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Elon Musk haría Twitter más abierto

Elon Musk haría Twitter más abierto

El gran innovador y disruptor sudafricano no quiere que las redes sociales sigan en su modorra controlista. “Mi fuerte sentido intuitivo es que tener una plataforma pública que sea de máxima confianza y ampliamente inclusiva es extremadamente importante para el futuro de la civilización. No me importa la economía en absoluto”.

  • Elon Musk revolucionó la industria del automóvil marcando el camino de la transición a los autos eléctricos, que hoy todos siguen.
  • Reconvirtió la industria aeroespacial haciendo cohetes reusables de bajo costo.
  • Sus agallas lo llevan ahora a apostar por la compra de Twitter (US$ 44,000 millones), sin aparentemente importarle las economías de la operación. Su ambición sería promover la inclusión y la libertad de expresión en el mundo de las redes sociales.

Sus antecedentes hacen que todo el mundo tome muy en serio esta nueva aventura. En primera instancia va a tener que enfrentar a los reguladores, especialmente a los europeos, que van en la dirección contraria a la de Musk, fijar reglas y más reglas. Y a todos los que se han aupado en la vorágine controlista y de lo políticamente correcto.

Por ejemplo, Facebook en el Perú, le ha encargado la supervisión de contenidos de los posts, al diario La República, que está comprometido políticamente, es obtusamente gobiernista y no se distingue precisamente por promover la veracidad, el gato de despensero.

Estamos seguros que el nuevo Twitter marcará la pauta de la libertad de expresión. Alas y buen destino Elon Musk. Lampadia

El tecno-rey de Twitter

Elon Musk quiere rediseñar la “plaza pública”

El ingeniero más conocido del mundo se plantea otro gran problema que resolver

The Economist
30 de abril de 2022

Las llorosas declaraciones sobre el futuro de la humanidad no suelen aparecer en los debates sobre adquisiciones apalancadas. Pero Elon Musk nunca se ha sentido atado por las convenciones. Cuando se le preguntó acerca de sus planes para comprar Twitter y hacerla privada, que fueron aprobados por el directorio de la empresa el 25 de abril, fue directo a la gran idea. “Mi fuerte sentido intuitivo es que tener una plataforma pública que sea de máxima confianza y ampliamente inclusiva es extremadamente importante para el futuro de la civilización. No me importa la economía en absoluto”.

Comparado con sus rivales, Facebook, Instagram y TikTok, Twitter es un pececillo. Pero el trato importa. Una de las razones es que el tamaño de Twitter desmiente su importancia. Como un lugar predilecto de políticos, expertos y expertos, hace mucho para establecer el clima político: una “plaza pública” digital, como lo expresó Musk.

Otra es que Musk hizo su nombre y su fortuna trastornando industrias. Esta vez, se enfrentará a un problema complicado de gran interés para los gobiernos de todo el mundo: cómo regular el discurso en línea. La mayoría prescribe cada vez más reglas. Pero Musk quiere ir por el otro lado, eliminando las restricciones en lugar de imponer otras nuevas. Los operadores de otras grandes redes sociales estarán atentos al experimento.

A primera vista, Musk, mejor conocido por los autos eléctricos y los cohetes reutilizables, parece un improbable magnate de las redes sociales. Pero una mirada más cercana sugiere que su adquisición de Twitter se ajusta a su enfoque empresarial. Musk, un ingeniero apasionado, le gusta tomar tecnologías de bajo rendimiento y mejorarlas. 

Tesla rompió el libro de reglas de la industria automotriz al reemplazar la gasolina con electricidad, deshacerse de los concesionarios y tratar a los automóviles como computadoras. SpaceX demostró que una startup hambrienta, que se mueve rápido y rompe cosas con un presupuesto relativamente reducido podría superar a los gigantes aeroespaciales que se volvieron cautelosos y gordos gracias a los generosos contratos gubernamentales. Ambas firmas fueron despedidas por titulares más grandes, hasta que un día no lo fueron.

Toda esa ingeniería y disrupción está animada por la propia concepción, a veces idiosincrásica, del bien social de Musk. 

El propósito de Tesla es empujar al mundo más rápidamente hacia una economía libre de carbono (un objetivo reivindicado por la velocidad a la que otros fabricantes de automóviles ahora están girando hacia los vehículos eléctricos). La ambición de SpaceX es tan grandiosa que a algunos comentaristas les cuesta creer que Musk sea sincero: establecer una presencia humana en Marte, algo que, si ocurriera una catástrofe en la Tierra, algún día podría resultar ser una póliza de seguro para la civilización.

Supongamos que Musk realmente está dispuesto a gastar miles de millones de dólares de su propio dinero para asegurar el “futuro de la civilización” (aunque tiene una cláusula de ruptura en caso de que se acobarde). La pregunta es si su visión de la libertad de expresión en Twitter es sensata.

Twitter se ajusta al patrón de Tesla y SpaceX, ofreciendo a Musk otro complejo sistema de ingeniería con el que jugar, y una gran razón para hacerlo. Las redes sociales implementan algoritmos para resaltar el contenido “atrayente”, utilizando una maraña de reglas que intentan mitigar los peores efectos secundarios, para vender mejor a los usuarios y a los anunciantes. Es un modelo de negocio lleno de inconsistencias y compensaciones no examinadas que parece listo para la disrupción. Que Musk quiera ser su agente tal vez no sea una sorpresa, ya que se inició como emprendedor en la década de 1990, cuando el tecno libertarismo y la lucha contra la censura eran las ideas que animaban Internet.

El hecho de que Musk sea multimillonario no debería descalificarlo para ser propietario de una importante empresa de medios. Ya ha expuesto algunas ideas para Twitter, muchas de ellas prudentes y sensatas. El alboroto resultante muestra cuán antiliberal se ha vuelto gran parte de la opinión en línea. Quiere menos prohibiciones directas y más suspensiones temporales. Los usuarios deben demostrar que no son bots. En caso de duda, opta por dejar los tweets, no eliminarlos.

Más importante aún, cree que los engranajes y engranajes del algoritmo de recomendación de Twitter, que decide qué tuits ve un usuario, deberían ser públicos. 

Los investigadores podrían examinarlo; otros programadores podrían modificarlo. Una versión menos propensa a promocionar contenido “interesante” (lo que, en la práctica, a menudo significa tuits que enfurecen, son controvertidos o simplemente tontos) podría bajar la temperatura de toda la plataforma, lo que facilitaría el trabajo de moderación y posiblemente llevaría a un debate que es más pensativo. O tal vez Twitter podría convertirse en una plataforma abierta, donde diferentes usuarios pueden elegir uno de los muchos algoritmos de terceros diferentes, o ninguno, según sus gustos. La moderación del contenido es el producto desordenado de las presiones políticas y sociales. Será fascinante ver con qué facilidad sucumbe a la ingeniería.

Musk no tendrá las manos completamente libres. Australia, Gran Bretaña, la UE e India han estado trabajando en la regulación tecnológica. Thierry Breton, un alto funcionario de la UE, señaló que “no son las reglas [del señor Musk] las que se aplicarán aquí”. Los otros inversores de Musk están nerviosos. Cuanto más tiempo dedique a Twitter, menos tendrá para sus otros emprendimientos. Las acciones de Tesla cayeron un 12% después de la noticia del acuerdo de Twitter.

La personalidad de Musk plantea un gran riesgo. Es inteligente, motivado y ferozmente trabajador. También puede ser pueril y vengativo, rasgos que se exhibieron en 2018 cuando acusó a un experto británico en rescate de cuevas, sin pruebas, de ser un “pedófilo”. Tales arrebatos son algo que viene de un usuario de Twitter con muchos seguidores. Pero cuando sea el dueño, surgirán dudas sobre si podrá resistir la tentación de explotar su nueva posición para perseguir sus propias obsesiones y vendettas.

El pájaro y el roble

Este periódico comparte las convicciones de libertad de expresión de Musk. Nadie tiene el monopolio de la sabiduría. Los expertos a veces se equivocan y los fanfarrones a veces tienen razón. Incluso en la era de Internet, la mejor respuesta a un mal argumento es una mejor. La moderación en muchas plataformas se ha vuelto de mano dura y aplicada arbitrariamente. Si el talento de Musk para sacudir las industrias puede ayudar a cortar el nudo gordiano del discurso en línea, todos se beneficiarán.

Pero también estamos interesados ​​en otro principio liberal, que las instituciones deberían ser más grandes que la persona que las dirige. Musk puede establecer nuevas reglas, pero debe verse que no desempeña ningún papel en su aplicación. Si realmente quiere convencer a los usuarios de que será un guardián imparcial de su “plaza pública digital”, podría implementar sus reformas y luego congelar su propia cuenta. Lampadia




La censura de las Big Tech

La censura de las Big Tech

El cierre de las cuentas de Twitter y Facebook del ex presidente Donald Trump ha sido alabado por diversos medios de la prensa internacional y políticos de oposición, quienes inclusive lo calificaron como un paso necesario para aminorar los niveles de violencia en EEUU, tras el asalto al Capitolio de Washington.

Pero lo que aparentemente se ve como una buena iniciativa que busca resguardar la derruida democracia estadounidense – analizada con cabeza fría – esconde un duro golpe a la libertad de expresión y refleja el alto poder que concentran las Big Tech para censurar las opiniones que no se emplacen con el pensamiento hegemónico de las mayorías.

Un reciente artículo de The Economist que compartimos líneas abajo incide en este tema y da el precedente de por qué suspender no solo cuentas, sino redes sociales enteras – como pasó también con Parler – no era ni de cerca la mejor solución para evitar una mayor incitación a la violencia en EEUU.

Como ya hemos comentado en anteriores oportunidades (ver Lampadia: Una carta por la libertad de expresión), el embate cultural en redes sociales se ha tornado en estos tiempos una suerte de inquisición para los que no piensen igual que las mayorías, escalando inclusive a censuras y como ha pasado recientemente con Trump en cierres de cuentas. Algo nada saludable para la libertad de expresión y que podría ser usado en el extremo para aplastar enemigos políticos de un régimen particular o que no se encuentre afín a ellos.

En todo caso, como propone The Economist se deberían estandarizar los casos en que ciertas declaraciones pueden ser consideradas incitaciones de violencia, para lo cual podría justificarse una censura – como pasa por ejemplo con material visual pornográfico o de violencia que no puede ser publicado en redes sociales– pero de ninguna manera censurarse por completo a la persona.

Con todo lo contra que podamos estar o nos desagraden las declaraciones de Trump (ver Lampadia: Los estragos de Trump) y otros líderes de opinión, se debe en primer lugar propender el debate de ideas y no coartar directamente la libertad de expresión. Finalmente serán las mismas personas las que opten por tomar el pensamiento que consideren correcto. Lampadia

Libertad de expresión
Big tech y censura

Silicon Valley no debería tener control sobre la libertad de expresión

The Economist
16 de enero, 2021
Traducida y comentada por Lampadia

La primera reacción de muchas personas fue de alivio. El 6 de enero, con 14 días restantes de su mandato, el presidente de redes sociales fue suspendido de Twitter después de años de lanzar abusos, mentiras y tonterías a la esfera pública. Poco después, muchos de sus compinches y seguidores también fueron cerrados en línea por Silicon Valley. El final de su cacofonía fue maravilloso. Pero la paz oculta una limitación de la libertad de expresión que es escalofriante para EEUU y para todas las democracias.

