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La lucha contra el humo doméstico

Eliminar los humos domésticos es una de las iniciativas más importantes para superar las condiciones de vida que condenan a los más pobres a enfrentar una salud deteriorada, tanto de las madres que cocinan para la familia, como de los niños menores que las acompañan.

Esto se agrava cuando los alimentos se cocinan a fuego abierto, quemando combustibles sólidos, como madera, carbón o residuos animales, en ambientes integrados al resto de las viviendas.

Por ello, la eliminación de los humos domésticos fue uno de los objetivos más importantes del ‘Proyecto SIERRA PRODUCTIVA’. Como hemos informado en varias ocasiones, este proyecto ofrece mejoras productivas y de ingresos de las familias que dirigen sus minifundios en la sierra alto andina, además de mejoras de las condiciones de vida. Otro proyecto que en el Perú buscaba el objetivo de eliminar los humos, era el de Sembrando, que en su momento promovió la ex Primera Dama, Pilar Nores.

También hemos destacado varias veces, como ninguno de nuestros gobiernos fue capaz de apoyar el programa de Sierra Productiva, que, con apoyo de la cooperación internacional, de gobiernos locales y algo, de parte del sector privado, llegó a implantarse en unas 60,000 familias.

Hace tiempo que el gobierno no informa sobre la prevalencia de esta dañina práctica de preparación de alimentos. Esperemos que no estemos acumulando los impactos de otro descuido parecido al de la desnutrición infantil.

Vamos a pedirle a Carlos Paredes, el coordinador de Sierra Productiva, que nos informe del avance de su programa y de las trabas del Estado para el aumento de su cobertura.

Ahora compartimos el artículo de The Economist al respecto. Lampadia

El humo doméstico puede ser el peligro ambiental más mortal del mundo
Cómo cocina la otra mitad

Las campañas globales no han logrado cambiar la forma en que los pobres calientan sus alimentos

The Economist
5 de abril, 2018
Traducido y glosado por Lampadia

Imaginemos que construimos una pequeña montañita de leña en la habitación más pequeña de nuestra casa y le prendemos fuego. Puedes mantener la puerta abierta, dejar escapar un poco de humo, pero no puedes encender un extractor. Tienes que mantener el fuego por una hora. Y repetir el proceso tres veces al día.

Así es como vive Fatou N’Dour. Su cocina, separada de su casa y construida con adobes, mide aproximadamente dos metros por dos metros. Por lo general, cocina en el interior debido a los vientos que azotan a Lambayene, el pueblo donde vive en el centro de Senegal. Cuando se le preguntó por la ventilación, señala un agujero en una pared, que mide unos diez centímetros cuadrados. Otras mujeres en el pueblo cocinan arroz, cuscús y salsas en condiciones similares, usando madera de un bosque cercano.

Madera y carbón en África; carbón en Asia Oriental; madera y estiércol de animales en el sur de Asia; en gran parte del mundo, los alimentos se calientan quemando combustibles sólidos primitivos. Cada fuego es pequeño, pero la Agencia Internacional de Energía (AIE), un grupo de investigación con sede en París, estima que el 5% de la demanda de energía primaria del mundo en 2016 fue suministrada por “biomasa sólida tradicional”. Las turbinas de viento y los paneles solares combinados generaron menos de la mitad.

Los terribles efectos de estas fogatas comienzan con su impacto en la salud humana. Se cree que el humo doméstico es el problema ambiental más letal del mundo, y mata a 2.6 millones de personas al año. Donde se queman madera y carbón, los árboles a menudo desaparecen. África pierde alrededor del 0.5% de sus bosques cada año, una tasa de destrucción más alta que la de Sudamérica. El hollín de los fuegos domésticos también calienta el planeta, especialmente cuando se instala en la nieve. Se cree que el carbón negro como el de las estufas sucias es la tercera causa más importante del cambio climático después del dióxido de carbono y el metano.

Los gobiernos, las agencias de ayuda y las organizaciones benéficas han tratado durante décadas de persuadir a las personas para que utilicen combustibles más limpios como el gas licuado de petróleo (GLP) y la electricidad. Aquellos que deben quemar madera y estiércol son empujados a hacerlo en estufas más eficientes.

