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El aprendizaje nacional sobre la izquierda

El aprendizaje nacional sobre la izquierda

Jaime de Althaus
Para Lampadia

Las revelaciones acerca de las gestiones nocturnas el presidente Castillo y la debilidad de sus explicaciones, sumadas a los hallazgos previos relacionados al ex secretario de Palacio, han generado la sensación de que nos vamos acercando al “momento vacador”. Suele ocurrir en este tipo de circunstancias que los hechos adquieren velocidad propia y se precipitan hasta el desenlace final. 

Sería bueno, sin embargo, tratar de regular la velocidad del proceso. Si alguna virtud ha tenido el gobierno de Pedro Castillo, es que ha sido un curso acelerado de capacitación nacional sobre la naturaleza y consecuencias de un gobierno de izquierda. Una verdadera escuela acerca de lo que representa la izquierda en el poder.

Los peruanos estamos aprendiendo que un gobierno de izquierda: 

  • sube el costo de vida porque siembra incertidumbre acerca de la seguridad jurídica y las reglas de juego; 

  • distribuye bonos, dádivas y toda clase de subsidios para generar apoyo político en lugar de asegurar condiciones a la inversión privada para generar empleo e ingresos;

  • destruye las reformas modernizadoras y meritocráticas que habíamos logrado con gran esfuerzo avanzar, solo para regalar privilegios clientelistas para sus fines políticos; 

  • procura darle más poder a un Estado que no funciona solo para repartir puestos entre amigos y partidarios incompetentes o prontuariados o para hacer negocios turbios; 

  • carece de cuadros y profesionales calificados; 

  • muestra cómo se contradicen y acuchillan entre ellos; 

  • transforma el crecimiento de 7 u 8% que tendríamos el próximo año por el precio de los minerales, en uno de apenas 1 o 2%, incrementando la pobreza; 

  • revela que Sendero Luminoso todavía existe y tiene planes muy claros; 

  • pretende intervenir en los ascensos de las fuerzas armadas para subordinarlas a un proyecto político que incluye una Asamblea Constituyente para perpetuarse en el poder, suprimir la democracia y estatizar parte de la economía. 

Ese aprendizaje tiene que terminar de ser absorbido por la sociedad entera para que, allí si, la vacancia, fundamentada en causales irrefutables, sobrevenga como el resultado de una demanda profunda y generalizada. 

En ese sentido, habría que seguir poniendo énfasis no en el clamor de “vacancia ya” sino en la demostración de los hechos que puedan sustentarla legítimamente. De lo contrario, un grito de vacancia demasiado fuerte en este momento, motejado de golpismo, puede distorsionar y enturbiar un proceso de concientización que puede tener efectos profilácticos de largo plazo. Lampadia

 



Ley del Cine y Conceptos Económicos

Camilo Ferreira
Centro Wiñaq
Para Lampadia

La posible aprobación de la Ley del Cine por parte del Congreso de la República, en segunda instancia, sería otra ocasión más en la que el parlamento legisla en contra de los intereses de la ciudadanía y de la racionalidad económica.

El 8 de mayo el Pleno del Congreso aprobó en primera instancia la llamada “Ley del Cine”; la misma que tiene entre sus componentes el asignar un monto mínimo de 6,000 UIT’s (25.2 millones de soles) anuales en subsidios a la producción cinematográfica nacional. De ese monto, un 40% estaría destinado exclusivamente a la producción de filmes fuera de Lima.

A primera vista, destinar mayores fondos al cine nacional es una muestra de aprecio por la cultura en general y la cultura peruana en particular. Por otro lado, resulta muy fácil caracterizar a quienes se oponen a semejante propuesta como personas incapaces de apreciar el valor de la cultura.

Sin embargo, el actual proyecto de la Ley del Cine y los argumentos con los que se le apoya son un clarísimo ejemplo de las consecuencias de pasar por alto algunos conceptos básicos de economía. A continuación, evaluaremos el proyecto de ley en función de algunos de estos conceptos.

Costo de Oportunidad: Consiste en el mejor uso alternativo de unos recursos. Es aquello a lo que renunciamos a cambio de obtener algo. Cuando pensamos en 25 millones de soles es fácil pensar que el arte vale más que el dinero y que por lo tanto si uno valora la cultura no debería tener reparos a la Ley de Cine. Sin embargo, los fondos públicos podrían ser asignados a usos alternativos con efectos sociales definidos. En nuestro país, cerca del 27% de la población diagnosticada con diabetes no recibe tratamiento[i]. Una hemodiálisis cuesta en promedio 350 soles y se necesitan 3 sesiones semanales de por vida por paciente, costo imposible de asumir para la población de bajos recursos. Los centros de salud públicos que ofrecen el servicio gratuito a sus asegurados no cuentan con equipos suficientes y en el área rural es esta dificultad se incrementa dado que los pacientes tienen que cubrir grandes distancias para trasladarse hasta la ciudad más cercana con el hospital con el equipamiento necesario para el tratamiento.  Equipar a un hospital con 29 máquinas de hemodiálisis, cuesta alrededor de 1millón y medio de soles[ii], monto que contrasta los 25 millones de soles que se destinarían al Cine Peruano hay 25 millones menos en atención medica para población de bajos recursos.  Algunos fallecimientos y miles de días de sufrimiento podrían evitarse si este dinero se asignara a la salud de los más pobres.

Una operación de una hernia puede costar 2500 soles mientras que la película peruana “Encadenados” costo a los contribuyentes peruanos 440mil[iii] soles y fue vista, en el cine, por cerca de 1500 personas, al estado peruano le costó unos 290 soles cada espectador de esta película.  Con ello se pudo financiar las operaciones quirúrgicas de las 176 personas que han pasado por agónicos dolores físicos a cambio que 1500 personas puedan disfrutar de semejante filme.

Valor Subjetivo: Se dice que “La cultura es invaluable” pero la verdad es que sí tiene un valor, si el mismo fuera infinito la totalidad de la sociedad se dedicaría a su producción y consumo. Pero ello no se da en ninguna sociedad del mundo. El valor de bienes tales como un filme no es intrínseco al filme sino a los efectos que tenga sobre quienes lo observan. El valor de los bienes no proviene del trabajo detrás del mismo (como creían equivocadamente los marxistas con su teoría del valor trabajo). Más bien el valor de un bien proviene de la apreciación subjetiva de quienes lo consumen. El valor de las películas peruanas financiadas por el estado es claramente reducido. El año 2015 el Estado Peruano repartió 1,740,000.00 soles para el financiamiento de 7 filmes los cuales tuvieron una taquilla de 728,511.00 soles es decir solo un 58% del costo de la producción. Los consumidores peruanos no consideran que estas sean películas que le generen un valor subjetivo que amerite el costo en tiempo y dinero para ir a verlas.

Mientras que las elites culturales consideran como valiosas películas como “Magallanes” (Dirigida por el actual presidente del Concejo de Ministros Salvador del Solar) la misma tuvo una taquilla de 84,000 soles que hay que comparar con los 630,000 soles recaudados por el película de “La Paisana Jacinta”. Es claro que hubo más personas dispuestas a pagar por “La Paisana Jacinta” que por “Magallanes” el que se considere a la segunda más merecedora de ayuda estatal que la primera surge de la tendencia de las elites a considerar como superiores los bienes culturales que ellos consumen por sobre los que preferidos por las mayorías.