Las prohibiciones que siguieron al asalto al Capitolio fueron caóticas. El 7 de enero, Facebook emitió una suspensión “indefinida” de Donald Trump. Twitter siguió con una prohibición permanente un día después. Snapchat y YouTube lo prohibieron. Se suspendieron una serie de otras cuentas. Google y Apple sacaron a Parler, una pequeña red social popular entre la extrema derecha, de sus tiendas de aplicaciones y Amazon sacó a Parler de su servicio en la nube, obligándolo a desconectarse por completo.

¿Seguramente esto era aceptable frente a una turba alborotada? Legalmente, las empresas privadas pueden hacer lo que quieran. Sin embargo, algunas decisiones carecieron de coherencia o proporcionalidad. Aunque Twitter citó un “riesgo de mayor incitación a la violencia” por parte de Trump, los tweets que señaló no cruzaron el umbral legal común que define un abuso del derecho constitucional a la libertad de expresión. Mientras tanto, el ayatolá Ali Khamenei todavía está en Twitter y las amenazas de muerte son fáciles de encontrar en línea. Las empresas deberían haberse centrado en posteos individuales de incitación. En cambio, han prohibido a las personas, incluido el presidente, alejando las voces marginales del mainstream. En algunos casos era necesario actuar, como en el caso de los intercambios violentos y mal vigilados de Parler, pero en general no existía una prueba clara de cuándo debía prohibirse el habla. La infraestructura de Internet, incluidos los servicios de computación en la nube, que deberían ser neutrales, corre el riesgo de verse envueltos en batallas partidistas divisivas.

El otro problema es quién tomó las decisiones. La concentración de la industria tecnológica significa que unos pocos ejecutivos no electos y que no rinden cuentas tienen el control. Quizás su intención realmente sea proteger la democracia, pero también pueden tener otros motivos menos elevados. Algunos demócratas aplaudieron, pero deberían evaluar cualquier nuevo régimen de expresión basado en su aplicación más amplia. De lo contrario, un acto que silenció a sus enemigos la semana pasada podría convertirse en un precedente para silenciarlos en el futuro. Los lamentos fueron reveladores. Angela Merkel, líder de Alemania, dijo que las empresas privadas no deberían determinar las reglas de expresión. Alexei Navalny, un disidente ruso, denunció un “acto inaceptable de censura”. Incluso Jack Dorsey, director ejecutivo de Twitter, lo llamó un “precedente peligroso”.

Existe una mejor manera de lidiar con el discurso en línea. Hacer que la industria sea más competitiva ayudaría al diluir la influencia de las empresas individuales y al estimular nuevos modelos comerciales que no dependan de la viralidad. Pero mientras la industria sea un oligopolio, se necesita otro enfoque. El primer paso es definir una prueba de lo que debe censurarse. En EEUU eso debería basarse en la protección constitucional del discurso. Si las empresas quieren ir más allá al adjuntar advertencias o limitar el contenido legal, deben ser transparentes y predecibles. Los juicios difíciles deben recaer en juntas independientes no estatutarias que otorguen a las personas el derecho de apelación.

Más del 80% de los usuarios de Twitter y Facebook viven fuera de EEUU. En la mayoría de los países, las empresas de tecnología deben adherirse a las leyes locales sobre el discurso, por ejemplo, las reglas de Alemania sobre el discurso del odio. En autocracias, como Bielorrusia, deberían respetar los estándares que observan en EEUU. Una vez más, los consejos de comunicación podrían guiar los juicios sobre qué estándares se aplican en qué país. Esto puede dañar a las empresas estadounidenses en más lugares: esta semana Uganda prohibió Facebook y Twitter antes de una elección polémica.

EEUU necesita resolver su crisis constitucional a través de un proceso político, no de censura. Y el mundo debe buscar una mejor manera de lidiar con el discurso en línea que permitir que los oligopolios tecnológicos tomen el control de las libertades fundamentales. Lampadia




¿Una solución de mercado a la alta concentración en la industria tecnológica?

¿Una solución de mercado a la alta concentración en la industria tecnológica?

Hace algunos meses en Lampadia discutimos ¿Regulamos o desregulamos la industria tecnológica?, las implicancias de la alta concentración de empresas que actualmente caracteriza algunas industrias del sector tecnológico, compuestas por ejemplo, por las empresas productoras de sistemas operativos móviles como Apple y Android, y las plataformas digitales basadas en publicidad como Facebook, Twitter, entre otras.

Sin embargo y siendo este un tema no menor, no incidimos en mecanismos o enfoques de política pública que permitiesen generar una mayor competencia en estos mercados, de manera que las empresas del rubro provean un mejor servicio hacia los consumidores. No es de sorprender que las recientes controversias acontecidas en torno a la seguridad de datos personales de los usuarios de la red social Facebook, hayan puesto como prioridad esta materia en la discusión de los reguladores de las industrias de las TIC.

Lo curioso es que probablemente el enfoque adecuado para promover tal competencia no se encuentre en los países que albergan a los grandes clusters tecnológicos o enormes corporaciones del rubro como EEUU, China o alguno que otro país del sudeste asiático como Corea del Sur; sino en el viejo continente, Europa. Así lo deja entrever un reciente artículo de The Economist (ver artículo líneas abajo), en el que se destaca que “la UE es pionera en una doctrina tecnológica distinta que apunta a otorgar a los individuos el control sobre su propia información y los beneficios que se obtienen de ella, y para premiar a las empresas de tecnología abiertas a la competencia”.

La pregunta que surge inmediatamente ante tal afirmación es: ¿A través de qué drivers actúa esta doctrina en los mercados en los que pretende interceder?

  • El primer driver consiste en garantizar total soberanía sobre los datos personales, de manera que no puedan ser usados para fines que son desconocidos por los usuarios. Esta política, que debe estar promulgada y reglamentada en la normativa internacional, es fundamental para dar fin a las controversias generadas en torno a la seguridad de los datos personales.
  • El segundo driver pasa por garantizar lo que se denomina en la filosofía liberal como “igualdad ante la ley” cuyo fin último es garantizar la libre competencia. El insumo necesario es el establecimiento de un marco jurídico legal tal que las empresas del sector tecnológico no alberguen ningún privilegio ni distinción en lo concerniente al intercambio de datos masivos anónimos con sus competidores.

Así, el enfoque europeo no solo le permite al consumidor acceder a toda la información con respecto al servicio o producto brindado, sino que además brinda igualdad de condiciones entre empresas competidoras, ambas condiciones necesarias para generar un sistema de libre mercado.

Dicho mecanismo, sin ser de corte intervencionista, permite lidiar con los problemas de asimetrías de información y poca competencia que subyacen en estos mercados. En ese sentido, esperamos que pueda calar en las mentes de los reguladores de los grandes países líderes del rubro, en particular, EEUU.

Como concluye The Economist, el hecho que tal doctrina haya nacido en tierras europeas no es coincidencia. A veces la visión de un simple consumidor más que la de un gran productor puede resultar ser más esclarecedora respecto de la problemática que puede estar experimentado una industria determinada. Lampadia

El futuro de la big tech
¿Por qué la big tech debería temerle a Europa?

Para entender el futuro de Silicon Valley, cruzar el Atlántico

The Economist
23 de marzo, 2019
Traducido y glosado por Lampadia

“El cumpleaños de un mundo nuevo está cerca”. Desde que Thomas Paine escribió esas palabras en 1776, EEUU se ha visto a sí mismo como la tierra de lo nuevo, y Europa como un continente atrapado en el pasado. En ninguna parte eso es más cierto que en la industria de la tecnología. EEUU alberga a 15 de las 20 empresas de tecnología más valiosas del mundo; Europa tiene una. Silicon Valley es donde las ideas más inteligentes se encuentran con el dinero más inteligente. También en EEUU es donde se debate sobre cómo domesticar a los gigantes de la tecnología, para que actúen en función del interés público. Los magnates de la tecnología enfrentan críticas por parte del Congreso por las fallas de privacidad de sus empresas. Elizabeth Warren, una senadora que se postula para presidente en 2020, quiere que Facebook se termine.

Sin embargo, si desea comprender a dónde se dirige la industria más poderosa del mundo, no mire a Washington y California, sino a Bruselas y Berlín. En una inversión de la regla de oro, mientras EEUU vacila, la Unión Europea está actuando. Esta semana, Google recibió una multa de $ 1,700 millones por estrangular a la competencia en el mercado publicitario. Europa pronto podría aprobar nuevas leyes de derechos de autor digitales. Spotify se ha quejado a la UE por los supuestos abusos antimonopolio de Apple. Y, como explica nuestra exposición informativa, la UE es pionera en una doctrina tecnológica distinta que apunta a otorgar a los individuos el control sobre su propia información y los beneficios que se obtienen de ella, y para premiar a las empresas de tecnología abiertas a la competencia. Si la doctrina funciona, podría beneficiar a millones de usuarios, impulsar la economía y restringir a los gigantes tecnológicos que han acumulado un inmenso poder sin un sentido de responsabilidad proporcional.

Los reguladores occidentales han tenido enfrentamientos sobre antimonopolio con firmas de tecnología antes, los cuales incluyen a IBM en la década de 1960 y Microsoft en la década de 1990. Pero los gigantes de hoy son acusados no solo de capturar enormes rentas y de sofocar la competencia, sino también de peores pecados, como la democracia desestabilizadora (a través de la desinformación) y el abuso de los derechos individuales (invadiendo la privacidad). A medida que la IA despega, la demanda de información está explotando, haciendo de los datos un recurso nuevo y valioso. Sin embargo, quedan preguntas vitales: ¿Quién controla los datos? ¿Cómo deberían distribuirse los beneficios? Lo único en lo que casi todos podemos estar de acuerdo es que la persona que decide no puede ser Mark Zuckerberg, el jefe abrumador de Facebook.

La idea de que la UE tome la iniciativa en estas preguntas les parecerá extraña a muchos ejecutivos que la consideran un páramo empresarial y el hogar espiritual de la burocracia. De hecho, Europa tiene influencia y nuevas ideas. Los cinco grandes gigantes de la tecnología, Alphabet, Amazon, Apple, Facebook y Microsoft, hacen en promedio un cuarto de sus ventas allí. Y como el mayor bloque económico del mundo, los estándares de la UE se copian a menudo en el mundo emergente. La experiencia de las dictaduras en Europa hace que esté más atenta a la privacidad. Sus reguladores son menos capturados por el cabildeo que los estadounidenses y sus tribunales tienen una visión más actualizada de la economía. La falta de empresas tecnológicas en Europa ayuda a adoptar una postura más objetiva.

