1

Habilidades blandas: la clave para los trabajos del futuro

En Lampadia insistimos en que la educación de nuestros niños requiere un “salto cuántico”, o un “Big Bang”, como se propuso en CADE 2014 en la presentación de la “Visión del Perú al Tercio de Siglo” y en los consejos de Lant Pritchett, Presidente de la Maestría en Políticas Públicas del programa de la Escuela de Gobierno Kennedy de Harvard para el Desarrollo, en el mismo evento, respectivamente.

Ahora queremos recalcar un tema muy importante: el desarrollo de habilidades para el siglo XXI. Uno de los puntos clave en los empleos del futuro son las habilidades blandas.  Es un término sociológico, relacionado con el cociente de inteligencia emocional, y trata sobre los rasgos de personalidad, habilidades sociales, comunicación, trabajo en equipo, lenguaje, pensamiento crítico, hábitos personales, amistad y optimismo que caracteriza a las relaciones con otras personas. Éstas habilidades les brindan a las personas la capacidad de interactuar efectivamente con colegas y clientes y son de aplicación general, tanto dentro como fuera del lugar de trabajo.

Las universidades también están haciendo un esfuerzo por enseñarlas

Fuente: Universia.cl

Las habilidades blandas serán muy cotizadas en el futuro venidero, especialmente con el avance de la automatización y la cuarta revolución industrial. Se complementarán con las habilidades duras, que son las exigencias profesionales de un trabajo y conocimientos más académicos o cognitivos que, cada vez más, están al alcance de un a tecla.

El libro ‘The Rise of the Robots’ de Martin Ford, reseñado en Lampadia en: El inexorable ascenso de los robots, refleja la creciente ansiedad sobre el posible impacto negativo de la automatización en el empleo, desde la fabricación hasta los servicios profesionales. El subtítulo de la edición del Reino Unido advierte sobre “la amenaza del desempleo masivo” y, la edición de EEUU, prevé “un futuro sin empleo”.

Por eso, consideramos importante compartir con nuestros lectores la siguiente publicación del Foro Económico Mundial que nos plantea un nuevo reto de la educación: incluir la formación de habilidades blandas además de las enseñanzas académicas y matemáticas. El estudio en que se basa este artículo concluye que los trabajadores que combinan con éxito las habilidades matemáticas e interpersonales en las economías basadas en el conocimiento del futuro encontrarán oportunidades gratificantes y lucrativas. Lampadia

Los Trabajos del Futuro – y dos habilidades que necesitas para tenerlos

Matteo Achilli (R) works with one of his assistants in his office in Formello, north of Rome July 25, 2013. Achilli, dubbed the Italian Zuckerberg by Panorama Economy, is the 21-year-old founder of Egomnia, a social network created to match companies looking to hire graduate job seekers. According to Achilli, Egomnia, which was founded in February 2012, has around 100,000 users, about 600 multinational companies in Italy as clients and a 2013 sales volume of about 500,000 euros. Picture taken July 25, 2013

 ¿Podría un robot hacer tu trabajo? Fuente: Reuters

Simon Torkington

World Economic Forum (Foro Económico Mundial)

02 de setiembre, 2016

Traducido y glosado por Lampadia

¿Podría un robot hacer tu trabajo? Millones de personas que no vieron venir la automatización pronto la descubrirán de una manera dolorosa. La respuesta es rotundo sí.

El estudio del Foro Económico Mundial, El Futuro del Empleo, prevé que 5 millones de puestos de trabajo se perderán antes del 2020, a medida que la inteligencia artificial, la robótica, la nanotecnología y otros factores socioeconómicos reemplazarán la necesidad de trabajadores humanos.

Fuente: Reuters

La buena noticia es que esos mismos avances tecnológicos también crearán 2.1 millones de nuevos puestos de trabajo. Pero es probable que los obreros y empleados que se encuentren sin trabajo no tengan las habilidades necesarias para competir por los nuevos puestos. La mayoría de los nuevos puestos de trabajo estarán en áreas más especializadas como la informática, matemáticas, arquitectura e ingeniería.

Se insta a los gobiernos y los empleadores de todos los sectores de la economía a re-entrenar y ‘re-habilitar’ a los trabajadores para evitar una crisis.

“Sin una acción urgente y enfocada hoy, para gestionar la transición a corto plazo y construir una fuerza de trabajo con habilidades para el futuro, los gobiernos tendrán que hacer frente a un creciente desempleo y desigualdad, y las empresas a una base disminuida de consumidores,” dijo Klaus Schwab, Fundador y Presidente Ejecutivo del Foro Económico Mundial.

Nuevas habilidades para nuevas economías

Entonces, ¿qué habilidades deben adquirir los trabajadores para asegurarse de tener valor cuando la ‘cuarta revolución industrial’ acelere su ritmo? Algunos se sorprenderán al enterarse que las habilidades que desarrollamos durante la enseñanza preescolar serán muy valoradas.

David Deming, profesor asociado de Educación y Economía de la Universidad de Harvard, sostiene que las habilidades blandas como el intercambio y la negociación serán cruciales. Dice que el lugar de trabajo moderno, donde las personas se moverán entre diferentes funciones y proyectos, se asemejará mucho a las aulas preescolares, donde aprendemos habilidades sociales como la empatía y la cooperación.

Deming ha mapeado las cambiantes necesidades de los empleadores e identificado las habilidades clave que serán necesarias para prosperar en el mercado laboral del futuro próximo. Junto con esas ‘habilidades blandas’ (soft skills), la capacidad matemática será enormemente beneficiosa.

Los puestos de trabajo basados en una sola habilidad están en declive

Deming muestra que en los últimos años, se han automatizado muchos trabajos que solo requieren habilidades matemáticas. Los cajeros de bancos y estadísticos han sufrido. Los roles que requieren predominantemente habilidades sociales (por ejemplo, trabajadores al cuidado de niños,) tienden a estar mal pagados dado que la oferta de potenciales trabajadores es muy grande.

El estudio muestra que los trabajadores que combinan con éxito las habilidades matemáticas e interpersonales en las economías basadas en el conocimiento del futuro encontrarán muchas oportunidades gratificantes y lucrativas.

Reenfocando la educación de habilidades

El reto ahora, dice Deming, es que los educadores complementen sus enseñanzas de habilidades técnicas como las matemáticas y la informática, enfocándose en asegurar que los trabajadores del futuro tengan las habilidades blandas para competir en el nuevo mercado de trabajo.

