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EY: Las 10 megatendencias que transformarán el futuro

EY: Las 10 megatendencias que transformarán el futuro

Vivimos en un mundo en constante movimiento y la innovación tecnológica reescribirá todas las industrias. En la mayoría de los sectores, las empresas se enfrentan actualmente a la necesidad urgente de transformarse, adaptarse y anticiparse a los cambios y disrupciones que caracterizan nuestra época actual.

Un nuevo estudio realizado por EY Perú (Ernst & Young), titulado ‘¿Qué nos traerá el futuro? Megatendencias, más allá de la disrupción’ en América Latina identifica las fuerzas primarias que lideran las megatendencias: la mejora humana (tecnología), el populismo (globalización) y el envejecimiento (demografía). Combinadas, estas dinámicas han generado lo que en EY se han identificado como las 10 nuevas ‘megatendencias’ que están dando forma a nuestro mundo y a la región.

Fuente: EY Perú (Ernst & Young)

Estas megatendencias muestran cómo la potencialización de la tecnología, mediante la Cuarta Revolución Industrial con avances como la inteligencia artificial, Big Data y la robótica “reinventarán la forma en la que trabajamos, cambiarán nuestro comportamiento como consumidores y determinarán cómo se regula nuestro mundo”.

En total, EY plantea 10 megatendecias:

1. Industria redefinida: las barreras entre industrias y segmentos están desapareciendo con la innovación digital y otras fuerzas. La clasificación no será tan rígida, se incrementará la compra de empresas para ingresar a nuevos segmentos con el fin de abordar nuevos mercados, desarrollar nuevos modelos y expandir sus capacidades; así como generar alianzas entre sí.

2. Futuro del trabajo: los robots y la inteligencia artificial han llegado a permear el ámbito laboral. El análisis contempla los aspectos tecnológicos, demográficos, contratos sociales y sector público, liderazgo, aprendizaje y educación.

Fuente: EY Perú (Ernst & Young)

3. Súper consumidor: el empoderamiento del súper consumidor es distinto, las personas se vuelven pasivas porque las computadoras toman decisiones por ellos. Se comunicarán con los mercados, las empresas y los gobiernos en un entorno distinto al de hoy mediante asistentes virtuales digitales.

Fuente: EY Perú (Ernst & Young)

4. Diseño del comportamiento: los humanos estamos predispuestos a ser reacios a las nuevas tecnologías porque generan riesgos, sin embargo, existen sesgos cognitivos que nos llevan a sobreestimar sus amenazas.

Fuente: EY Perú (Ernst & Young)

5. Regulación adaptativa: posiblemente nunca se llegará a un punto en el que la inteligencia artificial pueda redactar o modificar regulaciones de manera autónoma, pero si es posible imaginar algoritmos que analicen datos e identifiquen algunos insights. Este proceso debe darse de manera abierta, en tiempo real y ser dinámico.

6. Reasignando la urbanización: las ciudades están siendo rediseñadas por los desafíos de la sostenibilidad y los cambios en el transporte. Resulta vital tener en cuenta a futuro la sostenibilidad ambiental y el transporte con plataformas de viajes compartidos, vehículos autónomos y eléctricos.

7. Comunidades innovadoras: las ciudades tienen límites tales como las malas condiciones climáticas, escasez de recursos, contaminación y altos costos en bienes raíces. Esto provoca que los jóvenes y empresas opten por buscar lugares más baratos y así reducir la presión sobre las mega ciudades.

Fuente: EY Perú (Ernst & Young)

8. Salud reinventada: el envejecimiento de las poblaciones y los estilos de vida cada vez más sedentarios han puesto los costos en una trayectoria complicada, por lo que se deberá proporcionar atención personalizada y de bajo costo a gran escala.

9. Comida a la medida: la industria alimentaria está experimentando las corrientes de la disrupción, enfocándose en desarrollar proteínas diseñadas, utilizando la biotecnología y digitalmente manejando granjas inteligentes y verticales, que sean sostenibles y generen mayor rendimiento en menor espacio.

