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Covid19, inmunoglobulina de llama y comunidades andinas

Covid19, inmunoglobulina de llama y comunidades andinas

Álvaro Díaz C.
Abogado en Derecho de la Empresa y Minería
Ejecutivo de Bear Creek Mining.
Para Lampadia

“Las grandes oportunidades nacen de haber sabido aprovechar las pequeñas” – Bill Gates.

Expertos lograron neutralizar partículas del virus utilizando anticuerpos de este camélido” (refiriéndose a la llama), escribe el doctor Elmer Huerta en el diario El Comercio (11-V-20), concluyendo en que “…los nano-anticuerpos producidos por este animal podrían ser fabricados a gran escala y ser usados, ya sea de manera preventiva o terapéutica, en el manejo del COVID-19”. Pero, la inmunoglobulina de los camélidos sudamericanos, en especial de la llama, podría ser la solución también para otras graves enfermedades, bajo el mismo principio por el cual sería eficaz para combatir al Covid19.

Anotemos que este esfuerzo de creatividad se inició hace más de un lustro, a cinco mil metros de altura, en el distrito de Corani, al norte de Puno.

Andrés Franco Longhi, cuya vocación por la ciencia y su sensibilidad hacia los demás está fuera de duda, tenía claro que las comunidades campesinas de este distrito estaban consideradas como de extrema pobreza, en realidad dentro los 10 distritos más pobres de Perú.

Tenía al frente este panorama: ichu, alpacas y temperaturas bajo cero,  proyecto minero de plata en etapa de prefactibilidad,  mucha pobreza, altos índices de enfermedades diarreicas y respiratorias, deserción de alumnos y baja asistencia y aprendizaje escolar, incipiente articulación de los comuneros con relación a la actividad alpaquera y otras características propias de una zona con muchas necesidades básicas insatisfechas como secular desconfianza a los terceros que estaban o se acercaban a la zona, casi nula presencia del Estado, los hijos que, a pesar del esfuerzo de sus padres, habían podido estudiar en  una universidad no regresaban, buscando otros horizontes y oportunidades.

¿Podría usarse algunos de esos elementos como ventajas comparativas o competitivas para cambiar o co-crear nuevos paradigmas? ¿O sólo serían características propias de poblaciones que conlleva a la extrema pobreza?

Vayamos a las respuestas a la primera pregunta, veamos a uno de los 108 inventos y/o descubrimientos que, a la fecha, se lograron en este trabajo conjunto vinculados todos con los recursos propios de la zona (ichu, frío, alpaca, hierbas, otros) o con la investigación y desarrollo de los jóvenes comuneros (programación, algoritmos, química, física y otros), el apoyo de Bear Creek Mining, y la creatividad del citado Andrés Franco:

Inmunoglobulina de la llama: resulta que aproximadamente el 70% de las crías de alpacas (los twin) morían. Siempre se decía que se debía al frío, pero no era esa la causa raíz. Resulta que la alpaca genera poco calostro para alimentar a sus twin lo que hace que tengan bajas defensas, sumado a que comen ichu que tiene carga parasitaria que afecta al sistema digestivo de las crías deteriorando la asimilación de los alimentos. Al estar débiles las crías el frío u otra condición extrema provocan sus muertes.

Hay que tener en cuenta esta situación, porque las alpacas son animales que por naturaleza resisten el frío. Entonces ¿qué hacer? La solución comenzó por lo dicho:  determinar que el poco calostro era la primera variable por resolver.  Resulta que la llama tiene un comportamiento especial por el cual puede inducirse a generar calostro (que usualmente sólo se genera cuando la madre está preñada) El calostro obtenido (que no se le quita a la cría de la llama porque ha sido inducido sin embarazo) se mezcla con los pastos que come la cría de alpaca y su sistema inmunológico toma la magnitud que debe tener y, aunque haya frío extremo, muchas crías sobreviven. Se trata de reducir r a la cuarta o quinta parte el índice de mortalidad de las crías de alpacas.

Así es que siguió profundizando en el tema, encontrando en las investigaciones esas características únicas de la inmunoglobulina de la llama (que también pueden tenerla en diferentes proporciones otros camélidos).

De hecho, con el financiamiento de Bear Creek Mining, la ciencia de Andrés y la labor técnica de campo de los comuneros, se avanzó en los detalles e incluso se logró proponer como obtener “comprimidos con alto contenido de Inmunoglobulina (IgGH) extraída de la leche de camélidos”.

Es importante citar a los Centros de Innovación Tecnológica de las comunidades campesinas de Chacaconiza y Quelcaya, donde los jóvenes profesionales de tales comunidades a cinco mil metros de altura hacen investigaciones, verificaciones, pruebas, algoritmos, sistemas que apoyan estas iniciativas. De igual forma los centros alpaqueros están innovando y generando nuevos paradigmas en la cría de alpaca y el mejoramiento genético, introduciendo modernidad y estandarizando la esquila, clasificación, lavado, peinado, producción de hilado, diseño y producción de textiles de alpaca para exportación a países de Europa y América del Norte, entre otros mercados.