Lampadia

 




Gobernabilidad con un gabinete multipartidario

Gobernabilidad con un gabinete multipartidario

Ante el eventual gobierno de PPK, se viene discutiendo en los programas políticos cómo se debe enfrentar el gobierno y estructurar el primer gabinete de ministros.

En estos diálogos se puede apreciar que se va formando una suerte de consenso sobre la supuesta necesidad de tener un gabinete multipartidario que incorpore a los representantes de los partidos menores, aquellos que no llegaron a la segunda vuelta y, que en su mayoría suscribieron propuestas anti sistema, anti modelo e incluso anti Constitución de 1993.

En las siguientes líneas presentamos tres conceptos que nos llevan a pensar en la inconveniencia de semejante desarrollo.

Primera Objeción

El voto programático de la población, expresado en la primera vuelta electoral, estableció que la gran mayoría de los peruanos (80%) consideraba necesario ‘seguir construyendo sobre lo avanzado’. En otras palabras, se rechazaron los anti modelo, el cambio de Constitución, etc. Ver el editorial de Lampadia del 11 de abril pasado: El 67% de los peruanos votaron por construir sobre lo avanzado.

Fotografía capturada por la NASA y procesada por un sistema de ‘rendering’ por Anton Balazh para mostrar los detalles de la geografía peruana

Segunda Objeción

Los peruanos necesitamos emprender un gobierno extraordinariamente bueno. Nuestras agendas pendientes son inmensas y difíciles de lograr. Para acercarnos al éxito se requiere un gobierno con acumen (perspicacia, agudeza y sagacidad). Se requiere un liderazgo muy claro y definido y equipos de gobierno completamente afiatados.

Como hemos comentado en múltiples ocasiones, hasta ahora no hemos logrado cerrar las brechas económicas, sociales, institucionales y de infraestructuras que nos dejaron las aciagas tres décadas que terminaron a principios de los años 90. 

Además de este gran reto de cerrar brechas tan importantes, ahora se nos ha sumado el tener que enfrentar con éxito las oportunidades y amenazas de la ‘cuarta revolución industrial’. (Ver material ilustrativo sobre el tema en nuestra biblioteca virtual: Revolución Tecnológica).

Este nuevo reto, por sí mismo, es inconmensurable, aunado al de tener que cerrar las brechas del pasado, nos ponen por delante una terea de gobierno muy difícil si lo que buscamos es llevar a nuestra población, incluidos nuestros pobres, al mejor estándar de vida global y no solamente sobrevivir otros cinco años empantanados en la mediocridad.

Tercera Objeción

Esta última atingencia es de corte conceptual y se basa en los consejos de Karl Popper, que reproducimos en Lampadia hace unos meses. (Ver: Los fundamentos de una democracia efectiva – The Economist: Artículo de Karl Popper (republicado)).

Popper nos dice: “(…) un gobierno de coalición permite, muy a menudo, que los partidos pequeños ejerzan una influencia desproporcionadamente grande y con frecuencia decisiva, tanto en la formación como en la disolución de un gobierno y por lo tanto, en todas sus decisiones. Y significa la dilución de las responsabilidades, ya que en un gobierno de coalición la responsabilidad de todos y de cada uno se ve reducida”.

Conclusiones

Ojalá el eventual gobierno de PPK se imbuya de luces y la fuerza necesaria para establecer un gobierno con una personalidad muy clara, un sentido de misión y de urgencia evidentes en todos sus actos y, se rodee de gentes que no resten o disocien, de gentes que sumen, sumen y sumen. 

Lampadia




Importantes mensajes del WEF 2016 desde Davos, Suiza

Importantes mensajes del WEF 2016 desde Davos, Suiza

Los líderes mundiales están reunidos en Davos, la popular estación de esquí suiza, para discutir de la geo-política, economía y del desarrollo mundial en un evento anual insignia del Foro Económico Mundial (WEF), que empezó esta semana. El tema de la reunión de este año es “El dominio de cuarta revolución industrial”, tema que hemos venido analizando en Lampadia durante los últimos largos meses. (Ver: El Foco en la Cuarta Revolución Industrial y La llegada de la Cuarta Revolución Industrial).

Hemos seleccionado 5 temas clave que dominan los debates del Foro Económico Mundial de este año y que consideramos más importantes para nuestros lectores:

1. Cuatro cambios que configuran el mercado de trabajo

La Cuarta Revolución Industrial está transformando al mundo del trabajo y le está dando rienda suelta a nuevas oportunidades de empleo y el crecimiento económico. (Fuente: WEF – Four changes shaping the labour market)

  • Cambio de la demografía, una fuerza de trabajo dinámica

Tendencias como el envejecimiento y la disminución de las tasas de natalidad significan que los días de abundante mano de obra están llegando a su fin en gran parte del mundo. Frente a esta escasez, los empresarios y los políticos se verán obligados a buscar métodos para atraer talento. Las empresas que no pueden encontrar el talento que necesitan en su país, tendrán que utilizar un método remoto de trabajo para emplear a personas en otros lugares. Alrededor del mundo, los empleadores están experimentando con nuevas políticas para emplear a los grupos sub-representados: mujeres, jóvenes, minorías, personas con discapacidad, inmigrantes, etc. (Ver en Lampadia: ¿Cómo podemos aprovechar nuestro bono demográfico?)

  • El aumento de la elección individual

En lugar de aferrarse a un puesto de trabajo para toda la vida, el objetivo de hoy es ser empleable: desarrollar las habilidades, la experiencia y los conocimientos necesarios para mejorar, independientemente del empleador. Idealmente, esto da a la gente más opciones y flexibilidad para avanzar en su carrera. (Ver en Lampadia: Apuntes para la creación de empleo al 2034 (II)).

  • La revolución tecnológica

Como resultado de los rápidos cambios tecnológicos, las empresas hoy en día se enfrentan a ciclos económicos cortos y a la competencia global. Todas las industrias tendrán que transformarse. La automatización, facilitada por la inteligencia artificial, está a punto de tener un gran impacto en el empleo. (Ver en Lampadia: El futuro del empleo con Robots e Inteligencia Artificial (II)).

  • La sofisticación del cliente y el amanecer de datos

La gestión del talento ha pasado de un arte a una ciencia, ya que las organizaciones comienzan a utilizar data para el suministro a la contratación y retención. El objetivo es una mayor eficiencia y productividad, y se está transformando cómo las empresas piensan en talento. (Ver en Lampadia: Millennials: ¿Otros paradigmas o solo otra generación?).

