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La hora de la igualdad de género es hoy (8:00 a.m.)

La hora de la igualdad de género es hoy (8:00 a.m.)

El Foro Económico Mundial estimó recientemente que nos tomarán 79 años más lograr la paridad de género global en el empleo, según su más reciente Global Gender Gap Report 2015. Son 79 años más hasta que las empresas y los gobiernos sean dirigidos por igual por hombres y mujeres. ¿Deberíamos esperar tanto?

Han pasado más de 200 años desde que la Revolución Industrial incorporó a las mujeres occidentales a la fuerza laboral en grandes números y más de 80 años en algunas partes de América del Sur desde que las mujeres obtuvieron el derecho al voto (61 años en el Perú). Y todavía hay muchos lugares alrededor del mundo donde las mujeres no tienen derecho a votar o mantener un trabajo, asistir a la universidad, crean un negocio o tomar posiciones de liderazgo en las empresas o países, e inclusive hay lugares donde se les prohíbe estudiar. (Ver en Lampadia: Derechos de la Mujer: Arabia Saudita y más allá).

79 años más son cuatro generaciones antes de lograr la paridad de género en la fuerza laboral.

EY sacó recientemente un informe titulado ‘Empowering women: Uncovering financial Inclusion Barriers’ (Empoderando mujeres: desnudando las barreras financieras a la inclusión), en el que analizan la lógica económica de optimizar el talento mediante la igualdad de género. Entre las principales razones se encuentran:

  • Más igualdad, mayor PBI: Existe una correlación positiva entre el PBI per cápita y la igualdad de género. De hecho, un aumento en la tasa de participación laboral de las mujeres con respecto a la tasa de participación masculina tendría un impacto neto positivo sobre el PBI tanto en los países en desarrollo como en los desarrollados.
  • Más igualdad, más productividad: A nivel mundial, las mujeres en la fuerza de trabajo contribuyen directa e indirectamente a las ganancias de productividad. Ganancias indirectas provienen de la mayor inversión en la salud, la educación, el bienestar de sus hijos y otros conductores de éxito.

  • Un mejor equilibrio de género en los directorios implica un mejor precio de las acciones y mejores resultados financieros: Empresas con mujeres en el directorio también superan a las que no lo tienen en el rendimiento sobre el capital y en el crecimiento neto de los ingresos. 
  • Mayor equilibrio de género en el liderazgo, mejor rendimiento: Las empresas con más mujeres en puestos de liderazgo incrementan el enfoque en la gestión empresarial, responsabilidad corporativa, dinámica de talento y visión del mercado.
     
  • Más mujeres en puestos de liderazgo político, mayor prosperidad: Cuando las mujeres son elegidas para cargos públicos en países con disturbios internos, estas economías pueden experimentar una mejora significativa en comparación con los resultados obtenidos por líderes masculinos.

Según el informe de EY, las empresas de mayor rendimiento están tomando más medidas para fomentar la equidad de género. Para esto, ofrecen arreglos flexibles de trabajo para hombres y mujeres, tienen metas para la representación de las mujeres en el liderazgo y ofrecen programas que incluyen a las mujeres en todas las operaciones y funciones de la empresa. Esto ayuda a que las mujeres adquieran la experiencia y los conocimientos necesarios para convertirse en CEOs, un papel que aún está fuera del alcance de muchas. El énfasis en la igualdad de género ayuda a construir una cultura de empresa más saludable, lo que conduce a un mejor rendimiento general y mejora la última línea. Más abajo compartimos un gráfico que muestra los resultados de la encuesta hecha por EY, que muestra las principales medidas de las empresas para fomentar la equidad y las respuestas de los encuestados sobre si es algo que practican en sus empresas:

Además, el reporte incluye un análisis de las principales acciones de las empresas para acelerar el rol de la mujer en los negocios:

  1. Esclarecer el camino al liderazgo

Las mujeres tienen que tomar un rol más proactivo para ser consideradas (68%), pero las organizaciones también deben esclarecer las oportunidades profesionales que respondan a sus habilidades y ambiciones. Programas de liderazgo (internos y externos) pueden ayudar a las mujeres a adquirir posiciones de liderazgo una vez que vean cuál es el camino a seguir.

  1. Acelerar el cambio de cultura en las empresas con una política corporativa progresiva
    Para combatir la escasez de tiempo que sufren las mujeres, algunas empresas han fomentado acuerdos de trabajo flexibles para hombres y mujeres. Cuando los hombres tienen una mayor flexibilidad, pueden dedicarle más tiempo a la atención de los niños y a las responsabilidades del hogar, así como otros intereses. Eso puede ayudar a las mujeres a dedicar más tiempo a sus carreras.
     