El progreso ha sido asombrosamente lento. Desde el año 2000, la cantidad de personas que viven en la pobreza extrema se ha reducido de 1,700 millones a cerca de 600 millones. Las muertes neonatales han disminuido en un 49%. Sin embargo, la cantidad de personas que calientan sus alimentos con combustibles sucios se ha estancado entre 2,500 millones a 2,800 millones, según la AIE, en gran parte debido al crecimiento en África (ver gráfico). La Alianza Global para la Cocina Limpia, que usa una medida ligeramente diferente, estimó en 2015 que el número podría incluso haber aumentado. En cuanto a las estufas mejoradas, los investigadores que las distribuyen afirman que casi invariablemente encuentran que, cuando regresan varios años después, la gente ha vuelto a cocinar en estufas de barro hechas a mano o piedras grandes.

Los esfuerzos para cambiar la forma en que las personas cocinan han sido tan pequeños por tanto tiempo, pueden achacarse a mercados débiles, intervenciones de caridad descoordinadas y prioridades confusas. Esto también ilustra por qué el desarrollo es mucho más difícil en África que en Asia.

Cocinar a un fuego abierto no es divertido, especialmente si tienes que hacerlo todos los días. En otro pueblo en el oeste de Senegal, Felane, las mujeres se quejan de que sus cocinas están siempre calientes y ahumadas. El humo pica e irrita: una mujer lo culpa por colorear el blanco de sus ojos. La leña se está volviendo cada vez más difícil de encontrar. Un habitante local, Cheikh Diouf, que tiene nueve hijos, dice que la recolección de madera puede tomar cuatro viajes por semana, cada uno de hasta cuatro horas.

Aquellos que tienen una simple cocina de metal con un forro de arcilla, conocida como jambaar, dicen que es mejor que el método tradicional para equilibrar una olla sobre tres piedras grandes encima del fuego. El jambaar es más eficiente, necesita menos madera. Las encuestas en otros países muestran que muchas mujeres pobres se dan cuenta de esto. Un jambaar también se puede mover al exterior cuando el clima lo permite. Y se sienten superiores: una mujer en Lambayene lo describe como “civilizado”.

Sin embargo, las estufas jambaar rara vez se venden en los mercados. La gente parece ni siquiera saber cuánto cuestan. Gunther Bensch y Jörg Peters, ambos del Instituto Leibniz de Investigación Económica en Alemania, dieron estufas Jambaar a los aldeanos senegaleses en 2009. Cuando revisaron, en 2015, casi todas se habían agotado. Casi ninguna había sido reemplazada.

El problema no es solo la pobreza. Bensch y Peters han intentado subastar las estufas Jambaar. Descubrieron que los aldeanos suelen ofrecer más de lo que pagarían en las ciudades cercanas. Tal vez no los compren en los mercados porque las compras se consideran trabajo de mujeres, y las mujeres no pueden gastar mucho sin consultar a sus maridos. O quizás es demasiado difícil llevar estufas de pueblo en pueblo. Un vendedor de estufas urbanas, Malick Niang, dice que no trataría de vender las estufas en las aldeas. Son pesadas ​​y frágiles, y la demanda es incierta. Otro problema es que, al ser seguro, pobre y de habla francesa, Senegal atrae a organizaciones benéficas y de ayuda. Algunas veces reparten estufas por poco o nada. Eso confunde a las personas con su verdadero valor y puede malograr los mercados.

Incluso mejores estufas pueden no hacer mucho para mejorar la salud. La relación entre el humo y el daño en el hogar parece no ser lineal, dice Kevin Mortimer, de la Escuela de Medicina Tropical de Liverpool. Por encima de cierto nivel, respirar más humo puede no hacer que una persona esté mucho más enferma. Incluso las estufas de leña más eficientes exponen a los cocineros a muchas veces el nivel de humo que la Organización Mundial de la Salud considera seguro. Mortimer estuvo involucrado en un gran experimento en Malawi, utilizando una estufa de alta gama, y no encontró evidencia de un impacto positivo en las tasas de neumonía infantil.

