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10 años del TLC Perú EEUU

10 años del TLC Perú EEUU

Pablo Bustamante Pardo
Director de Lampadia

La semana pasada, el Ministerio de Relaciones Exteriores y el Americas Society & Council of the Americas (AS/COA), organizaron la conferencia: 10 Años del TLC Perú-EEUU: Impacto y perspectivas, en la que participé como ex miembro del Comité Internacional de AMCHAM.  

Comparto algunas de las ideas que presenté:

Un país chico como el Perú solo puede generar riqueza trayéndola del exterior, y eso solo puede suceder vía el aumento del comercio internacional y la inversión extranjera.

El TLC con Estados Unidos permitió ambos procesos y además permitió que nuestras relaciones comerciales se multiplicaran con otros países.

Ese proceso fue muy importante para la recuperación de la economía peruana. Marcó un hito muy importante. Por ello hay que agradecer a los funcionarios públicos que participaron en esta importante gesta, así como a los ciudadanos del mundo civil que lo hicieron.

Esta gesta conllevó tres grandes batallas, la negociación misma del acuerdo, la batalla política en EEUU, y la batalla política en el Perú. Las tres requirieron y lograron superar grandes dificultades. Por ejemplo, en pleno proceso en EEUU se produjo un cambio de administración, de los republicanos a los demócratas, que eran manifiestamente anti TLC. En la negociación se cayó la participación de Colombia, que era, originalmente, el tren del que nos colgamos para ser parte de la negociación. En la batalla política local, el establishment político y mediático eran completamente adversos al acuerdo, sin embargo, hacia el final de la negociación, el 75% de la población llegó a manifestar su aprobación del TLC.

El TLC Perú – Estados Unidos se firmó justo a tiempo para que el Perú pudiera aprovechar el súper ciclo de los commodities, el aumento de los flujos de inversión internacional y la reducción de las tasas de interés, que permitieron que redujéramos la pobreza, la desigualdad y mejoraremos todos los indicadores sociales. Fenómeno que duró hasta inicios de la segunda década del nuevo siglo.

Durante el proceso, el gobierno peruano dejó consentir que el sector agrícola era el sector perdedor del acuerdo. En ese contexto, a mí me tocó desarrollar la tesis contraria:

Ver: https://www.lampadia.com/assets/uploads_documentos/03d0b-estudio-del-impacto-del-tlc-en-el-sector-agri-cola-peruano-jul-07.pdf

La realidad ha demostrado que justamente el sector agrícola, con las agro-exportaciones, ha sido el gran ganador del acuerdo, multiplicando nuestras exportaciones y generando empleo formal en el sector rural.

Lamentablemente, hoy día hay una guerra comercial entre EEUU y China, que nos ha afectado dramáticamente al haber bajado el crecimiento de China y el precio del cobre.

Además, se está deshaciendo la Organización Mundial del Comercio (OMC), que se va a quedar aparentemente sin capacidad de arbitraje de las disputas. Ver en Lampadia: ¿Es el fin de la OMC?.

Este ambiente tan negativo del comercio internacional es muy perjudicial para el Perú. Por ello, debemos ser muy proactivos en promover la recuperación del comercio internacional, aprovechar todos los espacios, foros, instituciones, etc., para unir esfuerzos con otros países pequeños que tienen nuestras mismas necesidades.

El TLC fue liderado por MINCETUR y acompañado por la Cancillería. Ahora les toca a ambas instancias un rol muy proactivo de promoción de nuestra participación en el comercio internacional. Lampadia




Trump desata dañina ‘Guerra Comercial’

Tal como amenazó en su campaña electoral, Donald Trump inició la imposición de acciones comerciales y regulatorias que, lamentablemente, está iniciando una ‘guerra comercial’. La disculpa es China, el éxito de China y sus impactos, reales y aparentes, en la economía de EEUU.

Como se ve en el siguiente gráfico publicado por The Economist esta semana, análisis recientes confirman, como indicamos en Lampadia: Nuevas investigaciones sobre la desigualdad en EEUU, que la aseveración sobre el estancamiento de ingresos de la clase media de EEUU, es equivocada, o llanamente falsa. Según esta información, el ingreso medio real, habría subido en un 50% desde 1979, lo que le quita todo sustento al populismo desatado en EEUU y llevado al gobierno por Trump. (En los próximos días presentaremos esta información en detalle).

Según The Economist, 28 de marzo, 2018: Even if America wins concessions, worry. Donald Trump’s trade policy is economically muddled and politically toxic. (Incluso si EEUU gana concesiones, preocúpese. La política commercial de Trump es económicamente enlodada y políticamente tóxica):

“Los errores sobre la economía de Trump, explican porqué sus políticas son tan irresponsables. En lugar de juntarse con otros países [supuestamente] afectados para ejercer presiones legales a China, Trump a amenazado a sus aliados. En lugar de trabajar con las reglas establecidas en el sistema de comercio, que EEUU ayudó a crear, y que a pesar de sus imperfecciones, le ha servido bien, pasa por encima de ellas a voluntad. Es particularmente imprudente al afirmar que las tarifas al acero y aluminio se justifican por temas de seguridad nacional (una carta de excepción bajo las reglas de la OMC, que debe usarse con moderación). Si EEUU mete su nariz en la OMC, ¿por qué no lo harían otros?

El resultado de una guerra comercial entre EEUU y China sería el de un espacio global que deteriora sustancialmente las posibilidades de crecimiento de los países emergentes. Por ejemplo, según Bloomberg, las primeras escaramuzas han determinado una disminución de la cotización del cobre, del orden de 10%, cayendo por debajo de los US$ 3 por libra. En el caso del Perú, esto significa una disminución de ingresos por exportaciones mayor a un millón de dólares.

Por su lado, una reciente encuesta de McKinsey muestra que “los cambios en la política comercial son las causas más citadas como riesgo del crecimiento global, el doble de veces que en la encuesta anterior”: 

El último evento de proteccionismo de Trump es en relación a las importaciones de acero. Efectivamente, las exportaciones de los excedentes de acero de China, han afectado severamente el mercado global. Esto tiene impactos en industrias pesadas en muchas partes del mundo, incluyendo al Perú, y lamentablemente hasta ahora no se ha podido llegar a acuerdos sólidos con la China. Ver en Lampadia: El acero chino inundará los mercados mundiales y Se vuelve a debilitar la industria del acero.

Pero las medidas que está tomando EEUU, van más allá del caso del acero, y más allá de China. Por lo tanto, puede traer el inicio de la temida guerra comercial, que consolidaría la ola anti-globalización y comercio internacional que amenaza al mundo en los últimos tiempos.

