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El Pueblo

El Pueblo

Jaime Spak
Para
Lampadia

Un antiguo amigo mío que vive hace mas de 50 años en Estados Unidos, pero que siempre tiene presente la situación en el Perú, me hizo una pregunta: ¿por qué en tus artículos solo escribes de los problemas del Perú y no de las cosas buenas que tenemos?

Me puse a pensar y creo que al momento de escribir estoy en un estado de animo como muchos de mis compatriotas y me es difícil escribir positivamente en un momento tan negativo como el que estamos viviendo.

Pero siguiendo su sabio consejo, voy a intentar en este articulo ser positivo y hare una reflexión con respecto a esta palabra tan usada por el presidente Castillo y sus correligionarios: “el pueblo”.

 Castillo ha Indicado en innumerables ocasiones, que las grandes decisiones de su gobierno las iba a tomar el pueblo y entonces viene mi primer interrogante: ¿a qué pueblo se refiere?

Pues cada vez que Perú Libre habla del “pueblo “menciona a las personas olvidadas en las serranías, que evidente son parte del pueblo, pero creo que no mencionan al “otro pueblo”, aquel de la gente pujante, emprendedora, lo que algunos han llamado peyorativamente el ‘Nuevo Perú’.

Pero ese Nuevo Perú, no es nuevo, es el de siempre, de gente que ha trabajado de una manera indesmayable para lograr un futuro mejor para ellos y sus familias.

Si después de haber vivido la terrible época del terrorismo e hiperinflación, hemos podido avanzar a lo largo de los años y haber disminuido la pobreza en más de 30 puntos, es que ese pueblo ha tenido una gran participación en lograrlo.

  • El pueblo es gente como mi amigo Osmar, un pequeño comerciante cajamarquino que vino hace muchos años a la capital, empezó vendiendo frutas en una carretilla en Lince, y en base a su esfuerzo de años hoy en día es dueño de una bodega y vende sus productos incluso por delivery, en una pequeña camioneta que compro mediante un crédito blando, gracias a la competencia bancaria de una economía libre

  • Pueblo son Félix y Alonso, profesionales de la peluquería que han logrado en base a esfuerzo y al trabajo con la familia tener sus propios establecimientos para atender a la numerosa clientela.

  • Pueblo es Eusebio, el pescador que se levanta a la las 4 am para ir al Centro de Distribución de Villa María del Triunfo y traer el pescado fresco que distribuye a los mejores restaurantes.

  • Pueblo es la señora Juana, con la que me cruzo todas las madrugadas que camino y siempre tiene un gentil, buenos días, mientras está limpiando la ciudad, para que se vea pulcra.

  • Pueblo son los miles de trabajadores de construcción civil que trabajan en jornadas seguidas, para levantar bellos edificios en todo el Perú.

  • Pueblo es amigo Porta, que fue almacenero en la fábrica que yo dirigía y luego de renunciar a su puesto, constituyo una pequeña empresa que fue creciendo y hoy en día tiene una bella planta de alta tecnología y ahora es mi proveedor.

  • Pueblo es mi amigo Christian, kinesiólogo del equipo de mis amores y que, en base a su esfuerzo, es propietario de un centro de rehabilitación para deportistas y público en general.

Puedo seguir con muchos ejemplos más, pero lo interesante es que si les preguntan a ellos si desean un país comunista, pues rotundamente les dirán que no.

Lo único que desean es que los dejen trabajar y les den condiciones de estabilidad para que sigan progresando en cada uno de sus emprendimientos.

Pueblo es eso, y lo debe de tener muy presente el presidente Castillo, pueblo no es el arrogante de Cerrón que utilizando su puesto de gobernador de Junín delinquió y se ha ganado una sentencia firme.

Pueblo no lo representa un señor Ciro Gálvez, que cree que porque se disfraza y se dirige en quechua ya tiene patente de corso y se olvida que es muy cuestionado por sus malos manejos en la notaria de Huancayo, donde tiene muchas denuncias por malos manejos.

Pueblo no lo representa Bellido, que se presenta en el congreso y se pone a Chacchar Coca. 

Es como si la señora Bermúdez, primera ministra del anterior gobierno de Sagasti, saque su pan con palta para comer, mientras los congresistas le están dirigiendo la palabra. 

Uno puede hacer uso de sus costumbres, pero eso se hace en los lugares adecuados o privados y no frente a millones de televidentes.

A mi querido amigo le diría: el pueblo peruano es mas grande que sus problemas, puedo dar miles de ejemplos de gente emprendedora. He utilizado solo de gente que conozco y que los tengo cerca, creo que es la más clara expresión de lo que los peruanos deseamos. 

Somos un pueblo maravilloso, con una mixtura de razas y culturas, pero sobre todo los peruanos somos gente gentil, hospitalaria y muy trabajadora.

Voy a terminar con un pensamiento de otro amigo que vino de la Argentina y me dijo: “vivir en el Perú es un estado de ánimo” de aquí solo me sacan con mi traje de madera …. Lampadia




Las dos contradicciones que un nuevo Premier deberá resolver

Las dos contradicciones que un nuevo Premier deberá resolver

Jaime de Althaus
Para Lampadia

Hay dos contradicciones que bloquean el esfuerzo nacional necesario para salir del profundo pozo económico y sanitario en el que hemos caído: la confrontación como eventual estrategia presidencial para aumentar popularidad, que afecta la necesidad de formar un comando unitario nacional para la recuperación; y la orientación populista e intervencionista del proceso parlamentario y político en general, que va en el sentido contrario a la necesidad de una mayor libertad económica para que los emprendimientos puedan reactivarse y volver a levantar alas.

Se trata de dos formas de populismo: político, y económico o social. El populismo político consiste en confrontar a un supuesto enemigo del pueblo para construir apoyo. Es lo que en cierta medida hizo el presidente con su amenaza de expropiación a las clínicas privadas, capitalizando casos de censurables cobros excesivos. La estrategia le funcionó y, a diferencia de la que desarrolló contra el Congreso disuelto, puede tratarse de un caso puntual, superable. Porque sería irracional, suicida, que se acostumbrara a enfrentar, solo por popularidad, a un sector privado que es el responsable del 80% de la economía nacional. Haría imposible concretar el necesario esfuerzo unitario público-privado para definir y aplicar un plan de recuperación económica nacional.

La necesidad de una voluntad política unificadora se ha vuelto ahora más acuciante desde que el descubrimiento doloroso de que hemos tenido uno de los peores resultados globales en la lucha contra la pandemia, luego de haber creído que habíamos respondido mejor que otros, ha reinstalado nuevamente la lucha de todos contra todos en la repartición de responsabilidades, equivocaciones y abusos. Se ha abierto un momento disgregador. La empresa privada es objeto de una ofensiva ideológica y política masiva pese a que una de las razones de los malos resultados fue haberla excluido de las estrategias sanitarias y económicas. El Congreso anuncia interpelaciones, comenzando, por supuesto, por la ministra de Economía, al mismo tiempo que la máquina de producción de proyectos populistas se acelera cada día. Mientras tanto, se multiplican las divisiones internas en las instituciones: en el Ejecutivo, el Premier hinca a la ministra de Economía; en el congreso, las bancadas se dividen a veces en tantas partes cuantos integrantes tienen; entre los empresarios, ASBANC, la SNI y ADEX critican a CONFIEP.

Por su parte, el populismo económico o social también contiene, aunque no siempre, el componente de un enemigo al que hay que arrancarle rentas en beneficio del pueblo, como una manera de conseguir votos. Pueden ser las APP que cobran peajes, las AFP, los bancos, las farmacias, las clínicas, o hasta la ONP, que en realidad es el tesoro público. El problema es que ello no solo anula capacidades de inversión y recuperación de las empresas afectadas, sino que al golpear la seguridad jurídica o los derechos de propiedad, o afectar el mecanismo operativo de la economía de mercado que es el sistema de precios, o la viabilidad fiscal del país, se ahuyenta inversiones, se mata el futuro. Lo mismo con ese pariente cercano del populismo, que es el clientelismo, cuando se regala la propiedad de los puestos de trabajo en el sector salud, por ejemplo, anulando la viabilidad de la reforma del sistema de salud.   

Lo que los emprendimientos de todo tamaño van a necesitar para recuperarse, para volver a crecer, para generar empleo, es aire, libertad económica, la menor cantidad de trabas posible. Y el problema es que el desenfreno populista va en la dirección de más controles, regulaciones e impedimentos. Esa es la gran contradicción. 

Es evidente que no se puede enfrentar la pandemia ni menos aun salir del abismo económico en el que hemos caído, en medio de la guerra fratricida y de la dilapidación populista. Se impone, por eso, el nombramiento de un Premier con amplia capacidad de convocatoria y gestión capaz de unificar un comando estratégico público-privado para conducir un plan de recuperación económica, desarrollar un intenso trabajo de diálogo político con el Congreso para contener la hemorragia populista, y crear el escenario para acordar las reformas estructurales fundamentales: formalización y salud. Las que a su vez deberían servir también para canalizar los impulsos políticos contraproducentes.

Está en juego el país. Lampadia




¿Cómo logró crecer el Perú y qué nos falta?

¿Cómo logró crecer el Perú y qué nos falta?

¡Cuidemos los pilares de nuestra economía y empujemos juntos las reformas pendientes!

Líneas abajo presentamos un video del IPE que explica la gran recuperación de nuestra economía durante la primera década del nuevo siglo y lo que necesitamos emprender para no seguir perdiendo oportunidades de desarrollo, como estamos haciendo desde el 2011.

Lampadia

 




Ser emprendedor: no es fácil

Álvaro Díaz Castro
Abogado en derecho empresarial y de la minería
Para Lampadia

“Tu enemigo eres tú mismo. El desconocimiento de tu propio desconocimiento es la fuente de todos los fracasos”
(El libro negro del emprendedor).

En Perú la palabra “emprendedor” ha adquirido tantos matices como quienes quieren aprovechar del buen semblante que representa.

En este sentido, te consideran emprendedor si abres una tienda en la esquina, si pones la cabina de internet, si reparas techos, si montas un café, etc. Esos son negocios, trabajos dignos, necesarios, pero no necesariamente emprendimientos.

Jim Clifton (Presidente y CEO de Gallup, en su libro “Descubra sus fortalezas de emprendedor”) dice “Sólo cerca de cinco de cada 1,000 personas tienen la capacidad de iniciar y hacer crecer un gran negocio.  En comparación, 20 de cada 1,000 personas tiene un coeficiente intelectual lo suficientemente alto para ser aceptados en la organización americana que busca la excelencia en la inteligencia humana (MENSA)”.   Por ello los bonitos mensajes de que todos somos emprendedores no tienen una base en que fundarse; y, por el contrario, pueden generar no sólo frustraciones sino fracasos económicos reales.

Dice la teoría que emprender significa “tener decisión e iniciativa para realizar acciones que son difíciles o entrañan algún nivel importante de riesgo”, y emprendedor es el “individuo que organiza y opera una o varias empresas, asumiendo cierto riesgo financiero en tal acción; comienza algo”.

Revisado ello, empresario resulta igual o muy similar a emprendedor. Dice la teoría que se entiende más por empresario al que toma decisiones.  Resulta que el emprendedor es considerado como tal justo porque toma decisiones.

De algún modo, por estos lares, se ha buscado envilecer la palabra empresario y realzar la de emprendedor como una categoría más benévola, casi beatificada, en un intento para separarla de la mediana y gran empresa. Si tienes éxito con tu emprendimiento y creces, dejarías de ser emprendedor, y te vuelves un vil empresario.

La imagen del inconsciente colectivo que tenemos de un emprendedor (pidiendo disculpas a Carl Jung por utilizar de este modo su concepto) es la de aquel que ha creado o innovado algo y ha dejado de lado un cómodo status quo, o ha dado un paso comprometido para poner a luz su creación que funcione y cambie (mejorando) la forma de hacer tal o cual cosa en beneficio de la sociedad.

Por esa imagen se suele relacionar a emprendedor con innovación y desarrollo, con creatividad y aventura, con construir sueños y probablemente por ello es que termina siendo tan bien visto el ser denominado emprendedor.

