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La educación en el Perú

La educación en el Perú

Carlos E. Gálvez Pinillos
Expresidente de la SNMPE
Para Lampadia

Desde hace algún tiempo, en el Perú hemos sido capturados por la telenovela Moqueguana de la pulla, el chisme y la comidilla entre el Congreso y el Ejecutivo. Entre sus carencias e incapacidades para el manejo de la cosa pública, Vizcarra siempre busca alguien en quien descargar su incapacidad. Lo lamentable es que, la prensa ha venido siguiendo con sus reflectores y cámaras los detalles cotidianos de este sainete, manteniendo distraída a la población y sin llamar la atención sobre asuntos importantes para el país y sus generaciones futuras.

Mientras tanto, el partido comunista del Perú, Patria Roja, ha convocado en julio al foro virtual; “El rol del maestro/a comunista en la lucha por una nueva republica” , en el que se amalgama la dirección del SUTEP y de la representación comunista de Patria Roja.

Ya viene siendo tiempo de analizar temas más profundos y plantearnos alternativas de solución, no sea que, en poco tiempo, nos encontremos “sorprendidos”, como nos sucedió con nuestro manejo de la salud frente a la crisis del COVID-19 y ya sea muy tarde para reaccionar, porque la izquierda comunista nos ganó el espacio de las generaciones jóvenes, adoctrinándolos durante años en que disfrutaron de libertad para hacerlo.

Para analizar y empezar a elaborar, es necesario conocer nuestra situación actual, así:

Según el INEI, al año 2020, en nuestro país tenemos 66,583 colegios, de los cuales 13,580 son privados y 53,003 son públicos. De este universo que atiende la educación básica regular EBR (inicial, primaria y secundaria), 46.9% está ubicado en zonas urbanas y 53.1% en zonas rurales, de esto últimos el 99% a cargo del sector público. A inicios del 2020 sólo 60 colegios cuentan con acreditación de calidad.

En términos de información respecto a facilidades tecnológico-digitales y acceso a Internet, no hay ninguna certeza, pues el Estado ha venido jugando con la información.  Mientras que, en junio del 2014 el entonces ministro de educación Jaime Saavedra informaba que 74% de los colegios públicos a nivel nacional (más de 35,000) contaba con acceso a Internet, al igual que 50% de los colegios privados, en el año 2019 la ministra Flor Pablo declaró que el 79% de los colegios públicos no tenían acceso a Internet y el 55% de los profesores no tenía habilidades de tecnología digital. De modo que, la vigencia de esa información no está corroborada a la fecha (baste mencionar que, el 5 de julio 2020, el MTC anunció que “204 establecimientos educativos y de salud tendrán Internet gratuito y de alta velocidad”). ¿A quién creerle? Lo cierto es que, a la fecha, sólo 1,200 colegios privados cuentan con plataforma virtual para dictado de clases no presenciales, lo que se ha podido corroborar durante la emergencia sanitaria.

La población escolar asciende a 9.04 millones de alumnos, de los cuales 8.03 millones corresponden a EBR, para lo cual contamos con 548,621 docentes (~493.8k EBR, ~27.5k Ed. No universitaria, magisterial, tecnológica y artística, ~13.0k Ed. Básica alternativa, ~10.5k Ed. Técnica Productiva y ~3.9k Ed. Especial), del total 63% son mujeres y 37% son hombres. Del universo de maestros, 16.8% tiene postgrado y 67.6% trabajan en el sector público.

Lo preocupante de todo este resumen, es que la mayoría de maestros, especialmente los que enseñan en colegios públicos que, como se ha mencionado, manejan el 99% de la educación rural, pertenece al SUTEP y no es secreto que, esta organización sindical está controlada por distintas facciones del comunismo, Patria Roja en particular y gran influencia del MOVADEF. Por otro lado, baste entrar a la página web del SUTEP para identificar, por su orden de aparición, cuáles son sus prioridades y estas son:

1. Historia, recordando sus inicios sin reconocimiento legal entre 1972 y 1984.
2. Huelgas históricas.
3. Reconocimiento legal.
4. Estatutos y reglamentos.
5. Pliego de reclamos.
6. Propuesta pedagógica.
7. Congresos pedagógicos.

Como se puede observar, los aspectos pedagógicos no son siquiera “la quinta rueda del coche” para el SUTEP, sino las sexta y séptima. Es evidente que sus huelgas y temas de conflicto social están en la primera línea, son su “leitmotiv” y es en manos de ellos, que estamos dejando la formación de nuestros niños y jóvenes.

Lo aquí mencionado, se ha podido corroborar con el material usado por televisión para las clases no presenciales. Uno puede observar material lleno de carga ideológica comunista y de adoctrinamiento no muy sutil, pero reiterado, al punto que se ha llegado a plantear “diferencias elitistas” por el correcto hablar del idioma castellano, por ejemplo. Por otro lado, se aprecia poca orientación a las ciencias y a las matemáticas, mientras hay alta propensión a entrar en temas sociológicos e historia reciente distorsionada y, por supuesto, ningún esfuerzo por una educación orientada al desarrollo de habilidades tecnológico-digital.

En el Perú, hay una queja generalizada por nuestra estructura productiva y nuestra alta dependencia de la industria extractiva, en particular de nuestra industria minera, mientras que, se resalta, no hacemos investigación, desarrollo e innovación. Aquí debo decir que, debemos sentir merecido orgullo e inculcarlo a todos los peruanos, por nuestra actividad minera, una de las pocas en que hemos alcanzado talla mundial y niveles de competitividad universal. Pero por otro lado, ¿cómo podemos quejarnos de no poder competir en investigación, desarrollo e innovación, si ni siquiera inculcamos amor y preferencia por las ciencias y la matemática?

Obviamente, si desde el colegio a los niños no se les inculca la importancia de la matemática y no se les muestra un método divertido de aprendizaje, a cargo de maestros que disfruten el curso y su enseñanza, además de hacerles ver su utilidad, es imposible que después, se inclinen por las ciencias y la tecnología a nivel universitario y peor aún, que quieran mañana más tarde dedicarse a la investigación científica.

Debo reconocer que, los profesores escolares de hace medio siglo en el Perú y en particular en los colegios públicos, eran unos señores profesores. Autores de libros en muchos casos, que también ejercían cátedras universitarias. Los colegios particulares trataban de contratarlos para el dictado de algunos cursos. Ellos no sólo eran conocedores de sus materias, sino que tenían grandes valores y actitud digna, que los hacía maestros queridos, admirados y respetados por sus alumnos. De otro lado y especialmente para cursos de aritmética, álgebra, geometría, trigonometría, anatomía, zoología, botánica, física y química, se contrataba también ingenieros, médicos y en general, profesionales que por su formación, dominaban esas materias.

Debo suponer que, el maltrato que el Estado le ha dado a los maestros durante todas estas décadas, ha menguado la vocación por esta noble profesión y ha deteriorado la formación y calidad de los profesores, lo que a su vez ha deteriorado el nivel educativo de los alumnos. A riesgo de ser criticado por mi “comentario machista”, el hecho que, sólo cerca de un tercio de los profesores escolares sean hombres, me induce a pensar que esta actividad se maneja como un “ingreso familiar complementario”, pues con las remuneraciones asignadas, es muy difícil sostener a una familia con los niveles de dignidad que corresponde a un maestro.

Si realmente queremos que el Perú esté en condiciones de competir en la era del conocimiento, creo fundamental replantearnos todo nuestro sistema educativo, debemos establecer como política de Estado el cumplimiento de este objetivo y establecer un “Pacto Social” para cumplir con:

1. Construir una currícula con más énfasis en las ciencias y entrenamiento tecnológico-digital.
2. Usar plataformas tecnológicas que permitan a nuestros escolares recibir las mismas materias y con igual nivel y calidad que la recibida por escolares del primer mundo.
3. Debemos renovar nuestra infraestructura educativa, construyendo cerca de 3,000 colegios, con estándares adecuados, cada año.
4. Atraer a profesionales jóvenes y con mística por la profesión de educador, para promoverlos con incentivos profesionales y económicos al logro del nivel que merecen, como forjadores de la Nación y responsables de la educación.
5. Abrir la mente de nuestros niños y jóvenes al conocimiento universal, facilitarles la información de lo que está sucediendo en el mundo de hoy y en tiempo real. Un joven escolar del Perú, debe estar recibiendo los mismos “impulsos de conocimiento” de aquellos que están en Singapur, China, India, Estados Unidos, Canadá o cualquier país de Europa y Oceanía.
6. Para lograr esto, debemos hacer que el Internet, la red dorsal de fibra óptica y todas las facilidades tecnológicas educativas estén gratuitamente a disposición de los escolares, universitarios y maestros.

Creo que dado los años de inacción que hemos dejado transcurrir, debemos poner este objetivo nacional en el centro de nuestro tablero político y no permitir que pase un día más sin que se tome acción al respecto.

Si no lo hacemos ahora, nos lamentaremos, al igual como nos lamentamos por la falta de facilidades y capacidad sanitaria, ante la pandemia.

¡Señor Vizcarra, señores congresistas y ciudadanos con aspiraciones políticas, háganse una! Lampadia




Socialistas y el IMC*

Socialistas y el IMC*

Carlos E. Gálvez Pinillos
Expresidente de la SNMPE
Para Lampadia

Acabo de tropezarme con un artículo que habla de la “esquizofrenia neoliberal”. Debo reconocer y compartir que la miopía es un serio problema, pero cuando esta es mental, es mucho más grave.

El autor indica que los “neoliberales” tienen como modelo un Estado débil, corrupto, clientelar e ineficiente y que no debiera sorprendernos el estilo de crecimiento con el 75% de informalidad. Y para redondear su mensaje, se queja de que se culpe de las ineficiencias y mal manejo de esta crisis del COVID-19 al presidente y su entorno.

Lo primero que debemos precisar es que, el neoliberalismo no busca un Estado débil, sino uno de tamaño adecuado, con músculo y consecuentemente eficiente. Este gracioso “sociólogo” me ha recordado a un amigo que, en el gimnasio, se preciaba de tener el mismo Índice de Masa Corporal (IMC) que un “muchachón” atlético, pero reconocía que, teniendo las mismas medidas que éste, las tenía en distinto lugar (la medida del pecho de ese muchacho, coincidía con la medida de cintura de mi amigo). Esa diferencia de Estado pequeño o grande, para los que no entiendan, es la diferencia de la que hablamos, un gordo mofletudo versus un atleta.

Cuenta el General Francisco Morales Bermúdez en su último libro, que en el primer gobierno de Belaunde, el Perú tenía 17 empresas públicas y cuando terminó el gobierno militar habían 170 y puntualiza que, la recaudación fiscal y el endeudamiento no era para solventar Educación, Salud y Justicia, sino el tremendo déficit y pérdidas de las 170 empresas del Estado. Está claro que él, en su condición de ministro de economía y finanzas durante casi siete años, lo sabía perfectamente. Entiendo que los socialistas añoran ser altos ejecutivos de esas empresas e instituciones que no les cuesta a ellos, ni les exige resultados, pero ¿a costa de los sufridos contribuyentes? ¿Quieren autos con chofer y viajes internacionales con pasajes en primera y hoteles cinco estrellas a costa del pueblo?

En lo que coincido con este “sociólogo” es que, tenemos una falla sistémica; pues en el primer gobierno de Belaunde teníamos 12 ministerios, durante el gobierno militar se incrementó a 17 y con la “ayuda” del gobierno nacionalista de OH, llegamos a 19 ministerios. A esto debemos agregar la carga de 25 gobiernos regionales burocráticos e ineficientes y 1870 (está leyendo bien) gobiernos municipales. Todos quieren decir algo respecto a una inversión, un proyecto, una operación, todos quieren “fiscalizar” y nadie crea valor en ninguna de sus actividades. Todo lo mencionado anteriormente, plagado de corrupción por donde se le mire. Esa fue la razón por la que se privatizó muchas de las empresas (lamentablemente faltaron Petroperú y SEDAPAL) a comienzos de los 90 y se dispuso la simplificación administrativa y de procesos en los ministerios, permitiendo el rápido y envidiado crecimiento económico de las últimas décadas.

Lamentablemente, la simplificación administrativa que redujo dramáticamente la corrupción pre-existente, en el tiempo, desde hace 20 años, se ha venido reconstruyendo. Debemos tener claro que la burocracia tiene “vida propia” y su propia dinámica, si no hay una autoridad política que se ocupe de que tal burocracia no crezca innecesariamente, esta se reproduce. Sí pues, es por eso que hemos llegado a esta maraña de instituciones y procesos burocráticos. No necesitas gobiernos de izquierda para generar un problema sistémico en el Estado, es suficiente que el gobierno “juegue al muertito”, para que los parásitos se reproduzcan y, como la hiedra, empiecen a trabar la máquina más eficiente, dilatando procesos, creando regulaciones, impuestos, tasas e innumerables cargas y multas que disparan en fuego cruzado, desde ministerios, organismos reguladores, supervisores, gobiernos regionales y municipales.

La burocracia y regulaciones han crecido de tal manera que está ahogando al aparato productivo y asfixiando a las empresas, impidiendo o postergando indefinidamente el desarrollo de proyectos y, por sí fuera poco, ahora esas entidades se enorgullecen de haber paralizado algunos proyectos.

