapal indicando el corte del servicio. Además, publicamos también el artículo de El Comercio del 5 de octubre pasado que presenta el suceso a la ciudadanía y un video sobre los sucedido hoy en Lurin:

1. Comunicación empresarial

Estimado …

SEDAPAL ha perdido a manos de un invasor conocido de la zona,  la posesión de la PTAR nuevo Lurín y ha declarado emergencia sanitaria y ambiental;  al no poder operar las lagunas empezaron a desaguar en playa Arica lo que les generó un problema con la municipalidad, los vecinos etc., llegó la prensa y televisión, pésimo manejo.

Este Sábado 01 de Octubre  por carta notarial (adjunta)  han exigido al Centro Industrial Las Praderas de Lurín, suspender el envío de sus efluentes en un plazo de 2 horas, o sea amenazan a las empresas en lugar de retirar a los mafiosos de sus instalaciones y retomar el control y la operación de la laguna de oxidación.

No hay donde echar los desagües de 1,200 empleados y de 36 industrias, 18 de las cuales están en el Centro Industrial y  que descargan sus efluentes industriales en esa laguna desde hace 19 años.

Las empresas no pueden dejar de producir, ni las personas dejar de usar los servicios.

SEDAPAL debe restituir la posesión y manejo de la laguna inmediatamente para evitar un desastre ambiental ya que los desagües serán tirados a las pistas de la zona y no pretender evadir su responsabilidad e ineficiencia echándole la culpa a las empresas del posible daño ambiental que esto puede generar.

Deben usar todo el poder que les faculta la ley para desalojar a estos invasores que con autorización judicial, que pareciera amañada, están en posesión de la laguna, al  ser este servicio de necesidad pública deberían procesar a los usurpadores y no amenazar a las empresas, tengo la impresión que puede existir un tema de corrupción judicial y por supuesto ineficiencia total de SEDAPAL.

Gracias adelantadas por tu atención a la presente.

Saludos

‘Locatario industrial’

2. Carta notarial de Sedapal cortando los servicios

3. Artículo de El Comercio

Batalla ecológica en playa Arica: así luce el balneario

Pamela Sandoval Del Águila

El Comercio, 05 de octubre de 2016

Glosado por Lampadia

Milko Cortez despierta cada mañana con el hedor de huevos podridos, heces y restos en descomposición que se infiltra por la ventana de su casa, en la playa Arica de Lurín. Su vivienda es una de las 240 del balneario afectadas desde hace 12 días por la apertura de una línea de rebose de aguas negras, desviadas desde la planta de tratamiento de Nuevo Lurín.

“Además del mal olor, hay vecinos que se quejan de problemas estomacales. Necesitamos una solución cuanto antes, pues si el vertimiento continúa hasta diciembre tendremos a 5,000 veraneantes expuestos a la contaminación”, observó José Arakaki, alcalde de Lurín. 

Como informó El Comercio hace una semana, una disputa entre el Servicio de Agua Potable y Alcantarillado de Lima (Sedapal) y la Asociación Agropecuaria Súmac Pacha –donde queda la planta de tratamiento– impide que el primero administre la estructura y que las aguas residuales sean bombeadas desde las lagunas de oxidación hacia la planta de San Bartolo. Ambos aducen ser dueños de los 67.000 m2 de la planta, inscrita en los Registros Públicos a nombre de Sedapal. “El 23 de setiembre nos enteramos de que Súmac Pacha había obtenido una medida cautelar de la Primera Sala Civil de la Corte Superior, que nos impide entrar a la planta”, explicó Antonio Angulo, de Asuntos Legales y Regulación de la empresa pública.

Ante el temor de que las lagunas colapsen, pues los desagües del distrito –60% industriales y 40% domésticos– continúan llegando a la planta de Nuevo Lurín, Sedapal optó por activar la línea de rebose, que vierte 1 m3 por segundo al mar. Es decir, la playa Arica ha recibido más de 15.840 m3 de aguas negras sin tratar, el equivalente a seis piscinas olímpicas.

