Jorge Chamot
Noviembre 17, 2025
Para Lampadia
En nuestro artículo anterior ya sugerimos la necesidad de una política minero-energética-industrial pero formalmente multisectorial en el Perú, y pensamos que el componente Energía quizás merece comentarios aparte.

El mundo está viviendo un momento muy interesante en relación al tema energético que se ha llamado de “transición” energética.
Yo voy a sugerir que en realidad estaríamos evolucionando a una nueva etapa que podríamos llamar “dominación energética” ya que el control de las fuentes energéticas, en varias de sus modalidades y a través de su utilización y cadenas de suministro, es crucial en el desarrollo económico global y se concentra en ciertas áreas geográficas.
El carbón y la biomasa, el vapor y la electricidad, el gas natural y el petróleo, el uranio, el viento y la energía solar, y otros como la geotermia, han ido marcando etapas en el desarrollo energético.
Parecería que su peso específico se incrementa, ya que seguimos viendo como la Energía se muestra aún más indispensable en la vida cotidiana del ser humano y ha sido sin lugar a dudas el motor del desarrollo desde la revolución industrial. Aparentemente lo será aún mayor en el futuro, teniendo en cuenta que los costos tanto de generación como de manejo de los recursos siguen una tendencia a la baja.
Hoy, el salto en la demanda de electricidad por los usos de la inteligencia artificial (IA), los centros de data, las criptomonedas y la locomoción eléctrica, que demandan aumentos del consumo eléctrico no previsto hasta hace muy poco, está poniendo presión a las necesidades de aumentar y mejorar los sistemas de trasmisión y acelerar soluciones innovadoras en todas las etapas a lo largo de la cadena de producción y manejo. Estos cambios reflejan un entendimiento consciente de la situación, si sólo nos fijamos que cada día más, el mecanismo de soluciones en todos los campos del desarrollo pasa por una solución digital, que inclusive demanda una infraestructura especial. Ello nos hace pensar que el futuro es un futuro dominado por el balance oferta-demanda energética.
Hasta hace muy poco las mejoras en capacidad y eficiencia energética eran forzadas por necesidades económicas y las operaciones de generación y transmisión eléctrica iban creciendo más o menos adecuadamente, inclusive ante el incremento de la demanda que trajo la era del internet y el crecimiento natural de los mercados, pero ahora IA, sobre todo, fuerza a buscar soluciones que no pueden depender de los sistemas ya instalados. La infraestructura existente ya es vieja en su mayoría y obsoleta en algunos casos. Es por eso por ejemplo que las grandes empresas de tecnología IA, están invirtiendo directamente en plantas de generación para asegurarse, exclusivamente, en cómo cubrir sus necesidades, incluyendo revitalizar antiguas plantas de carbón y nucleares, cerradas anteriormente.
Los cambios en la cadena de suministro para la actividad industrial también influyen en el balance oferta-demanda de Energía y en algunos casos, ya que la Energía es esencial y de necesidad diaria, ni hablemos de la evolución de la dinámica geopolítica, tan complicada en nuestros días (Nota 1). Esto hace que los esfuerzos para mantener suministro energético adecuado y estable se convierta en tema de prioridad lo cual, a decir verdad, crea una serie de oportunidades para avanzar tecnológicamente en las cadenas de valor, y no solo del energético (Nota 2).
Los embates de la globalización nos presentan una paradoja que alguien resumió en que la “autonomía” energética viene de la mano con “integración” o dependencia relativa. Es diferente, de un lado ser autosuficiente neto volumétricamente o en términos de capacidad de generación, y por el otro, de lo que podría llamarse “independiente” que es lo que tradicionalmente se aceptó como autonomía o simplemente no depender de nadie para nada, lo que hoy es imposible. Nadie tiene todo lo que necesita. Quizás, y solo si fuera para compartir el riesgo de las inversiones. Hay quienes inclusive dicen que integración asegura soberanía.
