Juan José Garrido
Perú21, 10 de noviembre de 2017
Culminado el interrogatorio a Marcelo Odebrecht en Curitiba, queda ahora recibir la información oficial por parte de las autoridades para saber cómo seguirán los procesos de los tres líderes políticos investigados (Alan García, Ollanta Humala y Keiko Fujimori). Hasta el momento, de fuentes informales, se sabe que el ex mandamás del grupo Odebrecht habría brindado importante información sobre dos de estos, Alan García y Ollanta Humala. Sobre Keiko Fujimori no habría nada en particular y entonces se tendrá que confirmar con Jorge Barata si, en efecto, existió algún tipo de aporte o no.
De ser así, pues las cosas se complicarían gravemente para los ex presidentes Ollanta Humala y Alan García. En cuanto al segundo, y como en los casos Toledo y Humala-Heredia, las distintas señales empiezan a pintar un panorama: existen obras identificadas, montos transferidos a cuentas de funcionarios cercanos (algunos de ellos con prisión preventiva), y ahora un testimonio que podría explicar algunas hipótesis que manejan en la Fiscalía.
Sobre Ollanta Humala y Nadine Heredia, la evidencia es demoledora. Ahora, con la información aportada por Marcelo Odebrecht, pues el rumbo de la actividad judicial en el caso García debería tomar mayor seriedad y firmeza.
Para empezar, y como sostuvimos hace meses, sería bueno que el ex presidente García retorne al Perú y esté a disposición de las autoridades fiscales y judiciales. No es lo mismo vivir en Madrid y viajar a Lima a responder que radicar en Lima y estar a disposición permanente. Sobre Keiko Fujimori, como dijimos ayer, el testimonio de Marcelo Odebrecht debe ser corroborado con el del ex funcionario Jorge Barata, quien manejó las operaciones en Lima. Si Barata corrobora que no existieron aportes, pues esa línea de investigación llegaría –básicamente– a su fin (al menos, mientras no exista información nueva y relevante).
Como siempre, el ex presidente García deberá brindar su testimonio y explicaciones; no obstante, la justicia debe avanzar como en los casos anteriores: con firmeza y prontitud.