Alar Karis, Presidente de Estonia
Kristina Kallas, Ministra de Educación de Estonia
Suplemento Educación y Desarrollo
19 de agosto de 2025
Con una población de 1,3 millones de habitantes, Estonia se ha consolidado como líder europeo en educación, ocupando el primer lugar en el ranking PISA de la OCDE en ciencias, lectura y matemáticas dentro de la región. Su sistema educativo combina equidad, digitalización y una visión a largo plazo que integra la IA como herramienta de aprendizaje. Desde hace décadas, el país invierte en infraestructura tecnológica y en la formación docente, manteniendo un enfoque en pensamiento critico y preservación de su lengua e identidad cultural.
En Estonia, los maestros son responsables de adaptar las herramientas digitales al contexto de su aula, con la confianza del Estado para tomar decisiones pedagógicas. Esta autonomía, junto con una cultura de aprendizaje permanente, ha permitido mantener bajos niveles de abandono escolar y altos estándares académicos.
Confianza y adaptación al cambio
El presidente de Estonia, Alar Karis, ha reafirmado que la IA no debe verse como una amenaza, sino como una oportunidad para repensar la educación. En declaraciones recientes, afirmó que «todo el sistema escolar probablemente estará patas arriba en los próximos años», y que lo fundamental no es temer a la tecnología, sino gestionar la velocidad de los cambios. Subrayó la importancia de enseñar a estudiantes y docentes a utilizar herramientas como Chat GPT de forma consciente, más allá del copiar y pegar, y de mantener una cultura de honestidad y confianza en su uso.
La Inteligencia Artificial no debe verse como una amenaza, sino como una oportunidad para repensar la educación.
Karis advirtió también sobre el vinculo entre educación y seguridad nacional, especialmente frente a la desinformación, indicando que el pensamiento crítico debe fortalecerse desde las escuelas. «No podemos desarrollar todos nuestros sistemas de IA, pero si asegurar que nuestra lengua y valores estén presentes en ellos», señaló, reforzando la idea de que la educación es también una estrategia de soberanía cultural y digital.
Ministra Kallas: IA con propósito
La ministra de Educación e Investigación, Kristina Kallas, lidera el ambicioso programa Al Leap, que dotará a estudiantes y docentes de cuentas personales de IA antes de 2027. Según Kallas, «la competitividad económica de Estonia depende de cómo preparemos a los jóvenes para la era de la inteligencia artificial». Para ello, el plan incluye una fuerte inversión en formación docente, priorizando competencias que» la IA no puede replicar: creatividad, juicio ético, empatía y ciudadanía activa.
A diferencia de otros países que prohíben los teléfonos móviles en las aulas, en Estonia se promueve su uso pedagógico bajo normas definidas por cada escuela.
«Si puedes votar en línea con tu celular, tiene sentido aprender a usarlo de forma consciente en clase», afirma Kallas. Esta coherencia entre la vida cívica y la educación digital es una de las señas de identidad del modelo estonio.
Entre otras reformas, el país ha decidido que, a partir de septiembre de 2026, el día escolar comience a las 9 a.m. o más tarde, para favorecer el bienestar y los ritmos de desarrollo de los estudiantes. Además, se simplificarán las regulaciones y se garantizará un tiempo mínimo para la alimentación durante la jornada escolar.
Con políticas sostenidas y visión estratégica, Estonia demuestra que es posible integrar tecnología avanzada sin perder de vista el sentido humanista de la educación. El objetivo, en palabras de Kallas, es claro: «No serán quienes más usen la IA los que tengan ventaja, sino quienes la utilicen de la forma más inteligente».