“A nadie le gusta que se viertan aguas residuales, ¿pero dónde las prefieren? ¿En las calles, corriendo como ríos, porque ha habido una afectación por culpa de terceros?”, agregó Angulo, quien espera tramitar mañana una medida cautelar ante el Poder Judicial para recuperar el control de la planta.

 La medida se ampara en una denuncia por delito ambiental contra Súmac Pacha, que cuenta con un reporte que constata el daño, realizado por el Ministerio Público el 30 de setiembre pasado.

Mientras tanto, aprovechando el reemplazo de 1.5 km de redes de desagüe, Sedapal inició la construcción de un ‘by-pass’ para enviar aguas negras de Nueva Lurín a San Bartolo, sin entrar a playa Arica. La infraestructura estaría lista en tres meses, por lo que la vía judicial subsiste como la salida más rápida al problema.

Augusto Nishimura, de Servicios a la Ciudadanía y Gestión Ambiental de Lurín, informó que la comuna también ha denunciado a Súmac Pacha. El funcionario lamentó que Sedapal no haya contemplado un plan alterno como el ‘by-pass’ con anticipación. “Según nuestras mediciones, hay 200 km de litoral afectado. El daño alcanzaría a las playas San Pedro y Los Pulpos”, dijo.

Voceros de la Autoridad Nacional del Agua (ANA), a cargo de medir el impacto de la contaminación de este tipo, precisaron que hoy informarán sobre este caso.

—Otras afectaciones—

Diosdado Navarro, dirigente de Súmac Pacha, precisó que, aunque el hedor y el riesgo de desborde también los amenaza, no desistirán de su propósito de recuperar la propiedad del terreno de la planta. “Hace 18 años, Sedapal registró el área pese a que la asociación es dueña. Ellos tienen espacio libre en el km 40 de la Panamericana Sur, pero optan por arrojar el desagüe a la playa porque no les interesa eso, sino la propiedad”, dijo Navarro, quien según funcionarios edilicios y los de Sedapal es sospechoso de tráfico de tierras.

Además de los vecinos, este problema también afecta al Parque Industrial de Lurín, donde 18 de las 36 empresas agremiadas ya han reducido su producción por falta de acceso al desagüe.

4. Video

Compartimos un video sobre el aniego que se causó por el desborde de las lagunas de oxidación en Lurín: 

Lampadia

 




El agua es abundante en el Perú

Solo el 2.5% del agua del mundo es consumible. Esta se encuentra en ríos, lagunas, nevados, entre otros. A medida que crece la demanda de agua, las ciudades se ven obligadas a depender de fuentes que se encuentran más alejadas de las ciudades y que son más caras de aprovechar.

Fuente: Mineriaconfuturo

En este contexto, Latinoamérica tiene una gran ventaja, pues cuenta con la mayor cantidad de agua dulce en el mundo. Según el Global Water Partnership, casi un cuarto de los recursos hídricos renovables están en Sudamérica. En el listado de los países que cuentan con la mayor cantidad de agua, tres países latinoamericanos están entre los 10 primeros: Brasil (primero), Colombia (sexto) y Perú (octavo).

El Perú tiene la mayor disponibilidad per cápita de agua dulce renovable en América Latina. Cuenta con 159 cuencas hidrográficas, más de 3,000 glaciares, 12,200 lagunas en la sierra y más de 1,007 ríos. Tiene tres vertientes hidrográficas: la del Atlántico (genera 97.7% de los recursos hídricos), la vertiente del Pacífico (1.8% de los recursos hídricos) y la vertiente del Titicaca (el restante 0.5%).

Sin embargo, la utilización del agua es excesivamente ineficiente por Sedapal, la empresa estatal responsable de los servicios de agua potable y alcantarillado y las EPS. Las malas instalaciones y el malgasto que realizan de ella quienes tienen mayores ingresos, hacen que gran cantidad de habitantes sufran la escasez de este recurso. Existe una insuficiencia de cobertura y además la población peruana no tiene por qué ser víctima de insuficientes horas de servicios, baja presión de agua, agua no apta para el consumo humano, aniegos de aguas servidas y muchos otros factores que reflejan un mal servicio de saneamiento.

