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Pedestres

Pedestres

Carlos E. Gálvez Pinillos
Expresidente de la SNMPE
Para Lampadia

Es lamentable que el Perú esté en un largo proceso de involución, habiendo llegado a niveles absolutamente pedestres, lo que según el diccionario significa: vulgar, corriente, chabacano, ordinario, llano, simple. Este es pues el nivel de las autoridades elegidas y el nivel de las discusiones políticas.

Definitivamente, después de un mes con el nuevo gobierno, no se ha definido y menos comunicado, una visión de país y un plan a ejecutar para lograrlo. Salvo raras excepciones, los miembros del gabinete son absolutamente incapaces de manejar un Estado y el presidente (PC) ha dado muestras, más que suficientes, de su ignorancia, falta de liderazgo e incapacidad para gobernar, pues ciertamente PC está copado y acorralado por una gavilla de personas de muy mala reputación, por llamarlos de manera generosa, que lo tienen jaqueado. Suficiente recordar que hasta Béjar dice que, al armar el gabinete, se está pagando favores de campaña a gente incapaz y absolutamente desconocida, pues jamás han tenido algún logro. Ya para que él, que conoció al “grupete” lo diga, nos releva de demostraciones y mayores comentarios.

El Congreso también tiene lo suyo, pues en él se ha instalado un gran número de agrupaciones electorales, compuestas mayoritariamente por gente no preparada y que jamás imaginó alcanzar tal posición, con un ingreso y gollerías como las que hoy disfrutan. Por esa razón, no están dispuestos a despojarse de esas prebendas por defender principios y los destinos del país. Esto ha sido evidente durante la sesión de investidura del gabinete, lo que quedó plasmado en el comportamiento de las bancadas de Acción Popular (AP), Alianza para el Progreso (APP), con las honrosas excepciones de los congresistas Gladys Echaiz y Roberto Chiabra y en el comportamiento de Podemos Perú (PP), también con la honrosa excepción del congresista Carlos Anderson. Obviamente, la defensa liderada por las bancadas de Renovación Popular (RP), Avanza País y Fuerza Popular (FP), acompañados de las excepciones mencionadas de APP y PP, son de los pocos que tienen el nivel para ser congresistas y que no están dispuestos a transigir en defensa de los destinos del Perú.

Los demás congresistas, teniendo a la vista el comportamiento indigno y poco viril de Guido Bellido, quien fue incapaz de enfrentar debidamente la inaceptable ofensa que él hiciera a la congresista Chirinos, fueron complacientes. Le permitieron lloriquear con un discurso lastimero de victimización y lleno de generalidades, que nos hizo perder casi tres horas, sin tocar el tema de la Asamblea Constituyente, ni hablar claro de cómo resolverán los problemas sanitario y económico que les toca resolver.

Sin embargo, al término de su participación y casi de salida, después de terminado el debate, dijo: “La Constitución de 1993, en 20 años, no sólo no ha solucionado la situación de marginación de las mayorías, sino la ha profundizado… Este sistema político y social terminará de todas maneras… Nosotros queremos realizar este cambio en democracia y paz. Buscamos el voto de investidura con este fin”.

Preocupa que ni la mesa directiva del congreso, ni los partidos que fueron elegidos propugnando un sistema democrático y la defensa de una economía social de mercado, hoy asuman una postura que, probablemente les resulte funcional a la defensa de sus intereses de corto plazo, pero que inexorablemente conducirán a la destrucción de la democracia en el Perú en el mediano plazo.

Ya hemos constatado, que la izquierda radical se ha tomado 25 años para tomar el poder, utilizando los mecanismos que la democracia y la constitución han puesto a su disposición. Ellos son conscientes también, de que por más que están avanzando muy rápidamente en el copamiento de las instituciones, necesitarán cerca de dos años para infiltrar y controlar todos los organismos que les permitan el manejo absoluto de los poderes del Estado, incluyendo a las FFAA, PNP, Fiscalía y Poder Judicial, entre otros, por lo que hoy no pueden abruptamente tomar el control que quisieran tener y consolidar el poder.

Dicho esto, trabajarán rápidamente y en simultaneo, en el copamiento de instituciones antes mencionado, mientras que, a nivel de la población, irán avanzando con actos de populismo y engaño, creando temor y hambre, que van a ser satisfechas con la creación de fuerzas populares, una vez que las fuerzas del orden hayan sido completamente infiltradas y dominadas y segundo, con el otorgamiento de “bonos” que los vuelvan dependientes del gobierno.

Preocupa la falta de patriotismo de los congresistas, que están permitiendo el avance del tiempo y la gesta de los fenómenos antes mencionados, pues de seguir así, para cuando reaccionen, ya será demasiado tarde. Preocupa igual, el manejo cómplice de la Sra. Alva, al pasar rápidamente a votación inmediatamente después de las palabras finales de Bellido, único momento en que mencionó la Asamblea Constituyente y no reabrir el debate.

Hay quienes se entretienen en la discusión menuda respecto a si manda Castillo o Cerrón, si Maraví renunció ante Bellido o si puso su cargo a disposición de PC, quien obviamente no dice esta boca es mía. Si se debe interpelar ministro por ministro y si eso llevará al cumplimiento de la amenaza del ejecutivo, de hacer “cuestión de confianza” para cada caso. A nadie en el gobierno le preocupa que las calificadoras de riesgo, por primera vez en 20 años, hayan empezado a rebajar la calificación de nuestra deuda. Tampoco hay en marcha, un plan de emergencia para enfrentar la tercera ola del COVID-19 y tampoco reacciona el congreso ante el proceso de cierre de la prisión militar de la Base Naval del Callao para los terroristas y su consecuente traslado a cárceles civiles. Un mes y ya estamos así…

Lo cierto es que; el presidente no manda, las decisiones de gobierno las toma un grupo de dirigentes de Perú Libre, independientemente del gobierno, al que PC se somete y entre tanto los partidos “democráticos” Acción Popular, Alianza para el Progreso y Podemos Perú, que debieran estar trabajando junto a Fuerza Popular, Avanza País y Renovación Popular en la vacancia presidencial y conteniendo el avance comunista, están haciendo el pedestre jueguito del “apoyo a la gobernabilidad”, cuando está claro que es lo que menos le importa a la izquierda radical. Lampadia