De El Comercio

El Lampadia hemos advertido sobre el riesgo que conlleva la gesta anti globalización y anti libre comercio. Hace tiempo sugerimos que el Perú tomara las banderas del libre comercio en los foros internacionales. Pero nuestros incapaces gobernantes, y nuestra distraída clase dirigente, no pestañaron.

Una guerra comercial tendría un impacto muy negativo en nuestra economía, ya que debilitaría sustancialmente el eco-sistema de libre comercio, indispensable para traer más riqueza del exterior a nuestro país y reducir la pobreza.

Pues en los próximos días tendremos otra oportunidad para plantear la defensa de nuestros legítimos intereses, y de dar el ejemplo de disciplina estratégica en la región. Aprovechemos el espacio de la Cumbre de las Américas en Lima, en la primera quincena de abril próximo en Lima, para hacer un planteamiento sólido en pro del libre comercio:

Expliquémosle al presidente Trump y a los demás líderes del continente, cómo, en un mundo globalizado, una medida específica, dirigida a conseguir un resultado particular, puede desencadenar una serie de reacciones y reverberaciones que pueden hacer daño a todos, incluso al propio EEUU, que, con sus aranceles al acero y aluminio, puede terminar perdiendo inversiones, empleos y crecimiento.

El siguiente artículo de Martin Wolf, del Financial Times, conocedor de la intransigencia de Trump, plantea una defensa del sistema de libre comercio, desde la perspectiva de lo que puede hacer China para evitar una ‘guerra comercial’. Lampadia 

Cómo puede China evitar una guerra comercial con Estados Unidos

Beijing debe reconocer el cambio de percepciones de los estadounidenses y hacer algunas concesiones

Martin Wolf
Financial Times
27 de marzo, 2018
Traducido y glosado por Lampadia

 

¿Cómo debería responder China a la política comercial agresiva de Donald Trump? La respuesta es: estratégicamente. Necesita manejar una oleada creciente de hostilidad de EEUU.

De los acontecimientos ocurridos en Washington la semana pasada, el nombramiento de John Bolton como principal asesor del presidente de EEUU en seguridad nacional puede ser más trascendental que el anuncio de una acción comercial “sección 301” contra China. Sin embargo, el plan de imponer aranceles del 25 % a los 60 mil millones de dólares (aún no especificados) de las exportaciones chinas a los Estados Unidos muestra la agresión de la agenda comercial de Trump. Las tarifas propuestas son solo una de varias acciones dirigidas a las políticas relacionadas con la tecnología de China. Estos incluyen un caso contra China en la Organización Mundial del Comercio y un plan para imponer nuevas restricciones a sus inversiones en compañías de tecnología de EEUU.

Los objetivos de estas acciones estadounidenses no están claros. ¿Se trata simplemente de detener una supuesta mala conducta, como las transferencias forzosas (o el robo total) de propiedad intelectual? O, como sugiere el etiquetado de China como “competidor estratégico”, es para detener por completo el progreso tecnológico de China, un objetivo que es inalcanzable y ciertamente no negociable.

Trump también enfatizó la necesidad de que China reduzca su superávit comercial bilateral de Estados Unidos en US$ 100 mil millones. De hecho, su retórica implica que el comercio debe equilibrarse con cada socio. Este objetivo es, una vez más, inalcanzable ni negociable.

La visión optimista es que estos son movimientos de apertura en una negociación que terminará en un acuerdo. Una perspectiva más pesimista es que esta es una etapa en un proceso interminable de negociaciones tensas entre las dos superpotencias en el futuro. Una visión aún más pesimista es que las discusiones comerciales se romperán en un ciclo de represalias, quizás como parte de hostilidades más amplias.

Lo que suceda también dependerá de China. Debe reconocer el cambio en las percepciones de EEUU, de las cuales la elección de Trump es un síntoma. Además, en el comercio, los demócratas son mucho más proteccionistas que los republicanos.

¿Cuáles son las fuerzas que impulsan este cambio? El ascenso de China ha hecho que Estados Unidos tema la pérdida de su primacía. La autocracia comunista china está ideológicamente en desacuerdo con la democracia estadounidense. Lo que los economistas llaman “el choque de China” ha sido real e importante, aunque el comercio con China no ha sido la razón principal de los cambios adversos experimentados por los trabajadores industriales estadounidenses. Estados Unidos tampoco ha proporcionado la red de seguridad o el apoyo activo que necesitan los trabajadores y las comunidades afectadas.

Además, el acuerdo alcanzado cuando China se unió a la OMC en 2001 ya no es aceptable. Como dice Trump, Estados Unidos quiere una “reciprocidad” estricta. Finalmente, muchos empresarios argumentan que China está “haciendo trampa” en pos de sus objetivos industriales.

La experiencia muestra que las quejas nunca terminarán. Hace aproximadamente una década, las quejas se referían a los superávits en cuenta corriente de China, el tipo de cambio infravalorado y las enormes acumulaciones de reservas. Todo esto se ha transformado ahora: el superávit de la cuenta corriente ha caído a solo el 1.4 % del producto bruto interno. Ahora las quejas se han desplazado hacia desequilibrios bilaterales, transferencias forzosas de tecnología, exceso de capacidad y la inversión extranjera directa de China. China es exitosa, grande y diferente. Las quejas cambian, pero no el hecho que hay quejas.´

¿Cómo podría manejar China estas fricciones, exacerbadas por el personaje de Trump, pero arraigadas en profundas ansiedades?

En primer lugar, tomar represalias con contra medidas específicas, precisas y limitadas. Como todos los bullies, Trump respeta la fuerza. De hecho, él respeta a Xi Jinping.

En segundo lugar, desarmar las quejas legítimas o aquellas cuya reparación beneficia a China. La liberalización de la economía china es en interés propio de China, como demuestran los asombrosos resultados de 40 años de “reforma y apertura”. China puede y debe acelerar su propia liberalización interna y externa. Entre las quejas ampliamente compartidas de las empresas extranjeras, se encuentra la presión excesiva para transferir conocimientos técnicos como parte de las actividades comerciales en China. Tales “requisitos de desempeño” son contrarios a las normas de la OMC. China necesita actuar decisivamente en esto.

Tercero, haciendo algunas concesiones. China podría importar gas natural licuado de Estados Unidos. Esto reduciría el superávit bilateral, mientras que meramente reasignaría el suministro de gas en todo el mundo. Pero hacer lo mismo con los commodities en los que China es el mercado dominante del mundo sería mucho más problemático, ya que perjudicaría a otros proveedores. Es probable que Trump quiera que China discrimine contra los alimentos australianos o los aviones europeos. Ahí está el fin del sistema de comercio global liberal.