  2. Construir un ambiente de apoyo y trabajar para eliminar el sesgo consciente e inconsciente

Es importante concientizar a todos los hombres y mujeres sobre el sesgo consciente e inconsciente de la diferencia de género. Una de las maneras más eficaces de apoyo a las mujeres es a través del “sponsorship”. La ayuda de un consejero o patrocinador para apoyar en el ascenso de una persona es de gran ayuda. Puede tener un impacto muy rápido en las carreras de los individuos y, con el tiempo, puede transformar la cultura de una organización.

En Lampadia nos esforzamos constantemente por lograr comunicar la importancia de la igualdad de género. Ojalá logremos que las empresas y todos los peruanos se concienticen de la importancia y las oportunidades de incluir de manera equitativa a las mujeres en las empresas, como una fuerza democratizadora que asegure que sus líderes, inversores y emprendedores provienen de la más amplia fuente de talento. 

Las mujeres peruanas han sido determinantes para la armonía y soporte social de los peruanos en muchas ocasiones. Trabajan largas horas, muchas de ellas mantienen a sus familias y han organizado el soporte social de todas las crisis que hemos afrontado durante los últimos 50 años. No podemos seguir sin reconocer la extraordinaria contribución de nuestras mujeres al bienestar de los peruanosLampadia

*Este artículo ha sido modificado desde su publicación para actualizar la cifra del tiempo estimado para lograr la paridad de género global en el empleo, publicado durante las reuniones del Foro Económico Mundial. Ya no corresponde a 79 años (como se indica en el artículo) sino que equivale a 117 años.




Conflictos mineros preocupan en el exterior

Conflictos mineros preocupan en el exterior

Traducido, comentado y glosado por Lampadia

“Equilibrando las preocupaciones económicas y sociales en el sector minero de Perú”

Publicado por Stratfor Global Intelligence el 25 de mayo 2015

Enfrentamiento entre los manifestantes que se oponen al proyecto minero y la policía peruana 

de Arequipa el 14 de mayo (Fuente: STR / AFP / Getty Images)

Resumen

El generalizado sentimiento anti-minero y la creciente oposición a los próximos proyectos han estresado el tan importante sector minero del Perú. [Es entendible que nuestra coyuntura sea vista así en el exterior. Allá se hace muy difícil persivir el balance entre los manifestantes y las mayorías silenciosas]. Las manifestaciones, algunas de las cuales se han vuelto violentas, no muestran signos de disipación, y se planean más protestas en varias zonas mineras el 27 y 28 mayo. Aunque las manifestaciones aún no afectan el relativamente fuerte crecimiento económico del país, podrían socavar el atractivo del país para los inversores a largo plazo.

Análisis

Las altas tierras andinas y los trópicos amazónicos, consideradas las dos regiones periféricas de Perú en comparación con el núcleo demográfico y político del país en Lima, contienen una gran riqueza de minerales y recursos naturales. La economía de Perú se basa principalmente en inversiones y el desarrollo de las actividades mineras y de hidrocarburos en estas regiones, que producen alrededor de dos tercios de las exportaciones del país. 

Actualmente, el Perú está disfrutando de un período de estabilidad económica y relativa prosperidad. Al inicio de esta década, la tasa de crecimiento promedio de Perú era de 7.25 %, en gran parte impulsado por las industrias mineras extractivas, como el cobre. Entre 2000 y 2012, la inversión en la minería peruana aumentó de alrededor de US$ 300 millones a US$ 8,600 millones, lo que representa casi el 50 % de todos los proyectos de inversión privada [externa] en el país. [La inversión total llega al 28% del PBI, unos US$ 55 mil millones]. La minería contribuye casi el 15 % del PBI de Perú, genera entre 10 % y 16 % de los ingresos fiscales del país [29.2% del impuesta a la renta de tercera categoría y el 40.2% del impuesto a la renta corporativo] y ofrece más de 200,000 puestos de trabajo [directos] por año.

Las políticas de libre mercado y de facilidad a los negocios del gobierno peruano de los últimos 25 años también han ayudado a expandir la economía. El Perú ha firmado más de una docena de acuerdos bilaterales de libre comercio con las principales economías como Estados Unidos, la Unión Europea y China. (…) todavía se espera que Perú crezca más que otros países de la región.