Regresando a la inmunoglobulina, de hecho, se inició un procedimiento para patentar tal avance, bajo la idea de potenciar a las comunidades campesinas con el abundante recurso que es la llama y modernizar la crianza y obtención de la inmunoglobulina; en suma, transformar la llama en una ventaja competitiva para la zona.

El prestigioso buffet de abogados Clarke & Modet (con sede principal en España, más de 140 años de existencia, y presencia en 10 países) especializados en marcas y patentes, hicieron la “búsqueda del estado del arte”, vale decir, si en algún lugar del mundo existían estudios, publicaciones o avances en el tema o temas similares, no encontrando en la exhaustiva base de datos a la que consultan, ningún antecedente que pudiera afectar la inscripción de la patente, que se había solicitado, ya que cubría los requisitos de novedad e ingenio que se requiere para tal efecto, informando de ello en agosto del año 2019.

El resumen de la invención, del Informe del Clarke & Modet comienza diciendo: “La invención está referida a un procedimiento para realizar comprimidos con un alto contenido de inmunoglobulinas, en particular inmunoglobulinas de tipo G conformada por dímeros de cadenas pesadas y sin cadenas ligeras, denominadas IgGH, que son extraídas de la leche de un camélido sudamericano…”.

Recordemos el artículo del doctor Huerta donde — explica que: “Existen cinco tipos de inmunoglobulina: G, A, M, D y E, cada una de las cuales tiene una función determinada. La inmunoglobulina M, por ejemplo, es el primer anticuerpo que se produce y es –en tamaño– la molécula más grande de todas, pudiendo ser comparada con la fuerza de choque del sistema de defensa. La IgG se produce inmediatamente después de la M, y es la más abundante, permitiendo la destrucción de virus y bacterias

Dentro del plazo permitido de divulgación, sin perder los derechos de formalizar la patente, Andrés hizo presentaciones de varios de los inventos y descubrimientos, a científicos de la academia, profesionales, periodistas, entidades públicas.

Estando prestos a reiniciar la formalización de la patente comenzó la crisis generada por el Covid19, razón por la cual Bear Creek Mining y Andrés Franco decidieron liberar la información, teniendo en cuenta la prioridad que tales conocimientos podrían apoyar o estimular para encontrar alguna solución específica contra tal virus, que no se genere patente a alguien (persona o empresa) que luego quisiera lucrar con ello, y se revalore a las comunidades alto-andinas peruanas que es dónde se encuentra la mayor población mundial de llamas.

De otros 106 inventos y descubrimientos: Los océanos azules (el famoso libro de Chan Kim y Renée Mauborgne), recomienda a los emprendedores que, en lugar de luchar por un trozo de la torta del mercado (demanda) existente, desangrándose en un océano rojo, se genere un nuevo mercado, un océano azul de oportunidades.

Coincidente con tal precepto, se va co-creando, en esa alianza virtuosa, nuevas alternativas basadas en los recursos propios de la zona alto-andina (ichu, frío, alpaca, hierbas, otros) o con la investigación y desarrollo de los jóvenes comuneros (programación, algoritmos, química, física y otros)

Resulta motivador poder compartir cada una de las iniciativas y los logros ya obtenidos en muchas de ellas, en especial porque, en estos extensos lugares alto-andinos, donde se podría pensar que no hay muchos recursos comparativos y competitivos, o capacidades técnico-profesionales resulta que hay todo ello y más. Esperamos poder hacerlo en futuras notas.

Finalmente, podemos inferir que las alianzas virtuosas o proactivas o, como prefieran denominarlas, entre la inversión privada y las comunidades, pueden dar frutos alejados de paternalismos o asistencialismos. Lo importante y significativo es que se generan alternativas propias de desarrollo sostenibles a largo plazo, que se desarrolla con los esfuerzos reales y constantes de todas las partes y conlleva el potenciar el interés de la ciencia aplicada a lo propio, lo que llena el orgullo local por los logros y resultados que se van obteniendo.

Se aprende a intentar, fracasar y volver a levantarse con la experiencia adquirida. Así es investigar e intentar (sólo no se equivoca el que nada intenta), influye en nuevas expectativas que potencien lo local, abren abanicos de posibilidades en diversos rubros y diversos temas en cada rubro; y, esperamos, hasta soluciones a problemas mundiales como podría ser el uso de las propiedades de la inmunoglobulina de las llamas para la lucha contra el flagelo del Covid19.