Gasto Publico Regresivo: Se considera como regresivo aquel gasto público que tras ser realizado acrecienta la desigualdad económica en la población. Por el contrario, un gasto público se considera progresivo cuando disminuye la desigualdad. Teniendo esto en consideración hay que reflexionar sobre si el tipo de gasto público propiciado por la Ley del Cine se trata de un gasto público progresivo o regresivo.

El ingreso promedio de un trabajador peruano, hacia el 2018 según el INEI, es de 1,600 soles mensuales[iv].  Sin embargo, los ingresos de los trabajadores de la industria del cine superan en general este monto, por ello los tributos que son extraídos a los peruanos promedio y asignados a la realización de filmes terminan en los bolsillos de actores, guionistas, diseñadores gráficos, etc. Los cuales generalmente tienen ingresos mayores al promedio nacional. Con ello se tiene una influencia regresiva para la distribución de ingresos. Este efecto regresivo se ve ampliado cuando se considera que las películas financiadas por el Estado peruano tienden a ser consumidas por la Lima Moderna donde justamente se concentra la población de mayores ingresos, paradójicamente el Estado Peruano se dedica de esta manera a subsidiar los gustos culturales de la minoría más rica del país.

Problema de Agente-Principal: Las situaciones de agente-principal se dan en aquellos casos en los que un actor “el Principal” delega en otro “el Agente” la responsabilidad realizar acciones que resultan en beneficio del principal. Un ejemplo muy típico de este tipo de situación es la que se da entre los dueños de una empresa y el Gerente General de la misma. Los problemas de Agente-Principal se dan por las diferencias entre los intereses del Agente y los del Principal. En el caso del Estado esta clase de problema se da cuando los recursos se asignan no en función de los intereses del Principal (El Estado y la ciudadanía) sino hacia los intereses del Agente (la persona delegada por el Estado para asignar estos recursos), la corrupción es la manifestación más llamativa de este problema en el sector público, pero no la única.

Se supone que los recursos disponibles por la Ley de Cine serán destinados a producciones audiovisuales de alta calidad que ayuden al desarrollo cultural del país. Sin embargo, estos intereses del Principal no tienen por qué ser seguidos por el Agente que es el que asigna en la práctica estos recursos. Un caso ejemplificado de esto es “Hija de la Laguna”, documental que costo 270,000 soles a los contribuyentes y tuvo 122,000 de taquilla y que se trata de una clara pieza de aburrida propaganda anti-minera[v]. En la justificación de los jueces respecto a porque financiaron la realización de “Hija de la Laguna” los mismos afirman:

“Tomando en cuenta que es un ensamblaje preliminar y siendo evidente que al proyecto le falta considerable trabajo de edición para encontrar el hilo conductor que unifique sus diferentes subtramas, el jurado la premia por ser necesaria y urgente, no solo en un contexto peruano, sino global.”

Es decir, a pesar de ser una obra de una precaria calidad artística y técnica, el jurado decidió que la película se realice porque la misma coincide con los intereses ideológicos del jurado, el cual sería el “Agente” en este contexto. Ello mientras que el documental se dedica a deslegitimar las inversiones extractivas de las que en buena medida depende la base tributaria con la que se subsidio este y otros filmes. Este caso nos muestra como funcionarios públicos, aun cuando no guiados por la corrupción, canalizan los recursos públicos hacia sus particulares intereses ideológicos.

De lo expuesto anteriormente, se sigue que la aprobación de la Ley del Cine seria otro de los muchos casos en los que las falacias económicas y la demagogia se imponen sobre un uso óptimo de los escasos recursos de los que dispone el Estado. Lampadia




Una revolución de la asistencia social

Un gran problema de muchos gobiernos es que no logran desarrollar o adaptar eficazmente los sistemas de protección social para reducir la desigualdad o apoyar eficientemente a los más pobres. Actualmente, se ha desarrollado el interés por las rentas básicas universales, un pago que el gobierno hace a los ciudadanos del país de manera gratuita e incondicional. En el caso de los países más ricos, esto responde al impacto en el empleo de la automatización y la robótica. En la India, se plantea como un mecanismo más eficaz y menos corrupto.

¿No más colas para uno y otro subsidio?

En India existen más de 950 programas sociales a nivel nacional, más los regionales, los más grandes se dan como subvención de alimentos y fertilizantes. El verdadero problema es que la profusión de subsidios ineficaces, plagados de corrupción y manipulados políticamente, han dejado a más de 350 millones de personas, alrededor del 30% de la población, sumida en la pobreza, incluso después de dos décadas de alto crecimiento económico.

Esto se debe a que el actual sistema de bienestar de la India es muy ineficiente. El gobierno tiene grandes problemas con el almacenaje de granos, por ejemplo, y continuamente se publican titulares con historias de comida que se pudre en los almacenes. El Estado tampoco es eficiente en identificar quién debe obtener este apoyo ni asegurar que aquellos que deben recibirlo, lo consigan. Según un reciente artículo de The Economist (compartido y traducido líneas abajo), en la India “más del 35% del 1% más rico de los indios se beneficia de alimentos subsidiados a los que no tienen derecho. Peor aún, al 27% de la quinta parte más pobre de la población se les niega su derecho a recibirlo”.

El consejero económico principal del Gobierno indio, Arvind Subramanian (que estuvo en Lima en ocasión de la reunión del FMI y del BM el 2015), afirma que uno de los objetivos de este programa es solucionar las trabas burocráticas que impiden que los ciudadanos  reciban sus dotaciones: “El proceso no puede ser más sencillo: los beneficiarios recibirán el dinero directamente en sus cuentas y podrán sacarlo cuando quieran, evitando las trabas burocráticas”.

Al adoptar el sistema más eficiente, se puede aliviar más pobreza por el mismo costo o, por supuesto, aliviar el mismo importe a un costo menor. Según comento Subramanian, “Es una idea muy simple. Se basa en tres principios: universalidad (la reciben todos), incondicionalidad (como saben no hay que hacer algo para recibirla) y acción (la reciben en efectivo). Pienso que es una idea nueva muy radical”. Es evidente que estos criterios corrigen las desviaciones de los programas tradicionales que caen en el ruleteo político, desperdicios y corrupción abierta. Una muy interesante iniciativa que debiéramos mirar de cerca, especialmente desde el MIDIS y el MEF.

Finlandia también acaba de lanzar un plan piloto para dar a los desempleados dinero en efectivo en lugar de otro tipo de beneficios. Ver en Lampadia: ¿Renta básica universal para un mundo sin empleos?

Los resultados todavía están por verse. De ser exitoso, podría ser un modelo a seguir para los demás países en vías de desarrollo que todavía mantienen programas de apoyo social con subvenciones de todo tipo. Esperamos que esta tendencia continúe y cree un sistema de bienestar más eficiente y mejor direccionado para lograr mayores beneficios a la población. Lampadia

Subvenciones a la hoguera

India debate el caso de una renta básica universal

India debe reemplazar su gran portafolio de pagos de asistencia social por un único pago

The Economist

4 de febrero de 2017

Traducido y glosado por Lampadia

Una de las muchas indignidades asociadas con ser pobre en la India es navegar entre la gran cantidad de programas de bienestar que mantiene el país. Sólo el gobierno central tiene 950; además, los estados operan muchos más. Algunos son grandes, como los que distribuyen alimentos y fertilizantes subvencionados. Muchos son poco más que una excusa para que los ministros del gobierno se tomen una foto.

