Fernando Cillóniz B.
CILLONIZ.PE
Ica, 28 de julio de 2025
Para Lampadia
Así como Alto Piura, Olmos Tinajones, Chavimochic, Chinecas, Majes Siguas – y otras regiones – tienen sus “Proyectos Especiales”; Ica y Huancavelica tienen su Proyecto Especial Tambo Ccaracocha… más conocido como el PETACC.
Tambo, por el Río Tambo. Y Ccaracocha, por la Laguna Ccaracocha. Tanto el Tambo como Ccaracocha se encuentran en Huancavelica. Las aguas de ambas fuentes naturales constituyen las nacientes del Río Ica. Sin embargo, el PETACC está adscrito – exclusivamente – al Gobierno Regional de Ica. Huancavelica – increíblemente – está excluida del PETACC. ¡Qué tal!
En mi opinión, el PETACC es el emblema máximo de la altanería política iqueña y limeña… y el desprecio de “lo andino”. ¡A quién – en su sano juicio – se le pudo ocurrir crear una institución pública iqueña, basada en recursos huancavelicanos, sin participación huancavelicana! Absurdo total.
Por ello, durante mi gestión como Gobernador Regional de Ica (2015 – 2018), en estrecha coordinación con mi par huancavelicano (Glodoaldo Álvarez), creamos la Mancomunidad Regional Huancavelica – Ica (MANRHI), con el fin de transferirle el PETACC, y lograr una participación paritaria de iqueños y huancavelicanos. Efectivamente, establecimos un directorio del PETACC, conformado por igual número de miembros con iguales derechos, entre iqueños y huancavelicanos.
Aparte de agradecer y expresar mi profundo aprecio por nuestros vecinos andinos, quisiera destacar que el sólo gesto de hermanar a Ica y Huancavelica en el PETACC sirvió para terminar un conflicto de 70 años que amenazaba con agravarse, y que indefectiblemente terminaría en hechos catastróficos como roturas de presas, taponamientos de túneles de trasvase, voladuras de canales de conducción, inundaciones, y hasta muertes humanas.
No obstante, mi sucesor en el Gobierno Regional de Ica (Javier Gallegos 2019 – 2022) y el actual gobernador (Rocky Hurtado 2023 – 2026), ambos desconocieron la transferencia del PETACC a la MANRHI. Peor aún, con sus reiteradas inasistencias “apagaron” a la MANRHI, y mantuvieron la localía del PETACC, exclusivamente en Ica, sin ninguna participación huancavelicana. Pura altanería política iqueña, y profundo desprecio por los derechos del pueblo huancavelicano.
Y amor a los chicharrones, también. Resulta que el Gobierno Regional de Ica – bajo la gestión de Gallegos, y seguida por Hurtado – está utilizando al PETACC para las obras de ensanchamiento del Río Ica (incluido el encementado del río) para evitar las consabidas inundaciones de la ciudad de Ica, cada cierto tiempo, cuando baja mucha agua de Huancavelica.
El proyecto en mención incluye – por cierto – la construcción de varios puentes sobre el río, a su paso por la ciudad de Ica. O sea, más parece un proyecto municipal iqueño, que otra cosa.
Aclaro… no tengo ningún problema en que se construyan puentes sobre el río, en Ica. Pero que los construya el PETACC… me parece un sinsentido.
Además ¿acaso, para evitar la inundación de la ciudad de Ica, no era mejor construir reservorios en Huancavelica?
¿Qué sentido tiene encementar el Río Ica… acaso eso no impermeabiliza el cauce del río, y limita la recarga del acuífero de Ica?
En todo caso, ¿qué tiene que ver el PETACC con obras millonarias de índole municipal iqueñas, si el ámbito natural de la institución – como su nombre lo indica – está en la parte alta de la cuenca… precisamente, en la Laguna Ccaracocha y en el Río Tambo?
¡Tremenda torpeza política!
Bueno pues – con justo derecho – Huancavelica no se va a quedar tranquila. El ancestral conflicto por el agua entre Ica y Huancavelica ha revivido por culpa exclusiva de los dos mencionados Gobernadores Regionales de Ica.
A ese respecto, lo único que queda es recular. Mejor dicho, respetar la creación de la MANRHI, transferirle el PETACC – incluso, establecer su localía en Huaytará, Huancavelica – y conformar su directorio de manera equitativa, entre iqueños y huancavelicanos.
Una vez más – como tantas veces en el pasado – la política (en este caso, la política iqueña y limeña) es la causa de encarnizados conflictos entre peruanos. La Hermandad del Agua entre Ica y Huancavelica, que establecimos con mucha esperanza y alegría allá por los años 2015 al 2018, está moribunda.
Construir muchos reservorios en la Sierra – miles y miles de reservorios – grandes, medianos y pequeños, para que la Sierra y la Costa tengan agua todo el año… no sólo en las temporadas de lluvias. Hermanar a la Costa con la Sierra, a través del agua… es decir, gestionar conjuntamente las cuencas hidrográficas; desde las nacientes hasta las desembocaduras. Retribuir a la Sierra por el agua que le suministra a la Costa. ¿Por qué demora tanto la aplicación del Canon Hídrico? Y en el caso de Ica y el PETACC, hacer justicia con Huancavelica, como corresponde.
Todo menos permitir que Gobernadores Regionales altaneros y despectivos, rompan la ancestral hermandad – natural, cultural – entre Ica y Huancavelica. Lampadia