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El aprendizaje nacional sobre la izquierda

El aprendizaje nacional sobre la izquierda

Jaime de Althaus
Para Lampadia

Las revelaciones acerca de las gestiones nocturnas el presidente Castillo y la debilidad de sus explicaciones, sumadas a los hallazgos previos relacionados al ex secretario de Palacio, han generado la sensación de que nos vamos acercando al “momento vacador”. Suele ocurrir en este tipo de circunstancias que los hechos adquieren velocidad propia y se precipitan hasta el desenlace final. 

Sería bueno, sin embargo, tratar de regular la velocidad del proceso. Si alguna virtud ha tenido el gobierno de Pedro Castillo, es que ha sido un curso acelerado de capacitación nacional sobre la naturaleza y consecuencias de un gobierno de izquierda. Una verdadera escuela acerca de lo que representa la izquierda en el poder.

Los peruanos estamos aprendiendo que un gobierno de izquierda: 

  • sube el costo de vida porque siembra incertidumbre acerca de la seguridad jurídica y las reglas de juego; 

  • distribuye bonos, dádivas y toda clase de subsidios para generar apoyo político en lugar de asegurar condiciones a la inversión privada para generar empleo e ingresos;

  • destruye las reformas modernizadoras y meritocráticas que habíamos logrado con gran esfuerzo avanzar, solo para regalar privilegios clientelistas para sus fines políticos; 

  • procura darle más poder a un Estado que no funciona solo para repartir puestos entre amigos y partidarios incompetentes o prontuariados o para hacer negocios turbios; 

  • carece de cuadros y profesionales calificados; 

  • muestra cómo se contradicen y acuchillan entre ellos; 

  • transforma el crecimiento de 7 u 8% que tendríamos el próximo año por el precio de los minerales, en uno de apenas 1 o 2%, incrementando la pobreza; 

  • revela que Sendero Luminoso todavía existe y tiene planes muy claros; 

  • pretende intervenir en los ascensos de las fuerzas armadas para subordinarlas a un proyecto político que incluye una Asamblea Constituyente para perpetuarse en el poder, suprimir la democracia y estatizar parte de la economía. 

Ese aprendizaje tiene que terminar de ser absorbido por la sociedad entera para que, allí si, la vacancia, fundamentada en causales irrefutables, sobrevenga como el resultado de una demanda profunda y generalizada. 

En ese sentido, habría que seguir poniendo énfasis no en el clamor de “vacancia ya” sino en la demostración de los hechos que puedan sustentarla legítimamente. De lo contrario, un grito de vacancia demasiado fuerte en este momento, motejado de golpismo, puede distorsionar y enturbiar un proceso de concientización que puede tener efectos profilácticos de largo plazo. Lampadia

 



El hábito del sombrero

El hábito del sombrero

MIENTRAS TODO SUCEDE
Milagros Leiva
Para Lampadia

Pedro Castillo Terrones nunca usó sombrero hasta que comenzó la segunda vuelta. Hoy no se lo saca ni para ir al baño, literalmente. Cuenta su entorno que tampoco se lo saca en las reuniones de los Consejos de Ministros. No se lo saca en los aviones, en las cenas, en ninguna aparición pública y es tanta la confusión que hasta un periodista argentino lo ha confundido con un mariachi. Su cerebro nunca descansa de esa prenda que hoy se ha convertido en un símbolo de su gobierno. En efecto estamos en el gobierno del Sombrero y no habría mayor problema si debajo de esa prenda popular tuviéramos a un presidente con metas tan claras y tan definidas que no duda en comunicárselas al pueblo peruano. ¿Deben ser las personas juzgadas por su apariencia, por cómo se visten? Yo creo que no. ¡El hábito no hace al monje!, el problema es cuando el monje solo usa el hábito para ser reconocido como tal.

Cuenta la historia que sobre el forro de su abrigo de Brooks Brothers el presidente Abraham Lincoln hizo bordar: One Country, one destiny (un país, un destino). Un hombre que enfrentó la Gran Depresión con un talento innato para comunicar, así era Roosevelt quien dejó un legado tan grade en Estados Unidos que todos los gobernantes que lo sucedieron jamás han dejado de mencionarlo. Castillo todavía no borda nada en su sombrero. ¿Pero qué frase elegiría? ¿Divide y reinarás? ¿Salvo el poder todo es ilusión? ¿El hijo del pueblo que quiso, pero no supo? ¿No soy comunista, pero parezco? De saque ha demostrado ser un gobernante silente. No da mensajes a la Nación explicando al pueblo sus desafíos, a cambio lee discursos, pero cuando se sale del libreto el enredo es tan bochornoso que hasta vergüenza da.

¿Castillo es una gran incógnita? No necesariamente. Entre idas y venidas, está demostrando que la izquierda unida también puede ser vencida por la ineficacia y mediocridad puesta al servicio de la Nación. El amiguismo ha sido tan burdo en el nombramiento de puestos claves que sorprende le enorme incapacidad para convocar al talento. Varios líderes de izquierda hoy aseguran con un paternalismo desbocado que a Castillo hay que comprenderlo y hasta perdonarlo. Que es un maestro rural, que no tiene experiencia alguna en gestión y sí en reclamos, pero que lo cívico es esperar a que aprenda. El problema es que la crisis y la enorme incertidumbre y crispación no resiste aprendizaje de largo aliento; peor cuando se observa que en su gobierno existe básicamente un desgobierno.

¿Qué conejos han salido hasta hoy de este sombrero político? Un primer ministro que osa enfrentarlo, un líder del partido que a la primera le corrige la plana en un tuit y varios ministros que balbucean explicaciones diversas de la ineficacia ante una prensa incrédula. ¿Qué otros conejos saldrán? Peor aún: ¿podrá el sombrero protegerlo de la tormenta judicial que se avecina?

La Fiscalía ya fijó posición: Perú Libre es una organización criminal que entre otras cosas lavó dinero para financiar la campaña. ¿Castillo sabía de los fondos? ¿Se sacará el sombrero para contar la verdad? ¿Tendrá un conejo de la suerte o la colaboración de algún eficaz terminará por despeinarlo? Lampadia




Los estudiantes deben estar aprendiendo

Los estudiantes deben estar aprendiendo

Jorge Ferradas
Subdirector de Trener y consultor en temas educativos
Para Lampadia

A pesar de que a los esfuerzos del MINEDU por armar el programa “Aprendo en Casa” como una plataforma multicanal, dotarla de contenido y ponerla rápidamente a disposición, se sumó la dedicación de muchísimos maestros y el trabajo de muchos estudiantes, la deserción escolar en la escuela pública se ha incrementado a lo largo del año. La calidad de los aprendizajes se ha deteriorado aún más y estamos ante una tragedia educativa que se suma a la de salud y a la económica.

Lo que fue una buena solución de emergencia se convirtió en permanente y, como era previsible, los canales unidireccionales (TV y radio) implicaban una dedicación que, en medio de angustias sanitarias y económicas, iba a ser muy difícil de mantener durante todo el año escolar. El canal bidireccional necesita organización, conectividad y dispositivos adecuados. Los planes de datos de un celular y el WhatsApp no lo son y una sola estrategia central no es una propuesta suficiente. Así, las primeras señales de “éxito” ya eran muy preocupantes. Si el 94% de la población escolar de los colegios públicos estaba conectada de alguna de las maneras, aproximadamente 360,000 estudiantes habían quedado fuera.

Frente a esta situación, también han existido propuestas educativas que han evitado la deserción y han logrado el desarrollo de los aprendizajes esperados. Si bien la solución perfecta no existe, numerosas instituciones educativas privadas están dando un servicio de calidad que, además de un horario estructurado de clases virtuales sincrónicas y de un permanente apoyo y capacitación de sus profesores, incluye diversas actividades dedicadas al aspecto más difícil de abordar: el de la cercanía con las alumnas y alumnos, es decir la atención a las necesidades denominadas “socioemocionales”. Obviamente nada reemplaza a la presencialidad, al contacto cercano y a la mirada, sin pantalla de por medio; pero dadas las circunstancias, es mucho lo que se puede hacer y lo que se ha hecho.

Ante el gravísimo problema de deserción de la escuela pública, originado por la imposibilidad de sus alumnas y alumnos de recibir esa educación a distancia, apareció la solución mágica: regresar a las clases presenciales en marzo del 2021. Es decir, pensar que el problema de salud se puede enfrentar con “protocolos estrictos”, música celestial para la burocracia y que, dicho sea de paso, ya se intentaron probar. Se crearon para abrir escuelas rurales y fracasaron por incumplibles: las condiciones para abrir garantizaron el cierre. Adicionalmente, es claro que poner a cientos de miles de escolares y profesores en el transporte público, después pretender que cumplan en aulas y patios normas estrictas de higiene y distanciamiento social y que, al regresar a sus casas, muchísimas viviendas multifamiliares donde conviven con padres, tíos y abuelos, cumplan nuevos protocolos de desinfección, es un despropósito. Como si esto fuera poco, ¿qué pasaría si una nueva ola obligara a volver a cerrar los locales escolares?

No se trata, pues, de encontrar la solución simple, fácil, económica y… equivocada. Más bien, es momento de pensar qué es lo que realmente ha faltado. No es la inexistencia de actividades de aprendizaje retadoras, ni de software educativo gratuito y disponible, ni la vocación de los profesores, ni el esfuerzo de las y los alumnos. Todo esto ha languidecido ante una única propuesta central y la soledad que implica la radio o la TV o la dificultad de interacción a través de la pequeña pantalla del celular. Resulta indispensable que cada institución educativa pública, o una red debidamente articulada, desarrolle su propuesta de educación virtual y que cada profesor y estudiante cuente con conectividad y dispositivo apropiado.

De hecho, el MINEDU comprendió la importancia de contar con dispositivos adecuados. Después de un primer fracaso, anuncia ahora que a partir de este mes serán repartidas “de manera progresiva”. Sin embargo, se ha refugiado en “Aprendo en Casa” y no ha generado la movilización de sus escuelas ni dice nada respecto a la universalización de la conectividad: ¿Cada escuela pública tiene un horario de clases sincrónicas? ¿Todo director sabe cómo están desarrollando sus clases sus profesores? ¿Cada profesor sabe cómo están sus estudiantes y qué están aprendiendo? ¿Existe un esfuerzo multisectorial para dotar de Internet de calidad a todas y todos? ¿Qué fue de la red dorsal de fibra óptica?

Si se quiere evitar la deserción escolar y volver a niveles de aprendizaje similares, no hay que abrir los locales, hay que poner en funcionamiento cada escuela pública. Para esto es indispensable que cada uno de sus profesores y alumnos tengan acceso a internet, a un dispositivo pertinente conectado a la red y, sobre todo, que el MINEDU deje de pretender resolver todo centralizadamente, dé autonomía a las escuelas públicas y empodere a cada director para que pueda garantizar el hecho educativo. Vale decir, que cada niña, niño o adolescente esté atendido y aprendiendo; y que cada profesor y profesora esté pensando y haciendo lo mejor para el bienestar de cada uno de sus estudiantes. ¿Quién está trabajando en la solución real del problema? Lampadia




El perjudicial cierre de las escuelas

El perjudicial cierre de las escuelas

En Lampadia: Se generan importantes daños y desigualdad advertimos de los grandes costos que entraña el cierre de escuelas para los países en vías de desarrollo como el Perú, en particular, por el estancamiento de la movilidad social que se genera producto de interrumpir el cierre de brechas de capital humano de los primeros años de escolaridad.

“La reapertura de las escuelas puede parecer un experimento precipitado con vidas jóvenes. De hecho, es un ejercicio de equilibrio de riesgos. Las escuelas son los motores más poderosos de movilidad social en cualquier sociedad. Deje entrar a los niños y déjelos aprender”.

A estos costos, cabe agregar otros de carácter colateral como por ejemplo la pérdida de productividad – y por ende de ingresos – de los padres que, por no poder solventar un cuidador/a, tienen que sustituir horas de trabajo por horas de cuidado de sus hijos. Otro aspecto a tener en cuenta también es que ante una recesión económica, como la que se está produciendo por el covid 19, se generan choques negativos en el gasto de los hogares lo cual produce una menor provisión de adecuada alimentación  hacia los niños, algo que los colegios podían proveer de mejor manera. En muchos casos, por la misma precaria situación económica, los niños podrían verse obligados por los padres al trabajo infantil, exacerbando las desigualdades anteriormente descritas.

Si es que se tiene en cuenta que la evidencia disponible al momento presenta poca letalidad del covid 19 hacia los niños además de una baja probabilidad de contagio de ellos hacia sus familias, se puede concluir que los costos de cerrar los colegios en la presente crisis sobrepasan largamente a los beneficios.

El MINEDU pues debería reflexionar una vez más sobre la decisión del cierre total de escuelas y por el contrario, diseñar un plan progresivo de reinicio del sector, considerando por supuesto ciertos protocolos de seguridad y sanidad que eviten los contagios. Un reciente artículo de The Economist,  que compartimos líneas abajo, presenta algunas ideas sobre cómo podría estructurarse este plan, dividido en varios fases y priorizando en la fase inicial a los niveles educativos más primarios, que es donde la literatura ha enfatizado como fases críticas en los procesos de aprendizaje y que además comprometen el potencial durante toda la vida de las personas. Lampadia

Los niños no están bien
Al facilitar los desbloqueos, los gobiernos deberían abrir primero las escuelas

Los costos de mantenerlos cerrados son demasiado altos

The Economist
30 de abril, 2020
Traducida y comentada por Lampadia

El covid-19 ha cerrado las escuelas del mundo. Tres de cada cuatro niños viven en países donde todas las aulas están cerradas. La interrupción no tiene precedentes. A menos que termine pronto, su efecto en las mentes jóvenes podría ser devastador.