Esta semana, el gobierno indio propuso la idea de reemplazar la mayoría de estos regímenes con un “ingreso básico universal” (UBI, por sus siglas en inglés), un pago incondicional en efectivo que podría ser desembolsado no sólo a los pobres, sino a todos. En los países ricos, la UBI se plantea como una posible respuesta a un mundo en el que la inteligencia artificial y la automatización sacan a un gran número de personas de su trabajo. Pero, a menos que la tecnología destruya puestos de trabajo en una escala sin precedentes y no cree ninguno en su lugar, el caso para tal esquema es prematuro. Las redes funcionales de seguridad social e instrumentos como los créditos fiscales permiten dirigir dinero a los necesitados en estos países. En la India, a pesar de sus dificultades prácticas, la idea tiene una lógica diferente y merece una audiencia más comprensiva.

Por un lado, un poco de dinero recorrería un largo camino para los pobres de la India. Más de una quinta parte de su población vive por debajo de la línea de pobreza. El esquema esbozado esta semana por el asesor económico principal del gobierno indio, Arvind Subramanian, reduciría esa cifra a menos del 0.5% transfiriendo alrededor de US$ 9 al mes a todos los indios adultos. Si se repartiera a todos, eso costaría alrededor del 6-7% del PBI; los 950 esquemas de bienestar absorben el 5% del PBI.

Dar dinero a la gente sería mucho mejor que el sistema actual de repartir medidas de bienestar en especies. La plétora de esquemas que existen para que los indios reclamen alimentos subsidiados, combustible, gas, electricidad y así sucesivamente son ineficientes y corruptos. Los beneficiarios están a la merced de funcionarios venales que pueden forzarlos a aceptar menos de lo que deberían. Los pagos en especie se basan en la suposición paternalista de que los indios pobres son incapaces de tomar decisiones racionales de gasto. Un pequeño juicio en el estado de Madhya Pradesh desacreditó la noción de que una UBI sería desperdiciada en alcohol y juegos de azar.

La idea de incluir a los plutócratas de la India es un obstáculo en el camino. El documento del gobierno sobre la UBI no deja clara la parte “universal”, lo que sugiere que una cuarta parte de la población debe ser excluida de alguna manera para hacer el plan más asequible. Pero medir quién es pobre y quién no lo es ha demostrado estar más allá de la capacidad de las autoridades indias repetidas veces. Más del 35% del 1% más rico de los indios se beneficia de alimentos subsidiados a los que no tienen derecho. Peor aún, al 27% de la quinta parte más pobre de la población se les niega su derecho a recibirlo.

Las cuestiones de la asequibilidad serían menos importantes si las autoridades indias recaudaran más impuestos: los ingresos del gobierno central representan un escaso 11% del PBI. Y un beneficio universal puede operar mejor si la clase media tuviera interés en asegurarse de que funcionase bien.

Extrañemos al robot

Incluso los fans de la idea aceptan que hay problemas prácticos. La acreditación de efectivo a las cuentas bancarias de cientos de millones de indios es técnicamente factible gracias a Aadhaar, un esquema de identificación digital que cubre al 99% de los adultos. Pero en ausencia de una densa red bancaria, especialmente en las zonas rurales, muchos indios pobres podrían tener dificultades para acceder al dinero. La capacidad del estado de la India para gestionar la transición a un solo pago de bienestar también es cuestionable, para decirlo amablemente. Existe un riesgo real de que las UBI complementen los programas de bienestar, en lugar de reemplazarlos. Totas estas son razones para no saltar a ciegas en dirección al UBI, pero el programa sigue teniendo grandes argumentos a favor de ser un programa fuerte que ayudaría a la gente más pobre del mundo. Lampadia




Argentina: La dura y larga salida del abismo populista

Argentina: La dura y larga salida del abismo populista

El nuevo presidente de Argentina, Mauricio Macri, se ha movido a un ritmo acelerado para recuperar al país de los doce años de políticas económicas y sociales equivocadas que implantaron los gobiernos de los Kirchner, los acólitos del socialismo del siglo XXI y amigos del ALBA, del nefasto Hugo Chávez. Argentina, fiel a su larga maldición del populismo ‘institucionalizado’ hace 64 años por Perón (su primer gobierno fue del 1952 al 1955), volvió a caer en manos de irresponsables que continuaron llevando al país desde una situación expectante, con un PBI pc equivalente al 71.6% del de EEUU en 1913, a uno que solo equivaldría al 19.3% en el 2010.

De entrada, Macri eliminó los impuestos a la exportación (que llevaron a que Uruguay exportara más carne que Argentina) y devaluó el peso en un 30% con respecto al dólar (el nivel del mercado negro). El objetivo es claro: devolverle la confianza a los inversores extranjeros y promover que los argentinos traigan de vuelta los fondos que mantienen fuera del país.

Si bien se espera que las reformas fiscales y una moneda más débil beneficien las exportaciones del país, también traerá ciertos problemas, consecuencia inevitable de los indispensables ajustes. La depreciación de la moneda está aumentando la inflación, la cual cerró el año pasado en 27% según el FMI. Standard & Poor’s estima una inflación de 35% para fines de este año

Si los salarios reales no se mantienen al día con el aumento de los precios al consumidor, un peso más débil dañará el consumo privado, el cual, a su vez, afectará negativamente el crecimiento. Bajo la administración de Kirchner, el crecimiento fue impulsado artificialmente por el gasto público y políticas populistas, tales como subsidios generalizados al consumo de  energía. Macri está intentando cambiar los motores del crecimiento económico mediante la atracción de más inversión. También está avanzando con la revisión de los subsidios a los servicios públicos, tratando de mantenerlos para los más pobres, con el fin de reducir el déficit presupuestario. Los analistas de JP Morgan comentan que:

“Para reequilibrar el equilibrio monetario y fiscal y apoyar el crecimiento en el mediano plazo, será necesario que la economía sufra una severa devaluación que empujará a la economía de vuelta a la recesión en el corto plazo. La resolución de estos problemas se destaca como fundamental para aumentar la inversión y poner en marcha el crecimiento”. 

Por otra parte, el gobierno espera llegar a un acuerdo con los fondos especulativos por la restructuración (quita) de la deuda pública. Macri envió a sus negociadores a EEUU para proponer un pago de US$ 6,500 millones de los US$ 9,000 que reclaman. Dos de los seis acreedores principales han aceptado. Ese dinero saldrá de la emisión de nuevos bonos.

