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Gobierno fomenta ambiente anti empresa

“Hemos sido gobernados por empresarios corruptos”.
Primer Ministro Salvador del Solar
Conferencia: “El país que soñamos, las reformas políticas indispensables”
Cusco
Ver en Lampadia: Salvador del Solar…. ¿premier, o candidato?

Una barbaridad, que solo en un país adormecido pasa sin llamar a escándalo. Este aserto no solo es falso, también es insidioso y desestabilizador.

La verdad es que la ola de corrupción devenida en llamarse Lava Jato, es de origen político y fundamentalmente de destino político.

El origen está en el diseño de penetración política diseñado por Lula de Silva en Brasil, que usó a empresas corruptas como los brazos ejecutores de su interferencia política en varios países de la región. En el caso del Perú, el apoyo a la campaña de Ollanta Humala, fue ordenado específicamente por Lula. Lo mismo se ha evidenciado con respecto a Susana Villarán, de la que Barata afirmó que tenía la línea política que hacía conveniente se la apoyara.

Por otro lado, es muy claro que la corrupción hizo carne en los más altos niveles de la política peruana, empezando por varios ex presidentes de la República, gobernadores y alcaldes.

Entonces, ¿a qué llama la pésima declaración del premier?

Evidentemente a seguir abonando ese espacio hostil al sector empresarial que ha tomado cuerpo en la política y los medios de comunicación.

Más allá de que pueda haber empresas que hayan caído en la corrupción, no pueden hacerse generalizaciones, y menos calificar la naturaleza del quehacer empresarial como corrupta. El Perú necesita de sus empresas, las peruanas y las extranjeras, las pequeñas y las grandes, para dinamizar los circuitos de inversión, fuente primordial del crecimiento económico, que a su vez permite luchar contra la pobreza y la desigualdad.

El futuro del país pasa por la suerte del sector privado, del mundo empresarial. Redondeando cifras se puede decir que las medidas del país son: 90 -90 -90.

  • 90% del empleo es generado por el sector privado
  • 90% de la inversión la hace el sector privado
  • 90% de los recursos fiscales provienen del sector privado

Entonces ¿de qué futuro estamos hablando cuando se tiene una visión estatista del país? ¿De qué se trata cuando se chanca al sector empresarial, incluso con mentiras?

Es urgente revalorar, potenciar y dinamizar el sector empresarial. Los peruanos tenemos que crear riqueza en la mayor proporción y rapidez posible. Tenemos tareas que no podemos descuidar, como cerrar las brechas económicas y sociales en educación, salud, infraestructuras y tecnología, que todavía nos lastran y que nos ponen en una notoria desventaja para ser parte del mundo de la ‘cuarta revolución industrial’, y cuidar que nuestros ciudadanos más pobres no vayan a quedar eternamente en los arrabales de la globalización.

Exijamos a nuestros funcionarios públicos más responsabilidad y consecuencia con los importantes roles que les hemos encomendado. Lampadia




Cuatro candidatos recogen propuesta de Autoridad Única de Transporte

Cuatro candidatos recogen propuesta de Autoridad Única de Transporte

Meses atrás, cuando Lampadia analizó los problemas de transporte que padece Lima, realizamos una propuesta, al igual que otras entidades y personalidades: Es imperativo crear una autoridad única del transporte. Esta salida respondía a que “en Lima-Callao tenemos múltiples autoridades y entidades que se superponen, compiten y entorpecen. Al final, una deficiencia clamorosa que pagamos los ciudadanos y empresarios. ¡Es hora de tomar una decisión, relativamente sencilla, que asuma toda la responsabilidad de la planificación, gestión y administración del transporte!” 

Dado que ahora estamos a casi un mes de las elecciones municipales nos interesó conocer que dicen los principales candidatos a la alcaldía de Lima sobre esta imperiosa necesidad. Algunos  planes de gobierno sí incluíanla propuesta, pero nos decepcionó que los dos punteros se comprometan con una solución evidente y probada por otros países para resolver uno de los mayores problemas de la ciudad.