Gracioso este “sociólogo” que se queja de las AFP con el argumento que más ganan ellas que los futuros pensionistas. No sabe este señor que, para quienes han sido constantes en sus aportaciones, el fondo acumulado al tiempo de jubilarse proviene; un tercio de sus aportes y dos tercios de las ganancias acumuladas por la administración del fondo previsional. Igualmente se queja de las medidas temporales en el agro que, se han convertido en eternas, sin reconocer que esa agricultura moderna ha florecido sin préstamos del banco agrario, ni de subsidios estatales. Quisiera que me muestren los casos del resto del agro peruano y demuestren si les ha sido posible, con estrictamente las mismas condiciones de las que goza el agro moderno, sustentarse y florecer.

Para completar la tarea, es necesario que un Estado pequeño, pero fuerte y eficiente, maneje adecuadamente el sistema de educación, debidamente regulado, potenciado académicamente y apoyado económicamente para manejar un nivel de excelencia, lejos de la influencia negativa del SUTEP y de otro lado, un transporte público manejado por privados, con metas de servicio y eficiencia, pero con el apoyo económico estatal para brindar servicio de excelencia con tarifas de alcance popular.

Lo antes descrito no es más que una Asociación Público Privada (APP), algo a lo que la izquierda le hace ascos, pero el problema no es la APP, el problema como todo en la vida es la calidad de gente que conduce y gestiona. Al igual que aquí, la condición básica o “eje central” para que un gobierno, burocracia o una empresa funcionen es tener gente capaz, con valores y vocación de servicio al país. ¡Debemos entenderlo!

Finalmente, debo compartir que, por observación de la realidad, cuando un socialista se queda sin argumentos, suelta que; “crecimiento no es lo mismo que desarrollo”. Suenan a chiste, pues cuando uno revisa la evolución de los índices de desarrollo humano (IDH), evaluados por organismos internacionales, aprecia un cambio muy positivo en el Perú y especialmente en zonas donde se ha desarrollado los proyectos que dieron lugar al criticado crecimiento.

Como dijimos, la gente es lo fundamental para que el país progrese, pero lamentablemente, en el Perú, hemos elegido mal todo el tiempo y hemos acumulado récord de autoridades y proyectos plagados de corrupción. A pesar de ellos y de los más de US$25,000’000,000 (lo escribo con todos sus números para que hagamos consciencia de su magnitud) gastados en proyectos innecesarios, pero promovidos por la izquierda, y que han postergado la inversión en infraestructura de salud y educación hoy reclamados, llegamos a acumular un Fondo de Estabilización Fiscal de más de US$9 mil millones y RIN de más de US$70 mil millones que ahora nos está permitiendo enfrentar esta crisis. Lampadia

*IMC (índice de masa corporal) = Peso en Kg/Estatura al cuadrado en mt.




La izquierda quiere volver a empobrecer a los maestros

La izquierda quiere volver a empobrecer a los maestros

Jaime de Althaus
Para Lampadia

Walter Aduviri quiere una nueva Constitución. No solo él, buena parte de la izquierda desea lo mismo. Hasta el ministro de Justicia, Vicente Zevallos, se ha sumado. No les gusta el capítulo económico de la Carta Magna. No quieren la relativa libertad económica que allí se establece. Anhelan un Estado más grande, más presente en la economía, un Estado empresario y dirigista, que ellos quisieran manejar con superpoderes. Es decir, algo parecido a lo que tuvimos con Velasco Alvarado, porque no hay una tercera vía.

Pero veamos, por ejemplo, el efecto que tuvo ese añorado modelo en un sector muy vinculado a sus bases, el educativo. El siguiente cuadro, tomado de una investigación de Cesar Guadalupe y otros de la Universidad del Pacífico, muestra la evolución del gasto público por estudiante entre 1950 y el 2015, gasto público que refleja principalmente el salario de los maestros.

Como vemos, en el gráfico, el gasto público anual por estudiante subió aceleradamente entre 1950 y 1966, cuando teníamos un modelo de crecimiento que algunos denominan peyorativamente “primario exportador”. El giro hacia el modelo proteccionista, intervencionista y estatista comenzó a darse, como sabemos, hacia finales del primer gobierno de Belaunde, pero alcanzó su esplendor en los 70 con el gobierno revolucionario de las Fuerzas Armadas, y llegó al éxtasis durante el primer gobierno de Alan García, creador del dólar MUC, de controles de precios y del intento de estatizar la banca. Pues bien, durante esas dos décadas de gran impulso socialista es que se produce la caída abismal del gasto público educativo, que, repetimos, expresa principalmente el desplome de las remuneraciones de los maestros. ¿El Sutep quiere regresar a esas épocas?

El gasto en educación –y por lo tanto los salarios magisteriales- recién empieza a recuperarse a partir de los 90, justamente después de la nueva Constitución del 93 que cambia el modelo económico y pasa a una economía más libre, menos intervenida y con menos empresas públicas, ya privatizadas. Esta nueva economía, más productiva, genera más excedentes y más impuestos, que permiten empezar a recuperar el gasto social, educativo en este caso.  

Nótese que el gasto por estudiante de 1970 recién se recupera el 2007. ¡Perdimos 37 años! Peor aún, si vemos bien el gráfico, advertimos que el nivel de 1966 recién lo recuperamos el 2013, ¡47 años después! La izquierda quiere regresar a un tipo de Constitución que nos hizo perder casi 50 años de desarrollo educativo y magisterial, y pide el cambio de aquella que ha permitido no solo recuperar sino superar los máximos niveles anteriores. No solo eso: ¿cuánto estaría ganando un maestro ahora si el Perú no se hubiese desviado hacia la izquierda en su modelo económico? Habría que hacer la proyección.

Pero en el caso de Aduviri debe haber una confusión, porque en su plan de gobierno explica que su propuesta “implica insertarnos en base a nuestras tradiciones dentro de una economía libre de mercado y el proceso de globalización… Pero las condiciones de libre mercado y la inversión privada, no debe implicar que se destruya nuestro medio ambiente, se nos robe nuestros recursos, se nos robe nuestras oportunidades de desarrollo, se nos robe nuestra cultura”. ¿Aduviri adhiere al libre mercado? De hecho, Puno es una tierra de capitalistas emergentes. No solo eso. Su plan plantea “…formalizar nuestra economía en una región el 80% es excluida por la falta de comprensión del estado”. Y allí da en el clavo.

Lo que ha pasado en los últimos años, sobre todo desde el gobierno de Ollanta Humala pero en alguna medida también desde antes, es que ha ido restableciendo un intervencionismo de baja intensidad. La Constitución se está asfixiando, como escribió Lampadia. Las actividades económicas, las empresas, están cada vez más trabadas por una profusión de normas que las ahogan y les impiden despegar. Probablemente a eso se refiere el plan de gobierno de Aduviri: el 80% de la economía es excluida por normas tributarias, laborales, sectoriales y administrativas de todo tipo que impiden trabajar porque imponen una carga demasiado  costosa en tiempo y dinero.

De lo que se trata es de tirar esa carga por la borda y derogar esas leyes y normas absurdas para facilitar los negocios y las inversiones y devolverles cancha libre. Se trata de dejar respirar nuevamente a la Constitución. Coincidimos completamente con Aduviri en ese punto.

Lo que no se entiende, en ese marco, es su posición frente a la inversión  minera. Quisiera aplicar el modelo boliviano, que es la sobrecarga absoluta, impuestos y regalías prohibitivas, salvo acaso para el que ya está produciendo, al que no le queda más remedio que tirar para adelante, si es que puede. Pero no solo carece de facultades para eso como gobernador regional, sino que con dicho modelo lo único que lograría, si pudiera aplicarlo, es que nadie invierta. Adiós al magnífico proyecto de Corani, que es un  modelo de desarrollo comunal y tiene el respaldo pleno de las comunidades (ver en Lampadia: El secreto de la minería peruana), y adiós al proyecto del litio, que puede traer grandes beneficios a la región y al país.

Si impidiera esas inversiones estaría agregando dos graves daños adicionales al país y a su propia gente, cuando todavía no ha pagado por el primero, que fue la movilización que detuvo el proyecto Santa Ana y destruyó propiedad pública y privada en Puno. No ha expiado hasta los delitos cometidos ni menos ha reembolsado los 108 millones de soles que, como recuerda Fernando Rospigliosi en El Comercio,[1] ahora el Estado peruano debe pagarle a Bear Creek a consecuencia de esa asonada. Lampadia




La evaluación de desempeño debería ser permanente, no de una hora

La evaluación de desempeño debería ser permanente, no de una hora

Las “rúbricas” estarían bien hechas y serían relativamente fáciles de aprobar

Jaime de Althaus
Para
Lampadia

La evaluación de desempeño en el aula es una experiencia nueva y hay, por lo tanto, muchas dudas y desconfianza entre los maestros y la opinión pública acerca de si está bien elaborada, su grado de subjetividad, la imparcialidad de los directores y evaluadores y los criterios mismos de evaluación. Vamos a tratar de responder estas preguntas considerando las explicaciones del ministerio y contrastándolas con lo que está haciendo en las cadenas de colegios privados de avanzada en los sectores C y D.

Fuente: eduglobal.cl

Giuliana Espinoza, Directora de Evaluación Docente del ministerio de Educación (Minedu), nos explica que la evaluación de desempeño en el aula mide cómo el profesor logra motivar a los alumnos (captar su interés, hacerlos participar, ayudarlos a entender), si promueve el razonamiento y la creatividad versus la memorización; si recoge información acerca de lo que están aprendiendo y los retroalimenta; como gestiona el tiempo de la clase; si propicia un ambiente de respeto (si él mismo es respetuoso con los alumnos y si fomenta el respeto entre ellos); y cómo regula el comportamiento (la disciplina) de los chicos, si es por medio de mecanismos positivos o negativos (que no maltrate, humille, insulte, por ejemplo). Los profesores son calificados del 1 al 4 en estas seis habilidades, con criterios objetivos identificados para cada nivel en las rúbricas publicadas en la página web del Minedu. Para pasar la evaluación, el profesor debería alcanzar un promedio mínimo de 2.6.

¿Los profesores conocen la pedagogía activa?

Estamos hablando acá de habilidades que deben tener profesores de inicial, que son los que van a ser evaluados este año. Podemos suponer que parte del temor y desconfianza de los maestros radica en que van a ser evaluados en la manera como ejercen un tipo de pedagogía –constructivista, donde el alumno juega un rol activo- relativamente nueva para muchos de ellos, que no conocen. Pero Giuliana Espinoza, responde que esto no es exacto porque dichas habilidades han sido tomadas del marco de buen desempeño docente y de enfoques generales que han sido incorporados en el Currículo Nacional desde los 90, y aunque es cierto que muchos profesores han sido formados en la escuela “frontal”, vertical, memorística, y tienden a enseñar de la manera en que aprendieron, sí están familiarizados con la nueva pedagogía. Por lo demás, los maestros recibirían una capacitación previa que consistirá en un taller de 1 día en el que los profesores profundizan en los criterios de evaluación descritos en las “rúbricas” o pautas acerca de qué se evalúa y cómo debe manejarse una clase.

De otro lado, el solo hecho de discutir las “rúbricas” o pautas tiene un carácter formativo. También lo tiene la propia evaluación, porque al profesor se le indica cuales son las habilidades en las que tiene que mejorar y cómo. La evaluación es, en ese sentido, un medio para incorporar la nueva pedagogía activa.

Pilotos

León Trahtemberg apunta que la desconfianza de los docentes parte de la experiencia de que en los exámenes que se han hecho la mayor parte desaprueba. Entonces –agrega-  para que la evaluación sea confiable debería hacerse un piloto censal no vinculante, para ver cuántos hubieran aprobado y despejar incógnitas. Ante eso, Espinoza refiere que el año pasado se hizo una evaluación de desempeño piloto con 300 docentes, y un 75% aprobó. De otro lado, en el examen de ingreso a la carrera se presentaron 192,397 maestros y lograron pasar la Prueba Única Nacional (que mide comprensión lectora, razonamiento lógico y conocimientos de la especialidad) solo 23,285 docentes.  Estos pasaron una evaluación de desempeño y aprobó un 90%. Sobre la base de esos antecedentes, Espinoza calcula que en la evaluación que se avecina aprobarán alrededor de un 80%.

Sorprende, realmente, un porcentaje tan alto. Significaría que nuestros maestros son buenos pedagogos. Pero Espinoza nos responde que ese porcentaje es alto porque se ha puesto un puntaje para aprobar bajo, de 2.6 sobre 4. Más adelante se podrá ir elevando los estándares, conforme los maestros se desempeñen mejor en esta pedagogía activa.

Pero lo que queda claro es que definitivamente sí tiene sentido hacer evaluaciones de desempeño.  Jorge Yzusqui, director de la cadena privada Innova Schools, que aplica evaluaciones de desempeño constantes como veremos, piensa que el plan del Ministerio es correcto y está bien pensado en términos generales. Gonzalo Galdos, presidente de la cadena privada de colegios Futura Schools, afirma que la evaluación del desempeño plateada por el Ministerio es positiva pues permitirá el tránsito a la educación moderna basada en una pedagogía activa. En su cadena de colegios, sin embargo, no se aplica evaluaciones de desempeño sino de resultados en el aprendizaje a fin de año a partir de una línea de base de cada alumno construida a principio de año. Pero sí se monitorea permanentemente el desempeño de los profesores en el aula y, además, estos reciben entre 200 y 300 horas de capacitación al año en pedagogía activa, aprendizaje por proyectos, aprendizaje colaborativo, alfabetización digital, etc.