En las ideas “per se” no hay emprendimiento (ni empresario), sólo imaginación y bonitas propuestas. En ejecutar, plasmar, hacer realidad tales ideas distintas, creativas, motivadas, es cuando comienza a forjarse el emprendedor.

Crear un trabajo conforme al estándar no encajaría plenamente con el concepto que se quiere entender por emprendedor (igual pasó con los “clusters” como los concibió Michael Porter y como se tergiversó en los discursos políticos, pero ello es otra historia).

El abrir negocios y fuentes de trabajo en función de la demanda del mercado es necesario, indispensable y loable, pero eso no necesariamente es emprendimiento.

El nivel de fracaso de quienes quieren asumir un emprendimiento es altísimo, e implica arriesgar y muchas veces perder patrimonios personales, familiares, de amigos y/o del Estado (que, con buena intención, pero no necesariamente buenos resultados, tiene políticas para subvencionar todo aquello que llegue bajo el nombre de emprendimiento, en lugar de lo que genere innovación y desarrollo).

De hecho, en Perú, el 90% de las start-ups no sobreviven más de un año (diario Gestión 10/enero/2017 entrevista al Dr.  Alejandro Morales, de Torres y Torres Lara, Abogados).

El emprender va más con volver útil el conocimiento innovador existente, ese que promueve Endeavor “formas de hacer las cosas que resultan disruptivas y con potencial de escalamiento exponencial”. Ello sí fortalece de modo sólido y rápido la generación de empleo, el dinamismo económico, bajos costos, mejora de servicios. En resumen, todo lo que esté más cerca de los llamados “océanos azules” (como lo describe Reneé Mauborgne y Chang Kim).

Como es usual, el no tener claro los conceptos y manosearlos, estirarlos o fraccionarlos lleva a que se cometan graves errores, se dilapiden recursos, se mal oriente al ciudadano, se alimenten falsas expectativas.

Se debe tener políticas que apoyen la generación de negocios y empleos tal cual se usan y necesitan en el quehacer diario y otras distintas para promover el emprendimiento.   Llamar a todo esfuerzo emprendimiento hace que se desvíe la atención y los recursos. El “chocolatear” esos ingredientes no te da ni torta ni pan, ni chicha ni limonada.

Permítanme, en un siguiente artículo, resumir lo que nos cuenta el “Libro negro del emprendedor”, que el asunto no es tan fácil, pero hay que recorrerlo. Les dejo unas ideas de dicho libro para adelantar el tema:

El emprendedor no se desconecta jamás. Es como un contrato laboral draconiano de 24 horas al día durante 365 al año”. Lampadia

La inocencia debe practicarse en una tómbola. No se puede romper las reglas sin conocerlas, es algo que no suele suceder. Es mejor apostar conociendo los riesgos que hacerlo confiando en la fortuna pasajera”.
Animar a emprender a personas que no están preparadas no es fomentar el espíritu emprendedor, es un ejercicio de responsabilidad”.




La carrera del cobre, la madera y las startups

La carrera del cobre, la madera y las startups

Nuevamente Chile se apresta ha sacarnos una mayor ventaja en la producción de cobre. El país es un hervidero  de iniciativas y proyectos. Toda la industria del cobre se vuelca a nuestro vecino, donde hasta se diseñan esquemas laborales para enganchar a los mineros peruanos, profesionales y trabajadores, en ciclos de producción y descanso, que eviten un desarraigo completo.

Mientras tanto en el Perú, donde perdimos el tren de las inversiones mineras en los albores del gobierno de Humala-Heredia, y hasta ahora no podemos ni acercarnos a la estación, estamos a la espera de que no se le ocurra a nadie iniciar una protesta contra alguno de nuestros proyectos, pues el gobierno no se anima a liderar a la población explicando las ventajas y beneficios de las inversiones mineras, máxime ahora que entramos en un ciclo de vacas fiscales flacas.

Lo mismo sucede el el desarrollo del sector maderero, donde estamos en pañales, y nadie toma el liderazgo para resaltar nuestras oportunidades y potencial. Chile ya exporta más de US$ 8,000 millones anuales en madera y su cadena productiva. En el Perú, con un potencial del orden de cinco veces el chileno no llegamos a exportar 500 millones.

Pues, ahora, en las actividades empresariales consideradas el epítome del valor agregado, las startups tecnológicas, Chile ya figura en los rankins internacionales, y el Perú ni siquiera pinta.

Startups

La prosperidad, el crecimiento, la longevidad y la innovación son palabras que a las comunidades les encantan. Palabras como estas atraen a nuevos residentes y compañías, estimulan la expansión económica y traen nuevos trabajos al área. Si bien lograr que un país sea económicamente próspero involucra muchas aristas, un elemento que se destaca una y otra vez es la aparición de un ‘hub tecnológico’: un lugar donde las ideas se fomentan y cultivan, donde la innovación y la creatividad se traducen en resultados tangibles. Este núcleo de desarrollo se conoce comúnmente como un ‘hub tecnológico’ o un centro tecnológico.

Nuestro país vecino, Chile, es considerado el modelo económico a seguir para América Latina en ‘hubs tecnológicos’, y Santiago está a la vanguardia como uno de los líderes en emprendimiento tecnológico. Santiago representa un tercio de la población del país y aproximadamente el 90% de la actividad de startups de Chile.

Además, como se puede observar en el gráfico inferior, el 21% de los emprendimientos locales en Chile son creados por ciudadanos de otros países. Esto es importante ya que el mismo Silicon Valley afirma que los inmigrantes han sido pieza clave a la hora de fomentar la innovación y que los sectores productivos en los que participaron los extranjeros innovadores fueron más exitosos en el largo plazo. En Silicon Valley un 46% de startups fueron de origen externo.

Fuente: Global Startup Ecosystem Report

A diferencia del Perú, Chile ha sabido fomentar y aprovechar la llegada de emprendedores de otros países, potenciando las posibilidades de que las startups extranjeras hagan negocios desde el mercado local.

Hoy en día, Santiago alberga alrededor de 500 a 700 startups tecnológicas. El nivel de infraestructuras de Chile, má el enfoque abierto hacia los empresarios extranjeros, así como diferentes programas de emprendimiento respaldados por el gobierno, han llevado a un aumento considerable en startups. Los programas de emprendimiento respaldados por el gobierno de Chile han apoyado a cerca de 200,000 de sus propios empresarios,  junto con empresarios extranjeros de todo el mundo. Muchos de estos técnicos trabajarán con el famoso Startup Chile, que atrae entre 250 y 300 empresas al año, y ofrece financiación a empresarios extranjeros, además de una visa de un año para desarrollar y refinar sus ideas en Santiago.

Atrayendo diversidad

Empresarios de 79 países han participado en Start-Up Chile hasta el momento, convirtiéndolo en uno de los programas de startups más diversos del mundo. Ofrecen tres programas: la “Fábrica S”, pre-aceleración para mujeres empresarias; “Seed”, un programa de aceleración para startups con un producto funcional y validación temprana, y “Scale”, un programa de soporte de seguimiento para nuevas empresas constituidas en Chile, en el que el proyecto recibe hasta 60 millones de pesos por el 70% de su costo.

Las empresas también reciben mentoría, talleres, espacio de oficina de trabajo y acceso a los inversionistas. A cambio, se les pide que devuelvan algo a la sociedad local, ya sea participando en hackathons o dando charlas en universidades.

Muchos inmigrantes llegan a Chile para aprovechar los bajos costos y la relativamente ligera carga tributaria. Pero el impacto neto es imposible de disputar: ahora existe una cultura robusta y creciente de iniciativa empresarial donde antes no había nada.

Según el Informe Global Startup Ecosystem Report 2017, “El ecosistema de Santiago ha crecido a gran velocidad durante los últimos 10 años, convirtiéndose en uno de los más fuertes y más diversos en América Latina y el mundo. Con más de 1,000 startups respaldadas por el gobierno por año, también es una de las más dinámicas.”

Los beneficios son claros: “La innovación gana cuando existen distintas experiencias, formas de pensar, otras culturas, diversidad. Por eso los territorios con alta migración tienen buena tasa de innovación: Silicon Valley, Israel, Berlín. En Chile, Start-Up Chile aportó a esto y se notó, los emprendedores en ese ambiente crecen más rápido, con ideas más innovadoras y con mayor poder global”, dice Inti Núñez, ex gerente de Emprendimiento de Corfo y actual director de Estrategia de la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Concepción, al diario El Mercurio de Chile. “La inmigración nos permite diversificar nuestro ecosistema de emprendimiento, por lo tanto, entre más inmigrantes (diversidad) tengamos, mayor será la capacidad innovadora del entorno nacional. Hay evidencia científica que comprueba que la inmigración logra aumentar la capacidad de innovación de países. Ese fue el primer objetivo de Start-Up Chile: impactar la cultura a través de extranjeros que nos dieran una mano para enfrentar problemas desde otro punto de vista para crear negocios globales”.

¿Qué sucede en el Perú?

Desde hace muchos años, los peruanos han desarrollado actividades emprendedoras, probablemente como un refugio a la falta de empleo tradicional en el sector privado y en el sector público. Así se consolidó el sector emergente, que alberga mucha informalidad y desarrolla sus actividades con una productividad muy baja.

El Perú también sigue el camino de los emprendimientos tecnológicos, aunque un poco más lento que otros países de la región. En el 2012, el gobierno introdujo Start Up Perú, una incubadora de pequeñas empresas tecnológicas. El Consejo Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Concytec) también fomenta la creación de startups de investigación científica. Incluso, existe un programa de beneficios tributarios que permite deducir el Impuesto a la Renta de las empresas y centros especializados que inviertan en investigación científica, desarrollo tecnológico e innovación tecnológica. Universidades y el sector privado también fomentan la creación de empresas en el Perú, como es el caso de Wayra de Telefónica, que ha cumplido cinco años en el país.

Fuente: Ministerio de la Producción, Gestión

Lo principal que debemos reforzar son los mecanismos de evaluación de las políticas, avanzar en lograr un marco regulatorio conductivo a la creación de empresas y promover la inversión privada en startups innovadoras.

Según el Global Entrepreneurship Index el Perú se encuentra en el puesto 67 de 137 países que promueven la innovación y el emprendimiento a nivel mundial y en el puesto 8 de 24 países a nivel de América Latina y El Caribe.

En el Perú, las iniciativas recién están empezando. Todavía hay mucho por hacer en términos de aliviar la carga burocrática de los que empiezan un negocio. El modelo educativo debe fomentar la creatividad y la innovación, pero sobre todo, promover el desarrollo de una mentalidad empresarial.

En nuestro país tenemos muchos ciudadanos en el mundo emprendedor que no llegan a niveles de productividad que les permita acumular capital. Uno de los grandes retos vinculados a esta situación, es formalizar el empleo y el trabajo. Tenemos que tomar decisiones efectivas para ayudarlos a salir adelante. Lampadia




En el Camino del Pensamiento Exponencial

En el Camino del Pensamiento Exponencial

El viernes 02 de junio fue la conferencia de Pascal Finette, de Singularity University, orgnizada por The Edge Group. La conferencia titulada “Innovación disruptiva para momentos de crisis” es un viaje hacia el futuro (no tan lejano) de tecnologías que aceleran exponencialmente

Finette narró historias y conocimientos de los tecnólogos más importantes  de Silicon Valley y compartió lo que se necesita para cambiar el pensamiento más tradicional y natural, ‘lineal’, al   impulsado por el avance tecnológico, el pensamiento ‘exponencial’ y la mentalidad que nos permita el transito mental de los escenarios de ‘escasez’ a los de ‘abundancia’. Según Finnet, las últimas e influyentes tecnologías de los próximos diez años crearán un mundo completamente nuevo.

Ante todo, ¿quién es Pascal Finette? Es el vicepresidente de SU Labs, presidente de la iniciativa empresarial y global de la Singularity University. Como director de las iniciativas de lanzamiento de la Universidad de Singularity, Pascal es un líder en el mundo de las startups y un orador importante sobre el pensamiento exponencial, tema central de su reciente charla en Lima.