2. Las 10 habilidades que se necesitan para prosperar en la Cuarta Revolución Industrial
Dentro de cinco años, más de un tercio de las habilidades (35%) que se consideran importantes en la fuerza laboral de hoy habrán cambiado. Al 2020, la Cuarta Revolución Industrial nos habrá traído robótica avanzada, transporte autónomo, inteligencia artificial, aprendizaje automático, biotecnología y genómica. Esta evolución va a transformar la forma en que vivimos y la forma en que trabajamos. Desaparecerán algunos empleos, se crearán otros trabajos que ni siquiera existen en la actualidad y se convertirán en algo común. Lo que es seguro es que la fuerza de trabajo del futuro tendrá que adquirir nuevas habilidades para mantener el ritmo.

3. ¿Cómo puede América Latina evitar quedarse atrás?

En 2015 se aprobaron tres acuerdos globales que establecen una visión transformadora del desarrollo sostenible que integran las dimensiones económicas, sociales y ambientales. (Fuente: WEF – How can Latin America avoid being left behind?), según la CEPAL.

Se han expuesto las debilidades de la región

El crecimiento mundial aún no se ha recuperado de los efectos de la crisis económica y financiera de 2008-2009. En este contexto, los países de América Latina y el Caribe están encontrando dificultades en el aumento de las exportaciones, producción e inversión. La CEPAL estima que las economías de América Latina y el Caribe se contrajeron un 0.4% en 2015 y crecerá sólo un 0.2% en 2016, mientras que el valor de las exportaciones de bienes de la región se redujeron en un 14% en 2015.

¿Se quedará la región afuera de las nuevas revoluciones digitales y ‘verdes’?

La revolución digital actual está transformando la producción, el comercio y la distribución de bienes y servicios. La producción será cada vez más concentrada en unas pocas grandes empresas con presencia en todo el mundo, mientras que los mercados se volverán cada vez más fragmentados. [Estamos en contra de esta preposición de la CEPAL. Debe ocurrir todo lo contrario. Por ejemplo, hasta hace poco la innovación era el territorio de las grandes empresas, hoy está en cualquier garaje y en manos de jóvenes emprendedores. Pero no olvidemos que ese ha sido el prejuicio eterno de la CEPAL: ‘miedo al cuco grandazo’].

Los países tienen que desarrollar capacidades para el nuevo panorama tecnológico y ambiental, especialmente mano de obra calificada. Pero la región de América Latina y el Caribe aún tiene un largo camino por recorrer para convertirse en una región impulsada por la innovación.

La integración económica y tecnológica regional es una necesidad

La región de América Latina y el Caribe debe profundizar su integración económica y tecnológica para promover encadenamientos productivos, fortalecer el comercio intrarregional y apoyar la producción de las exportaciones. Las políticas industriales y tecnológicas son esenciales para aumentar el potencial de crecimiento a largo plazo de la región y mejorar sus perspectivas de desarrollo y requieren repensar las relaciones entre los gobiernos, el sector privado, la sociedad civil y las organizaciones multilaterales con el fin de establecer un medio ambiente de “gran impulso” para el desarrollo sostenible.

[Lamentable la representación de América Latina en el WEF. En los últimos tiempos, la CEPAL, coincidiendo con el segundo gobierno de Bachelet en Chile, ha regresionado a posiciones que reflejan el espíritu de la teoría de la dependencia. Como hemos indicado anteriormente, no se está haciendo una buena lectura de la situación actual de la región. Las cifras agregadas están distorsionadas por el pésimo desempeño y tamaño de Brasil. Tampoco se pueden confundir las políticas económicas de Venezuela, Argentina y Brasil con las de Chile y Perú. Por otro lado, la caída del crecimiento de estos últimos países, se debe más a errores internos que a la negativa situación externa. Ver en Lampadia: Sudamérica: Crecimiento visto con lentes oscuros y Las economías de América Latina según The Economist.

4. 5 tendencias clave para el futuro de las energías limpias

(Fuente: WEF – 5 key trends for the future of clean energy)

Energía limpia superará a los combustibles fósiles

El sistema eléctrico se ha ido desplazando por la energía limpia. El World Energy Outlook 2015 afirma que la cuota de las energías renovables en la generación de energía mundial será de 26% en 2020.

Las nuevas fuentes de capital y productos financieros

Los inversores privados de los fondos soberanos, de pensiones y capitalistas corporativos han aumentado su participación en la tecnología de la energía, proporcionando capital para cosechar los beneficios de adoptar una visión a largo plazo.

El aumento de la distribución

Los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU han establecido acceso universal de acceso a la electricidad. El despliegue de soluciones de energía solar, a menudo en combinación con herramientas de desarrollo tales como la micro-financiamiento y el emprendimiento, están siendo rápidamente adoptados.

Los clientes comerciales e industriales toman la iniciativa

2015 fue un año récord para la compra corporativa de energía eólica y energía solar a gran escala. El 60% de la lista de los Fortune 100 y más del 40% de las compañías del  Fortune 500 ya tienen como objetivo las energías limpias. A finales de 2015, 53 compañías del Fortune 500 se han comprometido a ser 100% limpias.

Desarrollo de tecnología financiada por el Gobierno

En COP21 en París, 20 gobiernos se comprometieron a duplicar su I + D en energías limpias. La investigación es muy importante para apoyar temas de innovación de tecnologías para temas energéticos.

5. ¿Es ésta la generación que erradicará la pobreza extrema?

(Fuente: WEF – Is this the generation that eradicates extreme poverty?)

En septiembre, los líderes mundiales se reunieron para acordar por unanimidad un nuevo conjunto de objetivos que guiarán el desarrollo sostenible para los próximos 15 años. Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODM) reemplazarán los anteriores, los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM). Entre ellos demarcamos los principales retos:

  • Si bien se cumplió la meta de reducir a la mitad la proporción de personas que viven en la pobreza extrema para el año 2015, falta lograr que la otra mitad también salga de ella.

  • La pobreza infantil está aumentando en 18 de los 28 países de la UE. La era de la austeridad no ha sido amable con los sistemas de protección social en muchos países.
  • La desigualdad de género sigue siendo amplia.
  • El rápido ritmo de la degradación ambiental está dañando los ecosistemas de los que dependen la supervivencia humana y el bienestar.
  • No puede haber desarrollo sostenible sin paz y estabilidad – por desgracia, el mundo sufre un gran déficit en ese sentido.