10. Economía molecular: nuestra capacidad para manipular lo que queremos que suceda está incrementando. La investigación integrada, a través de disciplinas que abarcan la biología, informática, electrónica, matemáticas, física y química señalan que la nanotecnología está ingresando en su fase disruptiva.

Fuente: EY Perú (Ernst & Young)

Mientars que algunas tendencias ya han sido mencionadas en informes anteriores (Futuro del trabajo, Industria redefinida y Salud reinventada), las otras siete son completamente nuevas, dejando claro que la disrupción genera continuamente nuevas tendencias y un ritmo cada vez más rápido de cambios.

Para poder aprovechar estas megatendencias, necesitamos buena gobernanza y un excelente servicio civil, una mejor educación y salud, instituciones muy superiores e infraestructuras que nos hagan competitivos y que pongan el mundo moderno al alcance de nuestros pobres. Pero nada de esto se podrá lograr sin crecimiento económico, inversión privada y sin darles la oportunidad a todos los peruanos de tener trabajos dignos y los niveles de vida de los mejores países emergentes. Lampadia




La puerta de la verdad

Líneas abajo compartimos otro informe de Bjørn Lomborg, uno de los pocos (pero poderosos) analistas globales que nos demuestran con cifras, con hechos y con la verdad, los indicadores sobre el progreso de la humanidad en los planos económicos, sociales, ambientales e institucionales. Para una mejor ilustración sobre nuestra realidad, ver en Lampadia: 7 ensayos sobre la prosperidad

Las noticias malas nos ganan el ojo todos los días y por eso es que hay que hacer un cierto esfuerzo consciente para no dejar de ver los procesos de mejora de la humanidad en los planos indicados. Lampadia

Vivimos en un mundo mejor
16 de agosto, 2018
Bjørn Lomborg
Profesor Visitante del Copenhagen Business School, director del Copenhagen Consensus Center
Project Syndicate
Glosado por Lampadia

Es muy fácil formarse la opinión de que el mundo moderno se está desmoronando. Nos enfrentamos constantemente a un ataque de negatividad: titulares que amedrentan, resultados de investigaciones alarmantes y estadísticas miserables.

En verdad, existen muchas cosas en el planeta por las que deberíamos estar profundamente preocupados. Pero obsesionarnos con las historias de terror significa que nos perdemos el panorama más amplio.

Las Naciones Unidas se centran en tres categorías de desarrollo: social, económico y ambiental. En cada categoría, mirando en retrospectiva los últimos 25 años, tenemos muchos más motivos para celebrar que para alarmarnos. Por cierto, estos años han sido un período de progreso extraordinario.

A nivel social, el indicador más importante es cuántos años vive cada uno de nosotros. En 1990, la expectativa de vida promedio era de 65 años. En 2016, subió a 72.5 años. En apenas 26 años, ganamos 7.5 años de vida.

Un pesimista podría sugerir que esto significa que tenemos 7.5 años más para estar enfermos y sentirnos miserables, pero no es el caso. En 1990, pasábamos casi el 13% de nuestra vida enfermos, y ese porcentaje no ha aumentado. Y si bien se habla mucho sobre que la desigualdad está peor que nunca, en esta medición más vital, la desigualdad está disminuyendo: la brecha entre la expectativa de vida en los países pobres y ricos se ha achicado drásticamente.

En términos de desarrollo económico, uno de los indicadores más importantes es el porcentaje de personas que viven en la pobreza. Hoy mucha menos gente vive en una condición de necesidad deplorable. En 1990, el 37% de la gente vivía en condiciones de extrema pobreza; hoy es menos de una persona de cada diez. En apenas 28 años, más de 1.250 millones de personas han sido sacadas de la pobreza –un milagro que recibe demasiado poca atención.

Si miramos el medio ambiente, uno de los principales asesinos es la contaminación del aire en lugares cerrados causada por gente pobre que utiliza estiércol y madera para cocinar y mantenerse abrigados. En 1990, esto causó más del 8% de las muertes; ahora es el 4,7%. Eso equivale a que son más de 1.2 millones de personas menos que mueren por contaminación del aire en lugares cerrados cada año, a pesar de un incremento de la población.