Pascal Finette Speaking At Unreasonable

Fuente:  hello.finette.com

Pascal comenzó su charla explicando las grandes oportunidades que han sido creadas gracias a la aceleración exponencial del progreso tecnológico. Ahora tenemos (literalmente) supercomputadoras en nuestros bolsillos, acceso a la información del mundo a nuestro alcance, podemos secuenciar genes en nuestros laboratorios y hacer prototipos de impresión en 3D en nuestros escritorios. La predicción de Gordon Moore, que tiene más de cincuenta años de antigüedad, dice que ” el número de transistores en un ‘circuito integrado’ (IC, siglas en inglés) denso se duplica aproximadamente cada dos años” (se conoce comúnmente como la Ley de Moore) y se ha extendido a otras tecnologías e industrias: El antiguo iPhone 5S tenía 1,000 veces el poder computacional de una supercomputadora Cray 1 de mediados de los años 70 (y cuesta 1/50,000-avo). La energía solar alcanzó la paridad en su relación precio/rendimiento con las fuentes convencionales de energía como el carbón, convirtiendo un recurso natural escaso, en algo que estará disponible, en abundancia y a un costo bajísimo (y hasta costo cero) en un futuro cercano.

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Fuente:  hello.finette.com

Según Finette, el poder computacional ya es abundante, al igual que el almacenamiento de todos los datos que producen nuestros sistemas. Todo este progreso, a un ritmo cada vez mayor, crea una gran cantidad de nuevas oportunidades y crea una disrupción en los mercados existentes con más fuerza que nunca. Ray Kurzweil, de Singularity University, formuló esto en la “Ley de Rendimientos Acelerados”.

Luego Pascal Finette enfatizó algunas diferencias entre el pensamiento lineal y exponencial. “El pensamiento lineal es el camino hacia la perdición para nuevos emprendimientos. Estamos perdiendo muchas oportunidades en un mundo donde el pensamiento lineal choca con tendencias exponenciales”, dice Finette.

Sus palabras reflejan las del físico del siglo XX, Albert Allen Bartlett, quien una vez dijo: “El mayor defecto de la raza humana es nuestra incapacidad de entender la función exponencial”

Fuente:  hello.finette.com

Finette citó a Peter Diamandis, cofundador de Singularity University, quien explica cómo nuestras mentes no están entrenadas para pensar en una escala exponencial: “30 pasos lineales terminarían a 30 pasos o aproximadamente a 30 metros de distancia y todos podríamos ver que tan lejos sería esta distancia. Pero si tomamos 30 pasos exponenciales, ¿dónde terminaríamos? Muy pocas personas dirían a mil millones de metros de distancia, que es veintiséis veces alrededor del planeta.”

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Fuente:  hello.finette.com

Cuando una tecnología se vuelve digital, su tasa de crecimiento ya no obedece a una ecuación lineal. Este es un concepto difícil de entender. Si queremos utilizar la tecnología para resolver todo tipo de problemas, entonces la “alfabetización exponencial” debe ser un curso obligatorio en todas las escuelas y un elemento esencial del enfoque de cualquier empresario para construir un negocio.

Así que, insiste Finette, ahora es el momento de empezar a pensar exponencialmente. Es la única manera de adelantarse a las tendencias en esta era de la información. Esta época es especialmente importante porque estamos haciendo una transición de tecnología análoga a digital. “Las mayores oportunidades en la vida son aquellas en las que transforma un negocio analógico en digital”, dice Finette. Cuando se hace la transición del mundo físico al mundo de la información, el crecimiento de su empresa tiene el potencial de convertirse en una curva exponencial exitosa.

Finette terminó la charla respondiendo a una pregunta que generalmente se le hace en estos eventos: ¿Qué se necesita para que resolver un problema? No sólo para resolverlo temporalmente, sino para que se vaya por completo (en cualquier sector o situación). Dependiendo de cuán grande es el problema, él sabe cuán grande puede ser una empresa. Para eso, afirma:

“Soy pacifista, pero en la primera página del manual para los Navy SEALs de los Estados Unidos hay una fórmula que resume esto: Su tasa de crecimiento es igual a la magnitud del desafío multiplicada por la intensidad del ataque. Así que si tomas eso como verdad, ¿por qué no tomarías los mayores problemas -pobreza, desempleo, calentamiento global, desnutrición- para enfrentarlos? Esa será la tasa de crecimiento. No hay razón para no enfrentarse a los problemas más difíciles, porque todo lo que nos importa como empresarios es nuestro crecimiento”.

Fuente:  hello.finette.com

El resumen de la charla podría ser que los empresarios necesitan una nueva mentalidad, necesitan dejar de pensar linearmente y empezar a pensar de manera exponencial. Hace poco, Finette estuvo en la fábrica Mercedes Benz y vio un auto que saldría a la venta en 7 a 8 años. Este auto tenía una radio, y botones para cambiar de emisora. Entonces él se volteó y preguntó: ¿por qué le ponen botones? En 7 años todo será digital y no serán necesarios, se cambiará de emisora con un comando de voz o con una pantalla táctil.

Ese es tan solo un pequeño ejemplo del radical cambio que tenemos que dar en nuestra manera de pensar para poder aprovechar el gran potencial que tenemos por delante. Lampadia




Un verdadero ‘compromiso a dar’

La tradición filantrópica nació con la fundación Carnegie en 1911, cuando el filántropo estadounidense y vanguardista Andrew Carnegie afirmó: “Ningún hombre puede volverse rico sin enriquecer a otros. Quien muere rico muere desgraciado.” De esta manera, Carnegie sentó las bases para que las personas más ricas del mundo adopten esta filosofía y donen sus riquezas a cientos de causas, desde temas educativos, mejora de la información pública hasta el apoyo de las minorías. Ahora, existe una gran cantidad de fundaciones con distintos focos de apoyo: La fundación Rockefeller formó la escuela John Hopkins de salud en Harvard, la Universidad de Stanford fue creada por el un magnate ferroviario, y le siguen organizaciones como Ford, Hearst, Heinz, Pulitzer, Guggenheim, Blank, Morgan y Franklin.

Fuente: elEmprendedor

Tradicionalmente, la filantropía se producía en el país de origen de los millonarios, pero la nueva ola de filantropía, la de los millonarios de la nueva economía de la tecnología, liderada por Bill Gates, se dá fuera del espacio nacional, con especial énfasis en los países más pobres del África. Pero eso no es lo único nuevo y de gran impacto, algunos como Gates dedican su vida a trabajar en sus emprendimientos filantrópicos. En Lampadia hemos llamado a esto:El circuito virtuoso del capitalismo”.

La firma de investigación Private Wealth-X determinó un Índice de Generosidad, que es la relación de las donaciones de su vida con su fortuna neta actual. Luego, Business Insider listó a las 20 personas más generosas del munod, quienes han donado un total de US$ 106,800 millones a varias causas filantrópicas, desde medio ambiente y derechos humanos hasta deportes y creación de empresas.

En Lampadia hemos seguido el trabajo de Bill Gates y Warren Buffet, quienes junto a Melinda Gates, empezaron la mayor iniciativa filantrópica de la historia, el ‘Compromiso de Dar’ (‘Pledge to Give’ en inglés) en 2010 para alentar a los multimillonarios a donar como mínimo el 50% de su fortuna a caridad, dirigida a los más pobres, muy lejos del lugar donde hicieron sus fortunas, mayormente, en el África. Buffett ha afirmado estar especialmente impresionado por el entusiasmo que Gates y su esposa tienen por tratar de hacer el mayor bien para el mayor número de personas. Ver: Los líderes de la nueva filantropía intercontinental

“The Giving Pledge es un esfuerzo por ayudar a la sociedad en los problemas más urgentes, invitando a las personas y familias más ricas del mundo a que se comprometan a dedicar más de la mitad de su riqueza a la filantropía o a obras benéficas, ya sea durante su vida o después de su muerte”.

Consideramos que estas 20 personas son un gran ejemplo de compromiso social. Y es que, como dijo Gates en una entrevista con Warren Buffet, “Solo así podrán mejorar como personas y continúar reinventándose para lograr ser las mejores versiones de sí mismos.” Lampadia

Las 20 personas más generosas del mundo

Por Tanza Loudenback y Emmie Martin
Business Insider
12 de octubre de 2015
Traducido y glosado por Lampadia

Fuente: Samantha Lee/Business Insider

 

 
 
 
 
 

 

El pionero filántropo estadounidense Andrew Carnegie estableció el estándar para devolver: “Ningún hombre puede enriquecerse sin enriquecer a otros”, dijo. “El hombre que muere rico muere deshonrado”.

Decenas de las personas más ricas del mundo han seguido su filosofía, donando sus riquezas a cientos de causas.

Trabajamos con nuestros amigos en Wealth-X, una empresa que realiza investigaciones y valoraciones sobre personas de muy alto patrimonio, para compilar una lista de las 20 personas más generosas del mundo, clasificadas por donaciones caritativas totales hasta la fecha.

Puesto que uno necesita tener mucho para dar mucho, Wealth-X también determinó el índice de generosidad de cada persona, que es la proporción de sus donaciones de la vida a su valor neto actual. Algunas personas, como el magnate minorista Chuck Feeney, conocido como el “James Bond de la filantropía”, tienen índices de más del 100% porque han regalado más dinero del que tienen actualmente.

Con una cantidad total de donaciones de 106,800 millones de dólares, estos 20 individuos son los principales filántropos del mundo.

20. Dietmar Hopp

Fuente: Thomas Niedermueller / Getty Images

El empresario alemán de TI, Dietmar Hopp, es el cofundador y ex presidente y CEO de SAP, una empresa multinacional que ofrece software de aplicaciones y análisis y servicios relacionados con software para empresas de todo el mundo.

Hace veinte años, Hopp estableció Dietmar Hopp Stiftung, una fundación que apoya la educación local, deportes y causas de salud en su ciudad natal en Alemania, incluyendo el Instituto Heidelberg de Tecnología de Células Madre y Medicina Experimental (HI-STEM), Hospital Universitario de Heidelberg y La Fundación Nathalie Todenhofer.

Fuente: Wealth-X

19. Pierre Omidyar

Fuente: REUTERS / Tim Shaffer

Nacido en París, el iraní-estadounidense Pierre Omidyar es cofundador y actual presidente de eBay.

En 1998, él y su esposa, Pamela, establecieron la Fundación Omidyar, una organización que ahora incluye Omidyar Network, HopeLab, Humanity United y Ulupono Initiative. La organización hace donaciones a una amplia gama de causas, incluyendo emprendimientos, derechos humanos, alimentos y energía, juegos y tecnología. En 2012, Omidyar y su esposa se unieron a la iniciativa Giving Pledge iniciada por Warren Buffett y Bill Gates, prometiendo donar la mayor parte de su riqueza a organizaciones benéficas.

En agosto de 2015, Omidyar habría vendido el 10% de sus acciones en eBay a organizaciones benéficas no reveladas, un regalo valorado en casi 270 millones de dólares.

Fuente: Wealth-X

18. Michael Dell

Fuente: AP

Michael Dell es el presidente y CEO de la compañía informática Dell. Desde 1999, es director de la Fundación Michael y Susan Dell, que atiende principalmente a la educación, los servicios sociales y humanos, las artes y la cultura y las causas de desarrollo comunitario.

A principios de este año, la fundación se comprometió a donar US$ 25 millones para financiar la construcción de un nuevo hospital de enseñanza en Austin, Texas.

Fuente: Wealth-X

17. James Simons

Fuente: TED

James Simons es presidente de la empresa de gestión de inversiones Renaissance Technologies, una de las compañías de fondos de cobertura más grandes y exitosas del mundo, con activos valorizados en 65,000 millones de dólares. Simons se desempeñó como CEO de la compañía hasta jubilarse en 2009.

Veintiún años atrás, Simons y su esposa Marilyn establecieron la Fundación Simons, que apoya principalmente las causas educativas. Desde entonces, la pareja ha fundado dos organizaciones adicionales en memoria de sus dos hijos que murieron en 1996 y 2003: La Fundación Paul Simons, que apoya a las causas sociales y educativas, y la Fundación Nick Simons, que entrena a los trabajadores de salud rurales en Nepal y apoya a las organizaciones humanitarias y causas sociales.