Fuente: andina.com.pe

¿Las “rúbricas” están bien hechas?

¿Están bien elaboradas las “rúbricas” o pautas en las que se explica qué se va a evaluar, cómo debe desempeñarse el maestro, qué habilidades debe mostrar? Trahtemberg opina que algunas son subjetivas y difíciles de aplicar. Pero Jorge Yzusquiafirma que las “rúbricas” están bien hechas, aunque quizá falte precisar más algunos de los criterios. Gonzalo Galdos asegura que las rúbricas están bien elaboradas, tienen un protocolo claro y las conductas de cada uno de los cuatro niveles en las seis habilidades que se van a medir están bien definidas y permiten una evaluación objetiva. Sin duda “permitirán separar a los maestros que han quedado atrapados en el pasado”, anota.

El profesor Hugo Díaz, experto en pedagogía y educación, también considera que en términos generales las seis rúbricas están bien. Sin embargo, refiere que los docentes consideran que los aspectos que ayudan a medir el logro de cada desempeño podrían ser en unos casos subjetivos o poco reales. Por ejemplo, señalan que en niños de 0 a 5 años es muy difícil lograr en 6 minutos que los niños estén atentos durante el resto del tiempo para alcanzar el Nivel IV de desempeño, y 15 minutos para el Nivel III. Sostienen, además, que hacer un registro de tanto indicador en el tiempo fijado de una hora puede ser poco.

Pero Giuliana Espinoza responde que esa crítica es una distorsión que se aclara en los talleres: “no se pide que todos los niños estén atentos 54 minutos, sino que la mayoría del grupo lo esté. Eso está en los manuales. En el pilotaje la gran mayoría de profesores sale bien en esta rúbrica.
No se considera desatención estar moviéndose, sino mostrar desgano sostenido, dormirse, etc. La distracción breve es natural y no se penaliza”.

Respecto de la crítica más general de que en zonas pobres los niños no atienden por anemia o desnutrición, ella comenta lo siguiente: “Lo que se observa es qué hace el profesor con los niños que se distraen, no lo que hacen los estudiantes”. Señala que si hubiese estudiantes que han perdido el interés o que no participan espontáneamente el docente puede alcanzar el nivel IV siempre y cuando sea activo en buscar involucrarlos en la sesión. El principal valor es que las progresiones sean entendidas y los profesores vayan mejorando en sus prácticas”

Lo que podemos inferir de esto es que las rúbricas serían bastante accesibles.

¿Una sola observación de 60 minutos o incorporar evaluación constante?

Siempre subsiste la crítica de que en una hora es difícil evaluar todos los indicadores que se pide y que, como señala Díaz, “se pueden presentar situaciones importantes que en una hora no necesariamente se dan, y el mismo desempeño del profesor durante la hora puede ser atípico, como el de sus niños. Se puede poner nervioso, o se preocuparía durante toda una semana de preparar a sus niños para el momento de la evaluación”. Díaz concluye: “hay que evaluar la posibilidad de tener una evaluación continua durante el año hecha por el director y el coordinador respectivo no solo”.  

León Trahtemberg es de la misma opinión: si es el Director quien va a evaluar, él puede ir haciéndolo a lo largo del año, pues su función es ver cómo enseñan sus profesores. Jorge Yzusqui piensa que lo ideal serían varias horas de observación, pero quizá no sea factible considerando el enorme número de maestros a evaluar. Considera, entonces, que la solución dada es realista. Galdós, por su parte, considera que en 60 minutos sí es posible apreciar cómo dicta un profesor y en qué nivel se encuentra en cada una de las rúbricas.

Yzusqui explica que en Innova Schoolslas evaluaciones de desempeño son constantes.  Los profesores son clasificados en tres niveles, bajo, medio y alto desempeño. Quien está en el nivel bajo, recibe un acompañamiento y monitoreo de parte de un profesor experto o “coach” una vez por semana, quien le indica qué está haciendo mal y en qué debe mejorar en cinco capacidades: la capacidad de motivar a los alumnos, cómo maneja el aula, cómo maneja los conceptos, etc. Si su desempeño es alto, el monitoreo se da cada dos meses. A medio año hay una evaluación de desempeño que incorpora la evaluación de los “coaches” y también una que realiza el Director. A fin de año a estas se suman la evaluación que de cada profesor hacen de los padres de familia, los colegas y los alumnos mayores de 11 años. Todas estas mediante encuestas. El profesor que está en un nivel bajo tiene dos años para mejorar. Si al cabo de esos dos años no sube de nivel, es retirado.

Ahora bien, según Giuliana Espinoza, aparte de la evaluación de desempeño de la que hablamos, el Director monitorea a todo su personal permanentemente con las mismas rúbricas y le indica en qué aspectos debe mejorar. Si eso es así, lo que no se entiende es por qué esa observación permanente no se traduce en una calificación que se incorpore a la evaluación de desempeño, promediándose con el puntaje de la observación formal de los 60 minutos. La propia Espinoza nos responde que lo que pasa es que no todas las instituciones educativas tienen Director capacitado (pero –retrucamos- podría hacerse cuando menos en las 12,000 que ya lo tienen) y otra razón es que “vimos alta consistencia en los resultados de las observaciones a un mismo profesor. Lo probamos en el piloto 2016”.

Pero Giuliana Espinoza insiste en que no es que sólo se evalúe la actuación del docente en una clase modelo: hay otros tres instrumentos que miden su desempeño a lo largo del año. “La encuesta a los padres de familia recoge información obtenida a lo largo del año, lo mismo que el instrumento que valora su responsabilidad y compromiso (cumplimiento de su horario de trabajo, cómo lleva la planificación de enseñanza, y cómo se relaciona con comunidad educativa y si aporta al proyecto educativo de la escuela), así como la gestión del espacio y los materiales, que se recoge en visitas inopinadas (entre 2 y 4). Los cuatro instrumentos en conjunto dan un buen diagnóstico del desempeño del docente”, explica.

¿El Director está preparado para evaluar a sus profesores?

En todo caso, si la observación es una sola, es importante que el evaluador sea óptimo. ¿Quién evalúa? ¿Tiene las capacidades suficientes? Giuliana Espinoza, la directora de Evaluación Docente, nos explica que se forma un Comité de Evaluación conformado por el Director, el Subdirector y un profesor del mismo nivel (inicial en este caso) que no labore en la misma escuela y que sea de igual o superior escala. Pero quien evalúa, quien aplica el instrumento de observación, es el Director. Pero no cualquier Director, sino aquel que haya llevado el diplomado de Gestión Escolar de dos semestres y un taller de observación de aula de una semana, donde se realiza un trabajo en equipo para identificar indicadores de desempeño, se ve videos de clases y los propios Directores califican el desempeño de los profesores del video de 1 a 4 y contrastan su calificación con la del “master”. Y así se desarrollaron las 6 “rúbricas”. Este es el procedimiento de certificación de la Universidad de Virginia, que ha sido adoptado por el Ministerio. Fueran de eso hay videos auto-instructivos y videos con las clases completas.

En la actualidad hay más de 12 mil directores certificados, el 92% de los que siguieron el curso. Y se sigue capacitando y certificando, pues hay 3 mil directores de los 15 mil que accedieron mediante evaluación al cargo de Director que todavía no pasan la certificación mencionada. El próximo año habrá una nueva evaluación de acceso al cargo de director.

Además, el director va a pasar una evaluación de desempeño él mismo, justamente en lo relativo a si ha evaluado y retroalimentado a sus profesores. Será también el 2018. ¿Quién lo evalúa? Pues un “Comité de Evaluación de desempeño de los cargos directivos de la institución educativa” integrado por el Director de la UGEL o el Jefe del Área de Gestión Pedagógica de la UGEL, quien lo preside, el Jefe del Área de Gestión Pedagógica de la UGEL o un Especialista en Educación de la UGEL, y un especialista en Educación de la UGEL, de la misma modalidad y nivel del evaluado.

Todo esto, sin duda, ofrece una garantía. De todos modos, siempre hay la posibilidad de que un Director abuse o desapruebe arbitrariamente a un profesor. En ese sentido, si el docente desaprueba, recibe una segunda visita de dos evaluadores certificados externos. Es decir, tiene una segunda oportunidad dentro de la primera evaluación. Con eso debería disiparse todo temor.

La otra pregunta es por qué la evaluación de desempeño no se junta con la evaluación de ascenso, que incluye exámenes de conocimientos, en una sola. Si hay la posibilidad de ascender, hay más incentivo. Según Espinoza, la evaluación de desempeño no se puede usar como puntaje para evaluación de ascenso porque los Comités de Evaluación pueden tener criterios distintos y las calificaciones que pongan quizá no sean enteramente homologables.

En conclusión, el proceso de evaluación de desempeño parece estar bien diseñado en términos generales, las rúbricas contendrían criterios objetivos, serían relativamente fáciles de aprobary hay 12,000 directores capacitados para aplicarlas. Pero una evaluación de una hora puede ser insuficiente (aunque se complementaría con otros tres instrumentos). Si estos directores monitorean permanentemente a sus profesores en su desempeño en el aula, esa observación permanente debería formar parte de la evaluación de desempeño y no limitarse ésta a una observación de 60 minutos. Y quizá deba fundirse las evaluaciones de desempeño y de ascenso en una sola. Lampadia




¿Cómo así pudo crecer tanto esta huelga?

¿Cómo así pudo crecer tanto esta huelga?

Jaime de Althaus
Paras
Lampadia

Hacía muchos años que no teníamos una huelga de maestros como la que todavía no termina de disolverse. En realidad, la reforma magisterial, incluyendo el principio de la meritocracia con sus evaluaciones como condición para el ascenso y la permanencia en la carrera, logró imponerse y ganar legitimidad desde el 2007, año en que el gobierno de Alan García logró aprobar la ley de Carrera Pública Magisterial. Fue una verdadera conquista social, pero por primera vez desde esa fecha una huelga magisterial adquiere el volumen suficiente para plantear con fuerza la derogatoria de la ley de Reforma Magisterial del 2012 (que reemplazó a la del 2007 incorporando a todos los maestros a la carrera) y la eliminación de las evaluaciones de desempeño. Felizmente no solo el gobierno no cedió, sino que la clase política en su conjunto se plantó firme en la defensa de la meritocracia magisterial. En medio de todo, esa fue una buena noticia. 

¿Cómo así pudo crecer tanto esta huelga de maestros, luego de varios años de intentos fallidos o limitados?

Errores y contradicciones en el manejo

Se suman varios factores. El más inmediato ha sido el manejo dubitativo y contradictorio de la huelga por parte del gobierno. Si vemos el gráfico, notaremos que la huelga se mantuvo estable con alrededor de un 24% de los maestros ausentes de las clases durante por lo menos tres semanas. El lunes 7 de agosto, sin embargo, el porcentaje de docentes en huelga subió a 34%. El viernes 4 el gobierno había anunciado un acuerdo con los gobernadores regionales que contemplaba adelantar el aumento a 2,000 soles a diciembre y descontar a los que no asisten. El domingo 6, en Cuarto Poder, el vice ministro del Interior, Rubén Vargas, había anunciado que 5,000 maestros habían firmado los padrones del Movadef para su inscripción como partido, lo que quizá generó una reacción de rechazo luego de que esa declaración fuera distorsionada en el sentido de que el gobierno estaba acusando a los maestros de terroristas.

El martes 8 el porcentaje de profesores en huelga subió a 44%, y ese mismo día al presidente Kuczynski no se le ocurrió mejor idea que convocar a un diálogo a los dirigentes regionales luego de que el día anterior el ministerio de Educación hubiese anunciado que se despediría a quienes no retornen a las aulas el 9. Fue marcha y contramarcha, fuera de restarle autoridad a los ministros. Al día siguiente, el miércoles 9, el porcentaje de maestros ausentes subió a 53%, y al subsiguiente a 60%. Luego de eso se mantuvo alrededor del 65% hasta que empezó a declinar levemente desde que el dirigente Pedro Castillo no firmara el acta y radicalizara su discurso, y la Ministra anunciara que ya no negociará. 

Un hecho que sin duda alentó la huelga fue la sesión de la comisión de Educación del Congreso con la Ministra Martens. Eso fue el 16 de agosto. La huelga ya estaba en 65% pero subió a 68% en los días siguientes. En esa sesión el Frente Amplio, seguido por Fuerza Popular principalmente, le exigió a la ministra que reciba a los dirigentes regionales y que presente su renuncia. Hubo una penosa competencia por quién representaba mejor a los maestros, un bolsón electoral con influencia local nada despreciable. Nadie, por supuesto, pensaba en los niños, que no votan, ni en los padres, que no son un grupo organizado ni influyente. Para los partidos políticos era una manera de suplir su falta total de presencia en los sindicatos magisteriales, reemplazándola por una representación congresal oportunista, cuando lo que se les reclama –sobre todo a Fuerza Popular y al Frente Amplio o al grupo de Verónika Mendoza, es desarrollar una estrategia real para penetrar el gremio y conseguir su representación.

Crecimiento del Movadef y caída de Patria Roja

El segundo factor explicativo del tamaño de esta huelga ha sido la pérdida del liderazgo del Sutep de Patria Roja junto con el crecimiento del Movadef como organización y de su influencia en el magisterio. Según Carlos Paredes, a estas alturas el Movadef es una organización política más fuerte que la propia Patria Roja.