La lógica de la propuesta es contundente: Actualmente Argentina no tiene acceso a los mercados de deuda tradicionales y debe financiarse a tasas muy costosas. Una vez hecho el arreglo con los acreedores belicosos, podrán bajar el costo del financiamiento a tal punto que el menor pago de intereses compense el costo del arreglo. Los anuncios de Macri en el Foro Económico Mundial en Davos (evento al que nunca asistieron los Kirchner), ofreciendo volver a auditar las cuentas públicas, ha permitido que EEUU de su consentimiento para que Argentina reciba créditos multilaterales de instituciones como el Banco Mundial o el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

Además, Macri ha disminuido o eliminado la mayoría de las barreras a la agroexportación, recurso clave de la economía del país. Este fue el caso de los cereales como el trigo o carne de res. Los productores de soja, los principales exportadores del país, han visto una reducción de las tarifas fiscales de 30 a 35% en dos semanas: una gran ayuda para una economía en desaceleración.

Luego de más de una década de dominio de los Kirchner, la agenda de reforma de Macri es una gran ayuda para la economía argentina que, como Venezuela, desperdició los mejores años del súper ciclo de precios de los commodities, al punto que en vez de haberse enriquecido, terminó empobrecido, endeudado y con la imperiosa necesidad de llevar a cabo dolorosos ajustes.

Además, Argentina ha estado sumida en un clima de corrupción generalizada y represión económica. Esto produjo disminuciones muy pronunciadas de los 10 indicadores de libertad económica del país, incluyendo el control del gasto público, la libertad laboral y la libertad de empresa. Gravemente obstaculizada por la interferencia del Estado, la economía formal se estancó, mientras crecía la actividad de la economía negra. 

A finales de 2015, las políticas imprudentes de los Kirchner ya habían afectado gravemente el crecimiento económico del país. Las cifras oficiales del PBI no se publican, pero el FMI indica que su economía se está contrayendo.

Si Mauricio Macri promueve el crecimiento económico a largo plazo, desmantela las políticas populistas de los Kirchner, fomenta la estabilidad, la inversión extranjera y la competencia, podrá aspirar a cambiar la suerte de Argentina y corregir un descalabro de más de cien años que ha hecho que los argentinos pierdan la disciplina y estamina necesarias para tomar el espacio del país exitoso que les robó el populismo. Esperemos que siga así y que logre corregir el curso de una de las economías más grandes de Latinoamérica. Lampadia

 

 

 




Mauricio Macri gana una elección histórica

Mauricio Macri gana una elección histórica

El candidato liberal de la oposición, Mauricio Macri ganó las elecciones presidenciales de Argentina el domingo pasado después de prometer un programa de reformas para impulsar mayor inversión y un manejo racional de la economía. El ente electoral argentino confirmó que Macri obtuvo el 51.4% de los votos y Scioli 48.6%, logrando una ventaja de 700,000 mil votos. “Este es el comienzo de una nueva era que nos tiene que llevar hacia las oportunidades que necesitamos para crecer y progresar”, afirmó Macri a sus partidarios en su cuartel general.

En una señal de cansancio por parte de los argentinos con una economía debilitada, aumento de la delincuencia y desborde de la corrupción, Macri entró en la segunda vuelta, una elección que le otorgaba el favoritismo a Scioli, el candidato gobiernista, después de una campaña sucia que pretendió aterrorizar a los argentinos. (Ver en Lampadia: Sorpresivas elecciones argentinas)

Macri promete recuperar la tercera economía más grande de América Latina en línea con el mercado libre después de 12 años de kirchnerismo de izquierda bajo el mandato de Cristina Fernández y su difunto esposo y antecesor, Néstor Kirchner.

Scioli, en cambio, no logró ganarse a los votantes a pesar de intentar esconderse de la sombra de Fernández durante la campaña electoral e intentar tomar un papel más moderado. Su charla de mantener los programas de bienestar social y las generosas subvenciones a la energía (“yo les garantizo los subsidios” dijo en el último debate electoral), pero sin ofrecer cambios en los controles de capital y comerciales que han estancado la economía argentina, fueron los principales motivos por los que no obtuvo la victoria. “Scioli no logró diferenciarse de Fernández y, por lo tanto, la gente dejó de verlo como un cambio y se acercó a Macri”, dijo el analista político Mariel Fornoni.

El cambio en el poder en la Argentina puede reverberar a través de América del Sur, donde otros gobiernos de izquierda, como Venezuela y Brasil, también sufren de acusaciones de mala gestión de gobierno y de inmensos escándalos de corrupción. En Argentina, el asesinato del fiscal Alberto Nisman y las acusaciones a la actual presidenta, Cristina Fernández y su familia, están a flor de piel.

“Los inversores extranjeros lograron cumplir sus deseos. La victoria de Macri señala una ruptura decisiva del legado de Kirchner-Fernández de confrontación con los acreedores y de una mala gestión económica “, dijo el analista de mercados emergentes, Gary Kleiman.

El alcalde saliente de Buenos Aires y futuro presidente de Argentina afrontará ahora duras batallas como líder del país, empezando por lo económico. Ha repetido en más de una ocasión que no podía ampliar el detalle de sus planes económicos hasta que fuera capaz de determinar exactamente cuán crítica es la situación (la actual administración ha sido acusada repetidamente de ocultar las estadísticas económicas como la tasa de inflación o exactamente cuántas reservas líquidas se encuentran en las arcas del Banco Central).

La corrección de estas anomalías y la introducción de medidas para restablecer la confianza internacional en la economía argentina serán, probablemente, algunas de las primeras medidas de Mauricio Macri cuando asuma la presidencia el 10 de diciembre. Por ejemplo, en lugar de nombrar a un solo ministro de economía, ha anunciado la formación de un equipo de no menos de seis ministros responsables.

Otro tema importante que deberá afrontar es en lo social. No se puede olvidar que el 48.6% de la población votó por Scioli, por lo que mientas que muchos votaron por un clima económico más liberal, otros votaron por una administración que proteja los programas asistencialistas introducidos por el gobierno de los Kirchner.

Al respecto, Macri ha prometido ser un “presidente de todos los argentinos”, a sabiendas de que los poderosos sindicatos y movimientos juveniles peronistas saldrán a las calles si la “reforma” económica resulta en cortes radicales. Por lo tanto, irá reduciendo lentamente las subvenciones a las tarifas de electricidad y gas. Afirma que: “Las corregiré gradualmente. Mi tarea es cuidar a la gente. Voy a cuidar los subsidios para aquellos que los necesitan. Me comprometí a un sistema de tarifas justo”.

Según un reciente artículo publicado en El País de España, “el plan de Macri es quitar los subsidios para la clase media y alta y dejarlos para los más pobres. En la actualidad, el 93% de los usuarios de Buenos Aires recibe la subvención a la electricidad, incluyendo a ricos y pobres. La luz en la capital cuesta cinco veces menos que en Córdoba, la segunda ciudad más poblada de Argentina, un país en el que el 21% es pobre”.

Macri tiene muchos retos por delante, sobre todo porque tiene que gobernar una nación dividida. El PRO y sus aliados siguen siendo una minoría en el Congreso, donde el partido ‘Frente para la Victoria’  (alianza electoral argentina de orientación peronista-kirchnerista) sigue siendo fuerte. En el Senado todavía tiene la mayoría. Tendrá que diseñar una estrategia parlamentaria para mantener la alianza Cambiemos intacta frente a la presión de la oposición.