[En Lampadia hemos criticado el enfoque de las Naciones Unidas, que en contra de opiniones ilustradas, como la del Consenso de Copenhague, forzó la aprobación de más de 160 metas, siendo que muchas de ellas generarán un importante desperdicio de recursos escasos. Ver: Desarrollo: ¿169 mandamientos? (II)].

En los próximos días seguiremos ilustrando a nuestros lectores sobre el desarrollo de este importante evento. Lampadia




La tecnología no es la mayor amenaza para nuestra humanidad

La tecnología no es la mayor amenaza para nuestra humanidad

Escrito por Gianpiero Petriglieri

Publicado en el World Economic Forum en colaboración con el Harvard Business Review

3 de diciembre de 2015

Traducido y glosado por Lampadia

 

Últimamente hemos publicado varios ensayos sobre la evolución de la tecnología y su impacto en la vida de los seres humanos, con especial énfasis en el futuro del empleo.

En el artículo que compartimos líneas abajo, Petriglieri, un profesor de Comportamiento Organizacional, analiza los cambios tecnológicos desde la perspectiva de su propia experiencia a lo largo de 25 años y postula que más que la tecnología, la amenaza para nuestra humanidad estaría en cómo nos manejamos nosotros mismos, en cómo nos deshumanizanos nosotros mismos.

agenda.weforum.org

Como hemos indicado en varios de nuestros análisis sobre la nueva revolución tecnológica, su proceso es imparable y trae grandes oportunidades y riesgos. Petriglieri nos dice que tenemos que estar más allá de ‘aplaudir o lamentar lo rápido que vamos’. Para ello es fundamental tomar conciencia de la realidad y no ser sujetos pasivos del devenir de los tiempos.

En Lampadia creemos que esta revolución es muy importante para el futuro de nuestras vidas y por lo tanto debemos prepararnos para afrontarla y aprovecharla. Lamentablemente, vemos pasar la información, los análisis y los meses, sin que en el Perú, nuestra clase dirigente y nuestros medios de comunicación aquilaten este importante momento de nuestra historia.

Esta falencia es especialmente importante para un país marcado por brechas muy grandes en educación, salud, infraestructuras y tecnología, que debieran causar un mayor sentido de urgencia y una mayor convergencia de nuestros postulados de acción colectiva y política. Por nuestro lado, seguiremos tercamente, difundiendo estos temas entre nuestros lectores.

La tecnología no es la mayor amenaza para nuestra humanidad

Gianpiero Petriglieri es Profesor Asociado de Comportamiento Organizacional en INSEAD y miembro de la Facultad del Programa de Becarios de Liderazgo Global del Foro Económico Mundial.

Hace unas semanas, fui a dar un paseo por las calles de Viena. Yo estaba allí para una reunión de ejecutivos de Recursos Humanos, la tercera conferencia a la que he asistido este otoño, en la cual el tema central fue la “revolución tecnológica” y sus consecuencias para el empleo, la educación y los estilos de vida.

Una hora antes, durante un panel, había respondido tweets de algunos miembros de la audiencia – desatando una pequeña controversia entre los asistentes. ¿El leer desde mi ‘tablet’ en el escenario, aumentó o disminuyó mi humanidad? ¿Me volvió más conectado o más desconectado? Todavía estaba dándole vueltas al asunto cuando una fila de bancas en una acera me distrajo.

Me volví hacia atrás, con una sensación de déjà vu a la que no podía dar sentido, hasta que la calle me llevó a la entrada de la residencia de estudiantes de un jardín de invierno. Entonces, emergió intacto un repentino recuerdo de otra noche de otoño en esa misma calle.

Había estado parado allí casi 25 años antes, en un rito tradicional para muchos adolescentes europeos de mi generación – ‘interrailing’. Utilizabamos el nombre de la marca del billete mensual de tren abierto para menores de 26 años (InterRail) como un verbo, porque InterRail no era, al igual que Google hoy en día, algo que se utilizaba. Sino algo que se hacía.

Esos viajes en trenes baratos eran una tecnología social. Llevaba a los jóvenes en un viaje hacia su edad adulta como europeos, un viaje hacia las otras personas y lejos de las crianzas provinciales y los viejos conflictos que todavía proyectan sus sombras sobre el continente.

Para muchos hombres y mujeres de mediana edad, como yo, el ideal europeo, el primer hijo nacido fuera del trauma de la guerra y con la promesa de paz y prosperidad, se convirtió en una identidad europea a través de largas noches en vagones de segunda clase que llevaban a París, Múnich, Madrid, Estocolmo o Amsterdam.

De pie en esa calle vienesa, después de un cuarto de siglo viviendo y trabajando en distintas partes de Europa, se me ocurrió que esos trenes fueron una de las tecnologías más humanizantes que he experimentado en mi vida.

No por la eficiencia de la ingeniería de ferrocarriles o el éxito de una estrategia de fijación de precios. Fue la libertad y las conexiones que nos dio. InterRailing expandía la definición de quién eras y a dónde pertenecías. Volvió a personas muy diferentes a personas como uno. El entender la importancia de esos trenes, en otras palabras, requiere mirar a través de ambos lentes instrumentales y humanísticos – imaginando sus destinos geográficos y culturales, contemplando lo que hicieron y lo que significaron para nosotros.

Esos dos lentes son necesarios para comprender el significado de cualquier tecnología. En estos días, por desgracia, privilegiamos la instrumental. ¿A dónde nos llevarán las nuevas tecnologías? ¿Qué van a hacer para y por nosotros? Con menos frecuencia tomamos en cuenta en qué nos estamos convirtiendo cuando la usamos.

Considere los sentimientos más populares sobre el surgimiento de tecnología de la información: una mezcla de esperanza y ansiedad. Solíamos reservar esos sentimientos para nuestros líderes más carismáticos, pero la tecnología y liderazgo están asociados cada vez más cercanamente. Pensemos en los autos eléctricos, los dispositivos informáticos, el comercio minorista en línea, los motores de búsqueda y las plataformas de medios sociales para nombrar sólo algunas empresas de alta tecnología cuya expansión y cuyos líderes icónicos, provocan tanto entusiasmo como sospecha hoy en día.

La esperanza y la ansiedad que causan los líderes cuando despliegan las últimas tecnologías no son nuevas. La controversia sobre cómo manejar la data de los usuarios por parte de empresas y gobiernos, por ejemplo, es la gran preocupación del siglo 21 – el riesgo planteado por los líderes equipados con más tecnología que humanidad.

Lo que es nuevo es que el riesgo ahora se refiere a la mayoría de nosotros, así seamos los líderes de los principales países o de nuestras propias vidas.