Existe una tendencia similar en muchas otras estadísticas de desarrollo ambiental. Entre 1990 y 2015, el porcentaje del mundo que practicaba defecación al aire libre se redujo a la mitad, al 15%. En el mismo período, 2,600 millones de personas más tuvieron acceso a mejores fuentes de agua, alcanzando un porcentaje del 91%. Más de un tercio de toda la población del mundo ganó acceso a un agua de mejor calidad.

Las mejoras no terminan ahí: el mundo está más alfabetizado; el trabajo infantil ha venido cayendo; vivimos en uno de los momentos más pacíficos de la historia, y la mayoría de los gobiernos del mundo son regímenes democráticos.

Max Roser de la Universidad de Oxford ha creado un sitio web integral para explorar datos como estos. Curiosamente sugiere que podríamos pensar en estos cambios que se produjeron en 25 años en términos de lo que sucedió en las últimas 24 horas. Visto de esta manera:

  • Sólo en el último día, la expectativa de vida promedio aumentó 9.5 horas
  • 137,000 personas salieron de la pobreza extrema
  • 305.000 tuvieron acceso a agua potable más segura.

Los medios podrían haber contado cada una de estas historias todos los días desde 1990.

Pero las buenas noticias no son tan noticiosas como las malas noticias. Esto no es sólo culpa de los medios. Es más difícil contar una historia positiva. En muchos casos, la “noticia” no es que sucedió algo, sino que algo malo ya no está sucediendo. No capta nuestra imaginación de la misma manera. Un estudio interesante de 2014 determinó que inclusive cuando los participantes decían que querían leer historias positivas, su comportamiento revelaba una preferencia por el contenido negativo (una preferencia de la que ni siquiera eran conscientes).

Todos deberíamos proponernos prestar más atención a los hechos positivos. Cuando a la gente se le pregunta si las condiciones de vida en el mundo serán mejores en 15 años, el 35% cree que sí, y el 29% cree que empeorarán –esencialmente un cincuenta-cincuenta-. Pero entre la gente que entiende que muchas cosas en el planeta ya están mejor que antes, el 62% cree en el progreso. Ese porcentaje cae a apenas 17% entre quienes desconocen los hechos. La percepción de que todo está empeorando pinta un panorama distorsionado de lo que podemos hacer, y nos hace sentir más temerosos.

Consideremos el escenario bastante frecuente en el que los políticos y los medios despiertan el miedo a la delincuencia, inclusive cuando las estadísticas demuestran que las tasas de criminalidad a nivel nacional son bajas o están cayendo. Finalmente, se puede terminar dedicando la atención y los recursos escasos a solucionar un desafío equivocado, y ponemos más policía en la calle o reducimos las libertades civiles, en lugar de implementar más políticas que favorezcan el bienestar –pero que son menos noticiosas- como mejorar la pre-escolaridad o la atención médica.

Mientras que entender mal los hechos puede resultar fácilmente en políticas equivocadas basadas en el miedo, un reconocimiento más equilibrado basado en los hechos de lo que la humanidad ha logrado nos permite centrar nuestros esfuerzos en aquellas áreas en las que podemos obtener los mejores resultados (muchas veces donde ya nos está yendo bien). Esto garantizará que el futuro pueda ser aún más brillante. Lampadia




El amor en el mundo moderno

La adopción de la tecnología ha cambiado la forma en que nos conectamos y conversamos con otras personas en nuestra sociedad y las citas online no son una excepción. La prevalencia de smartphones significa que siempre estamos online, las redes sociales permiten que otros nos conozcan antes de que nos hayamos conocido en persona y las aplicaciones de citas nos dan una gran variedad de opciones para conocer y elegir una pareja.

Con la invención de las redes sociales, es difícil imaginar que alguien vaya a una cita a ciegas como en antaño, ¿por qué lo necesitarían? No solo tenemos una gran cantidad de información a un clic de distancia, sino que también cambia la forma y el lugar en el que nos encontramos los futuros salientes. Antes de la afluencia de citas en línea, las parejas estaban prácticamente limitadas a conocerse a través de amigos o un sábado por la noche. Ahora, incluso si no usas un servicio de ‘dating’, puedes hacer exploraciones previas en las redes para saber algo de tu cita.