Una parte clave del enfoque de Europa es decidir qué no hacer. Por ahora, ha descartado la opción de limitar los beneficios de las empresas de tecnología y regularlas como servicios públicos, lo que los haría abrumadores, monopolios permanentes. También ha rechazado las rupturas: gracias a los efectos de red, uno de los Facebabies o Googlettes simplemente podría volver a ser dominante. En cambio, la doctrina de la UE se inclina hacia dos enfoques. Uno se basa en las culturas de sus miembros, que, a pesar de todas sus diferencias, tienden a proteger la privacidad individual. El otro utiliza los poderes legales de la UE para impulsar la competencia.

Lo primero conduce a la afirmación de que usted tiene soberanía sobre los datos sobre sí mismo: debe tener el derecho de acceder a ellos, enmendarlos y determinar quién puede usarlos. Esta es la esencia del Reglamento General de Protección de Datos (en adelante, GDPR), cuyos principios ya están siendo copiados por muchos países en todo el mundo. El siguiente paso es permitir la interoperabilidad entre servicios, de modo que los usuarios puedan cambiar fácilmente de proveedor, cambiando a empresas que ofrezcan mejores términos financieros o traten a los clientes de manera más ética. (Imagínese si pudiera trasladar a todos sus amigos y publicaciones a Acebook, una empresa con estándares de privacidad más altos que Facebook y que le dio un recorte de sus ingresos por publicidad). Un modelo es un esquema en Gran Bretaña llamado Open Banking, que permite a los clientes de los bancos compartir sus datos sobre sus hábitos de gasto, pagos regulares, etc. con otros proveedores. Un nuevo informe para el gobierno británico dice que las empresas de tecnología deben abrirse de la misma manera.

El segundo principio de Europa es que las empresas no pueden bloquear la competencia. Eso significa un trato igual para los rivales que usan sus plataformas. La UE ha impedido que Google compita de forma desleal con sitios de compras que aparecen en los resultados de búsqueda o con navegadores rivales que utilizan su sistema operativo Android. Una propuesta alemana dice que una empresa dominante debe compartir datos masivos y anónimos con los competidores, de modo que la economía pueda funcionar correctamente en lugar de ser gobernada por unos pocos gigantes de la información. (Por ejemplo, todas las empresas de transporte deberían tener acceso a la información de Uber sobre los patrones de tráfico). Alemania ha modificado sus leyes para impedir que los gigantes tecnológicos compren decenas de empresas nuevas que podrían algún día representar una amenaza.

El enfoque de Europa ofrece una nueva visión, en la que los consumidores controlan su privacidad y cómo se monetizan sus datos. Su capacidad para cambiar crea una competencia que debería impulsar la elección y elevar los estándares. El resultado debería ser una economía en la que los consumidores sean reyes y la información y el poder estén dispersos. Sería menos acogedor para los gigantes tecnológicos. Es posible que tengan que ofrecer una porción de sus ganancias (los cinco grandes ganaron $ 150,000 millones el año pasado) a sus usuarios, invertir más o perder cuota de mercado.

El enfoque europeo tiene riesgos. Puede resultar difícil lograr una verdadera interoperabilidad entre las empresas. Hasta ahora, el GDPR ha demostrado ser torpe. El flujo abierto de datos no debe cortar la preocupación por la privacidad. Aquí, los burócratas de Europa tendrán que depender de empresarios, muchos de ellos estadounidenses, para encontrar respuestas. El otro gran riesgo es que el enfoque de Europa no se adopte en ninguna otra parte, y el continente se convierta en una tecnología de Galápagos, aislada de la corriente principal. Pero las grandes empresas no podrán dividir sus negocios en dos silos continentales. Y hay indicios de que EEUU se está volviendo más europeo en tecnología: California ha adoptado una ley similar al GDPR. Europa se está preparando para resolver el enigma de la gran tecnología de una manera que faculta a los consumidores, no al estado ni a los monopolios secretos. Si encuentra la respuesta, los estadounidenses no deberían dudar en copiarla, incluso si eso significa mirar las tierras que dejaron sus antepasados. Lampadia




Facebook, Twitter y Google en la mira

Todos recibimos noticias falsas (conocidas como las ‘Fake News’), narraciones falsas creadas en los medios de comunicación, para distorsionar, moldear y manipular la opinión pública. Con la existencia de las redes social, tal desinformación, diseñada para atraer dólares publicitarios o promover una causa política, se puede propagar más rápido que nunca.

Durante el período previo a las elecciones en Estados Unidos, un sinnúmero de noticias falsas apareció en las redes sociales, algunas de las cuales llegaron a difundirse ampliamente entre el electorado. Nunca se sabrá cuán grande fue el impacto de estas historias en las elecciones, pero fueron lo suficientemente prevalentes como para que todoslos países el mundo hayan tomado nota y estén empezado a tomar distintas medidas.

Fuente: infobae.com

El pasado 31 de octubre, los gigantes de Internet de Estados Unidos se comprometieron ante el Congreso a combatir las operaciones de noticias falsas en sus plataformas. Facebook, Google y Twitter aseguraron a los senadores que tomarán medidas enérgicas contra las operaciones de desinformación, propaganda y provocación.

Colin Stretch (izquierda), Consejero General de Facebook; Sean Edgett (centro), Consejero General interino de Twitter, y Richard Salgado (derecha), Director de Aplicación de la Ley y Seguridad de Información de Google; prestaron juramento antes de testificar ante el Congreso de EEUU – AFP

En sus testimonios, mostraron que millones de votantes fueron expuestos a información falsa generada por Rusia, que, según analistas pretendían provocar discordia en la sociedad estadounidense y promover la candidatura de Trump frente a su rival Hillary Clinton. “Estamos profundamente preocupados por todas estas amenazas”, dijo un responsable de Facebook, Colin Stretch, a la subcomisión Judicial del Senado:

  • Mark Zuckerberg reconoció que los contenidos manipulados llegaron a 126 millones de usuarios en su plataforma.
  • Twitter dijo que había descubierto 2 mil 752 cuentas controladas por rusos, y más de 36 mil bots que tuitearon 1.4 millones de veces durante las elecciones.
  • Google reveló por primera vez que había encontrado más de mil videos con 43 horas de contenido relacionado y halló 4,700 mil dólares en anuncios de búsqueda y visualización en Rusia.

Por otro lado, cada día es más evidente la acumulación de poder de las grandes compañías de TI. Se afirma que estas empresas no son conscientes de su creciente importancia sistémica, algo que puede llevar a regulaciones que pueden afectar el desarrollo del sector, y a la sociedad en conjunto.

Además, estas empresas han acumulado algo que empieza a llamarse como poder monopólico. Situación que generará otras reacciones políticas y viene ya, generando reacciones proteccionistas de varios países europeos.

Una reciente publicación especial de Project Syndicate, titulada el ‘Big Tech Crunch’ analiza este importante tema con cuatro contribuciones:

  • Las principales compañías tecnológicas parecen ciegas a su creciente importancia sistémica. Mohamed El-Erian.
  • El mayor peligro que representa Big Tech es su rol en acelerar la convergencia entre países democráticos y autocráticos. Mark Leonard.
  • La libertad de prensa sigue siendo muy vulnerable. Anya Shiffrin.
  • El patrón de crecimiento de la industria de TIcontribuye a la creciente desigualdad. brecha entre ricos y pobres. Mordecai Kurz.

A pesar de que los artículos que traducimos y glosamos líneas abajo son un poco extensos, consideramos importante su lectura, para entender lo que está sucediendo y cuáles son las medidas que se deberían tomar para poder mayores daños futuros. Lampadia

I.- Big Tech se encuentra con el Big (gran) gobierno

Mohamed A. El-Erian
Project Syndicate
2 de noviembre de 2017
Traducido y glosado por Lampadia

En un mundo ideal, las principales compañías tecnológicas reconocerían y se adaptarían a su creciente importancia sistémica a la par de los actores externos, incluidos los gobiernos y los consumidores, logrando así el equilibrio adecuado entre innovación, beneficios y protección al consumidor, y seguridad nacional. Pero no estamos en un mundo ideal.

Los impresionantes resultados trimestrales de las mayores compañías de tecnología muestran que están lejos de saturar sus mercados de consumo, agotar sus ciclos de innovación o alcanzar la madurez de crecimiento. Estos ilustran la creciente importancia sistémica del sector, perotambién presentan un inconveniente particular.

Con una mayor importancia sistémica a menudo viene un mayor escrutinio. Cuanto más tiempo tarden estas empresas en reconocer su importancia sistémica, mayor será la probabilidad de una reacción más fuerte por parte de los gobiernos y el público, perjudicando a las empresas y su capacidad de mejorar el bienestar de los consumidores.

Las compañías tecnológicas, pueden atraer inversiones masivas. No solo pueden fortalecer su posición en el mercado, también pueden desarrollar capacidades innovadoras. Incluso pueden reinventarse repetidamente y, por lo tanto, permanecer constantemente en la frontera tecnológica.

Muchos de los servicios de estas compañías son ostensiblemente gratuitos, lo que facilita su rápida adopción por parte de los consumidores.

La rápida acumulación de poder de mercado de las principales compañías tecnológicas ha llevado al surgimiento de oligopolios en algunos sectores y de monopolios en unos pocos. Su influencia social, económica e incluso política, se ha disparado en algunos casos.

Esto plantea serios riesgos: por más beneficios que traigan las innovaciones de Big Tech, también pueden servir como medios importantes para que actores estatales o no estatales, provoquen sus propias disrupciones.

No debería sorprender que las firmas de Big Tech tiendan a moverse mucho más rápido que los gobiernos y los reguladores. Como tal, lo que comenzó como una actitud de laissez-faire y de negligencia benigna, en gran parte resultado de ignorancia y falta de atención, se está convirtiendo en algo más fuerte. A medida que las empresas tecnológicas alcanzan una importancia sistémica, las actitudes hacia ellas cambian marcadamente.

En los últimos años, las principales empresas de tecnología se han enfrentado a un escrutinio más intenso de sus prácticas competitivas, comportamiento fiscal, usos de datos y políticas de privacidad. También han surgido preguntas más amplias sobre sus beneficios, como el desplazamiento laboral y los efectos sobre el crecimiento salarial, aun cuando las sociedades reconocen cada vez más, que la disrupción tecnológica implica la necesidad de una reforma educativa y mejores habilidades y capacitación.

Sin embargo, el propio sector tecnológico aún parece subestimar su creciente importancia sistémica.

Cuanto más tiempo se mantenga este descuido, mayor será el riesgo de que las empresas tecnológicas pierdan el control de la narrativa. Más allá de alimentar un aumento en el monitoreo, la regulación y la supervisión externa, existe el riesgo de una reacción negativa de los consumidores, o incluso una mayor explotación de las innovaciones por parte de actores malintencionados.

Pero no vivimos en un mundo ideal. Hasta ahora, las fuerzas internas y externas han estado fuera de sincronización, en términos de percepciones, capacidades y acciones. Si a eso se le agregan los sesgos conscientes e inconscientes y tentaciones considerables de manipulación política, los riesgos se vuelven aún más profundos.

Big Tech puede y debe desempeñar un rol más importante para ayudar a que toda la economía evolucione de manera ordenada y mutuamente beneficiosa.