Fuente: Peru21

Las carencias varían dependiendo del sector. Por ejemplo, el sector agricultura, que es el que tiene una mayor demanda hídrica (88.7%), la eficiencia de uso es de tan solo 30% a 35% y existen 300,000 hectáreas de tierras con problemas de salinidad y drenaje. Además, las tarifas de agua no cubren los costos de operación y mantenimiento y existe una gran deficiencia de infraestructura hidráulica. Según la FAO, el Perú está entre los países de América Latina que más agua utiliza para agricultura y ganadería. Ver gráfico inferior:

Por otro lado, el uso doméstico abarca el 7% de la disponibilidad nacional, teniendo una eficiencia de uso de tan solo 45% – 50% (se estima que un tercio del agua se pierde en conducciones. El uso industrial llega al 6% y el minero no supera el 2%.

Además, actualmente los promedios regionales y nacionales ocultan grandes desigualdades. El 86.1% de habitantes a nivel nacional tienen servicio de agua potable. Sin embargo, la cobertura de agua potable urbana es del 93.4% y la cobertura rural solo alcanza el 63.2% (según la Encuesta Nacional de Programas Estratégicos INEI). Esto significa que 9 de cada 10 peruanos acceden al servicio de agua potable en el ámbito urbano y 6 de cada 10 peruanos acceden a agua potable en el ámbito rural.

El gran problema es que el diagnóstico del sector es el mismo que hace 23 años, según el propio ministro. Queda claro, entonces, que fue un error mantener el servicio de agua potable y alcantarillado en manos del Estado. Lo principal es el servicio de calidad para todos los peruanos, sin importar quién lo otorgue. Lo que es más, si el servicio estuviera en manos privadas, la fiscalización del estado sería más exigente y se podría asegurar un avance sustancial en calidad y cobertura. Ver en Lampadia: Cambiemos los paradigmas sobre el agua.

Daños en la Bocatoma de la planta de agua potable de Huachipa

Como afirmó Jaime de Althaus en un reciente artículo para Lampadia (Ver: Agua Potable: Un servicio público menoscabado por la política), “el problema central de las EPS es que no son capaces de mantener adecuadamente las redes que manejan y menos aún de ampliarlas, porque tienen tarifas bajas o gastos de personal excesivos o mucha corrupción, y carecen de capacidad profesional para formular proyectos. Según la Sunass, las EPS no tienen proyectos ni proyectistas. La propia Sedapal sólo puede ejecutar 400 millones al año de los 650 millones que tiene disponibles.”

Entonces, si no se quiere privatizar por razones ideológicas, por lo menos convirtamos a Sedapal y las EPSs en un holdings de administración de concesiones privadas, debidamente fiscalizadas por todas las instancias correspondientes. Eso solucionaría los problemas de cobertura, calidad y precio. No hacerlo es irresponsable, ineficiente y va en contra de los intereses de todos los peruanos. 

Lampadia




Cambiemos los paradigmas sobre el agua

Cambiemos los paradigmas sobre el agua

El servicio público más importante en cualquier país es el de agua y desagüe. En el Perú, la cobertura y calidad de este servicio deja muchísimo que desear. El servicio de abastecimiento se mide por horas, cuando ya debería ser todo el día, y las pérdidas de agua (ya sean físicas o por facturación) son de aproximadamente 50%. Además, la mitad de las EPS en el Perú están en falencia financiera, por lo que no pueden brindar un servicio adecuado a la población, ni llegar a más peruanos que todavía carecen de agua y desagüe.

La causa de los problemas en agua y saneamiento no es la escasez del recurso: como ya hemos mencionado en Lampadia (Ver: Superemos los mitos sobre el agua), el Perú cuenta con vastos recursos hídricos, ya que somos el octavo país con más agua dulce del planeta. El problema está en el mal manejo que desde hace varios años vienen llevando acabo las empresas prestadoras de servicios (EPS). Lamentablemente, en nuestro país no sabemos aprovechar el recurso, pues no cosechamos el agua, ya sea en grandes represas o reservorios menores y familiares. Tampoco trasvasamos el agua que perdemos hacia el Atlántico para su uso social y productivo en la costa árida del Perú. 