Sin embargo, la victoria de Macri marca un cambio decisivo hacia el centro-derecha y es probable que tenga repercusiones a través de los gobiernos de izquierda de Latinoamérica. Por ejemplo ha anunciado que pedirá el retiro de Venezuela del Mercosur. En su discurso de agradecimiento por la victoria hizo una excelente presentación, poco política y muy de estadista. Abrió los brazos a todos los argentinos, dijo que no era un mago con las soluciones para todos los problemas de Argentina e invitó a todos a poner el hombro para recuperar la salud del país. Tuvo una excelente frase que describe la filosofía de lo que será su gobierno: “Mi tarea es ayudar a todos los argentinos a encontrar su camino de prosperidad”. Lampadia

 

 




Sorpresivas elecciones argentinas

Sorpresivas elecciones argentinas

El domingo pasado, los argentinos votaron para elegir a un nuevo presidente, después de doce años de ser conducidos por Néstor Kirchner y luego por su viuda, Cristina Fernández de Kirchner. Hubo tres candidatos en la carrera: Daniel Scioli, gobernador de la provincia de Buenos Aires, del peronismo kircheriano; el alcalde de la ciudad de Buenos Aires, Mauricio Macri, del partido Cambiemos; y el congresista Sergio Massa, Unidos por una Nueva Alternativa.

El resultado sorprendió a muchos argentinos. Con 96% de los votos escrutados, Scioli obtuvo una ventaja marginal con el 36.7% de los votos, mientras que Macri obtuvo 34.5%. Sergio Massa, un ex aliado que se volvió rival de Cristina Fernández de Kirchner, llegó en un distante, pero importante tercer lugar, con el 21.3% de los votos.

Macri celebrando después de las elecciones

Por lo tanto habrá una histórica segunda vuelta. Y es que el único precedente de una segunda vuelta fue en 2003, pero no se completó ya que Carlos Menem se retiró, entregando la presidencia a Néstor Kirchner.

Es importante notar que el sistema electoral de doble vuelta o ballottage funciona de manera diferente a lo tradicional en Argentina, hecho a la medida del peronismo para dificultar la emergencia de la oposición. Lo común es que cuando ningún candidato logra mayoría absoluta (50% más un voto) en una elección, la elección se debe definir en un nuevo comicio entre los dos que recibieron más votos, en Argentina no es así, son menos exigentes. Para asegurar la victoria en la primera vuelta, el candidato tendrá que ganar el 45 por ciento de los votos o el 40 por ciento con una ventaja de 10 puntos porcentuales sobre el competidor más cercano. Esta fue una estrategia más del peronismo para mantenerse en el poder y obtener una victoria más fácil.

Sin embargo, aún con esta ventaja en el sistema electoral, el discípulo del kirchnerismo se enfrentará a una reñida segunda vuelta en la que se podría poner fin a lo que se denomina una era en Argentina.

Pero, ¿en qué estado deja la presidenta al país? El largo reinado de los Kirchner se caracterizó por su populismo económico. Desde que la presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, asumió la presidencia en 2007, las políticas de la Argentina se han desplazado más hacia la izquierda y sus consecuencias han sido nefastas.

Durante la última década, Argentina ha desperdiciado el un auge de precios de los commodities (soya) que ha alimentado un crecimiento económico promedio anual de alrededor del 4%, cifra que la presidenta utiliza para defender su mandato. Pero en los últimos cuatro años, la economía se ha ralentizado (tuvo un crecimiento del PBI de sólo el 0.5% el año pasado), para este año se estima un crecimiento mínimo de 0.4% y una cáida de 0.7% el 2016, según el FMI. Las tasas de inflación se encuentran entre las más altas del mundo (las políticas de Fernández que incluyen los subsidios al gas y transporte, además de beneficios para las madres solteras y los periódicos aumentos de las pensiones han contribuido a una mayor inflación) y no todo es tan ideal como al gobierno le gustaría pregonar. 

Se ha destruido la economía, las exportaciones de carne han bajado de un 10% de la oferta global a 2% y ahora son menores que las del pequeño Uruguay. En el camino del desastre hicieron otro perro muerto con la deuda externa y se robaron los fondos de pensiones privados.  

El gobierno ha manipulado las estadísticas; es imposible tener una idea clara acerca de las tasas de pobreza oficiales o de la inflación. La actual presidenta dejará un país en una situación económica desesperada por un grave déficit fiscal, alta inflación y reservas de divisas críticamente bajas. 

Los gestos de la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner durante un discurso en relación con los 
resultados de las elecciones primarias en Buenos Aires, Argentina

Además, el gobierno también está enfrascado en una batalla contra los hedgefunds estadounidenses que están en desacuerdo con la forma en que quieren reestructurar los US$ 100 mil millones de la deuda que incumplieron en 2001, fondos a los que el gobierno denomina como ‘fondos buitres’.

Asimismo, el mandato de Kirchner ha sido engullido por los escándalos de corrupción (empezando por el hijo de los Kirchner) y acusaciones de irregularidades que han erosionado la confianza de los ciudadanos, aunque sigue siendo popular con un gran segmento de la población, cooptada por los programas clientelistas.

El siguiente presidente tendrá que abordar estos problemas si quiere sacar adelante un país con tanto potencial como Argentina. La segunda vuelta dictará si continuará el legado de proteccionismo comercial, falso bienestar social y defensa de las prebendas de las dirigencias obreras con Daniel Scioli, autodenominado ‘centrista’, quien se ha comprometido a mantener el núcleo del “kirchnerismo”. Pero también ha prometido un cambio en el estilo para atraer más inversiones y aumentar la productividad, que parecen palabras huecas.

Los votos de Macri aparecieron casi por arte de magia

La otra opción es el pro-inversión Mauricio Macri, un ex ejecutivo del fútbol que saltó a la fama dirigiendo la mejor temporada del Boca Juniors. Se ha comprometido a poner fin de inmediato a las principales políticas de Cristina Fernández. Macri, actual alcalde de Buenos Aires, es hijo de inmigrantes italianos que lograron dirigir un conglomerado empresarial exitoso. Fue secuestrado por policías corruptos a cambio de un botín y fue entonces cuando decidió dedicarse a la política. Actualmente es el líder de Propuesta Republicana o PRO, un partido nacido tras la crisis de 2001 que unió a políticos de centro-derecha y jóvenes profesionales que antes no habían tenido experiencia en campañas, como un proyecto para renovar la política nacional. Su campaña ha prometido un cambio: el fin de la calamidad económica y las políticas de confrontación que han definido el mandato de los Kirchner.

Ahora solo queda esperar los resultados de la segunda vuelta. Según la primera encuesta publicada sobre la segunda vuelta, Macri ganaría con una ventaja de cuatro puntos (45.6% vs. 41.5%). Scioli ya giró en torno a recuperar el voto peronista que apoyó a Sergio Massa (el tercer puesto). Por su lado, Macri lidera una alianza de partidos no peronistas –Cambiemos-, que incluye a la histórica Unión Cívica Radical, a los liberales de la Coalición Cívica y a su propio grupo, con el fin de hacer un frente electoral común que plante cara al kirchnerismo, que controla buena parte del poder ejecutivo y legislativo en el país. 