Los sistemas actuales, por ejemplo, en el caso de la electricidad, con la novedad de la generación solar y eólica, adolecen de ser fuentes “intermitentes” ya que generan demasiada en unos momentos y no lo suficiente en otros, lo que ha dado un impulso enorme a las tecnologías de almacenamiento masivo de energía, si queremos llamarlo, baterías. La sobrecarga generada intermitentemente por el viento y el sol y la necesidad del almacenamiento de energía, están generando, y originando nuevos negocios, en el mundo desarrollado, en relación a expansión y mantenimiento de la red eléctrica, sobre todo cuando los lugares más óptimos de ese tipo de generación, no están cerca de los centros de mayor consumo. Es decir, la inseguridad de no poder tener la electricidad cuando y en la cantidad que se le necesite, trabaja en contra de la estabilidad del suministro.
Y todo esto…. ¿qué tiene que ver con el Perú? En este mundo globalizado, todos sufrimos y/o aprovechamos de lo que pasa en todas partes, sobre todo en los precios, además, quién sabe a lo mejor en el futuro, y en adición al crecimiento vegetativo de la demanda, podríamos tener centros de data, o nuevas refinerías de metales, o industrias de alto consumo de electricidad, o de calor, que es algo distinto, pues hay fuentes energéticas que todavía siguen siendo óptimas para producirlo y no todas lo producen. Si añadimos las oportunidades de exportarla a nuestros países vecinos (ya sea como electricidad o como gas natural de los que todos ellos son países deficitarios) nos inducen a pensar holísticamente en Energía y tomar medidas al respecto.
Si recapitulamos sobre el sector energético, en el país tenemos:
- recursos hidráulicos para aumentar extensamente la generación por hidroeléctricas,
- gas natural para producir aún más con un Camisea II que aproveche nuevos suministros de áreas todavía por desarrollar en Camisea y Candamo,
- amplias oportunidades en el rubro de renovables solar, geotermia y eólica, y felizmente, estructura de transmisión que está evolucionando,
- indicios suficientes para una campaña agresiva, algo ya en marcha, para desarrollar gas y petróleo offshore, así como nuevas posibilidades de crudos pesados en la Amazonía con las nuevas tecnologías disponibles para la exploración y producción que no existían en los 70s y 80s cuando hubo inclusive ciertos descubrimientos que no eran sujetos de desarrollo económico en esa época (Nota 3),
- litio y uranio en Puno, no nos olvidemos…y sabe Dios que otras alternativas conforme sean factibles en base a innovación e investigación.
Mi propuesta:
He tomado de la página web del Ministerio de Energía y Minas lo que se cataloga como “Objetivos de la Política Energética” del Estado (reproducido en el negro normal de las letras). No tenemos que inventar mucho, solo sugiero las siguiente modificaciones (en azul):
“1. Contar con una matriz energética diversificada, con énfasis en las fuentes renovables y la eficiencia energética, a ser desarrollada por la industria privada, sin subsidios generalizados y en base a la libre competencia
2. Contar con un abastecimiento energético competitivo y eficiente, asegurándose el Estado de cumplir su labor normativa, promotora, supervisora, coordinadora, y especialmente la de hacer cumplir el marco legal vigente
3. Asegurar el acceso universal al suministro energético a través de los mecanismos que la ley establece y le permite al Estado, limitando su intervención económica solo en los casos de subsidiaridad declarada
4. Lograr la autosuficiencia en la producción de energéticos, utilizando al máximo las fuentes domésticas, y su uso eficiente, reduciendo al mínimo las importaciones y aumentando su efecto multiplicador en sectores específicos
5. Desarrollar un sector energético con miras a satisfacer las necesidades de la población y la actividad económica, facilitando polos de desarrollo, con mínimo impacto ambiental, bajas emisiones de carbono y una cadena con un marco de Desarrollo Sostenible y eficiente
6. Desarrollar la industria del gas natural y una agresiva y expansiva determinación de nuevos objetivos en una política minero-energética-industrial de alcance, participación y responsabilidad multisectorial con énfasis en investigación e innovación
7. Fortalecer la institucionalidad del sector energético incentivando su eficiencia, estableciendo el Silencio Administrativo Positivo y asegurando obtener el efecto multiplicador en la economía con métodos y procesos modernos ya probados
8. Integrarse con los mercados energéticos de la región, incentivando la exportación de nuestros sobrantes después de asegurar el suministro y la infraestructura necesaria para cubrir la demanda nacional en un horizonte permanente a determinarse”
Notas
1.- Y si no, preguntarles a los Europeos, que pagan por la electricidad más cara del mundo ante las consecuencias de “castigar” a Rusia al no comprarles gas natural (todavía reciben algunos volúmenes pero muy limitados) desde el inicio de la guerra en Ucrania. Habría que puntualizar que esta situación se originó en principio por un error garrafal autoinfligido de Alemania al decidir eliminar sus plantas nucleares y depender del suministro de gas natural por tuberías de Rusia. Dicho sea de paso, negocio extraordinario para los productores de gas natural en otras partes del mundo, sobre todo USA, con el reemplazo de esa demanda de gas natural con LNG producido en Texas y Louisiana.