Simons también ha donado US$ 30 millones a la investigación del autismo y se ha comprometido a donar US$ 100 millones más.

Fuente: Wealth-X

16. Ted Turner

Fuente: Chip Somodevilla / Getty

Ted Turner, ex director general de Turner Broadcasting System (TBS) y vicepresidente y director de AOL Time Warner, es el actual presidente de Turner Enterprises, una compañía de cartera diversificada.

Turner también sirve como administrador de la Fundación Turner Global y presidente de la Fundación Turner, ambos donan al desarrollo de la comunidad y las causas ambientales y de conservación de la vida silvestre.

La Fundación de las Naciones Unidas es también un receptor principal de las donaciones de Turner. En 1997 prometió US$ 1,000 millones a la fundación, que promueve causas relacionadas con las mujeres y la población, la salud de los niños, el medio ambiente, la paz mundial y la seguridad.

Fuente: Wealth-X

15. Jon Huntsman Sr.

Fuente: Wikimedia Commons

Jon Huntsman Sr. es el fundador y presidente ejecutivo de Huntsman Corporation, un fabricante de productos químicos.

Según informes, Huntsman sobrevivió al cáncer de próstata y boca y, como resultado, estableció el Huntsman Cancer Institute en la Universidad de Utah. Muchas de sus donaciones de caridad han sido a colegios y centros de investigación de cáncer. Él y su esposa también acordaron unirse al Giving Pledge de Buffett, prometiendo donar el 50% de su riqueza.

Fuente: Wealth-X

14. Li Ka-shing

Fuente: REUTERS / Tyrone Siu

Li Ka-shing es un inversor global en tecnología disruptiva y uno de los hombres más ricos de Asia. En 1980, fundó la Fundación Li Ka-shing para apoyar la educación, la salud, la cultura y las causas relacionadas con la comunidad. El proyecto más grande de la fundación hasta la fecha fue el financiamiento de la Universidad de Shantou, la única universidad pública con fondos privados en China. Li también ha hecho donaciones personales a la Fundación China para personas con discapacidad y para el alivio de víctimas de inundaciones en China.

Fuente: Wealth-X

13. Mark Zuckerberg

Fuente: AP

Mark Zuckerberg, fundador y CEO de Facebook, es uno de los multimillonarios más jóvenes del mundo. El magnate de los medios de comunicación social ha firmado el compromiso de donación Giving Pledge y promete donar al menos la mitad de su riqueza en su vida.

El año pasado, Zuckerberg y su esposa Priscilla donaron US$ 25 millones en la lucha contra el Ebola. A través de la Fundación de la Comunidad del Silicon Valley, Zuckerberg dio US$ 75 millones al Hospital de San Francisco.

También se centraron en la educación: la pareja dio US$ 120 millones para mejorar las escuelas de Bay Area, y antes de eso, donó US$ 100 millones de acciones de Facebook a un sistema de escuelas públicas de Nueva Jersey.

Fuente: Wealth-X

12. Paul Allen

Fuente: Stephen Lovekin / Getty Images

Paul Allen, cofundador de Microsoft, ahora es el presidente de Vulcan, su compañía de inversión privada.

Como presidente de la Fundación de la Familia Paul G. Allen, ha dado millones a causas de salud global, incluyendo US$ 5 millones a Seattle BioMed, US$ 4 millones a Global FinPrint, un proyecto de conservación centrado en la preservación de tiburones en todo el mundo y US$ 7 millones en donaciones Investigación de Alzheimer.

Fuente: Wealth-X

11. Michael Bloomberg

Fuente: Getty Images / Mike Stobe

Michael Bloomberg es el fundador y CEO de la compañía de medios Bloomberg y fundador de la Fundación Bloomberg, que atiende principalmente a las causas educativas, sanitarias y ambientales. Los beneficiarios de las donaciones de la fundación incluyen la Universidad John Hopkins, la Fundación Mundial del Pulmón, la Organización Mundial de la Salud, la Fundación Sierra Club y la Escuela de Salud Pública John Hopkins Bloomberg.

Más recientemente, Bloomberg lanzó una iniciativa “What Works Cities” de US$ 42 millones destinada a ayudar a 100 ciudades de tamaño mediano a hacer un mejor uso de los datos y pruebas a través de su brazo filantrópico, Bloomberg Philanthropies.

Fuente: Wealth-X

10. George Kaiser

Fuente: YouTube / Noticias de CBS

George Kaiser, presidente de la Corporación Financiera BOK, también fundó la Fundación de la Familia George Kaiser, que apoya a causas educativas, de salud, religiosas, sociales y relacionadas con el desarrollo de la comunidad, incluyendo la Tulsa Community College Foundation, Oklahoma City Educare, National Energy Policy Instituto, la Fundación de la Comunidad de Tulsa y la Universidad de Tulsa.

En 2010, Kaiser se unió al Giving Pledge, prometiendo donar la mitad de su fortuna a la caridad.

Fuente: Wealth-X

9. Eli Broad

Fuente: AP

A través de The Broad Foundation, el cofundador de KB Home y el ex CEO de SunAmerica, Eli Broad, invierte en educación pública, ciencia y artes.

La organización funciona como dos entidades, The Eli y Edythe Broad Foundation y The Broad Art Foundation, ambas con el objetivo de mejorar las comunidades y promover el espíritu empresarial.

Como residente de California, Broad devuelve a su estado natal – y a las artes – a través de donaciones al Museo de Arte Contemporáneo y el Museo de Arte del Condado de Los Ángeles.

Fuente: Wealth-X

8. Carlos Slim Helú

Fuente: Cario Lopez-Mills / AP

Uno de los multimillonarios más ricos del mundo y presidente del Grupo Carso, Carlos Slim Helú realiza sus primeros esfuerzos filantrópicos a través de su Fundación Carlos Slim Helú.

La fundación ha invertido 100 millones de dólares en el Fondo Mundial para la Vida Silvestre con miras a conservar el medio ambiente de México, y en 2012 donó US$ 3 millones para ayudar a proveer internet a las familias latinas que viven en los Estados Unidos, además de muchas otras donaciones a organizaciones internacionales.

Slim Helú también actúa como presidente de la Fundación Telmex, que se esfuerza por mejorar la calidad de vida en México, su país de origen.

Fuente: Wealth-X

7. Gordon Moore

Fuente: Justin Sullivan / Getty Images

Gordon Moore cofundó a Intel en 1968, pero en estos días se centra en la filantropía. Se retiró de sus cargos corporativos en 2006, y actualmente dirige la Fundación Gordon y Betty Moore con su esposa.

La fundación tiene como objetivo hacer un impacto en la conservación del medio ambiente, la atención al paciente, la ciencia y la comunidad de San Francisco, y tiene programas de amplia cobertura que incluyen desde la Iniciativa de Conservación Marina hasta el Telescopio de Treinta Metros.

Fuente: Wealth-X

6. Sulaimán bin Abdul Aziz Al Rajhi

Fuente: Captura de pantalla de YouTube

En 1957, Sulaiman bin Abdul Aziz Al Rajhi cofundó Al Rajhi Bank con sus tres hermanos, que  creció como uno de los bancos islámicos más grandes del mundo y le produjo ganancias de un valor neto de 10 dígitos a Al Rajhi.

Pero en 2013, cambió su enfoque hacia la filantropía y otorgó sus propiedades en el banco a Sulaiman bin Abdul Aziz Al Rajhi Endowments Holding Company, que apoya las causas educativas, religiosas, de salud y sociales, incluyendo el Instituto Árabe para la Lengua Árabe, la Guardia Nacional Salud y la Mezquita Sheikh Sulaiman bin Abdul Aziz Al Rajhi en Riad, Arabia Saudita.

Fuente: Wealth-X

5. Charles Francis Feeney

Fuente: YouTube / DocumFeed

Conocido como el “James Bond de la filantropía”, el magnate de la venta al por menor Chuck Feeney está en una misión para regalar toda su fortuna – y con su patrimonio neto actual de hasta US$ 1.5 millones, parece que ha tenido éxito.

The Atlantic Philanthropies, fundación de Feeney, apoya la educación, la ciencia, la salud y las causas de los derechos civiles en varios países, incluyendo Estados Unidos, Vietnam y Bermuda.

Fuente: Wealth-X

4. Azim Premji

Fuente: Reuters

Además de servir como el presidente de la consultora india y la empresa de TI Wipro, Azim Premji es el fundador y presidente de la Fundación Azim Premji, que trabaja para reformar la escuela de la India y los sistemas de examen.

La organización opera a través de las acciones de Wipro de Premji y ha introducido iniciativas como el programa Computer Aided Learning, que ofrece capacitación en 18 idiomas y Azim Premji University, una universidad sin fines de lucro que otorga títulos en la formación de maestros.

Fuente: Wealth-X

3. George Soros

Fuente: Getty Images / ChinaFotoPress

George Soros, el fundador jubilado de Soros Fund Management, actualmente funge como presidente de Open Society Foundations, una red de fundaciones que fundó en 1979, que principalmente donan a causas internacionales, desarrollo comunitario, servicios sociales, salud y educación.

Open Society es más conocido por su enfoque en los derechos humanos. El primer acto de Soros en la organización fue proporcionar becas a los sudafricanos negros que sufrían bajo el apartheid.

Fuente: Wealth-X

2. Warren Buffett

Fuente: Getty Images / Michael Buckner

El presidente y CEO de la compañía de cartera Berkshire Hathaway, Warren Buffett no es sólo una de las personas más ricas del mundo, sino que también es uno de los más caritativos.

En 2006, Buffett se comprometió a donar el 85% de su riqueza a la Fundación Bill & Melinda Gates, así como a otras fundaciones creadas por miembros de la familia.

Y en 2011, el Oráculo de Omaha se asoció con Gates en la creación de la Giving Pledge, un programa que compromete a individuos ricos a donar un gran porcentaje de su riqueza a causas benéficas.

Fuente: Wealth-X

1. Bill Gates

Fuente: Chip Somodevilla / Getty

Mientras que es mejor conocido como el cofundador de Microsoft, Bill Gates ahora concentra la mayor parte de su tiempo en la filantropía, dirigiendo la Fundación Bill & Melinda Gates junto a su esposa.

La fundación otorga subvenciones para iniciativas y programas en todo el mundo, centrándose en el desarrollo agrícola, emergencias, bibliotecas globales, pobreza urbana, salud mundial y educación.

Desde su creación, la fundación ha donado millones a organizaciones que incluyen la Alianza GAVI; la Organización Mundial de la Salud; La Fundación Rotaria; El Fondo Mundial de Lucha contra el SIDA, la Tuberculosis y la Malaria; y UNICEF.

Fuente: Wealth-X

Lampadia




Entre el ‘golpe’ y el ‘goce’

Pablo Bustamante Pardo
Director de Lampadia

Hace unos meses, en el Encuentro Económico – Región Arequipa 2016, organizado por el Banco Central de Reserva, luego de mi presentación, un arequipeño me preguntó por el hecho de que los empresarios locales se habían mudado a Lima después de vender sus negocios.

Mi comentario fue algo así como lo siguiente: Mire, a mi me parece que es producto de haber enfrentado las consecuencias del ‘Golpe’ y del ‘Goce’.

El ‘Golpe’, porque por varias décadas, entre los años 60 y 80s, fueron las generaciones sacrificadas de un país estancado, donde la iniciativa individual estaba limitada por una dictadura de izquierda castrante y, empobrecidos, en esencia, ya habían perdido hasta la esperanza de tiempos mejores.

Sin embargo, sorprendentemente, cuando el Perú renació de sus cenizas en los años 90, no solo se recuperó la ilusión de tiempos mejores. Todo se recuperó, los ingresos, las ventas de sus empresas y el valor de sus activos. Y así es como pasaron a sentir el ‘Goce’. La sensación de ser ciudadanos del mundo, con capacidades de consumo e inversión no imaginadas.