El futuro del país está en manos de los argentinos. Mientras tanto, todos lloramos por Argentina. Lampadia

 

 

 




Desarrollo: ¿169 mandamientos? (II)

Desarrollo: ¿169 mandamientos? (II)

El pasado 5 de mayo publicamos la parte (I) de este importante tema, sobre la base del informe de The Economist del 29 de marzo pasado. (Ver en Lampadia: Desarrollo: ¿169 mandamientos? (I))

En él indicamos que el mundo estabaa punto de perder un conjunto sensato de objetivos de desarrollo, en manos de la burocracia de la ONU.

Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) son los sucesores de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM), estos tenían 21 sub-metas con un historial decente. Algunos (como la reducción de la mortalidad materna e infantil) no se podrán alcanzar. Pero otros, como reducir a la mitad la proporción de personas que viven en la pobreza extrema, ya se han logrado. 

En este momento, para los nuevos objetivos hay 169 metas propuestas, agrupadas en 17 categorías.

Los países en desarrollo parecen pensar que mientras más objetivos tengan, más dinero recibirán. Se equivocan.Lo que estosignifica que no hay un buen manejo de prioridades.

En setiembre deben aprobarse los ODS, según The Economist, la lista debería  honrar a Moisés [con sus 10 Mandamientos] y ser podada y dirigida directamente a reducir la pobreza, impulsar la educación (por ejemplo, extender la educación de las niñas en dos años) y mejorar la salud (por ejemplo reduciendo a la mitad la tasa de infección de malaria). 

El número de ODS refleja lo que ocurre cuando un proceso burocrático está fuera de control.

Lo mismo afirmó recientemente un panel internacional de expertos compuesto por dos premios Nobel de economía, el presidente del Consenso de Copenhague y un profesor estadounidense. Las opiniones de este panel fueron reproducidas por El Comercio y están glosadas más abajo.

Ellos afirmaron que si la ONU se centrase en objetivos mundiales para 2030, como cortar la desnutrición infantil oeliminar gradualmente los subsidios a los combustibles fósiles, le obtendría una mejor relación calidad-precio que una lista tan larga y diversa, como la que se postula.

Este importante grupo de expertos estima que las mejores 19 políticas producirían entre US$ 20 a US$ 40 en beneficios por cada dólar gastado, en vez deque se logren menos de US$ 10 en promediopara el total de las 169 metas propuestas.

El panel basó sus conclusiones en documentos de investigación realizados por 82 economistas del Centro del Consenso de Copenhague durante los últimos 18 meses, tratando de evaluar costos vs beneficios.

Si realmente se quiere lograr una verdadera mejoría en el mundo global, es mejor tener metas claras y realistas.

Objetivos de desarrollo inteligentes

Por:

  • Finn Kydland, Premio Nobel y Profesor de la Universidad de California
  • Bjorn Lomborg, Presidente del Copenhagen Consensus Center
  • Tom Schelling, premio Nobel y Profesor de la Universidad de Maryland
  • Nancy Stokey, Profesora de la Universidad de Chicago

Publicado por El Comercio, 11 de mayo 2015 y glosado por Lampadia

(…) Hemos seleccionado los 19 objetivos que nosotros esperamos que produzcan los mayores beneficios. Ser inteligente acerca del gasto podría ser mejor que duplicar o cuadruplicar el presupuesto de ayuda.

(…) Consideremos un par de objetivos que ayudan a las personas directamente a través de beneficios para la salud.

(…) Reducir la malnutrición infantil es otro excelente objetivo.

(…) Los gobiernos de todo el mundo aún subsidian el uso de combustibles fósiles. Cortar estos subsidios reduciría la contaminación y liberaría recursos para inversiones en salud, educación e infraestructura. 

(…) Quizás el problema más importante y amplio que enfrenta el mundo es la pobreza, que aún aflige a miles de millones de personas.

(…) Una mejor nutrición y mejores escuelas ayudan a aliviar la pobreza.

(…) Hay otro objetivo que promete ser aún más eficaz: la reducción de barreras al comercio internacional. El comercio produce beneficios inmediatos mediante la apertura de los mercados, pero también facilita el flujo de ideas y tecnologías, produciendo aún mayores beneficios sobre un horizonte más amplio. 

La elección de buenos objetivos aumentará enormemente los beneficios para las personas de todo el mundo, así como para las generaciones venideras. Los gobiernos deberían renunciar a la gratificación instantánea de prometer todo a todos, y en lugar de eso centrarse en elegir objetivos de desarrollo inteligentes.

Con este segundo artículo al respecto de los ODS, creemos que hemos cubierto adecuadamente el tema, pues, dos instancias muy prestigiosas como The Economist y el grupo de expertos alrededor del Copenhagen Consensus Center, están haciendo advertencias oportunas y sensatas que le dan al Perú la oportunidad de asumir una posición internacional de liderazgo en un tema más importante de lo que parece a simple vista. Lo único que lograría la fijación de objetivos desproporcionados es que pierdan valor y vigencia.

Tomemos entonces la bandera de la sensatez y pongamos al Perú en el sitial de liderazgo que ya ocupamos en la ONU con Don Víctor Andrés Belaunde Diez Canseco. Estudiemos el tema, y en este setiembre próximo, encarguemos nuestra representación a buenos delegados y demos la lucha por evitar un despropósito. Lampadia




Las reformas que transformarán a la India en la tercera economía global

Las reformas que transformarán a la India en la tercera economía global

India es un país de enormes contrastes. En este nación coexiste un triple sistema de desigualdades: de clase, género y casta que impiden que 360 millones de indios salgan de pobreza, como señala el premio nobel de Economía, Amartya Sen. A la vez, acaba de poner un satélite en la órbita de Marte invirtiendo tan solo 60 millones de dólares (una cifra ínfima si se la compara con los presupuestos de la NASA). Este logro se entiende porque es el mayor exportador de conocimiento informático y el principal proveedor de Silicon Valley. Así de paradójico es el Estado que Nerendra Modi gobierna desde hace seis meses y al que empieza a transformar con una serie de medidas audaces, de apertura económica y libre mercado que empiezan a encender la admiración mundial. Bajo el lema “No red tape, only red carpet” para los inversionistas las cosas empiezan a cambiar (ver en Lampadia (L): El cambio de timón (pro mercado) en la India).

Modi llegó al poder de la democracia más grande del mundo prometiendo una revolución que modernice al país (MODIfied India) y lo lleve por la senda del crecimiento. Su PBI del 2012 era de 1.84 billones de dólares lo que lo convierte en la décima economía global. Con sus reformas, espera cumplir las proyecciones de la OECD y el 2050 ocupar el tercer puesto (por debajo de China y los Estado Unidos) elevando el producto a 25,000 billones de dólares. Ese es el reto y allí apunta. 

La nueva política

El primer cambio es en la forma de relacionarse con la población. Ha utilizado las nuevas tecnologías para acercarse a los ciudadanos. Modi cuenta con 25 millones de fans en Facebook y ocho millones de seguidores en Twitter. Pero también ha mostrado su enorme liderazgo con discursos y con la acción política.