Si el sector tecnológico no logra dichos cambios, la supervisión y las regulaciones del gobierno, se intensificarán inevitablemente. Y es posible que ese resultado no sea positivo para la sociedad, y mucho menos para los negocios.

II.- La ilusión de libertad en la era digital

Mark Leonard
Project Syndicate 
3 de noviembre de 2017
Traducido y glosado por Lampadia

El mayor peligro en los próximos años no es que la tecnología ponga a las sociedades libres y autocráticas cada vez más en desacuerdo entre sí. Es que las visiones distópicas de George Orwell y Aldous Huxley se manifiesten en ambos tipos de sistema.

En las últimas semanas, los medios de todo el mundo se han saturado de historias sobre cómo la tecnología está destruyendo la política. En autocracias como China, el miedo es a los estados de ‘Big Brother’ ultra-empoderados, como en‘1984’ de George Orwell. En democracias como Estados Unidos, la preocupación es que las compañías tecnológicas continúen exacerbando la polarización política y social, al facilitar la diseminación de desinformación y crear “burbujas de filtros” ideológicos, que conducen a algo parecido al ‘Brave New World’ (El Mundo Feliz) de Aldous Huxley.

De hecho, al producir una convergencia entre democracias y dictaduras, las nuevas tecnologías hacen que estas dos visiones distópicas sean imposibles. Pero eso no significa que no hay nada que temer.

Gran parte de la cobertura del XIX Congreso Nacional del Partido Comunista de China (PCCh) se centró en la consolidación del poder del presidente Xi Jinping. Los observadores advierten que está creando una dictadura de la era de la información, en la que las tecnologías que se esperaba trajeran libertad a los 1,400 millones de ciudadanos chinos, contrariamente, le han permitido afianzar su propia autoridad. Ahora usan Big Data, en lugar de fuerza bruta, para asegurar la estabilidad.

Y los datos son realmente grandes. Más de 170 millones de cámaras de vigilancia de reconocimiento facial siguen cada paso de los ciudadanos.

El PCCh también está usando tecnología para administrar a los miembros del partido, y ha desarrollado docenas de ‘apps’ para comunicarse con ellos.

El impacto de la tecnología en la política estadounidense ha sido aún más visible, pero se analiza en términos del mercado, en lugar del estado. Entre las historias más llamativas se encuentra el rol que desempeñaron las “noticias falsas” en la configuración de las elecciones presidenciales del año pasado. Facebook ha admitido que 126 millones de estadounidenses podrían haber visto noticias falsas durante la campaña.

Pero más allá de tales desarrollos explosivos hay una ansiedad más amplia sobre la capacidad de las compañías tecnológicas para controlar la información que reciben las personas. Con los algoritmos secretos de Big Tech determinando cómo percibimos el mundo, cada vez es más difícil para las personas tomar decisiones conscientes, lo que los filósofos perciben como la dimensión básica del libre albedrío.

Las grandes compañías tecnológicas, que valen más que el PBI de algunos países, buscan maximizar las ganancias, no el bienestar social. Sin embargo, en un momento en que la atención está suplantando al dinero como el bien más valioso, el impacto de sus decisiones es de gran alcance. James Williams, un ingeniero de Google convertido en académico, argumenta que la era digital ha desatado una competencia feroz y que pocos se han beneficiado más que Trump, que es para el Internet lo que Ronald Reagan fue para la televisión.

Al mismo tiempo, el impacto de la tecnología en la política es relativamente independiente del tipo de régimen. La tecnología está borrando las diferencias entre sociedades abiertas y cerradas, y entre economías planificadas y libres.

Al revelarse la vigilancia gubernamental masiva de la (NSA), la Agencia de Seguridad Nacional de EEUU, Edward Snowden dejó en claro que el deseo de omnisciencia del estado no se limita a China. Por el contrario, es central para la idea de la seguridad nacional en EEUU.

En China, las cosas se mueven en la dirección opuesta. Sin duda, el gobierno chino está presionando a las principales compañías tecnológicas para que le otorguen un papel directo en la toma de decisiones corporativas y el acceso directo a sus datos. Al mismo tiempo, sin embargo, el Internet está cambiando la naturaleza de la política y la economía china, empujando a ambos a ser más receptivos de las necesidades del consumidor.

Jack Ma, de Alibaba, piensa que China puede usar Big Data para diseñar intervenciones estatales perfectamente calibradas que le permitan superar a las economías de libre mercado. Ma cree que en las próximas décadas “la economías planificadas se harán cada vez más grandes”.

En la era digital, el mayor peligro no es que la tecnología ponga a las sociedades libres y autocráticas en mayores enfrentamientos. Es que los peores temores de Orwell y Huxley se manifiesten en ambos sistemas, creando un tipo diferente de distopía. Con muchos de sus más profundos deseos alcanzados, los ciudadanos tendrán la ilusión de libertad y empoderamiento. Pero, en realidad, sus vidas, la información que consuman y las decisiones que tomen, estarán determinadas por algoritmos y plataformas controladas por élites corporativas y/o gubernamentales ‘unaccountable’ (que no rinden cuentas, ni son responsables ante los ciudadanos).

III.- La captura de medios en la era digital

Anya Schiffrin
Project Syndicate 
17 de agosto de 2017 
Traducido y glosado por
Lampadia

La edad de censores redactando físicamente los periódicos, prácticamente, ha terminado. Pero la libertad de prensa sigue siendo muy vulnerable, incluso en las democracias desarrolladas, ya que los gobiernos y los intereses creados se involucran en una especie de control ‘soft’, que se asemeja a una captura regulatoria.

Los últimos años no han sido buenos para la libertad de expresión.

Los gobiernos de Polonia, Hungría y Turquía se han vuelto cada vez más autoritarios y, como los líderes en los Balcanes, China y Rusia, están cada vez más ansiosos por controlar el discurso público. En los Estados Unidos, también, el presidente Donald Trump intenta implacablemente desacreditar a los medios de comunicación, y su administración es inaccesible a la prensa.

Los economistas usaron el término “captura” después de la crisis financiera de 2008 para describir cómo los reguladores, que a menudo provenían de (y regresaban) a la industria que se suponía que debían supervisar, no controlaron el sector adecuadamente. La captura de medios funciona de la misma manera, con líderes políticos que son dueños directos de los medios de comunicación.

En una versión menos extrema que la de Erdoğan en Turquía, Trump ‘bullea’ a sus críticos, como CNN y The New York Times, alentando a otros, como el Wall Street Journal, a tratarlo favorablemente.

Tal captura de medios es vital para permitir que los gobiernos, especialmente aquellos que persiguen lo que podrían ser políticas impopulares, puedan mantener el apoyo público.

Así como la captura de medios configura las percepciones del público, también puede influir desarrollos económicos. La economista Maria Petrova sostiene que la captura de los medios puede alimentar la desigualdad, especialmente si los ricos‘los capturan’ (en lugar de los políticos, que a menudo pueden ser destituidos).

La captura de medios no es un fenómeno nuevo. Pero se suponía que el Internet debía liberarnos de él, al menos aquellos en países sin censura abierta online. A medida que cayeron las barreras de entrada, se creía que la proliferación de los medios de comunicación dificultaría su captura. Incluso si se capturaran algunos canales, los medios aún podrían ser un eficaz guardián, siempre y cuando haya diversidad suficiente. Esta expectativa se reforzó con la suposición de que una mayor competencia podría conducir a noticias de mayor calidad.

Pero lo opuesto puede haber sucedido. El aumento de los medios digitales hizo insostenibles los modelos comerciales de los medios de comunicación tradicionales. Los anunciantes migraron a Internet. Como resultado, los medios tradicionales han sufrido caídas abruptas en los ingresos y pérdidas de empleos en gran escala.

Los menores recursos socavaron la calidad de la prensa, los medios con problemas de liquidez, intentan atraer a audiencias más amplias. La necesidad de perseguir clics en sitios como Facebook, Twitter y Google erosionó la capacidad de los propietarios de medios más convencionales para desempeñar su función tradicional de garantizar la responsabilidad.

La disminución de ingresos de los medios, promovió otra forma clave de captura: cambió el incentivo de ser dueño de un medio de comunicación. Si un periódico no genera un rendimiento económico adecuado, el principal incentivo para comprar o gestionar uno, es lacapacidad de influir.

A medida que el panorama de los medios se preste a su captura, la responsabilidad política y corporativa solo disminuirá. Por eso es que el Centro de Asistencia Internacional de Medios acaba de publicar un nuevo informe que destaca el fenómeno y pide soluciones.

Los medios de comunicación libres y saludables son esenciales para una democracia que funcione bien. Si queremos protegerla, debemos defender la libertad de prensa, a toda costa.

IV. Los nuevos monopolistas

Mordecai kurz
Project Syndicate
22 de septiembre de 2017
Traducido y glosado por
Lampadia

Si bien las innovaciones en tecnología de la información han transformado la forma en que las personas viven, trabajan y se conectan, el patrón de crecimiento de la industria de TI ha contribuido a ampliar la brecha entre ricos y pobres. Abordarlo requerirá nuevos esquemas impositivos y la modernización de la legislación antimonopolio.

Durante más de 30 años en las economías avanzadas, particularmente en los Estados Unidos, la riqueza y la desigualdad de ingresos han aumentado, los salarios reales (ajustados a la inflación) han aumentado lentamente, y los jubilados han enfrentado caídas en las tasas de interés sobre los ahorros. Esto ha ocurrido mientras que las ganancias corporativas y los precios de las acciones han aumentado de forma pronunciada. Ahora, la investigación que realicé muestra que estos cambios fueron causados ​​principalmente por el aumento de la tecnología de la información (TI) moderna. [Una interpretación más realista que la adoptada por el populismo de los nuevos líderes de los países desarrollados].

La TI ha mejorado enormemente la vida de las personas. Pero, al permitir el aumento del poder de monopolio y al facilitar las barreras de entrada, el crecimiento de TI también ha tenido importantes efectos negativos económicos, sociales y políticos, incluida la proliferación de “noticias falsas”.

Una vez que una empresa innovadora establece el dominio, el tamaño se convierte en una ventaja. Estas ventajas de costo y economías de escala son casi imposibles de superar para los competidores.

Además, debido a que estas empresas obtienen su poder de la información, sus posiciones se ven mejoradas por su capacidad de utilizar la información privada de sus clientes como un activo estratégico.

Un ‘paper’ reciente, que mide los efectos económicos del poder monopólico, aproxima los niveles por encima de los cuales las ganancias o los valores de las acciones no son eventos puramente fortuitos, sino más bien un reflejo del poder del monopolio. Con estos niveles, mide el componente de monopolio del valor total de las acciones, lo que llama “riqueza monopólica”, y el de las ganancias o rentas monopólicas.

La siguiente figura muestra la riqueza monopólica como porcentaje del valor total del mercado de valores entre 1985 y 2015. No había riqueza monopólica en los años ochenta. Pero a medida que la industria de TI se desarrolló, la riqueza monopólica aumentó drásticamente; alcanzando el 82% del valor total del mercado de valores en diciembre de 2015.