Con la llegada de las APPs de citas, ha habido un cambio en la cantidad de usuarios que están encontrando a nuevas parejas y, de hecho, en lo que los usuarios están buscando. Conocer a alguien solía ser una experiencia compleja. La historia de la primera cita se recreaba a lo largo de la relación, la mirada, la chispa, la conexión que definió las primeras etapas de la relación. Parece que ahora se ha perdido a favor de la elección, el tiempo y la conveniencia. La tecnología ha hecho que nuestro mundo sea más rápido y la gente quiere pasar el menor tiempo posible buscando a alguien. Quieren que las citas trabajen alrededor de sus vidas de una manera eficiente en el tiempo.

Eventualmente, la selección de pareja en línea, basada en cada vez más información, como genomas, nivel de educación, aficiones, inteligencia y capacidades, puede tener un impacto en el desarrollo de los hijos de parejas que aporten determinadas virtudes, incluidos, mayores niveles de ingreso.

Parece que las citas por Internet le dan a la noción de citas y amor una nueva dimensión. Las citas digitales ofrecen una forma más eficiente de encontrar una buena pareja a millones de personas y eso es algo, como dice The Economist, de lo que podemos alegrarnos. Lampadia

Citas en línea
Amor moderno

El internet ha transformado la búsqueda del amor y las parejas

The Economist
18 de agosto, 2018
Traducido y glosado por Lampadia

La internet ha transformado la forma en que las personas trabajan y se comunican. Ha puesto boca abajo industrias, desde el entretenimiento hasta retail. Pero su efecto más profundo parece estar en la decisión más importante que toma la mayoría de las personas: elegir un compañero de vida.

A principios de la década de 1990, la idea de conocer a una pareja online, parecía extraña y algo patética. Hoy, en muchos lugares, es normal. Los smartphones han puesto ‘bares virtuales’ en los bolsillos de las personas, donde los solteros pueden mezclarse sin las limitaciones de la geografía social o física. A nivel mundial, al menos 200 millones de personas usan servicios de citas digitales todos los meses. En Estados Unidos, más de un tercio de los matrimonios ahora comienzan con un emparejamiento online. El internet es la segunda forma más popular para que los estadounidenses conozcan a personas del sexo opuesto, y se está volviendo rápidamente tan común como las presentaciones del mundo real del “amigo de un amigo”.

Las citas virtuales son un experimento social masivo, conducido en uno de los procesos más íntimos y vitales de la humanidad. Sus efectos apenas comienzan a hacerse visibles.

Cuando Harry escogió a Sally con un click

Citarse con una pareja través de Internet es fundamentalmente diferente a hacerlo fuera de línea. En el mundo físico, las parejas se encuentran en redes familiares o entre círculos de amigos y colegas. Encontrarse con un amigo de un amigo es la norma. Las personas que se conocen en línea tienen una gran probabilidad de ser extraños. Como resultado, las citas en línea ofrecen muchas más opciones. Un bar, coro u oficina puede tener algunas decenas de potenciales parejas para cualquier persona. En línea hay decenas de miles.

Esta mayor capacidad de elección, más el hecho de que las conexiones digitales se realizan solo con el consentimiento mutuo, hace que el mercado de citas digitales sea mucho más eficiente que el tipo fuera de línea. Para algunos, eso son malas noticias. Debido al abismo entre los sexos, unos pocos hombres heterosexuales están condenados a no tener ningún match. En Tantan, una APP china, los hombres expresan interés en el 60% de las mujeres que ven, pero las mujeres están interesadas en solo el 6% de los hombres; esta dinámica significa que el 5% de los hombres nunca reciben un match. En citas fuera de línea, con un grupo mucho más pequeño de hombres para escoger, las mujeres heterosexuales son más propensas a juntarse con hombres que no verían en línea.