En cuarto lugar, multilateralizar estas discusiones. La cuestión de los excedentes en productos estándar como el acero no puede tratarse a un nivel puramente unilateral o bilateral. Como potencia global en ascenso, China podría desempeñar un papel central en la liberalización del comercio, fortaleciendo así el sistema y aumentando la participación mundial en la salud de la economía china. Operar a ese nivel global trae otro beneficio potencial: es difícil para las grandes potencias negociar bilateralmente, ya que tienden a ver las concesiones mutuas como humillantes.

Sin embargo, en el contexto global, una concesión puede verse como un beneficio para todos. Finalmente, al operar bajo la rúbrica de la OMC, China coloca a los europeos en una posición difícil. Los europeos comparten las ansiedades de Estados Unidos sobre las políticas de propiedad intelectual de China, pero también creen en las reglas. Si China tomara el camino correcto, los europeos podrían sentirse obligados a apoyarlo.

Estamos en una nueva era de competencia estratégica. La pregunta es si esto será manejado o conducirá a un colapso en las relaciones. La política comercial de Trump es una parte altamente desestabilizadora de esta historia. China debería tener una visión más amplia, por su propio bien y el del mundo. Lampadia




Impactos positivos de nuevas tecnologías

Impactos positivos de nuevas tecnologías

En Lampadia nos parece interesante difundir este tipo de información que muestra los impactos positivos para la humanidad que se pueden generar con las nuevas tecnologías:

IBM revela las innovaciones que cambiarán nuestras vidas en los próximos 5 años

Fuente: IBM Research
2018

Innovaciones tecnológicas parecen ocurrir todos los días, cambiando radicalmente la forma en que vivimos y trabajamos. Hace una década, nadie tenía un iPhone, la inteligencia artificial era una historia de película y la computación cuántica era un concepto teórico. Gracias a la velocidad de transformación, nuestro mundo parece muy diferente hoy de lo que era hace diez años. Entonces, ¿cómo será nuestra vida en un año, o cinco años?

5 en 5 es la lista de predicciones anuales que presenta IBM. Se trata de cinco innovaciones científicas con el potencial de cambiar la forma en que las personas trabajan, viven e interactúan en los próximos cinco años. Este año se enfoca en las tecnologías más disruptivas de nuestra era: inteligencia artificial, computación cuántica, blockchain y ciberseguridad.

1.    Nuestros océanos están sucios. Robots microscópicos que incorporan inteligencia artificial pueden salvarlos

Para 2025, más de la mitad de la población mundial vivirá en áreas con estrés hídrico, es decir, con un fuerte deterioro de los recursos de agua en cantidad y calidad. Pero hasta el momento, los científicos luchan incluso para lograr recopilar y analizar los datos más fundamentales sobre las condiciones en tiempo real de nuestros océanos, lagos y ríos.

IBM adelanta que en cinco años pequeños robots microscópicos con inteligencia artificial, conectados en red a la nube y desplegados en todo el mundo, serán capaces de monitorear continuamente el agua, un recurso crítico para nuestra supervivencia. Esto permitiría, por ejemplo, estudiar el comportamiento del plancton en su hábitat natural y en tiempo real, sin necesidad de recolectar muestras y llevarlas al laboratorio. El plancton es considerado un sensor natural y biológico de la salud acuática porque su comportamiento se altera incluso con pequeños cambios en la calidad del agua.

Existen sensores especializados que se pueden implementar para detectar sustancias químicas y condiciones específicas en el agua, pero se pierde información valiosa que permitiría, por ejemplo, alertar sobre especies invasoras o la introducción de nuevos productos químicos al agua. Actualmente en los océanos podemos encontrar sensores ópticos como el Oxygen (dispositivo electrónico que mide la proporción de oxígeno) y el espectrofotómetro (para medir la cantidad de intensidad de luz absorbida y la presencia de productos químicos) que tienen una vida útil de 2 años. El mayor problema es la bioincrustación, la acumulación de microorganismos y algas en el sensor y puertos de entrada.

Los investigadores de IBM están construyendo robots microscópicos pequeños y autónomos que pueden colocarse en cuerpos de agua para monitorear el plancton in situ, identificar diferentes especies y rastrear su movimiento en 3D. Los descubrimientos se pueden usar para comprender mejor su respuesta ante cambios en el entorno, desde temperatura a derrames de petróleo. Incluso, podrían emplearse para predecir amenazas como la marea roja.

A diferencia de otros sensores, no tiene lente y se basa en un chip generador de imágenes -como el de los teléfonos celulares- para capturar la sombra del plancton mientras “nada” al chip y generar una muestra digital de su salud, sin la necesidad de enfocar. En el futuro, podría estar equipado con Inteligencia Artificial para analizar e interpretar los datos localmente y así informar cualquier anormalidad en tiempo real para que podamos actuar. Al estar todos conectados en la nube de IBM es más seguro para los datos, más sencillo de monitorear, de indicarles acciones a todos a la vez o a uno en particular, escalable y flexible.

Estos pequeños robots comenzarán siendo miles para estudios en pequeña escala, pero en un plazo de cinco años, y con la ayuda de los socios interesados, podremos llegar a cientos de miles. Dependerá de cuántos casos de estudio obtengamos. Se trata de un herramienta que permitirá analizar en tiempo real datos de suma importancia y, si bien los microscopios son relativamente económicos, la infraestructura de IA puede tener un costo mayor en términos de desarrollo inicial, implementación y mantenimiento. A la larga, el proyecto será más barato y efectivo que cualquier cosa hasta ahora.

2.    A nadie le gustan las imitaciones. “Cripto-anclas” y blockchain se unirán contra falsificadores

El fraude le cuesta a la economía mundial más de USD 600 mil millones al año. Y en algunos países, casi el 70 por ciento de algunos medicamentos que salvan vidas son falsificados. Las cadenas de suministro complejas -compuestas por docenas de proveedores en varios países- facilitan que “los malos” manipulen todo y que “los buenos” tengan más dificultades para prevenir falsificaciones.

Las “cripto-anclas” son huellas digitales a prueba de manipulaciones que los investigadores de IBM están desarrollando para integrar en productos o parte de productos. En los próximos cinco años, los anclajes criptográficos utilizados con la tecnología blockchain garantizarán la autenticidad de un producto, desde su origen hasta las manos del cliente.

Por ejemplo, una prueba de sangre plástica para la malaria -del tipo que es falsificada por millones y que se transmite como genuina en toda África- podría estar grabada con un código óptico inalterable. Incluso las píldoras contra la malaria podrían recubrirse con tinta magnética comestible. Entonces, un médico o paciente podría verificar con un simple escaneo de un teléfono inteligente que su medicamente sea seguro y genuino.

Otro tipo de anclaje criptográfico emplea un sensor móvil o un teléfono con dispositivo óptico especial combinado con inteligencia artificial para aprender e identificar estructuras ópticas y características de todo. Todo esto en muy pocos segundos. Esta cripto-ancla puede emplearse para garantizar la autenticidad de contenido líquido -una botella de vino, por ejemplo- o un metal muy caro, incluso sirve para identificar la presencia de ADN en minutos.