Tal vez sea mejor elegir un combustible genuinamente limpio (limpio para cocinar, no necesariamente en el sentido de preservación del planeta) y promoverlo con fuerza. Brasil, Ecuador e Indonesia, entre otros, tienen todos los GLP subvencionados. Desde 2016, el gobierno de la India ha puesto GLP disponible para 34 millones de hogares, dándoles estufas de gas. El Ministerio de Petróleo dice que cuatro quintas partes de los hogares recién conectados han comprado un cilindro de reemplazo. En promedio, compran cuatro cilindros al año, lo que implica que obtienen al menos la mitad de su energía de cocción de la madera, el estiércol y similares. Aun así, este es un progreso rápido.

Cambiar los combustibles en lugar de las estufas parece ser el enfoque más esperanzador. “Nos engañamos a nosotros mismos, pensando que podíamos recoger cualquier combustible viejo del suelo y hacerlo quemarse limpiamente”, dice Kirk Smith, un científico ambiental de la Universidad de California, Berkeley, que participa en el programa de la India. No solo el GLP es mucho más limpio que el combustible sólido. También se siente como un paso adelante en el mundo y es más fácil de usar (incluso los hombres pueden cocinar con él).

Los subsidios constituyen herramientas de política deficientes. Son atrapados por personas ricas y bien conectadas. Crean lobbies que los apoyan y se vuelven difíciles de eliminar. Particularmente en países pequeños, es probable que los bienes subsidiados se filtren a través de las fronteras. Los subsidios también pueden variar de un año a otro con el presupuesto del gobierno. Ese es un peligro en el caso del combustible para cocinar, porque la fiabilidad es necesaria. Si las personas no siempre pueden obtener combustible limpio, probablemente volverán a ser cosas sucias, dice Radha Muthiah, la directora de la Alianza Global para Estufas Limpias.

Estos son problemas importantes incluso para los grandes países, de medianos ingresos con gobiernos más o menos competentes. India, que durante años malgastó dinero en GLP para la clase media, ha logrado dirigir los subsidios -el mayor programa de transferencia de efectivo del mundo- con mayor precisión hacia los pobres, en parte gracias al esquema de identidad biométrica de Aadhaar. Pero en países más pequeños, más pobres y más corruptos, los subsidios al GLP probablemente estén fuera de discusión. La India ha encontrado una manera difícil y costosa de solucionar el problema. En el África subsahariana, el humo persiste. Lampadia




La tercera transición energética de la historia

La tercera transición energética de la historia

La industria de la energía renovable está cambiando más rápido que en cualquier momento de la historia. La disrupción de la energía y el cambio geopolítico están transformando la economía del petróleo. La producción de energía se está desplazando hacia fuentes de carbono más bajas, impulsada por los avances tecnológicos y las crecientes preocupaciones ambientales.

Recientemente, el Financial Times analizó esta transición y cómo se desplegará. La energía renovable es la fuente de combustible de más rápido crecimiento y su participación en la matriz energética aumentará en el futuro. Si bien la intermitencia sigue siendo una preocupación, algunos países ahora pueden abastecerse por días enteros de energía renovable.

La energía eólica y solar ahora han alcanzado una paridad competitiva con los hidrocarburos en alrededor de 30 países a US$ 100 por megavatio/hora, según el Foro Económico Mundial. El aumento de la eficiencia y la disminución de los costos han provocado una caída dramática en el LCOE (costo nivelado de la energía, por sus siglas en inglés) en las tecnologías renovables, especialmente la solar, en los últimos años, informa el Foro Económico Mundial.

Si bien la demanda de energía crecerá, la abundancia de recursos accesibles significa que la industria tendrá que ser flexible para cambiar. Hay una serie de tecnologías convergentes que impulsan la transición. Su interacción afectará la forma en que viajamos, cómo vivimos, la forma en que se diseñan nuestras ciudades y nuestras casas, nuestro suministro de combustible y nuestra actitud hacia la eficiencia energética, e incluso cómo interactuamos.