Recientemente mostró toda su capacidad como gran comunicador de masas. Eligió el aniversario del nacimiento de Mahatma Gandhi para coger una escoba y relanzar el programa de saneamiento. Aunque para los occidentales este acto puede parecer trivial, en la India no lo es. El Primer Ministro asumió la causa de la limpieza de las ciudades (un problema de saneamiento gravísimo que afecta seriamente la salud de millones de personas) con una convicción y vigor nunca antes visto porque ataca a otro de los grandes males sociales: la intocabilidad y la recolección manual (recoger basura es una tarea que solo le competía a la casta de los intocables).Que un Primer Ministro coja una escoba y barra es más que un gesto político, es el inicio de una transformación social.

En la misma línea de mejorar la salubridad de esta nación, prometió la construcción de 600 millones de baños. En la India el 54% de la población carece de retretes, lo que genera graves problemas. “Nadie me puede reprochar hablar de retretes en el Fuerte Rojo [el histórico lugar donde pronunció su discurso]. Yo vengo de una familia pobre, he conocido la pobreza, la dignidad de los pobres comienza por ahí”, señaló Modi.

En otro gesto brillante, para decretar la desaparición de la Comisión de Planificación (la encargada de establecer las políticas económicas) y demostrar que las reglas del libre mercado empiezan a regir la economía, dio un discurso desde las murallas de la célebre fortaleza roja en las que anunció los cambios que espera.

Dentro de sus medidas económicas, como ya anunciamos anteriormente, están que los barcos solo necesitan sacar una licencia una vez (antes se hacía anualmente) y que ya no se necesita acudir a los notarios para realizar tramites en el Estado. (Ver en L: La visión de país y reformas que el Perú necesita). Aquí presentamos otras reformas:

La reforma laboral

Actualmente, el subcontinente tiene una población de 1,250 millones de habitantes, representa el segundo mayor mercado interno del mundo, solo superado por China (1,350 millones). Modi desea que su país deje de verse como un gran mercado y se convierta en un gran centro manufacturero. “La facilidad para hacer negocios es el requisito primero y principal para convertir a la India en un centro manufacturero mundial”, dijo Modi en Nueva Delhi. Y para ello ha aprobado un paquete que reforma las políticas laborales.

“Las leyes laborales, muchas de las cuales se remontan a la época en que la India era colonia británica, regulan estrictamente la contratación y despido de trabajadores y requieren un enorme papelerío que suele desalentar la contratación de personal nuevo. Con las nuevas normas, se les facilitaría a los trabajadores vincular sus ahorros en Provident Fund -un plan de ahorros del gobierno financiado con las nóminas- con sus cuentas bancarias y transferir los fondos al cambiar de empleo”, señala la prensa. De esta forma, también apoya su campaña que busca bancarizar la India.

Además, los informes de inspecciones de fábricas deberán entrar en un sitio de internet del gobierno a los tres días de ser elaborados, a diferencia de las verificaciones actuales, que según los empresarios son arbitrarias y permiten el acoso por parte de los inspectores.

Con estas reformas, lanzó “Make in India” (Fabrica en India). La idea de industrializar India es el camino escogido para crea empleo. Una urgencia dado que 13 millones de jóvenes se incorporan al mercado laboral cada año. Modi desea convertir a la India en la próxima potencia textil.

Más energía, nada de subsidios

Modi sabe que necesita más energía para conseguir industrializar el país, para ello ha puesto fin a los subsidios al diesel controlados por el gobierno y aumentó los precios del gas natural como parte de los intentos por reforzar la inversión en el sistema energético del país.

El gobierno de la India ha tratado siempre de proteger a los consumidores más pobres mediante el control del precio de los combustibles como el diesel  y el kerosene, pero acosta de un déficit fiscal considerable (US$ 23,000 millones solo el 2013), puesto que importa cerca de 80% de su petróleo. Asimismo ha subido el precio del gas para incentivar nuevas exploraciones.

Además, se está evaluando el ingreso de privados a la explotación de minas de carbón que era un monopolio privado. Modi ha puesto como una de las prioridades de su gobierno reducir los apagones, en su apuesta por revitalizar el crecimiento y para ello necesita energía barata.

Cerrar la brecha en infraestructuras

Modi ha conseguido de China y Japón compromisos de inversión multimillonarios (25 mil millones y 35 mil millones de dólares respectivamente) para construir trenes y carreteras que alivien el déficit de infraestructuras del país.

Digitalizar la india

El Primer Ministro quiero utilizar el potencial digital de su país para modernizar el país. En su primer discurso del Día de la Independencia, cautivó a la juventud al hablar de su sueño de una India digital en 2019. Eso es tener un gobierno electrónico eficiente y funcional, banda ancha para todos, educación por internet, telemedicina y otros. El plan digital de India está destinado a cubrir todo. Para empezar, el gobierno ya está prestando servicios públicos a través de un portal unificado.

Ahora en el portal makeinnidia.com, los empresarios pueden obtener licencias de funcionamiento de sus empresas en 72 horas.

Pero eso no acaba ahí, el gobierno está destinando ingentes recursos para contar con ciudades inteligentes. El plan es construir 100 ciudades inteligentes en la India en los próximos años. Las ciudades inteligentes se definen ampliamente como espacios urbanos que están integradas tecnológicamente, bien planificados y adaptados al medio ambiente. Es un proyecto a largo plazo y bien podrían extenderse durante 10 años o más, según las autoridades. Un modelo flexible APP (asociación público-privada) se está elaborando para concretarlo lo antes posible.

Aunque parezca pronto, las medidas están dando resultados y este año la India retomará el crecimiento, se esperan cifras cercanas al 7%. India surge como la nueva potencia mundial. Una buena noticia para la economía global y un excelente ejemplo de cómo tienen que hacerse las cosas. Lampadia




BOLIVIA… “Entre el discurso y la realidad”

BOLIVIA… “Entre el discurso y la realidad”

Carlos Milla Vidal

La verborrea de un EVO estimulado por su aplastante triunfo electoral, lanza otra vez ataques a los “lacayos del imperialismo”, (Perú Chile, Colombia México) que se han atrevido a hacer la llamada “alianza del Pacífico, traicionando a sus propios pueblos”.  Mira en cambio a sus aliados “hermanos del UNASUR”, que “están  forjando una America verdaderamente libre”.

Esa misma semana, la oficina postal Boliviana lanza una nueva serie de estampillas, con el rostro del “Comandante Chávez, que “Desde el cielo sigue iluminando nuestros caminos”.

En sus discursos con ocasión de la entrega de subsidios escolares a todos los niños de Bolivia, sigue atacando al Fondo monetario internacional.

Ese discurso es definitivamente popular… Sin embargo, a pocas cuadras de Palacio  quemado, un Banco central responsable y moderno sigue rigurosamente la receta que el mismo fondo monetario diera a Víctor Paz Estensoro en su último gobierno (1985-90). El decreto 21060, llevó a Bolivia a acabar con la hiperinflación, varios años antes que Perú. Desde entonces, el peso Boliviano es moneda dura, la inflación ha terminado y hay estabilidad macroeconómica.

El Gobierno de Sanchez de Lozada, pocos años después se dedicó a profundizar muchas reformas, que bajo el mote de “neoliberales” son “rechazadas, pero acatadas.” El Gobierno terminó  con violencia y persecuciones, las reformas quedaron.