Y entonces, llegamos a la discusión de cómo asegurar que controlamos nuestras máquinas, en lugar de al revés. Mientras tanto, consentimos un desequilibrio igual de arriesgado como el que existe entre personas y máquinas. Es decir, el desequilibrio del humanismo y la instrumentalidad en el diseño y uso de la tecnología. Mientras que las preocupaciones por la libertad, las conexiones y la cultura pueblan nuestra retórica, es la preocupación por el impacto, devoluciones y eficiencia que suelen motivar nuestras decisiones.

Una tecnología no puede llamarse revolucionaria, sin embargo, simplemente porque les da a los líderes un mayor impacto y alcance. No hay nada de revolucionario en líderes utilizando nuevas herramientas para ampliar su poder. La tecnología sólo puede llamarse revolucionaria si cambia la forma con la cual el poder es experimentado, entendido y distribuido. Y aun así, la pregunta sigue abierta en cuanto a quién se beneficia de la redistribución y lo que hacen después.

Del mismo modo, una tecnología no puede ser llamada humanizadora simplemente porque permite que las personas transmitan sus historias. No hay nada humanizador en el uso de nuevas herramientas para proteger y hacer valer nuestras historias. La tecnología sólo puede ser llamada humanizadora si nos libera para revisar y ampliar esas historias y si nos ayuda a entender mejor las de los demás.

Si bien la tecnología a menudo aumenta el poder de los líderes y en ocasiones le brinda poder a nuevos líderes, en definitiva, es la humanidad lo que mantiene chequeado al poder. Esta es la razón por la que la relación más productiva entre el instrumentalismo y el humanismo es un conflicto entre iguales. La subordinación de uno a otro nos hace daño. Podemos controlar la tecnología y aún matar el humanismo, con la excusa de que es demasiado costoso, ineficiente o pasado de moda.

Considere la posibilidad de un mito empresarial legendario, uno que dejó escatimar un alumno que abandonó la universidad en una clase de caligrafía. Ese extracto de la vida de Steve Jobs a menudo es re-dicho para sugerir que un fondo en las humanidades, un gusto refinado y un intelecto amplio son valiosos porque ayudan a construir una gran compañía. No porque van a hacer una persona más interesante y digna. El mensaje sutil y devastador es que el humanismo es una estrategia para, más que un contrapeso de, objetivos instrumentales.

Es esta actitud la que nos deshumaniza, antes de que sea inscrita en la tecnología con la intención de los diseñadores y los hábitos de los usuarios. ¿Cómo podemos construir y utilizar la tecnología para liberar y conectar a las personas, si tal actitud nos amarra y aísla?

Antes de señalar acusatoriamente a los teléfonos inteligentes de nuevo, haríamos bien en volver a visitar un intenso debate que dio forma a una de las tecnologías más extendidas del último siglo: la administración. El defensor más influyente por su función instrumental, Frederick Taylor, sostuvo que la función de los directivos era aumentar la eficiencia y maximizar la rentabilidad de sus empresas. Peter Drucker pronto desafió esas teorías. Presentó una visión humanista de la función de los directivos de la empresa que arrojan tanto mecanismos de expresión de las personas y crecimiento.

Muchos de los avances que han provocado los negocios en el siglo pasado son el resultado de la tensión entre esas dos visiones de la forma de organizar el trabajo, mejorar la productividad, y definir el éxito. Esa tensión dejará de producir mucho progreso si todos nos quedamos con el taylorismo en ropa druckeriana. Cuando lo único que nos importe sea la eficiencia, y el humanismo sea reducido a una cuestión de estilo, la verdadera amenaza vendrá de las máquinas inteligentes en las que nos habremos convertido, no de las que vamos a construir.

Al igual que los viejos trenes, puede que no podamos controlar la velocidad del avance tecnológico, pero todavía podemos tomar muchas decisiones sobre a dónde vamos. No hay vuelta atrás, lo que hace que sea aún más importante a tener en cuenta el significado de seguir adelante, en lugar de simplemente aplaudir o lamentar lo rápido que vamos. Lampadia

 

 

 




Sobre los riesgos de la Inteligencia Artificial

Sobre los riesgos de la Inteligencia Artificial

Comentario de Lampadia

Una vez más queremos difundir información que nos permita crear nuestro propio criterio  la revolución tecnológica que ya envuelve a la humanidad, especialmente sobre la tecnología que amenaza ser la más disruptiva, la Inteligencia Artificial (IA). (Ver nuestro Repositorio: Revolución Tecnológica).

En esta ocasión compartimos dos artículos del Financial Times, el primero sobre el reto personal de Zuckerberg (Facebook), de crear un asistente personal con IA y al mismo tiempo que rechaza los riesgos más comentados y, el segundo, un diálogo abierto sobre los riesgos de un desarrollo descontrolado de la IA. Como parte de esta información incluimos además dos videos (en inglés) transcritos al español.

El tema de la revolución tecnológica es muy difícil de seguir en su cabal medida y por lo tanto, es igualmente complicado entender sus implicancias en las políticas de desarrollo de los países. Como hemos visto antes, su impacto en el empleo puede ser muy disruptivo. Pero en el caso de la IA, sus impactos pueden traer profundos cambios en la vida de los seres humanos mismos. Amenazando incluso nuestra supervivencia. Las siguientes líneas nos ayudarán a poner en perspectiva este último aspecto.

Zuckerberg rechaza temores sobre tendencias destructivas de la Inteligencia Artificial (IA)

Richard Waters y Hannah Kuchler en San Francisco y Murad Ahmed en Londres, 4 de enero 2016

Financial Times

Traducido y glosado por Lampadia

Zuckerberg (Facebook) cree que la IA puede desarrollarse para que ‘trabaje para nosotros’   ©Getty

Líderes tecnológicos como Elon Musk de Tesla Motors y el capitalista de riesgo, Peter Thiel han advertido que las tendencias destructivas de la IA pueden, algún día, amenazar a la raza humana. Pero Zuckerberg se ha impuesto el reto de construir este año su propio asistente personal con IA, rechazando los temores de que la ‘súper-inteligencia’ se comporte incontrolable y disruptivamente, como improbable.

En un post de la web de su compañía Facebook founder dijo que ha decidido construir una máquina inteligente que controle las funciones de su casa y que le ayude en el trabajo. Lo comparó con Jarvis, la computadora inteligente de las películas de Iron Man.

