Por: Mariella Balbi
Expreso, 4 de Marzo del 2023
Cuando Pedro Chávarry asumió el cargo de Fiscal de la Nación (junio 2018-enero 2019) los ataques a su persona fueron tremebundos y bien armados. Antes de jurar, representantes de algunas ONG como Transparencia, vinculadas a la llamada izquierda caviar, lo descalificaron sin razón exigiendo que Pablo Sánchez, entonces titular del Ministerio Público, permaneciera en el cargo.
Como no lograron su propósito, IDL–que manejaba una inmensa cantidad de audios de la mafia judicial del Callao, llamada ‘Los Cuellos Blancos’– le publicó a Chávarry una conversación inocua con el ‘hermanito’ Hinostroza, vocal supremo. Bastó ello para que se le acusara de ser poco menos el cabecilla de esa red de corrupción.
El bullying a Chávarry fue una feroz infamia. Los medios ‘vizcarristas’ lo atacaron sistemáticamente. Como Fiscal de la Nación tenía la potestad de mover a fiscales. Cuando quiso cambiar a los dudosos magistrados Vela y Pérez del caso Odebrecht, se armó la trocatinta. El ex mandatario Martín Vizcarra metió sus narices, regresó de la juramentación del presidente de Brasil y los dos permanecieron en el cargo. El caso Chinchero, las coimas cuando el ‘Lagarto’ Vizcarra fue presidente regional de Moquegua pesaban mucho. Esto último ya tiene control de acusación, pero avanza muy lento. Ambos impulsados por Chávarry. Le costó caro.
La persecución contra el exfiscal Chávarry no quedó ahí. Tuvo que renunciar. Luego la politizada Junta Nacional de Justicia (JNJ) le inició un proceso, separándolo del Ministerio Público. Pero, ojo con esto, desechó el cargo de su supuesto vínculo con ‘Los Cuellos Blancos’.
Lamentablemente, el ‘Lagarto’ aún tiene influencias en la Fiscalía y es vengativo. Hoy, esta institución ha revivido el caso del deslacrado de las oficinas de un ex asesor de Chávarry. No hay un solo vídeo ni prueba que señale su participación, pero la persecución en su contra continúa.
Dicen que la vida da vueltas, y en política más aún. El equipo anticorrupción de la Fiscal Patricia Benavides está siendo cuestionado por el caso Sara Goday. Una de sus integrantes, la fiscal Marita Barreto, recogió firmas en el ministerio Público contra Chávarry en el 2018.
La Junta Nacional de Justicia investiga a la fiscal Patricia Benavides por hacer cambios en el equipo del caso ‘Los Cuellos Blancos’, cuando, al igual que Chávarry, legalmente puede realizarlos. La labor de Benavides ha sido tesonera y firme. Pero incomoda al sector que manejaba el Ministerio Público gracias a Pablo Sánchez.
En la Fiscalía hay una maraña de intrigas que desalienta a esos funcionarios públicos. A todo esto, quién le pone el cascabel a la tal Junta Nacional de Justicia. Empolla unos casos, acelera otros. Salva a sus integrantes de las investigaciones por tráfico de influencias, es extremadamente benévola. Pero arremete contra la Fiscal de la Nación y a su vez hay fiscales que reavivan una investigación contra Chávarry que ya fue aclarada.
¿Cómo se fiscaliza a la politizada JNJ? Basta leer la hoja de vida de sus integrantes y sus fallos para conocer sus inclinaciones y simpatías políticas. Hija del ‘Lagarto’, la JNJ pasa piola decidiendo arbitrariamente sobre jueces y fiscales. Recordemos que los ratifica o los destituye. Tienen demasiado poder. A Benavides le está ocurriendo lo de Chávarry. Hay fuerzas oscuras que buscan controlar la Fiscalía. No permitamos otra cacería de brujas.