En el país los servicios de saneamiento siguen en manos del Estado, con resistencia a desarrollar APPs y su manejo sigue distorsionado por el enfoque político de sus gestores. Por ejemplo, el ex Ministro de Vivienda, Milton von Hesse, indicó que en Sedapal (la operadora del servicio en Lima), existían dos mil puestos que los ‘trabajadores’ podían heredar a sus familiares.

Evidentemente, hay un gran problema con las EPS (las empresas dirigidas por los municipios que prestan de servicios en las regiones). El mismo ministro de Vivienda, Construcción y Saneamiento (MVCS), Edmer Trujillo, lo reconoció en una reciente entrevista en Gestión, admitiendo el mal estado en el que están las EPS en el país, y aseguró que este Gobierno trabajará en conjunto con ellas para poder reactivarlas. El plan del ministro es reflotar las Empresas Prestadoras de Servicios (EPS) que no estén funcionando bien en el abastecimiento de agua potable a la población en provincias. Esto es simplemente más de lo mismo. Como dijo Albert Einstein, “si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo”.

La solución es clara. De la misma manera que se reestructuró el manejo de los servicios públicos de electricidad y comunicaciones (mediante las privatizaciones de los años 90) para lograr brindar una mejora sustancial de los servicios, ahora debemos despolitizar el manejo de las empresas, profesionalizar su gestión e involucrar, mediante APPs u otros mecanismos,  al sector privado en la operación de los servicios de agua y saneamiento.

El diagnóstico del sector es el mismo que hace 23 años, según el propio ministro. Queda claro, entonces, que fue un error mantener el servicio de agua potable y alcantarillado en manos del Estado. Lo principal es el servicio de calidad para todos los peruanos, sin importar quién lo otorgue. Lo que es más, si el servicio estuviera en manos privadas, la fiscalización del estado sería más exigente y se podría asegurar un avance sustancial en calidad y cobertura.

Como afirmó Jaime de Althaus en un reciente artículo para Lampadia (Ver: Agua Potable: Un servicio público menoscabado por la política), “el problema central de las EPS es que no son capaces de mantener adecuadamente las redes que manejan y menos aún de ampliarlas, porque tienen tarifas bajas o gastos de personal excesivos o mucha corrupción, y carecen de capacidad profesional para formular proyectos. Según la Sunass, las EPS no tienen proyectos ni proyectistas. La propia Sedapal sólo puede ejecutar 400 millones al año de los 650 millones que tiene disponibles.”

Como resultado, las EPS han terminado en manos de grupos que no buscan el beneficio de los ciudadanos. Esto queda al descubierto en la cantidad de horas al día en las que hay agua potable en las viviendas atendidas por las EPS. Salvo Sedapal, donde el promedio de horas al día sería de 21.9, en las viviendas atendidas por las demás EPS tienen un promedio de horas de agua de alrededor de 16. Y, como podemos ver en el gráfico superior, hay 10 EPS en las que la cantidad de horas diarias está por debajo de 12.

No podemos dejar de notar que en el mejor caso, el de Sedapal, el promedio de horas de servicio esconde casos inaceptables de calidad del mismo. Esto, además de las zonas donde la población más pobre tiene que pagar por el agua en baldes 10 y 12 veces más que el costo del servicio residencial en las zonas de mayores ingresos.

Daños en la Bocatoma de la planta de agua potable de Huachipa

Todos estos elementos deberían ser suficientes para que las autoridades puedan plantear a la población, cambios sustanciales en la estructura de gestión de las empresas, pero los mitos, los paradigmas anti empresa privada y una patética escala de valores, donde se privilegia la política antes que la oferta de un servicio social básico, lo siguen impidiendo.

Intentar reflotar las EPS con la inyección de recursos públicos no es más que un efímero esfuerzo, que terminará evaporándose sin que se logre ninguna mejora estructural. Lo que se debe hacer es emprender una profunda reforma que permita el ingreso de inversión privada a este sector, para que así se logre plantear una estrategia de inversiones y financiamiento eficientes, al igual que la adecuada supervisión de Estado.