Ellon Musk tiene una frase al respecto: “Creo que este es el mejor consejo: piensa constantemente cómo podrías hacer mejor las cosas”. Lampadia




El secreto de la minería peruana

Convertir las ventajas comparativas de las comunidades en competitivas

Jaime de Althaus

Para Lampadia

Una experiencia que el recientemente creado viceministerio de Gobernanza y Desarrollo Territorial de la PCM debería mirar si quiere encontrar y difundir estrategias empresariales eficaces en la prevención de conflictos sociales, es el proyecto minero de plata Corani, de Bear Creek, en Carabaya, Puno, que viene trabajando desde el 2013 y se encuentra en la etapa de estudios definitivos para iniciar la construcción el 2018 con una inversión de alrededor de 700 millones de dólares.

Andrés Franco, vice presidente de Desarrollo Corporativo de Bear Creek, autor del modelo de inversión social de la mina que le ha permitido desarrollar una relación óptima con el distrito de Corani y cinco comunidades campesinas, lo pone así: “basamos nuestra relación con las comunidades no en ofrecerles empleo en la mina, sino en convertir sus ventajas comparativas en competitivas”.

Se trata de lo siguiente: las familias comuneras son ganaderas, pastan alpacas y vendían lana como tal.  Solo el 5% de mujeres hilaban con ruecas artesanales para tejer chompas y chullos para el autoconsumo. Lo que Andrés Franco les propuso fue no vender lana en bruto sino con valor agregado. Y aceptaron. Primero aprendieron a clasificar la lana con un equipo de medición de fibras; luego se ejecutó un programa de mejoramiento genético que ha logrado pasar de un 25% de fibra baby alpaca a un 52%; luego aprendieron a hilar artesanalmente pero de manera uniforme mejorando las ruecas; paralelamente aprendieron a leer fichas técnicas para copiar modelos y confeccionar ropa; después compraron con sus propios medios máquinas lineales de tejer, y a partir de allí confeccionan chompas, polos, medias, etc., con otras maquinas, de coser. Es “ropa inteligente”, que incorpora hilos de plata que poseen varias propiedades vinculadas a la salud y a la medición de los ritmos vitales.

La empresa les ayudó a buscar y conseguir las máquinas y les brindó la tecnología, pero las propias familias compraron sus equipos e instalaron sus talleres, con su propio esfuerzo. Hay 32 empresas familiares en este momento.

De esa manera elaboran ahora, por ejemplo, medias con hilos de lana enhebrados con hilos de plata. Los hilos de plata son antibióticos: eliminan hongos, cierran heridas, atacan a cualquier tipo de bacteria y evitan el mal olor. Por eso, su eficiencia es de 7 días de uso continuo del mismo par de medias, sin necesidad de cambiárselo. “El Ejército, la Policía y hospitales quisieran comprar pero las familias no pueden cumplir con pedidos a gran escala todavía por interrupciones en la energía y el internet. Sí atienden pequeños pedidos de 50 o 100 unidades”, explica Franco.

Medias para diabéticos

Es extraordinario que los minerales peruanos posean esas propiedades antisépticas. Hace poco Lampadia publicó un artículo mostrando cómo el cobre ya se usa en hospitales para eliminar o repeler las bacterias. Ver: ¡Viva el Cobre!

En Corani las familias comuneras fabrican también ropa inteligente: polos o chompas de lana con hilos de plata, incorporándoles, además, unos chips que miden la temperatura, el ritmo cardiaco y la respiración para saber si el chofer de un camión o el personal de seguridad de una empresa, por ejemplo, está con sueño o durmiendo o con pánico o stress, además de masajearlo. La idea es vender esos polos a empresas de transportes o de seguridad. O al Ejército. Producen asimismo casacas para militares, inyectándoles parafina, que absorbe el calor del cuerpo con un efecto refrigerante.

Casaca con celdas solares, controla signos vitales, refresca y tiene paneles de ichu contra arma blanca
 
Polo

El problema que tienen por el momento no es tecnológico, sino de formalización. Empresas de transportes, por ejemplo, les han pedido hasta 20 mil de aquellos polos, pero reclaman facturas. Lo que ocurre es que la primera empresa que se formalizó sufrió una intervención de la Sunat que la obligó a pagar una multa tal que tuvo que cerrar. La solución ha sido formar una cooperativa de financiamiento y asistencia contable a las empresas familiares, para que puedan lidiar con la Sunat.

El hecho es que por el momento atienden pedidos pequeños, de 50 o 100 polos o chompas. La mayor parte de la producción se va como hilados a Francia. De todos modos, si antes de que llegara la mina las familias vendían el kilo de lana  a 5 dólares, ahora venden a Francia 100 gramos de lana transformada en hilados a 7.5 dólares (75 dólares el kilo). Es decir, a 25 veces más. Las medias arriba mencionadas se han colocado a 60 soles el par. Una chompa o polo de 350 gramos con hilos de plata incluidos, se vende a 320 dólares. Chalinas de alpaca con plata que protegen contra los gérmenes de la gripe, se han colocado a 120 dólares.

