Ya son diez millones de peruanos que tienen empleo adecuado, 4.8 millones más que hace una década. Estas cifras son el resultado del crecimiento de la economía peruana que, en el mismo periodo, creció de $57 mil millones de dólares a $203 mil millones. Curiosamente, en un reciente reportaje de La República (25 de noviembre, página 18), los economistas Félix Jiménez, Javier Iguíñiz e Ismael Muñoz dan a entender que el crecimiento económico no ha generado suficiente empleo, ingresos decentes ni inclusión laboral. En verdad las cifras oficiales de empleo muestran un proceso muy positivo. Ver cuadro 1.
El empleo adecuado en el Perú ha crecido en un 96% mientras el subempleo caía en 20%. Pero las cosas no quedan allí. Según información del INEI, elaborada por el IPE, se demuestra la alta calidad del crecimiento del empleo, inclusivo y descentralizador de la última década. El empleo ha crecido más fuera de Lima, en el espacio rural, y en la sierra y la selva que en la costa. Ver cuadro 2.
Además mejoran los ingresos
Según el mismo IPE, entre el 2001 y el 2010, el ingreso promedio mensual por trabajo aumentó en 54.6% a nivel nacional. Una vez más, la composición del incremento del ingreso es inclusiva y descentralizadora, pues crece más en provincias que en Lima, más en las zonas rurales y en la sierra y la selva, que en las ciudades y la costa. Ver cuadro 3.
No podemos dejar de mencionar que en el Perú hay mucho por mejorar en todos los planos: sociales, económicos e institucionales. Pero es muy importante destacar los procesos económicos positivos y sus relaciones causa-efecto para el conocimiento de los ciudadanos.
Ahora que viene el verano, ningún dedo podrá tapar el sol.