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Carta del Cobre a los peruanos

Carta del Cobre a los peruanos

En las actuales circunstancias en que una importante mina de cobre, Las Bambas, enfrenta numerosos ataques tanto desde el frente mediático como desde el político para su habitual puesta en operación, vemos necesario compartir una importante Carta del Cobre a los peruanos.

Existen muchos malentendidos y desconocimiento sobre uno de los materiales icónicos del Perú, el Cobre. Injustamente, la producción de este maravilloso material se ha ido asociando a conceptos negativos, mitos y falacias que solo buscan alejarnos de uno de los grandes metales estratégicos para el desarrollo y bienestar de todos los peruanos. Hoy día, con mucho agrado, publicamos en Lampadia la Carta del Cobre a los peruanos.

Fuente: wikiHow

Queridos peruanos,

He sido un material esencial para el hombre desde tiempos prehistóricos. De hecho, una de las principales “edades” o etapas de la historia humana lleva el nombre de una aleación de cobre, el bronce. El cobre y sus muchas aplicaciones han jugado un papel importante en muchas civilizaciones, desde los antiguos egipcios y romanos a las culturas modernas de todo el mundo.

Mis Apps se multiplican desde la conducción de electricidad, que marca una gran diferencia entre una suerte de  Edad Media, Hasta el cuidado de la salud como un material propicio para ambientes sépticos en clínicas y hospitales.

Es difícil creer que, en la actualidad, haya perdido tantos seguidores. Permítanme mostrarles lo que puedo aportar para su bienestar:

La demanda de Cobre

En los últimos años, con la crisis económica global y el ajuste de la economía china, se empezó a propagar que la demanda de cobre se habría reducido estructuralmente. Veamos:

China, mi más fiel cliente, dio a conocer recientemente su Plan Quinquenal, en el cual se describen los objetivos de desarrollo económico y social para 2016-2020 que impulsarán la demanda de cobre en tres áreas clave: cableado de viviendas, 60% de la red eléctrica será subterránea al 2020 y los sistemas de energía renovable – solar, eólica, hidroeléctrica – requieren de cuatro a 12 veces más cobre por kilovatio que la generación de energía tradicional, y 15% del PBI total de China será de las industrias estratégicas.

Un buen augurio para la demanda de cobre. China, consumidor de aproximadamente el 45% del cobre mundial, espera crecer 6.5% en 2017 y 6.3% entre 2018 y 2019, lo que debería soportar buenos precios.

¿Miedo al precio del cobre?

Entiendo que recientemente los precios del cobre dejaron de estar en las nubes, algo que no es bueno para nadie. Además, en los últimos meses, han sido bastante volátiles. Pero esto no se debe a cambios estructurales del mercado. En las últimas semanas, mi precio se ha recuperado, llegando a cerrar ayer en US$ 2.51 la libra.

Competitividad del Perú

Además de los precios, es importante anotar que el Perú es uno de los países más competitivos en la producción de cobre. Así bajen los precios, con costos promedio de alrededor de US$ 1.25 la libra (según el presidente PPK), el país puede mantener su producción.

Valor agregado

Se me acusa de ser un producto sin valor agregado. Se llega a decir que el Perú exporta piedras. Pero la minería moderna peruana, a distancias abismales del pallaqueo (recolección manual de materiales superficiales), es el sector de mayor valor agregado en la economía.

Se dice que solo debería exportarse metal fino o productos de cobre. Sería bueno, pero para ello se necesita mucho capital, mucha energía eléctrica y desplazar de los mercados globales a quienes ya los abastecen competitivamente de productos terminados.

Esto último se irá dando en el tiempo, pero mientras tanto, la exportación de concentrados de cobre agrega mucho valor que no se debe seguir ninguneando, pues lleva a decisiones equivocadas.

¿No tengo valor agregado? Algunas personas malintencionadas me han difamado y han hecho creer que la minería no tiene valor agregado. Falso, es más alto que el de la industria manufacturera (67% vs. 33%, en promedio). Viajo por el mundo como alambrón y como concentrado, con mucho valor para los peruanos.

¿Ser un recurso no renovable es malo?