En realidad, ya la huelga magisterial del 2007, que duró de junio a agosto, fue detonada por el Conare que en ese momento conducía Robert Huayanalaya, de la línea Proseguir (seguidora inicialmente de Feliciano), y convocada también por el CEN Sutep, aunque al final el ministro Chang negoció solo con el Sutep, que logró quebrar la huelga. Huaynalaya fue expulsado del Conare y a partir de allí esta organización fue controlada por el Movadef

En el 2012 hubo tres huelgas: una del CEN Sutep, y dos del Conare (una conducida por Zenon Pantoja, de Huancavelica, de la facción Huaynalaya, con un discurso feroz; y la otra liderada por Rubén Condori, de Puno, del Movadef). El gobierno no negoció con los Conare, y esas huelgas se suspendieron recién en octubre sin llegar a acuerdo alguno. Sí lo hizo con el Sutep, llegándose al acuerdo de otorgar un bono de 300 soles el 5 de setiembre. 

El 27 de mayo del 2015 el ConareSutep convocó a una huelga que fue suspendida a los 27 días sin acuerdo alguno porque el gobierno no dialogó. Esa huelga no tuvo alcance nacional, pues incluyó solo a algunos departamentos de la Sierra. Y, según fuentes del Ministerio, quien la lideró fue nada menos que Pedro Castillo, de modo que no es cierto que no tuviera antecedentes en estos grupos.

Lo que ocurrió el 2017 es que las dos líneas que el 2012 convocaron a huelgas separadas, esta vez se juntaron y eligieron como presidente del “Comité de Lucha” (ex Conare) a Pedro Castillo que, como dijimos, ya había dirigido la huelga del 2015. La línea del Conare-Movadef, seguidora de Abimael Guzmán, tiene presencia en regiones como Cajamarca, Lambayeque, Lima, Ancash, Cusco, Moquegua y Tacna y sus principales dirigentes son Efraín Condori, Cesar Tito Rojas y LuccioCcalloCcallata. La de “Proseguir”, originalmente seguidora del camarada Feliciano, tiene presencia en Pasco y Junín principalmente, y sus dirigentes son Marino Sobrevilla y Zenón Pantoja.

El siguiente mapa ilustra el control de los distintos grupos o gremios magisteriales en las diferentes regiones. El CEN Sutep (en amarillo) todavía tiene presencia en varias regiones, pero en muchas de ellas hay provincias controladas por el ex Conare. Y hay otros gremios en distintos departamentos.

Según fuentes del Ministerio de Educación, un elemento importante en esta aglutinación es la existencia de un sentimiento anti Patria Roja muy fuerte en el magisterio, originado en el control excluyente del Sutep y de la Derrama.

Y como dato a tener en cuenta notemos que las huelgas más importantes se dan antes de que los nuevos gobiernos hayan cumplido un año. Esto ha ocurrido el 2007, el 2012 y el 2017.

¿Debió negociar?

Hay un debate en torno a si el gobierno debió o no debió dialogar con estas dirigencias, como finalmente ocurrió, comenzando con la negociación que desde el 28 de junio el Ministerio de Educación mantuvo con la dirigencia de PukaLlacta del Cusco, que se había declarado en huelga desde el 15 de ese mes, en varias mesas de diálogo que culminaron en acuerdos casi un mes después, en una reunión el 26 de junio nada menos que del Premier Zavala y la Ministra Martens con el dirigente Ernesto Meza Tica de Pukallacta.

¿Fue eso un error? Recordemos que en las huelgas anteriores los gobiernos nunca negociaron con ninguna organización que no fuera el CEN Sutep. Aquí se rompió ese principio, aunque la verdad es que el aumento del número de huelguistas que hemos registrado en el primer gráfico, recién se produjo 12 días después de aquella reunión, de modo que ella no parece haber servido de acicate para insuflar la huelga. De todos modos, el dilema entre negociar o no se presentó varias veces después de eso, y en las idas y venidas que ya hemos reseñado debió pesar, sin duda, la caída de la influencia del CEN Sutep y la fuerza del Comité de Lucha que había unificado a los dos Conare.

Según Jorge Arrunátegui, ex funcionario del ministerio de Educación, la misma estrategia de no negociar con el Comité de Lucha y antes con PukaLlactaquizá hubiese tenido éxito en esta oportunidad, pero tendría que haber habido mucho trabajo de base por parte del ministerio en las regiones. Durante el gobierno anterior, según Arrunátegui, el Sutep como tal tenía todavía más presencia porque el secretario General de entonces era más radical que el actual, que, al ser más apocado, ejerce menos liderazgo entre las bases regionales. En todo caso, el ministerio hacía un “trabajo de hormiga” de contacto con dirigentes y profesores a fin de medir la temperatura en las Regiones.

Temor a la evaluación de desempeño

El radicalismo de un Movadef en ascenso a costa de la declinación de Patria Roja explica en parte la dimensión de esta huelga. Pero algo que les facilitó el trabajo fue la inminencia de la evaluación de desempeño luego de 5 años en que no se aplicaba. En efecto, la ley se aprobó el 2012 y recién este año se realizará la primera evaluación de desempeño (aunque solo a 6,500 docentes de inicial, apenas algo más del 10% de todos los maestros de ese grado). A diferencia de las evaluaciones de ascenso, que tienen el incentivo de subir de escala y recibir un sueldo más alto, las de desempeño solo tienen incentivo alguno sino solo el peligro de que el maestro pueda ser retirado de la carrera si es que no aprueba en tres evaluaciones seguidas luego de dos capacitaciones.

La pregunta que nos hacemos, entonces, es por qué existen estas dos clases de evaluaciones. ¿Por qué no resumirlas en una sola, de ascenso y de desempeño a la vez, de modo que a la tercera vez que el maestro se presenta para ascender y no lo logra, es retirado de la carrera magisterial? Así por lo menos la evaluación tiene el incentivo que puede llevar al ascenso, aunque también pueda conducir a la salida.

Por eso, estaban equivocados quienes pensaban que las evaluaciones habían sido ya interiorizadas y aceptadas como parte de la nueva cultura meritocrática, ya que en los últimos tres años se habían llevado a cabo tres evaluaciones de ascenso sin que hubiese mayor protesta. Ambas evaluaciones no son lo mismo. En total ascendieron 63 mil docentes de un total de 150 mil (nombrados) que se presentaron. Otros ya estaban en esas escalas superiores.

Lo que nos lleva a la constatación adicional de que ya antes de la huelga la mayor parte de los maestros ganaban alrededor o por encima de los 2,000 soles otorgados ahora a la primera escala.

Profesores según escala:

 

1/ Diferencias en los totales se deben a licencias, ceses, entre otras.
Fuente: MINEDU – Sistema Único de Planilla
Elaboración: Dirección de Evaluación Docente

Esto es importante porque permite plantear la hipótesis de que no era el sueldo el tema principal. Es probable que a muchos maestros lo que les interesa, más que el nivel remunerativo, sea precisamente la estabilidad. Pues, por lo demás, el piso de 2,000 soles es para maestros que trabajan 30 horas a la semana, algo parecido a las 6 –en realidad 4- horas diarias que trabajan los médicos (en la medida en que se pague más, se debería ir a las 48 horas semanales). En ese sentido, el magisterio es casi un programa social.

Por eso es que, en los últimos años, pese a que el número de alumnos de la Educación Básica Regular ha disminuido, el número de profesores ha aumentado.  En efecto, como podemos ver en el siguiente cuadro, entre el 2008 y el 2016, la matrícula en los colegios públicos cayó en -6.6% (pese al incremento de 18.5% en la matrícula en inicial), mientras que el número de maestros se incrementó en 16%. Inaudito. En secundaria hay 13 alumnos por profesor, una proporción que no existe ni en Suecia.

Lo que esto nos dice es que acá está funcionando una lógica completamente distinta a la que se derivaría de las necesidades de mejorar la calidad educativa dentro de un esquema meritocrático. La educación no cumple la función de preparar a los alumnos para un mundo competitivo en cambio constante, sino de dar empleo a un segmento determinado de la población.

Es probable que la explosión de la planilla pública de maestros mientras caía el número de alumnos se explique por la naturaleza patrimonialista y clientelista de la gestión de los gobiernos regionales. No es el mérito lo que guía las decisiones de contratación. Una razón más para una reforma de la descentralización que permita recuperar la autoridad central sobre las políticas sectorialesLampadia




¿Qué hay detrás de la evaluación de los maestros?

¿Qué hay detrás de la evaluación de los maestros?

Después de aproximadamente 45 días de la huelga magisterial, entre los dimes y diretes de todos los actores, de la debilidad del gobierno, las interferencias de congresistas del Frente Amplio, Nuevo Perú, y de Fuerza Popular, del desorden mediático, de la angustias de los padres de familia de los sacrificados niños y jóvenes, abandonados por sus profesores, después de presenciar niveles de violencia fuera de lugar, los ciudadanos deben estar muy confundidos sobre los factores que han exacerbado esta lamentable situación.

Para dar algunas luces sobre la crisis política que ha generado la huelga, queremos primero compartir algunas declaraciones muy significativas:

“Que un maestro no sea destituido si jala tres veces el examen, sino que se quede en su escala salarial sin poder ascender de puesto”.

Pedro Castillo, líder del Comité Nacional de Lucha en la huelga de maestros.

“Entendamos que Pedro Castillo está llevando a cabo una lucha que tiene más de política que de reivindicación social. [Ayer] por ejemplo, dijo que no solo quería la derogación de la evaluación, ya empezó a hablar del cambio del modelo, de una consulta nacional, y que ‘acá si es necesario correrá sangre’”. Afirmó Fernando Cáceres, viceministro de Gestión Institucional del Ministerio de Educación (esta amenaza de Castillo ha sido curiosamente silenciada por la mayoría de los medios de comunicación).

“Conare está vinculado a Sendero Luminosos. SL fue parte del Sutep hasta 1981. (…) Ellos han venido trabajando, hoy es el magisterio, mañana otros sectores y pasado el conjunto del país. (…) SL fue derrotado hace 20 a 25 años, ¿qué ha hecho en esa época? Ha hecho un trabajo penetrando gremios, penetrando instituciones. (…) no han renunciado a sus ideas (…) sus armas fundamentales son el miedo y la intimidación. (…) Castillo es un militante, o está atrapado por esas dos corrientes, dos discursos. (…) el sindicato está hecho trizas. (…) Hay objetivos políticos detrás de esto (…) ya tenemos dentro del magisterio una fuerza política actuante con objetivos diferentes a los de maestros y trabajadores”. Soledad Lozano, fundadora del Sutep, su ex Secretaria General, y ex presidente del Colegio de Maestros, en RPP.

“Él dice [Castillo] que no es del Movadef. Le voy a creer, pero coincide con la estrategia de SL, que señala que su objetivo en el magisterio es posicionarse, desplazar al CEN y a Patria Roja y construir su propio sindicato. ¿Para ese objetivo los maestros han ido a la huelga?” César Barrera Bazán, ex Secretario General del Sutep y ex diputado.

“La Ley de Reforma Magisterial fue consensuada en el 2012 con el Sutep y Conare. Ellos propusieron la evaluación de desempeño en aula”. Daniel Mora, ex presidente de la comisión de educación del Congreso durante el gobierno de Ollanta Humala.

De estas glosas, quedan claras varias cosas:

  • Los dirigentes de la huelga buscan eliminar todos los procesos de evaluación.
  • Los líderes de la huelga persiguen un objetivo puramente político.
  • Castillo no pudo ocultar su ‘pensamiento Gonzalo’: “correrán ríos de sangre…”
  • Un factor del agravamiento de la huelga es la disputa política por el control del Sutep entre Patria Roja (Partido Comunista del Perú) y Conare – Movadef – Pukallacta – etc.
  • Y una de campeonato: Increíble, según las declaraciones del ex congresista Mora, la modificación de la Ley Magisterial del 2012 se consensuó con el Sutep y Conare. O sea, el gobierno Ollanta Humala negoció con el Conare (Sendero Luminoso) el cambio de la modalidad de las evaluaciones, (¿?).

El 2007se estableció la meritocracia en la carrera magisterial y se asumió una posición firme con el Sutep (que seguía y sigue) adscribiendo la ‘lucha de clases’ y el enfrentamiento contra el ‘neoliberalismo’, según reza su propio estatuto. Hasta entonces, la antigua Ley del Profesorado sólo permitía ascensos e incrementos sobre la base del tiempo trabajado del profesor, es decir, se podía permanecer enseñando a niños y jóvenes, a pesar de ser totalmente ineficientes y conseguir ascensos e incrementos de sueldos.

Algunas precisiones de la Ley que estableció la meritocracia:

LEY 29062 DE LA CARRERA PÚBLICA MAGISTERIAL – 11 de julio, 2007
Presidente: Alan García
Premier: Jorge del Castillo
Ministro de Educación: José Antonio Chang

(Artículo 24º) Evaluación para el ascenso.
La evaluación para el ascenso tiene una finalidad primordialmente formativa, orientada a mejorar, tanto la práctica educativa como el desempeño laboral de los profesores. Es un proceso permanente, integral, sistemático, objetivo, transparente y confiable. Considera los siguientes criterios:
a. Formación: Estudios de actualización, capacitación y perfeccionamiento
b. Idoneidad profesional: Acreditación de las competencias específica
c. Compromiso ético: Comportamiento ético y moral del docente
d. Calidad de desempeño: Lo señalado en el artículo 29.
 Complementarios: 
a. Reconocimiento de méritos: Cargos desempeñados, producción intelectual y distinciones o reconocimientos. 
b. Experiencia: Tiempo de servicios en el sector público y/o privado. 