Algunos de estos anclajes criptográficos harán más que autenticar bienes físicos. La computadora más pequeña del mundo (literalmente) es una plataforma de computación y arquitectura de dispositivo diseñada por IBM que es más pequeña que un grano de sal, costará menos de diez centavos fabricarla y puede monitorear, analizar, comunicar e incluso actuar sobre los datos. Encapsula varios cientos de miles de transistores en una huella apenas visible para el ojo humano y puede ayudar a verificar que un producto se haya manejado correctamente durante todo el proceso.

Se crean nuevas soluciones para abordar la seguridad alimentaria, autenticar componentes fabricados, productos genéticamente modificados, identificación de objetos falsificados y la procedencia de productos de lujo. Los primeros modelos podrían estar disponibles para los clientes en los próximos 18 meses. Y en cinco años, los avances en microfluídos, criptografía, memoria no volátil (tipo de memoria que no necesita energía para durar) y diseño llevarán estos sistemas del laboratorio al mercado.

3.    Los hackers van a hackear. Hasta encontrar el criptograma de red

La escala y la sofisticación de los ciberataques aumentan cada año, al igual que lo que está en juego. En cinco años, los nuevos métodos de ataque harán que las medidas de seguridad actuales sean completamente inadecuadas. Por ejemplo, dentro de muchos años, una computadora cuántica universal con millones de qubits podría calcular rápidamente las probabilidades y descifrar incluso la encriptación más sólida.

Los investigadores de IBM están desarrollando un nuevo método de seguridad diseñado para resolver esto. Se basa en una arquitectura subyacente conocida como “lattice cryptography”, es decir, criptografía de grilla de puntos que oculta datos dentro de estructuras algebraicas complejas. En matemáticas representan problemas muy difíciles de resolver como, por ejemplo, el “Problema del Vector más Corto”: encontrar el punto de la grilla más cercano al origen. Como no se puede resolver, los criptógrafos pueden usar la misma lógica para proteger información, incluso cuando las computadoras cuánticas sean lo suficientemente potentes como para descifrar las técnicas actuales.

La criptografía en grilla de puntos no es solo para frustrar futuras computadoras cuánticas, también es la base de otra tecnología de encriptación llamada cifrado homomórfico -Fully Homomorphic Encryption (FHE)-. En la actualidad, los archivos se cifran cuando están en tránsito y guardados, pero no cuando están en uso. Este proceso proporciona a los atacantes una gran oportunidad para ver o robar archivos en los momentos en que no están cifrados. Las tecnologías como FHE eliminan esta vulnerabilidad al permitir la realización de cálculos sobre los datos sin desencriptar el archivo, es decir sin acceder nunca a los datos reales. Hasta hace poco, FHE era lento y caro para ser empleado a escala, pero nuevas técnicas de aceleración de hardware y algoritmos redujeron el tiempo y costo de uso. Ahora se pueden hacer en horas o incluso minutos los cálculos que tomarían años.

FHE y otras herramientas de seguridad podrían permitir que muchas partes colaboradoras realicen cálculos en un archivo sin ver datos confidenciales ni exponerlo a los atacantes. Por ejemplo, una agencia de informes crediticios analizaría y generaría puntaje de crédito sin descifrar nunca los datos personales. Los médicos de atención primaria podrían compartir registros de pacientes con especialistas, laboratorios o investigadores de genómica de manera que cada uno accede a los datos pertinentes sin revelar la identidad de la persona.

Vivir en un mundo basado en datos significa que hay más riesgo que nunca de que se robe información personal. En 2017, los desafíos de la economía de datos -desde las violaciones masivas de datos hasta la manipulación intencionada de las plataformas en línea- captaron la atención mundial y plantearon interrogantes sobre cómo podemos aprovechar todos los beneficios de este nuevo mundo mientras que limitamos los riesgos. Esto solo puede suceder a través de un amplio compromiso de todos los actores y es urgente que los líderes empresariales y gubernamentales adopten principios de administración de datos y transparencia. IBM cree que las organizaciones que recogen, almacenan, administran o procesan datos tienen la obligación de tratarlos con responsabilidad. Esta convicción lleva más de 100 años incorporada dentro de nuestro compromiso de confianza y responsabilidad en todas nuestras relaciones. Esto explica por qué las mayores empresas del mundo han creído en IBM como el guardián y administrador de sus datos más valiosos.

La comunidad de seguridad ya se está preparando para el futuro. En diciembre de 2017, los científicos de IBM presentaron sus técnicas de encriptación post-cuántica al National Institute of Standards and Technology para su consideración como estándar global.

4.    Solo IA imparcial sobrevivirá

Dentro de cinco años, aumentará el número de algoritmos y sistemas de inteligencia artificial sesgados, similar al aumento que experimentaron los virus informáticos en los 1900’s. Pero actuaremos en consecuencia para encontrar nuevas soluciones que nos ayuden a controlar los sesgos en IA, nos permitan identificar el prejuicio que se esconde en los datos y podamos construir sistemas más justos y mejores.

Los sistemas de inteligencia artificial son tan buenos como los datos con los que se han entrenado. Los datos incorrectos pueden contener sesgos raciales, de género o ideológicos implícitos. El problema escala porque muchos sistemas de IA son entrenados con información de esa categoría y los datos tendenciosos puende generar resultados injustos. IBM cree que el sesgo puede ser contenido y minimizado, y que los sistemas de IA que puedan lograr ese efectos serán los más exitosos.

A medida que las personas y la IA trabajan cada vez más para tomar decisiones, los investigadores están buscando formas de garantizar que los prejuicios humanos no afecten a los datos o algoritmos utilizados para entrenar esas decisiones. Desde el MIT-IBM WATSON AI LAB están trabajando en modelado de inteligencia artificial y computación cognitiva, como enfoques contractuales a la ética, para describir los principios que las personas utilizan para tomar decisiones y determinar cómo sus mentes los aplican. El objetivo es construir sistemas capaces de emplear ciertos valores humanos y nociones del proceso de toma de decisiones.

El principio crucial, tanto para humanos como para los sistemas, es evitar el sesgo y, por lo tanto, no discriminar. El sesgo en el sistema de IA se produce principalmente en los datos o en el modelo algorítmico. A medida que trabajamos para desarrollar sistemas de inteligencia artificial en los que podamos confiar es fundamental crearlos y entrenarlos con datos imparciales. Al mismo tiempo es clave que los algoritmos puedan explicarse. IBM cree que las empresas deben ser capaces de explicar cómo sus algoritmos llegaron a determinada recomendación; si no pueden hacerlo, sus sistemas no deberían estar en el mercado.

