Entrevista a Jessica Luna, Presidenta de la Sociedad Nacional de Pesquería
Expreso, 17 de noviembre del 2025
Cristina Luna
«La solución no pasa por aumentar la cuota de captura, sino impulsar un programa de apoyo destinado a la flota artesanal y de menos escala para mejorar las bodegas de las embarcaciones o sistemas de preservación»
Lamenta que muchos se hacen de la vista gorda con la depredación en mar peruano.
¿Qué nuevas zonas de pesca se abrirán en nuestro litoral? Se hablaba de Paracas…
De acuerdo con la regulación vigente, en el Perú existen dos zonas de pesca industrial de anchoveta: la zona centro norte que va desde Paita hasta Pisco y la zona sur que va desde Ático hasta Tacna. Por su ubicación geográfica, Paracas está comprendida en la zona centro norte, no es una nueva zona de pesca, más bien es una en la que históricamente se ha desarrollado la actividad en armonía con el medio ambiente, como en el resto del litoral.
¿Por qué la SNP está buscando derogar la norma que prohíbe la actividad industrial en Paracas?
La SNP no está pidiendo nada nuevo en relación a la pesca industrial en la zona de la RNP. La pesca industrial, a partir de la milla 5, no está prohibida en dicha zona, pues forma parte de las actividades económicas permitidas consideradas como directas en Plan Maestro 2016-2020.
Lo que se limitó ilegalmente a través de una norma de menor rango que la ley, es la pesca industrial de anchoveta, a diferencia de la pesca artesanal y de menor escala que sí está permitida en dicha zona y dentro de las 5 millas. En ese sentido, lo que la SNP está pidiendo es que se respete la jerarquía de las normas, es decir, un reglamento u o una directiva no puede prohibir lo que la ley no prohíbe. El caso emblemático es la creación de la Reserva de la Dorsal de Nasca, donde está permitida la pesca industrial luego de las evaluaciones científicas correspondientes y donde se establecieron dos zonas: una de aprovechamiento sostenible de los recursos en los primeros 1000 metros de profundidad y otra zona de protección estricta donde sí está prohibida la pesca industrial entre los 1000 y 4000 metros de profundidad. Como cualquier ciudadano estamos recurriendo a los mecanismos que nos brinda el sistema democrático en el que vivimos para corregir una arbitrariedad.
¿Esto representa una amenaza a nuestra reserva nacional?
Ninguna. La pesca industrial no ha representado impacto negativo alguno, por el contrario, ha convivido durante más de 50 años con ese ecosistema. De acuerdo a los informes del IMARPE y una serie de estudios realizados por destacados científicos, el ecosistema está saludable y la pesca no genera riesgos. El verdadero problema es la pesca ilegal a la que nos hemos referido anteriormente, y frente a la cual muchos se hacen de la vista gorda.
¿Cómo se supervisará la pesca en esta zona para que se cumplan con las medidas legales, así como una pesca formal y sostenible?
Todas las embarcaciones industriales cuentan con un sistema de seguimiento satelital como parte del Programa de Vigilancia y Control y están monitoreadas en tiempo real. La pesca industrial es una de las actividades económicas más reguladas del país.
Del mismo modo, es importante que las embarcaciones de pesca artesanal también cuenten con un monitoreo satelital para un mejor ordenamiento pesquero.
¿Cómo se protegerá la biodiversidad en esta zona?
Como en todo el litoral, la pesca industrial convive en armonía con la biodiversidad y los ecosistemas. No existe evidencia de un impacto negativo de acuerdo a los informes del IMARPE. A ello se suma nuestro Programa Salvamares, que nació hace ocho años en la industria pesquera con un propósito muy claro: proteger la biodiversidad marina, cuidar los ecosistemas y demostrar que la pesca industrial peruana puede y debe ser ejemplo de sostenibilidad.
¿Cuál es la estimación de la pérdida para el Estado con la pesca ilegal ¿Podría desglosar cómo se distribuyen esas pérdidas y qué recursos son los más afectados?
Se calcula que en el mundo 1 de cada 5 pescados es capturado por ilegales que mueven al año alrededor de US$ 23 mil millones. En nuestro país, según PRODUCE, las pérdidas por la pesca ilegal bordean los US$ 500 millones al año.
¿Qué indicadores muestran que la pesca ilegal está escalando? ¿Dónde es el epicentro?
Hay diferentes modalidades de pesca ilegal. A partir del año 2019, la exportación vía terrestre de anchoveta fresca refrigerada al Ecuador. Del año 2019 al 2024, las exportaciones de este producto pasaron de 900 toneladas a casi 32 mil toneladas. Esta práctica podría ser una nueva forma de desvío ilegal del recurso anchoveta, que debiera ser destinado para el consumo interno peruano, pero que estaría terminando en Ecuador para ser procesado como harina ilegal. Ello ya que resulta poco probable que se fabriquen conservas de anchoveta en Ecuador, siendo este país uno de los principales productores mundiales de conservas de atún. Otro indicador es que dada la cuota anual de anchoveta para consumo humano directo (CHD) se estima que deberían circular en el mercado peruano aproximadamente 150 millones de latas de anchoveta, cifra similar a la cantidad de latas que se encuentran de atún. En la práctica es muy difícil encontrar latas de anchovetas en los mercados. Así, habría indicios de un desvío de la anchoveta hacia harina ilegal.
¿Qué medidas plantea la SNP para reducir la informalidad y la ilegalidad en la pesca de anchoveta para el consumo directo?
Es claro que la cuota de anchoveta para CHD es más que suficiente para los volúmenes de descarga y demanda de mercado actual. El recurso no está siendo aprovechado para la elaboración de productos para el CHD. A ello se suma que, la normatividad actual y falta de control y fiscalización, estaría fomentando la producción de harina ilegal y/o residual. Por ello, la solución no pasa por aumentar la cuota de captura, sino impulsar desde el gobierno un programa de apoyo destinado a la flota artesanal y de menor escala para mejorar las bodegas de las embarcaciones o sistemas de preservación.
PBI pesquero
En septiembre, el sector Pesca creció 6,37%, en comparación con setiembre de 2024; explicado por el aumento de la captura de especies de origen marítimo (14,11%), principalmente de recursos para el consumo humano directo (14,33%).