Para la mayoría de las personas, sin embargo, las citas virtuales ofrecen mejores resultados. La investigación ha descubierto que los matrimonios en Estados Unidos entre personas que se conocen en línea tienden a durar más; tales parejas profesan ser más felices que aquellos que se conocieron fuera de línea. El pánico moral que rodea a las APPs de citas es muy exagerado. Existe muy poca evidencia para mostrar que las oportunidades en línea fomentan la infidelidad. En Estados Unidos, las tasas de divorcio subieron hasta justo antes del advenimiento de Internet y han disminuido desde entonces.

Las citas en línea son una bendición especial para aquellos con requisitos muy particulares. ‘Jdate’ permite a los participantes filtrar a las personas que no considerarían convertirse al judaísmo, por ejemplo. Un mercado mucho más grande ha tenido resultados dramáticos para los que se casan con personas del mismo sexo. En Estados Unidos, el 70% de los gays conocen a sus parejas en línea. Este espectro de búsqueda de diversidad sexual es una bendición: más personas pueden encontrar la intimidad que buscan.

Sin embargo, hay problemas con la forma moderna de amor. Muchos usuarios se quejan de estrés cuando se enfrentan a las realidades brutales del ‘mercado digital del físico’ y su lugar dentro de él. Las emociones negativas sobre la imagen corporal existían antes de Internet, pero se amplifican cuando los extraños pueden emitir juicios instantáneos sobre el atractivo. Las salidas virtuales se han relacionado con la depresión. Los mismos problemas que afligen a otras plataformas digitales se repiten en este ámbito, desde estafas hasta cuentas falsas: el 10% de todos los perfiles de citas recién creados no pertenecen a personas reales.

Este nuevo mundo de romance también puede tener consecuencias imprevistas para la sociedad. El hecho de que las parejas en línea tengan muchas más opciones puede derribar barreras sociales: la evidencia sugiere que el Internet está impulsando los matrimonios interraciales al by-pasear a los grupos sociales homogéneos. Pero las personas también son más capaces de elegir gente como ellos. El apareamiento selectivo, el proceso por el cual las personas con niveles de educación e ingresos similares se emparejan, ya es culpable de la desigualdad de ingresos. Las citas en línea pueden hacer que el efecto sea más pronunciado: los niveles de educación se muestran de forma destacada en los perfiles de citas de una manera en la que nunca se haría ‘fuera de línea’. No es difícil imaginar a los servicios de citas del futuro haciendo coincidir a las personas con los rasgos preferidos, como lo determinan los genomas. Las empresas de citas también sufren un conflicto de intereses inherente.

El dominio de las citas en línea por un puñado de empresas y sus algoritmos es otra fuente de preocupación. Las APPs de citas no se benefician exactamente del mismo tipo de efectos de red que otras plataformas de tecnología: los amigos de una persona no necesitan estar en una web específica, por ejemplo. Pero el ciclo de retroalimentación entre grandes cantidades de datos, generado por un número cada vez mayor de usuarios atraídos por un producto en constante mejora, todavía existe. La entrada en el mercado de Facebook, armada con datos de sus 2.2 mil millones de usuarios, proporcionará pistas sobre si las citas en línea se consolidarán inexorablemente en plataformas más grandes.

Mientras estabas escogiendo pareja online

Pero incluso si el mercado no se concentra cada vez más, el proceso de acoplamiento (o no) se ha vuelto indudablemente más centralizado. El romance solía ser una actividad distribuida que tenía lugar en una profusión de bares, clubes, iglesias y oficinas; ahora, enormes cantidades de personas dependen de unas pocas compañías para conocer a su pareja. Eso le da un tremendo poder a un pequeño número de codificadores, modificando los algoritmos que determinan quién ve a quién virtualmente, para diseñar resultados de apareamiento. En sociedades autoritarias, la perspectiva de matrimonios arreglados algorítmicamente debería causar cierta inquietud. La competencia ofrece cierta protección contra tal posibilidad; también podría tener una mayor transparencia sobre los principios utilizados por las aplicaciones de citas para unir a las personas.