Durante algunas epidemias es sabio mantener a los niños en casa; son propagadores eficientes de enfermedades como la gripe estacional. Sin embargo, parecen ser menos propensos a la captura y transmisión de covid-19. El cierre de las escuelas puede traer algún beneficio al frenar la propagación de la enfermedad, pero menos que otras medidas. Contra esto, se acumulan los altos costos para el desarrollo de los niños, para sus padres y para la economía.

Algunos países, como Dinamarca, están reabriendo gradualmente las escuelas. Otros, incluida Italia, dicen que no lo harán hasta el otoño. En EEUU, a pesar de los recientes llamamientos del presidente Donald Trump para que se abran las escuelas, la mayoría de los estados planean mantener sus aulas cerradas por el resto del año académico, y posiblemente más tiempo. Eso es un error a medida que los países alivian el distanciamiento social, las escuelas deberían estar entre los primeros lugares para desbloquear.

Considere los costos de excluir a los niños del aula. Ninguna cantidad de crianza en helicóptero o videoconferencia puede reemplazar a los maestros de la vida real o las habilidades sociales adquiridas en el patio de recreo. Incluso en los países mejor preparados para el aprendizaje electrónico, como Corea del Sur, la escuela virtual es menos buena que la realidad.

Los niños más pobres son los que más sufren. Las lecciones de zoom son de poca utilidad si su casa carece de una buena conexión Wi-Fi, o si tiene que pelear con tres hermanos por un solo teléfono. Y mientras que las familias más ricas a menudo incluyen padres bien educados que incitan a sus hijos a hacer su tarea y ayudar cuando se quedan atascados, las familias más pobres pueden no hacerlo.

La escuela también es importante para los padres, especialmente aquellos con niños pequeños. Aquellos que trabajan en casa son menos productivos si se distraen con fuertes lamentos y el misterioso silencio que presagia la mermelada que se extiende en el sofá. Los que trabajan fuera del hogar no pueden hacerlo a menos que alguien se preocupe por su descendencia. Y dado que la mayoría del cuidado infantil lo realizan las madres, perderán terreno en el lugar de trabajo mientras las escuelas permanecen cerradas.

En los países pobres los costos son aún mayores. Las escuelas a menudo ofrecen almuerzos gratis, evitan la desnutrición y sirven como centros para vacunar a los niños contra otras enfermedades. Los alumnos que se quedan en casa ahora nunca pueden regresar. Si el encierro empuja a sus familias a la penuria, es posible que tengan que salir a trabajar. Es mejor volver a abrir las escuelas, para que los padres puedan ganar y los niños puedan estudiar.

La réplica obvia es que cerrar las escuelas trae beneficios. El covid-19 puede ser mortal. Los padres no quieren que sus hijos lo contraigan o se lo den a la abuela.

De hecho, aunque los niños son muy susceptibles a la gripe, el covid-19 es diferente. Dos estudios de China que rastrean los contactos de personas infectadas encuentran que, en el peor de los casos, los niños no tienen más probabilidades de contraer la enfermedad que los adultos, y posiblemente menos. Si lo consiguen, tienen 2.000 veces menos probabilidades de morir que alguien mayor de 60 años.

Tampoco hay evidencia de que los niños que terminan contagiando la enfermedad sean propagadores silenciosos que la transmiten a sus familias. Los investigadores en Islandia y los Países Bajos no han encontrado un solo caso en el que un niño haya traído el virus a su familia. El Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades, la agencia de salud pública de la Unión Europea, dijo la semana pasada que la transmisión de niño a adulto “parece ser poco común”.

Algunas de estas conclusiones se basan en pequeñas muestras. Tal vez no se haya visto a los niños transmitir la enfermedad porque las escuelas cerraron temprano y no porque no representen una amenaza especial. Quizás comenzarán a esparcirlo en el patio de recreo.

Por lo tanto, las escuelas deberían volver a abrir por etapas. Los niños más pequeños deben regresar primero, a guarderías y escuelas primarias. Tienen los cerebros más sedientos y parecen tener el menor riesgo. También exigen la mayor parte de sus padres, ya que pocos han comprendido los principios del aprendizaje autodirigido. Es poco probable que los niños pequeños mantengan su distancia de nadie. Las clases deben dividirse a la mitad para que puedan asistir en días alternos.

Los que se enfrentan a los exámenes deberían venir después. Varios países han cancelado pruebas importantes; otros las han pospuesto. Los estudiantes mayores pueden estar en mayor riesgo que los más jóvenes, pero también son más capaces de seguir nuevos protocolos. El distanciamiento social es posible en las escuelas secundarias, particularmente si se reduce el tamaño de las clases.

Las aperturas escolares deberán ser monitoreadas. Los científicos deben ajustar las reglas si es necesario. Los niños que deben quedarse en casa deben ser contactados directamente por la escuela. Los maestros necesitarán apoyo. Las personas más vulnerables a las infecciones, como los diabéticos, deberían poder enseñar de forma remota. El resto necesitará orientación sobre higiene y el distanciamiento social. Deben ser probados regularmente por el covid-19.

Es comprensible que los gobiernos desconfíen de ser llamados mandones: ningún político quiere dar órdenes que puedan ser ampliamente desobedecidas. Francia está considerando reabrir escuelas pero hacer que la asistencia sea voluntaria. El problema con este enfoque es que puede afianzar la desigualdad educativa. Una encuesta reciente sugiere que el 48% de las familias acomodadas enviarían a sus hijos de regreso; solo el 17% de los pobres lo haría. Bajo el cierre de Gran Bretaña, más de 500,000 niños vulnerables han podido ir a la escuela, incluidos aquellos con necesidades especiales; solo el 5% ha aparecido.

El mejor enfoque sería aplicar las reglas de asistencia de manera sensible. Insista en que la educación es obligatoria, pero no sancione a los padres asustados involuntariamente, especialmente si tienen razones adicionales para temer la infección. A medida que regresen las clases, los padres verán que es seguro y se les ocurrirá la idea de enviar a sus propios hijos. Los gobiernos deberían ayudar a los niños a recuperar las lecciones perdidas con escuelas de verano gratuitas, vacaciones más cortas y días escolares más largos.

La reapertura de las escuelas puede parecer un experimento precipitado con vidas jóvenes. De hecho, es un ejercicio de equilibrio de riesgos. Las escuelas son los motores más poderosos de movilidad social en cualquier sociedad. Deje entrar a los niños y déjelos aprender. Lampadia




Públicos y privados aliados por la educación

Públicos y privados aliados por la educación

José Urbina
Presidente ANPIEP
Gerente General Corporación Educativa Cruz Saco
Para Lampadia

Los resultados del Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA) de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) permiten a los gobiernos comparar sus sistemas educativos frente a otros de países a nivel mundial, lo que resulta relevante ya que se evalúan a los estudiantes de 15 años, analizando si han adquirido los conocimientos y habilidades fundamentales para los desafíos de la sociedad contemporánea, en materias básicas como Lectura, Ciencia y Matemáticas.

Según los datos proporcionados por el Ministerio de Educación, los resultados han sido muy favorables para nuestro país. En relación al 2015, en Lectura hemos obtenido una mejora de 3 puntos; en Ciencia, de 7.5; y, finalmente, en Matemática, de 13.3. Asimismo, la participación de las instituciones educativas no estatales ha alcanzado el 30%, frente al 25% de la medición anterior.

  • En el caso de Lectura, las instituciones educativas no estatales han alcanzado 457 puntos, mientras que las que pertenecen al sector público apenas 381. Si solo se consideraran los logros del sector no estatal a nivel de la región, nuestro país ocuparía el 1° lugar en Latinoamérica, por encima de naciones líderes en esta área como Chile (452), Uruguay (427) y Costa Rica (426).
  • Lo mismo ocurre en Ciencias, con 452 puntos para los colegios privados y 388 para los públicos
  • Así como en Matemáticas, con 450 puntos para los privados y 383 para los públicos, respectivamente.

Es incuestionable que la educación privada en el Perú realiza enormes esfuerzos a favor del aprendizaje de cada uno de los estudiantes que acoge, y debe resaltarse su aporte que queda demostrado de manera objetiva por los resultados de la prueba PISA. La percepción de la población respecto a la enseñanza privada es positiva. Una encuesta realizada en el 2015, a más de 1200 padres de familia, mostró que el 53% de los apoderados que eligen una escuela no estatal reconocen que su decisión obedece a la exigencia académica y al nivel de los docentes.

De otro lado, es interesante resaltar que China, Singapur, Macao, Hong Kong y Estonia figuran en los primeros lugares de esta Prueba y que Finlandia está en el séptimo lugar, reflejando que aparentemente las metodologías de enseñanza algo más tradicionales –que usan estos países- están dando mejores resultados, lo que puede ser un tema a analizar más adelante.

Ahora bien, si hacemos un análisis de los costos educativos, del total de colegios privados, observamos que solo el 1% cobra una pensión mensual de más de S/ 1,000 soles y el 75% cobra una pensión mensual de menos de S/400 soles. Sin embargo, comparemos con el Estado que gasta por alumno S/500 soles mensuales en promedio y si nos referimos a los COAR, el gasto mensual por alumno, en Lima, es alrededor de S/ 4,000 soles mensuales.

La idea no es decir quién es mejor o peor, si el sector privado o el público, tampoco es afirmar que son competencia. Lo que debe promoverse es la colaboración entre ambos sectores, en lugar de emitir más normas, como la creación de una institución similar a la SUNEDU para colegios, elevar barreras de entrada, o seguir fomentando el no pago de pensiones por parte de los padres de familia (ley de protección a la economía familiar). Esta última, ha llevado a muchas instituciones a una situación insostenible, dificultando el pago de los salarios y capacitación a los docentes, anulando toda posibilidad de seguir invirtiendo para acortar las brechas de infraestructura educativa o hacer innovaciones tecnológicas.

La sinergia entre el sector público y privado es vital para resolver los múltiples problemas que aquejan al sector educativo. Por ejemplo, la anemia y la buena alimentación de los estudiantes (el rendimiento de los alumnos que llegan al colegio desayunando es muy superior a los que no lo hicieron). Otra problemática que aqueja al sector educación es la del número de maestros, que son el motor de la escuela, pero que se estima existe un déficit de 177 mil para el 2021, dado que esta profesión se ha venido a menos por múltiples factores.

Por ello, tan importante como mirar a los países que están en los primeros puestos de esta Prueba, a fin de tratar de copiar sus metodologías, es identificar cuáles han sido las mejores prácticas tanto de nuestros colegios privados como estatales, las que han hecho posible alcanzar los resultados a los que el Perú ha llegado en esta oportunidad. Debemos por ende trabajar en forma conjunta, sector público y sector privado por la CALIDAD DE LA EDUCACIÓN DEL PERÚ y por el futuro de nuestros hijos. Lampadia
 




Lecciones con miras al 2050

Lecciones con miras al 2050

Nadie sabe qué nos guarda hacia mitad del siglo. La Cuarta Revolución Industrial, la cual está relacionada con la robótica, la inteligencia artificial y Big Data, entre otras muchas tecnologías disruptivas, jugará un papel trascendental en la vida de los ciudadanos, empresas y naciones en los próximos años. Sin embargo, las revoluciones industriales traen consigo una disrupción económica, política y social y muchos temen o no quieren cambiar su status quo, el cual los frena de aprovechar los grandes beneficios de la revolución en la educación.

Yuval Noah Harari, el famoso historiador y escritor israelí que destaca por sus afiladas teorías sobre lo que nos espera en el futuro, sostiene que “gran parte de lo que los niños aprenden hoy probablemente sea irrelevante para 2050”. El autor publicó un capítulo de su más reciente libro en ‘Medium’ donde analiza cómo se debería educar a los niños de hoy para el futuro.

El primero de los cambios critica la tendencia generalizada de la educación que los obliga a memorizar una gran cantidad de datos. “En un mundo así lo último que un profesor necesita dar a sus alumnos es más información. Ya tienen demasiada. En cambio, las personas necesitan la capacidad de dar sentido a esa información, distinguir entre lo que es relevante y lo que no y, sobre todo, relacionarlas para conseguir una amplia imagen del mundo”.

Harari destaca que ahora se propone un método educativo llamado “las cuatro C”:

  1. Pensamiento Crítico
  2. Comunicación
  3. Colaboración
  4. Creatividad

Lo más importante, según ellos, será “lidiar con el cambio, aprender cosas nuevas y preservar el equilibrio mental en situaciones desconocidas”. Sobre todo, “reinventarse una y otra vez”.

En Lampadia hemos insistido en la necesidad de emprender una verdadera revolución educativa si queremos nivelarnos con los estándares educativos de los países más avanzados y enfrentar los retos que traerá la Cuarta Revolución Industrial a nuestros pobres. Ver en Lampadia: La educación está en crisis y nosotros estamos de fiesta, Tenemos que emprender una revolución educativa y Estrategia para la creación de empleo y generación de riqueza en el Perú durante los próximos 20 años.