En 1960, el porcentaje de todos los activos corporativos financiados con deuda era inferior al 20%. Para el 2015, esa participación había aumentado a aproximadamente 80%, lo que significa que la mayoría de los capitales, en poder de las corporaciones públicas de hoy en día, son propiedad de operadores bursátiles.

Como se muestra en la tabla siguiente, nueve de las diez empresas con mayor riqueza monopólica en diciembre de 2015, están relacionadas con TI, centrándose en las comunicaciones móviles, las redes sociales, retail online y las medicinas.

Los ingresos creados por empresas con poder monopólico se dividen en tres tipos: ingresos laborales, ingresos por intereses normales pagados al capital, y ganancias monopólicas. Los datos muestran que en la década de 1970 y principios de 1980, las gananciasmonopólicasfueron insignificantes. Pero desde 1984, la participación de las ganancias monopólicasha aumentado constantemente; alcanzó el 23% de los ingresos totales producidos por las empresas estadounidenses en 2015.

El aumento de la productividad y la acumulación de capital aumentan los salarios y el ingreso de capital, pero el poder monopólico reduce sus participaciones en el ingreso.

¿Por qué, entonces, el creciente poder de monopolio en el sector de TI hizo que los ingresos y la riqueza se concentraran en menos manos, lo que condujo a un aumento en el ingreso personal y la desigualdad de la riqueza?

Una parte de la respuesta es que el creciente poder de monopolio aumentó las ganancias corporativas y elevó drásticamente los precios de las acciones, lo que produjo ganancias que fueron disfrutadas por una pequeña población de accionistas y administradores corporativos.

Las innovaciones de TI exitosas han concentrado la riqueza en menos manos, a menudo más jóvenes.Esto no era cierto en el siglo XX, cuando las principales innovaciones en sectores líderes como los automóviles requerían grandes inversiones de capital de riesgo. Con más inversionistas, la riqueza creada se distribuía de manera más amplia.

Los efectos secundarios negativos de TI no se comprenden bien, y se necesita con urgencia una discusión pública sobre cómo regular el sector. Tres consideraciones son críticas. En primer lugar, debido a que la mayoría del poder monopólico basado en la tecnología, no viola las leyes antimonopolio existentes, la regulación de TI requerirá nuevas medidas. También se necesitan nuevos conceptos de interés público para regular los nuevos canales de información pública, como las redes sociales. En segundo lugar, será necesario adaptar los impuestos a la renta y al patrimonio que tengan en cuenta el poder monopólico de las empresas de TI. Y, en tercer lugar, las leyes destinadas a proteger la información privada, deberían reevaluarse, para garantizar que las empresas de TI sean incapaces de sacar provecho de su explotación y manipulación.

El público debe desarrollar una comprensión más profunda de los efectos económicos de TI, particularmente cómo las tecnologías que han mejorado las vidas de tantas personas están enriqueciendo las vidas de tan pocos.

Lampadia




Zar Putin I de Rusia enfrenta protestas políticas

Putin ha ido construyendo su base de poder absoluto con el discurso de reconstruir la  ‘Gran Rusia’ mucho antes de que Trump anunciara ‘América Primero’. Según afirma Timothy Garton Ash (La doctrina del resentimiento), para Putin, todo es parte de un gran ajedrez geopolítico de jugadas maestras y contra jugadas, basada en sus deseos de recuperar los territorios  perdidos después del colapso del imperio soviético. Pues por más increíble que pueda parecer, “Putin tenía y sigue teniendo una definición ‘völkisch’, amplia y racial, de los rusos: ahora habla del ‘russkiy mir’, literalmente, el ‘mundo ruso’”.

El pasado lunes fue el ‘Día de Rusia’, fecha en que se conmemora la Declaración de la Soberanía Nacional de la Federación de Rusia, en el que suelen darse festividades en todo el país. Este año, las celebraciones fueron reemplazadas por manifestaciones anti-corrupción con la participación de miles de personas.

Según la BBC, unos 200 permisos de protesta se presentaron en todo el país y se concedieron 169, en ciudades como Vladivostok y Norilsk, que van de un extremo al otro. El cambio de locación para las protestas no fue aceptado, y la policía tuvo la libertad para detener a los manifestantes, lo que resultó en más de 1,000 detenciones en Moscú y San Petersburgo.-: 

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De izuierda a derecha: (cartel azul) “Es una lástima. Cobardes. Ladrón”. (Cartel rojo) “La corrupción nos está robando nuestro futuro”
Fuente: El Pais Internacional

Las imágenes de jóvenes detenidos se están convirtiendo en el símbolo del movimiento de oposición. Los manifestantes gritaban consignas como “Fuera el zar”, “Putin ladrón”, “Rusia será libre”, “Somos el poder”, y “Medvédev dimisión”. Esta vez, incluso el gigante pato inflable fue “arrestado”, que era usado para burlarse del primer ministro Dmitry Medvedev que hace un tiempo construyó una casa para patos dentro de una de sus lujosas residencias.

Image result for duck arrested russia Fuente: Twitter

¿A qué se deben estas protestas? El día nacional fue elegido por el líder de la oposición Alexey Navalny como la última ronda de manifestaciones diseñadas para conseguir apoyo en su intento de derrocar al presidente Vladimir Putin en las elecciones del próximo año. El activista de 41 años ha sido un crítico abierto de lo que él dice es un régimen corrupto liderado por Putin y sus aliados -en particular el primer ministro Dmitry Medvedev- y está usando alegatos de impropiedad del gobierno para reunir apoyo.

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Fuente:  meduza.io

La participación política de Navalny, descubriendo y exponiendo la corrupción en el gobierno ruso, así como galvanizando a las masas en una escalada sin precedentes, con la esperanza de promover “un estado democrático moderno”, ha hecho que protagonice muchas escenas en tribunales y centros de detención a lo largo de los años. Esta vez, Navalny fue detenido antes de que siquiera llegara a la manifestación y fue condenado a 30 días de arresto administrativo.


Fuente:  ElPaís Internacional

Estas manifestaciones reflejan un cambio generacional. Fueron protagonizadas por gente joven, de alrededor de veinte años, la mayoría de los cuales no tienen memoria de su país sin Putin. “El objetivo de la democracia es que se necesitan diferentes gobernantes en diferentes momentos”, dijo un estudiante de ingeniería informática que asistía a su primera protesta. “Han estado en el poder durante 17 años, ya es hora de cambiar al líder”.

Image result for russia day protest Fuente: livejournal.com

A medida que las marchas se extendían por todo el país, el oficialismo permaneció en silencio. La televisión estatal ignoró las protestas y se centró en las ferias y eventos conmemorativos, que atrajeron a decenas de miles sólo en Moscú. Pero el hecho de que se hayan formado tantas manifestaciones apunta a la debilidad del sistema que Putin ha creado. Las protestas atacan la legitimidad y la falta de rendición de cuentas de su gobierno, que algunos analistas llaman su mayor vulnerabilidad. Aparentemente, al igual del imperio soviético, la dictadura de Putin, tendría pies de barro.

En Washington, donde el presidente Trump se ha enfrentado a una creciente controversia sobre la intromisión de Rusia en las elecciones de 2016, la Casa Blanca criticó la respuesta de Moscú a las protestas. Recordemos que hace unas semanas, Putin reconoció que ‘patriotas rusos’ habían intervenido las elecciones en EEUU y Francia y que era un fenómeno difícil de controlar.

Related image Putin necesita 10 policías para controlar a una estudiante
Fuente: BBC.com

“Detener a manifestantes pacíficos, observadores de derechos humanos y periodistas es una afrenta a los valores democráticos fundamentales”, dijo el secretario de prensa de la Casa Blanca, Sean Spicer, en una declaración. “El pueblo ruso, como todo el mundo, merece un gobierno que apoye un mercado abierto de ideas, una gobernanza transparente y responsable, la igualdad de trato bajo la ley y la capacidad de ejercer sus derechos sin temor a represalias”.

Por su lado, Trump tampoco está libre de acusaciones de corrupción. La admisión del presidente Donald Trump de que está siendo investigado por despedir al director del FBI, James Comey, quien lideraba la investigación sobre la supuesta intrusión electoral de Rusia en EEUU, da más razones para acusarlo de obstruir la Justicia.

“Estoy siendo investigado por despedir al director del FBI por el hombre que me dijo que despidiese al director del FBI. Caza de brujas”, dijo Trump el viernes en Twitter. El mensaje del mandatario añade más interrogantes que certezas en un nuevo giro de la compleja investigación sobre la presunta injerencia rusa en las elecciones de 2016, y de la que se ha inhibido el fiscal general, Jeff Sessions, por sus encuentros con el embajador de Moscú en Washington, Serguéi Kislyak.

Esta no es la primera de las barbaridades que viene haciendo o proponiendo Trump, como cuando divulgó códigos secretos – en otras palabras, algo de la información altamente clasificada que el gobierno de los EEUU – al embajador y  ministro ruso de relaciones exteriores, durante una reunión en la Oficina Oval. Ver en Lampadia: Donald Trump: You are fired!

A estas alturas queda claro que tiene una relación cercana (de negocios y quién sabe más) con el nefasto Vladimir Putin, quien con una prepotencia inusitada en la política del mundo pos ‘guerra fría’, ya había hecho retroceder a Obama en Ucrania y Siria, algo que ayudó en el empoderamiento de Putin, dentro y fuera de Rusia. Ver nuestras notas anteriores sobre Rusia y Putin:

Riesgos globales según el Economist Intelligence Unit

Una lucha de extremos que solo trae inquietud al mundo

Un occidente débil frente a un Putin envalentonado

Recordemos que cuando Vladimir Putin ascendió a primer ministro en 1999, el entonces presidente Boris Yeltsin declaró: “He decidido nombrar a la persona que, en mi opinión, es capaz de consolidar nuestra sociedad, garantizar la continuación de las reformas en Rusia con el apoyo de las más amplias fuerzas políticas. Él será capaz de ponerse al frente de los que en el nuevo siglo XXI tendrán que renovar nuestra gran Rusia”.

Hoy en día, Rusia a logrado resurgir como potencia mundial. A frenado a la Otan en la frontera de lo que considera sus zonas de ‘influencia’, intervino sin tener que dar marcha atrás en Georgia, Crimea, la desestabilización del resto de Ucrania, paró a Putin en Siria, habría auspiciado a los “hackers” de las elecciones en EEUU y Francia, mantiene relaciones peligrosas con Trump y su entorno, y hoy, Rusia es nuevamente un factor determinante en la geopolítica global.

Ahora el miedo es hasta dónde llega la presencia política y militar de Rusia en sus distintos frentes. Ya ha dejado clara su decisión de reubicar a su país en la cúspide  geopolítica. Esta influencia del ‘oso ruso’ emerge ante la falta de liderazgo en Occidente, sobre todo después de la paulatina retirada de los EEUU. Lampadia

 




Los peligros de los Fake News

Hasta pocos meses, y en contadas ocasiones, hemos escuchado hablar de ‘relatos’ con los que gente comprometida con ciertas acciones políticas, mayormente de izquierda, pretendían reescribir la historia. Estos relatos, repetidos una y otra vez, creaban una suerte de ‘verdades’  falsas.