Hasta ahora, la politiquería anti sector privado, no ha permitido que se entienda que la combinación ‘sector privado y supervisión pública’ es largamente superior a la gestión pública que nadie controla y que cada cierto tiempo recibe recursos del Estado, para volverlos a mal usar

Esta magnífica combinación es la única manera de financiar eficientemente, los 53 mil millones de soles que se requieren para cerrar la brecha de infraestructura de saneamiento que existe actualmente (según Milton Von Hesse) y así llegar a la meta del Plan Nacional de Inversiones para el Bicentenario (2021). 

Lamentablemente, en sus primeras declaraciones, el nuevo Ministro de Vivienda ha mantenido el perverso paradigma de ‘fortalecer y evaporar’ los recursos públicos en esquemas que no ofrecen soluciones sostenibles. Además, el Presidente de la República, Pedro Pablo Kuczynski,  como candidato, firmó un acuerdo con el sindicato de Sedapal, por el que se comprometió a “no concesionar Sedapal ni las Entidades Prestadoras de Servicios de Saneamiento (EPS)”.

El servicio de agua y desagüe en el Perú es el tema social más importante y, lamentablemente, está siendo tratado como un tema político. Es necesario cambiar de paradigmas para lograr una reforma que cause un impacto positivo en nuestros ciudadanos y así no perdamos más lustros ni sigamos malogrando la salud de tantos peruanos ¡Nobleza Obliga Presidente! 

Lampadia




Acceso al agua: Algo que tratamos con mucha hipocresía

Acceso al agua: Algo que tratamos con mucha hipocresía

Hace unos veinte días publicamos una nota en la que decíamos: Agua Potable: Un servicio público menoscabado por la política. Con respecto a ella y en base a algunos de los comentarios que hemos recibido en nuestro Facebook, podemos comprobar cómo se han grabado con fuego algunos mitos que responden a ideas políticas (ideas muertas) que actúan como lentes oscuros e impiden poner las cosas importantes por delante. Explicamos como fue que los servicios de saneamiento no siguieron la suerte de los servicios eléctricos y de comunicaciones.

Después de haberse reestructurado el manejo de los servicios públicos de electricidad y comunicaciones, mediante las privatizaciones de los años 90, que permitieron una mejora sustancial de los servicios y el empoderamiento del Estado como el regulador de la actividad privada, hace prácticamente 20 años el país optó por mantener el servicio de agua potable y alcantarillado en manos del Estado.

Desde entonces, la politiquería ha ido solidificando un statu quo, a todas luces negativo: que impide a los ciudadanos el acceso a un servicio de calidad  y castiga a los más pobres a pagar por el agua hasta 15 veces más que las clases más acomodadas, que genera inmensas pérdidas de recursos públicos por inversiones inefectivas y; que permite la presencia de mafias corruptas que medran alrededor de las limitaciones de los pobres.

Peor aún, para evitar la participación del sector privado (esa suerte de ‘fuerza de ocupación extranjera’) en los servicios de agua se salió del apuro entregando el manejo de las empresas públicas en todo el país a los municipios, con lo cual los mitos previos ocuparon el estatus de una suerte de ‘sustento constitucional’ contra los que ni siquiera era conveniente declarar.

Daños en la Bocatoma de la planta de agua de Huachipa

En el caso de Lima, se creó el monstruo de Sedapal, una ‘empresa’ en donde según el Primer Ministro Cateriano, hay unos dos mil puestos de trabajo que tienen el derecho a heredarse a los hijos, por pacto sindical. Un pacto de ‘lesas legitimidad’ que debiera contarse de seco acusando penalmente a los que lo firmaron por la empresa y el sindicato, que establecieron un pacto contra el interés de los ciudadanos en su condición de ‘servidores públicos’.

En la nota referida señalamos varios casos de inversiones fallidas en Sedapal, así como sugerencias de cómo enfrentar las soluciones que podrían sacarnos de este atentado contra los pobres. En la misma fecha publicamos otra nota que aportaba recomendaciones adicionales, ver:  Una solución práctica para aliviar la escasez de agua.

Ahora publicamos líneas abajo, una nota publicada en El País de España, que habla de las limitaciones de estos servicios en la región y enfatiza como, en un país con tanta agua como el Perú, seguimos sin acceso universal y además, algo muy importante, que se quiere esconder debajo de las alfombras, los servicios que no ofrecen agua por 24 horas diarias.

