Fernando Rospigliosi
CONTROVERSIAS
Para Lampadia
La Dini (Dirección Nacional de Inteligencia) tiene un presupuesto anual para “gastos reservados” de 24.6 millones de soles. Es decir, algo más de dos millones de soles al mes. El general EP (r) Wilson Barrantes ha declarado que los secuaces de Pedro Castillo (Beder Camacho y Bruno Pacheco) le pidieron doscientos mil soles mensuales, el 10%, para nombrarlo jefe de la Dini. (Expreso, 2/11/22).
El puesto se lo había ofrecido el propio Castillo, y poco después se comunicaron con él sus ayudantes, que estaban a su lado en Palacio, para especificarle la condición de ese nombramiento. Barrantes dice que rechazó la ilegal oferta y luego se reunió con Castillo para quejarse. No hubo ninguna reacción y Barrantes nunca fue designado para ningún cargo en el gobierno.
Esta es otra información que se suma a las que han circulado en los últimos días, confirmando la sospecha que la Dini se ha convertido en una cueva de ladrones.
Solo hay que imaginar a la gavilla delincuencial que se ha apoderado del Estado, al enterarse que la Dini tiene dos millones de soles al mes que pueden ser usados a discreción, sin ningún control.
Parte de ese dinero se usa, según un colaborador de la fiscalía, en pagar y sobornar a socios de Pedro Castillo, entre otras cosas, para asegurarle votos en el Congreso que bloqueen la posibilidad de vacancia o denuncia constitucional.
De acuerdo a la versión difundida por Contracorriente de Willax TV, a Vladimir Cerrón le entregan 40,000 soles mensuales de los fondos reservados bajo el apelativo de “Montaña”. (30/10/22).
También Richard Rojas, otro miembro de la organización criminal los Dinámicos del Centro, frustrado embajador de Castillo en Panamá y Venezuela, está en la plantilla de los fondos reservados de la Dini. (El Comercio, 1/11/22).
Ahora se entiende el porqué de una “oficina” de la Dini en Palacio de Gobierno, ocupada por Henry Shimabukuro, otro integrante de la banda de Castillo.
Jamás ha existido una oficina de la Dini ni nada parecido en Palacio. La función sería, entre otras cosas, organizar la distribución de los dos millones de soles de gastos reservados en pagos ilegales a individuos como Cerrón, Rojas y otros, incluyendo posiblemente congresistas, que prestan algún servicio al corrupto gobierno y abogados que se encargan de su defensa. Y, por supuesto, tramitar el 10%, los doscientos mil soles mensuales, que según Barrantes era el cupo que debía recibir Palacio.
Los cobros ilegales se han generalizado, a todo nivel, desde que Castillo y su gavilla asaltaron el gobierno. Cuarto Poder de America TV difundió la denuncia de un ex gerente de la Superintendencia de Bienes Estatales (SBS) de que Jaime Vásquez Castillo, hermano del prófugo Fray, le cobraba un porcentaje de su sueldo por ocupar ese puesto. (30/10/22).
Arequipa al día denunció que la profesora del Fenatep (el sindicato de Castillo), Rosa Luz Pérez, su operadora en esa región, es la encargada de cobrar el 10% del sueldo a prefectos, sub prefectos y otros funcionarios que acceden a cargos públicos en esa localidad, y difundió un audio donde se le escucha pidiendo el cupo. (30/10/22).
En suma, la Dini es otra de las instituciones del Estado que está siendo destruida por la pandilla de corruptos comunistas que se ha apoderado del Estado. Es de suponer que esos delincuentes, además de saquear los fondos reservados, también usen la infraestructura, los equipos y el personal para otras actividades ilegales, como espiar y eventualmente chantajear a adversarios y aliados, como ocurrió en los tiempos de Vladimiro Montesinos y de Ollanta Humala.
Entretanto, el “agente Mo”, sigue disfrutando de libertad, poder y fondos públicos a vista y paciencia de todo el Perú. Lampadia