(Artículo 27º) Resultados de la evaluación para el ascenso.
Los profesores que logren los puntajes más altos ascenso serán promovidos de Nivel Magisterial en las plazas vacantes.

(Artículo 28º) Evaluación del desempeño del profesor.
Es permanente, integral, obligatoria y de dos (2) tipos: 
a) Ordinaria, cada tres (3) años. 
b) Extraordinaria, para quienes desaprueban la evaluación del desempeño. Se realiza al año siguiente de la desaprobación. 

Además de los criterios establecidos en el artículo 24, se consideran los siguientes factores:

  1. Logros obtenidos en función a su tarea pedagógica.
  2. Grado de cumplimiento de las funciones y responsabilidades del profesor en función de la planificación curricular anual y en su contribución al logro de los objetivos de desarrollo institucional.
  3. Dominio del currículo, de los contenidos pedagógicos del área y/o nivel, de los aspectos metodológicos y de los procesos de evaluación.
  4. Innovación pedagógica.
  5. Autoevaluación. Los profesores que no aprueben la evaluación en una primera y segunda oportunidad, son capacitados y asistidos para el fortalecimiento de sus capacidades pedagógicas. Si después de esta capacitación vuelven a desaprobar son retirados de la Carrera Pública Magisterial.

Al respecto de dicha ley, el experto en educación, León Trahtemberg escribió en una de sus columnas:

García y Chang jaquean al Sutep

León Trahtemberg
3 de enero del 2007

(…) La negativa del Sutep a que los maestros sean evaluados, los pobres argumentos para oponerse (…) han permitido al presidente García y al ministro Chang lograr una victoria política y mediática. Porque los pasos siguientes, si se toman inteligentemente, dependen más del aprovechamiento de la ventaja política de haber arrinconado al Sutep que del número de maestros que asistan a la evaluación.

(…) Si ésta [ley] se promulga y con ello se relativiza la estabilidad laboral magisterial perpetua de los maestros nombrados que resultan incompetentes luego de las pruebas y capacitaciones, Patria Roja perderá predicamento y será desplazado de la conducción del Sutep.

(…) La coyuntura parece ideal para promover la promulgación de la nueva Ley de Carrera Pública Magisterial. (…) los medios de comunicación, la opinión pública, el Acuerdo Nacional y la Confiep han apoyado la evaluación.

(…) En la nueva Ley de Carrera Pública Magisterial quedará instalada la evaluación docente periódica como un componente obligatorio para la permanencia y ascensos en la carrera docente y las mejoras remunerativas.

 Sin embargo, una tarea fundamental que queda por hacer (…) es la de lavar la cara de los buenos maestros, que en esta coyuntura han quedado colocados en la misma imagen negativa que los «malos maestros»”.

La Ley del Profesorado del 2007, enfrentaba la modernización del magisterio, era un paso muy importante en la dirección correcta. Pero, así como el gobierno del nacionalismo representó un punto de inflexión del crecimiento económico y del avance social, también reversó las pocas reformas de los años 2000, como la que instalaba la meritocracia en el magisterio.

Veamos cómo quedó el artículo 24 de la ley, luego del retroceso del gobierno de Humala:

LEY 29944: Ley de Reforma Magisterial -23 de noviembre, 2012 
Presidente: Ollanta Humala
Premier: Juan Jiménez
Presidente del Congreso: Víctor Isla

(Artículo 24) Evaluación del desempeño docente
La evaluación de desempeño tiene como finalidad comprobar el grado de desarrollo de las competencias y desempeños profesionales del profesor en el aula, la institución educativa y la comunidad. Esta evaluación se basa en los criterios de buen desempeño docente contenidos en las políticas de evaluación establecidas por el Ministerio de Educación, lo que incluye necesariamente la evaluación del progreso de los alumnos. 

Ahora, con las modificaciones de Ollanta Humala, Patricia Salas, Jaime Saavedra, Marilú Martens y Daniel Mora, entre otros, las evaluaciones son una burla, pues se basan fundamentalmente en criterios subjetivos de la ‘performance’ del maestro en las aulas.

Estos serán los criterios que serán evaluados sobre el desempeño de los maestros en las aulas

¿Qué pasaría con los profesores que no aprueben esta evaluación?

Según la Ley de Reforma Magisterial del 2012, los docentes que desaprueben recibirán una capacitación gratuita durante seis meses y volverán a ser evaluados al año siguiente. Si vuelven a desaprobar, se les volverá a capacitar durante otros seis meses para que vuelvan a dar una tercera prueba. Si el docente no aprueba en esta oportunidad, pierde el nombramiento y son retirados de la Carrera Pública Magisterial. 

El Ministerio de Educación (Minedu) difundió un video en redes sociales explicando los mitos y verdades sobre la Evaluación de Desempeño Docente, apartado por el que reclaman los profesores en huelga.

Conoce los mitos y verdades sobre la evaluación docente. (USI)

Siendo la evaluación actual, un remedo de lo establecido con la reforma magisterial del 2007, y habiendo el gobierno, cedido en cuanto a los reclamos salariales, no queda duda que la huelga es un movimiento político dirigido a tomar el control del gremio sindical más grande del país, como dijimos en Lampadia el 17 de julio pasado (ver: Ante debilidad del gobierno – ‘Putsch’ del Movadef (Sendero) en Cusco).

Peor aún, no se trata de cualquier movimiento sindical, se trata de un brazo de los movimientos vinculados a Sendero Luminoso, producto de su quehacer de los últimos 25 años, que ha hecho “un trabajo penetrando gremios, penetrando instituciones. (…) no han renunciado a sus ideas (…) sus armas fundamentales son el miedo y la intimidación”, según Soledad Lozano, fundadora del Sutep.

Sendero Luminosos ha dado un paso audaz en su objetivo de retomar predicamento político, pues, en nuestra opinión, el Estado debe dar dos pasos adelante y derrotar definitivamente la penetración del terrorismo en la vida nacional.

Para ello debemos declarar en emergencia la educación escolar, retirar el reconocimiento del Estado a todos los gremios sindicales y retomar la ley magisterial meritocrática que destrozó el nacionalismo y sus socios. Ver: SUTEP: Llegó el momento de decir ‘BASTA’.

Acordemos un pacto social por la educación:

Ha llegado el momento de impulsar una verdadera revolución educativa, una que privilegie la educación de niños y jóvenes con los mejores procesos educativos del mundo, y una que potencie al magisterio dando a los maestros un lugar destacado en la sociedad. Exijamos al gobierno que actué a la altura de las circunstancias. Lampadia




La verdad sobre la infiltración en gremio de maestros

La verdad sobre la infiltración en gremio de maestros

La abusiva e interminable huelga de maestros evidencia el nivel de penetración del Movimiento por la Amnistía y Derechos Fundamentales (Movadef) en la movilización y representación del magisterio. Y es que durante los últimos años Patria Roja (Partido Comunista del Perú), ha ido perdiendo el control del SUTEP, el sindicato que usufructúa capacidades monopólicas, por los avances de organizaciones políticas como el CONARE del Movadef (fachada de Sendero Luminoso).

Fuente: www.ideeleradio.org.pe

Y es que el sindicato de maestros, por su tamaño, presencia nacional, su capacidad monopólica, el control de la Derrama Magisterial, y su vinculación con un tema tan sensible como la educación, es una suerte de ‘bocatto di cardenale’, es la base gremial más poderosa de la política nacional. Lamentablemente, como hemos explicado anteriormente (ver: xxx), el SUTEP fue capturado por dirigencias que están mucho más cerca de la política, que de la noble profesión del magisterio. Nuestro estancamiento económico iniciado en los años 60, condenó a la pobreza los servidores públicos, incluidos los maestros, algo que hizo natural la orientación reivindicativa del sindicato. Así fue que el gremio se presenta como víctima y suscribe la ‘lucha de clases’.

Fuente: larepublica.pe

Hoy se disputan el control del SUTEP, las dos ramas del comunismo local, dividido hace décadas. Patria Roja, el comunismo no senderista, y el Conare más Pukallacta, el comunismo senderista o filo senderista. Hasta hace pocos días el gobierno pensaba que su rol era defender a la dirigencia de Patria Roja, y evitar la captura del SUTEP por el Conare, pero el desliz del Presidente PPK en Moquegua la semana pasada, presumiblemente a instancias del vicepresidente Vizcarra, de invitar a los dirigentes de los comités de lucha a Palacio, empoderó al Conare y debilitó sustancialmente a Patria Roja.

Es interesante tomar nota de las declaraciones de ayer en RPP de la ex secretaria general del SUTEP y ex decana del colegio de profesores, Soledad Lozano, cuando se pregunta si alguien cree que durante los últimos 20 o 25 años, Sendero Luminoso (SL) estuvo sin hacer nada, o más bien estuvo desarrollando su nueva estrategia política de penetración de gremios laborales y todo tipo de instituciones nacionales. Lozano agregó que “el sindicato está hecho trizas”.

Fuente: larepublica.pe

Pues, el pasado 20 de agosto, el ministro del Interior, Carlos Basombrío, preocupado con mostrar lo que hay detrás del ‘putsch’ magisterial, presentó el Informe Infiltración del Movadef en algunas dirigencias del magisterioen la Comisión de Educación del Congreso, enfatizando los nexos de los dirigentes de la huelga con el Movadef. En su exposición, Basombrío confirmó la existencia del vínculo con el Movadef, específicamente en el caso de Pedro Castillo Terrones, presidente del comité de lucha que dirige la huelga de maestros en nombre de todos los comités de lucha, elegido por consenso de los grupos ligados a SL.

Este informe muestra el “Plan de construcción del partido” (2008), un documento de la organización terrorista que dio origen a Movadef. También presentó actas del primer congreso del Movadef (27 y 28 de noviembre de 2010), su ideario, estatutos y acta de fundación (20 noviembre de 2009).

Asimismo, el informe incluye el expediente presentado por el Movadef en el que solicita al Registro de Organizaciones Políticas (ROP) su inscripción como partido político, mostrando así la vinculación de algunos maestros con esta agrupación.

El ministro también detalló que de las 164,667 personas que firmaron el padrón electoral del Movadef, 4,679 de ellos fueron profesores, la mayoría residentes en Lima Metropolitana, Áncash, Ayacucho y Puno.

Además, el informe también publicó fotografías que muestran que, durante los últimos años, distintos activistas del Movadef se han infiltrado en distintas movilizaciones como la marcha contra el proyecto Conga (10 de febrero de 2012) o las protestas contra la “ley pulpín” y el peaje de Puente Piedra.

 

En dicha presentación, se aseguró que Pedro Castillo, principal dirigente de la facción de los huelguistas, fue elegido por el Sutep-Conare. Ricardo Valdés, viceministro de Gestión Institucional del Mininter afirmó previamente en RPP que “Se puede asegurar que Pedro Castillo es cercano a Movadef, y el Movadef es una organización que sirve de fachada de Sendero Luminoso. El ministro Carlos Basombrío lo presentará el lunes al Congreso (…) Ya han existido reuniones con Castillo y las demandas que tenía eran inviables. Él exige que el Minedu lo reconozca como sindicato único para poder negociar”.

En el Congreso, el ministro del Interior nombró a cuatro miembros del Movadef que son dirigentes del Conare-Sutep y que han sido procesados por el caso Perseo. De acuerdo al ministerio, los dirigentes del Movadef, Oswalso Esquivel Caicho, Carlos Arturo Albujar Ortiz, Juan Carlos Ríos Fernández y Juan Antonio Garro Palacios son fundadores y altos dirigentes del Conare-Sutep y están investigados en el marco del caso Perseo.

En Lampadia ya habíamos adelantado, hace 37 días, tal situación en ‘Putsch’ del Movadef (Sendero) en Cusco, afirmando: ante la debilidad mostrada por el gobierno para contrarrestar los levantamientos socio-políticos, los sindicatos y federaciones están llevando adelante una suerte de ‘putsch’ táctico para mejorar sus posiciones estratégicas.

Fuente: larepublica.pe

Además, en SUTEP: Llegó el momento de decir ‘BASTA’, recalcamos que el SUTEP dirigido por el Partido Comunista del Perú (Patria Roja), ha venido enseñoreándose a lo largo y ancho por todo el Perú, y que además capturó la Derrama Magisterial. Ambas hoy día, en disputa abierta con el Conare.

Por eso, queremos tomar esta oportunidad para recalcar nuestras Propuestas en Lampadia:

  • Declarar en emergencia la educación escolar. Esta declaración tendrá que considerar los aspectos necesarios para privilegiar la educación de siete millones de estudiantes sobre los de dirigencias sindicales alejadas de un ejercicio gremial correcto.
  • Descontar todos los días no trabajados.
  • Quitar el reconocimiento del Estado al SUTEP, todas sus derivaciones, al CONARE y a todos sus sindicatos relacionados a la educación escolar.
  • Suspender el reconocimiento de todos los sindicatos de maestros por un período de cinco años
  • Afiliar a los maestros al ‘Pacto Social por la Educación’, ofreciendo buenos salarios, capacitación, tecnología e infraestructuras adecuadas, a cambio de la despolitización del magisterio y la aceptación de la meritocracia y su compromiso con la calidad educativa.
  • Ofrecer un 10% de aumento adicional a los maestros que se afilien al Pacto y devolver los descuentos por la huelga.
  • Despedir definitivamente a todos los líderes violentistas de los sindicatos, a los maestros que firmaron en apoyo al Movadef.
  • Suspender definitivamente las retenciones de las remuneraciones de maestros a favor de la Derrama Magisterial por parte del ministerio y autoridades regionales. Si los maestros desean hacer aportes futuros, tendrán que hacerlos voluntaria e individualmente de sus remuneraciones netas.

