Por: Patricia Teullet
Perú21, 3 de setiembre de 2018
La noticia sobre el aumento de la anemia debe haber preocupado al premier Villanueva, que tan violentamente, carajo incluido, se pronunció contra ella al inicio de su gobierno (también de Vizcarra, claro). Desafortunadamente, los esfuerzos se han centrado en satanizar a la industria alimentaria en lugar de apoyarse en ella para vencer la desnutrición y anemia. Pero esta solo es una de tantas paradojas.
Odiamos al Congreso, despreciamos al Poder Judicial y con las justas toleramos al Ejecutivo, pero en un sondeo reciente de Ipsos, los jóvenes prefieren un Estado con más presencia empresarial. ¿Falta de experiencia por no haber vivido la época cuando las empresas terminaban en “Perú” y eran manejadas por quienes hoy ocupan los cargos de gobierno en los poderes del Estado? Porque Yesenia sería presidenta de un banco y Walter Ríos de otro; Becerril tendría las azucareras, claro. A Mulder le darían la prensa; seguro que Lescano pediría los supermercados, y Mamani, Minero Perú.