Al igual que con cualquier disrupción, habrá ganadores y perdedores. Prever y aprovechar el potencial de la convergencia no será fácil. Se requerirá una inversión significativa para desarrollar y comercializar negocios y tecnología capaces de aprovechar las posibilidades de convergencia. Pero el beneficio potencial para las empresas que lo hacen bien será enorme. Lampadia

Los inversionistas deben enfrentar la tercera transición energética de la historia

El sector de las energías renovables necesitará miles de millones de dólares de capital y deberíamos estar listos para invertirlos en ellos “© Getty

Por Anton Eser y Nick Stansbury
Financial Times
3 de enero, 2018
Traducido y glosado por Lampadia

El sistema de energía global está en la cúspide de una revolución y los inversionistas del sector corren el riesgo de que el sonambulismo se convierta en un período de cambios trascendentales. La mayoría está de acuerdo en que los mercados energéticos futuros se verán muy diferentes de cómo se ven hoy en día, pero existe un riesgo real de que la transición ocurra más rápido de lo que muchos esperan, con consecuencias significativas para los inversionistas que no se preparan ahora.

La energía realmente importa para los inversionistas. La industria cuenta con casi $ 10,000 millones de capital invertido y solo dos grandes compañías de energía que proporcionan aproximadamente 20 céntimos por cada £1 de ingresos por dividendos del FTSE 100. Estamos en las primeras fases de una transición hacia un futuro con bajas emisiones de carbono. Esto marca la tercera “transición” que han experimentado los sistemas de energía desde el comienzo de la revolución industrial. El primero fue el aumento del carbón y el segundo el aumento del petróleo; esta vez, es el aumento de las energías renovables.

Históricamente, estas transiciones han tenido implicaciones dramáticas y de largo alcance que fueron subestimadas en su momento. Algunos comentaristas están basando sus expectativas sobre el ritmo de esta transición en la de las transiciones energéticas previas. Sin embargo, las transiciones anteriores fueron impulsadas principalmente por la economía: el carbón reemplazó a la biomasa porque la nueva tecnología le permitió convertirse en una fuente de energía fundamentalmente mejor: el ritmo del cambio fue impulsado por el mérito económico.

Esta transición bien puede ser diferente. El cambio no está impulsado por la tecnología (aunque sí lo permite), sino por el imperativo social y las políticas de gobierno. El público ya no acepta la contaminación (que es cada vez peor) y el aumento incesante de las emisiones de carbono con las terribles consecuencias. El ritmo del cambio puede, por lo tanto, ser mucho más rápido de lo que sugieren los precedentes históricos.

Las implicaciones son serias. La energía del carbón enfrenta los desafíos más inmediatos. Simplemente está matando a demasiadas personas y requiere demasiado carbono para sobrevivir a la transición energética. Aunque está disfrutando de una breve alza por ahora gracias a la oferta china, el futuro parece oscuro. La naturaleza del mercado global hace que los precios internacionales del carbón sean muy vulnerables, incluso a los cambios más pequeños en la demanda en el mercado más grande del mundo de China.

Si bien hay algunos puntos importantes y positivos de la demanda asiática en el corto plazo, el carbón simplemente no sobrevivirá a las amenazas de un gas barato, lo que mejorará las energías renovables y la presión pública. Cuando llegue un régimen global de precios del carbono, el ritmo del cambio solo se acelerará. Para los inversionistas con un horizonte de tiempo genuinamente a largo plazo y que están felices de evitar los ciclos a corto plazo cada vez más violentos en este commodity, el deshacerse del carbón en su totalidad parece cada vez más convincente.

El petróleo y el gas se ven diferentes. El punto inevitable de la demanda máxima de petróleo se está acercando, pero todavía está a muchos años de distancia. El gas se enfrenta a un período brillante en el mediano plazo como un valioso combustible de baja emisión de carbono que puede funcionar como “puente”, siendo aproximadamente la mitad de intensivo en carbono que el carbón.