Diagnóstico

El sistema de transporte de Lima Metropolitana ha colapsado. Los 9.5 millones de habitantes, que necesitan trasladarse a centros de estudios, trabajos y otros menesteres, demandan alrededor de 13 millones de viajes diarios. El pésimo sistema de transporte de la ciudad, satisface esta demanda  con uno de los peores servicios de la región (y probablemente del orbe). Los viajes son lentos (13 kilómetros por hora, frente a los 41 de Santiago) lo que lleva a que los limeños pierda entre 3 y 6 años de sus vidas sentados en un bus o una combi. Esta situación produce una pérdida de 500 a 800 millones de dólares en horas/hombre y costos operativos anualmente. Lo peor de todo es que estos desplazamientos son peligros por la alta siniestralidad, se expone a la población a una aguda contaminación (de las mayores de Latinoamérica) y a robos y asaltos.

Si bien uno de los problemas, como ya señalamos en Lampadia (ver: Es imperativo crear una autoridad única del transporte) es que carecemos de infraestructura (40% de déficit) y de un sistema masivo e integrado de transporte público (como el que cuentan las principales metrópolis del planeta), la principal deficiencia es que no contamos con una Autoridad Única y Autónoma que planifique, regule y gestione el transporte de la ciudad. 

En el informe citado indicamos que la capital debía seguir el ejemplo de Londres. “Una ciudad que tiene casi la misma cantidad de habitantes que Lima y el doble automóviles, pero que, ni por asomo, padece los problemas de nuestra capital. La diferencia no solo está en la capacidad financiera de una y otra urbe, sino en que desde el año 1855 ¡hace 159 años!, Londres cuenta con “una autoridad metropolitana (Metropolitan Board of Works) para coordinar los temas relacionados con la implementación de infraestructuras, que para ese entonces estaba a cargo de una constelación de sub-autoridades. Esta autoridad fue la semilla de lo que es hoy es la autoridad de transporte de Londres (Transport for London) que gestiona todos los sistemas de transporte de Área Metropolitana, incluyendo el metro,  tranvías, buses, bicicletas, además de los problemas de congestión, uso de vías, etc.”, según señala el BID.

El transporte en los planes de gobierno

Llama la atención que en los planes de gobierno de la ciudad de los dos candidatos que han sido inquilinos de la Municipalidad, Luis Castañeda y Susana Villarán, no se considere una medida que a estas alturas pocos discutirán que es imprescindible para la gestión y resolución de uno de los más graves problemas de la capital. Ambos piensan que la solución al transporte pasa solo por realizar mayor infraestructura, agrandar la cobertura del Metropolitano e integrar el sistema de transporte al Metro de Lima. Tampoco el PPC, un partido que ha tenido al quizá mejor alcalde de la ciudad (Luis Bedoya Reyes) y el con mayor visión de futuro, no cree en la creación de esta entidad.

Afortunadamente, otros candidatos parecen haber entendido que para resolver este peliagudo asunto se necesita contar con instrumentos de gestión iguales o similares a los de las grandes urbes. Por ello, en los planes de Perú Patria Segura (Salvador Heresi), Apra (René Cornejo), Vamos Perú (Fernán Altuve), Acción Popular (Edmundo del Águila) se establece que se creará una Autoridad Autónoma de Transporte para Lima y Callao.

Aunque con sus diferencias, las atribuciones de esta entidad serán las de planificar, coordinar, gestionar y ordenar el transporte urbano de la ciudad. Adicionalmente, el Apra propone Creación de la Unidad de Ingeniería de Tránsito de la Ciudad de Lima, la cual parece una buena idea. 

La ciudad requiere esta solución urgentemente. Entendemos que, luego de que el tren eléctrico pusiera en funcionamiento su ramal norte ha tenido tal acogida que el sistema está sobrepasado por la cantidad de pasajeros que lleva. Se supone que el dueño de los activos, el Estado peruano, debiera comprar a la brevedad el doble de vagones para duplicar el número de viajes y de esta manera aliviar el transporte de miles de ciudadano que no solo deben ser seguros sino cómodos.

Mientras tanto, llama la atención el ministro de transporte, José Gallardo, indique el problema del transporte en Lima se deba a que estamos comprando demasiados autos todos los años. Como si esta fuera la causa del caos que padecemos. Esta es una razón adicional para contar lo antes posible con una entidad que sí se interese por solucionar este desastroso problema que padecemos todos los días. Lampadia