Su reto de este año es el primero que involucra un código de software para testear tan importante desarrollo para el futuro de Facebook. La compañía ya tiene dos equipos trabajando en inteligencia artificial – uno que se enfoca en investigación pura y otro que ve la forma de aplicar IA a las redes sociales.

El reto también enfatiza la carrera de IA que se está desarrollando entre las compañías líderes de internet que tratan de crear las vías para que las personas puedan interactuar con las máquinas. 

Facebook ha establecido tres laboratorios de IA, en Silicon Valley, New York y Paris y sus contrataciones de alto perfil incluyen a Yann LeCun, profesor de New York University, uno de los pioneros de ‘conocimiento profundo’ – una forma de IA que trata de imitar las capas de funcionamiento de neuronas del cerebro humano.

Zuckerberg dice que su trabajo lo lleva a temas técnicos profundos con los ingenieros de la compañía, y que construir su propia máquina inteligente traerá una nueva perspectiva en el trabajo.

Describió su proyecto personal como ‘una simple IA’, tomando un sistema al que pueda enseñar a reconocer su voz y a controlar todo en su casa – música, luces, temperaturas y otros.

También dijo que está interesado en usar reconocimiento de voz y rostros para identificar a quién estuviera en la habitación, por ejemplo, para ajustar la temperatura, pues él prefiere ambientes más frescos que su esposa.

Para ayudarse en su trabajo, Zuckerberg añadió que intentará enseñarle al sistema a convertir datos en representaciones visuales que pueda ver con su dispositivo de realidad virtual.

Hermann Hauser, un emprendedor científico de computadoras de Cambridge dijo que los avances recientes en algoritmos de aprendizaje de máquinas, el poder computacional y el acceso a inmensos volúmenes de datos, combinados permiten que los ingenieros de computadoras, puedan crear sistemas de IA. Pero el doctor Hauser dijo que le preocupaba que solo las más grandes compañías de Silicon Valley tuvieran acceso al nivel de información necesario para crear IA funcional, lo que concentraría poder entre esas compañías. “La gran preocupación que tengo es que el único camino para que esto funcione es tener acceso a grandes conjuntos de datos”, dijo. “La única gente que tiene acceso a esto son de Apple, Google, Amazon y Facebook.”

Los grandes avances en IA han llevado a líderes tecnológicos a advertir que algún día, las máquinas inteligentes podrían poner en peligro a la humanidad.

Zuckerberg calificó esto como “improbable … y mucho menos factible que desastres debidos a la dispersión de enfermedades, violencia, etc.”. Añadió: “Creo que podemos construir IA para que trabaje para nosotros y nos ayude”.

Hasta ahora, el experimento de Facebook más avanzado con IA ha sido la prueba de un asistente virtual llamado M, que opera en el Messenger de Facebook y promete servir los deseos de llamar un taxi hasta organizar una fiesta de cumpleaños. También ha utilizado IA para describir fotos a usuarios ciegos. 

           Ver video: Robots in the workplace

Comentario del Financial Times (Transcripción del video):

Andrew Hill (Editor de administración, Financial Times): Los humanos contra las máquinas es una historia tan antigua como la historia de la automatización, ya sea en el campo o en las fábricas, con la invención de la nueva tecnología siempre viene la promesa de una revolución de la forma en que trabajamos y seguramente con el temor de que se sustituyan los trabajos que ahora harían las máquinas. Después de un período de transición inquietante siempre han evolucionado nuevos puestos de trabajo. ¿Es diferente esta vez?

Martin Ford: Creo que ahora estamos en el momento en que la tecnología está  finalmente acá, cuando esta opción va a pasar y el hecho de que es, ya sabes, hemos tenido estas falsas alarmas tantas veces en el pasado que realmente es difícil para las personas aceptar esto, que es de donde viene una gran cantidad de la resistencia.

Andrew Hill: el libro de Martin Ford, “El ascenso los robots”, ganador del premio del  libro de negocios del año, de Financial Times y McKinsey, pinta un panorama sombrío del futuro en el que las máquinas desplazan a los seres humanos en todo menos en algunos roles muy especiales. Él prescribe soluciones económicas radicales, incluyendo un ‘dividendo ciudadano universal’ (ver en Lampadia: El futuro del empleo con Robots e ‘inteligencia Artificial’), pero advierte que la disrupción se extenderá a profesiones que se consideraban inmunes.

Martin Ford: Uno ve ahora impactos en el periodismo (reporteros) y en revisión de documentos y empresas de abogados, creo que va a escalar, que comenzará a impactar a cualquiera que haga análisis o escritos rutinarios, ya sabes, se reporta a los superiores y haces lo mismo una y otra vez, todo eso va a ser susceptible, eventualmente.

Andrew Hill: Pero desarrollos como los que trabajan en la vanguardia de la tecnología cognitiva de IBM ven el futuro de manera diferente. Las máquinas más sofisticadas trabajarán en conjunto con los humanos abriendo nuevas posibilidades en áreas de trabajo todavía inimaginables, al igual que la última ola de cambio impulsada por computadoras creó la profesión del ingeniero de software.

Guruduth Banavar (Vice Presidente, Cognitive Computing de IBM Research): En el futuro, cuando nos metemos en este mundo de datos a gran escala, el conocimiento y los sistemas cognitivos, creo que va a haber un tipo similar de nuevas profesiones en el área, lo que yo llamaría ingeniería del conocimiento, que comienza a partir de la toma de datos en bruto alcance hasta la creación y representación del conocimiento de las diferentes áreas que necesita ser complementado por los tipos de aprendizajes estadísticos más automáticos para ser aplicados a los datos en bruto a gran escala.

Andrew Hill: Watson de IBM, el sistema cognitivo de más alto perfil, ya ha golpeado al ser humano en concursos, pero Banavar ve esta tecnología como una forma de ayudar a los humanos expertos, no suplantándolos.

Guruduth Banavar: Bueno, mi opinión es que hay tantas dimensiones de la inteligencia que, de hecho, hay mucho desconocimiento acerca de lo que significa inteligencia. Sostenemos ideas al respecto, pero no entendemos que sólo estamos arañando la superficie de la inteligencia, así que creo que un mejor enfoque para nosotros en este momento sería construir máquinas que aumenten la inteligencia humana para resolver problemas prácticos y que ayuden a hacer frente a la enorme cantidad de datos y conocimientos que se han generado en el mundo.

Andrew Hill: Mientras los trabajadores de oficina tratan de adaptarse a las nuevas tecnologías, Banavar cree las computadoras ayudarán en la transición de la nueva era, educando en formas nuevas y enseñando nuevas habilidades, pero la clave para saber si esta transformación socava o simplemente perturba las economías y sociedades está en cuán lejos y cuán rápido progresa el cambio.