No podemos dejar de recalcar que la inmensa mayoría de maestros, no son victimarios de la educación, sino víctimas de la dictadura sindical, ahora disputada por una facción aún más ajena de la educación. (Ver: Pongamos fin a la dictadura sindical en el magisterio). Hace años que la politización de las dirigencias magisteriales, le hace daño a los maestros, pues imposibilita la modernización del magisterio y la recuperación del sitial de honor que le corresponde a los maestros en nuestra sociedad. Desde esa perspectiva, debemos evitar la captura del gremio magisterial por organizaciones filo senderistas. Pongamos fin a la dictadura sindical en el magisterio de una vez, más adelante será más costoso y doloroso. Lampadia




La urgente necesidad de recuperar la autoridad central

La urgente necesidad de recuperar la autoridad central

Jaime de Althaus
Para
Lampadia

La ruptura de la unidad y la pérdida de autoridad del CEN del Sutep, y la atomización de las dirigencias magisteriales no es sino la última manifestación de un proceso de fragmentación política e institucional que se agravó a partir del 2000 y no tiene cuando cesar.

En este caso no es solo que Patria Roja, que domina el Sutep, no está en el Congreso. Si no que las dirigencias regionales del Sutep ya no pertenecen a Patria Roja, sino al Movadef o a Puka Llacta o a Proseguir. Todos los canales de comunicación están rotos y la fragmentación es absoluta. El país se desarticula y feudaliza cada vez más, complicando la gobernabilidad y el progreso nacional.

Correspondientemente, la autoridad central del Estado es cada vez más débil. Los fiscales no fueron capaces de denunciar a los dirigentes que bloquearon caminos y tomaron aeropuertos, que son delitos mayores. El gobierno central, por su parte, no pudo lograr que los gobiernos regionales aplicaran la ley a fin de proceder a los descuentos de los maestros que no asistían a clases. Y, en general, como sabemos, ministerios clave como los de Educación y Salud tienen dificultades para aplicar políticas sectoriales a nivel nacional, para no hablar de los problemas de corrupción vinculados a una obra pública que también se ha descentralizado radicalmente en los últimos 25 años: ha pasado de un 5% de la inversión pública ejecutada por los gobiernos locales a un 45% en los última década y media, a lo que debe sumarse alrededor de un 20 o 25% que es ejecutado por los gobiernos regionales.  

Si a eso sumamos la proliferación de movimientos regionales liderados en ocasiones por aventureros políticos que se organizan para asaltar el apetitoso botín presupuestal de los gobiernos subnacionales, lo que tenemos es, en combinación con esa anarquía, la proliferación de bandas criminales dedicadas a la extorsión de obras y a la usurpación de terrenos, en alianza con fiscales y jueces, entre otras cosas.

El asunto ha llegado a tal extremo que ahora hay paros regionales contra la corrupción y la impotencia de la autoridad central para sancionarla. 

Después del Niño costero, la población de Andahuaylas bloqueó la carretera y cerró la ciudad durante 14 días en protesta contra la corrupción del alcalde en las obras municipales, contra el gobernador y contra fiscales y jueces acusados de connivencia y corrupción. La población exigía sanción y destitución, y nada de eso se podía hacer desde la provincia o la Región, pero tampoco desde el gobierno central. No había mecanismos legales para actuar. El Viceministerio de Gobernanza Territorial, recientemente creado, tuvo que llevar al juez supremo decano y al contralor regional. Este último  solicitó congelar las cuentas de la municipalidad, y la propia PCM abrió una mesa de partes para recibir denuncias. Lo mismo ocurrió en el distrito de Lagunas, en Ucayali, que bloqueó el rio de ese nombre durante dos meses con el mismo tipo de demandas.

Lo menos que podemos hacer es leer bien el mensaje que esos paros envían: lo que están pidiendo es una reforma de la descentralización y del Estado que restablezca la autoridad central en el país y establezca mecanismos eficaces de intervención, control y sanción contra la corrupción.

El problema es que ninguno de los partidos que compitieron en el proceso electoral del 2016 planteó una reforma de la descentralización en sus planes de gobierno. Pero hay que diseñarla y ejecutarla.

Lo primero es una ley que tipifique mejor los delitos vinculados al bloqueo de carreteras y toma de aeropuertos como delitos que afectan la seguridad y la economía nacionales, a fin de establecer una jurisdicción o una Sala Nacional para juzgar a quienes cometan esos actos, porque ya sabemos que los fiscales locales tiene temor de hacerlo. De lo contrario, las poblaciones seguirán sometidas a dictaduras sindicales que consiguen paralizar actividades clave como el turismo, la minería y la propia economía de la población por medio de acciones de fuerza y amedrentamiento.

También se necesita fortalecer los organismos de control del Poder Judicial y del Ministerio Público a fin de que puedan investigar y denunciar a fiscales y jueces cómplices de autoridades corruptas y organizaciones criminales.

Lo segundo es revisar el proceso de descentralización para redistribuir competencias entre los tres niveles a fin de asegurar la aplicación de políticas sectoriales de nivel nacional y la capacidad de control, intervención y sanción cuando un gobierno subnacional desacata o incumple alguna política o norma de carácter nacional.

Esto puede conllevar la centralización de importantes funciones en sectores clave como Educación, Salud, Transportes, minería y pesquería y desarrollo forestal, por ejemplo. Queda claro que no existe masa crítica profesional suficiente para construir 25 gobiernos centrales en el país. Por supuesto, eso necesita un acuerdo político.

Además, se requiere aplicar lo que nunca se hizo: un proceso de certificación de competencias para trasladar las funciones que realmente los gobiernos subnacionales pueden manejar.

En realidad, nada de esto se está trabajando, ni en el Congreso ni en el Ejecutivo. El viceministerio de Gobernanza Territorial, que posee una Secretaría de Descentralización, ve aspectos operativos pero no está elaborando ninguna propuesta al respecto. Según el viceministro Javier Fernandez Concha, sí está construyendo, en cambio, una metodología de planificación territorial, porque –señala- no existe un ente que planifique el desarrollo regional o local. No hay verdaderos planes regionales o locales, sino listados de obras que responden a motivaciones con frecuencia crematísticas.  Se busca que la metodología de planificación en diseño calce con el CEPLAN y con el MEF, con el nuevo sistema de inversión pública llamado Invierte.Pe, que contiene una lógica más racional desde que prioriza las obras en la medida en que cierran brechas identificadas y cuantificadas. 

En la base está un Estado sumamente ineficiente y burocratizado, compuesto por empleados públicos nombrados que carecen de las calificaciones  necesarias o, si las tienen, pueden darse el lujo de no trabajar o trabajar al mínimo porque no hay evaluaciones y saben que no pueden ser despedidos.

En ese sentido, una reforma complementaria es la del régimen del servicio civil, que debe ser implantado a todo nivel, pero que lamentablemente no ha merecido hasta ahora una prioridad política por parte del gobierno. Dicho régimen lleva a las entidades públicas a definir bien sus objetivos y a elaborar un cuadro de personal con los perfiles adecuados, a convocar luego a concursos internos y externos para llenar esos puestos con  mejores remuneraciones en los niveles medios y altos a cambio de aplicar evaluaciones de desempeño con capacitaciones con la eventual salida de la carrera burocrática a la tercera desaprobación.

Por supuesto, la recuperación de la autoridad central y de la naturaleza unitaria del gobierno requieren, también, una reforma política que ayude a reconstruir un sistema de pocos partidos estables y presentes en el territorio, poniendo requisitos más fuertes para la inscripción y funcionamiento de los movimientos regionales, de modo que los alcaldes y gobernadores regionales pertenezcan en lo posible a partidos políticos presentes en el Congreso, para que existan canales de comunicación que permitan procesar los problemas y demandas de manera adecuada y oportuna. Es algo que se está trabajando en el Congreso, aunque no parece haber mayor consenso en torno a las reformas clave necesarias para alcanzar ese resultado. De ello nos ocuparemos en un próximo informe. Lampadia

 




La educación escolar como trofeo político

La educación escolar como trofeo político

La infausta ‘huelga magisterial 2017’ va llegando a su fin con resultados que solo podemos calificar de una de las mayores irresponsabilidades históricas de nuestra clase política.

Más de 50 días de huelga y ni siquiera se ha compartido con la ciudadanía, información seria sobre la situación y perspectiva de la educación escolar en el Perú. ¿Qué mejor ocasión para ello, que la de tener todos los días, en todos los medios, el tema de la educación de nuestros niños y jóvenes?

No se ha aprovechado la circunstancia para poner encima de todo el imperioso objetivo de privilegiar la calidad de la educación. No se ha aprovechado la ocasión para poner encima de la mesa, con sinceridad y transparencia, los problemas y los retos de la educación. No se han mostrado los datos que necesitan nuestros ciudadanos para tener una visión mejor informada de nuestra realidad. Más bien, los ciudadanos hemos sido adormecidos con elementos distractivos, medias verdades o mentiras abiertas. Estamos seguros, que hoy, nuestra sociedad está más confundida que empoderada para influir en el diseño del futuro escolar.

Veamos si en Lampadia podemos rescatar un mejor análisis del tema:

• Calidad, reto y encaminamiento

La calidad de la educación escolar en el Perú es una de las peores del mundo, por lo tanto, la sociedad debiera hacer un gran esfuerzo de superación, en el menor tiempo posible.

Si a ello, le agregamos que estamos viviendo una nueva revolución tecnológica (Cuarta Revolución Industrial), que está transformando la vida de las personas, empresas y países, en todo el mundo; con impacto especial en la educación; el reto de superarnos requiere absolutamente, de toda nuestra atención.

Dicha revolución aporta un cambio de paradigma muy importante para la calidad de la educación: la transición de la producción en masa, a la producción en segmentos ‘tamaño uno’. En otras palabras, la educación del futuro será individualizada y, además, basada en el desarrollo de capacidades más que de aprendizajes.

El enfoque de la educación en el Perú sigue siendo regimentado, centralizado e inspirado en los paradigmas del siglo xx. El Ministerio de Educación, bajo la batuta del ex ministro Saavedra, adormeció a nuestra clase dirigente, haciéndole creer que podían desentenderse del tema, pues bastaba con tenerlo a cargo, apoyado por las múltiples consultorías que contrató con la PUCP, mientras combatía el aporte del sector privado a la educación.

• La tragedia de los maestros

La profesión de maestro es una de las más importantes de toda sociedad. Como en todas partes, hasta hace varias décadas, nuestros maestros eran respetados, contaban con los mismos instrumentos y prácticas educativas que se empleaban en el resto del mundo y sus remuneraciones estaban acordes con la realidad del país, sin ningún maltrato relativo a otro sector.

Pero, como hemos explicado en Lampadia (ver: La tragedia de los servidores del Estado ), la hiperinflación creada desde los años 70 por las políticas socialistas de la dictadura militar, mantenida y exacerbada por Belaunde II y García I, desquició la vida de todos nuestros servidores públicos. Ellos tuvieron que recurrir al cachueleo para sobrevivir y finalmente pasaron a jornadas laborales de medio día, con lo que se perdió, tanto para los maestros, como para los médicos y policías, la vocación de servicio.

Ver el perfil de la gran hiperinflación peruana, que duró 25 años y llegó a un pico de 7,482% en un solo año:

A medida que subía la inflación, fueron bajando los ingresos reales de los maestros. Veamos como caen al 12% real, desde la dictadura militar hasta fines de los años 90. Desde entonces empieza la recuperación, multiplicándose por 3.6 veces hacia mediados de la presente década.

Así, fue que nuestros maestros fueron empujados, junto con el resto de los servidores públicos, a privilegiar su esfuerzo por sobrevivir, por encima de cualquier otra cosa.

El siguiente gráfico, muestra la evolución del salario de los maestros durante cada período de gobierno:

Contrariamente a lo declarado por el Presidente PPK, hace cuatro días en el sentido de que hay que entender los reclamos de los maestros, pues sus ingresos habrían estado estacados durante los últimos diez años, podemos ver, según informa Macroconsult, que si bien durante el gobierno de García II bajaron 10% (la economía creció más rápido que sus salarios), durante el gobierno de Humala, el crecimiento fue de 65% real. Lo terrible, es más bien, que este aumento se hizo sin que los maestros se comprometieran con una gesta por la calidad, sin que renuncien a la agenda política de la ‘lucha de clases’, y sin que colaboren, como plantea, Jaime de Althaus  con apoyar el desarrollo de los proyectos mineros y otros, para tener de donde seguir mejorando sus ingresos. Gran irresponsabilidad de Jaime Saavedra.

• El desarrollo sindical

En las condiciones descritas, era solo natural que los maestros, el mayor conjunto de servidores del Estado, buscaran en el desarrollo de un sindicato reivindicativo, el mecanismo más adecuado para negociar con el resto de la sociedad sus mejoras relativas, que, en un país estancado, solo podían lograrse a costa del resto.