No entendería por qué sería algo malo. Existe la posibilidad que en algún momento ya no tengamos cobre, sí. Podré desaparecer. Pero es mucho más probable que la producción minera de cobre en el Perú se vaya haciendo menos atractiva, como producto del reciclaje, de mayores eficiencias en el consumo, de la sustitución de materiales, y de la (incipiente) explotación de los fondos marinos. En algún momento evolucionaremos a un tipo de tecnología o infraestructura que dependan menos del cobre.

Por lo tanto, dosificar mi producción para que dure eternamente es un tremendo error. El valor económico del cobre de estos tiempos puede dejar de estar disponible en el futuro. En consecuencia, no multiplicar la producción puede determinar que me quede para siempre diseminado por los Andes. Hoy puedo aportar los recursos que necesitan los peruanos para salir de pobres, quién sabe si mañana será igual. ¿Se puede perder esta oportunidad? ¡Sería una barbaridad!

¡No soy “tan solo” una materia prima!

Soy mucho más que una materia prima. Soy un miembro productivo de la sociedad que ayudará a llevar a mi país, este lindo Perú, a su verdadero potencial económico y bienestar social. Lamentablemente, se ha sembrado una gran confusión sobre la minería. Algunos creen que contamino y no deben explotarme. Esto es falso, ya que la minería moderna no contamina más que otras actividades, incluida la agricultura y, por supuesto, la minería ilegal. La mayor contaminación en el Perú se produce en las ciudades y pueblos, donde no se dispone adecuadamente de los desechos.

En el Perú tenemos grandes brechas sociales y económicas que solo podremos mejorar explotando beneficios como los que ofrece el famoso metal rojo, con todos mis grandes atributos, para que los recursos de mi producción se puedan usar en mejorar la educación, la salud, las infraestructuras, los ingresos de los servidores públicos, el desarrollo de otras actividades productivas como industria, construcción, transporte, servicio y otros. Ver el artículo que publicó Lampadia: ¡Viva el Cobre!

Nuestros vecinos sí aprovechan sus recursos

Chile produce el doble de cobre que nosotros. El Perú desprecia mis beneficios, pero Noruega y Australia, dos países que encabezan el desarrollo a nivel global, que no sufren de crisis recurrentes y se caracterizan por sus extensas industrias extractivas (de los mismos materiales o algunos de mis parientes), explotan y exportan más recursos naturales que el Perú. En el caso de Australia, su sector minero ha sido aclamado como el salvador de la economía, protegiendo al país de los efectos de las graves recesiones económicas experimentadas en Estados Unidos, Europa y otros países antes, durante y después de la crisis financiera mundial de 2007-08. Ver en Lampadia: 25 años sin una recesión y Exitoso modelo que aprovecha sus RRNN.

En México, otro país minero, tienen El Museo Nacional del Cobre y hacen una Feria Nacional del Cobre. Me da un poquito de envidia. 

Conflictos ambientales y sociales

En nuestro Perú se ha desarrollado una campaña para difamarme y llevarnos a rechazar el desarrollo del sector minero y principalmente, la producción de cobre. A esta han contribuido, efectivamente, una serie de ONGs, muchas del exterior, que no les importan los peruanos, pero también algunos académicos despistados y muchos políticos oportunistas o que están atrapados por las ‘ideas muertas’. A diferencia de lo que sucede en Canadá y Australia, seguimos hablado de primarización de la economía, de exportación de “piedras sin procesar” y de que la inversión minera no tiene futuro por las condiciones de los precios de los commodities (que siguen siendo buenos) y por la desaceleración de la China. Y sobre esta base, o cimientos, afirman que ocupamos todo el territorio nacional, consumimos el agua de las poblaciones, contaminamos el medio ambiente y afectamos negativamente el desarrollo social de los pueblos de las zonas mineras.

  • La minería moderna no genera ya pasivos ambientales. Más bien genera activos ambientales, como los bosques desarrollados por Antamina, los reservorios de agua de Yanacocha, o el paradero de aves en la bahía de Ite, limpiada por Southern.
  • Solo hay actividades mineras en menos del 2% del territorio nacional.
  • Consumimos el 2% del agua que se aprovecha en el Perú, que es una fracción de la que tenemos y desperdiciamos en los mares, Pacífico y Atlántico.
  • Los estándares ambientales de la minería moderna, son iguales o mejores que los de la industria en los países más desarrollados y sofisticados.
  • Buena parte de la producción está vinculada con grandes empresas internacionales, o empresas locales vinculadas a los mercados financieros internacionales, ambas sujetas a controles globales sumamente rigurosos. 