Pero, en última instancia, el mejor futuro que se espera es un largo y constante período de lento declive. Las empresas en declive pueden ser muy rentables y generadoras de efectivo y, por lo tanto, atractivas inversiones a largo plazo. Sin embargo, deben correr como tal. Demasiadas compañías petroleras todavía se están comportando como si tuvieran por delante muchas décadas de crecimiento de la demanda. Pero, cada vez más, las únicas compañías petroleras que atraerán inversionistas son aquellas que entienden que su futuro es un negocio en declive.

Hay dos acciones creíbles que los inversionistas a largo plazo pueden tomar. El primero es comenzar a posicionar portafolios y carteras para estar listos para la tercera transición energética. La intensidad de carbono de los portafolios inevitablemente disminuirá con el tiempo. El sector de las energías renovables necesitará miles de millones de dólares de capital y deberíamos estar preparados para invertirlo en ellos.

El segundo es comprometerse. Como uno de los mayores inversionistas del Reino Unido en la industria de la energía, sabemos que todavía hay equipos y juntas que no quieren ver la realidad. Si queremos cumplir con nuestra responsabilidad social como propietarios a largo plazo de estos negocios, necesitamos que estén atentos a los riesgos. La energía está cambiando más rápido de lo que jamás habíamos pensado posible y los inversionistas deben tomar medidas para prepararse para el futuro. Lampadia




Otro escándalo de fraude en la industria automovilística

Otro escándalo de fraude en la industria automovilística

La revelación que Mitsubishi Motors Corp. ha estado manipulando las pruebas de ahorro de combustible en sus minicars indica que han habido una grandes fallas éticas en la industria automovilística. Este descubrimiento, tan solo meses después del escándalo de la falsificación de  emisiones de Volkswagen AG, está destrozando la confianza de los consumidores en estas grandes corporaciones, plantea la duda de si los parámetros calibrados en el resto de los automóviles están igualmente manipulados y cuestiona la fiabilidad de los controles sobre las emisiones de gases que pueden ser soslayados tan fácilmente. (Ver en Lampadia: Las sucias mentiras de VW exigen un escarmiento ejemplar)

Los altos ejecutivos de la automotriz afirman que fue el gerente de división quien habría ordenado la falsificación de los datos para cumplir los objetivos de eficiencia de combustible y negaron que la alta dirección se haya comprometido a la manipulación. Ahora la firma pondrá en marcha un panel de expertos (ajenos a la empresa) para examinar lo sucedido y encontrar a todos los involucrados. Ante todo, Mitsubishi Motors debe averiguar si el problema es producto de manipulaciones antiguas de la compañía (las cuales se había comprometido a corregir tras los escándalos anteriores).

Mitsubishi Motors admitió este miércoles haber manipulado los exámenes de emisiones de gases de hasta 625,000 vehículos con el objetivo de presentar mejores tasas de consumo de combustible que las reales. Se trata, según aseguró el presidente de la compañía, Tetsuro Aikawa, de una acción “intencionada”. No solamente se falsificaron los resultados de las pruebas, sino que ni siquiera se siguieron los protocolos que marca la ley japonesa.

Además afirma que manipuló la información de la resistencia a la rodadura de los neumáticos y la resistencia aerodinámica de datos que proporcionó al Ministerio de Transporte para las pruebas del gobierno para así certificar la eficiencia del combustible de sus cuatro modelos de minicars en producción desde 2013, incluyendo los suministrados a Nissan Motor Co. bajo su marca. Como resultado, la producción y venta de los cuatro modelos afectados (eK Wagon, eK Space, DayZ y Dayz Roox) se han detenido. 

Fuente: BBC, El Presidente de Mitsubishi, Tesuro Aikawa, admitiendo su culpa públicamente

Fue justamente Nissan Motor quien descubrió el fraude, al ver que sus datos sobre emisiones no coincidían con los de Mitsubishi. Concretamente, los datos de Nissan mostraban que la eficiencia energética era de alrededor un 7% menor de lo que presumía Mitsubishi. Tras una investigación interna, el fabricante concluyó que las cifras se habían falsificado.

Mitsubishi Motors no tendrá que reemplazar los vehículos en cuestión debido a que el problema no afecta la seguridad de los usuarios, a pesar de que según los informes, éstos podrían considerar alguna forma de compensación por los costos adicionales de combustible o la posible cancelación de créditos fiscales concedidos a los modelos en cuestión.