Con este objetivo en mente, los investigadores de IBM desarrollaron una metodología para reducir el sesgo que puede estar presente en el conjunto de datos de entrenamiento, entonces cualquier algoritmo que los utilice para “aprender” perpeturará la menor inequidad posible. Los científicos de IBM también idearon una metodología para probar los sistemas de inteligencia artificial incluso cunado los datos de entrenamiento no están disponibles. Propone un sistema de clasificación de prejuicios que pueda determinar el nivel de equidad: el sistema podría ser imparcial y capaz de compensar el sesgo de los datos (escenario ideal), podría simplemente seguir los sesgos de su entrenamiento (se puede resolver mediante téncicas de despersonalización de datos) o incluso podría introducir un sesgo si los datos son justos o no (peor escenario). El usuario final del sistema de IA podrá determinan el nivel de confiabilidad en función del nivel de prejuicio.

Identificar y mitigar el sesgo en los sistemas de IA es esencial para generar confianza entre los humanos y las máquinas que aprenden. A medida que los sistemas encuentran, entienden y señalan las inconsistencias humanas en la toma de decisiones, también podrían revelar formas en que somos parciales y prejuiciosos para que adoptemos puntos de vista más imparciales e igualitarios.

5.    Hoy, la computación cuántica es el patio de los investigadores. En cinco años, será el principal medio de trabajo

En cinco años, los efectos de la computación cuántica llegarán más allá del laboratorio de investigación. La computación cuántica ya no será exclusiva de la comunidad científica, sino que será utilizada ampliamente por nuevas categorías de profesionales y desarrolladores que buscan este método emergente para resolver problemas que una vez se consideraron insolubles.

La computación cuántica será omnipresente en las aulas universitarias, e incluso estará disponible -hasta cierto punto- en el nivel secundario. Desde cursos de ciencia de la computación hasta química y clases de negocios, los estudiantes se familiarizarán con esta tecnología y buscarán trayectorias profesionales relacionadas. Se integrará en una variedad de planes de estudio y aprender sobre el tema será un requisito previo para los programas de ciencia e ingeniería en todo el mundo. Todas las universidades tendrán al menos un programa y enseñarán a sus alumnos a través de experimentos reales y prácticos, que se ejecutarán en computadoras cuánticas en funcionamiento a las que se accederá a través de la nube. Ningún estudiante se graduará sin haber estado expuesto a aprender sobre computación cuántica.

Es interesante porque una nueva comunidad de desarrolladores aparecerá. El concepto de “aprender a codear” (escribir código) tendrá su versión cuántica en la currícula de ciencias de la computación. Los algoritmos cuánticos se enseñarán junto a los clásicos en teoría de la información.

Esta explosión en el conocimiento público general, en los próximos cinco años, ayudará a iniciar la era comercial de la cuántica, un período en el que la computación cuántica y sus primeros casos de uso se desarrollan rápidamente. Es probable que se trate de casos que utilizarán computadoras cuánticas para simular exactamente moléculas y reacciones químicas cada vez más grandes, lo que podría ayudar a acelerar la investigación y en el futuro conducir a la creación de nuevos materiales, desarrollo de fármacos más personalizados o descubrimiento de fuentes de energía más eficientes y sostenibles.

Los investigadores de IBM ya están logrando hitos de la química cuántica, por ejemplo, emplearon una computadora cuántica para simular con éxito la unión atómica en hidruro de berilio (BeH2), la molécula más compleja jamás simulada por una computadora cuántica. En el futuro, continuarán abordando problemas con una complejidad cada vez mayor, alcanzarán y superarán eventualmente lo que podemos hacer solo con las máquinas clásicas.

Dentro de cinco años, la industria habrá descubierto las primeras aplicaciones donde una computadora cuántica (utilizada junto con una computadora clásica) ofrecerá un beneficio para resolver problemas específicos. Se otorgará una clara ventaja a los primeros usuarios en la era de la computación cuántica.

En el futuro, las computadoras cuánticas ya no serán vistas como misteriosas. El público abrazará esta nueva era. Nuestra comprensión colectiva seguirá creciendo y afectando a todas las industrias y a todas las instituciones educativas. Los conceptos y el vocabulario arraigados en la computación cuántica ya no serán vagos o incomprendidos, sino que formarán parte de la lengua convencional. Las conversaciones sobre la computación cuántica serán normales. Todos sabrán qué es un qubit o estarán familiarizados con la idea.

Ver más información en el siguiente link: http://research.ibm.com/5-in-5/.

Lampadia




Se fue el 2015, ¿y ahora qué?

Se fue el 2015, ¿y ahora qué?

Recuperemos una Visión Positiva del Perú

Se nos va un año que debió ser mucho mejor para los peruanos.

  • Por el lado de nuestra clase dirigente, los políticos fueron exacerbando cada día más sus relaciones y los líderes de la sociedad civil fueron alejándose cada vez más del debate nacional.
  • La economía siguió contrayéndose y, contra todos los pronósticos oficiales, cerraremos el año con un crecimiento menor al 3% del PBI. (El Presidente Humala perdió la apuesta que hizo con Christine Lagarde en la reunión de los Gobernadores del FMI y el BM).
  • Los peruanos fuimos perdiendo confianza en el futuro mientras IPAE encarpetó la “Visión del Perú al Tercio de Siglo”, revisada el 2014, supuestamente hecha para abrir la escena electoral con algunos lineamientos coherentes.
  • Nos zambullimos en una gran confusión sobre nuestras verdaderas capacidades. ‘Ya no podemos crecer alto’, ‘Somos parte de la región más volátil’, etc.
  • No supimos diferenciar los impactos de los shocks externos, de nuestras propias falencias, que en nuestra opinión fueron determinantes para el tropezón económico, social y político en el que nos hemos ubicado.
  • Iniciamos el proceso electoral con mucha inquina entre los contendores y poco sentido de responsabilidad.

En verdad el año 2015 es solo el colofón de un proceso que empezó el 2011; cuando, después de diez años de inclusión en serio y de una cierta distancia de nuestras políticas públicas con los efluvios ideológicos, nos entregamos a una nueva ola de ideologización y de negación de nuestros avances y desarrollos. Ya hemos explicado muchas veces que en 2011 se produjo un punto de inflexión en nuestra realidad. (Ver en Lampadia: En el 2011 se dio el Punto de Inflexión de nuestro Desarrollo).

Por el lado del mundo hemos enfrentado una serie de procesos importantes que muchas veces han sido usadas como disculpas para tapar nuestras debilidades.