Potente Oposición

Sin embargo, entre la caída de precios de metales y la desaceleración de la demanda china, ha habido una disminución en las inversiones mineras y de hidrocarburos del Perú el año pasado. La inversión total en el Perú se ha reducido en un 6 % desde el 2013, llegando a un total de solamente US$ 5,560 millones en el año 2014. Posteriormente, las exportaciones de minerales han reducido su valor en más de US$ 4 mil millones en los últimos dos años.

Pero el sentimiento anti-minero es de gran alcance en el Perú, y la oposición local en contra de los proyectos extractivos y el malestar social de los grupos que se oponen a la actividad minera en el país están amenazando la inversión. Además, amplias coaliciones de izquierda han protestado sobre el daño ambiental y la participación extranjera en la minería durante mucho tiempo. [Estas ‘protestas’ se han concentrado en las empresas grandes y no lo hacen contra la minería ilegal de oro que está devastando inmensas áreas en la región selvática de Madre de Dios y otras. Recientemente se ha hecho público que estas organizaciones proponer implantar el pos-extractivismo, que significa dosifica la producción nacional al mínimo para la supervivencia, en minería, petróleo, gas, madera, pesca, agricultura de exportación y hasta industrias exportadoras. Como dijo Mark Twain: “Es más fácil engañar a la gente, que convencerlos que han sido engañados”].

A pesar que las protestas contra la minería no son algo nuevo en el Perú, en los últimos meses los enfrentamientos se han vuelto más violentos entre los manifestantes y la policía.

[Los] grupos de protesta más organizados y la intensificación de las demostraciones han dificultado el uso de la diplomacia. El 23 de mayo, el gobierno declaró estado de emergencia en las zonas mineras del sur.

Mirando hacia el futuro

El malestar social dirigido al sector de la minería en el Perú se intensificará durante el resto del año. Cada vez líderes locales radicales más poderosos y partidos de izquierda más organizados se enfrentarán al fuerte impulso dirigido por el gobierno para seguir adelante con los proyectos extractivos, especialmente porque las elecciones presidenciales de abril 2016 se acercan. Debido a los objetivos políticos y económicos contradictorios del gobierno, las negociaciones de los proyectos mineros se alargaran indefinidamente, mientras que Lima es presionada a hacer más concesiones a los gobiernos locales. Dichas concesiones se contradicen con los esfuerzos del gobierno central de reforzar el control sobre la distribución y el gasto de los fondos federales de los gobiernos locales.

Una de las prioridades del gobierno será encontrar una solución inmediata al conflicto proyecto minero Tía María de Southern Copper. El 16 de mayo, la empresa minera declaró una pausa de 60 días para permitir que todas las partes compartan quejas y preocupaciones, proyectos de soluciones, y asignar la responsabilidad de la ejecución del acuerdo. 

En general, las protestas aún no han herido de manera significativa al sector de la minería y, en realidad, la producción de minerales ha mejorado un 5.3 % interanualmente en el primer trimestre de 2015. Sin embargo, las manifestaciones podrían obstaculizar el crecimiento económico a largo plazo, teniendo en cuenta la alta dependencia del Perú sobre la inversión extranjera, lo que podría caer si la confianza del inversor disminuye. Será fundamental calmar esta inquietud y demostrar una capacidad de controlar a los gobiernos locales para poder retener la confianza de los inversores y mantener las tasas relativamente altas de crecimiento que ha venido logrando el Perú.




Dejemos de trabar nuestro progreso

Dejemos de trabar nuestro progreso

Muchos países como China, Francia, Alemania y Chile están creando facilidades para captar talentos extranjeros y cubrir carencias, además de aprovechar de inversores, investigadores, trabajadores calificados y estudiantes con gran futuro para apoyar el crecimiento de sus economías. El Perú, sin embargo, hace todo lo contrario.

 Recientemente se emitió el TUPA (Texto Único de Procedimientos Administrativo) detallando los procedimientos para “unificar, reducir y simplificar” (sic) los requerimientos migratorios, supuestamente con el propósito de eliminar las trabas existentes. Sin embargo hace todo lo contrario. No solo no ha eliminado los obstáculos, sino que ha creado nuevos, volviendo cada vez más difícil promover la presencia de extranjeros. Esto parece una oda al chauvinismo.

Esto es contraproducente.  Afecta a la inversión extranjera, que es tan importante y necesaria para el país. Los políticos a menudo argumentan que los países emergentes deberían promover la inversión extranjera para facilitar el crecimiento económico. (Ver en Lampadia (L): Hay que alentar la inversión extranjera directa).

