Mariana Hochschild
Fundadora de ONG Misión Huascarán
Gestión, 24 de setiembre del 2025
Los campesinos vivían básicamente del trueque, ya que por seis meses de cosecha de papa, apenas ganaban S/ 130”.
La ONG Misión Huascarán ha sido distinguida por su labor social en la sierra de Áncash y será reconocida el próximo 22 de octubre en Nueva York, cuando la organización Help Perú entregue su premio Honoree a Mariana Hochschild, fundadora y voluntaria de la institución.
Este galardón resalta los logros de la organización y el liderazgo colaborativo de un equipo de mujeres que, a través de su dedicación, han transformado la vida de miles de familias en situación de pobreza extrema, brindándoles herramientas y capacidades para el desarrollo de sus comunidades.
¿Cómo nació misión Huascarán?
Un sacerdote nos habló de una zona muy pobre en Huaraz, donde la calidad de vida era terrible, producto de la extrema pobreza que dejó la presencia de Sendero Luminoso. Los campesinos vivían básicamente del trueque, ya que por seis meses de cosecha de papa, apenas ganaban S/ 130. Pensamos que esto no podía seguir y llamé a un grupo de amigas y empezamos a trabajar.
¿Cuántas personas conforman la ONG?
Ya han pasado más de 10 años. Ahora somos 22 voluntarias que trabajamos de la mano del empresariado y con ayuda del gobierno regional, el Ministerio de Salud, el Ministerio de Educación y con médicos y escuelas que participan en nuestro currículum.
¿Qué tanto han avanzado?
Actualmente, llegamos a 45,000 personas en seis provincias de Áncash: Huaylas, Yungay, Carhuaz, Huaraz, Aija y Recuay. Se han cerrado brechas en educación, salud y alimentación.
¿Qué brechas se han cerrado en materia de educación?
Huaraz tenía el penúltimo puesto en comprensión lectora, y la labor voluntaria de Magdala Zevallos, nos ayudó a formar un programa que ahora se integra por varias profesoras. Subió a 63% el índice de comprensión lectora, con más de 35 mil libros digitales leídos en las tablets, y una tasa de alfabetización del 59%, gracias al programa Raz-kids, que aplican colegios como el Roosvelt.
¿Y la lucha contra la inseguridad alimentaria?
La mayoría de niños padecía anemia. Aplicamos un programa piloto que el Gobierno ahora lo replica, ya que redujimos la anemia del 47% al 9%. Cerca de 800 menores se benefician con el programa de nutrición y la implementación del Pan Hemínico.
Más allá de la alfabetización, ¿qué competencias se desarrollan en pro de las comunidades?
Se logró que tejedoras conecten con diseñadores nacionales e internacionales y que los agricultores se independicen. Se necesita descentralizar el Perú y aprovechar la riqueza de sus regiones.
¿Tienen planes de expandir su área de influencia?
Cada vez que queremos salir (de Áncash) encontramos más zonas vulnerables. Estamos haciendo algunos convenios que, a futuro, ojalá se concreten para ayudar y tener nuestros programas en la selva, donde también hay mucha pobreza.