Un ejemplo a nivel internacional es el referido a los juicios de valor adscritos al llamado ‘Consenso de Washington’, supuesto manifiesto del ‘neoliberalismo’, que como puede apreciarse en el enlace, no contiene nada que justifique su actual representación política. En el Perú, tenemos varios ejemplos. Mencionaremos solo uno: ‘la minería exporta piedras y no tiene valor agregado. Sin embargo, la realidad es que nuestras exportaciones mineras tienen un alto valor agregado, el doble que las exportaciones de manufacturas (67% vs. 33%). No solo eso, como hemos indicado anteriormente, en el año 2012, un refinado de cobre solo hubiera generado un incremento de valor del orden del 14%. Y para producir refinados necesitaríamos ser intensivos en capital y en energía, y además, desplazar de los mercados a los actuales productores globales. Este relato se repite constantemente, incluso lo hace así el vice-rector de la PUCP.    

Recientemente se ha llevado el tema de los relatos al mundo de los medios de comunicación  con las llamadas ‘Fake News’, o noticias falsas. Que no son otra cosa que narraciones falsas creadas para los medios de comunicación, con el afán de distorsionar, moldear y manipular a la opinión pública.

La multiplicación de noticias falsas se hizo evidente durante la disputada campaña presidencial de Estados Unidos del año pasado, cuando numerosas historias políticas que contenían información inventada aparecieron en Internet. Con las redes social, tales seudo noticias, diseñadas para atraer dólares publicitarios o promover causas políticas, se pueden propagar más rápido que nunca.

Pero las noticias falsas tienen implicancias mucho más allá del mundo de la política. La comprobación de hechos y la importancia de las fuentes se vuelven aún más significativas para los conglomerados de medios tradicionales, mientras que las plataformas de medios sociales son acusadas cada vez más por la falta de sustento del contenido que se publica en sus plataformas.

Durante el período previo a las elecciones en Estados Unidos, aparecieron en las redes sociales, un sinnúmero de noticias falsas, algunas de las cuales llegaron a ser difundidas ampliamente entre el electorado. Un artículo dijo falsamente que el Papa había respaldado a Donald Trump, mientras que otro sugirió que altos funcionarios del Partido Demócrata estaban involucrados en una trampa de prostitución infantil, una conspiración conocida como “Pizzagate”, y que provocó un tiroteo en un conocido local de Pizzería en Washington.

Nunca se sabrá cuán grande fue el impacto de estas historias en las elecciones, pero fueron lo suficientemente prevalentes como para que los países de todo el mundo se hayan dado cuenta y hayan empezado a tomar medidas para combatir las noticias falsas.

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Fuente:  marketingdirecto.com

La semana pasada, un discurso falso exacerbó las tensiones sin precedentes entre Qatar y sus países vecinos. La agencia de noticias oficial de Qatar fue hackeada y publicó un reporte (falso) en el que citaba al jeque Tamim bin Hamad Al-Thani, gobernante del país, diciendo que Irán era una “potencia islámica que no puede ser ignorada”, entre otros comentarios inventados. Esto reavivó las subyacentes tensiones en la región y ha causado que varios países se retiren del Acuerdo de Doha.

El mes pasado, Alemania aprobó una ley en virtud de la cual las organizaciones de medios sociales podrían ser multadas por no eliminar contenido clasificado como noticias falsas. Facebook ha estado muy en desacuerdo con la ley, argumentando que “el proyecto de ley ofrece un incentivo para eliminar contenido que no es claramente ilegal cuando las redes sociales enfrentan una amenaza desproporcionada de multas”.

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Fuente:  twitter.com

La respuesta de Facebook condujo a una interesante discusión sobre qué determina que una noticia sea “falsa”. Si el 90% del contenido de un informe es correcto pero una línea es incorrecta, ¿debería invalidar todo el informe? ¿Es responsabilidad de una organización de medios sociales monitorear cada pieza de contenido que se comparte en su plataforma y juzgar la legitimidad de una fuente determinada?

Entonces, ¿quiénes son los culpables y qué se debe hacer para evitarlo? Hay muchos responsables por las noticias falsas, desde los creadores, hasta los distribuidores, los consumidores, la publicidad y los canales de comunicación que las apoyan. La industria de la tecnología, también, tiene un rol en esta batalla. Mientras que la propagación de la desinformación es anterior a Internet, ahora la comunicación de masas la ha vuelto virtualmente indistinguible y la información puede persistir y llegar a audiencias más grandes a través de sitios web, anuncios en línea, medios sociales y resultados de buscadores, a velocidades prácticamente infinitas.

Afortunadamente, muchos están tomando cartas en el asunto. Google, por ejemplo, ha hecho algunos cambios en sus servicios e iniciativas para frenar el flujo de noticias falsas en sus plataformas. Esto es una gran (y verdadera) noticia. Además, Google ha optado por eliminar el financiamiento en los sitios que alberguen/promueven noticias falsas de cualquier manera. Google no permitirá que dichos sitios anuncien en su plataforma.

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Fuente:  fotolia.com

Empresas como Google y Facebook ahora también están trabajando con empresas externas para calificar la información y su veracidad en sus plataformas. Facebook ha desarrollado una alerta de “contenido disputado”, que informa al usuario de que lo que está leyendo o está a punto de compartir puede no ser verdad. Google tiene una etiqueta de verificación de hechos que se muestra en los resultados de su motor de búsqueda para obtener información que puede ser cuestionable.

Facebook está dando a los miembros de la comunidad una herramienta para señalar las noticias que consideran falsas, similar a la forma en que las redes sociales permiten reportar contenidos abusivos. La desventaja es que, al igual que el contenido abusivo, las redes sociales se inundan con este tipo de informes y por lo tanto es muy difícil responder rápidamente. Además, hay personas que reportan noticias simplemente porque no están de acuerdo con ella, no porque sean falsas.

Sin embargo, el método más efectivo (y el más difícil de lograr) para evitar caer en estos Fake News es educar al público. Los medios tienen la obligación de ayudar al público a convertirse en consumidores más críticos de la información online. Los jóvenes de hoy en día viven en las redes sociales y son expertos en su uso, pero a menudo no son conscientes de su poder: el peligro de el mal uso de su información personal, su privacidad y su vida. Todos tenemos la labor de ayudarlos a superar esa brecha de conocimiento.

Las noticias falsas son uno de los mayores riesgos para todos nosotros así como la contaminación, el cambio climático, el terrorismo alrededor de los cuales se escriben ‘relatos’ y los Fake News, que están obstruyendo la verdad y están arriesgando la seguridad de todos nosotros. Lampadia




Los Comités Distritales de Seguridad Ciudadana

Los Comités Distritales de Seguridad Ciudadana

En el siguiente informe sobre la seguridad ciudadana (parte 2), se muestra el desarrollo de los llamados comités distritales de seguridad ciudadana. Estos son equipos de trabajo que debieran monitorear la seguridad de los distritos y coordinar acciones para contrarrestar la delincuencia.

Casi todos los distritos han formado los comités, sin embargo, por la frecuencia de sus reuniones, podemos concluir que muchos de ellos han cumplido con el formalismo, más que haber incorporado este organismo a la vivencia de los distritos.

El mejor ejemplo de consecuencia y responsabilidad, es el caso de Miraflores, que, por supuesto, muestra ya resultados muy favorables. Es importante que los vecinos presiones a los alcaldes más flojos para aprovechar una efectiva contribución de estos comités a una de las mayores preocupaciones ciudadanas.

Este artículo es parte de nuestra biblioteca virtual: Estado del Siglo XXI, que recomendamos revisar como un espacio donde compilamos los distintos aspectos de las imperiosas reformas del Estado.

Fuente: Municipalidad de Miraflores – Lima

Hemos visto en el informe anterior que, como resultado de una política de palo y zanahoria que obliga e incentiva a la vez a los gobiernos locales a formar los Comités de Seguridad Ciudadana y formular los planes de seguridad respectivos, el 2015 un 86.64% de las municipalidades distritales y sus Comités Distritales de Seguridad Ciudadana (CODISEC), presididos por el alcalde e integrados por el o los comisarios del distrito, el jefe del serenazgo y otras autoridades, formularon sus planes de seguridad ciudadana. También advertimos que nos queda una duda acerca de si esos planes se aplican realmente o son, en alguna proporción, meramente declarativos, dada la disminución de los patrullajes en los barrios registrada por el INEI. Pero de todos modos sí sería posible afirmar que, dados los instrumentos punitivos e incentivadores aplicados, los CODISEC se están empezando a institucionalizar, aunque en diversa medida.

Esto es importante porque no cabe duda que la seguridad ciudadana mejorará si los alcaldes asumen el liderazgo en este tema e integran esfuerzos y recursos con la Policía. Esto es algo que debe consolidarse. Para eso se necesita que los CODISEC se reúnan con una frecuencia suficiente y regular, examinen la situación con mapas del delito actualizados y tomen decisiones.

¿Una reunión mensual es suficiente? Quizá no. En Lima, por ejemplo, el CODISEC de Miraflores, de lejos el mejor, se reúne religiosamente una vez por semana durante una hora, pero la mayor parte tiene reuniones más o menos mensuales. “Entre enero y agosto del 2015, el CODISEC de Miraflores se reunió en 32 ocasiones; el de Santa María del Mar, en 25; el de Puente Piedra, en 15; y el de Punta Hermosa, en 13. Por el contrario, el de Chorrillos solo tuvo 3 reuniones; el de La Punta, 5; y el de La Victoria, 6. La gran mayoría de comités se reunieron entre 7 y 10 ocasiones en el período descrito”[i]. Lo podemos ver en el siguiente cuadro:

Fuente: IDL, Seguridad Ciudadana, Informe Anual 2015

El caso de Miraflores

El caso más destacado es, precisamente, el de Miraflores, donde el factor decisivo ha sido el liderazgo de los alcaldes desde la época de Alberto Andrade quien, ante el repliegue de la policía dedicada a combatir a Sendero Luminoso en los 80, fue el segundo alcalde, luego del de San Isidro, en organizar en 1990 el Serenazgo en su distrito. El papel decisivo de la municipalidad en la seguridad ciudadana en Miraflores se ha consolidado con el alcalde Jorge Muñoz, elegido por primera vez el 2010 y reelegido el 2014.

Muñoz reúne todos los viernes de 8 a 9 de la mañana al CODISEC. Al 24 de marzo del 2016 llevaba ya 248 reuniones celebradas. Asisten los dos comisarios del distrito, el jefe de la DIVINCRI (que atiende a tres distritos: Miraflores, San Isidro y Lince), el responsable de Tránsito, el jefe del Escuadrón de Emergencia Sur 1 (patrulleros inteligentes, abarca varios distritos), la Capitán de la Comisaría de la Mujer y el Niño, que es multi-distrital, los jefes de las tres áreas de serenazgo, representantes de los vecinos organizados y de empresas y la sociedad civil, los dos fiscales de las fiscalías que la municipalidad atrajo al distrito construyéndoles sus instalaciones, el director hospital Casimiro Ulloa, la gobernadora y la jueza de paz.