La teoría señala que la tecnología, los conocimientos y las técnicas introducidas por los inversores y los directivos extranjeros experimentados se extenderán al conjunto empresas de capital nacional. Se considera que la IED (Inversión Extranjera Directa) y otras formas de inversión internacional desempeñaron un papel fundamental, por ejemplo, en el rápido crecimiento económico de los Tigres Asiáticos (Singapur, Corea del Sur, Hong Kong y Taiwán) desde 1960 hasta la década del 90. Fue la mayor fuente de financiamiento externo de las economías emergentes. Su importancia es clara y esencial para países en crecimiento como el Perú.

Actualmente ya se ha contraído la IED en el país, cayendo casi 17% durante el 2013, según Cepal, a diferencia delaumento de 49% del año anterior.

Debemos retomar la tendencia al alza de las IED, además de promover la captación de extranjeros en distintos sectores para cubrir carencias actuales. Además, debemos aprovechar este mundo de “movilidad global”, donde profesionales y empresas están abiertos a mudarse y trasladarse a donde más les convenga. Sobre todo ahora que en Europa hay un altísimo desempleo, especialmente juvenil, que son hombres y mujeres con las mejores formaciones académicas y capacidades.

Los ciudadanos quieren, más que nunca, comodidad. Quieren vivir donde ellos consideran que pueden lograr sus sueños o en un lugar que ofrezca oportunidades que les atraigan. Quieren trabajar donde quieren vivir. Ya no existen barreras de comunicación, ni de distancia. Esto se aplica tanto a las empresas como a sus líderes, a jóvenes emprendedores, a científicos y a ambiciosos estudiantes.

Los gobiernos se están adaptando con mayor rapidez a la economía global que existirá mañana, para superarse. Están aprovechando este mundo sin fronteras para conseguir las herramientas que necesitan en todo ámbitoy captar a las personas más capacitadas para lograrlo.

 

Los “visados para talentos” se han vuelto populares, y países como China los están utilizando para dar permisos de estancia en el país. Una especialista en inmigración del Instituto de Tecnología de Pekín, Liu Guofu, afirmó que China está buscando atraer a “candidatos con experiencia en liderar multinacionales, expertos en las áreas de ciencia y educación, y personalidades de renombre en el mundo de la cultura y el deporte”.

Este sistema no es una novedad. En el 2012 The Economist publicó un  artículo “El encanto de Chilecon Valley”, en el que detalla la interesante idea del programa “Start-up Chile”, que selecciona las empresas de jóvenes promesas y da a sus fundadores el equivalente de US$ 40,000 y una visa de un año para ir a trabajar en sus ideas a Chile. Según la publicación, “A cambio del dinero que reciben, se espera que los extranjeros compartan sus conocimientos, por ejemplo, capacitando a los empresarios locales y dando charlas. Entre el 2010 y 2012, los participantes de “Start-Up Chile” realizaron casi 380 reuniones y participaron en más de 1,000 talleres y conferencias.

Un caso particular que mencionó The Economist fue el de Claudio Camino, un joven emprendedor italiano que quería crear juegos para celulares que otras empresas podrían entonces utilizar para hacer publicidad de sus productos. Cuenta el artículo que “inversionistas en EEUU estaban dispuestos a apoyarlo, pero sólo si podía quedarse en el país. Camino descubrió que era probable que se le niegue una visa, y que incluso si la obtuviese, se enfrentaría a una larga espera – para entonces sus juegos serían probablemente obsoletos. Así que llevó su idea a Chile donde le concedieron la visa en dos semanas, y ahora (2012) está fundando su segunda start-up, llamada FanChimp, que ayuda a empresas a encontrar nuevos clientes a través de Facebook”.

Es hora de que el Perú también reaccione, y fomente la captación de extranjeros capacitados para seguir mejorando, cubrir nuestras deficiencias y aprender de ellos. Además, si consideramos que el Perú es todavía un país en construcción, podemos acoger profesionales en todas las especialidades. Con ellos podríamos dar un salto inmenso en capacitación y compensar buena parte de nuestras deficiencias educativas. Contamos con reservas productivas inmensas y diversas, desde las más tradicionales a las más sofisticadas (como las vinculadas a la genética). También tenemos carencias en educación-salud, instituciones, infraestructuras, tecnología y lucha contra la pobreza. Por lo tanto, somos uno de los mejores destinos para lo que podría llamarse “La nueva América del siglo XXI”.

No nos olvidemos de la fuerza de los migrantes y su impacto en el desarrollo. ¡Hagamos el mejor programa de atracción de migrantes capacitados: “Perú: La nueva América del Siglo XXI”, oportunidades para los mejores ciudadanos del mundo! Lampadia