Martin Ford: Creo que incluso las personas que no compran por completo esta idea de la amplia automatización estarían de acuerdo en que, con claridad, las cosas van a avanzar más rápido y más rápido en el futuro. Quiero decir, yo no creo que haya ninguna duda de que algunas ocupaciones van a evaporarse, la gente, si quiere seguir siendo relevante tienen que reentrenarse o encontrar algo más que hacer. Creo que lo más importante de cara al futuro es estar en una posición en la que estés preparado para hacer eso.

Andrew Hill: Finalmente, optimistas y pesimista de la tecnología, pueden no estar tan distantes como parece que la naturaleza revolucionaria de la tecnología cognitiva podría traer una gran promesa. Ambos están de acuerdo en la necesidad de que las personas, las empresas y las sociedades se adapten. Ambos piensan que la educación y la reeducación pueden suavizar la transición, pero las áreas en las que difieren fundamentalmente, es que la velocidad y la escala del cambio están llenos de incertidumbre. ¿Quién esté en lo cierto determinará si el ascenso de los robots conduce a un futuro más brillante para muchos trabajadores o a uno mucho más oscuro.

Ya que hiciste preguntas complicadas sobre IA

Izabella Kaminska

18 de diciembre 2015

Financial Times

Traducido y glosado por Lampadia

¿Es la IA algo de lo que debemos preocuparnos?

Robots de un restaurante en Suzhou, China ©Getty

“Silicon Valley en movimiento para mantener segura la IA”

¿Es la IA algo de lo que debemos preocuparnos?

Bueno, ya sabes lo que dicen sobre IA…

No — ¿Qué?

Que los científicos dicen hace 40 años que la IA está a 40 años de distancia.

Bueno. ¿Entonces por qué todo el ruido?

Emprendedores de alto perfil y científicos han estado tocando las alarmas sobre el riesgo existencial que la IA trae a la humanidad. Elon Musk, el promotor de los autos eléctricos de Tesla tuiteó el año pasado que la IA era “potencialmente más peligrosa que las bombas atómicas”. Y el físico Stephen Hawking, ha advertido que “el desarrollo de inteligencia artificial puede significar el fin de la raza humana”.

¿Cuál es el riesgo inminente?

Los avances en sistemas de aprendizaje profundo – una forma de tecnología de algoritmos – ha permitido que las computadoras se involucren en tareas que antes solo podían ser hechas por los seres humanos. Estos descubrimientos se refieren a la habilidad de detectar pequeñas diferencias en el mundo, como reconocer patrones visuales de sonidos y, luego de ser capaces de responder a ellos con fluidez. En muchos casos esto ha creado una impresión convincente de acciones conscientes. Y como estos sistemas se ven y sienten inteligentes – aún cuando no hay inteligencia detrás de ellos – la gente está crecientemente inquieta.

¿O sea que estos desarrollos están mal representados?

Los científicos de computadoras te dirán que los intentos de aprendizaje de las máquinas usados por algo como el Google’s DeepMind no son nuevos. Lo nuevo es la velocidad de proceso y el tamaño del conjunto de datos manejados por los algoritmos. Musk y Hawking están entre los que creen que un programa de ‘superinteligencia’ autónoma puede colarse, pues podría aprender de sí mismo exponencialmente.

¿Pero es correcto hacer ese supuesto?

Científicos como Simon Stringer del ‘Oxford Centre for Theoretical Neuroscience and Artificial Intelligence’ son escépticos sobre la idea de que se combinen las fuerzas de computación exponencial con estrategias de aprendizaje de máquinas que lleven a un tipo de IA que pueda ser una amenaza a los humanos. Estos modelos tienen muchas aplicaciones – la habilidad de tranzar en mercados o de navegar autos sin piloto – pero no pueden resolver los problemas de replicar la conciencia. Y todos ellos dependen de seres humanos para su intelecto. Un sistema verdaderamente consciente tendría que entender el mundo sensorial de la misma manera en que lo hace el cerebro humano. El trabajo de Stringer se focaliza en alcanzar eso, pero el no cree que lleve a la superinteligencia. Él espera lograr la inteligencia de una rata.

¿No sería inteligente cubrir el riesgo, por si acaso?

Musk y el financiero de Silicon Valley, Peter Thiel, piensan así, por lo cual ellos y otros han anunciado un proyecto de US$ 1,000 millones para desarrollar IA en una forma que sea más probable de beneficiar al conjunto de la humanidad. Su proyecto OpenAI, será un movimiento sin fines de lucro que conduzca investigación de IA con código abierto y que comparta sus hallazgos con todos. Otros fundadores de OpenAI incluye a Amazon Web Services e Infosys, así como inversores individuales como Sam Altman, presidente de Y Combinator, una incubadora de start-ups de California.

¿De verdad los billonarios del club de élite de Silicon Valley alinean sus intereses con los de la humanidad?

Los cínicos sugerirían que este es un intento de evitar que las ventajas de la IA sean monopolizadas por una corporación o una persona. Un plan para compartir libremente la tecnología de IA no es lo mismo que frenar el conocimiento para que un sistema de inteligencia artificial sea creado y usado por un mal actor; o prevenir que una IA autónoma de aniquilar la humanidad. A lo máximo permite que la emergencia simultánea de muchos tipos de IA con los buenos protegiéndonos de los malos.

¿Pero qué pasaría si todos ellos se coluden contra la humanidad?

Exacto. Pero esa es una pregunta inconveniente para los billonarios de Silicon Valley.

¿Cómo así?

Si la IA posee realmente un riesgo existencial para la humanidad, lo mejor sería suspender todos los desarrollos. Imagínate lo que una moratoria del desarrollo de IA haría en la valorización de las compañías de tecnología.

Se convertirían en nuevas compañías de combustibles fósiles. O sea que no sería una gran sorpresa si ellas forman un grupo de lobby para promover un desarrollo responsable. 