Esperamos que el nuevo gobierno sea capaz de asumir el liderazgo necesario para que podamos enfrentar el reto de reconvertir el esquema actual, especialmente, tratándose del ‘pet project’ del propio PPK. Esfuerzos que tendremos que apoyar ilustrando a la opinión pública sobre los verdaderos análisis costo-beneficio a considerar.

TERMÓMETRO ECONÓMICO Y SOCIAL DE AMÉRICA LATINA

En la región con más agua, millones no tienen baño

Julio César Casma

El País Internacional

9 de Julio 2016

Glosado por Lampadia

 

91% del mundo tiene acceso a agua, pero 1.800 millones utilizan una fuente que está contaminada con materia fecal

La fórmula del problema es bastante simple: a más gente, mayor demanda de agua, pero las fuentes de suministro no aumentan tanto como las personas que la necesitan. Si bien el número de familias que accede a una fuente de agua ha aumentado en los últimos años, llegando al 91% para 2015, aún 663 millones de personas en todo el mundo, siguen esperando por agua limpia y barata para todos.

Las ciudades y la agricultura son las que más contribuyen al problema. La alta concentración de fábricas e industrias, los sistemas de transporte y edificios que requieren gran cantidad de energía podrían influir en una posible crisis de agua en el futuro. Además, aproximadamente el 70% del agua extraída de los ríos, lagos y acuíferos se utiliza para el riego.

El problema no queda ahí. Aun cuando tres cuartas partes del mundo están cubiertas de agua, sólo el 2% es dulce, y de acuerdo a Naciones Unidas, al menos 1,800 millones de personas en el mundo utilizan una fuente de agua potable que está contaminada con materia fecal y cada día cerca de 1,000 niños mueren a causa de enfermedades diarreicas prevenibles relacionadas con el agua y el saneamiento.

Entregar agua limpia y asequible para todos es un desafío con varios peldaños. El cambio climático, la gestión del agua, la escasez y la calidad del agua son temas claves para empezar a solucionar el problema.

Tenemos agua, pero no todo el día.

EL Objetivo de Desarrollo Sostenible 6 reconoce que tener agua de forma sostenible va más allá de sólo proporcionar un suministro de agua potable y un adecuado saneamiento. Contar con ambos elementos implica mejoras para el medio ambiente, la salud, la seguridad alimentaria, la capacidad de recuperación frente a desastres e incluso el crecimiento económico de un país.

Actualmente, más del 91% de la población tiene acceso a una fuente mejorada de agua, superando la meta del Objetivo de Desarrollo del Milenio (ODS) del 88%. Sin embargo, en todo el mundo, el servicio es a menudo insuficiente o insostenible, y el agua, incluso de una fuente mejorada, no siempre es segura para beber, según el Banco Mundial.

En Perú, por ejemplo, si bien la cobertura de acceso a agua es del 87%, aún varias ciudades sólo cuentan con ella por 9 horas al día. Uno de los problemas es que parte del agua potable se pierde durante su transporte a los hogares, en las tuberías rotas o sin mantenimiento. Mejorar la calidad del servicio implicaría también determinar si el costo de las tarifas es suficiente para proveer un buen servicio acordes con los ingresos de los usuarios.

Una mujer lava ropa en Íquitos, Perú. Mónica Tijero Banco Mundial

¿Qué pasa con el saneamiento?

Actualmente, sólo el 68% de la población mundial tiene acceso a saneamiento, esto deja fuera a 2,400 millones de personas que carecen de retretes o letrinas. El ODS 6 también busca garantizar un saneamiento adecuado para todos y para poner fin a la defecación al aire libre, la cual contamina el agua disponible y extiende enfermedades tales como el cólera, la diarrea y la disentería y causando la muerte de más de 842,000 personas al año. 

En el mundo, en promedio, siete de cada diez personas que carecen de acceso a instalaciones sanitarias higiénicas y seguras viven en zonas rurales. Y en América Latina, no es diferente. A pesar de los avances sociales y económicos recientes, aún 106 millones de personas aún no cuentan con un baño digno en casa y 34 millones no tienen acceso a agua potable de forma sostenible.

Lampadia