Si no emprendemos cuanto antes una verdadera revolución educativa, corremos el riesgo de que las brechas que separen a nuestra población más pobre de los ciudadanos del nuevo mundo de la ‘cuarta revolución industrial, los dejen para siempre en la marginalidad social, como lo afirma el historiador israelita, Yuval Noah Harari. Ver también en artículo Enderecemos el 2018 donde afirmamos que tenemos que nivelar a nuestros pobres con la población global y evitar que el nuevo mundo de la robótica y la inteligencia artificial los deje en los arrabales de la globalización. Lampadia

Lo que los niños necesitan aprender para triunfar en 2050

El arte de la reinvención será la habilidad más crítica de este siglo

Yuval Noah Harari

Medium
Del libro ’21 Lessons for the 21st Century’, Yuval Noah Harari (capítulo: Educación)
13 de setiembre, 2018
Traducido y glosado por Lampadia

La humanidad se enfrenta a revoluciones sin precedentes, todas nuestras viejas historias se están desmoronando, y hasta ahora no ha surgido ninguna nueva historia que las reemplace. ¿Cómo podemos prepararnos y preparar a nuestros hijos para un mundo de transformaciones sin precedentes e incertidumbres radicales? Un bebé nacido hoy tendrá treinta y tantos años en 2050. Si todo va bien, ese bebé seguirá existiendo en 2100 e incluso podría ser un ciudadano activo del siglo 22. ¿Qué debemos enseñarle a ese bebé que les ayudará a sobrevivir y prosperar en el mundo de 2050 o el siglo 22? ¿Qué tipo de habilidades necesitarán para conseguir un trabajo, entender lo que sucede a su alrededor y navegar el laberinto de la vida?

Desafortunadamente, dado que nadie sabe cómo será el mundo en 2050, por no hablar de 2100, no sabemos la respuesta a estas preguntas. Por supuesto, los humanos nunca han sido capaces de predecir el futuro con exactitud. Pero hoy es más difícil que nunca porque una vez que la tecnología nos permite diseñar cuerpos, cerebros y mentes, ya no podremos estar seguros de nada, incluidas las cosas que antes parecían fijas y eternas.

Hace mil años, en 1018, había muchas cosas que las personas no sabían sobre el futuro, pero estaban convencidas de que las características básicas de la sociedad humana no iban a cambiar. Si vivías en China en 1018, sabías que para 1050 el Imperio Song podría colapsar, los Khitans podrían invadir desde el norte y las plagas matarían a millones. Sin embargo, le quedó claro que incluso en 1050 la mayoría de las personas seguirían trabajando como agricultores y tejedores, los gobernantes seguirían dependiendo de los humanos para formar sus ejércitos y burocracias, los hombres todavía dominarían a las mujeres, la esperanza de vida seguiría siendo de unos 40, y el cuerpo humano seguiría siendo exactamente el mismo. Por esa razón, en 1018 los padres chinos pobres enseñaron a sus hijos a plantar arroz o tejer seda; los padres más adinerados les enseñaron a sus hijos a leer los clásicos de Confucio, escribir caligrafía o pelear a caballo, y les enseñaron a sus niñas a ser amas de casa modestas y obedientes. Era obvio que estas habilidades aún serían necesarias en 1050.

Para mantenerse al día con el mundo de 2050, se tendrá que hacer más que simplemente inventar nuevas ideas y productos, pero sobre todo, reinventarte una y otra vez.

En contraste, hoy no tenemos idea de cómo se verá China o el resto del mundo en 2050. No sabemos qué hará la gente para ganarse la vida, no sabemos cómo funcionarán los ejércitos o las burocracias, y no sabemos cómo serán las relaciones de género. Algunas personas probablemente vivirán mucho más tiempo que hoy, y el propio cuerpo humano podría sufrir una revolución sin precedentes, gracias a la bioingeniería y las interfaces directas entre el cerebro y la computadora. Mucho de lo que los niños aprenden hoy probablemente será irrelevante para el 2050.

En la actualidad, demasiadas escuelas se enfocan en acumular información en el cerebro de los niños. En el pasado, esto tenía sentido, porque la información era escasa e incluso el lento goteo de información existente era bloqueado repetidamente por la censura. Si vivías, por ejemplo, en una pequeña ciudad de provincia en México en 1800, era difícil para ti saber mucho sobre el mundo en general. No había radio, televisión, diario o biblioteca pública. Incluso si usted sabía leer y escribir y tenía acceso a una biblioteca privada, no había mucho más que leer aparte de novelas y tratados religiosos. El imperio español censuró en gran medida todos los textos impresos localmente y permitió que solo se importara desde el exterior un gran número de publicaciones revisadas. Lo mismo era cierto si vivías en alguna ciudad provincial en Rusia, India, Turquía o China. Cuando llegaron las escuelas modernas, enseñando a cada niño a leer y escribir e impartiendo los datos básicos de la geografía, la historia y la biología, representaron una mejora inmensa.

En contraste, en el siglo XXI, estamos inundados de enormes cantidades de información, y los censores ni siquiera intentan bloquearla. Más bien están ocupados difundiendo información errónea o distrayéndonos con irrelevancias. Si vives en una ciudad provincial de México y tienes un teléfono inteligente, puedes pasar muchas vidas leyendo Wikipedia, viendo TED Talks y tomando cursos gratuitos en línea. Ningún gobierno puede esperar ocultar toda la información que no le gusta. Por otro lado, es alarmantemente fácil inundar al público con informes contradictorios y pistas falsas. La gente de todo el mundo está a solo un clic de los últimos informes sobre el bombardeo de Alepo o las capas de hielo que se derriten en el Ártico, pero hay tantos informes contradictorios que es difícil saber qué creer. Además, muchas otras cosas están a solo un clic de distancia, lo que dificulta la concentración, y cuando la política o la ciencia parecen demasiado complicadas, es tentador cambiar a videos divertidos sobre gatos, chismes de celebridades o pornografía.

En un mundo así, lo último que un profesor necesita darle a sus alumnos es más información. Ya tienen demasiado de eso. En cambio, las personas necesitan la capacidad de dar sentido a la información, de distinguir la diferencia entre lo que es importante y lo que no lo es, y, sobre todo, combinar muchos bits de información en una imagen amplia del mundo.

En verdad, este ha sido el ideal de la educación liberal occidental durante siglos, pero hasta ahora, incluso muchas escuelas occidentales han sido un tanto flojas en su cumplimiento. Los maestros se permitieron enfocarse en impartir datos mientras alentaban a los estudiantes a “pensar por sí mismos”. Debido a su temor al autoritarismo, las escuelas liberales han tenido un horror particular hacia las grandes narrativas. Han asumido que mientras les demos a los estudiantes muchos datos y un mínimo de libertad, los estudiantes crearán su propia imagen del mundo, e incluso si esta generación no sintetiza todos los datos en una historia coherente y significativa sobre el mundo, habrá un montón de tiempo para construir una mejor síntesis en el futuro.

Ya nos hemos quedado sin tiempo. Las decisiones que tomemos en las próximas décadas darán forma al futuro de la vida en sí misma, y ​​podemos tomar estas decisiones basadas solo en nuestra cosmovisión actual. Si esta generación carece de una visión integral del cosmos, el futuro de la vida se decidirá al azar.

Prendiendo el motor

Además de la información, la mayoría de las escuelas también se enfocan demasiado en brindarles a los estudiantes un conjunto de habilidades predeterminadas, como resolver ecuaciones diferenciales, escribir códigos de computadora en C ++, identificar sustancias químicas en un tubo de ensayo o conversar en chino. Sin embargo, como no tenemos idea de cómo será el mundo y el mercado laboral en 2050, no sabemos realmente qué habilidades particulares necesitarán las personas. Podríamos invertir mucho esfuerzo enseñando a los niños a escribir en C ++ o hablar chino, solo para descubrir que para 2050, la inteligencia artificial puede codificar el software mucho mejor que los humanos y una nueva aplicación de Google Translate le permitirá realizar una conversación casi sin fallas en Mandarín, Cantonés o Hakka, a pesar de que solo sepas decir “Ni hao”.

Entonces, ¿qué deberíamos estar enseñando? Muchos expertos pedagógicos argumentan que las escuelas deberían cambiar a la enseñanza de “las cuatro C”: pensamiento crítico, comunicación, colaboración y creatividad. Creen que, en términos más generales, las escuelas deberían minimizar las habilidades técnicas y enfatizar las habilidades [blandas] de propósito general para la vida. Lo más importante de todo será la capacidad de lidiar con el cambio, aprender cosas nuevas y preservar su equilibrio mental en situaciones desconocidas. Para mantenerse al día con el mundo de 2050, tendrá que hacer más que simplemente inventar nuevas ideas y productos, pero sobre todo, reinventarte una y otra vez.

Si alguien te describe el mundo de mediados del siglo XXI y no suena como ciencia ficción, es ciertamente falso.

Porque a medida que aumenta el ritmo del cambio, no solo la economía, sino el significado mismo de “ser humano” probablemente mute. Ya en 1848, el Manifiesto comunista declaró que “todo lo que es sólido se derrite en el aire”. Sin embargo, Marx y Engels estaban pensando principalmente en las estructuras sociales y económicas. Para 2048, las estructuras físicas y cognitivas también se fundirán en el aire o en una nube de bits de datos.

En 1848, millones de personas estaban perdiendo sus empleos en las granjas de las aldeas e iban a las grandes ciudades para trabajar en fábricas. Pero al llegar a la gran ciudad, era poco probable que cambiaran su género o agregaran un sexto sentido. Y si encuentraban trabajo en alguna fábrica textil, podían esperar permanecer en esa profesión por el resto de sus vidas laborales.

Para 2048, las personas podrían tener que hacer frente a las migraciones al ciberespacio, las identidades de género fluidas y las nuevas experiencias sensoriales generadas por los implantes de computadora. Si encuentran trabajo y significado en el diseño de modas actualizadas para un juego de realidad virtual en 3D, dentro de una década, no solo esta profesión en particular, sino todos los trabajos que exigen este nivel de creación artística pueden ser asumidos por A.I. Entonces, a los 25 años, podría presentarse en un sitio de citas como “una mujer heterosexual de 25 años que vive en Londres y trabaja en una tienda de moda”. A los 35 años, podría decir que es “una persona no específica de género”. sometidos a ajustes de edad, cuya actividad neocortical se lleva a cabo principalmente en el mundo virtual de NewCosmos, y cuya misión en la vida es ir a donde ningún diseñador de moda haya ido antes “. Simplemente espere a que un algoritmo encuentre (o cree) la combinación perfecta para usted. En cuanto a los significados del arte del diseño de modas, los algoritmos te superan de manera irrevocable, ya que ver tus logros más importantes de la década anterior te llena de vergüenza y no de orgullo. Y todavía tienes muchas décadas de cambio radical por delante.

Por favor, no tome este escenario literalmente. Nadie puede predecir los cambios específicos que presenciaremos en el futuro. Es probable que cualquier escenario particular esté lejos de la verdad. Si alguien te describe el mundo de mediados del siglo XXI y suena a ciencia ficción, probablemente sea falso. Pero, de nuevo, si alguien te describe el mundo de mediados del siglo XXI y no suena como ciencia ficción, es ciertamente falso. No podemos estar seguros de los detalles; el cambio en sí mismo es la única certeza.

Un cambio tan profundo bien puede transformar la estructura básica de la vida, haciendo de la discontinuidad su característica más destacada. Desde tiempos inmemoriales, la vida se dividió en dos partes complementarias: un período de aprendizaje seguido de un período de trabajo. En la primera parte de la vida, acumuló información, desarrolló habilidades, construyó una cosmovisión y construyó una identidad estable. Incluso si a los 15 pasabas la mayor parte del día trabajando en el campo de arroz de tu familia (en lugar de en una escuela formal), lo más importante que estabas haciendo era aprender: cómo cultivar arroz, cómo realizar negociaciones con los comerciantes de arroz codiciosos de la gran ciudad, y cómo resolver conflictos con la tierra y el agua con los otros aldeanos. En la segunda parte de la vida, usted confiaba en sus habilidades acumuladas para navegar por el mundo, ganarse la vida y contribuir a la sociedad. Por supuesto, incluso a los 50 años, continuaste aprendiendo cosas nuevas sobre el arroz, los comerciantes y los conflictos, pero estos eran solo pequeños ajustes a tus habilidades bien afiladas.

A mediados del siglo XXI, el cambio acelerado y la vida útil más larga harán que este modelo tradicional quede obsoleto. La vida se deshará en las costuras, y habrá cada vez menos continuidad entre los diferentes períodos de la vida. “¿Quién soy yo?” Será una pregunta más urgente y complicada que nunca.

Es probable que esto implique inmensos niveles de estrés. El cambio es casi siempre estresante y, después de cierta edad, a la mayoría de las personas no les gusta hacerlo. Cuando tienes 15 años, toda tu vida es cambio. Tu cuerpo está creciendo, tu mente se está desarrollando, tus relaciones se están profundizando. Todo está en flujo, y todo es nuevo. Estás ocupado inventándote. La mayoría de los adolescentes lo encuentran aterrador, pero al mismo tiempo, también es emocionante. Nuevas perspectivas se abren ante ti, y tienes todo un mundo por conquistar.

Cuando tengas 50 años, no querrás el cambio, y la mayoría de las personas han renunciado a conquistar el mundo. He estado allí, hecho eso, tengo la camiseta. Prefieres la estabilidad. Has invertido tanto en tus habilidades, tu carrera, tu identidad y tu cosmovisión que no quieres volver a empezar. Cuanto más duro hayas trabajado en la construcción de algo, más difícil será dejarlo y dejar espacio para algo nuevo. Es posible que aún aprecies nuevas experiencias y pequeños ajustes, pero la mayoría de las personas de 50 años no están preparadas para revisar las estructuras profundas de su identidad y personalidad.