Son reuniones de una hora en las que se escucha los reportes de incidencias de las dos comisarías, de la DIVINCRI, de las tres áreas de serenazgo, y de las fiscalías, que se cruzan con las estadísticas integradas y geolocalizadas del serenazgo y la policía, para decidir en qué áreas intensificar el patrullaje integrado o realizar operativos conjuntos u otras acciones. La Central de Serenazgo de la municipalidad integra las estadísticas de ocurrencias de la Policía, el Serenazgo y las fiscalías en un mapa del delito artesanal donde se identifican las zonas calientes y a partir de allí se decide qué intervenciones efectuar, en coordinación con distintas entidades.

Para ese fin, el distrito ha sido dividido en tres áreas y cada área en varios sectores. Son, en total, 39 sectores. En cada sector el Serenazgo tiene como mínimo una camioneta y/o auto, una moto y personal a pie. “Las estadísticas integradas que manejamos con la PNP nos sirven para precisar las zonas ‘calientes’, donde reforzamos con mayor número de vehículos y personal de Serenazgo y tenemos presencia de la policía”, nos explica Augusto Vega, gerente de seguridad ciudadana.  

Como consecuencia, en 2015 se realizaron más de 540 operativos conjuntos entre el Serenazgo y la PNP. Hay un módulo integrado PBP-Serenazgo en la Central Alerta Miraflores (en la Central de Serenazgo) y existe, por supuesto, patrullaje integrado. Hasta hace pocos meses la municipalidad pagaba 15 policías en sus días de franco, para que se integren a los vehículos del Serenazgo. Con la abolición del 24 X 24 la municipalidad recibe 10 policías de manera gratuita para el patrullaje integrado. La PNP les ha asignado, además, 15 halcones (policías en motocicletas).

Pero el Serenazgo tiene bastante más vehículos que las comisarías del distrito. Estas poseen unas unidades, pero por lo general ya vetustas y que la municipalidad debe reparar. El Serenazgo, en cambio, no solo despliega 850 serenos en las calles, sino que dispone de 161 vehículos (autos, camionetas, motos, Segway, ambulancias, coasters y bicicletas), 500 radios Tetra y 50 patrullas con mini cámaras HD.

La municipalidad ha creado una aplicación para celular, “Miraflores”, por medio de la cual cualquiera puede llamar al número 313-3773 de “Alerta Miraflores”, ubicada en la Central de Serenazgo y desde donde se irradia al  105 de la Policía. “Alerta Miraflores” toma la llamada, la procesa, la atiende, y queda registrada. Funciona desde la época de Fernando Andrade y es muy usada por los vecinos, quienes llaman a la menor sospecha. Tiene más de un millón de casos acumulados.

Además, la municipalidad tiene cuentas en redes sociales para las denuncias o quejas, que son bidireccionales. Por ejemplo @miraflore24h, en twitter, que tiene más de 65 mil seguidores y que ha servido, por ejemplo, para tender ‘planes cerco’ inmediatos cuando un tuit ha avisado del robo de un vehículo. En dichos ‘planes cerco’ se activa incluso el Serenazgo sin Fronteras, que funciona muy bien, según el alcalde Muñoz, gracias a que los serenazgos de Miraflores, San Isidro, San Borja, Surco, Surquillo, Barranco y otros distritos están interconectados entre sí y con la Policía gracias al sistema Tetra que todos han adquirido.

Fuera de esto, la Central de Serenazgo tiene 12 mil POS de establecimientos comerciales o restaurantes integrados, que poseen una tecla de alarma silenciosa que avisa a la Central ante cualquier evento. Ha firmado, además, convenios con compañías de taxi (440 taxis afiliados) y con los delivery de tres empresas a fin de que reporten cualquier hecho delictivo o sospechoso. Y ha instalado 256 cámaras de vigilancia en puntos estratégicos. Fuera de esto, ha censado y capacitado a 950 vigilantes privados.

Los resultados no se han hecho esperar. En el siguiente cuadro vemos como el total de delitos ha descendido en un 55% entre el 2012 y el 2015. Todos se refieren a distintos tipos de robos. Lo que han caído de manera notoria son los robos a transeúntes en la vía pública, a las viviendas y a transeúntes dentro de locales comerciales. 

   Fuente: Estadísticas Integradas, Comité de Seguridad Ciudadana Miraflores, enero 2016

El cumplimiento de las metas contenidas en el plan de seguridad ciudadana le ha permitido a la municipalidad recibir el 2015 S/. 65,176 adicionales transferidos por el programa de incentivos municipales del Ministerio de Economía y Finanzas.

Lo que el alcalde Muñoz ha conseguido es que los comisarios le reporten a él y al CODISEC, algo que no era fácil dada la cultura secretista y autodependiente de la Policía, que siente que solo debe subordinarse a su propio comando. Este logro ha llegado al punto en que ahora los comisarios por lo general le piden al alcalde que le solicite al ministro que los mantenga en su puesto de Comisario en Miraflores, cargo que por lo general rota anualmente, un tiempo sin duda absurdamente corto.  

Para conseguir la colaboración leal de los comisarios fue estratégico poner como jefe de Serenazgo no a un ex oficial de las fuerzas armadas sino de la Policía, el coronel ® Juan Briceño, ya fallecido, de mucho ascendiente. Esto fue clave, entre otras cosas, porque hablaba el mismo lenguaje que los policías. Y lo propio ocurre con su sucesor, el coronel PNP ® Augusto Vega García.

Pero el elemento determinante para conseguir la colaboración eficaz de todos los integrantes del Comité, incluyendo principalmente a los Comisarios, ha sido un sistema bien organizado de respuesta y coordinación basado en un cuerpo de serenazgo bien equipado y dotado, en la conexión inmediata de los vecinos y los establecimientos con la central de alerta –mediante una aplicación, redes sociales y POS en las tiendas-, y en la rigurosa frecuencia  semanal de las reuniones del CODISEC que puede tomar decisiones gracias a las estadísticas integradas y georeferenciadas que elabora el Serenazgo con los insumos de la policía. Es eso lo que le ha dado fuerza y autoridad a la municipalidad.

El alcalde es en la práctica el jefe de la seguridad en Miraflores.

Entrevistas

Muñoz, Jorge, Alcalde de Miraflores, 24-3-2016

Vega García, Augusto, Gerente de Seguridad Ciudadana de la Municipalidad de Miraflores, 29-3-2016

Bibliografía

Centro Internacional para la Prevención de la Criminalidad (CIPC): Informe experiencias exitosas en prevención de la criminalidad en América Latina. Una perspectiva territorial de las políticas públicas de seguridad ciudadana en América Latina, Diciembre 2015.

Estadísticas Integradas, Comité de Seguridad Ciudadana Miraflores, enero 2016

IDL, Seguridad Ciudadana, Informe Anual 2015

Lampadia
 


[i] Instituto de Defensa Legal: SEGURIDAD CIUDADANA INFORME ANUAL 2015, Balance del gobierno de Ollanta Humala: un quinquenio sin cambios sustanciales. Lima, diciembre del 2015

 

 

 




Los peronistas pretenden sabotear el gobierno de Macri

Los peronistas pretenden sabotear el gobierno de Macri

Después de una histórica elección, el recién elegido presidente de Argentina, Mauricio Macri, heredará una economía en ruinas, una débil moneda y un arbitraje internacional por deudas en miles de millones de dólares. Aunque el camino por delante será difícil, muchos observadores esperan que las políticas de centro-derecha con una inclinación pro-empresarial de Macri distancien al país de las de su predecesora, Cristina Fernández de Kirchner.

Después de 12 años de gobiernos peronistas bajo Fernández y su difunto esposo, Néstor Kirchner, la primera orden del día será un acuerdo sobre la deuda potencial, el legado de la crisis económica del 2001 que provocó un default (no pago) de US$ 100 mil millones de dólares de deuda soberana, el más grande de la historia. Una prolongada batalla legal y la falta de liderazgo de Fernández obligaron al país a caer de nuevo en default el año pasado.

Macri ha prometido reimpulsar la tercera economía más grande de América Latina, que estaría cayendo nuevamente en una recesión, poniendo fin a las restricciones proteccionistas a la importación, la reducción de impuestos ​​sobre las exportaciones agrícolas y ganaderas, el control de precios y eliminando la tasa de cambio oficial que está inflando el peso argentino.

Pero la gran polémica nacional en los días previos a la toma de mando de Macri se ha limitado a una disputa entre él y Kirchner. Comenzó con un desacuerdo acerca de dónde se llevaría a cabo la ceremonia de inauguración. Macri quería tomar el juramento del cargo en el Congreso y luego recorrer los dos kilómetros al icónico palacio presidencial, la Casa Rosada, para recibir la banda presidencial y el cetro de Kirchner.

Kirchner, sin embargo, insistió que todo el asunto se podría hacer en el Congreso, en consonancia con la Constitución y la tradición que ella y Néstor propusieron. Acusó a Macri de querer faltarle el respeto. Sin embargo, Macri, decidido a tener su momento de gloria, llevó el asunto a los tribunales, argumentando que Kirchner dejaría de ser presidente a la medianoche.

El tribunal falló a su favor, por lo que el país tuvo tres presidentes en cuestión de horas: Kirchner hasta la medianoche, el presidente del Senado entrante, Federico Pinedo, hasta la ceremonia de inauguración y Macri a partir de entonces.

Después de todo el enredo, Cristina Kirchner se negó a asistir a la ceremonia de su sucesor. La  ausencia del mandatario saliente en la ceremonia es la primera desde el fin del régimen militar en 1983. 

Sin embargo, no es el primer problema que estaría causando la Kirchner. Según Macri, la acusa de causar tantas dificultades como sea posible para el gobierno entrante:

  • Aprobó la delegación de miles de millones de dólares de gasto a los gobernadores provinciales, que presenta un gran problema para el país que ya tiene severas restricciones financieras.
  • Cambió el presupuesto para el próximo año, con un aumento del gasto en el Congreso, el poder judicial, las fuerzas militares y sus populares planes sociales, como Fútbol para Todos, un programa que muestra gratis los partidos de fútbol, junto con mensajes políticos.
  • Nombró a una serie de nuevos embajadores y además, algunos de sus aliados, entre ellos Alejandro Vanoli, el presidente del Banco Central, se niegan a dimitir.
  • Se ha negado a entregar la cuenta de Twitter de la Casa Rosada, apoderándose de ella y cambiándole el nombre a CasaRosada2003-2015.

La revista de The Economist fue uno de los muchos medios de comunicación que mostraron su desacuerdo con el último recambio presidencial, describiéndolo como “muy incómodo, incluso para los estándares argentinos” y le atribuye la culpa a Cristina Kirchner. Primero pone el foco en que no respetó la decisión de Mauricio Macri de hacer la toma de atributos en la Casa Rosada y luego enumera algunas decisiones de la ex presidente que influirán en el nuevo gobierno, sobre todo las económicas. “Las primeras semanas de Macri serán una prueba de su capacidad política: por las duras medidas que tomará debe culpar, y con razón, a su predecesora”, concluye el artículo.

