Por: Jorge Bazo
Gestión, 16 de agosto de 2021
Hasta el momento, la agro exportación se ha concentrado principalmente en la costa, logran do una posición de liderazgo a nivel mundial y generando empleo formal e ingresos al país. Sin embargo, si es mantiene esta concentración en la costa, el perú perderá competitividad por el inminente crecimiento de colombia, dadaslas ventajas competitivas que tiene: está más cerca al hemisferio norte -donde están los compradores-, tiene más mano de obra y un mayor aprovechamiento de sus pisos altitudinales.
Incluyendo a la sierra y a la selva, en cambio, la agroexportación peruana podría cuadruplicarse en diez años y aportaría nuevas ventajas competitivas al Perú, con una oferta más constante y diversa. Más constante, porque se tendría una ventana de exportación distinta y complementaria a la de la costa. Y más diversa, porque se incorporarían nuevos alimentos altamente nutritivos y cultivados con técnicas ancestrales y sostenibles.
Pero lo más importante es que se mejoraría directamente la calidad de vida de más de un millón de peruanos. ¿Cómo lograrlo?
Por sus condiciones geográficas, la sierra y la selva dificultan la inversión privada. Cuando esto sucede, el Estado es quien tiene que promoverla, no necesariamente atrayendo a las grandes empresas, sino yendo directamente a los pequeños agricultores.
El punto de partida es seleccionar cultivos con potencial: el mundo demanda nuevos productos de alto valor nutritivo y sostenibles.
Para atender a esa demanda, en la sierra se puede cultivargr anos and in os,frej oles y ajíes. En los valles interandinos, sachatomates, aguaymanto y paltas. En la selva, en tanto, ajíes, yacón, algo dones nativosque no requieren tintes artificiales, guayabas y anonas, entre otros cultivos de extracción.
En segundo lugar, los agricultores ya cuentan con un nivel de organización a través de las juntas de riego olas organizaciones comuna les, que pueden convertirse en cooperativas.
El estado debe proporcionara estas cooperativas infraestructura de riego. Con US$ 200 millones se puede construir más de 200 reservorios pequeños que pueden garantizar la gestión de riego a más de 200 mil familias. Complementaria mente, se debe invertir en infraestructura vi al.
Considerando que estos pequeños agricultores no tienen capacidad de inversión, el estado debe ofrecerles créditos y asumir un seguro en caso de desastre natural.
Además, se deben realizar capacitaciones técnicas. Para ello, la tecnología, dado el crecimiento del acceso a los smartphones, puede ser un gran aliado, pues permite un seguimiento estructurado de las capacitaciones.
Finalmente, es importante acercara los agricultores al mundo. Si bien la tecnología puede también jugar un rol en ese sentido, es fundamental que puedan asistir a ferias de alimentos en el extranjero y conocer qué está de mandando el mundo. por ello, debe haber un trabajo de promoción institucional de entidades como prom Perú y las embajadas.
Incluir a la sierra y la selva en la agro exportación no solo ayudará a reducir brechas sociales, que es una prioridad ineludible, sino que será imprescindible para que el Perú mantenga una posición de liderazgo a nivel mundial, generando más empleo formal y más ingresos al país, y estableciendo así un círculo virtuoso de desarrollo más inclusivo.