Hay razones neurológicas para esto. Aunque el cerebro adulto es más flexible y volátil de lo que se pensaba, todavía es menos maleable que el cerebro adolescente. Reconectar las neuronas y reconfigurar las sinapsis es un trabajo duro. Pero en el siglo XXI, no puedes permitirte la estabilidad. Si tratas de aferrarte a una identidad, un trabajo o una cosmovisión estable, te arriesgas a que te dejen atrás ya que el mundo vuela contigo con un zumbido. Dado que es probable que aumente la esperanza de vida, es posible que posteriormente tenga que pasar muchas décadas como un fósil despistado. Para mantener la relevancia, no solo económicamente sino sobre todo socialmente, necesitarás la capacidad de aprender y reinventarte constantemente, ciertamente a una edad temprana como los 50 años.

El mejor consejo que puedo darle a un joven de 15 años es: no confíes demasiado en los adultos. La mayoría de ellos tienen buenas intenciones, pero simplemente no entienden el mundo.

A medida que la extrañeza se convierte en la nueva normalidad, tus experiencias pasadas, así como las experiencias pasadas de toda la humanidad, serán guías menos confiables. Los seres humanos como individuos y la humanidad en general tendrán que lidiar cada vez más con cosas que nadie había visto antes, como máquinas súper inteligentes, cuerpos diseñados, algoritmos que pueden manipular emociones con una precisión asombrosa, cataclismos rápidos provocados por el hombre y la necesidad de cambiar tu profesión cada década. ¿Qué es lo correcto que se debe hacer cuando se enfrenta una situación completamente sin precedentes? ¿Cómo debe actuar cuando se ve inundado por enormes cantidades de información y no hay absolutamente ninguna manera de que pueda absorberlo y analizarlo todo? ¿Cómo vives en un mundo donde la profunda incertidumbre no es un error sino una característica?

Para sobrevivir y florecer en un mundo así, necesitarás mucha flexibilidad mental y grandes reservas de equilibrio emocional. Tendrá que dejar de lado varias veces lo que mejor conoce y aprender a sentirse como en casa con lo desconocido. Desafortunadamente, enseñar a los niños a abrazar lo desconocido mientras se mantiene el equilibrio mental es mucho más difícil que enseñarles una ecuación en física o las causas de la Primera Guerra Mundial. No puedes aprender resiliencia leyendo un libro o escuchando una conferencia. Los propios maestros generalmente carecen de la flexibilidad mental que exige el siglo XXI, ya que ellos mismos son el producto del antiguo sistema educativo.

La Revolución Industrial nos ha legado la teoría de la línea de producción de la educación. En el centro de la ciudad, hay un gran edificio de concreto dividido en muchas habitaciones idénticas, cada una equipada con filas de escritorios y sillas. Al sonar una campana, vas a una de estas habitaciones junto con otros 30 niños que nacieron el mismo año que tú. Cada hora, un adulto diferente entra y comienza a hablar. Todos los adultos están pagados por el gobierno. Uno de ellos le dice acerca de la forma de la tierra, otro le dice acerca del pasado humano, y un tercero le dice acerca del cuerpo humano. Es fácil reírse de este modelo, y casi todos están de acuerdo en que, sin importar sus logros pasados, ahora está en bancarrota. Pero hasta ahora no hemos creado una alternativa viable. Ciertamente, no una alternativa escalable que se pueda implementar en las zonas rurales de México en lugar de hacerlo solo en los suburbios ricos de California.

Hackeando a humanos

Entonces, el mejor consejo que puedo dar a un chico de 15 años atrapado en una escuela obsoleta en algún lugar de México, India o Alabama es: no confíes demasiado en los adultos. La mayoría de ellos tienen buenas intenciones, pero simplemente no entienden el mundo. En el pasado, era una apuesta relativamente segura seguir a los adultos, porque conocían el mundo bastante bien y el mundo cambiaba lentamente. Pero el siglo XXI va a ser diferente. Debido al ritmo cada vez mayor del cambio, nunca puede estar seguro de si lo que los adultos le están diciendo es sabiduría intemporal o sesgo anticuado.

Entonces, ¿en qué puedes confiar? ¿Quizás en tecnología? Esa es una apuesta aún más arriesgada. La tecnología puede ayudarlo mucho, pero si la tecnología gana demasiado poder sobre su vida, podría convertirse en un rehén de su agenda. Hace miles de años, los humanos inventaron la agricultura, pero esta tecnología enriqueció solo a una pequeña élite mientras esclavizaba a la mayoría de los humanos. La mayoría de las personas se encontraban trabajando desde el amanecer hasta el atardecer arrancando malezas, cargando cubos de agua y cosechando maíz bajo un sol abrasador. Te podría pasar a ti también.

La tecnología no es mala. Si sabes lo que quieres en la vida, la tecnología puede ayudarte a conseguirlo. Pero si no sabe lo que quiere en la vida, será muy fácil para la tecnología configurar sus objetivos para usted y tomar el control de su vida. Especialmente a medida que la tecnología mejora su comprensión de los seres humanos, es posible que cada vez te encuentres más sirviéndola, en lugar de que te sirva a ti. ¿Has visto a esos zombies que deambulan por las calles pegados a sus teléfonos inteligentes? ¿Crees que controlan la tecnología, o la tecnología los controla?

¿Deberías confiar en ti mismo, entonces? Eso suena genial en Sesame Street o en una película de Disney pasada de moda, pero en la vida real, no funciona tan bien. Incluso Disney se está dando cuenta. Al igual que Riley Andersen, la mayoría de las personas apenas se conocen a sí mismas, y cuando intentan “escucharse a sí mismas” fácilmente se convierten en presa de manipulaciones externas. La voz que escuchamos dentro de nuestras cabezas nunca es confiable porque siempre refleja propaganda estatal, lavado de cerebro ideológico y anuncios comerciales, por no mencionar los errores bioquímicos.

A medida que la biotecnología y el aprendizaje automático mejoren, será más fácil manipular las emociones y los deseos más profundos de las personas, y se volverá más peligroso que nunca seguir tu corazón. Cuando Coca-Cola, Amazon, Baidu o el gobierno sepan cómo tirar de las cuerdas de su corazón y presionar los botones de su cerebro, ¿todavía podrán distinguir la diferencia entre usted y sus expertos en marketing?

Si no sabes lo que quieres en la vida, será muy fácil para la tecnología crearte objetivos y tomar el control de tu vida.

Para tener éxito en una tarea tan desalentadora, tendrás que trabajar muy duro para conocer mejor su sistema operativo, para saber qué eres y qué quieres de la vida. Este es, por supuesto, el consejo más antiguo del libro: conócete a ti mismo. Durante miles de años, los filósofos y profetas han instado a las personas a conocerse a sí mismas. Pero este consejo nunca fue más urgente que en el siglo XXI, porque a diferencia de los días de Laozi o Sócrates, ahora tienes una competencia seria. Coca-Cola, Amazon, Baidu y el gobierno están todos corriendo para hackearte. No es tu teléfono inteligente, ni tu computadora, ni tu cuenta bancaria; están en una carrera para hackearte a ti y a tu sistema operativo orgánico. Es posible que hayas escuchado que vivimos en la era de hackear computadoras, pero eso no es ni la mitad de la verdad. De hecho, estamos viviendo en la era de hackear a los humanos.

Los algoritmos te están observando ahora mismo. Están observando a dónde vas, qué compras, con quién te encuentras. Pronto controlarán todos tus pasos, todas tus respiraciones, todos los latidos de tu corazón. Confían en Big Data y en el aprendizaje automático para conocerte mejor y mejor. Y una vez que estos algoritmos te conozcan mejor que tú mismo, pueden controlarte y manipularte, y no podrás hacer mucho al respecto. Vivirás en la matriz, o en The Truman Show. Al final, es un asunto empírico simple: si los algoritmos comprenden realmente lo que está sucediendo dentro de ti mejor de lo que tú mismo entiendes, la autoridad cambiará hacia ellos.

Por supuesto, puedes ser perfectamente feliz si cede toda la autoridad a los algoritmos y confías en que ellos decidan las cosas por usted y por el resto del mundo. Si es así, simplemente relájate y disfruta del paseo. No necesitas hacer nada al respecto. Los algoritmos se encargarán de todo. Sin embargo, si desea conservar algo de control sobre su existencia personal y el futuro de la vida, tiene que correr más rápido que los algoritmos, más rápido que Amazon y el gobierno, y conocerlo antes de que lo hagan. Para correr rápido, no lleve mucho equipaje con usted. Deja todas tus ilusiones atrás. Son muy pesados. Lampadia




El lado oscuro de la exigencia educativa

La competencia de China con el resto del mundo los ha llevado a establecer exigencias muy altas en la educación escolar. Además, se da a los exámenes, un peso desmedido en la medición de resultados. Esto genera una presión dañina en los estudiantes y en sus padres de familia, distorsionando el sentido correcto de la formación.

Líneas abajo compartimos la reflexión de The Economist sobre este tema en China. Pero equivocado o no, el enfoque y prioridad que China da a la educación, debiera hacernos reflexionar nuevamente sobre el abandono estratégico con el que medramos en un sistema educativo, innecesariamente retrógrado.

En Lampadia hemos propuesto un ‘Pacto Social por la Educación’, pero. Ningún ministro de educación se anima a analizar la propuesta, pues siempre, por más pobreza que genere, parece que es más cómodo mantener el statu quo. Lo mismo pasa con IPAE, que se apresta a desarrollar el CADE por la Educación, y no recoge la propuesta base del CADE Ejecutivos 2017, sobre el ‘Pacto Social’.

El sistema educativo en China es muy diferente del sistema educativo de EEUU. China tiene el sistema educativo más exigente del mundo. El componente más importante del sistema educativo son los exámenes. Debido a la importancia de estos exámenes, tomarlos se consideran uno de los momentos más importantes de la vida de una persona en China. Los resultados de las pruebas son algo que no solo afectará al individuo, sino a toda su familia.

En todos los niveles de la educación de un niño necesitarán tomar exámenes nacionales que determinarán el camino de su educación. Se requieren puntajes altos para que un niño sea elegible para asistir a escuelas altamente calificadas del área. Desde la escuela primaria hasta la secundaria, estos exámenes determinan el futuro de un niño. Las escuelas juzgan a los estudiantes basándose únicamente en los puntajes de sus exámenes.

La importancia dada a estos exámenes ha creado un ambiente de alto estrés para los estudiantes en China, lo que ha resultado en que muchos desarrollen diferentes problemas conductuales y mentales. Un informe que China Daily publicó en 2017 mostró que el examen nacional fue la causa de 79 suicidios de estudiantes de primaria y secundaria el año pasado. El 93% de estos suicidios sucedieron después de discusiones con los profesores o se atribuyeron a la intensa presión del estudiante para estudiar. El informe también citó suicidios de estudiantes consternados por la carga de tareas y puntajes deficientes en las pruebas, así como también por aquellos que reaccionaron al darse cuenta de que las escuelas preferidas no los admitirían.

Existe incertidumbre sobre el futuro para la mayoría de los jóvenes estudiantes en China; incluso después de haber recibido educación adicional, todavía se sienten “perdidos”. Los estudiantes en China están capacitados para ser “máquinas de exámenes” en lugar de saber en qué son buenos y aplicarlo a un campo profesional. El estrés y la preocupación no disminuyen después de que los estudiantes llegan a la universidad. El éxito no es tan simple como una puntuación alta en una prueba.

El sistema educativo tradicional tiene como objetivo calificar un examen para juzgar la capacidad y el valor de un alumno. Sin embargo, la vida no se trata solo de tomar exámenes. Una vida exitosa que los estudiantes están buscando siempre debe coincidir con quiénes son y qué les gusta. Lampadia

Domando a las madres
China hace sonar una alarma sobre sus escolares estresados

Los padres excesivamente exigentes los están volviendo miserables

The Economist
18 de agosto, 2018
Traducido y glosado por Lampadia

Lin Ming, un niño de diez años a quien le faltan dos para acabar la primaria en Beijing, no recuerda la última vez que regresó a casa antes de las 6 pm en un día laborable en el trimestre. Tan pronto como termina las clases, su madre, Yang Mei, lo lleva por toda la ciudad, a clases privadas donde estudia matemáticas avanzadas y gramática de inglés. Yang acepta que “tal vez está estresando demasiado” a su hijo. Pero ella no tiene otra opción. “Alrededor del 90% de los compañeros de clase de mi hijo asisten a clases después del colegio. Es una competencia que no puedo perder”. Cuando el nuevo año académico comience el próximo mes, Yang estima que gastará 3,000 yuanes (US$ 435) al mes en tutores privados para su hijo, aproximadamente una quinta parte del ingreso mensual de su hogar.

A muchos escolares chinos les va bien académicamente. En la última prueba del Programa de Evaluación Internacional de Estudiantes (PISA), en 2015, los chinos de 15 años de algunas ciudades obtuvieron mejores resultados en ciencias y matemáticas que sus contrapartes en la mayoría de los países miembros de la OCDE, un club en su mayoría de países ricos. Sin embargo, a los funcionarios chinos les preocupa que los logros de los alumnos puedan exigir un precio mental y físico demasiado elevado. En julio, el Ministerio de Educación publicó su primera “evaluación exhaustiva de calidad” de la educación primaria y secundaria del país. El tono inusualmente crítico del informe de 26 páginas ha estado causando revuelo entre los analistas de China.

Una preocupación que plantea el documento es que los alumnos reciben demasiada tarea. El ministerio reconoce que casi uno de cada diez alumnos en el penúltimo año de primaria pasa más de dos horas solo en tareas todos los días escolares. Incluso antes de que se publicara el informe, algunas autoridades educativas habían intentado aligerar las cargas de trabajo. En marzo, por ejemplo, los profesores de primaria de la ciudad de Hangzhou les dijeron a sus alumnos que dejaran de hacer los deberes a las 9 pm si no podían completarlo antes. Los alumnos de secundaria tenían hasta las 10pm.