Hablemos de desarrollo

No se quiere entender que al dejar de aprovechar el potencial productivo del Perú, innecesariamente, se está tirando por la borda una riqueza que ha producido muchos beneficios económicos y sociales y que, aún hoy, con las condiciones de los mercados internacionales, puede crear mucha riqueza adicional. Esta es esencial para generar los recursos que nos permitan superar las brechas sociales y económicas acumuladas por los años de oscurantismo (60s a 80s) y, sobre todo, para que podamos nivelarnos con los países más desarrollados en el más corto plazo posible, ante los riesgos que trae la Cuarta Revolución Industrial.

Es realmente indignante que no se haya aprovechado mis beneficios desde el 2011. Después del pico por encima de US$ 4 por libra, mi precio se estabilizó alrededor de los US$ 3.2 la libra. Sin embargo, en el Perú se dejó de atraer más inversiones y se trabaron las que estaban en curso. Como resultado, se frenó la economía, la inversión en otros sectores, la reducción de la pobreza y la disminución de la desigualdad. El Perú pudo mantener un mayor crecimiento compensando la caída temporal de los precios con mayores volúmenes de producción. 

Conclusiones

Espero que esta sentida carta ayude a aclarar la mayoría de dudas que muchos de ustedes pueden tener. No es algo que suelo hacer pero, tras tantas acusaciones falsas, he creído necesario defenderme y demostrar que mucho de lo que se afirma en contra de la producción de cobre, en particular, y de la minería en general son mitos y falacias interesadas.

Y creo sinceramente que el cobre es para el beneficio de todos los peruanos. Hay que aprovechar al máximo lo que puedo aportar. Sabiendo el valor de mis aportes, ¡no hacerlo es inmoral!

¡Guardemos los mitos, iniciemos una cruzada nacional para desarrollar los proyectos de cobre y convertir al Perú en el gran país que todos podríamos construir!

Atentamente,
El Cobre
Lampadia




¡Viva el Cobre!

¡Viva el Cobre!

Los antiguos egipcios utilizaban cobre para esterilizar heridas y agua potable. Miles de años más tarde, parece que algunos hospitales recogerán esta idea para aumentar su capacidad de erradicar bacterias y otros microbios, lo que puede ayudar a reducir las infecciones mortales en los centros de salud.

El año pasado, en el American Journal of Infection Control, se demostró que el cobre es un elemento antimicrobiano. En otras palabras, inactiva bacterias, hongos y virus. Está demostrado científicamente que bacterias de las más resistentes, no han sobrevivido a su contacto con el cobre. Esto ha presentado una oportunidad única para el súper elemento, el cual podría ser una gran alternativa para ser utilizada en los quirófanos y las habitaciones de los pacientes en hospitales y clínicas. 

Ejemplos de la utilización del cobre en la sala de Cuidados Intensivos

El estudio, a través de la International Copper Association (ICA, por sus siglas en inglés) descubrió que el uso del cobre en superficies y objetos en salas de cuidados intensivos reduce la carga bacteriana en, aproximadamente, 83%. Posteriormente se demostró que “dicha reducción en la carga bacteriana permitía además una baja de, al menos, un 40% en las infecciones intrahospitalarias”.

Debido a sus propiedades únicas, el cobre no permite que ocurran mutaciones, evitando que el microbio desarrolle algún tipo de resistencia. La preocupación mundial sobre la resistencia antimicrobiana está creciendo, así como el riesgo de muerte que presentan algunas infecciones comunes, incluso en operaciones menores.  Por lo tanto, la importancia del uso de cobre en hospitales es aún mayor, especialmente en superficies en habitaciones y unidades de cuidados intensivos, incluyendo postes de cama, brazos de silla, botones de llamadas, mesas sobre la cama, grifería y manijas de las puertas.

Fuente: Copper.com

Varios lugares ya están empezando a utilizar el cobre como medida sanitaria y de salud. El nuevo Instituto Francis Crick en Londres, un centro de investigación bioquímica líder en el mundo, está equipado de cobre. En EEUU, al menos 15 hospitales en todo el país han instalado componentes de cobre en superficies de “alto contacto” fácilmente contaminadas con microbios, como manijas de grifos en lavamanos, manijas de gabinetes, palancas de inodoro y botones de llamada. El Aeropuerto Internacional Hartsfield-Jackson de Atlanta instaló fuentes de agua potable con superficies de cobre antimicrobiano. En Colorado Springs, el centro de entrenamiento insignia del Comité Olímpico de EEUU, usa mancuernas personalizadas con asas de cobre antimicrobiano.