  • Se recuperaron las economías de EEUU y Europa, pero se ajustaron las de los países emergentes, empezando por el ‘cambio de motores en vuelo’ de China, que ahora transita de los impulsos de la inversión y exportaciones al del consumo interno (ver en Lampadia: China: Un Gigante cambia de Piel).
  • Menores precios de los commodities. La gran disculpa de los países incapaces. Hasta el BM indicó que América Latina era la región más vulnerable del planeta. Éste y el próximo año, el crecimiento de la región será negativo. Pero el Perú es distinto, no debió caer en el saco de los demás. (Ver: Sudamérica: Crecimiento visto con lentes oscuros y El Perú no es igual a ningún otro país). Una cosa es el desastre labrado por los gobiernos de Venezuela, Brasil y Argentina; o la parada de la inversión privada en Chile promovida a pulso por el gobierno de Bachelet (“woman made”); y la frenada de la inversión privada en el Perú, producto de los conflictos socio-políticos que el gobierno no supo enfrentar y la paralizante sobre regulación de las inversiones; y otra cosa muy distinta es concluir que el Perú solo flotaba en nuevas condiciones globales que nos impedían invertir y crecer. En verdad tenemos muchos proyectos productivos y de infraestructuras ‘a punto de caramelo’, listos para florecer, que nos permitirían crecer pronto, más de 6% anual.
  • Menor financiamiento global por los cambios de la política monetaria de EEUU que por fin aumentó, ligeramente, sus tasas y que lo seguirá haciendo paulatinamente.
  • El regreso de Rusia, de la mano de Putin, a ser ‘el niño malo del barrio’.
  • La explosión de la violencia asesina desatada por ISIS.
  • La crisis humanitaria de doble cuño (tragedia para los migrantes y para los europeos) desatada por la masiva migración de sirios y nor-africanos a Europa.
  • Se sigue profundizando la nueva revolución tecnológica de la mano de la robótica, la inteligencia artificial y otras, que nos ofrecen importantes oportunidades de desarrollo y al mismo tiempo nos exigen dar un gran salto en educación, salud, infraestructuras y tecnología, para no perder el tren de la historia. (Ver en Lampadia: El futuro del empleo con Robots e Inteligencia Artificial (II)).

Y, ¿cómo debemos ver el 2016?

En Lampadia creemos que el 2016 nos da la gran oportunidad de retomar el camino de la prosperidad, el bienestar común y el enfoque o convergencia social hacia la consolidación del Perú como uno de los mejores países del mundo para vivir.

  • Después de hacer ‘balance y beneficio de inventario’, la evaluación del actual gobierno, que trajo la ideología y la confusión social de regreso a la vida pública, tenemos que concluir que no se puede elegir un gobierno sin hacer un acto de madurez y en función de una mirada de largo plazo.
  • Desde la promulgación de la Constitución de 1993 y con el regreso de la inversión privada a la vida económica del país, hemos revertido 30 años de parálisis y empobrecimiento (60s – 80s). Parece que el 2011 no nos la creíamos, pero después del tropezón del 2011 que apagó varias luces, es más fácil entender las diferencias entre una y otra realidad.
  • Nuestra nueva clase media, tal vez pensaba que no era necesario preocuparse de la vida política del país, pues todo avanzaba sin tener que involucrarse. Pero después del tropezón de los últimos años, no pueden renunciar al futuro al que estaban accediendo.
  • Si bien desde hace 20 años (CADEs y otros), la sociedad civil ha puesto sobre la mesa la necesidad de desarrollar importantes reformas institucionales, se puede decir que recién ha calado en la conciencia política y social y, por lo tanto, deberá ser preocupación esencial del electorado y del próximo gobierno.
  • Algo que además debe ayudarnos a tomar las decisiones correctas es la revolución tecnológica, que como hemos explicado puede ser muy disruptiva a no ser que sepamos prepararnos y ponernos al día con prontitud. Prepararnos implica crear riqueza para cerrar las brechas que nos separan del primer mundo en educación, salud, infraestructuras y tecnología. El Perú tiene las capacidades para hacerlo, pues tenemos gente trabajadora y creativa y, todos los recursos naturales que podemos necesitar. No dejemos de tener presente la advertencia de Yuval Harari: “Países que, como China, perdieron el tren de la Revolución Industrial, 150 años más tarde han conseguido recuperar el terreno perdido, en gran medida, en términos económicos, gracias a la mano de obra barata. Esta vez, quienes pierdan el tren no tendrán una segunda oportunidad. Hoy en día, si un país, un grupo de personas, se queda descolgado, no tendrá una segunda oportunidad, en particular porque la mano de obra barata no tendrá ninguna relevancia”.

A diferencia de la prédica de los “doomsayers” (los agoreros del desastre), algunos políticos y economistas que se multiplican en los medios de prensa anunciando nuestra supuesta incapacidad para crecer y crear riqueza, en este portal decimos que ¡El Perú es Infinito! Lampadia    




Preparándonos para recibir a otro Niño

Preparándonos para recibir a otro Niño

Durante los últimos meses, se viene anunciando la posibilidad de un fenómeno del Niño que va de una fuerza “intermedia” hasta “muy fuerte” y  podría causar estragos en los patrones climáticos de todo el mundo. Para el Perú, que todavía recuerda los impactos del ´97, es crucial poder predecir y prevenir los daños que podría causar este fenómeno.

Según científicos de todo el mundo, parece que se avecina un gran “El Niño”. Pero los eventos de este fenómeno son a menudo impredecibles y llenos de sorpresas. Así que nada está garantizado por el momento. Primero, es importante entender cómo y por qué se forma El Niño, lo que sabemos sobre el evento de 2015 y cómo nos afectaría (al Perú y al mundo) un potencial fenómeno de categoría “muy fuerte”.

¿Qué es El Niño? Es un cambio temporal en el clima del océano Pacífico, en la región alrededor de la línea ecuatorial. Sus efectos se dan tanto en el océano como en la atmósfera. Típicamente, la temperatura de la superficie del océano aumenta unos grados centígrados. Al mismo tiempo, el lugar donde se producen tormentas fuertes en la línea ecuatorial se mueve hacia el este. Aunque estas variaciones pueden parecer pequeñas, tienen grandes efectos en el clima mundial.

Por lo general, el viento sopla con fuerza de este a oeste a lo largo de la línea ecuatorial en el Pacífico. Esto hace que se acumule agua (alrededor de medio metro) en la parte occidental del Pacífico. En la parte oriental, el agua más profunda es empujada a la superficie para reemplazar el agua que está yendo al oeste. Por lo tanto, la situación normal es agua tibia (alrededor de 30 ºC) en el oeste y el fría (alrededor de 22 ºC) en el este.

 

En un El Niño, los vientos que empujan que el agua se debilitan. Como resultado, una parte del agua caliente acumulada en el oeste se desploma de nuevo al este y esto hace que no se empuje mucha agua fría hacia la superficie. Por lo tanto, el agua en el Pacífico oriental se torna  más cálida, lo que es una de las señales principales de un El Niño.