Y muy relacionado al tema energético, es el control de China de la casi la totalidad de la refinación y cadenas de suministro de metales críticos, empezando con las licencias de exportación de los mismos. Este simple hecho hizo que USA retrocediera en sus amenazas de imponer nuevos, atolondrados y exorbitantes aranceles a los productos importados de los chinos……. al menos por un año.
No quiero dejar de mencionar cambios radicales que tienen irreversible impacto geopolítico como el uso del “fracking” en la industria del petróleo. Es el evento geopolítico más ignorado de los últimos tiempos ya que convirtió a USA en el mayor productor de petróleo y gas del mundo y pasó de ser importador neto a exportador neto, con todas las repercusiones del caso (Comenzando con que ya no depende de ningún otro gran productor como Arabia Saudita, Emiratos Árabes, Rusia, la “anterior” Venezuela, etc., ya que con Canadá y México constituyen un área auto-complementaria).
2.- Al mencionar cadenas de valor y suministro energético no solo nos referimos a electricidad y gas natural, sino a todo tipo de materias primas, productos y servicios relacionados que influyen en el uso y la disponibilidad de recursos energéticos. Por ejemplo, e inclusive, la disponibilidad y control directo de minerales críticos de aplicación en nuevas tecnologías energéticas, del LNG o gas natural por tuberías, del uranio y otros metales que dependen de muy pocos proveedores, de las instalaciones portuarias y otras modalidades de infraestructura necesarias para su transporte, transferencia de nuevas tecnologías, cuellos de botella (geográficos, sociales, burocráticos), dificultades en financiación de proyectos, et. al.
3.- Ya se han firmado acuerdos de evaluación de información existente en la costa. Hay todavía muchas posibilidades en la Selva. En general, hay áreas todavía sin explorar en cuencas ya antes trabajadas, pero más aún en cuencas que todavía no se han tocado.
4.- Acabo de leer una noticia en varios medios internacionales que me hizo agregar esta nota a último momento. O los medios caviares lo consideran un triunfo, o los medios serios lo reportan con sorpresa inexplicable. El gobierno del Perú acaba de publicar un decreto supremo del Ministerio del Ambiente que reglamenta la “contaminación lumínica“ (Reglamento de la Ley 31316 de Prevención y Control de la Contaminación Lumínica, mediante el D.S. 021-2025-MINAM). Un gobierno de transición cuya razón de ser es preparar las elecciones y enfrentar la inseguridad ciudadana, se dedica a agregar más caos al que ya se ha creado en los últimos años: más burocracia, más trámites, más impedimentos a que la empresa privada desarrolle sus actividades, más asesores, más estudios, más politiquería, y como desgraciadamente impera el silencio administrativo negativo, es decir, permiso solicitado no respondido significa negado, tenemos más discrecionalidad dentro del Ejecutivo…… y ya sabemos lo que eso significa.
La cereza sobre el pastel: “se dispone que los municipios elaboren sus respectivos planes de acción para prevenir y controlar la contaminación lumínica”……!sin comentarios!
Lampadia