Esas generaciones de empresarios arequipeños, del mismo modo que los del resto del país, tienen hoy más de 60 años y de alguna manera están obnubilados por su tardía riqueza. Están alejados de la cosa pública y han olvidado que tienen hijos y nietos. Nos guste o no, es difícil llamarlos al orden para que se comprometan con una vida cívica activa.

Pero el Perú necesita el aporte de su clase empresarial, como necesita la de los otros estamentos de la clase dirigente, académicos e intelectuales, para terciar en la vida pública y terminar la construcción de nuestro país.

En el mediano plazo, solo queda esperar que la tarea grande,  la tarea pendiente de hacer país, sea recogida por nuestro líderes más jóvenes, y se dé durante nuestra tercera centuria.

Pero en las actuales circunstancias, en medio de una suerte de tormenta perfecta, insuficiente crecimiento económico, acentuada pérdida de popularidad del gobierno, desastres naturales, crisis de corrupción, falta de inversiones, desentendimientos políticos y debilitamiento del espacio global con los exabruptos de Trump, ‘las siete plagas de Egipto’, necesitamos el aporte de todos, especialmente de los más viejos, aquellos que estén por encima del bien y del mal, para llamar a la reflexión por la convergencia de nuestras fuerzas, y a la acción que nos impulse a construir patria desde la perspectiva del vaso medio lleno.

Hoy sucede todo lo contrario. La cacería de brujas a escalado a la descalificación de estamentos de la sociedad, como se quiere hacer con la tecnocracia, y de estructuras económicas, como se quiere hacer con nuestro limitado modelo de economía de mercado.

Por supuesto, no sorprende que los activistas de izquierda, fragmentados, sin padrinos extranjeros y atrapados en las ‘ideas muertas’, quieran tirar barro con metralleta y tratar de cosechar un espacio de poder en medio de la devaluación de todos los demás. Lo pobres han perdido financiamiento, la vela de Venezuela se tornó ancla, Lula, el ‘padrino’ de las izquierdas latinoamericanas está camino a la cárcel. Sin nada en que apoyarse, solo les queda el pretender dar un salto adelante y matar todo lo que sustente lo alternativo a su fracaso.

Lo que no se entiende tanto, es que algunos intelectuales y académicos menos comprometidos con una militancia política de izquierda, caigan en lo mismo. No se puede decir que un par de libritos escritos en la oscuridad del vaso medio vacío para ganar notoriedad (‘¿Qué se puede hacer con el Perú?’ Y ‘El Perú está calato’), representaron un solitario llamado a la reflexión sobre las debilidades y carencias de nuestro modelo de desarrollo.

Una sola prueba al canto de que lo mejor de la sociedad civil siempre estuvo presente, que la reserva intelectual y moral siempre reclamó emprender reformas institucionales profundas y una verdadera revolución educativa, entre otras gestas importantes, con propuestas concretas, es el conjunto de los temas tratados durante más de 50 años en los CADE de IPAE.

En Lampadia ya hemos tenido que contrastar el tipo de descalificaciones que nos quieren vender  estos días, ver: ¡Qué “calato”… ni que ocho cuartos!

Este no es el momento para tirar barro, sino para converger y eso solo puede hacerse con propuestas. Solo puede hacerse desde la base de lo ya avanzado y desde la perspectiva del vaso medio lleno.

Por otro lado, a pesar del ‘Goce’, también es el momento de fajarse por equilibrar la situación del país, recuperar el crecimiento y el progreso social, y emprender las reformas institucionales y educativas que reclama la población. Lampadia




Bien por los decretos, ¿Eppur si muove?

Con la dación del paquete de decretos emitidos sobre la base del otorgamiento de facultades, el gobierno ya tiene su plataforma básica de gobernabilidad. Ahora los ciudadanos, analistas y políticos tendremos que abocarnos a analizar cada uno de ellos y colaborar en lo que se pueda para que despegue la acción de gobierno.

Pero una pregunta que todos, incluido el gobierno, debemos hacernos es ¿Eppur si muove? ¿Será esto suficiente para impulsar la inversión pública y privada, que nos permitan recuperar una base sólida de crecimiento de la economía que se proyecte hacia la meta del bicentenario, por encima del 5% del PBI?

Cinco porciento del PBI es el nivel mínimo de crecimiento que necesitamos para emprender el acelerado cierre de las brechas sociales y económicas en educación, salud, infraestructuras y tecnología que nos distancian del bienestar general. Con mayores dificultades hoy, en un entorno externo negativo para el comercio internacional, base del espacio  de transferencia de riqueza desde el resto del mundo al Perú. Además, un crecimiento satisfactorio es indispensable para lograr un ambiente interno suficientemente tranquilo, que nos ayude a emprender las reformas institucionales sin las cuales, no es posible aspirar al desarrollo integral, así como, la difícil lucha contra la corrupción.

En Lampadia hemos explicado in extenso la potencia de nuestras  capacidades productivas, ver: El enorme Potencial Productivo del Perú. Dichas capacidades y potenciales nos permiten aumentar sustancialmente el nivel de inversión, generar empleo adecuado, reducir significativamente la pobreza y la desigualdad y generar los recursos fiscales necesarios para afrontar las brechas indicadas líneas arriba.

Como es de conocimiento general, hasta ahora, en lo que va del nuevo gobierno, no hemos podido dinamizar la inversión. Para hacerlo falta superar dos aspectos fundamentales:

  • La toma de conciencia de la población y los medios, de la necesidad de invertir y crecer. Algo que solo puede desenvolverse mediante un programa claro de comunicación que cree un ecosistema propicio a la inversión. Este programa solo puede ser desarrollado desde el gobierno, que debe llamarnos a ‘una gesta nacional por la inversión y el crecimiento’.
  • Diseñar y ejecutar una estrategia efectiva para superar el nivel de conflictividad social y política que nos aqueja. Conflictividad que afecta a las inversiones mineras y energéticas, al turismo, y en general a muchas iniciativas de inversión, así como a las operaciones vigentes en distintos sectores de la economía.

Como se dijo en el último CADE, es: ¡Ahora o nunca!

No podemos perder otros cinco años en nuestro proceso de desarrollo. Ver en Lampadia: La política traiciona el sentir popular. (Este artículo, publicado el 26 de diciembre pasado, fue visto por 255,000 personas, fue compartido 502 veces y comentado 564 veces, mayormente en sentido favorable).

En Lampadia estamos convencidos que los peruanos sabemos distinguir entre las contiendas políticas de corto plazo y los intereses nacionales de largo plazo. Todos, incluida nuestra población rural, como lo ha mostrado Richard Webb, hemos sido testigos del gran cambio que se produjo en el Perú, desde el regreso de la inversión privada a liderar el crecimiento desde la promulgación de la Constitución de 1993. (Ver nuestra nota de ayer, que recoge la apreciación al respecto de la BBC). Es evidente que nuestra nueva clase media emergente, nuestros emprendedores y nuestros agricultores no pueden estar de acuerdo en que la conflictividad (política) social siga paralizando las inversiones y  el crecimiento del país.

Como ha explicado Carlos Gálvez, el presidente de la SNMPE, si las cosas siguen como van, el impulso de la minería en el crecimiento económico, irá disminuyendo hasta prácticamente desaparecer hacia el 2018, dejándonos ante la posibilidad de que colapse el crecimiento a niveles de 2 o 3% anual.

Por ejemplo, a pesar de las ofertas concretas del gobierno para superar las dificultadas generadas alrededor del proyecto de Las Bambas, y del compromiso de los anti mineros de levantar sus ilegales acciones, las zanjas que cortan de acceso vial al proyecto se siguen manteniendo con absoluta impunidad.

Esta situación debe ser superada cuanto antes. Ya sabemos como: toma de conciencia y comunicación, como hemos explicado líneas arriba. Para cualquier gobierno es muy incómodo tener que afrontar este tipo de situaciones, pero si se ha pedido el mandato popular para gobernar, no queda otra alternativa que más que ‘gobernar’. Lampadia

 




Indicadores de la Historia del Bienestar

Queremos cerrar el año compartiendo con nuestros lectores las buenas noticias sobre los avances de la humanidad, sustentadas en información objetiva. Según la publicación de Max Roser, ver líneas abajo, ‘El mundo en datos’: en 1950, tres cuartas partes del mundo vivían en extrema pobreza, en 1981 el 44%, hoy la pobreza extrema ha caído por debajo del 10%. “El mundo de hoy es más saludable, más rico y mejor educado”.

Sin embargo, como muestra el informe de Roser, la percepción, las imágenes que la gente tiene, son lo contrario. Ante la pregunta siguiente:

¿Crees que el mundo está mejorando o empeorando, o ni mejorando ni empeorando?”

En Suecia, el 10% cree que las cosas están mejorando, en Estados Unidos sólo el 6%, y en Alemania sólo el 4%.

Muy pocas personas piensan que el mundo está mejorando.

Roser agrega: “No creo que los medios de comunicación sean los únicos culpables de esto, pero creo que tienen parte de la culpa. Esto es porque los medios no nos dicen cómo está cambiando el mundo, nos dicen que es lo que va mal en el mundo”.

Desde el inicio de Lampadia, hemos procurado mostrar los procesos estructurales de la humanidad y del Perú, que son los que recogen nuestros avances. Por ejemplo, hemos seguido a Hans Rosling, creador de Gapminder, que muestra de manera muy amena y didáctica las estadísticas de cuanto indicador cabe. En el caso del Perú, hicimos una publicación icónica sobre nuestros avances: Las cifras de la prosperidad. Y hemos combatido, con mucha fuerza y a veces indiscreción, las medias verdades, las mentiras y los mitos con los que se siembra en los medios de comunicación imágenes negativas de nuestra realidad y un falso sentido común de las cosas.

Los avances que muestra Roser, se dieron en paralelo al progreso humano, como podemos ver en el siguiente gráfico.

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Esperamos que nuestros lectores mediten sobre la discordancia entre una realidad de importantes avances e imágenes falsas que muchas veces nos llevan a descontinuar los procesos económicos y sociales que generaron las mejoras en el bienestar. Esta disonancia es la materia prima de los políticos populistas que están nuevamente tomando el control del mundo, para hacernos menos prósperos.

Nada de esto significa tampoco, que no hay mucho por hacer. Efectivamente, hay muchas cosas pendientes, pero lo último que debemos hacer, es en desconocimiento de la realidad, desandar los caminos del bienestar.

Una historia de las condiciones de vida globales en 5 gráficos

Max Roser 
Our World in Data
2016
Traducido y glosado por
Lampadia

Una encuesta reciente preguntó: “Considerando todo, ¿crees que el mundo está mejorando o empeorando, o ni mejorando ni empeorando?” En Suecia, el 10% cree que las cosas están mejorando, en Estados Unidos sólo el 6%, y en Alemania sólo el 4%. Muy pocas personas piensan que el mundo está mejorando.

¿Qué evidencia necesitamos considerar al responder a esta pregunta? La pregunta es sobre cómo el mundo ha cambiado y, por lo tanto, debemos tomar una perspectiva histórica. Y la pregunta es acerca del mundo como un todo y la respuesta debe considerar a todos. La respuesta debe considerar la historia de las condiciones de vida globales – una historia de todos.

I. La Pobreza

Para analizar de dónde venimos debemos ir muy atrás en el tiempo. 30 o incluso 50 años no son suficientes. Si se analiza cómo se ve el mundo durante nuestro corto tiempo de vida, es fácil cometer el error de pensar en el mundo como algo relativamente estático: las partes ricas, sanas y educadas del mundo aquí y las regiones pobres, sin educación y enfermas allá; concluyendo, falsamente, que siempre fue así y que siempre será así.

Para evitar retratar el mundo de una manera estática – el Norte siempre mucho más rico que el Sur – tenemos que empezar nuestro análisis hace 200 años, antes de que las condiciones de vida realmente cambiaran dramáticamente.