Así se sustentó el nacimiento y fortalecimiento del SUTEP, que eventualmente fue capturado por el Partido Comunista del Perú (Patria Roja), que aún hoy día se adscribe a la ‘lucha de clases’. Además, el SUTEP controla la Derrama Magisterial, que hoy maneja alrededor de 1,800 millones de soles.

Durante los últimos años, Patria Roja ha ido perdiendo el liderazgo y el control del sindicato magisterial. Quienes disputan la supremacía del gremio son el CONARE, Pukallacta y otros grupos vinculados al MOVADEF, organismo de fachada de Sendero Luminoso.

Hoy día, los movimientos filo terroristas están muy cerca de tomar el control definitivo de la representación sindical y luego de la Derrama, cuyo directorio está controlado en su gran mayoría por el SUTEP.

• Obsolescencia social y fortalecimiento político

Con la recuperación de la economía ya no hace sentido que se mantenga la existencia de un sindicato reivindicativo, pues hace buenos 15 años hemos pasado de ser una sociedad estancada, donde el modelo político era ‘ganar-perder’ (solo podías mejorar a costa de los demás), a un modelo ‘ganar-ganar’, donde el crecimiento permite que todos progresemos juntos.

Por lo tanto, hace años debimos empezar a desarmar, por obsoleto, el poder del SUTEP y transitar hacia una verdadera revolución educativa que revalore al nuevo maestro y empodere a nuestros niños y jóvenes para una vida plena en el siglo xxi.

Pero, la irresponsabilidad de nuestra clase política ha evitado el transito (necesariamente duro), de reconvertir los elementos estructurales de la educación pública. Uno de los mayores responsables de esta pérdida de enfoque, fue el ministro Saavedra, que prefirió convivir con el statu quo.

• El aporte de la educación privada

A diferencia de otros países, donde la educación es fundamentalmente estatal, en el Perú la participación de la educación privada viene creciendo de forma importante.(Ver presentación de Antonio Rodríguez Lobatón, miembro del Instituto Riva Agüero, en diciembre, 2014, La educación en el Perú y una meta inalcanzable, fuente de los datos que presentamos líneas abajo).

En otros países, la mayor parte de la educación privada goza de subsidios estatales, mediante vouchers educativos o aportes directos, lo que la hace, factualmente estatal. En cambio, en el Perú, el desarrollo de la educación privada es puramente el aporte del sector privado. En el año 1984, la educación privada no pasaba de 15%, sin embargo, desde el año 2000, la matrícula privada se incrementó notablemente, mientras la educación pública, entre 2002 y 2013, perdía alrededor de un millón de alumnos. Hoy se estima que, a nivel nacional, la matrícula privada llega al 30%. El Lima alcanza al 48% y en ciudades como Arequipa y Trujillo, los porcentajes son similares.

En cuanto a la inversión privada en educación, en 1994 alcanzaba el 1.9% del PBI, y la del Estado 2.8%.

Para el año 2000, el aporte privado llegó al 2.6%del PBI y, el total ya superaba el 6% establecido por el Acuerdo Nacional.

En la actualidad, se estima que el aporte privado es de entre 3 y 3.5% del PBI, prácticamente lo mismo que aporta el Estado.

Pero los gobiernos nunca han reconocido públicamente este importante aporte. Quién hizo todos los esfuerzos posibles por ocultarlo y desmerecerlo fue el ministro Saavedra, de triste recordación en Lampadia, donde hace años venimos propugnando una verdadera revolución educativa.

Afortunadamente, el Presidente PPK si lo reconoció hace pocos días, indicando que, en conjunto, el Estado y el sector privado invertían anualmente, más de 6% del PBI.

• La derrota que está a punto de sufrir el Estado

Según la información que tenemos, el gobierno estaría a punto de hacer concesiones absolutamente inadecuadas a las beligerantes dirigencias filo terroristas que están a punto de tomar el control total del SUTEP y la Derrama Magisterial. Se estaría por acordar:

  • La dispensa de todos los delitos cometidos durante la huelga.
  • No hacer descuentos por los días no trabajados.
  • No ir adelante con despidos a los dirigentes violentistas y maestros que dejaron de trabajar.
  • Adelantar el aumento general de dos mil soles a noviembre del presente.
  • Diluir la evaluación del magisterio y las exigencias de calidad.
  • Seguir haciendo aumentos sin el correspondiente compromiso por la calidad de los maestros.

Como un solitario acto de consecuencia y responsabilidad con el futuro de la educación en el Perú, en Lampadia insistimos en ir adelante con una revolución educativa.

Ver:

Estamos viviendo un momento muy difícil en nuestra vida nacional. Ante ello pedimos grandeza y sentido de propósito. Lampadia




Pongamos fin a la dictadura sindical en el magisterio

Hace pocos días propusimos en Lampadia algunas decisiones sobre cómo manejar la crisis de la educación escolar en el Perú. Ver: El ‘putsch’ de los maestros (de la política) – SUTEP: Llegó el momento de decir ‘BASTA’. Ahora que la crisis sigue agravándose, queremos hacer algunas puntualizaciones.

Fuente: larepublica.pe

En principio calificamos la huelga como un ‘putsch’, para enfatizar su contenido político subversivo. Ante ello, propusimos:

  • Declarar en emergencia la educación escolar.
  • Descontar todos los días no trabajados en la huelga.
  • Retirar el reconocimiento del Estado al SUTEP.
  • Retirar el reconocimiento del Estado a todos los movimientos sindicales, incluyendo expresamente al CONARE.
  • Suspender el reconocimiento de todos los sindicatos de maestros por un período de cinco años.
  • Afiliar a los maestros al ‘Pacto Social por la Educación’, ofreciendo buenos salarios, capacitación, tecnología e infraestructuras adecuadas, a cambio de la despolitización del magisterio y la aceptación de la meritocracia y su compromiso con la calidad educativa.
  • Ofrecer un 10% de aumento adicional a los maestros que se afilien al Pacto y devolver los descuentos por la huelga.
  • Despedir definitivamente a todos los líderes violentistas de los sindicatos, incluyendo expresamente a aquellos maestros que hayan firmado en apoyo a Movadef.
  • Suspender definitivamente la retención de las remuneraciones de los maestros a favor de la Derrama Magisterial, por parte del ministerio y autoridades regionales.
  • Si los maestros desean hacer aportes futuros, tendrán que hacerlos voluntaria e individualmente de sus remuneraciones netas.

Analicemos la situación actual y el sustento de las acciones propuestas:

  1. La educación escolar adolece de graves problemas de calidad y necesita emprender una profunda transformación para permitir que nuestros niños puedan mantener el mismo nivel de preparación para la vida y el trabajo que los de los países más avanzados.
  2. Desde esa perspectiva es muy claro que necesitamos hacer reformas que son incompatibles con el manejo politizado del sindicato magisterial, el SUTEP, que hasta la fecha sigue comprometido con la lucha de clases y otras propuestas ajenas a los fines educativos del país y que responde a los dictados del Partido Comunista del Perú (Patria Roja).
  3. Durante los últimos años y, en mayor medida en los últimos meses, Patria Roja viene perdiendo el control del SUTEP, por los aprontes de organizaciones como el CONARE, Puka Llacta y otros manifiestamentes vinculadas al movimiento terrorista de Sendero Luminoso, y que hoy amenazan con tomar el control del sindicato ‘único’ de maestros.
  4. En cuanto a los maestros, debemos destacar que, sin dudas, la gran mayoría de ellos están completamente alejados de la política y de los movimientos subversivos y más bien son víctimas de esa suerte de dictadura sindical que ejerce el SUTEP.
  5. Así como nuestros niños necesitan la mejor educación, nuestros maestros requieren que revaloricemos su labor al más alto nivel. Tenemos que darles programas de reconversión laboral y de capacitación en técnicas modernas de educación, buenas infraestructuras que faciliten su trabajo y, por supuesto, remuneraciones más altas, que estén a la altura de su muy noble tarea.
  6. Ante el riesgo de la penetración de los movimientos subversivos y el desenfoque de las dirigencias magisteriales, el gobierno tiene la obligación de preservar el sistema educativo, cuidar la buena educación de nuestros niños y proteger a los maestros de la dictadura sindical que solo inhibe su reconversión y mejor desarrollo personal.
  7. Estos objetivos y necesidades, están por encima de los derechos sindicales que han sido abusados mediante comportamientos disfuncionales, para el beneficio de dirigencias politizadas que condenan a la educación y al magisterio a condiciones de atraso y pobreza inaceptables.

Así como Alemania proscribió la participación de los movimientos de inspiración Nazi en la vida de su sociedad, el Perú debe perfeccionar sus normas para excluir de la vida nacional a los movimientos filo terroristas o a aquellos vinculados a los mismos.

En este espíritu, es muy inconveniente que el Presidente de la República reciba en Palacio de Gobierno a los representantes de los comités de lucha que han venido liderando  la abusiva huelga violentista de más de cincuenta días y que con su intervención haya desautorizado las gestiones de la ministra de educación.

Siempre es doloroso y peligroso tomar decisiones audaces, pero hay momentos en la vida de las naciones en que debemos enfrentar los riesgos que pueden llevarnos a situaciones inmanejables como la captura del gremio magisterial por organizaciones filo senderistas. 

Es el momento para #sacarfuerzasdeadentro. Lampadia




SUTEP: Llegó el momento de decir ‘BASTA’

SUTEP: Llegó el momento de decir ‘BASTA’

Hace 20 días publicamos en Lampadia ‘Putsch’ del Movadef (Sendero) en Cusco, afirmando: ante la debilidad mostrada por el gobierno para contrarrestar los levantamientos socio-políticos, los sindicatos y federaciones están llevando adelante una suerte de ‘putsch’ táctico para mejorar sus posiciones estratégicas.

Lamentablemente, el gobierno solo avanza para afirmar su debilidad. Sin el diagnóstico correcto, sin visión y sin capacidad política, la semana pasada claudicó y aceptó adelantar los aumentos ofrecidos al magisterio, sin la contraparte de un compromiso por la educación de parte de los maestros y anunciaron el reinicio de clases para hoy lunes. Sin embargo, las dirigencias del magisterio ya adelantaron que “la huelga continua”. Efectivamente, hoy lunes no se reiniciaron las clases.

Fuente: rpp.pe

El gobierno anunció que los que no trabajen desde hoy, 7 de agosto, por tres días consecutivos, se les descontará. En otras palabras, les están perdonando los días no trabajados desde el inicio de la huelga. Además, no se conoce de arrestos, ni de una sólida acción de defensa del orden interno. A los maestros huelguistas y a los demás gremios en estado de protesta se les ha dado ‘licencia’ para hacer lo que quieran. Un verdadero papelón.

Llegó el momento de decir ‘BASTA’

Hace más de diez años se hizo evidente que el SUTEP, por su naturaleza, por su orientación política y por ser la mayor traba de una verdadera revolución educativa, debía ser transformado o liquidado. Máxime, en los tiempos de la nueva revolución tecnológica que nos trae cambios de paradigmas para el futuro inmediato y, por supuesto, para la educación.

Fuente: larepublica.pe

Análisis y situación actual
  • Desde una perspectiva histórica es muy entendible que se formara un sindicato de maestros como el SUTEP. Como hemos explicado anteriormente, la hiperinflación iniciada en la dictadura militar destrozó la vida de los servidores públicos, los empobreció dramáticamente y los . (Ver en Lampadia: La tragedia de los servidores del Estado).
  • Al entrar nuestra economía en un largo estancamiento, la única manera de lograr mejoras de ingresos u otras prebendas era organizarse y ejercer un poder de negociación superior al de otros estamentos de la sociedad, incluido el propio gobierno. Se había validado así el modelo ‘ganar-perder’ (si la torta no crecía, trata de llevarte todo lo que puedas).
  • Luego de la recuperación de la economía peruana en los años 90, empezamos a crecer alto y sostenido y, por lo tanto, entramos a una nueva realidad donde el modelo general pasó a ser: ‘ganar-ganar’ (con el crecimiento, ya no era necesario arrancharse las migajas de una torta pequeña).
  • El SUTEP, que ya había tomado una orientación política e ideológica bastante radical, mantuvo su enfoque, más cercano a los intereses del gremio y sus dirigentes, que a los de la educación.
  • Sus estatutos, hasta el día de hoy, hablan de la ‘lucha de clases’:

“La ideológica del capitalismo neoliberal busca enajenar al trabajador y su clase, convertirlos en mediocres, erradicar su perfil clasista, con el propósito de perennizar su expoliación y explotación.

La clase trabajadora debe responder el reto de enfrentar el neoliberalismo, salir airoso, retomando la iniciativa en la lucha de clases”.

  • Además, el SUTEP fue tomado por el Partido Comunista del Perú (Patria Roja), que ha venido enseñoreándose a lo largo y ancho por todo el Perú, manejando la institución política más activa del país.
  • Así mismo, el SUTEP capturó la Derrama Magisterial, un fondo de apoyo social a los maestros que ahora maneja más de mil millones de soles y se financia con descuentos ‘voluntarios’ a los maestros.
  • Durante los últimos años, Patria Roja ha ido perdiendo el control del sindicato unitario, pues organizaciones políticas, aún más radicales que el propio SUTEP, le están disputando el control. Entre estas, está el CONARE del Movadef, la Organización de fachada de Sendero Luminoso.
  • Hemos llegado al punto en el que el gobierno se ve forzado a apoyar al Partido Comunista del Perú para evitar el empoderamiento de grupos filo terroristas en el control del magisterio. 