Otro problema relacionado es que los alumnos chinos tienen problemas de salud física. Según el informe, casi un quinto de los niños de nueve años y las niñas de 13 años tienen sobrepeso u obesidad. Esto se debe, en parte, a que muchos colegios, a menudo bajo la presión de los padres sobre exigentes, imparten más sesiones de asignaturas básicas como matemáticas y chino de las que exige el Ministerio de Educación y eliminan las clases de educación física. A partir de ahora, sin embargo, las escuelas serán evaluadas no solo en lo bien que los alumnos se desarrollan en las pruebas académicas sino también en su capacidad atlética, en función de su rendimiento en desafíos tales como carreras de 50 metros y saltos largos.

Sin embargo, la crítica más severa del ministerio está reservada para las escuelas y las clases privada de tutoría que sobrecargan a los alumnos al “enseñar por adelantado”, es decir, exigir conocimientos que son demasiado avanzados para un grupo de edad determinado. Zhang Ling, el director del jardín de infantes Ben Jen en Pekín, sospecha que la mayoría de las guarderías de la ciudad utilizan materiales diseñados para el primer o segundo año de la escuela primaria. Eso ya no estará permitido.

En julio, el ministerio ordenó que las guarderías de toda la nación se enfocaran en “diversión y juegos” en el aula. Diversos inspectores serán enviados a finales de este año para hacer cumplir esto. Zhang, que dice que su guardería ya estaba cumpliendo, celebra el mayor escrutinio. Ella dice que ahora puede presentar un documento oficial a los padres que insisten en que sus hijos estén expuestos a una exigencia académica demasiado avanzada.

Para asegurarse de que las clases privadas no ofrezcan cursos “inadecuados”, en febrero el gobierno les ha advertido que deben proporcionar a las autoridades educativas los detalles de los planes de estudios y las listas de sus alumnos, junto con el año en que se encuentran en cada escuela. También deben aceptar inspecciones puntuales.

El ministerio está tomando medidas enérgicas contra los pedagogos deshonestos que se niegan a enseñar material académico en el colegio y fuerzan a los alumnos a asistir a clases nocturnas en los centros de tutorías. Este verano, 31 profesores en la ciudad nororiental de Harbin recibieron un castigo no especificado por hacerlo.

Yang, la madre, dice que las nuevas reglas son bien intencionadas, pero pueden terminar lastimando a la gente de clase media como ella. Esto se debe a que aquellos con bolsillos más grandes siempre pueden contratar tutores a domicilio, que es más difícil de controlar por el gobierno, para enseñarles a sus hijos. Un agente de servicio al cliente de Xue Er Si, una cadena de clases privadas a nivel nacional, dice que las nuevas restricciones significan que los tutores en el aula tendrán que ser más cautelosos sobre lo que enseñan. Pero, sin embargo, tranquiliza a los padres de que el contenido del curso no será aún más difícil que el que se encuentra en los libros de texto escolares.

La represión contra los profesores e instructores demasiado exigentes no aborda la causa raíz del estrés de los alumnos, señala Zeng Xiaodong, del 21st Century Education Research Institute, un grupo de expertos con sede en Beijing. Mientras que la admisión a las escuelas secundarias se base en los resultados del extenuante examen de zhongkao, es probable que los padres exploten todas las opciones para darle una ventaja a sus hijos. Normalmente, solo el 60% superior de zhongkao-takers se asegura un lugar en una escuela académica. El resto se deriva a vocacionales. Una mejor manera de reducir el estrés para los niños pequeños, argumenta Zeng, es desechar los exámenes de ingreso a las escuelas secundarias. El ministerio de educación ha identificado correctamente un problema. Necesita estudiar más arduamente cómo resolverlo. Lampadia




La frontera de las estrategias de aprendizaje educativo

Líneas abajo compartimos una descripción del Modelo de Kolb, basado en la filosofía del ‘aprender haciendo’.

En Lampadia hemos combatido por una verdadera revolución educativa, que terminó de plantearse con el análisis de nuestro director en el CADE 2017: Reflexiones sobre la educación para el futuro. Lamentablemente, días después del evento, el país entró en un período de descomposición política, desorden institucional, acompañados de la proverbial debilidad de nuestra clase dirigente, que nos ha llevado a relegar el tema de la educación a un plano de desentendimiento lamentable.

Hoy queremos regresar a tratar el tema educativo y volver a aguijonear a nuestra sociedad, para asumir los retos que demanda nuestro futuro. Entre ellos, el que IPAE se anime a convocar a un diálogo que nos lleve a impulsar la transformación de la educación en el Perú.

Veamos el Modelo de Kolb:  

KOLB Y LAS METODOLOGÍAS ACTIVAS

Del blog de JBlasGarcia

26 de febrero, 2017 
Metodologías Activas
Referido por Gonzalo Galdos, de Futura Schools

En una serie nueva de post  me gustaría compartir varios esquemas que hace ya algunos años se han convertido en mis imágenes de cabecera para poder manejar esto de enseñar y aprender, dándole una vuelta, desde la disrupción justa y necesaria, y andar el camino de Transformar la escuela: producir aprendizajes.

Se trata de tres gráficos muy directos, que arman, de manera especial, mi forma general de ver cómo facilitar, desarrollar y organizar aprendizajes, el porqué de las metodologías activas y, principalmente, el porqué de una filosofía educativa que comparto plenamente: “aprender haciendo” o, dicho en inglés para que todos lo entiendan, “learning by doing”. Hoy mi post va dedicado al Modelo de Kolb.

EL MODELO DE KOLB

David A. Kolb es un teórico de la educación americano, que tiene 78 años de edad en la actualidad, muy reconocido por su trabajo en el desarrollo de la teoría del Aprendizaje Experiencial -aunque también es creador del Inventario de Estilos de Aprendizaje de Kolb (LSI) y el Inventario del Estilo Adaptativo (ASI).

A principios de la década de 1970, Kolb, junto a su colega Ron Fry, ambos en la Weatherhead School of Management, de la Universidad Case Western Reserve, desarrollaron el Modelo de Aprendizaje Experiencial (ELM). que tiene por diferencia sustancial, destacar como eje vehiculador del aprendizaje, la experiencia del aprendiz.

APRENDIZAJE BASADO EN LA EXPERIENCIA

El aprendizaje basado en la experiencia implica que cada vez que deseamos diseñar un aprendizaje cualquiera, es preciso partir de una información. Es decir, nuestros alumnos no pueden aprender nada si no tienen información (datos, procesos o hechos) que reciben  esencialmente de dos formas: a través de una experiencia directa y concreta, o de una experiencia abstracta (es decir obtenida a través de una lectura, una charla, una imagen o un audiovisual). Estas experiencias concretas o abstractas, se transforman en conocimiento si las procesamos reflexionando y pensando sobre ellas o investigando y experimentando de manera activa  la información recibida.

Como vemos, Kolb diseñó el proceso dando la posibilidad de comenzar desde cualquiera de las dos fases que componen el eje de la percepción (directa o abstracta), confiado en ajustar el estilo de aprendizaje de cada aprendiz al tipo de experiencia que cada una de las acciones promueve.

  • Divergentes: Combinan la experiencia concreta y la observación reflexiva. 
  • Asimilador: Combinan la conceptualización abstracta y la observación reflexiva.
  • Convergentes: Combinan la conceptualización abstracta y la experiencia activa.
  • Adaptadores: Combinan la experiencia concreta y la experiencia activa.

Durante mucho tiempo y desde una metodología tradicional, de corte fuertemente asimiladora e inductiva, hemos estado combinando el proceso partiendo de una conceptualización abstracta. Así, toda la reflexión o utilización de la misma tenía como objetivo comprobar la validez de la aplicación práctica de esas ideas. En ella los  intereses emocionales no eran tenidos en cuenta.

Desde paradigmas más actuales, creadores de retos y promotores de divergencias cognitiva como estimulo del aprendizajes activos, estamos siendo conscientes que la experiencia debe ser la base de la observación y la reflexión posterior que de ella se deduce, y no al revés.

EL CÍRCULO DE KOLB. UNA REVISIÓN EDUCATIVA DEL MODELO.

Desde que lo estudié y analicé vi un potencial en este modelo como  esquema de diseño de secuencias didácticas que tenía para mi una utilidad práctica potente, pues me servía de “esquema” para diseñar  actividades que, desde planteamientos activos, cubrieran las denominadas Tareas en los procesos de creación y diseño de ABP. El modelo resolvía, desde mi punto de vista, ciclos completos de aprendizaje, que siempre me gustó denominar, auténtico.

En una revisión para la aplicación educativa del modelo, muchos docentes hemos visto su potencia como esquema de diseño “activo”, al modificar esa idea de pivote entre los dos ejes (el de la percepción y el del procesamiento) para pasar a ser considerado, como un ciclo. Mejor dicho, como una espiral. 

¿Qué conseguimos con ello? A través de este esquema a modo de círculo, sobrepasamos el reduccionismo de apoyarnos en los estilos de aprendizaje para ser generadores de nuevos estilos y potenciadores de nuevos procesos: un desarrollo armónico de las capacidades cognitivas del aprendiz.

DESARROLLO DEL CICLO 

1

Si  comenzamos a obtener información desde las experiencias directas y concretas, es decir, aquellas que pueden ser percibidas por los sentidos, comenzamos a dotar al  aprendizaje de un valor real y vinculado al aprendiz. Es más. esta  experiencia concreta, novedosa o sorprendente, se constituye en detectora y conectora de ideas previas relacionadas con el aprendizaje que se ha puesto a rodar.

Para convertirse en un  desarrollo de alto valor cognitivo, es  importante que el alumando disponga de guías, esquemas, modelos o rutinas de observación que le dirijan hacia una observación inteligente. También es preciso que el alumno sea sistemático en la recogida de evidencias de esa observación, de manera individual y/o colectiva, con las que poder posteriormente continuar con el trabajo reflexivo o investigador.
Con esta acción, comenzamos también generando un desequilibrio, un conflicto cognitivo que  precisa iniciar un ciclo para poder llegar a ser acomodado.

Autora de este esquema: @raquelMECD 

2

La reflexión sobre esa experiencia proporciona (porque exige) niveles activos de trabajo. Nada es casual en la enseñanza. La metodología es intencionada: comparamos, evaluamos, sopesamos, investigamos …desde múltiples perspectivas. 

Es cierto que Kolb no diseñó el modelo pensando en un modelo de trabajo en equipo, pero, al considerar el trabajo en equipo (como un axioma irrenunciable de la nueva forma de aprender), potenciamos la metodología con otro elemento sobradamente probado para el  aprendizaje: la interacción.

Así, el individuo reflexiona con sus compañeros de equipo y con dinámicas cooperativas establecidas y sistematizadas. Estas interacciones comienzan a construir una teoría general, propia y co-construida colectivamente, de lo que puede significar la información percibida en las fases anteriores.

Todo el proceso de desequilibrio cognitivo producido en el trabajo previo, comienza a asimilarse dentro del esquema de conocimientos de cada uno de los individuos que participan en el proceso.

CICLO DE KOLB. Grupo de Investigación Stellae. Universidad Santiago de Compostela

3

La formación de conceptos abstractos desde la reflexión interactiva y colectiva se realiza mediante procesos de análisis, síntesis, comparación y contraste. Llegamos de esta manera a extraer y generar conclusiones generales y construir observaciones ancladas en teorías próximas, conocidas, lógicas y sólidas.

Así, y tras la construcción de sus propios esquemas, bases o teorías o constructos, los aprendices son capaces de imaginar conceptos abstractos, hacer generalizaciones basabas en sus hipótesis o construcciones de objetos o diseño de acciones, que estén en consonancia con el reto planteado al principio del ciclo.

Los conceptos, en un proceso convergente previo a la construcción eficaz de cualquier aprendizaje significativo, inician el camino de la acomodación que se produce en la fase posterior.

4

El proceso diseñado por Kolb y Fry finaliza con que el estudiante prueba y evalúa las implicaciones de los conceptos construidos en situaciones nuevas, esencialmente fuera del contexto aula, las expone y las comparte con otros.

Esta secuencia de trabajo une perfectamente con la teorías sobre aprendizaje competencial que me interesan. Aprendizaje competencial entendido como aquel que se desarrolla para que una persona sea capaz de resolver problemas reales en contextos diversos, integrando conocimientos, habilidades prácticas, actitudes y otros componentes sociales y de comportamiento que se movilizan conjuntamente para desarrollar una acción eficaz y satisfactoria.

Ser compentente implica saber aplicar conceptos y teorías en la toma de decisiones y la resolución de problemas en nuevos escenarios.

Esta es la comprobación de que hemos cerrado el ciclo e integrado el nuevo aprendizaje en nuestro esquema de conocimientos anteriores.

PLUSES DEL MODELO DE KOLB

1. Es un modelo que para los docentes que desarrollamos aprendizaje basado en la resolución de problemas, retos o proyectos dentro del contexto escolar, se nos ajusta perfectamente, porque la idea básica de este método es la integración del aprendizaje abstracto y la solución de problemas concretos en un mismo ciclo de aprendizaje.