Los autos no son más propensos a sufrir accidentes sólo porque sus cifras de consumo de combustible han sido infladas. Pero el hecho de que el fabricante de automóviles manipule la eficiencia de combustible en un esfuerzo por superar a sus competidores en los catálogos de los vehículos – y engañando a sus clientes al hacerlo – es suficiente para plantear dudas acerca de otras características del producto.

Desde finales de 1970, Mitsubishi Motors había sufrido un gran número de quejas de clientes por defectos en sus vehículos, pero todo se había solucionado en privado, en vez de ser llevado a un ente regulatorio. En 2000 se volvió público, pero la conducta no se corrigió inmediatamente. En 2002, una rueda en uno de sus camiones de remolque salió del carro y mató a un peatón en un accidente. Posteriormente, un tribunal determinó que el accidente pudo haberse evitado de no ser por las fallas en el auto. Los altos ejecutivos de la automotriz fueron acusados ​​y condenados por negligencia fatal en este y otro accidente que involucró a sus camiones.

Las ventas de Mitsubishi se desplomaron debido a estos escándalos y empujaron al fabricante de automóviles hacia una grave crisis de gestión. Desde entonces ha logrado reconstruir su negocio con el apoyo del grupo Mitsubishi y mejorar su imagen. Sin embargo, es probable que este último escándalo le cause un grave perjuicio económico. Pero la pregunta más importante es si el engaño en la eficiencia de combustible es una señal de que una cultura corporativa defectuosa dispuesta a ‘todo’ para sobresalir ante sus competidores.

Las acciones de Mitsubishi cayeron más de 15% al cierre de la Bolsa de Tokio a fin de la semana pasada, el equivalente a unos 1,050 millones de euros. Es su mayor caída bursátil desde 2004, cuando el fabricante se encontraba al borde de la quiebra. Mitsubishi vendió el año pasado poco más de un millón de vehículos.

El rendimiento ecológico de los automóviles, incluidas las emisiones y el consumo de combustible, son elementos cruciales en la competencia en el mercado actual. Se cree que Mitsubishi Motors ha manipulado los datos para poder competir con las demás empresas en el segmento minicar. El escándalo de Volkswagen fue descubierto después de que admitió que millones de sus vehículos vendidos con motor diesel en todo el mundo llevaban un software que permitía que pasen las pruebas de emisiones mediante la activación de los controles de contaminación durante las pruebas oficiales y la desactivación cuando los autos eran conducidos normalmente. El problema de Mitsubishi Motors no parece ser diferente. Ambos falsificaron la data de rendimiento, la cual era un factor importante para los consumidores a la hora de comprar sus vehículos.

Aparte de ordenarle a Mitsubishi Motors a presentar un informe detallado sobre su engaño, el Ministerio de Transportes de Japón ha anunciado una investigación a los demás fabricantes de automóviles para averiguar si han participado en irregularidades similares. La industria en su conjunto debería examinar sus prácticas y dejar de engañar a los consumidores con prácticas desleales que perjudican a una gran industria.

Como comentamos en el caso de VW, nos parece que hay que hacer escarmientos muy fuertes, máxime, tratándose de los íconos de las industrias de Alemania y Japón. Los mejores están llamados a dar lo mejor y, si no lo hacen, deben ser juzgados con la máxima severidad. Solo así se puede salvaguardar la salud de la economía de mercadoLampadia




BOLIVIA… “Entre el discurso y la realidad”

BOLIVIA… “Entre el discurso y la realidad”

Carlos Milla Vidal

La verborrea de un EVO estimulado por su aplastante triunfo electoral, lanza otra vez ataques a los “lacayos del imperialismo”, (Perú Chile, Colombia México) que se han atrevido a hacer la llamada “alianza del Pacífico, traicionando a sus propios pueblos”.  Mira en cambio a sus aliados “hermanos del UNASUR”, que “están  forjando una America verdaderamente libre”.