Cada vez es más evidente que los mandatarios latinoamericanos que hicieron comparsa con Hugo Chávez y las ideas del socialismo del siglo xxi, aplicando programas masivos de asistencialismo y enfrentando la inversión privada, solo querían capturar el poder de sus países para crear gobiernos eternos, ya sea mediante el fraude, como en Venezuela y Brasil, o mediante cambios constitucionales que permitieran la reelección permanente, como en la misma Venezuela, Ecuador y Bolivia. En Argentina, los peronistas recurrieron a la reelección conyugal y planeaban la filial, pero el desastre económico y los insoportables niveles de corrupción a los que llegaron, no lo hicieron posible. Hoy se expulsó a los Kirchner, Dilma Rousseff está a punto de ser vacada, Maduro cuelga de hilos, Correa ya perdió el liderazgo y Evo Morales, cual excepción, se encamina a una quinta reelección, pero con muchas resistencias.

La batalla por recuperar a Argentina de su desastre económico, social, político y de corrupción, que lidera Macri recién empieza. La ausencia y boicot de la Kirchner es un claro símbolo de las profundas divisiones sociales y políticas que aún existen y que estarán determinadas a impedir que Macri logre promulgar unas muy necesarias reformas económicas. Esperemos que logre unir al país y encaminarlo a una senda de recuperación económica y política. Lampadia

 




Los medios en la era digital

Los medios en la era digital

La prensa se ha transformado drásticamente en un tiempo muy corto. Sólo en los últimos diez años, ha transformado velocidad, alcance y medios de comunicación a un público mucho más global. El gurú de la convergencia, Nicholas Negroponte, vaticinó hace veinte años que “lo que pueda ser digital, lo será”. La información, las noticias, lo podían ser y ya lo son. La digitalización de todo tipo de información -video, audio, texto-, junto con Internet y la globalización, ha transformado radicalmente el sector de los medios de comunicación, comenzando por la prensa escrita.

En los últimos 20 años, desde el advenimiento de la Internet, el rol del ‘papel’ ha sido cada vez más pequeño, pero las noticias nunca han sido más grandes. Las noticias han adquirido nuevas formas y conductos. Además de la impresión, la televisión y la radio, ahora tenemos la web, tabletas, teléfonos inteligentes e incluso relojes y lentes. Hemos pasado de un ciclo de noticias de 24 horas para el periódico impreso a una difusión que ha evolucionado hasta convertirse en una cuestión de segundos.

Hoy en día, la gente rara vez se ‘desconecta’ de la tecnología. Estamos en constante búsqueda de información y entretenimiento o apertura para recibirla. Como resultado, hay más conductos de información, principalmente en las redes sociales, que forman un nuevo mercado de medios digitales.

Es por eso que los sitios web de los periódicos más importantes del mundo (Google y más de 30 importantes medios de comunicación internacionales) se han asociado para crear conjuntamente el primer formato universal, de código abierto, que permitirá visualizar y difundir contenidos de manera mucho más rápida y efectiva.

El proyecto lleva el nombre de Páginas Móviles Aceleradas (AMP por sus siglas en inglés: Accelerated Mobile Pages) y se encuentra todavía en la fase prototipo. Cuando se haya completado, le permitirá a los editores, programadores de aplicaciones y usuarios cargar contenido rápidamente en sus dispositivos móviles.

Los objetivos más importantes para el representante de Google y todos los medios de comunicación y tecnología asociados son: la velocidad y la apertura. “Todos necesitamos que nuestras páginas descarguen contenido mucho más rápido, es lo que nos están pidiendo nuestros usuarios.” Cada vez que una página web tarda demasiado en cargar, los editores de todo el mundo pierden un lector y la oportunidad de obtener ingresos a través de publicidad o suscripciones. Eso es porque los anunciantes en estos sitios web tienen dificultades para conseguir que los consumidores presten atención a sus anuncios cuando las páginas se cargan tan lentamente que las personas las abandonan por completo.

Es por eso que AMP tiene como meta mejorar drásticamente el rendimiento de la web móvil. Según Google: “Queremos que las páginas web tengan una gran cantidad de contenido rico en vídeos, animaciones y gráficos y que carguen instantáneamente. También queremos lograr que el mismo código funcione a través de múltiples plataformas y dispositivos para que el contenido pueda aparecer por todas partes en un instante, sin importar qué tipo de teléfono, tableta o dispositivo móvil se esté utilizando.”

Lo más importante de este proyecto es que, en contraste con otros formatos propuestos recientemente, como ‘Instant Articles’ de Facebook o Apple News, AMP es un proyecto de software de código abierto. A partir de hoy estará disponible para cualquier desarrollador que quiera hacer uso de él, incluyendo otros medios de comunicación que no han participado en su creación.

El rápido desarrollo de nuevos productos informativos muestra la nueva tendencia en la que el teléfono móvil se ha convertido en el ‘campo de batalla’ para las empresas de tecnología que buscan mantener a los usuarios dentro de sus redes, donde puedan llegar a ellos con más productos, servicios y publicidad.

Google siempre ha desempeñado un papel protagónico en decidir qué noticia es importante. Facebook y Twitter, también. Pero ahora, más que nunca, estas plataformas no sólo determinan qué noticias nos importan, sino también la mejor manera de presentarlas y publicarlas. Y a medida que lo hacen, la industria de los medios de comunicación seguirá siendo la primera en cambiar y adaptarse constantemente. Lampadia




El extraño temor de China a una revolución de color

El extraño temor de China a una revolución de color

Por Gideon Rachman, Columnista de Asuntos Internacionales – FINANCIAL TIMES

(El Comercio, 11 de febrero de 2015)

El ministro de educación de China acaba de emitir un edicto a las universidades del país que suena como algo de la época dorada del maoísmo. “No permitan que los libros de texto que promueven los valores occidentales entren en nuestras aulas”, tronó Yuan Guiren. “Cualquier opinión que ataque o difame la dirección del partido o el socialismo nunca debe permitirse”.

Al visitar Beijing la semana pasada, me parece que es algo tarde para acabar con la influencia occidental. La capital china luce todas las marcas occidentales imaginables, desde Lamborghini a Hooters. En los cafés cerca de los campus universitarios de Beijing, los estudiantes chinos chismosean y navegan por Internet, al igual que sus homólogos occidentales. Sin embargo, esa aparente familiaridad puede ser engañosa. Al querer navegar el Internet desde mi hotel, tuve la ingenua sorpresa de darme un encontronazo con la gran muralla cibernética de China, que bloquea el acceso a Google, Twitter y muchos otros sitios más.

En los últimos meses, la altura de esa gran muralla ha subido aun más por causa de una ofensiva contra las influencias occidentales que han afectado a las universidades, los “bloggers” y los horarios de televisión. Las personas que participan directamente en políticas liberales han sufrido mucho más directamente. Las organizaciones de derechos humanos dicen que cientos de activistas han sido detenidos durante el último año. Las organizaciones extranjeras no gubernamentales también están bajo mayores escrutinios y presiones.

Esta represión apunta a una sorprendente sensación de inseguridad en los círculos gobernantes de China. Los eventos del mundo exterior han hecho que el gobierno esté cada vez más preocupado por la amenaza de una “revolución de color” que pondría en entredicho el poderío del Partido Comunista. Eso también se conecta con la ansiedad imperante acerca de la estabilidad interna de China, en momentos en que la economía se está desacelerando y que la campaña anticorrupción del presidente Xi Jinping está creando descontento entre la élite gobernante.

La ola de revoluciones en el mundo árabe causó profundas angustias en el partido comunista chino acerca de los levantamientos populares contra gobiernos no democráticos – y el caos que pueden desencadenar. El papel que jugaron las instituciones y la tecnología occidentales en avivar estas revueltas fue debidamente notado en Beijing. El hecho de que el levantamiento de Egipto de 2011 se llamó la “revolución de Facebook” y que uno de sus más prominentes activistas era un ejecutivo de Google ayudó a sellar el destino de esas dos empresas en China.

Durante el año pasado, la paranoia oficial china con respecto a la amenaza de una revolución de color ha sido avivada por los acontecimientos en Ucrania y, sobre todo, de Hong Kong. Pareciera que China honestamente comparte la perspectiva rusa del levantamiento en Ucrania, o sea, que este fue organizado esencialmente por EE.UU., utilizando todas sus nefastas herramientas, desde el Internet hasta las ONG. En abril, meses antes de que estallaran las protestas en Hong Kong, Wang Jisi, un prominente académico chino, escribió que las principales preocupaciones de los líderes de Beijing en sus tratos con EE.UU. son “los supuestos planes de EE.UU. para subvertir el gobierno chino y penetrar política e ideológicamente en la sociedad china”.

Las protestas de Hong Kong, que estallaron en septiembre, parecieron confirmar los temores más profundos de Beijing. Desde una perspectiva china, se parecía peligrosamente a la llegada de las técnicas de la evolución de color dentro de las fronteras de China: las protestas de brazos caídos, los estudiantes, los equipos de televisión extranjeros, el uso de los medios sociales y el surgimiento de un nombre pegadizo: el “movimiento

de los paraguas”. El gobierno chino tuvo éxito en bajar el tono de las protestas en Hong Kong. Pero algunos en Beijing afirman ver un patrón siniestro de intromisión occidental, que se extiende desde el mundo árabe a Ucrania, Cuba, Venezuela y ahora Hong Kong.

Más aun, todo este desorden internacional llega en un momento de tensión política en China. La iniciativa política interna de Xi es su campaña contra la corrupción, la cual ha durado más tiempo y golpeado más profundo de lo que muchos esperaban.

Se comenta que la campaña contra la corrupción goza de mucha popularidad entre los chinos, pero amenaza los intereses poderosos. En el último par de meses, el gobierno ha acusado formalmente a Zhou Yongkang, el ex jefe de policía de seguridad interna de China y anunció una investigación de Ling Jihua, antiguo alto asesor de Hu Jintao, el predecesor de Xi.

Quizás Xi esté tan perfectamente en control del sistema político que bien pueda darse el lujo de enfrentarse a poderosos grupos de interés. Pero algunos con buenos contactos en Beijing ahora especulan abiertamente sobre la posibilidad de un intento de destituir al presidente. Algunos señalan que los anteriores brotes de disturbios populares en China, como en 1989, coincidieron con fracturas en la cúpula superior del Partido Comunista.

Sin embargo, en muchos sentidos, China nunca ha lucido tan fuerte. Hace unos meses, el Fondo Monetario Internacional anunció que China es la mayor economía del mundo, al medirse por poder adquisitivo. Los líderes extranjeros están haciendo cola para entrevistarse con Xi, con la esperanza de atraer inversión china. Visto desde el mundo exterior, la aparente ansiedad que sienten los líderes políticos de China parece excesiva, incluso paranoica. Pero, como reza el famoso dicho (occidental): “Solo los paranoicos sobreviven”.