2. Aunque el modelo era un modelo analítico y descriptivo en el que Kolb identificó diferentes estilos de aprendizaje, así como dos dimensiones principales del aprendizaje, la percepción y el procesamiento, nosotros lo llevamos al terreno de lo práctico. De esta manera cuando lo aplicamos también nos aseguramos que desarrollamos competencias ricas y variadas que transitan entre modelos activos y reflexivos, entre lo sistemático  y lo analítico; entre el desarrollo de rutinas y hábitos de percepción y el procesamiento inteligente…;  elementos muy cercanos a las nuevas teorías neuroeducativas que están revolucionando nuestra forma de comprender el aprendizaje.

3. Su diseño, en forma de  círculo, debe entenderse la progresión cognitiva como una espiral que va pasando sucesivamente por cada uno de los cuatro tipos de actividades, también describió dos tipos opuestos (y complementarios) de percepción (concreta y abstracta) y procesamiento (activo y reflexivo) por las que podemos entender que el aprendizaje se produce como resultado yuxtapuesto de ambas formas. Es decir,  de la forma como las personas perciben y de la manera como las personas luego procesan lo que han percibido.

No han sido pocas las teorías que han argumentado que el modelo de Kolb se fundamenta sólo por una débil evidencia empírica y que el proceso de aprendizaje es en realidad mucho más complejo que la teoría que él sugiere. 

He intentado describir un  modelo esquematizado y organizado de cuatro cuadrantes de experiencias, dos ejes de ejercicio cognitivo y cuatro procesos que permitirán al alumnando involucrarse, enteramente y sin prejuicios, en:

  • situaciones que se le presenten
  • lograr reflexionar acerca de esas experiencias y percibirlas desde
               varias aproximaciones;
  • generar conceptos e integrar sus observaciones en teorías
               lógicamente sólidas
  • ser capaz de utilizar y transferir eses teorías para tomar decisiones y
               solucionar problemas. 

Entre todos construimos 

Dejo aquí un esquema propio que diseñe para un artículo en ined21 y que le llamé : secuencia para un aprendizaje auténtico.

Lampadia




Aprendizaje cooperativo de docentes

Aprendizaje cooperativo de docentes

La educación en el Perú, sigue atrapada entre la conciencia de su inadecuación y nuestra incapacidad para transformarla. Desde la clamorosa huelga del año pasado, ha caído en un marasmo en el que ya no tenemos la energía para insistir en su transformación.

En Lampadia hemos compartido experiencias innovadoras de distintos países, y hemos alentado reiteradamente, la necesidad de una verdadera revolución educativa. Hemos propuesto un ‘Pacto Social por la Educación’, que aún esperamos se pueda llevar a cabo, cuando mejoren los tiempos.

Lamentablemente, las crisis múltiples que nos lastran a la frustración y a la inercia, casi no dejan espacio para escapar de la coyuntura y hablar y actuar en la dirección del diseño de nuestro futuro. Uno de los costos más grandes del gobierno de PPK es habernos incapacitado para pensar en el futuro.

En las siguientes líneas compartimos un artículo de Ana Torres, de El País, posteado por León Trahtemberg en su Facebook, sobre el aprendizaje cooperativo de los docentes. El área de mayor dificultad para el cambio de los paradigmas educativos, pues el magisterio sigue capturado por las dirigencias de los grupos ideologizados.

La ineficiencia del profesor solitario

El rol del equipo directivo es clave en la transformación de los colegios. La innovación es imposible sin la colaboración entre docentes

Ana Torres Menárguez 
Ganadora del Premio Nebrija de Periodismo Educativo, por el artículo ‘El cerebro necesita emocionarse para aprender’
El País, 12 de marzo de 2018
Posteado por León Trahtemberg (Facebook)
Glosado por Lampadia

Los directores de escuela trabajan bajo presión. Se espera que innoven sin molestar a nadie, que respondan a las demandas de las familias y, por encima de todo, que presenten resultados. El gran problema es que nadie ha definido con claridad cuál debe ser el rol del equipo directivo escolar, una figura clave en la transformación de los centros educativos. Ese es el planteamiento de Michael Fullan, asesor en Educación durante 10 años del primer ministro de Ontario, en su libro La dirección escolar, tres claves para maximizar su impacto (Morata).

Fullan, catedrático emérito de Educación de la Universidad de Toronto, critica que históricamente la enseñanza ha sido una profesión solitaria en la que la mayoría de profesores se han encerrado en su aula y no han recibido información sobre sus prácticas docentes, lo que les ha impedido mejorar. Para Fullan, la tarea central de los directores debe ser asegurarse de que todos los profesores aprenden de forma continua y programan sus clases de forma colaborativa. 

En España, la ola de innovación educativa ha traído consigo un replanteamiento de las funciones del director de escuela que, sobre todo en la pública, ha pasado de ser una figura burocrática que se elige cada cuatro años a un líder de grupo encargado de impulsar el cambio en las pedagogías. “Implantar el aprendizaje cooperativo genera conflictos, porque no todos los docentes están dispuestos a cambiar. Supone quitarse de la cabeza la idea del súper profe y entender que, en solitario, por muy bueno que sea, no nos vale”. La que habla es María del Mar Santos, directora del colegio público Manuel Bartolomé Cossío, en el barrio madrileño de Aluche, que en 2011 recibió el Premio Marta Mata del Ministerio de Educación por su proyecto de centro innovador.

Santos, que ocupa el cargo de directora desde 1998, cuenta cómo esta escuela ha pasado de ser un centro sin un proyecto pedagógico claro, a un colegio bilingüe, con talleres en lugar de asignaturas y en cuyas aulas ya no hay una mesa para el profesor, que se mueve libremente por la clase. “Uno de los cambios fundamentales es que los alumnos son de todos, ya no son de un tutor. Ya no existe el concepto mi clase. Todos nos responsabilizamos del progreso de los estudiantes”, explica. Implicar al conjunto de profesores en la modernización del colegio es a lo que más horas ha dedicado. “Animarles a compartir con los demás aquello en lo que son buenos, como el dominio de Internet, por ejemplo. No hay ningún maestro que pueda reconvertirse solo”, añade. 

Al hablar de su rol como directora lo compara con su hijo, que ahora tiene 17 años. “Requiere mucha dedicación. Nos planteamos qué nos pasaba y qué podíamos mejorar. La educación pública estaba denostada y nos sobrepasaba la oferta de la concertada”, explica. Preparó un proyecto y fijó como prioridad la formación de los docentes. Desde entonces, ha sido elegida cada cuatro años por la comisión de selección, integrada por miembros de la Administración (como inspectores) y parte del consejo escolar (formado por docentes y familiares de los alumnos). En 2013, el centro consiguió otro premio de la Comunidad de Madrid por su integración de las TIC en experiencias pedagógicas innovadoras. 

La única manera de convencer es, según Santos, por contagio. Las evidencias en el aula hacen que los profesores se interesen por lo que motiva a los a los niños. Quien no lo soporta, pide el cambio de centro. “El profesor solitario no transforma un colegio, el equipo directivo es el motor del cambio y lo importante es replicar el modelo año tras año independientemente del profesor que esté”. La interinidad de los docentes puede ser uno de los frenos, no todo el mundo encaja cuando llega y para ello han elaborado una guía docente.

El director de la Escuela Trilema El Pilar, Miguel García, con dos docentes. Kike Para

La financiación pública (unos 16,000 euros al año para 460 alumnos) no ha sido suficiente para cubrir las reformas. Sus clases son interactivas gracias a las tabletas que compraron con los 9,000 euros que obtuvieron con el premio del Ministerio. También les sirvió para renovar parte del mobiliario e incorporar mesas modulares. Ya no hay filas de pupitres. En cuanto a la formación, sus principales recursos son los cursos que organizan de forma voluntaria los maestros del colegio y los que ofrece el centro público de innovación y formación Las Acacias.

¿Puede cualquier profesor ser un buen director de centro? El filósofo José Antonio Marina, autor del Libro Blanco de la Profesión Docente por encargo del Ministerio de Educación, cree que hace falta formación específica porque mandar y organizar es complicado. En su opinión, habría que crear un MIR para directores, un tema que en España sienta mal a los docentes y a los sindicatos porque consideran que conlleva introducir clases dentro del profesorado y que no es democrático. “Se trata de ver si son eficaces o no. Los equipos directivos pueden modificar los programas académicos. El éxito, en parte, depende de ellos”, asegura. 

La Fundación Trilema, centrada en la difusión de nuevas pedagogías, ofrece un curso en liderazgo para equipos directivos, que han seguido más de 500 responsables de centros públicos en España. Esta fundación laica es además la impulsora de la red Escuelas que Aprenden, un proyecto del que forman parte 24 colegios, de ellos cuatro públicos de Andalucía. “Tienes que romper muchas reglas. Quitar las asignaturas provoca resistencia en el profesorado y discernir la velocidad de cambio es una responsabilidad del equipo directivo”, señala Carmen Pellicer, fundadora de Trilema. 

Hace cuatro meses una congregación religiosa les cedió un colegio en el barrio de Tetuán con 691 alumnos al que han llamado Colegio El Pilar. El director, Miguel García, ha acompañado a todos los docentes en su proceso de transformación. “No puedes quitar la seguridad que da el libro de texto de golpe; es un proceso lento”, apunta. Solo han mantenido las asignaturas de matemáticas y lengua por la “presión” de las pruebas PISA. El resto son talleres donde los alumnos trabajan por proyectos. También han reducido el número de exámenes y los alumnos se autoevalúan desde la etapa de Infantil. “Cuando tienes 50 años y quieres darle la vuelta a lo que has hecho durante toda tu vida, necesitas ver el nuevo modelo”, cuenta García. Por eso es tan importante la red de escuelas innovadoras, para ver el cambio in situ

“No creo en la dirección unipersonal, hace falta equipo. Es muy peligrosa y si no estás tú, se cae. Esa idea yanqui del director líder no funciona; nadie tiene todas las competencias y hace falta liderazgo compartido”, opina Pellicer. Los docentes de esa red de colegios reciben una media de 100 horas de formación al año. Lampadia




El Estudiante Desconocido

El Estudiante Desconocido

Ante la ligereza de los medios tradicionales para movilizar a la opinión pública en la denominación del Hombre del Año en el Perú, hemos decidido terciar y hacer nuestra propia nominación.

Hombre del Año en el Perú:

El Estudiante Desconocido

Aquél niño o niña, o joven, que estudia en nuestras escuelas públicas, maltratado por la huelga magisterial, sujeto pasivo del corte de estudios, que terminó siendo rehén de los movimientos políticos orientados a tomar el control de la representación sindical del magisterio, e ignorado como objetivo central de la educación.

Fuente: pastoralsj.org

Como sabemos, la educación escolar en el Perú es una de las peores del mundo. No solo en términos de los niveles de educación aún prevalecientes hoy en el planeta; sino, peor aún, en términos de la transformación de la educación con la ‘cuarta revolución industrial’, que transita, con las nuevas tecnologías, hacia una educación muy rica, que empodera a cada niño según su potencial. Una educación ‘UNO a UNO’, que capacita al alumno a ser parte de un mundo de aprendizaje continuo.

En agosto pasado publicamos en Lampadia: El ‘putsch’ de los maestros (de la política) – SUTEP: Llegó el momento de decir ‘BASTA’, en el que decíamos:

Hace 20 días publicamos en Lampadia ‘Putsch’ del Movadef (Sendero) en Cusco, afirmando: ante la debilidad mostrada por el gobierno para contrarrestar los levantamientos socio-políticos, los sindicatos y federaciones están llevando adelante una suerte de ‘putsch’ táctico para mejorar sus posiciones estratégicas.

Lamentablemente, el gobierno solo avanza para afirmar su debilidad. Sin el diagnóstico correcto, sin visión y sin capacidad política, la semana pasada claudicó y aceptó adelantar los aumentos ofrecidos al magisterio, sin la contraparte de un compromiso por la educación de parte de los maestros y anunciaron el reinicio de clases para hoy lunes. Sin embargo, las dirigencias del magisterio ya adelantaron que “la huelga continua”. Efectivamente, hoy lunes no se reiniciaron las clases.

El gobierno anunció que los que no trabajen desde hoy, 7 de agosto, por tres días consecutivos, se les descontará. En otras palabras, les están perdonando los días no trabajados desde el inicio de la huelga. Además, no se conoce de arrestos, ni de una sólida acción de defensa del orden interno. A los maestros huelguistas y a los demás gremios en estado de protesta se les ha dado ‘licencia’ para hacer lo que quieran. Un verdadero papelón.

Nosotros estamos convencidos que este es el momento de optar por una verdadera transformación de la educación en el Perú. No podemos seguir con:

  • Un Ministerio centralizador, ideologizado, regimentador, uniformizador y anti educación privada
  • Un Magisterio capturado por la política de la lucha de clases e ideologías extremistas
  • Unos Padres de Familia ausentes
  • Unos Directores de colegios sin poder de decisión
  • Una Sociedad desinformada y desentendida, que no prioriza una verdadera revolución educativa

Una de las primeras exigencias de cambio es la del compromiso que debemos establecer con el magisterio. Darles las mejores condiciones de trabajo y de vida, a cambio de su dedicación exclusiva a la gesta educativa:

Este compromiso de base del magisterio, que ya no necesita una militancia sindical reivindicativa, debe ser la base del ‘Pacto Social por la Educación’ (PASE). Pero este pacto tiene que ser producto de un debate nacional serio, en el cual podamos sopesar los retos, oportunidades, riesgos y recursos que debemos destinar a la educación.

La propuesta del PASE de Lampadia, puede servir de base para el debate, como se propuso en CADE 2017:

El sujeto, el centro, el único objetivo de la educación, es el estudiante. Hoy con las tecnologías del mundo exponencial podemos dar educación individualizada y accesible a todos nuestros niños y jóvenes. Pero tenemos que reconocer que el Perú tiene limitaciones estructurales de recursos para la educación, pues hasta ahora no hemos podido crear una sociedad más rica.

