Por: Aldo Mariátegui
Perú21, 28 de mayo de 2021
Siempre me ha sorprendido lo mal que se han defendido los fujimoristas contra esa campaña falaz, de curas medievales y rojos, sobre las llamadas “esterilizaciones forzadas”. Y el fiscal Pablo Espinoza cae en la demagogia jurídica.
Primera mentira: “Fue un plan de esterilización”. ¡Falso! Las esterilizaciones voluntarias eran parte de un amplio programa de salud reproductiva. Segunda mentira: “No pudieron ser madres”. ¡Falso! ¡Esa infamia la repetían PPK y Mechita! Solo se aplicaba a mujeres con 4 hijos. Tercera mentira: “Son cerca de 300 mil afectadas”. ¡Falso! Las denuncias fueron 773 en su momento. O sea, el 0.26%. De esas, solo 61 se referían a esterilizaciones sin consentimiento (las otras eran por cobros indebidos, complicaciones con anticonceptivos o posteriores. Son cifras de la Defensoría del Pueblo – Informe 69). Hoy se han presentado1,300 presuntas afectadas al juicio. O sea, el 0.43%. El 99% quedó satisfecho o hay más de 290 mil intervenidas sin quejas. Cuarta mentira: “Hubo muchas muertes”. ¡Falso! Solo se registraron 5 lamentables muertes, sobre un universo aprox. de 300 mil intervenciones. O sea, el 0.0016% de las intervenidas habría fallecido por estas operaciones. Eso está dentro de los parámetros esperables de cualquier intervención quirúrgica masiva: 299,995 de las operadas están vivas. Quinta mentira: “Mamerita Mestanza fue obligada y murió por la esterilización”. ¡Falso! Mestanza (33 años, 7 hijos) fue voluntaria. Y murió no durante o por la operación, sino por negligencia médica postoperatoria. Sexta mentira: “Keiko es culpable”. ¡Falso! Jamás ordenó, diseñó o dirigió.
Insto a Mavila Huertas, Paola Ugaz, Patricia del Río, Juliana Oxenford, Jackie Fowks, Mar Romero y Fernando Gimeno a que entrevisten –juntas– a Cecilia Villegas y Rocío Villanueva (ex DP adjunta) y dejen de repetir falsedades. ¿Sería lo profesional, no?