Esa misma semana, la oficina postal Boliviana lanza una nueva serie de estampillas, con el rostro del “Comandante Chávez, que “Desde el cielo sigue iluminando nuestros caminos”.

En sus discursos con ocasión de la entrega de subsidios escolares a todos los niños de Bolivia, sigue atacando al Fondo monetario internacional.

Ese discurso es definitivamente popular… Sin embargo, a pocas cuadras de Palacio  quemado, un Banco central responsable y moderno sigue rigurosamente la receta que el mismo fondo monetario diera a Víctor Paz Estensoro en su último gobierno (1985-90). El decreto 21060, llevó a Bolivia a acabar con la hiperinflación, varios años antes que Perú. Desde entonces, el peso Boliviano es moneda dura, la inflación ha terminado y hay estabilidad macroeconómica.

El Gobierno de Sanchez de Lozada, pocos años después se dedicó a profundizar muchas reformas, que bajo el mote de “neoliberales” son “rechazadas, pero acatadas.” El Gobierno terminó  con violencia y persecuciones, las reformas quedaron.

 EL POPULISMO DE LOS SUBSIDIOS

Bolivia, continúa con una política de subsidios cuidadosamente diseñada:

  • Todos los niños en edad escolar acuden a las escuelas, acompañados de sus Padres o tutores. Bajo el influjo de una fotografía de EVO, el gran benefactor reciben Cien pesos  ($15.oo) en efectivo del bono “Juancito Pinto”. Ellos decidirán en qué útiles o ropa deberán invertir el dinero sus Padres. Los mayores están fiscalizados por los niños para el buen uso de los fondos.
  • “La renta dignidad”, son 400 pesos ($60.oo) que reciben los mayores de 60 años, hayan o no trabajado en sus vidas… (¿No es esto lo que plantea la Universidad del Pacífico ante el “fracaso de los sistemas previsionales?).
  • El bono “Bartolina Sisa”, es ayuda económica efectiva y atención médica y nutricional preferente a las madres gestantes (algunos dicen… “Incentivo al embarazo”).
  • El gas domiciliario llega por tuberías a muchas zonas urbanas de las principales ciudades. ¿El precio?… SI… el equivalente a los S/.12 soles que nos ofrecieron en Perú, y sirvieron para ganar las elecciones.
  • El combustible (poco más de $2.00 por galón de Diesel), – ¡menos de la mitad que en Perú!, sigue subsidiado, pero Evo anuncia orgulloso que pese a no subir los precios, el subsidio ha bajado en 40%. El GLP no se usa en vehículos, sí el GNV. Y parece que los controles funcionan.

Nos resistimos fuertemente a pensar que los subsidios populistas seguirán funcionando. Los precios internacionales del gas y la soya, no van a durar para siempre. Una caída en éstos puede hacer peligrar este ambiente de “bienestar” que perciben los bolivianos. Sin embargo, por lo visto hasta hoy, la receta populista de Evo, funciona (¡¿?!).

LAS CIFRAS MACRO ECONOMICAS

La economía de Bolivia es mucho más pequeña que la peruana, sin embargo hay algunas cifras sorprendentemente saludables.

El crecimiento del PBI estuvo en 5.2%, el 2012. Ahora cerrará el año en 4% (un punto más que Perú). La inflación anual no pasa del 4%,  y el Producto per cápita  en $2,621 poco mas de la mitad del PBI per cápita Peruano).

La pobreza sigue reduciéndose, sin embargo, la fuerza económica que impulsa el proceso,  no es estrictamente la inversión privada, sino también el subsidio estatal.

 “QUEREMOS INVERSION PRIVADA”, dice Evo, en un contradictorio discurso donde también ataca despiadadamente a las transnacionales. El mensaje es ante una audiencia de pequeños emprendedores de  “El alto”, que reciben apoyo generoso del Estado y la cooperación internacional.

LAS CIUDADES:

Las principales ciudades Bolivianas (La Paz, Cochabamba y Santa Cruz) tienen un ambiente de calidad urbana y habitabilidad.

