Por: Fernando Castañeda, socio en Aramburú Castañeda Boero
Gestión, 25 de abril del 2022
“Lo que ese cambio va a generar es mayor desconfianza en el mercado, y con ello, menor inversión privada”.
Para generar un cambio es necesario tener liderazgo, y este se apoya en los pilares del acierto, la confianza, lo participativo, el compromiso y la retroalimentación. Lamentablemente, el Gobierno no cuenta con ninguno de estos; y aun cuando la extensión de esta nota no permite hacer un listado de ejemplos, todos sabemos que el Estado ha decrecido notablemente en eficiencia y que la precarización del mismo va en aumento.
En este contexto, el Gobierno ha presentado un Proyecto de Ley para modificar el Art. 61 de la Constitución Política del Perú, con la finalidad de prohibir los monopolios, oligopolios y “fortalecer el accionar del Estado para garantizar la libre competencia”.
El proyecto propone que la redacción del Art. 61 sea: “Están prohibidos los monopolios, oligopolios, acaparamientos, especulación o concertación de precios, así como el abuso de posiciones dominantes en el mercado”.
Sin embargo, el proyecto del Ejecutivo es absolutamente innecesario y contradictorio. La Constitución actual ya prohíbe la concertación y los monopolios se prohíben en la medida en que exista un abuso de posición de dominio.
Por su parte la Ley de Represión de Conductas Anticompetitivas considera como práctica colusoria horizontal la concertación de precios, la producción, ventas, el desarrollo técnico o las inversiones, con sanciones drásticas contra empresas y directivos; el oligopolio se combate con la Ley de Control de Fusiones y Adquisiciones, ya plenamente vigente; el Código Penal sanciona el acaparamiento, y así podríamos seguir con las normas que existen para regular el tema.
El proyecto de ley presentado por el Ejecutivo encuentra la normativa descrita insuficiente e ineficaz, indicando que, con un mandato constitucional más claro, se lograrán los fines que la Constitución exige. Sin embargo, lo que ese cambio va a generar es mayor desconfianza en el mercado, y con ello, menor inversión privada. Para el presente año, el Banco Central de Reserva (BCRP) ha señalado que se espera un crecimiento nulo en la inversión privada. La consecuencia será la retracción del mercado, la caída del empleo de calidad, de los ingresos y del consumo, con el alejamiento de la esperada reactivación económica.
Además, es sospechoso que el Proyecto de Ley haga alusión expresa a la prohibición de la propiedad cruzada de medios de comunicación social, pero que en su exposición de motivos no diga nada acerca de la misma ni se resalte el cambio en el cuadro comparativo de la norma actual versus la proyectada. Suena más bien a intervención y censura en perjuicio de nuestros derechos a la libertad de expresión y acceso a la información.
Lo que queda claro es que el Gobierno se ha hecho del monopolio del error.