Los investigadores miden la pobreza extrema como vivir con menos de US$ 1.90 por día. Estas cifras de pobreza toman en cuenta las formas no monetarias de ingreso (para las familias pobres de hoy y en el pasado esto es muy importante, sobre todo debido a la agricultura de subsistencia). La medida de pobreza también se corrige para diferentes niveles de precios en diferentes países y se ajusta a los cambios de precios a través del tiempo (inflación) – la pobreza se mide en dólares internacionales que dan cuenta de estos ajustes.

El primer gráfico muestra las estimaciones de la proporción de la población mundial que vive en pobreza extrema.

En 1820 sólo una pequeña élite disfrutaba de un nivel de vida más alto, mientras que la gran mayoría de la gente vivía en condiciones que hoy llamaríamos pobreza extrema. Desde entonces, la proporción de personas extremadamente pobres ha venido cayendo continuamente. Cada vez más regiones del mundo se industrializan y con ello aumenta la productividad que permitió sacar a más personas de la pobreza: En 1950, tres cuartas partes del mundo vivían en extrema pobreza; en 1981 era 44%. Para el año pasado, la investigación sugiere que la participación en la pobreza extrema ha caído por debajo del 10%.

Es un gran logro. Para mí, como investigador que se centra en el crecimiento y la desigualdad, tal vez el mayor logro de todos en los últimos dos siglos. Es particularmente notable si tenemos en cuenta que la población mundial se ha multiplicado por 7 en los últimos dos siglos En un mundo sin crecimiento económico, este aumento de la población habría dado lugar a menos y menos ingresos para todos. Un aumento de 7 veces en la población mundial habría sido suficiente para llevar a todos a la extrema pobreza. Sin embargo, sucedió exactamente lo contrario. En un momento de crecimiento demográfico sin precedentes, nuestro mundo logró dar más prosperidad a más personas y sacar continuamente a más personas de la pobreza.

El aumento de la productividad era importante porque hacía que los bienes y servicios vitales fueran menos escasos: más alimentos, mejores prendas de vestir y viviendas menos abarrotadas. La productividad es la relación entre la producción de nuestro trabajo y el aporte que ponemos en nuestro trabajo. A medida que aumentaba la productividad, se beneficiaba de una mayor producción, pero también de un menor número de insumos: la jornada laboral semanal cayó muy sustancialmente.

El crecimiento económico también fue importante porque cambió la relación entre las personas. En el largo tiempo en que el mundo vivió en un mundo sin crecimiento, la única manera de mejorar era si alguien empeoraba. Su propia buena suerte era la mala suerte de sus vecinos. El crecimiento económico cambió eso, el crecimiento hizo posible que uno sea mejor al mismo tiempo que otros mejoraban. El ingenio de quienes construyeron la tecnología que aumentó la productividad -el automóvil, la maquinaria y la tecnología de la comunicación- hizo que algunos de ellos fueran muy ricos y, al mismo tiempo, aumentaran la productividad y los ingresos de otros. Es difícil exagerar la diferencia entre la vida en suma cero y la economía de suma positiva.

Desafortunadamente, los medios de comunicación están demasiado obsesionados con reportar eventos individuales y cosas que salen mal y no prestan suficiente atención a los lentos desarrollos que remodelan nuestro mundo. Con estos datos empíricos sobre la reducción de la pobreza podemos recrear qué reportaría un medio de comunicación concreto sobre el desarrollo global. El titular podría ser “El número de personas en extrema pobreza cayó en 130,000 desde ayer”. Y este titular no se habría publicado solo una vez, ya que – en promedio – ha habido una reducción de 130,000 personas menos en situación de pobreza extrema cada día desde 1990.

​II. Alfabetismo

¿Cómo evolucionó la educación de la población mundial durante este período? La siguiente tabla muestra la proporción de la población mundial alfabetizada en los últimos dos siglos. En el pasado, sólo una pequeña élite era capaz de leer y escribir. La educación de hoy, incluso en los países más ricos, es un logro muy reciente. Fue en los últimos dos siglos que la alfabetización se convirtió en la norma para toda la población.

En 1820 sólo 1 de cada 10 personas eran alfabetizadas. En 1930 era cada 3 y ahora estamos en el 85% a nivel mundial. Dicho de otra manera, si uno estuviera en 1800, tendría una probabilidad de 9 en 10 de no ser capaz de leer – hoy más de 8 de cada 10 personas son capaces de leer. Y si son jóvenes, las posibilidades son mucho más altas ya que muchos de la población analfabeta de hoy en día son viejos.

Si crees que la ciencia, la tecnología y la libertad política son importantes para resolver los problemas del mundo y crees que saber leer y escribir ayuda para lograrlo, entonces mira las cifras en números absolutos. En 1800, había 120 millones de personas en el mundo que sabían leer y escribir; hoy hay 6.2 mil millones con la misma habilidad.

III. La Salud

Una de las razones por las que no vemos progreso es que no somos conscientes de lo mal que estábamos en el pasado.

En 1800, las condiciones de salud de nuestros antepasados ​​fueron tales que alrededor del 43% de los recién nacidos del mundo morían antes de cumplir 5 años. Las estimaciones históricas sugieren que el mundo entero vivía en malas condiciones. Hubo relativamente poca variación entre las diferentes regiones: en todos los países del mundo más de 1 en cada tres niños murieron antes de los 5 años de edad.

Sería erróneo creer que la medicina moderna era la única razón que explica la mejorar en salud. Inicialmente, la prosperidad creciente y la naturaleza cambiante de la vida social importaban más que la medicina. Se trata de mejoras en la vivienda y el saneamiento que mejoraron nuestras posibilidades de sobrevivir las enfermedades infecciosas. Una dieta más sana – posible gracias a una mayor productividad en el sector agrícola y en el comercio exterior – nos hizo más resistentes a las enfermedades. Sorprendentemente, mejorar la nutrición y la salud también nos hizo más inteligente y más altos.

Pero seguramente la ciencia y la medicina también importaban. Una población más educada logró una serie de avances científicos que hicieron posible reducir aún más la mortalidad y las enfermedades. El descubrimiento de la Teoría microbiana de la enfermedad (o la teoría de los gérmenes) en la segunda mitad del siglo 19 fue particularmente importante. En retrospectiva es difícil entender por qué una nueva teoría puede ser tan importante. Pero en un momento en que los médicos no se lavaban las manos al pasar de la autopsia a la partería, la teoría finalmente convenció a nuestros antepasados ​​de que la higiene y el saneamiento público son cruciales para la salud.

La teoría de los gérmenes sentó las bases para el desarrollo de antibióticos y vacunas, y ayudó al mundo a ver por qué la salud pública es tan importante. La salud pública importa mucho: todos se benefician de que todos los demás estén vacunados y todos se benefician de que todos obedezcan las reglas de higiene.

Con estos cambios, la salud global mejoró de una manera que era inimaginable para nuestros antepasados. En 2015, la mortalidad infantil se redujo al 4.3%, 100 veces menos que hace dos siglos. Es importante tomar esta larga perspectiva para ver el progreso de lo que hemos logrado.

IV. La Libertad

La libertad política y las libertades civiles están en el corazón del desarrollo, ya que son un medio de desarrollo y un objetivo de desarrollo. El periodismo y el discurso público son los pilares sobre los que descansa esta libertad, pero las evaluaciones cualitativas de estos aspectos corren el riesgo de percibir erróneamente un declive de las libertades a lo largo del tiempo, cuando en realidad estamos elevando el nivel por el cual juzgamos nuestra libertad. Por lo tanto, las evaluaciones cuantitativas pueden ser útiles cuando nos ayudan a medir la libertad con el mismo criterio entre los países y con el tiempo.

Hay varios intentos de medir los tipos de regímenes políticos que gobiernan los países del mundo y capturar algo tan complejo como un sistema político puede ser polémico. No hay manera de evitarlo. En este análisis me basaré en el índice Polity IV, ya que es el menos problemático de las medidas que presentan una perspectiva a largo plazo. El índice mide los regímenes políticos en un espectro de +10 para democracias completas a -10 para autocracias completas. Los regímenes que caen en algún lugar en el centro de este espectro se llaman anocracias (un sistema de Gobierno que incluye características de inestabilidad política, ineficacia y una mezcla incoherente de rasgos y prácticas autoritarias y democráticas). A esto agregué información sobre los países del mundo que fueron gobernados por otros países como parte de un imperio colonial.

Una vez más quiero dar una perspectiva de tiempo para tener una perspectiva de cómo la libertad política ha cambiado en los últimos 200 años.

El gráfico muestra la proporción de personas que viven bajo diferentes tipos de regímenes políticos durante los últimos dos siglos. A lo largo del siglo XIX, más de un tercio de la población vivía en regímenes coloniales y casi todos vivían en países gobernados autocráticamente. La primera expansión de la libertad política a partir de finales del siglo XIX fue aplastada por el surgimiento de regímenes autoritarios que en muchos países tomaron su lugar en el tiempo previo a la Segunda Guerra Mundial.

En la segunda mitad del siglo XX, el mundo cambó significativamente: los imperios coloniales terminaron y cada vez más países se volvieron democráticos. La proporción de la población mundial que vivía en las democracias aumentó continuamente, particularmente después de la ruptura de la Unión Soviética, que les permitió a más países democratizarse. Ahora más de la mitad de las personas en el mundo viven en una democracia.

La inmensa mayoría de los que viven en una autocracia – cuatro de cada cinco de los que viven en un régimen autoritario – viven en la autocracia de un solo país: China.

Los derechos humanos son igualmente difíciles de medir consistentemente en el tiempo y en el tiempo. Los mejores datos empíricos muestran que después de un tiempo de estancamiento, la protección de los derechos humanos mejoró globalmente durante las últimas 3 décadas.

V. Fertilidad

El gráfico siguiente muestra el aumento de la población mundial durante los últimos 2 siglos. La población mundial fue de alrededor de 1 mil millones en el año 1800 y se incrementó 7 veces desde entonces.

El crecimiento de la población aumentó la demanda de recursos de la humanidad y amplificó el impacto de la humanidad en el medio ambiente. Pero este aumento de la población mundial debería evocar más que la ruina y la tristeza. En primer lugar, este aumento demuestra un logro tremendo. Muestra que los seres humanos dejaron de morir a la misma velocidad de la que nuestros antepasados ​​murieron durante muchos milenios antes.

En tiempos pre-modernos, la fertilidad era alta: lo normal era tener 5 o 6 niños por mujer. Lo que mantuvo el crecimiento de la población bajo fue la alta tasa con la cual la gente moría y eso significó que muchos niños morían antes de que alcanzaran su edad reproductiva. El aumento de la población mundial siguió cuando la humanidad comenzó a ganar la lucha contra la muerte. La esperanza de vida mundial se duplicó en los últimos cien años. [En el Perú, la esperanza de vida pasó de 43 años en 1950, a 74 años en la actualidad].

El crecimiento de la población es una consecuencia de que la fecundidad y la mortalidad no disminuyen simultáneamente. El rápido crecimiento de la población ocurrió cuando la fecundidad seguía siendo tan alta como el ambiente insalubre del pasado, pero la mortalidad ya ha disminuido a los niveles bajos de nuestro tiempo.

Lo que hemos visto de país en país durante los últimos 200 años es que una vez que las mujeres se dan cuenta de que las posibilidades de que sus hijos mueran han disminuido considerablemente, se adaptan y eligen tener menos hijos. El crecimiento de la población llega a su fin. Esta transición de la alta mortalidad y fertilidad a baja mortalidad y fertilidad se llama transición demográfica. En aquellos países que primero industrializaron duró por lo menos desde mediados del siglo XIX hasta mediados del siglo XX – tomó 95 años para que la fertilidad disminuyera de más de 6 niños a menos de 3 niños por mujer en el Reino Unido. Los países que siguieron después lograron a veces esta transición mucho más rápido: Corea del Sur pasó de más de 6 hijos por mujer a menos de 3 en sólo 18 años, Irán lo logró en sólo 10 años.

Así como los países pasaron por esta transición, el mundo está pasando por esta transición. La fecundidad global se ha reducido a más de la mitad en los últimos 50 años, de más de 5 hijos por mujer a principios de los 60 a menos de 2.5 hoy. Esto significa que el mundo está entrado en la transición demográfica y el crecimiento de la población mundial ha alcanzado su punto máximo hace medio siglo.

