Quiero plantear la ausencia de una estrategia política y mediática para escuchar, exponer y convencer. El circo de escándalos y la precariedad institucional convocan a columnistas políticos, lectores, oyentes o televidentes. La mayoría está en otra. Era de esperar que se intentaría impedir reformas de fondo como las laborales y de capacitación. Con mayor razón si se proponían supuestamente de modo discreto, en uno de los paquetes reactivadores. Más si, tras las subnacionales, todos quieren moverse a la izquierda de cara a las elecciones. A una izquierda que, paradójicamente, está defendiendo a quienes tenemos mayores oportunidades. Pero a la izquierda al fin. Izquierda y derecha de otro planeta. En este, el 48% de los que conocen la ley la aprueba, según Ipsos. Tragicómico.