Sin ir muy lejos, nuestro país vecino, Chile, ya empezó a instalar cobre en sus centros de salud. El Hospital Clínico de la Universidad de Chile está implementando cobre en algunas superficies como dispensadores de jabones, los postes de suero y los carritos de transporte de alimentos.  Además, la Clínica Las Lilas fue el primer centro privado de salud en ‘cobrizar’ sus instalaciones, con una inversión de 2’643,704 millones de pesos (unos US$ 4,000 millones). Y su aeropuerto internacional, Santiago-Pudahuel, tiene 73 casetas del área de control migratorio cubiertas de cobre antibacterial, para evitar el contagio de bacterias y virus. 

Uso del cobre aporta a la bioseguridad en el aeropuerto de Pudahuel
Fuente: WordPress.com

Todas estas medidas en Chile son lideradas por la iniciativa “Cobre: Una puerta limpia para Chile” en conjunto con el Centro Chileno de Promoción del Cobre, “Procobre”.  Esto debería llamarnos a reflexión, pues nuestro vecino pocas veces pierde buenas oportunidades y toda la sociedad tiene muy claro la importancia del cobre. El gobierno lo promociona hasta en las garitas de migraciones e inclusive Salvador Allende lo tenía claro cuando afirmó: “El cobre es el sueldo de Chile”. El Perú debería seguir su ejemplo.

Según Cómex-Perú, en el período enero-noviembre del 2016 se extrajeron en el país 2.15 millones de toneladas métricas finas de cobre, lo que reflejó un crecimiento del 42% respecto al mismo período del año anterior. Este nivel de producción situó al Perú como el segundo productor mundial de cobre, por delante de China. Y es que el cobre peruano es uno de los más competitivos del mundo, como afirmó el Presidente PPK en el último CADE: “el cash-cost del cobre en el Perú es de US$ 1.25/lb”. 

Como se puede observar en el gráfico inferior, durante la última década, pocos países lograron mantener el crecimiento de la producción de cobre, y el Perú creció, en promedio, un magnífico 8.1% por año.

Pero lamentablemente, estamos haciendo todo lo necesario para perder el desarrollo futuro del cobre y de toda la minería. A estas alturas del gobierno, tenemos unas seis minas gravemente afectadas por los llamados conflictos sociales, que más bien son, en gran medida, conflictos políticos. 

Para lograr desarrollar una estrategia efectiva para enfrentar la conflictividad (político) social, debemos empezar por explicar a todos los ciudadanos la situación que nos afecta, nuestras potencialidades y capacidades para salir adelante con un crecimiento inclusivo que genere empleo de calidad y reduzca la pobreza y la desigualdad. Uno de los pasos para lograrlo debería ser la creación de un Instituto del Cobre en el Perú, que tenga el objetivo de promover el uso del cobre, impulsar la investigación y el desarrollo de nuevas tecnologías y comunicarle a la población sobre sus beneficios y el impacto positivo en lo social y económico.

Este es el momento de difundir la verdad sobre la minería y el cobre para luego destrabar los nuestros proyectos y brindar soporte en gestión social. Esto permitirá que los inversionistas se sientan atraídos para desarrollar nuestro potencial y eficiencia para producir este bello metal. Tenemos que facilitar la inversión y reactivar la minería, como un acto de consecuencia elemental con el frenazo de nuestra economía y la impostergable obligación moral de reducir la pobreza, teniendo como hacerlo.

En los últimos años hemos logrado incrementar nuestra producción de cobre de forma importante, pero nuestro potencial es aún mucho mayor. Como vemos en el siguiente gráfico, Chile aún duplica nuestra producción con más de cinco millones de toneladas anuales, meta a la que nosotros debemos apuntar.

El Perú debe aprovechar sus recursos naturales para apostar por el desarrollo de proyectos en exploración y avanzar en los proyectos paralizados, elevar su contribución al PBI, seguir ayudando al crecimiento de nuestro sector industrial y llevando recursos fiscales al Estado para afrontar nuestros déficits en educación, salud, infraestructuras y tecnología. Lampadia