Ahora que vemos la disminución de la fecundidad en todas partes llegamos al final del crecimiento de la población: La población mundial se ha cuadruplicado a lo largo del siglo XX, no se duplicará a lo largo de este siglo. Y al final del siglo, la ONU espera un lento crecimiento anual de la población de 0.1% mientras que los demógrafos de la IIASA (siglas en inglés del International Institute for Applied Systems Analysis, organización internacional de investigación científica multidisciplinaria) esperan un fin del crecimiento de la población alrededor del año 2075.

VI. Educación

Ninguno de los logros alcanzados en los últimos dos siglos podría haber sido alcanzado sin la expansión del conocimiento y la educación. La revolución en cómo vivimos no sólo fue impulsada por la educación sino que también hizo que la educación fuera más importante que nunca.

Y sabemos que la educación está en camino a mejorar a nivel mundial. Contrariamente a muchos otros aspectos sociales en los que los permisos son de uso limitado, creo que la educación es un aspecto en el que podemos hacer proyecciones útiles para el futuro. La simple razón es que la composición educativa de hoy nos dice algo sobre la educación del mañana: una joven alfabetizada de hoy será una anciana alfabetizada en 2070 y un estudiante con educación secundaria ahora será un graduado con educación secundaria en el futuro.

La cohorte más joven de hoy es mucho mejor educada que las cohortes más viejas. Y como el tamaño de la cohorte está disminuyendo, las escuelas que ya están en su lugar pueden proporcionar mejor educación para la próxima generación.

La visualización a continuación muestra la proyección del Instituto IIASA para el tamaño y la composición educativa de la población mundial hasta el año 2100.

Es una interesante mirada al futuro: con la baja fertilidad global de hoy, los investigadores esperan que el número de niños declinen desde ahora – nunca habrá más niños en el planeta que hoy. Y como se mencionó antes, los investigadores de la IIASA esperan que la población mundial alcance su pico en 2070 y disminuya a partir de entonces.

Centrándose en el desglose educativo, la proyección sugiere que para el año 2100 casi no habrá nadie sin educación formal y habrá más de 7 mil millones de mentes que habrán recibido por lo menos educación secundaria.

Con la gran importancia de la educación para mejorar la salud, aumentar la libertad política y acabar con la pobreza, esta proyección es muy alentadora.

VII. ¿Por qué no sabemos esto?

La motivación para esta historia de condiciones de vida globales fue el resultado de la encuesta que documentó la negativa perspectiva del desarrollo global que la mayoría de nosotros tenemos. ¿Cómo encaja esto con la evidencia empírica?

No creo que los medios de comunicación sean los únicos culpables de esto, pero creo que tienen parte de la culpa. Esto es porque los medios no nos dicen cómo está cambiando el mundo, nos dicen que es lo que va mal en el mundo.

Una de las razones por las que los medios de comunicación se centran en las cosas que salen mal es que los medios de comunicación se centran en eventos únicos y los eventos individuales son a menudo malos – miremos las noticias: accidentes de avión, ataques terroristas, desastres naturales, resultados electorales que nos gustan, etc.

Los acontecimientos positivos, por otra parte, suceden a menudo muy lentamente y nunca llegan a los titulares en los medios obsesionados con el acontecimiento.

El resultado de un sistema mediático y educativo que no presenta información cuantitativa sobre los desarrollos a largo plazo es que la gran mayoría de la gente es completamente ignorante acerca del desarrollo global. Incluso la disminución de la pobreza extrema global sólo es conocida por una pequeña fracción de la población del Reino Unido (10%) o EEUU (5%). En ambos países, la mayoría de la gente piensa que la proporción que vive en la extrema pobreza ha aumentado. Dos tercios en Estados Unidos incluso piensan que la participación en la pobreza extrema ha “casi duplicado”. Cuando ignoramos el desarrollo global, no es sorprendente que pocos piensen que el mundo está mejorando.

La única manera de contar una historia completa es usando estadísticas. Sólo entonces podemos esperar tener una visión general de las vidas de los 22 mil millones de personas que vivieron en los últimos 200 años. Los desarrollos que revelan estas estadísticas transforman nuestras condiciones de vida globales – lenta pero constantemente. Se informan en esta publicación en línea – Our World in Data (Nuestro mundo en datos) – que mi equipo y yo hemos estado construyendo en los últimos años. Lo vemos como un recurso para mostrar estos desarrollos a largo plazo y así complementar la información en las noticias que se centran en eventos.

La dificultad de contar la historia de cómo cambiaron las vidas de todos en los últimos 200 años es que no se pueden escoger historias únicas. Las historias sobre personas individuales son mucho más atractivas pero no pueden ser representativas de cómo el mundo ha cambiado. Para lograr una representación de cómo el mundo ha cambiado en general, hay que contar muchas, muchas historias a la vez; y eso es estadística.

Para que sea más fácil entender la transformación en las condiciones de vida que hemos logrado, he hecho una visualización resumida de cómo sería la historia de un grupo de 100 personas durante estos 200 años para ver cómo sus vidas habrían cambiado si hubieran podido experimentar este período transformador del mundo moderno.

VIII. ¿Por qué importa que no sepamos esto?

La transformación exitosa de nuestras condiciones de vida sólo fue posible gracias a la colaboración. Tal transformación sería imposible para una sola persona.

Es nuestro cerebro colectivo y nuestro esfuerzo colaborativo son necesarios para tal mejora.

Hay grandes problemas que persisten. Ninguna de lo mostrado anteriormente debe darnos razones para ser complacientes. Por el contrario, nos muestra que aún queda mucho trabajo por hacer: lograr la reducción más rápida de la pobreza es un logro tremendo, pero el hecho de que 1 de cada 10 viva en extrema pobreza hoy en día es inaceptable. Tampoco debemos aceptar las restricciones de nuestra libertad que todavía existen y que se ponen en práctica. Y también está claro que el impacto de la humanidad en el medio ambiente está en un nivel que no es sostenible y que pone en peligro la biosfera y el clima de los que dependemos. Necesitamos urgentemente reducir nuestro impacto.

No es seguro que haremos progresos en contra de estos problemas – no existe una ley tácita que garantice que el mundo continúe con esta tendencia de mejorar las condiciones de vida. Pero lo que está claro desde la perspectiva a largo plazo es que los últimos 200 años nos han llevado a una mejor posición que nunca para resolver estos problemas. Resolver problemas – grandes problemas – es siempre un tema de colaboración. Y el grupo de personas que es capaz de trabajar juntos hoy en día es un grupo mucho, mucho más fuerte que nunca hubo en este planeta. Acabamos de ver el cambio con el tiempo: El mundo de hoy es más saludable, más rico y mejor educado.

Para que nuestra historia sea una fuente de aliento, tenemos que conocer nuestra historia. La historia que nos contamos acerca de nuestro tiempo importa. Debido a que nuestras esperanzas y esfuerzos para construir un futuro mejor están inextricablemente ligados a nuestra percepción del pasado, es importante comprender y comunicar nuestro desarrollo global hasta ahora. Saber que hemos recorrido un largo camino en la mejora de las condiciones de vida y la noción de que nuestro trabajo vale la pena es importante. Es una condición necesaria para la auto-mejora.

La libertad es imposible sin la fe en la gente libre. Y si no somos conscientes de nuestra historia y creemos falsamente lo contrario de lo que es verdad, corremos el riesgo de perder la fe unos de otros.

Lampadia

 




Un futuro de emprendedores y redes de negocios

Un futuro de emprendedores y redes de negocios

Cada vez más y más empresas empiezan a enfocarse en compartir recursos, utilizando la tecnología para conectar a individuos y maquinarias para lograr un objetivo común.

Los ejemplos más prominentes de la aglutinación de recursos de muchos jugadores son Uber y Airbnb. Al igual que con la mayoría de las empresas que salen de Silicon Valley, utilizan palabras como “revolución” y “movimiento” para describirse. Y es que están revolucionado el conjunto de la economía.

Un reciente artículo de Singularity University, que compartimos líneas abajo, debate  grandes preguntas: “¿Quién gobernará el futuro de la economía- los emprendedores o las mega corporaciones? ¿Se fracturará la economía en trozos cada vez más pequeños o se centralizará en un sistema de el-ganador-se-lleva-todo?”

La respuesta puede ser más complicada de lo que se cree. El artículo augura una economía de empleos temporales (Gig), un entorno en el que las posiciones temporales serán comunes y las organizaciones harán contratos a corto plazo con trabajadores independientes.

Las computadoras y el Internet permiten la organización de miles, incluso millones, de pequeños productores. Esto se debe a que los factores de la producción, que antes estaban fuera del alcance de los emprendedores y de las organizaciones pequeñas, se están haciendo mucho más accesibles para los jugadores pequeños. La tecnología ha ayudado a conectar a las personas que necesitan un producto o servicio con las personas que lo pueden realizar, y a su vez, los que lo ofrecen, pueden haber sido conectados a otros miles de operadores.

El artículo de SingularityHub finaliza diciendo: “No es tanto que las grandes empresas van a desaparecer; es que lo que hacen mejor va a cambiar de una manera radical. Y no todos vamos a ser emprendedores individuales en una economía uniforme de empleos temporales (aunque muchos más lo serán). Será ambos a la vez.”

Este futuro ya está aquí y es necesario adaptarnos a él y tomar un rol activo y provechoso en este nuevo mundo lleno de oportunidades. Lampadia

Un gran cambio está llegando, y podría Uber-tizar industrias enteras

Por Jason Dorrier

SingularityHub, Singularity University

17 de mayo de 2016

Traducido y glosado por Lampadia

 

Emprendedores, manufactura exponencial, funciones, futuro del trabajo

¿Quién gobernará la economía en el futuro – emprendedores o mega corporaciones? ¿Se fracturará la economía en trozos cada vez más pequeños o se centralizará en un sistema de ganador-se-lleva-todo? La respuesta, según John Hagel, depende dónde mires.

Hagel es co-presidente del Centro de Deloitte para Edge. En su intervención en la conferencia de manufactura exponencial de Singularity University en Boston, Hagel esbozó una poderosa tendencia económica que su grupo llama “el gran cambio.

Hagel cree que entender el gran cambio es clave para navegar en una economía cada vez más incierta, impulsada por la tecnología digital, la liberalización y la globalización. La cuestión es menos acerca de si el gran cambio está sucediendo y más sobre a dónde nos está llevando. Y de acuerdo con Hagel, dos visiones opuestas compiten por nuestro futuro económico.

Un lado sostiene que el impacto de toda esta tecnología digital es fragmentar todo“. “Todos vamos a convertirnos en agentes libres, independientes- contratistas vagamente afiliados cuando necesitemos proyectos específicos. Pero, básicamente, las empresas son dinosaurios. Vamos a fragmentarnos hasta lo individual. Una economía de ‘gig’, temporalidad al máximo”.

El otro punto de vista sugiere que nos estamos moviendo hacia una economía de el ganador-se-lleva-todo, en la que el efecto de las redes permiten que pocas organizaciones capturen la mayor parte de la riqueza mientras todos los demás son excluidos tengan la mayor parte de la riqueza, mientras que todos los demás están marginados (los Googles y Facebooks del mundo).

“¿Cuál es la correcta?”.

El gran cambio

La centralización del poder corporativo tiene una larga historia en la cultura pop.

No es difícil ver por qué esa visión es preocupante. La historia moderna de los negocios está repleta de legendarios gigantes corporativos. Hace poco más de un siglo, lo fue US Steel, Standard Oil, General Electric y JP Morgan. Hoy en día, es Apple, Google, Microsoft, Exxon Mobil y (todavía) GE.

Pero de acuerdo con Hagel, cuando el mundo entró a la era digital, algo cambió.

En el pasado industrial, las grandes empresas tenían la ventaja. Eran dueños de los factores de producción. Esto incluía bienes de capital, como costosa maquinaria industrial e infraestructuras. Cuanto más se producía, sus costos también se diluían. Reunían a las personas y las máquinas adecuadas bajo un mismo techo para fabricar sus productos.