El océano más caliente afecta a los vientos, los hace más débiles. Entonces el océano se calienta, lo que hace que los vientos se debiliten, lo que hace que el océano se vuelva más cálida… esto se llama una retroalimentación positiva y es lo que hace crecer un El Niño.

El último fenómeno El Niño sucedió en 1997-1998 y terminó causando una destrucción valorizada en US$ 35 mil millones y 23,000 muertes en todo el mundo. Es por este motivo que existe tanta preocupación sobre cuán fuerte podría llegar a ser el próximo. En el Perú, según datos de la Corporación Andina de Fomento (CAF), los daños al agro ocasionaron pérdidas superiores a los US$612 millones.

Para una mayor visualización, compartimos un video del Centro Nacional para la Investigación Atmosférica  (NCAR, por sus siglas en inglés) que muestra una breve comparación de los cambios en la temperatura superficial del mar entre el principal evento de El Niño de 1997-1998 y el evento de El Niño emergente de 2015.

https://www.youtube.com/watch?v=whsQbIwWjBo

El martes, la Organización Meteorológica Mundial declaró este fenómeno como “muy fuerte” y algunos científicos han señalado que las temperaturas superficiales del mar en una parte clave del Pacífico son más altas que en eventos anteriores. Los meteorólogos con la Administración Oceánica y Atmosférica Nacional y la Universidad de Columbia dijeron en su actualización de agosto que las temperaturas en la región podrían llegar a más de 3.5 ° C por encima de lo normal (esto sólo se ha registrado tres veces en los 65 años que se viene supervisando, incluyendo el evento 1997-1998, así como 1982-1983 y 1972-1973).

Abraham Levy, Director de Ambiental Andina, le comentó a Lampadia sobre las posibilidades de la llegada de este fenómeno y su intensidad: “Este es un niño canónico, un niño grande. (…) Yo pienso en base a un razonamiento absolutamente empírico, que si el niño en el centro del Pacífico llega a tener magnitudes tan intensas, va a ser bien difícil que en la costa peruana no pase nada porque desde ahí viene el agua caliente entonces de todas maneras van a haber impactos.”

Fuente: Abraham Levy

¿Cuáles serían las consecuencias de este Niño? Un estudio reciente de la Universidad de Cambridge, “Fair Weather or Foul? Los efectos macroeconómicos de El Niño “, encontró que en promedio, los episodios de El Niño afectan negativamente la actividad económica en Australia, Chile, Perú, Indonesia, India, Japón, Nueva Zelanda y Sudáfrica. Las razones son variadas: La sequía y los rendimientos de las cosechas se reducen en Australia y la India, hay incendios forestales en Indonesia y una pesca menos productivas en Perú.

Pero ese estudio también encontró que, en promedio, El Niño tiende a impulsar las economías de Argentina, Canadá, México, e incluso los Estados Unidos, al menos en el muy corto plazo. En promedio, El Niño puede impulsar la economía de Estados Unidos en alrededor de 0.55 % del PBI, lo que se traduciría más de US$ 90 mil millones este año, afirma un estudio del Fondo Monetario Internacional. Una vez más, los factores son diversos: Además de traer la lluvia necesaria para California y Texas, El Niño se asocia con una menor actividad de tornados en el medio oeste de Estados Unidos y un menor número de huracanes en el Océano Atlántico.

En el Perú, específicamente, este fenómeno significa que el Océano Pacífico frente a la costa de Perú aumentará su temperatura, afectando la pesca, en especial la de anchovetas, que es el 90% de la producción pesquera del Perú. Además, esto generaría una pérdida de biomasa para años posteriores.

En el sector agropecuario, el cambio de temperatura no permitirá que la siembra de productos en la costa llegue a cosecharse, pues las altas temperaturas generarán la aparición de plagas e insectos que atacan a las plantaciones. Otro impacto que se teme es la inundación de los cultivos, producto de la crecida de los ríos, generando millonarias pérdidas.

A diferencia de los Niños anteriores, el Perú tiene ahora una basta producción agrícola en el norte del país que sería afectada severamente por el volumen y persistencia de las lluvias.

Perú ya declaró un estado preventivo de emergencia en 14 de sus 25 departamentos y ha presupuestado unos US $ 70 millones para prepararse. El ministro de Agricultura, Juan Benites, quien presentó la estrategia adoptada por el Estado para afrontar el fenómeno de El Niño ante miembros de las misiones internacionales, afirmó que “las obras de prevención ante el desborde de ríos ejecutadas en Piura, Tumbes y Lambayeque están a un 60% de implementación”.

Además, el ministro de Transportes y Comunicaciones, José Gallardo, planteó las medidas de prevención: “En el caso de las vías nacionales debemos prevenir tres tipos de riesgos: deslizamientos, afectaciones de puentes y las inundaciones, cada una requiere estrategias distintas”.

Esperamos que se puedan tomar todas las acciones necesarias para poder sobrellevar este fenómeno y que, a futuro, podamos incluir la variable Niño en nuestros planes, presupuestos y diseños de infraestructuras. Lampadia




Aristóteles, robot esclavos, y un nuevo sistema económico

Aristóteles, robot esclavos, y un nuevo sistema económico

Por John G. Messerly, publicado en “Reason and Meaning” el 27 de mayo 2015

Traducido y comentado por Lampadia

John G. Messerly es un Académico Afiliado del ‘Institute for Ethics and Emerging Technologies’ (IEET). Recibió su doctorado en filosofía en la Universidad de St. Louis en 1992.

Comentario de Lampadia:

Recientemente, estamos siguiendo de cerca la llamada ‘tercera revolución industrial’ que está basada en un salto tecnológico exponencial. Esta tendrá muchísimos impactos en la vida de los seres humanos. Uno de los más angustiantes es el del empleo y otro, poco analizado aún, es el de los aspectos éticos.

En este artículo de Messerly, encontramos una excelente contribución a estos temas, que mientras más pronto podamos conocer, más pronto podremos prepararnos, y ojalá, ser parte del diseño del futuro que empieza a desenvolverse.

En Lampadia vamos a crear pronto un nuevo repositorio sobre la revolución tecnológica, sus impactos y nuestras capacidades para superarlos.

 

Aristóteles, robot esclavos, y un nuevo sistema económico – Messerly

El libro de Jaron Lanier “¿Quién posee el futuro?”, trata sobre el papel que juega la tecnología tanto en la eliminación de puestos de trabajo y el aumento de desigualdad de ingresos. Al inicio del libro, Lanier cita el libro ‘Política’ de Aristóteles:

“Si cada instrumento pudiera realizar su propio trabajo, obedeciendo o anticipándose a la voluntad de otros, como las estatuas de Dédalo, o los trípodes de Hefesto, que, dice el poeta, por su propio acuerdo entraron en la asamblea de los dioses; Si, de igual manera, el aparato tejiera y el plectro tocara la lira sin una mano que los guíe, los jefes de los obreros no querrían siervos, ni los amos esclavos.”