Las invasiones y tugurizaciones de los terrenos de el alto de hacen algunas décadas, han dado paso a barrios planificados, con servicios públicos, transitabilidad y desarrollo urbano. Los edificios tienen un curioso gusto local, pero están terminados, con los laterales acabados, y están hechos en cumplimiento a reglas urbanas que respetan los retiros, las vías públicas y áreas verdes.

La Paz ha inaugurado un sistema de transporte público, único en el mundo: Un teleférico, que ha cambiado el paisaje urbano y une a los principales centros de la ciudad de La Paz, con las ferias comerciales del alto, que con una población ya cercana a un millón de habitantes es el pujante polo comercial. Los barrios residenciales de las clases media y alta, tienen ahora nuevos habitantes… Los emergentes que interactúan con toda naturalidad con las clases antes dominantes. La paz social es una realidad… Son muchos años sin huelgas ni bloqueos. En efecto creo que podemos afirmar que socialmente Bolivia es el país de America que tiene menos diferencias sociales. La discriminación debe ser mucho más rara entre los bolivianos de todos los colores.

EL ESTADO PLURINACIONAL DE BOLIVIA

Un gobierno que se enfoca en las diferencias y no en la necesidad de tener un País unitario, naturalmente que anda contracorriente. Las múltiples “Naciones”, se empeñan en sentirse únicos y originarios, en claro rechazo al país mestizo que factualmente es Bolivia. Ese parece ser un discurso exitoso.

Sin embargo, en Cochabamba asistimos a un evento que nos hizo pensar que otro mundo es posible: Un colegio secundario Americano, (equivalente al Roosvelt) celebraba la diversidad en la Feria internacional. Más de treinta países (incluida Bolivia y sus Nacionalidades) coexistían entusiastamente en respeto de las diferencias entre comidas de todo el mundo, danzas y exposiciones culturales. Lejos del discurso oficial, ellos sí entienden y actúan en un “mundo global”.

EL DOBLE DISCURSO DE LA COCA:

El uso tradicional de la  hoja de Coca que fue la bandera que sirvió a Evo para alcanzar el poder tiene ahora un peligroso ingrediente.

La línea aérea estatal, (BOA) compite con varias  de iniciativa privada, para los vuelos domésticos. Las  internacionales LAN Y AVIANCA, también están en el mercado, pero no ejercen dominio de mercado.

Los precios son un promedio de $40.00 por un vuelo de 45 minutos, y no hay que tener suerte ni aplicar a promociones. El precio es para todos.

TÚPAC KATARI, el equivalente altiplánico a Túpac Amaru, es un satélite  de tecnología China que está en el espacio asegurando la conectividad. Da servicios de internet,  y servicios varios. La cobertura de internet será pronto universal para todo el territorio, la penetración de celulares equivale a los más avanzados países latinoamericanos, con varios operadores que compiten en cobertura, tecnología y tarifas.

 El cultivo legal es permitido. Allí en las laderas de la selva alta se produce una hoja de mejor calidad, aparente para “hakullar” (chacchar) y las prósperas chacras coqueras ocupan el espacio que antes ocupaban frutales, de haciendas agroindustriales abandonadas; mientras las tierras bajas, también productoras de coca (ilegal) son susceptibles a interdicción. El narcotráfico campea tanto en las zonas de la “coca cultural”, como en los valles bajos.

DESCENTRALIZACIÓN

 Algo que nos dejó pensando, fue comprobar que no han tenido un proceso de Regionalización con las características del peruano. Las prefecturas o Gobiernos departamentales no tienen las autonomías que en el Perú, sí tienen reñidas elecciones. El MAS, partido oficialista ha pasado de ganar 5 gobiernos sub nacionales en  la elección anterior, a tener 8 de los nueve departamentos en las elecciones de hacen dos semanas.

No hay millonarios presupuestos, consecuentemente no hay la corrupción que hoy nos aflige a los peruanos.

Es difícil seguir el análisis sin teñirlo de un juicio de valor. Los demócratas convencidos de las bondades del libre mercado, y del sistema económico que nos ha permitido crecer tanto en los últimos años, vemos con estupor el aparente éxito de un modelo diferente.

Solo nos queda concluir: Bolivia…  “No es lo que parece”.