 EL POPULISMO DE LOS SUBSIDIOS

Bolivia, continúa con una política de subsidios cuidadosamente diseñada:

  • Todos los niños en edad escolar acuden a las escuelas, acompañados de sus Padres o tutores. Bajo el influjo de una fotografía de EVO, el gran benefactor reciben Cien pesos  ($15.oo) en efectivo del bono “Juancito Pinto”. Ellos decidirán en qué útiles o ropa deberán invertir el dinero sus Padres. Los mayores están fiscalizados por los niños para el buen uso de los fondos.
  • “La renta dignidad”, son 400 pesos ($60.oo) que reciben los mayores de 60 años, hayan o no trabajado en sus vidas… (¿No es esto lo que plantea la Universidad del Pacífico ante el “fracaso de los sistemas previsionales?).
  • El bono “Bartolina Sisa”, es ayuda económica efectiva y atención médica y nutricional preferente a las madres gestantes (algunos dicen… “Incentivo al embarazo”).
  • El gas domiciliario llega por tuberías a muchas zonas urbanas de las principales ciudades. ¿El precio?… SI… el equivalente a los S/.12 soles que nos ofrecieron en Perú, y sirvieron para ganar las elecciones.
  • El combustible (poco más de $2.00 por galón de Diesel), – ¡menos de la mitad que en Perú!, sigue subsidiado, pero Evo anuncia orgulloso que pese a no subir los precios, el subsidio ha bajado en 40%. El GLP no se usa en vehículos, sí el GNV. Y parece que los controles funcionan.

Nos resistimos fuertemente a pensar que los subsidios populistas seguirán funcionando. Los precios internacionales del gas y la soya, no van a durar para siempre. Una caída en éstos puede hacer peligrar este ambiente de “bienestar” que perciben los bolivianos. Sin embargo, por lo visto hasta hoy, la receta populista de Evo, funciona (¡¿?!).

LAS CIFRAS MACRO ECONOMICAS

La economía de Bolivia es mucho más pequeña que la peruana, sin embargo hay algunas cifras sorprendentemente saludables.

El crecimiento del PBI estuvo en 5.2%, el 2012. Ahora cerrará el año en 4% (un punto más que Perú). La inflación anual no pasa del 4%,  y el Producto per cápita  en $2,621 poco mas de la mitad del PBI per cápita Peruano).

La pobreza sigue reduciéndose, sin embargo, la fuerza económica que impulsa el proceso,  no es estrictamente la inversión privada, sino también el subsidio estatal.

 “QUEREMOS INVERSION PRIVADA”, dice Evo, en un contradictorio discurso donde también ataca despiadadamente a las transnacionales. El mensaje es ante una audiencia de pequeños emprendedores de  “El alto”, que reciben apoyo generoso del Estado y la cooperación internacional.

LAS CIUDADES:

Las principales ciudades Bolivianas (La Paz, Cochabamba y Santa Cruz) tienen un ambiente de calidad urbana y habitabilidad.

Las invasiones y tugurizaciones de los terrenos de el alto de hacen algunas décadas, han dado paso a barrios planificados, con servicios públicos, transitabilidad y desarrollo urbano. Los edificios tienen un curioso gusto local, pero están terminados, con los laterales acabados, y están hechos en cumplimiento a reglas urbanas que respetan los retiros, las vías públicas y áreas verdes.

La Paz ha inaugurado un sistema de transporte público, único en el mundo: Un teleférico, que ha cambiado el paisaje urbano y une a los principales centros de la ciudad de La Paz, con las ferias comerciales del alto, que con una población ya cercana a un millón de habitantes es el pujante polo comercial. Los barrios residenciales de las clases media y alta, tienen ahora nuevos habitantes… Los emergentes que interactúan con toda naturalidad con las clases antes dominantes. La paz social es una realidad… Son muchos años sin huelgas ni bloqueos. En efecto creo que podemos afirmar que socialmente Bolivia es el país de America que tiene menos diferencias sociales. La discriminación debe ser mucho más rara entre los bolivianos de todos los colores.

EL ESTADO PLURINACIONAL DE BOLIVIA

Un gobierno que se enfoca en las diferencias y no en la necesidad de tener un País unitario, naturalmente que anda contracorriente. Las múltiples “Naciones”, se empeñan en sentirse únicos y originarios, en claro rechazo al país mestizo que factualmente es Bolivia. Ese parece ser un discurso exitoso.

Sin embargo, en Cochabamba asistimos a un evento que nos hizo pensar que otro mundo es posible: Un colegio secundario Americano, (equivalente al Roosvelt) celebraba la diversidad en la Feria internacional. Más de treinta países (incluida Bolivia y sus Nacionalidades) coexistían entusiastamente en respeto de las diferencias entre comidas de todo el mundo, danzas y exposiciones culturales. Lejos del discurso oficial, ellos sí entienden y actúan en un “mundo global”.

EL DOBLE DISCURSO DE LA COCA:

El uso tradicional de la  hoja de Coca que fue la bandera que sirvió a Evo para alcanzar el poder tiene ahora un peligroso ingrediente.

La línea aérea estatal, (BOA) compite con varias  de iniciativa privada, para los vuelos domésticos. Las  internacionales LAN Y AVIANCA, también están en el mercado, pero no ejercen dominio de mercado.

Los precios son un promedio de $40.00 por un vuelo de 45 minutos, y no hay que tener suerte ni aplicar a promociones. El precio es para todos.

TÚPAC KATARI, el equivalente altiplánico a Túpac Amaru, es un satélite  de tecnología China que está en el espacio asegurando la conectividad. Da servicios de internet,  y servicios varios. La cobertura de internet será pronto universal para todo el territorio, la penetración de celulares equivale a los más avanzados países latinoamericanos, con varios operadores que compiten en cobertura, tecnología y tarifas.

 El cultivo legal es permitido. Allí en las laderas de la selva alta se produce una hoja de mejor calidad, aparente para “hakullar” (chacchar) y las prósperas chacras coqueras ocupan el espacio que antes ocupaban frutales, de haciendas agroindustriales abandonadas; mientras las tierras bajas, también productoras de coca (ilegal) son susceptibles a interdicción. El narcotráfico campea tanto en las zonas de la “coca cultural”, como en los valles bajos.

DESCENTRALIZACIÓN

 Algo que nos dejó pensando, fue comprobar que no han tenido un proceso de Regionalización con las características del peruano. Las prefecturas o Gobiernos departamentales no tienen las autonomías que en el Perú, sí tienen reñidas elecciones. El MAS, partido oficialista ha pasado de ganar 5 gobiernos sub nacionales en  la elección anterior, a tener 8 de los nueve departamentos en las elecciones de hacen dos semanas.

No hay millonarios presupuestos, consecuentemente no hay la corrupción que hoy nos aflige a los peruanos.

Es difícil seguir el análisis sin teñirlo de un juicio de valor. Los demócratas convencidos de las bondades del libre mercado, y del sistema económico que nos ha permitido crecer tanto en los últimos años, vemos con estupor el aparente éxito de un modelo diferente.

Solo nos queda concluir: Bolivia…  “No es lo que parece”.