Esta limitación debiera ser razón suficiente para que nuestros gobiernos busquen el apoyo del sector privado para complementar el esfuerzo educativo. Pero, increíblemente, desde el Estado se ha venido combatiendo el aporte del sector privado; a veces simplemente desconociendo su aporte equivalente a más del 3% del PBI, otras veces mintiendo sobre su calidad relativa.

En lugar de sumar esfuerzos y potenciar ambos aportes educativos, se estableció un ambiente de desconfianza mutua y hasta de intrigas y agravios. Cuando nos preguntamos cómo se puede llegar a atentar contra el objetivo de educar, solo encontramos una explicación en la politización e ideologización de varios estamentos del Estado.

En esa dirección es alarmante que en los últimos años se hayan multiplicado, fuera de toda proporción, las consultorías de gente vinculada a la PUCP, una universidad muy ideologizada, y que el personal del ministerio se haya multiplicado hasta en ocho veces desde el inicio del gobierno del nacionalismo.

Mientras la ideología siga siendo el hilo conductor de nuestros gobiernos, o de ciertos estamentos del Estado, el Perú jamás podrá aspirar a alcanzar los niveles de desarrollo de países que hoy nos deslumbran con sus logros económico, sociales e institucionales.

Si tuviéramos una incapacidad estructural para lograr el pleno desarrollo, tendríamos que resignarnos; pero nuestro país tiene todo lo necesario para apuntar a ser un país de éxito. El problema es que nos tropezamos con nuestra propia cola, y no logramos salir de la trampa ideológica abandonada por todos los países más ricos que nosotros.

El ejemplo del agua ayuda a entender como la ideología malogra la educación. Resulta que para los políticos, en los servicios de agua y desagüe, es más importante quién provee el servicio, el sector público o el privado, que el acceso y la calidad del mismo.  Al igual que en educación, el sindicato de Sedapal, controlado por todo tipo de mafias, le arrancó al candidato PPK el compromiso de no cambiar el statu quo; siendo el tema del agua, uno de los ‘pet projects’ del presidente.

Nominar al ‘Estudiante Desconocido’, como el Hombre del Año 2017 en el Perú, debe ser un punto de quiebre en nuestro enfoque sobre la educación en el país:el estudiante es el objetivo número uno, dos y tres de la educación. Lampadia




Reflexiones sobre la educación para el futuro

Reflexiones sobre la educación para el futuro

Meditemos, debatamos y diseñemos un ‘Pacto Social por la Educación’

Pablo Bustamante Pardo
1 de diciembre, 2017
Ex presidente de IPAE
Director de
Lampadia

En las siguientes líneas comparto mi presentación sobre la educación en el Perú:

Educación, un tema que hemos hablado tantas veces, miles de diagnósticos, hemos dado la vuelta a la tierra varias veces hablando de educación y nunca hemos podido concretar una acción positiva de cambio. No voy a hacer un diagnóstico, tampoco quiero proponer cosas específicas. De lo que se trata es de que miremos las cosas un poco diferentes y que podamos inspirarnos para ir hacia la acción. Otra deficiencia que nos ha hecho mucho daño en educación es que cuando aparece un ministro que habla bien y que parece conocer el tema, pasa también en otros sectores, inmediatamente nos desentendemos del mismo y pensamos que él va a arreglarlo, lo delegamos, una gran irresponsabilidad, el tema de la educación, y muchos de los temas que aquejan a nuestro país, son responsabilidad de todos nosotros, no podemos delegarlos, no podemos dejar que alguien los resuelva por nosotros.

Para ir hacia estas ideas, quiero recorrer rápidamente qué ha pasado con la educación.

En un principio se trasmitía de padre a hijo, de maestro a alumno, uno a uno, una riquísima forma de trasmitir los conocimientos de generación en generación.

En la ilustración se procuró la universalización, pero fue inevitablemente elitista, no se pudo lograr.

Pero la Segunda Revolución Industrial, hace algo más de 100 años, trajo en el mundo un cambio dramático hacia la masificación y la estandarización que permitió el acceso a bienes y servicios de millones de personas en el mundo.

Esto por supuesto se llevó a la educación, la educación escolar se masificó y se estandarizó.

Eso por supuesto también lo adoptamos en el Perú, hicimos las Grandes Unidades Escolares bajo el mismo concepto.

Pero esto terminó siendo disfuncional porque cada niño es un universo, cada niño tiene su propia inteligencia, su potencial, y una educación masiva, estandarizada, que es lo que nos permitía la tecnología de entonces, no era pues la que necesitamos para crear en nuestros niños su potencial, sus vidas plenas, evitar estos fracasos de tantos niños, acusados por el sistema de malos alumnos, el rebote hacia los profesores y, en fin, todo este tema.

Increíblemente lo mismo y ese mismo paradigma lo seguimos utilizando en el Perú. Hace poco hicimos una nueva ley universitaria y esta pretende regimentar el proceso de educación superior, en el mundo de hoy, el mundo que reclama libertad, espacio, elevación, creatividad, no se puede tener un ciclo de verano, se tiene que tener tantos créditos, se tiene que hacer esto, se tiene que hacer el otro, y encima tenemos una autocalificada madre mala o algo por el estilo en publicidad engañosa de la SUNEDU, a mí me parece clamoroso.

Por supuesto eso es absolutamente disfuncional, ojalá reaccionemos a estos conceptos.

Todo esto por supuesto es producto de los paradigmas de la Segunda Revolución Industrial, lo lógico, todos hemos actuado bajo esa inspiración.

Pero el mundo se mueve, y todo cambia.

En las últimas décadas hemos tenido cambios sustanciales, en estos gráficos, por ejemplo, originados en el software de Gapminder, podemos ver que en el año 50, yo nací en el 50, hasta el año 2015, la humanidad ha pasado de tener una esperanza de vida de algo así como 40 años a 75, en promedio, y el ingreso de las personas a nivel global se ha multiplicado por 16.

Hemos superado la pobreza de una manera espectacular, hemos pasado de 57% de la población debajo de la línea pobreza a menos de 11%, otras mediciones dicen que es menos de 10% hoy día, un proceso década tras década, sin embargo, la conciencia que tenemos y lo que recibimos en los medios normalmente en lo contrario, el mundo va mal, las cosas van peor, hoy día tenemos el triple de población que el año 50, pero esa población tiene mejor esperanza de vida, mejores ingresos, mejor salud, mejor educación también a pesar de las limitaciones que vamos a mirar.¿Y por qué no vemos eso? Hace poco Steven Pinker nos dijo, ¿por qué las noticias malas son las que aparecen en los medios?, porque estas noticias son eventos, sucede algo malo, sale, sucede un accidente, sale, pero los temas buenos son procesos, la lucha contra la pobreza, la derrota de la malaria, la superación de la polio, la reducción de la pobreza, repito otra vez, porque es lo más importante, son procesos que toman mucho tiempo. ¿Cuando se convierten en noticia?, si no hacemos el esfuerzo por verlos de vez en cuando nos quedamos con las noticias malas, aumentadas por esa vocación por la sociedad del espectáculo de los medios.

En el Perú hemos tenido terribles experiencias de estancamiento, aquí podemos ver, con el mismo software, cómo estuvimos paralizadosmás de 30 años, mientras el mundo avanzaba, nosotros estábamos estancados, apagamos las luces, se prohibió la inversión privada en todos los sectores, se regimentó a la sociedad, albergamos desde entonces esa inflación que terminó en híper inflación que destruyó la vocación de nuestros servidores públicos, porque una vez que la inflación destruyó sus ingresos y tuvieron que recurrir a agenciarse ingresos en otro lugar, perdieron su identidad como servidores públicos, los maestros, los policías, las enfermeras, el propio Estado les concedió tiempo libre para que vean cómo obtenían más ingresos, esa inflación que empezó con el gobierno de la dictadura militar y terminó en euforia con García I. Esa inflación destruyó el alma de los servidores públicos.

Hoy día amigos estamos con una nueva revolución industrial, ya nos han hablado varias veces de ella, esta es la cuarta, pero esta es un poco diferente, en verdad dramáticamente diferente, porque como dice YuvalHarari, el historiador israelita, el que no suba a este tren no va a tener otra oportunidad, la brecha que se va a armar para los países, las sociedades que no se enganchen con el cambio que se viene, imparablemente, va a ser inmensa, no nos va a afectar a los que estamos acá o a nuestros hijos seguramente, porque seguramente podremos darles mejores niveles de educación y de ingresos y de trabajo, pero qué hay de nuestros pobres, si nosotros no hacemos el esfuerzo por nivelar nuestro país hacia arriba, los grandes perjudicados serán los pobres.

Hace pocos días estuvo en Lima, Peter Diamandis, el fundador de SingularityUniversity, y nos habló de un mundo de abundancia, las tecnologías actuales van a producir abundancia, abundancia de energía, abundancia de agua, abundancia de recursos, de alimentos, ese mundo que ha estado progresando y que he descrito rápidamente va a continuar aceleradamente.

También tuvimos acá hace un par de días a Juan Luis Cordero, que nos habló descarnadamente de esta cuarta revolución, no es broma amigos, todo va a transformarse dramáticamente para las personas, las empresas, las ciudades y los países.

Una de estas tecnologías, por ejemplo, ayuda a entender mucho el nuevo paradigma, las impresoras 3D, puedes hacer el producto que quieras, en minutos, donde quieras, lo que viaja ya no es el producto, es la ingeniería, es el diseño, son dos dígitos, construyes en el lugar de consumo, es el paradigma de la producción uno a uno.

Esto por supuesto ya llegó a la educación y se están dando una serie de procesos como los que nos han descrito hoy día muy bien.

Vale la pena rescatar a esta profesora de la India que tiene un Estado del mismo tamaño del Perú y que cuando acá en el Perú reclamábamos más dinero para poder hacer la revolución educativa, ella nos explicó que no se necesita dinero.

Hoy día podemos empoderar a cada niño y a cada joven, podemos convertirlo en una apuesta de desarrollo máximo de sus vidas, con la tecnología, con el paradigma uno a uno, tenemos que enseñarles a aprender y la educación será continua, no podemos regimentar, no, hoy día la educación universitaria tiene que ser de cinco años en el Perú, Dios mío, espero que no tome mucho tiempo hacer los cambios.

En el Perú, por supuesto, ya se está haciendo grandes innovaciones, tenemos ejemplos extraordinarios en Innova Schools, acabamos de tener a Coco Yzusquiacá arriba explicando algunas de sus ideas, Futura Schools, que lo maneja GonzaloGaldos que también está por aquí, nuestro amigo León Trahtemberg, también, un innovador, no sé por qué no está, yo lo extraño hoy día acá, pero hay varios otros colegios que han hecho cosas muy buenas y que nos pueden ayudar a que la educación sea pues una experiencia maravillosa para todos los niños. Lamentablemente el Estado Peruano y los gobiernos han estado contrariando a la presencia de la inversión privada en educación.

Tenemos a este gran señor en el mundo, Ken Robinson, que nos dice que los colegios de los paradigmas antiguos matan la creatividad. Gillian Lynne fue candidata a Ritalin, gracias a Dios descubrieron que movía bien el cuerpo, la pusieron en una academia de baile y nos regaló Cats y el Fantasma de la Ópera.

Veamos qué ha pasado en términos de paradigmas, como decía hace un rato, en la parte inferior vemos, teníamos educación uno a uno, pero elitista; pasamos a educación masiva, pero disfuncional; y hoy día tenemos nuevamente educación uno a uno, universal, si aplicamos las tecnologías modernas.

Esa es la educación para el futuro.

Vamos a renunciar los peruanos a eso, vamos a estancarnos en educación como lo hicimos en economía hace poco tiempo.

Vamos a seguir con:

  • ¿Un ministerio centralizador, ideologizado, regimentador, uniformizador y anti inversión privada?
  • ¿Un magisterio capturado por la política de la lucha de clases e ideologías extremistas?
  • ¿Padres de familia ausentes?
  • ¿Directores de colegios sin poder de decisión?
  • Y lo peor de todo, como decía al principio, ¿una sociedad desinformada y desentendida que no prioriza una verdadera revolución educativa?

En Lampadia propusimos ya hace muchos meses, más de un año, un Pacto Social por la Educación, que hablaba de los compromisos del magisterio, de los padres de familia, de la sociedad, de los directores de colegios y por supuesto el ministerio. En verdad nadie recogió la idea, no se trataba de adoptar lo que nosotros decíamos, se trataba de empezar a hablar de la necesidad de hacer un pacto social.

En el tema del magisterio, por ejemplo, ¿qué cosa decíamos?

  • Hay que darle muy buenos salarios, capacitación, tecnología, infraestructura

¿A cambio de qué?

  • De despolitización, meritocracia y lucha por la calidad de la educación de los niños y de los jóvenes.

¿Es ésta una mala idea? Solo falta, queridos amigos, liderazgo y coraje político.

Es muy difícil que nuestro gobierno pueda, con las limitaciones que tenemos en la vida política, convocar, que es lo que creo que hay que hacer, seis meses para que discutamos, debatamos y podamos desarrollar todos los peruanos, un Pacto Social por la Educación.

No creo que lo pueda hacer el Estado, yo ya fracasé tratando de que eso suceda, le toca a IPAE. Otra de las banderas que tiene que agarrar Julio Luque (Presidente de IPAE), y creo que tenemos que empezar por privilegiar la libertad y la creatividad, entender la fuerza de esas dos cosas para la educación exitosa del futuro, invitemos pues para empezar este proceso a Ken Robinson.