Sin embargo, tales preocupaciones no deben oscurecer el bien que proviene de la forma moderna de romance. Las parejas correctas pueden elevarse y nutrirse mutuamente. Los equivocados pueden arruinar sus vidas. Las citas digitales ofrecen una forma más eficiente de encontrar una buena pareja a millones de personas. Eso es algo que amar. Lampadia




El 67% de los peruanos votaron por construir sobre lo avanzado

El 67% de los peruanos votaron por construir sobre lo avanzado

EDITORIAL DE LAMPADIA

Con motivo del lanzamiento de nuestra animación, El Modelo Sí Funciona – Lo que nos falta desarrollar no está en otro camino, el 5 de abril pasado publicamos la siguiente invocación a nuestros jóvenes:

“Cuando los peruanos ponemos nuestra cabeza en la almohada, nos apartamos del lenguaje social, de lo políticamente correcto y de la vocación por el reclamo y la queja. Solos, todos sabemos lo que necesitamos para tener vidas prósperas, así como las realizaciones de los últimos 25 años. Nuestros jóvenes sabían lo que necesitaban cuando pensaban migrar a economías de mercado como las de EEUU, España e Italia antes de la crisis y en Chile antes de Bachelet 2. Hoy en su patria, con sus familias, sus amigos y su comida, saben lo que necesitan, que no es otra cosa que lo que imaginaron conseguir, mediante su sacrificio y entrega personal en el exterior. Ahora pueden obtener todo ello y más en el Perú. Solo tienen que votar con la sabiduría y el espíritu de sus propias almohadas”.

Fotografía capturada por la NASA y procesada por un sistema de ‘rendering’ por Anton Balazh para mostrar los detalles de la geografía peruana

Nos alegra mucho comprobar que la gran mayoría de los peruanos votaron por un país que pueda ser parte del mundo moderno, en el que todos tengamos oportunidad de prosperar en base a nuestro esfuerzo, alejados de los odios y las rencillas y con una visión positiva de nuestro futuro.

Todo eso puede colegirse del resultado de las elecciones generales, que se desarrollaron con toda normalidad y tranquilidad.

La mancha negra que tenemos que lamentar es la pérdida de vidas de diez peruanos abnegados que en el desarrollo de sus funciones cívicas fueron asesinados por la insania criminal de la izquierda ultra radical de los remanentes terroristas en el VRAEM. Nuestras sinceras condolencias a sus honorables familias.

La segunda vuelta electoral, que se desarrollará entre Fuerza Popular y Peruanos por el Kambio, entre Keiko Fujimori y Pedro Pablo Kuczynski, se presenta como una extraordinaria oportunidad para que todos vivamos una lección de civismo y un período de aprendizaje y reflexión sobre propuestas serias que nos permitan ponderar las políticas públicas que pueden terminar de llevarnos al desarrollo integral. Aquellas que necesitamos emprender para ocupar nuestro espacio entre los mejores países de la tierra.

No es una exageración. El Perú es un país milenario, como pocos. Es un país mega diverso que cuenta con muchos recursos naturales que pueden ponerse en valor para el bienestar de todos. Somos depositarios de una cultura muy rica, expresada en los legados de nuestra historia, nuestras tradiciones, artesanías, danzas y vestimentas. Tenemos gente muy trabajadora y creativa, que muestra condiciones de civismo formidables cuando se encuentran en un sistema socialmente sano, como lo hace el 10% de peruanos, los tres millones de mujeres, hombres y niños que viven en el exterior y trabajan abnegadamente, cumplen las leyes, ahorran, educan a sus hijos, participan de la vida pública de sus nuevos pueblos y son solidarios con sus familias en el Perú.

Solo nos falta una mejor clase dirigente, como lo dijeron en su momento los insignes Víctor Andrés Belaunde Diez Canseco y Jorge Basadre.

Ambos candidatos a la segunda vuelta electoral se distinguen por su ponderación, por su bonhomía y por ser esencialmente propositivos. Qué mejor ocasión para esperar de ellos, en los próximos dos meses, una demostración de amor por su tierra, con  vocación constructiva y el espíritu para fomentar 60 días de reflexión y aprendizaje.

¡Qué gran oportunidad! Hacemos votos por su aprovechamiento pleno. Lampadia