 

 

Aristóteles vio que la condición humana depende en gran medida de lo que las máquinas pueden y no pueden hacer; por otra parte, podemos imaginar que las máquinas van a hacer mucho más.

Si las máquinas hicieran más de nuestro trabajo, todo el mundo, incluso los esclavos, serían más libres. Entonces, ¿cómo respondería Aristóteles a la tecnología actual? ¿Abogaría por un nuevo sistema económico que responda a las necesidades básicas de todos, incluidos los que ya no tienen que trabajar; o trataría de eliminar a aquellos que no poseen las máquinas que dirigen la sociedad?

Seguramente esta pregunta es relevante en el mundo moderno. Si, como sugiere Lanier, sólo aquellos cerca de los equipos que ejecutan la sociedad tienen buenos ingresos, entonces que ocurre con el resto de nosotros? ¿Qué pasa con los trabajadores de la fábrica de acero y las fábricas de automóviles, los carniceros y cajeros de los bancos, y cada vez más, los contadores, profesores, abogados, ingenieros y médicos cuando la inteligencia artificial mejora? (Lanier analiza cómo va a suceder en su libro.)

A Lanier le preocupa que los autómatas, especialmente la Inteligencia Artificial (IA) y la robótica, crearan una situación en la que no tenemos que pagarles a otros. ¿Por qué pagar por un servicio de limpieza si se tiene una sirvienta robótica, o a los ingenieros de software si los equipos son auto-programables? Aristóteles utiliza la música para ilustrar su punto. Dijo que fue terrible esclavizar a la gente para que hagan música (tocar instrumentos en su tiempo era indeseable e involucraba mucha mano de obra), pero necesitamos la música, así que alguien debe ser esclavizado. Si tuviéramos máquinas para hacer música o pudiéramos vivir sin ella, eso sería mejor. La música es una opción interesante, porque en la actualidad muchos quieren utilizarla para ganarse la vida, pero casi nadie hace dinero por su música a través de la publicidad de Internet. Las personas pueden ser seguidas en línea por su música o su blog, pero rara vez se les paga por ello.

Así que, ¿qué hacemos? ¿Tenemos que eliminar a las personas aparentemente innecesarias, para ya no tener que lidiar con ellas? (Recuerde que casi todos nosotros serremos innecesarios en un futuro cercano) ¿Tendrán que retirarse del país o de la comunidad cerrada donde nuestra aparente seguridad es comprada por puestos militares del imperio y sus mercenarios pagados de todo el mundo? ¿Cuando las primeras víctimas de la sociedad duermen en las calles, pueblan nuestras prisiones, sufren desempleo, o involuntariamente se ven forzadas a unirse a nuestros ejércitos voluntarios? (Recuerde esto ustedes contadores, abogados, profesores e ingenieros de software, ¡que este mundo está viniendo para ustedes también!) ¿O deberíamos reconocer cómo nos beneficiamos de los demás, de nuestros diversos temperamentos y talentos, desde la seguridad y el sustento que logramos en números?

 

 

Así que la pregunta a la que nos enfrentamos ahora es la siguiente: ¿qué sucede con las personas ‘extra’, casi todos nosotros, cuando la tecnología hace todo el trabajo o uno es remunerado solo por el trabajo que las máquinas no pueden hacer? ¿Al resto de nosotros nos eliminan o morimos de hambre lentamente? Sorprendentemente Lanier piensa que estas preguntas están fuera de lugar. Después de todo, la inteligencia humana y los datos humanos son los que impulsan las máquinas. Más bien, la cuestión es cómo pensamos sobre la labor que las máquinas no pueden hacer.

Creo que Lanier está en lo cierto. Podemos pensar en el trabajo no automatizado desde algo escencial hasta algo frívolo. Si pensamos en ello como frívolo, entonces también lo son las personas que lo producen. Si no nos preocupamos por la expresión humana en el arte, la literatura, la música, el deporte o la filosofía, entonces ¿por qué preocuparnos por las personas que lo producen?

Pero incluso si las máquinas escriben mejor música o poesía o blogs sobre el significado de la vida, aún podríamos valorar el esfuerzo humano. Incluso si las máquinas hicieran todo el trabajo de la sociedad aún podríamos compartir la riqueza con la gente que quiere pensar y escribir y tocar música. Tal vez la gente simplemente quiere disfrutar de estas actividades. Ningún ser humano juega al ajedrez tan bien como las mejores supercomputadoras, pero la gente todavía disfruta jugando al ajedrez; yo no juego al golf tan bien como Tiger Woods, pero igual lo disfruto.

Voy a ir más lejos. Supongamos que alguien quiere sentarse en la playa, surfear, esquiar, jugar golf, fumar marihuana, ver la televisión, o coleccionar monedas. ¿Y a mí que me importa? Tal vez una sociedad compuesta por personas satisfechas haciendo lo que quieren es mejor que una informada por la ética protestante del trabajo. Una sociedad de fumones, que miran televisión, esquían, juegan golf y surfean, probablemente sería más feliz que en la que vivimos ahora. (La evidencia muestra que los países más felices son los que tienen las redes más fuertes de protección social, los que tienen las vacaciones pagadas y más generosas licencia políticas; los países europeos y escandinavos occidentales.) La gente todavía escribe música y libros, levantar pesas, hace voluntariado, y visita a sus nietos. ¡No necesariamente se convertirán en adictos a las drogas!

Esto es lo que yo imagino. Una sociedad donde las máquinas hacen todo el trabajo que los humanos no quieren hacer; y los seres humanos se expresarán de la manera que quieran, sin perjudicar a los demás. Una sociedad mucho más como Dinamarca y Noruega, y mucho menos como Alabama y Mississippi. Sí creo que todas las personas tienen el derecho, sí derecho, de vivir con la cantidad mínima que se necesita para vivir una vida humana decente. Todos nosotros nos beneficiaríamos de esta disposición, ya que todos tenemos mucho que aportarnos el uno al otro. Les dejo con algunas palabras inspiradoras del joven californiano auto-didáctico, Eliezer Yudkowsky:

No existe ningún mal que tenga que aceptar porque “no hay nada que pueda hacer al respecto”. No hay niño maltratado, ningún campesino oprimido, ningún mendigo hambriento, ningún joven adicto al crack, ningún paciente de cáncer, literalmente, no hay uno al que no pueda mirar a los ojos. Estoy trabajando para salvar a todo el mundo, sanar el planeta, resolver todos los problemas del mundo.