Muchas gracias.

Lampadia

Ver además:

Informe completo

Presentación en el CADE (video)




Nuevos paradigmas educativos de la medicina

Nuevos paradigmas educativos de la medicina

La educación médica ha experimentado una metamorfosis en las últimas décadas. El entorno de aprendizaje se ha alejado del aula tradicional con un profesor transmitiendo conocimiento a los alumnos. La multiplicación de información y la tecnología permiten que el acceso a los elementos cognitivos pueda darse fuera de clase y se complemente la educación propiciando el desarrollo de habilidades orientadas a resolver problemas, trasladar el conocimiento de un contexto a otro, trabajar en equipo e infundir la capacidad de auto educarse y adaptarse para aprovechar la permanente creación de nuevos conocimientos.

Fuente: etdea.edu.co

Este cambio radical en la educación médica ha sido impulsado por la Asociación Médica Estadounidense (AMA), la cual está activamente involucrada en educar a sus miembros sobre este nuevo enfoque basado en competencias y su aplicabilidad a la capacitación y la educación médica continua. (Ver la publicación de The New EnglandJournal of Medicine, que compartimos líneas abajo).

Fuente: semana.com

La importancia de este cambio es que la AMA está redefiniendo su metodología de enseñanza para educar, liderar cambios positivos y crear personas más competentes en una carrera que es crucial para todos. Este mismo cambio, estos nuevos paradigmas, deberíamos verlos en las aulas de otras carreras profesionales y en la educación escolar.

El acceso al conocimiento, detrás del toque de una tecla o un comando de voz, permite que la práctica profesional se potencie sabiendo cómo aprovechar las miríadas de datos, información y documentación de casos, para situaciones concretas en contextos distintos a los presentados. Esto requiere nuevas habilidades, la combinación de la capacidad de almacenamiento, procesamiento y búsqueda de la cibernética, con la curiosidad y capacidad de análisis del ser humano.

Fuente: educacion-practica.blogia.com

La adopción de estos paradigmas para todos los espacios de aprendizaje, incluyendo el escolar, es el gran reto que permitiría que nuestros niños y jóvenes formen parte del mundo del conocimiento, la innovación y las nuevas profesiones, que marcarán el desarrollo de vidas plenas en los países más prósperos.

Por ejemplo, en el Perú, Innova Schools ya adoptó los nuevos paradigmas: Los niños pasan la mitad del día en clases pequeñas, de 30 personas, centradas en la resolución de problemas y la colaboración entre alumnos, con un aporte importante del maestro, como facilitador. La otra mitad del tiempo es para el aprendizaje autónomo, utilizando sitios web como Khan Academy y Time To Know (Tiempo de Saber).

Lamentablemente, esta transformación viene siendo resistida desde nuestros gobiernos, en los que la educación ha sido capturada por elementos ideologizados, que entienden los espacios de educación, como campos de formación de ciudadanos que suscriban las ideas de visiones estatistas y anti modernas.

Además, siendo que la innovación viene muchas veces desde el sector privado, se desarrolló una gran resistencia al liderazgo de la educación privada, tanto en el espacio escolar como en el universitario. Todo esto se exacerbó con el gobierno de Humala, primero con el radicalismo de la ministra Salas, y luego con el popular Saavedra, que llegó a decir: “Lleven a sus hijos a escuelas públicas, que brindan mejor educación”, llenó el ministerio de consultorías de la PUCP, impuso un currículo para el siglo XX, apoyó regimentación de las universidades, que ha prohibido hasta el ciclo de verano, obliga a carreras de cinco años y establece su sometimiento a una dictadura arbitraria del Sunedu.

En Lampadia hemos insistido numerosas veces sobre la necesidad de emprender una verdadera revolución educativa si queremos nivelarnos con los estándares educativos de los países más avanzados y enfrentar los retos que traerá la cuarta revolución industrial a nuestros pobres.

Lamentablemente, dada la falta de pensamiento crítico de la sociedad y la limitada participación de nuestra clase dirigente en el debate nacional, nos hemos dejado llevar por la ilusión de los emprendimientos del Estado, que están muy lejos de la gran movilización social que debemos desarrollar.

Este tema va muy ligado a nuestra propuesta de que los jóvenes requieren un “salto cuántico”, o un “Big Bang”, como se propuso en CADE 2014 en la presentación de la “Visión del Perú para el tercio de siglo” y en los consejos de LantPritchett, Presidente de la Maestría en Políticas Públicas del programa de la Escuela de Gobierno Kennedy de Harvard para el Desarrollo, en el mismo evento, respectivamente. Ver en Lampadia: Educación y Habilidades para el Futuro y Líneas de acción y compromisos para la educación del siglo XXI.

El futuro del Perú depende de cómo formemos a nuestros jóvenes. Esperamos que el gobierno pueda tomar conciencia de las reformas que necesitamos asumir para iniciar la inmensa tarea de dar a las nuevas generaciones los beneficios y capacidades que nos ofrece el mundo del siglo XXI. Lampadia

Diciendo adiós a las clases en la Facultad de Medicina –
¿Cambio de paradigma o moda pasajera?

Richard M. Schwartzstein, M.D., y David H. Roberts, M.D.
The New EnglandJournal of Medicine 
17 de agosto de 2017
Traducido y glosado por
Lampadia

“Sea un médico, no se requiere tomar clases”. Este titular de la Universidad de Vermont sobre su propuesta de un nuevo enfoque para la educación de médicos, generó una gran controversia. Aunque esta propuesta de cambio es más drástica que la reforma del plan de estudios que se lleva a cabo en otras escuelas de medicina, el abandono de los cursos tradicionales basados ​​en clases presenciales, en las escuelas de medicina de EEUU, ha estado en marcha durante más de tres décadas. La transformación empezó con la introducción de aprendizajes basados en problemas; y, más recientemente, la enseñanza basada en clases ha sido sustituida cada vez más por el aprendizaje en equipo, educación interprofesional y ejercicios que integran la medicina clínica y las ciencias básicas. Pero, ¿están los nuevos cambios propuestos basados ​​en evidencias, o son simplemente la última moda en la educación médica? ¿Deben evitarse todas las clases?

Hoy en día, la mayoría de los médicos reconocen que la información biomédica disponible excede lo que una persona puede aprender y retener en la mente. Sin embargo, todavía están pendientes las respuestas sobre la cantidad de contenidos que los estudiantes deben aprender, si ese aprendizaje se puede realizar de mejor manera en las aulas tradicionales, y qué más se requiere para que los estudiantes de medicina se conviertan en exitosos profesionales, durante una vida de aprendizajes y adaptación. La ubicua presencia de la tecnología personal e institucional permite un acceso rápido a la información médica y permite que los educadores se enfoquen en ayudar a los estudiantes a desarrollar una comprensión más profunda de la salud y las enfermedades humanas, de habilidades para resolver problemas, y de la capacidad de transferir el conocimiento aprendido en un contexto, a otro. Los educadores que dan una clase tradicional con docenas de diapositivas de PowerPoint con contenidos pesados, pueden confundir lo que enseñan con lo que aprenden los estudiantes: el hecho de que un maestro haya presentado una información no significa que los alumnos lo hayan aprendido. De hecho, la teoría de la carga cognitiva sugiere que nuestros cerebros están limitados en la cantidad de información que pueden procesar a la vez;60 diapositivas en 45 minutos pueden parecer una forma eficiente de enseñar, pero es poco probable que sea una manera efectiva de aprender.                                                                                                      

Los estudiantes que aprenden material nuevo pueden ser despistados por la ilusión de saber y la falacia de comprender. Cuando los estudiantes escuchan o leen material fluido y bien presentado, es común que crean que ahora dominan su contenido. Sin embargo, cuando se enfrentan con un problema que requiere la aplicación de esa información, pueden darse cuenta de que, en el mejor de los casos, su comprensión es superficial.

Para promover una comprensión más completa y mejorar las habilidades para resolver problemas y aprendizaje auto-dirigido (habilidades críticas para un médico que practicará entre 30 y 50 años y, en el caso de ejercicios de aprendizajes auto-dirigidos, un nuevo requisito de acreditación establecido por el Comité de Enlace sobre Educación Médica), las escuelas de medicina han comenzado a enfatizar el aprendizaje activo y las actividades basadas en el equipo. La adquisición de información se produce en gran parte fuera del aula: de acuerdo con los principios derivados de la ciencia cognitiva, el contenido fáctico se presenta en asignaciones de estudio que no son abrumadoramente largas y el contenido es intercalado con preguntas o problemas que aseguren que los estudiantes puedan evaluar su nivel de comprensión.

En el salón de clases, el instructor puede facilitar el aprendizaje, pero este debe ser impulsado en gran parte por el alumno. Los ejemplos de casos son importantes para establecer la relevancia del material. Las preguntas pueden plantearse de una manera que requieran la búsqueda de información, lo que solidifica la memoria, pero también obliga a los estudiantes a ver la información desde una nueva perspectiva y transferirla al contexto del caso en cuestión. En lugar de hacer preguntas que comiencen con “qué o cuál” (por ejemplo, “¿Cuáles son las causas de la hipotensión?”), los instructores pueden usar preguntas “cómo” y “por qué” (por ejemplo, “¿Cómo piensan sobre el control de la presión arterial?”; “¿Por qué este paciente sería hipotensor en estas condiciones?”). Pedirles a los estudiantes que comparen un nuevo caso o ejemplo con uno que discutieron la semana anterior facilita aún más la transferencia de conocimiento. Las preguntas para las cuales puede haber múltiples respuestas correctas pueden ser las más convincentes, porque alientan la discusión y la generación de hipótesis contrastantes. Se debe permitir que los estudiantes tengan suficiente tiempo para que trabajen en grupos discutiendo opiniones, prueben ideas (las suyos y de otros), y empiecen a aprender como pensar como un médico. Estas actividades requieren más esfuerzo de parte de los estudiantes que memorizar hechos, pero también son más efectivos para aprender y retener conocimientos.

Este enfoque llamado de aula-invertida, es adecuado para los estudiantes que son miembros de la generación millenial. Estos jóvenes adultos son nativos digitales: han crecido con la tecnología y están íntimamente familiarizados con ella. Entrenados para formar parte de equipos, prosperan en entornos colaborativos. Están acostumbrados a encontrar información en línea y aprender mejor de contenidos visuales atractivos que los mantiene enganchados y se presenta en segmentos cortos (como videos con una duración de menos de 10 minutos). Las clases tradicionales pierden rápidamente la atención de muchos de estos estudiantes y un estudiante no enganchado, no está aprendiendo.

Los resultados iniciales de este enfoque han sido alentadores, particularmente en los cursos de ciencias de la universidad y en una docena de escuelas de medicina que están implementando nuevos planes de estudios utilizando estos métodos pedagógicos. En un ensayo aleatorizado y controlado que comparaba una versión temprana del aula-invertida con los tutoriales de aprendizaje tradicionales basados ​​en problemas, los estudiantes encontraron que el entorno de aprendizaje alternativo era más atractivo e inspirador. Los estudiantes que habían tenido un rendimiento relativamente bajo en cursos anteriores tenían una estadística de mejoría significativa en los puntajes de sus exámenes, posiblemente porque interactuaron mejor con sus compañeros y compartieron sus ideas. Los profesores que utilizan un enfoque de aula-invertida a menudo se sienten liberados de la tiranía del requisito de “cubrir” todo. Dado que la adquisición de información es realizada por el alumno fuera de clase, las interacciones entre profesores y alumnos pueden centrarse en contenidos difíciles de entender y en la aplicación de nuevos conceptos a problemas del mundo real.

Entonces, ¿han muerto las clases? Si “clase” se refiere a la imagen tradicional de un profesor parado y hablando frente a un grupo grande de estudiantes que están absorbiendo información de forma pasiva, entonces sí, creemos que las escuelas de medicina deberían abandonar en gran parte ese formato de enseñanza. Pero si describe sesiones de aprendizaje interactivo de grupos grandes con estudiantes que se prepararon de antemano, con preguntas frecuentes dirigidas a la audiencia, el tiempo reservado para la discusión grupal y el uso de sistemas de respuesta de la audiencia (para encuestar a los estudiantes sobre una pregunta para evaluar su comprensión, por ejemplo), entonces creemos que un formato interactivo de estilo de clase debe seguir siendo una opción y puede ser una herramienta de enseñanza efectiva.

Al mirar hacia el futuro de la educación médica, creemos que es importante evitar el fanatismo con respecto a los enfoques pedagógicos, incluida la insistencia en que los métodos de aprendizaje basados ​​en equipos deben cumplir con criterios específicos o que no se permita ninguna desviación del aprendizaje basado en problemas puros. A menudo podemos servir mejor a nuestros estudiantes fusionando elementos de varios métodos, como el aprendizaje basado en equipo o basado en casos y sesiones interactivas de aprendizaje en grupos grandes, en lugar de sentirnos obligados a adherirnos a un formato particular. Pero también debemos usar enfoques basados ​​en evidencia siempre que sea posible y evaluar rigurosamente nuestras innovaciones, reconociendo que los resultados importantes pueden incluir la participación de los estudiantes y las habilidades para resolver problemas, la dinámica del equipo y el entorno de aprendizaje tanto como los puntajes de los exámenes. En nuestra vida cotidiana como médicos, nuestro objetivo es crear una cultura de mejora continua de la calidad. Deberíamos esforzarnos por crear la misma cultura en nuestras vidas educativasLampadia