De alguna manera, era simplemente mucho más fácil y más eficiente coordinar la actividad dentro de una institución que a través de muchas instituciones. Lo ‘grande’ tenía sentido.

En la economía digital, esta lógica no siempre es tan sólida. ¿Por qué? Las computadoras y el Internet permiten la organización de miles, incluso millones, de pequeños productores.

Además, los factores de la producción, antes fuera del alcance de los emprendedores y de las organizaciones pequeñas, se están convirtiendo en mucho más accesibles. En el sector de la tecnología, cualquier persona con las habilidades adecuadas puede escribir y vender una nueva APP (aplicación). Siempre que tengan una computadora y una conexión, un desarrollador de APPs puede hacer y vender un producto en pijama desde su casa.

“En los medios de comunicación digital, todo desde música y vídeos hasta software, se cada vez una fragmentación más dramática de productos debido a que más y más personas pueden participar en una escala mucho más pequeña“, dice Hagel.

Cada vez se pueden hacer más productos físicos de calidad en cualquier lugar también. La digitalización está avanzando hacia áreas como la manufactura.

Para la producción masiva, aún se necesitan fábricas tradicionales; pero, ¿para el desarrollo de productos? No tanto. En estos días, unos US$ 20,000 te consiguen una computadora de escritorio CNC, una impresora 3D y un router, tan preciso como cualquier gran fábrica. O se puede alquilar tiempo de estas máquinas en un ‘creador de espacio’ (maker space). Incluso los superordenadores (en la nube) y otras instalaciones de alta tecnología están al alcance.

“Yo no necesito tener una instalación de chips. Si tengo un diseño de chip un interesante, puedo alquilar la capacidad en las grandes instalaciones de otra persona”, dice Hagel. “Los medios de producción son cada vez más accesibles y asequibles a más y más personas con nuevas ideas creativas de productos.”

Combine la producción cada vez más accesible con plataformas digitales para organizar a pequeños creadores, y obtendrá un nuevo modo de organización económica.

Este es el futuro, tal como lo ve Hagel. Por un lado, el desarrollo y la producción de muchos (no todos) bienes y servicios se fragmentará. La economía (gig) de trabajos temporales se maximizará. Por otro lado, las empresas que enlacen estos fragmentos, van a centralizar aún más.

Los productores se volverán más pequeños, mientras que las empresas que los unen se harán más grandes.

Una economía (Gig) llena de empleos temporales

[Una economía de empleos temporales es un entorno en el que las posiciones temporales son comunes y las organizaciones contratan trabajadores independientes a corto plazo].

No es necesario ir muy lejos para ver los primeros ejemplos de este concepto. En los últimos años, ha habido un sin fin de expectativas (y, a veces controversia) sobre la economía compartida.

Las compañías tecnológicas están siendo valorizadas en decenas de miles de millones de dólares a pesar de que no poseen mucho capital físico. En su lugar, hacen  plataformas de software para juntar y organizar emprendedores.

Uber y Airbnb, son los ejemplos más utilizados, pero no son los únicos.

Como dijo el Wall Street Journal el año pasado, “Ahora, hay un Uber para todo.” Asistentes personales, médicos que hacen visitas a domicilio, servicios de lavandería. Algunos de estos sobrevivirán, muchos no lo harán.

Este es sólo un tipo de plataforma. Otro tipo, más específico para manufactura, une una gran cantidad de jugadores para lograr un objetivo común que no podría completar solo.

En esta área, China e India están a la cabeza, de acuerdo con Hagel. Él da el ejemplo de la compañía de confección de ropa, Li & Fung, cuyos clientes incluyen a Ann Taylor y Calvin Klein. Li & Fung organiza a unos 15,000 socios para tomar pedidos de productos desde materias primas, producción y hasta la distribución global, pero no hacen NADA de estas cosas. Solo organizan la plataforma que permite que todos los jugadores  colaboren.

Hagel llama a estos grandes organizadores plataformas de “extracción escalable”. En lugar de prever la demanda y traer recursos a la producción y distribución, las plataformas de extracción escalables responden a la demanda de forma más flexible, responden a la demanda jalando y uniendo todas las partes y piezas.

“Cuando hablamos de plataformas de extracción escalables”, dice Hagel, “estamos hablando de plataformas que involucran a decenas de miles, cientos de miles, y en un número creciente de casos, millones de participantes, que pueden participar cuando es necesario… donde sea necesario, como sea necesario”.

No es cualquiera o –es, ambos y…

Es tentador ir hacia un lado u otro cuando vemos fuerzas importantes nos empujan en esa dirección. Hagel dice que no es tanto que las grandes empresas van a desaparecer; lo que va a cambiar de una manera radical es lo que hacen mejor. Y no todos vamos a ser emprendedores individuales en una economía uniforme de empleos temporales (aunque muchos más lo serán). Es ambos a la vez.

Veremos la fragmentación y concentración, dependiendo donde miremos. Y críticamente, ambos van a ocurrir en paralelo y se reforzarán y amplificarán el uno al otro.

“No se hubiera dado este grado de fragmentación si no hubieran este tipo de empresas y servicios que concentren, consoliden y apoyen a estos negocios empresas fragmentados”, dice Hagel.

El gran cambio introducirá nuevas oportunidades y desafíos tanto para las empresas como para los creadores. Las empresas tienen que analizar seriamente lo que pasa bajo sus pies, si se trata de fragmentación, tendrán que trazar rápidamente un nuevo curso o correr el riesgo de ser obsoletos. Entre tanto, los individuos tendrán una libertad y flexibilidad sin precedentes. Y al mismo tiempo, la estabilidad y la seguridad de las grandes organizaciones desaparecerán.

Aún así, a pesar de los desafíos, Hagel es optimista.

“Nuestra creencia es el gran cambio, para aquellos que hagan la transición, se abrirá la posibilidad, por primera vez, de un mundo de negocios impulsado por rendimientos crecientes”, dice Hagel. “En el que mientras más participen, y reúnan más experiencias, se creará más valor para todos. Ese es un mundo de negocios muy diferente y emocionante; y estoy ansioso por ser parte de él”

Lampadia




“Enamórate del problema, no de la solución”

“Enamórate del problema, no de la solución”

El pasado miércoles y jueves (1 y 2 de junio) se llevó a cabo el cuarto Foro de Emprendimiento e Innovación de la Alianza del Pacífico (AdP), LAB4+ en Lima, Perú. Es el evento de emprendimiento e innovación más grande de Latinoamérica y, en conjunto, los países involucrados (Chile, Colombia, México y Perú) representan la 8va economía más grande del mundo. Su objetivo del LAB4+ es conectar y fortalecer al ecosistema emprendedor e innovador de la región.

La Ministra de Comercio Exterior y Turismo y Presidenta del Consejo Directivo de PROMPERÚ, Magali Silva Velarde Álvarez, manifestó que LAB4+ tiene como finalidad impulsar el proceso de internacionalización de las empresas, así como de construir y fortalecer el ecosistema de innovación en la AdP. 

Lab4
Fuente: Alianza del Pacífico/Pacific Alliance

El Foro reunió a varios ponentes internacionales, siendo el más notable el fundador del famoso y tan utilizado App ‘Waze’: Uri Levine (De Israel). Hace dos años, Uri vendió Waze, una aplicación de mapeo del tráfico alimentado por los usuarios, en un contrato de US$ 1,000 millones a Google. Pero en lugar de conformarse con sus ganancias, Levine procedió a fundar otra App, FEEX, una aplicación para reducir las tasas de los servicios financieros que promete ser igualmente revolucionaria.

Waze

Y es que el empresario crea entre 2 y 3 start-ups al año, varias de las cuales ya son muy usadas en otros países. En el foro, aprovechó para compartir sus consejos para los jóvenes empresarios e innovadores latinoamericanos que buscan hacer crecer sus start-ups.  Instó a los jóvenes a seguir su pasión sin importar las dificultades que encuentren en el camino.

Lo primero que hay que hacer, afirmó el creador de Waze, es conocer el problema que se intenta resolver por adentro y por fuera. “Si eres constante y consistente en la solución del problema, se convertirá en un éxito”, dijo. Ese es su consejo principal: mantén la concentración en el problema y en quién sufre este problema. Tienes que resolverlo y si eres persistente y constante, el éxito vendrá por sí solo.

La frase más memorable de su charla fue: “Enamórate del problema, no de la solución”, la cual repitió en varias ocasiones y se ha convertido en una especie de lema para Levine. La mayoría de startups, dice, se concentran mucho en su solución y no en el asunto que están intentando resolver. Y muchas soluciones son imperfectas y realmente no le atinan al blanco. Por eso, estar tan enfocado en ellas “hace que las empresas progresen en la dirección equivocada”. El concepto es que al entusiasmarte con una solución, puedes cerrar tu capacidad de juzgarla.

Estar “enamorado” del problema, en cambio, permite conocerlo al detalle y tener la sensibilidad correcta, lo que es crucial para entender realmente qué se requiere para solucionarlo. El mejor argumento de Levine es su propia experiencia: “Waze no progresó hasta que solucionamos el problema inicial”.

Por otro lado, Feex nació a partir de la consideración de que los inversores comunes pagan comisiones e intereses excesivos a quienes manejan sus ahorros. Durante todo el proceso hasta que una persona se retire, se pierden decenas de miles de dólares; según él, un tercio de las pensiones de los estadounidenses se van en intereses. Parafraseando a Einstein, Uri afirmó que “El uno por ciento al año suena pequeño, ¿verdad? Pero hay que tomar en consideración el efecto compuesto: Einstein solía decir que el interés compuesto es la octava fuerza del universo. Quienes entienden esto están ganando y los que no, lo están pagando. Y nosotros, la mayoría de las personas, simplemente lo estamos pagando”.

Otro de sus grandes consejos es que el fracaso es parte del éxito. Esto, nuevamente lo grafica con una cita memorable: “Si tienes miedo a fracasar, ya fracasaste”. Waze no surgió de la noche a la mañana, pero a pesar de que Levine no entró en detalles acerca de los errores que cometió durante el proceso de Waze, afirma que los empresarios no deben tener miedo de fracasar: “Cuanto más rápido nos equivoquemos, más rápido encontraremos una solución. Así, nos convertimos en una empresa de rápido movimiento”.

Startup
Fuente: PPT de Uri Levine

Este proceso es igual sin importar qué tipo de start up empieces. Levine ya ha fundado otras como Fairfly, que monitorea los precios de los pasajes de avión después de que la gente compra sus boletos y, si encuentra uno de un precio inferior (incluyendo los gastos de anulación) compra el nuevo boleto. “Las personas puede llegar a pagar hasta US$ 100 mil millones al año por no comprobar los precios después de reservar un boleto,” dice. Así que, a su modo de pensar, Fairfly está mirando a una oportunidad de mercado de US$ 100 mil millones.

Luego está FairSale, una aplicación parecida que envía alertas a los consumidores cuando baja el precio de un producto ya comprado, para que puedan obtener crédito o reembolso parcial en las tiendas.

Su último, y probablemente mejor consejo: se disruptivo. Ese término, que ni siquiera tiene una traducción precisa al español  (en inglés es: disruptive), se ha convertido en el adjetivo clave para describir el mundo del emprendimiento, pero pocos tienen tan claro como Levine qué significa: “sacar gente del mercado, cambiar su equilibrio”.

Y tiene mucho sentido. Las grandes startups tecnológicas siempre han tenido víctimas, desde los servicios de correos hasta los taxis. Por eso, el consejo de Levine a los emprendedores es que tengan muy claro quién va a salir del mercado (o al menos, a quién se le va a dañar el negocio) si tienen éxito. Quienes saben eso y toman los riesgos correctos, dice, “son los que se van a tomar el mundo”.

La cátedra de Uri Levine se enfocó en cómo empezar un negocio en el mundo de hoy, el rol de la disrupción y sus consejos sobre como afrontar el proceso de innovación basado en su experiencia con Waze y otras aplicaciones. “Todas mis startups buscan crear un mundo mejor”, afirma Levine. Una excelente inspiración para nuestros innovadores

Lampadia