Jaime Spak
Para Lampadia
Cuando era joven, uno de los juegos que nos entretenían, era la búsqueda del tesoro. Consistía en seguir una serie de pistas hasta que la final el más ágil y capaz llegaba a encontrar el tesoro.
Esto se podía hacer a pie o más sofisticado en carros, aprovechando para recorrer la ciudad e inclusive poner una serie de tareas que tenían que realizar los participantes para llegar al siguiente punto.
Pues bien, estas 43 organizaciones que pretenden participar en las elecciones, como si fuera un juego del tesoro, se encontraran con pistas muy complicadas, para sus escasos recursos, tanto económicos como intelectuales.
Quienes participen van a encontrar no un tesoro, sino un cofre vacío.
Este cofre lo tendrán que llenar con ideas, capacidades y sobre todo fuentes de financiamientos.
Acá no hablamos de derechas ni de izquierdas, sino de lo que se debe hacer con los recursos con que cuenta el estado.
Si no les alcanza, en vez de endeudarse, deben acudir al sector privado, que tiene gente mucho más preparada y en la gran mayoría con experiencia y honestidad.
En primer lugar, deben de ver como manejaran los recursos en el sector Interior.
En estos momentos la situación del sector interior es calamitosa.
No hay mística, mal uso del dinero y sobre todo se encuentran sobrepasados por la delincuencia.
Deberán tener un plan preconcebido, de poder utilizar los recursos en mejorar la calidad de los elementos con que cuenta la policía.
Tendrán que darle una importancia primordial al sector de inteligencia.
Deben de luchar frontalmente con las organizaciones tanto nacionales, como extranjeras, que han tomado por asalto la tranquilidad de nuestro país.
En el sector salud la situación es peor.
La gente que se enferma, para conseguir una cita tanto en Essalud, como en el Minsa, deben esperar meses.
Les comenté hace algunos artículos atrás, sobre el hombre que aporto toda su vida a Essalud y ahora en la tercera edad, se cachuelea arreglando bicicletas.
Fue a pedir una cita por un problema de uno de sus ojos y se la dieron para once meses después.
Cuando acudió a la cita ya había perdido la visión del ojo.
En el hospital Sabogal hay una espera de más de 3,000 personas para que le den turno, para cirugías.
Un amigo mío que acaba de cumplir 80 años y aporto toda su vida, logro la cita en Essalud gracias a un contacto.
Necesita una operación para reemplazar su rodilla que está en deplorable estado.
Le han indicado que recién en octubre lo podrán ver y ojalá tenga la suerte de conseguir la prótesis.
La espera de atención en las entidades del estado es casi una sentencia de muerte para lo que no tienen recursos.
Tenemos un ministro de Salud, del partido del hombre más inculto del país, dueño de universidades y cero gestión.
Se ha vuelto a ver casos de tos ferina, y de otras patologías que ya estaban superadas.
En el sector Minería, la pésima influencia de tanto agitadores como caviares, nos está haciendo retroceder.
Nuestro país es rico en oro, plata, cobre, litio, etc. Pero las mil y un tramites que tenemos que hacer dificulta el inicio de estas obras.
Como lo dije en anteriores artículos, imagínense si en la época de Humala se hubiera dado luz verde a proyectos como Conga y muchos más, otra seria la realidad de los ingresos del país.
En el sector transporte y comunicaciones la red vial del país también está en una situación terrible.
Solo para una muestra, el nuevo aeropuerto no tiene forma de acceder y lo que debe de hacerse demorara varios años.
Es tal la improvisación, que no saben el destino del anterior aeropuerto.
El sector Educación, lo dirige el peor ministro que ha habido en los últimos años y que lo único que hace es defender a la presidente de todas las torpezas que hace.
El nivel de la educación pública decae año a año, con profesores mal motivados y con agitadores políticos que se pelean entre ellos para ver qué grupo es más radical, mientras que nuestros jóvenes sufren de una incapacidad de aprendizaje.
En el sector Justicia, los penales dan una lástima.
Los delincuentes planifican sus fechorías desde allí, y hasta el penal de Challapalca en Tacna a 4,600 metros de altura, donde se supone que han enviado a los presos de mayor peligrosidad, los internos cuentan con sofisticados métodos de comunicación y siguen extorsionando a sus víctimas.
Quien gane las elecciones en lugar de un tesoro, se encontrará con un hueco tan grande y vacío, que lo tendrán que llenar de decisiones políticas que nos hagan regresar la progreso.
Si no se elige a una agrupación capaz de solucionar estos y otros problemas, el país no tendrá futuro.
Ojalá que esto no suceda. Lampadia