Pero hay mucho más. Han descubierto, por ejemplo, que el ichu, que abunda en el altiplano, tiene zinc, que es protector solar. Entonces la empresa ha investigado y desarrollando un protector solar al que le agregan cobre para estimular el colágeno del rostro, plata para matar bacterias y hierro para estimular la circulación sanguínea. Y es antiarrugas. Ya están en la etapa de sacar los permisos y la certificación HACCP (APPCC – El Sistema de Análisis de Peligros y Puntos Críticos de Control, referido a la inocuidad de los alimentos).

También han descubierto que pueden elaborar cerveza artesanal de 8% de alcohol usando, en lugar de lúpulo, una fruta llamada Humpikusawa que posee un alto contenido de magnesio y da en un arbusto que crece por encima de los 5 mil metros  que carece de toda utilidad económica o alimenticia. Ya hicieron la investigación y el desarrollo y tienen la certificación. Cada botella de 330 ml. se vende a 25 soles.

Han descubierto el uso de la inmunoglobulina de llama para las alpacas, lo que reducido la mortandad de 50% a cero. También tienen un procedimiento para elaborar fruta seca a partir de la fruta que compran a 60 km. en Madre de Dios: la liofilizan aprovechando la poca presión y el frío extremo, la embolsan y la dan a los niños en el recreo de manera de complementar sus deficiencias en vitaminas y aminoácidos. Ahora quieren vender esa fruta seca.

Andrés Franco refiere que también tienen un sistema de limpieza de agua con estiércol de alpaca, y llaveros con temas andinos que en caso de perderse se pueden encontrar con el celular (ya tienen un pedido de 1,000 de estos).

A la fecha ya tienen 32 iniciativas en investigación y desarrollo. ¿Cómo lo hacen? Pues en el ‘centro de investigación’ de la mina, a 5,000 msnm. El propio Andrés Franco lo dirige y dicta clases en él, y participan los ingenieros electrónicos, textiles y de sistemas de la propia mina junto con un grupo de jóvenes de la zona, desde el cuarto de secundaria hasta los 30 años, “donde estimulamos el conocimiento de la física, biología, química, matemática e ingenierías aplicándolo a investigar los recursos naturales de la zona… por ejemplo: nos dicen que hay una raíz que evita las canas y la caída de cabellos, entonces la investigamos  con rigor científico”, explica Franco. “Formamos grupos de trabajo”, añade. 

-¿Pero para qué necesitan ingenieros textiles en la mina?, le pregunto.

-“Para lograr ropa para minería que mejore la productividad, como chalecos de seguridad con planchas de Ichu mezclado con ácido pálmico para lograr mantener la temperatura y control de la salud de trabajadores”, por ejemplo.

Otro elemento central de la relación con las comunidades es que todos los comuneros saben perfectamente en qué van a consistir los procesos tecnológicos de la futura operación minera. El propio Franco o un ingeniero de la mina se los explica, por ejemplo, de la siguiente manera: “Recoge una piedra o roca de la zona y les pide que la golpeen con un martillo (que simula los chancadores y moliendas de minería). Luego colocan la piedra chancada en un vaso con agua, con PH8… y lo que flota es el concentrado o el producto final.  Se seca y listo para embarcar…”. Saben entonces cómo se va a realizar y con qué insumos el chancado primario, la molienda SAG, la flotación de plomo y plata y la flotación de zinc, de modo que son invulnerables a los argumentos de los anti mineros que aprovechan el desconocimiento de las poblaciones aledañas para infundirles miedo a la contaminación. 

Es más, “tenemos un convenio con la comunidad por medio del cual ellos explican a las poblaciones vecinas el estudio de impacto ambiental ya aprobado. Los responsables de hacerlo son los jóvenes de ciencia y tecnología, por su buena base en biología y química”. La relación de confianza es tal que la empresa no contrata a una empresa de seguridad sino que ha firmado convenios con las rondas campesinas para la seguridad de la mina.

Alcalde de Corani mostrando funcionamiento de la ropa inteligente

Esta mina es mucho más que una mina. Es un laboratorio social de relaciones con las comunidades y un laboratorio de investigación científica que está descubriendo usos insospechados de los recursos naturales de la zona, que les están permitiendo a las familias campesinas transformar su producción con una tecnología y un valor agregado tales que les permiten dar el salto a la economía nacional y global e incrementar sus ingresos de manera notoria.

Es una mina que está descubriendo el enorme potencial de la sierra peruana, más allá de los minerales. Lampadia