Es claro que los últimos gobiernos han tenido una suerte de alianza con el SUTEP, una especie de ‘guerra fría’, en que ninguna de las partes iba a la confrontación total, cuidando el corto plazo sin importar la suerte futura de los estudiantes.

La nueva realidad y la revolución educativa

En Lampadia hemos insistido en la necesidad de transformar los paradigmas educativos si queremos nivelarnos con los estándares educativos de los países más avanzados y enfrentar los retos que traerá la cuarta revolución industrial a nuestros pobres. Hemos hablado de un ‘Pacto Social por la Educación’. Pero nada mueve el entendimiento ni la acción del ambiente educativo oficial. Las autoridades no escuchan y las cosas no cambian.

Nuestras Propuestas

  • Declarar en emergencia la educación escolar. Esta declaración tendrá que considerar los aspectos necesarios para privilegiar la educación de siete millones de estudiantes sobre los de dirigencias sindicales alejadas de un ejercicio gremial correcto.
  • Descontar todos los días no trabajados.
  • Quitar el reconocimiento del Estado al SUTEP, todas sus derivaciones, al CONARE y a todos sus sindicatos relacionados a la educación escolar.
  • Suspender el reconocimiento de todos los sindicatos de maestros por un período de cinco años
  • Afiliar a los maestros al ‘Pacto Social por la Educación’, ofreciendo buenos salarios, capacitación, tecnología e infraestructuras adecuadas, a cambio de la despolitización del magisterio y la aceptación de la meritocracia y su compromiso con la calidad educativa.
  • Ofrecer un 10% de aumento adicional a los maestros que se afilien al Pacto y devolver los descuentos por la huelga.
  • Despedir definitivamente a todos los líderes violentistas de los sindicatos, a los maestros que firmaron en apoyo al Movadef.
  • Suspender definitivamente las retenciones de las remuneraciones de maestros a favor de la Derrama Magisterial por parte del ministerio y autoridades regionales. Si los maestros desean hacer aportes futuros, tendrán que hacerlos voluntaria e individualmente de sus remuneraciones netas.

Para salvaguardar el año escolar, habrá que organizar una campaña masiva de educación a distancia (por internet) y convocar el apoyo de toda la sociedad para superar un momento muy difícil, pero que estará encaminado a establecer las nuevas bases de la educación escolar en el Perú: La educación de excelencia con los mejores procesos educativos y la dignificación del maestro que, en pocos años, debería pasar a ser respetado por todos los peruanos y altamente compensado.

Como dice la sabiduría popular: “Más vale un momento colorado, que cien amarillos.” Lampadia




Edtech para la ‘Educación del Siglo XXI’

Edtech para la ‘Educación del Siglo XXI’

En Lampadia hemos propuesto en innumerables veces una ‘verdadera revolución educativa’, un ‘big bang’, un ‘salto cuántico’, pero es impresionante la cantidad de ciudadanos que aún no entienden que las propuestas de cambio en la educación son un llamado por no seguir enseñándole a generaciones de peruanos con herramientas obsoletas y una mentalidad del pasado.


Fuente: CB Insights

La Cuarta Revolución Industrial, la cual está relacionada con la robótica y la inteligencia artificial, entre otras muchas tecnologías disruptivas, jugará un papel trascendental en la vida de los ciudadanos, empresas y naciones en los próximos años. Sin embargo, las revoluciones industriales traen consigo una disrupción económica, política y social y muchos temen o no quieren cambiar su status quo, el cual los frena de aprovechar los grandes beneficios de la revolución en la educación.

Como afirma el artículo de The Economist (publicado líneas abajo), “la tecnología de la educación (edtech) ha repetido el ciclo del bombo y el fracaso, incluso cuando las computadoras han reestructurado casi todas las demás partes de la vida. Una razón es el conservadurismo de los maestros y sus sindicatos. Pero otra es que el potencial de edtech para el desarrollo cerebral no ha sido probado.”


Fuente: Techzim

Lo mismo sucede en el Perú. En Lampadia hemos insistido en la necesidad de transformar los paradigmas educativos si queremos nivelarnos con los estándares educativos de los países más avanzados y enfrentar los retos que traerá la cuarta revolución industrial a nuestros pobres. Hemos hablado de un ‘Pacto Social por la Educación’. Pero nada mueve el entendimiento ni la acción del ambiente educativo oficial. Las autoridades no escuchan y las cosas no cambian.


Fuente: YourStory.com

Otros lugares del mundo sí escuchan y actúan. Edtech puede brindar atención individualizada al alcance de todos los alumnos. The Economist cita algunos ejemplos, como: “Un tercio de los alumnos se encuentran en un distrito escolar que se ha comprometido a introducir un ‘aprendizaje digital personalizado’. Los métodos de grupos como Summit Public Schools, cuyo software fue escrito por los ingenieros de Facebook, están siendo copiados por cientos de escuelas.”

Según otro artículo de The Economist, titulado ‘La tecnología está transformando lo que sucede cuando un niño va a la escuela’, “Ahora, finalmente, [la educación] está empezando a cambiar, por dos razones: La primera es que edtech es cada vez más capaz de interactuar con los estudiantes de manera sofisticada. Estudios recientes muestran que el software que imita el rol de un tutor (en lugar de simplemente crear preguntas y respuestas) puede acelerar el aprendizaje de los niños. La segunda razón es la experiencia de un número cada vez mayor de escuelas, las cuales no se limitan a utilizar edtech en las aulas, sino que utilizan el nuevo software para cambiar la forma en que los alumnos y los profesores pasan su tiempo. Ambos se vuelven más productivos.”

Pero en el Perú hemos engañado a la población con una falsa revolución educativa. Hemos inhibido la innovación y la creatividad, y hemos estigmatizado y desincentivado la educación privada. No se debaten los temas de fondo, de la revolución que viene y de la revolución que no emprendemos. Como afirma The Economist, “una mentalidad cerrada no tiene lugar en el aula.

Nuestros jóvenes merecen lo mejor que el mundo tiene para ellos. Lampadia

 
Tecnología educativa
Juntos, la tecnología y los profesores pueden renovar las escuelas

Cómo la ciencia del aprendizaje puede aprovechar lo mejor de edtech

The Economist
22 de julio, 2017
Traducido y glosado por Lampadia

En 1953, B.F. Skinner visitó la clase de matemáticas de su hija. El psicólogo de Harvard encontró a cada alumno aprendiendo el mismo tema de la misma manera a la misma velocidad. Unos días más tarde construyó su primera “máquina de enseñanza”, que permite a los niños abordar preguntas a su propio ritmo. A mediados de los años sesenta, aparatos similares estaban siendo vendidos por proveedores puerta a puerta. Sin embargo, en pocos años, el entusiasmo por ellos había desaparecido.

Desde entonces, la tecnología de la educación (edtech) ha repetido el ciclo del bombo y el fracaso, incluso cuando las computadoras han reestructurado casi todas las demás partes de la vida. Una razón es el conservadurismo de los maestros y sus sindicatos. Pero otra es que el potencial de edtech para el desarrollo cerebral no ha sido probado.

Hoy en día, sin embargo, los herederos de Skinner están forzando a los escépticos a repensar esto. Respaldados por tecnólogos multimillonarios como Mark Zuckerberg y Bill Gates, las escuelas de todo el mundo están utilizando un nuevo software para “personalizar” el aprendizaje. Esto podría ayudar a cientos de millones de niños atrapados en clases sombrías, pero sólo si los reforzadores de edtech pueden resistir la tentación de revivir ideas perjudiciales sobre cómo aprenden los niños. Para tener éxito, edtech debe estar al servicio de la enseñanza, no al revés.

Bajen los lápices

El modelo convencional de escolarización surgió en Prusia en el siglo XVIII. Hasta ahora, las alternativas no han podido enseñar tan eficientemente a tantos niños. Las aulas, los grupos jerárquicosetáreos, los planes de estudios estandarizados y los horarios fijos, siguen siendo la norma para la mayoría de los casi 1,500 millones de escolares del mundo.

Demasiados no alcanzan su potencial. En los países pobres sólo una cuarta parte de los alumnos de secundaria adquieren al menos un conocimiento básico de matemáticas, lectura y ciencias. Incluso en los países más ricos de la OCDE, aproximadamente el 30% de los adolescentes no alcanzan la competencia en al menos uno de estos temas.

Esa participación se ha mantenido casi sin cambios durante los últimos 15 años, durante los cuales se han gastado miles de millones en informática en las escuelas. Para el año 2012, había una computadora por cada dos alumnos en varios países ricos. Australia tenía más computadoras que alumnos. Mal manejados, los dispositivos pueden distraer a los alumnos. Un estudio portugués de 2010 encontró que las escuelas con banda ancha lenta y la prohibición de sitios web como YouTube tenían mejores resultados que los de alta tecnología.

Lo que importa es cómo se utiliza edtech. Una manera que puede ayudar es a través de instrucciones a medida. Desde que Felipe II de Macedonia contrató a Aristóteles para preparar a su hijo Alexander para la grandeza, los padres ricos han pagado a tutores para sus hijos. Los reformadores de São Paulo a Estocolmo consideran que edtech puede brindar atención individualizada al alcance de todos los alumnos. Las escuelas americanas están adoptando el modelo más fácilmente. Un tercio de los alumnos se encuentran en un distrito escolar que se ha comprometido a introducir un “aprendizaje digital personalizado”. Los métodos de grupos como Summit PublicSchools, cuyo software fue escrito por los ingenieros de Facebook, están siendo copiados por cientos de escuelas.

En la India, donde casi la mitad de los niños abandonan la escuela primaria sin ser capaces de leer un texto simple, gran parte del plan de estudios es incomprensible para muchos alumnos. El software “adaptativo”, como Mindspark, puede resolver lo que un niño sabe y plantear las preguntas en concordancia a ello. Un artículo reciente encontró que los niños indios que usaban Mindspark después de la escuela lograron algunos de los mayores avances en matemáticas y lectura de cualquier estudio de educación en países pobres.

Otra forma en que edtech puede ayudar al aprendizaje es haciendo que las escuelas sean más productivas. En California, las escuelas están usando software para revisar el modelo convencional. En lugar de libros de texto, los alumnos tienen “listas de reproducción” (playlists), que utilizan para acceder a las lecciones en línea y tomar pruebas. El software evalúa el progreso de los niños, reduciendo la carga laboral los profesores y dándoles una visión de sus alumnos. El tiempo ahorrado por los maestros les permite realizar otras tareas, como el fomento de las habilidades sociales de los alumnos o la enseñanza individualizada. Un estudio en 2015 sugirió que los niños que adoptaron este modelo en los primeros de la escuela obtuvieron mejores resultados en las pruebas que sus compañeros en otras escuelas.

Prestando atención al fondo de la clase

Tal innovación es bienvenida. Pero aprovechar al máximo edtech significa hacer varias cosas bien. En primer lugar, el “aprendizaje personalizado” debe seguir las pruebas sobre cómo aprenden los niños. No debe ser una excusa para revivir ideas pseudocientíficas como “estilos de aprendizaje”: la teoría de que cada niño tiene una forma particular de recibir información. Tales estudios absurdos conducen a esquemas como BrainGym, un programa de “cinesiología educativa” una vez respaldado por el gobierno británico, que afirmaba que algunos alumnos debían estirarse, doblarse y emitir un “bostezo de energía” mientras hacían sus sumas.

Una falsedad menos importante es que la tecnología significa que los niños no necesitan aprender hechos o aprender de un maestro, sino que pueden usar Google. Algunos educadores van más allá, argumentando que los hechos se interponen en el camino de habilidades como la creatividad y el pensamiento crítico. El opuesto es verdad. Una memoria repleta de conocimientos potencia esas habilidades. William Shakespeare fue entrenado en frases en latín y reglas gramaticales y, sin embargo, escribió algunas obras decentes. En 2015 un vasto estudio de 1,200 meta-análisis de la educación encontró que, de las 20 maneras más eficaces de impulsar el aprendizaje, casi todos confiaban en el oficio de un profesor.

El segundo imperativo es asegurarse de que edtechreduzca, y no aumente, las desigualdades en la educación. Aquí hay motivos de optimismo. Algunas de las escuelas pioneras son privadas en Silicon Valley. Pero muchas más están dirigidas por grupos de escuelas chárter que enseñan principalmente a alumnos pobres, como Rocket ship y Achieve ment First o Summit, donde el 99% de los estudiantes graduados van a la universidad y los rezagados hacen el mayor progreso en comparación con sus compañeros en clases normales. Un patrón similar se puede observar fuera de EEUU. En estudios de edtech en India por J-PAL, un grupo de investigación, los mayores beneficiarios son los niños que usan software para recibir educación correctiva.

En tercer lugar, el potencial para edtech se realizará sólo si los profesores lo aceptan. Tienen razón al pedir evidencia de que los productos funcionen. Pero el escepticismo no debe convertirse en ludismo. Un buen modelo es São Paulo, donde los maestros han acogido a Geekie, una empresa de software adaptable, en las escuelas públicas.

En 1984 Skinner llamó a la oposición a la tecnología la “vergüenza” de la educación. Teniendo en cuenta lo que edtech promete hoy, una mentalidad cerrada no tiene lugar en el aulaLampadia