Ver video: AI and the future for humanity

FT Negocios (Transcripción del video)

Ravi Mattu, Editor de Tecnología, FT

Durante casi 400 años, la Royal Society en Londres ha sido la sede de los líderes del pensamiento para discutir cómo la ciencia puede beneficiar a la humanidad. Desde Isaac Newton a Charles Darwin, los científicos se han reunido en estas habitaciones para considerar los temas más importantes del día. Ahora esta venerable institución está presentando una serie de eventos para la era de Internet. La primera reunión es una conferencia de un día sobre el aprendizaje de las máquinas, el proceso mediante el cual las computadoras son capaces de funcionar sin ser explícitamente programadas. Uno de los expertos que hablan en el evento en la Royal Society es Nick Bostrom, director del Instituto del Futuro de la Humanidad de la Universidad de Oxford y autor del best-seller “Súper-Inteligencia”. Él dice que podría haber un momento en el futuro cercano, cuando las máquinas sean más inteligentes que los seres humanos y tenemos que hacer más para abordar el riesgo potencial de ello.

Habrá una gran intersección en la historia humana, cuando hagamos la transición de una era dominada por la inteligencia biológica a una era dominada por la inteligencia artificial. No es algo necesariamente inminente, de hecho, creo que tenemos muy poca evidencia acerca de la línea de tiempo para estos desarrollos, pero con el tiempo, tal vez a lo largo de décadas o más tiempo, vamos a encontrar la manera de producir en las máquina el mismo proceso que hace inteligentes nuestros cerebros. Y va a ser realmente una invención como ninguna otra, el último invento, yo pienso, el último invento que los humanos alguna vez tengan que hacer porque después usted tendrá una máquina súper inteligente que lo hará mejor que nosotros. Incluso si esta transición es aún bastante lejana, las consecuencias son enormes y vale la pena empezar a pensar en ello desde hoy.

Si usted le cree a Hollywood, estas consecuencias pueden verse bastante aterradoras. Películas como Terminator y The Matrix sugieren que la inteligencia artificial podría ser la mayor amenaza para el futuro de la humanidad. Bostrom no cree que las películas de ciencia ficción sean una buena guía del futuro, no es el único que toca una campana de advertencia. El físico Stephen Hawking, que se basa en una forma de IA para comunicarse, ha dicho que un completo desarrollo de la inteligencia artificial podría significar el fin de la raza humana.

Súper-Inteligencia es algo potencialmente muy potente, al igual que la inteligencia humana es una cosa muy poderosa en relación con otras criaturas biológicas, que nos dieron a los humanos una posición inusual y dominante en el planeta. No es que tengamos músculos más fuertes o los dientes más afilados, es nuestro cerebro, que es ligeramente más inteligente que nos ha permitido los grandes avances desarrollando tecnologías, planes y organizaciones. Fundamentalmente las mismas razones, si usted tiene algo que supera nuestra inteligencia tanto como la nuestra supera la de los animales, esa cosa podría ser muy poderosa y puede ser capaz de dar forma al futuro de acuerdo a sus preferencias.

Así es que usted dice que uno de los posibles riesgos es que el dispositivo, las tecnologías que creemos podrían llegar a dominar?

Sí, creo que es un tipo de escenario posible, el futuro de los gorilas hoy depende mucho más de nosotros, de lo que los humanos decidan hacer, que de lo que los gorilas mismos decidan hacer. Del mismo modo, si hubiera máquinas súper-inteligentes, entonces nuestra suerte, el futuro de la humanidad, puede depender más de sus decisiones y de sus acciones. Entonces se convierte en algo muy importante que las preferencias de esta superinteligencia coincida con las nuestras, que estén lo suficientemente bien alineadas, que realmente se preocupen por el mismo tipo de cosas que nos importan, eso no es algo que no podemos dar por hecho, tenemos que actuar juntos para que en el momento en que necesitemos saber cómo controlar la súper inteligencia, podamos resolver el problema y parece que a partir de la limitada  investigación que se ha hecho hasta ahora, esto parece ser un problema realmente difícil .

¿Es usted optimista sobre a dónde vamos ?

¿Eres neutral, o estás muy ansioso?

Teniendo en cuenta nuestro estado actual de conocimiento podemos ver en la mesa, resultados extremadamente buenos y muy extremadamente malos. Yo creo que el resultados del tipo intermedio se ve probable cuando extrapolamos más hacia el futuro y que el destino de más largo plazo para la humanidad y pienso que es más probable que no sea ninguno de los extremos, ya sea la extinción o algo tan malo como la extinción, o un resultado extremadamente utópico.

El avance tecnológico es imparable. Los riesgos indicados son probables y de muy alto impacto eventual. Todo esto puede estar lejos, pero eso no disminuye sus posibles efectos. Nos parece que ya es hora de que la humanidad inicie un proceso de fijación de reglas éticas que regulen el comportamiento de las máquinas súper-inteligentes. Este es otro aspecto en el que la humanidad necesita desarrollos positivos de gobernanza global. Ver en Lampadia: Inteligencia Artificial: ¿Se puede controlar?

Para empezar, reflexionemos sobre las tres leyes de la robótica de Isaac Asimov:

1. Un robot no puede causar daño a un ser humano o, por inacción, permitir que un ser humano sufra daño.

2.- Un robot debe obedecer las órdenes dadas por los seres humanos, excepto si estas órdenes entrasen en conflicto con la primera ley.

3.- Un robot debe proteger su propia existencia, en la medida en que esta protección no entre en conflicto con la primera o segunda ley.

Lampadia

 

 

 

 

 

 

 

 




Se fue el 2015, ¿y ahora qué?

Se fue el 2015, ¿y ahora qué?

Recuperemos una Visión Positiva del Perú

Se nos va un año que debió ser mucho mejor para los peruanos.

  • Por el lado de nuestra clase dirigente, los políticos fueron exacerbando cada día más sus relaciones y los líderes de la sociedad civil fueron alejándose cada vez más del debate nacional.
  • La economía siguió contrayéndose y, contra todos los pronósticos oficiales, cerraremos el año con un crecimiento menor al 3% del PBI. (El Presidente Humala perdió la apuesta que hizo con Christine Lagarde en la reunión de los Gobernadores del FMI y el BM).
  • Los peruanos fuimos perdiendo confianza en el futuro mientras IPAE encarpetó la “Visión del Perú al Tercio de Siglo”, revisada el 2014, supuestamente hecha para abrir la escena electoral con algunos lineamientos coherentes.
  • Nos zambullimos en una gran confusión sobre nuestras verdaderas capacidades. ‘Ya no podemos crecer alto’, ‘Somos parte de la región más volátil’, etc.
  • No supimos diferenciar los impactos de los shocks externos, de nuestras propias falencias, que en nuestra opinión fueron determinantes para el tropezón económico, social y político en el que nos hemos ubicado.
  • Iniciamos el proceso electoral con mucha inquina entre los contendores y poco sentido de responsabilidad.

En verdad el año 2015 es solo el colofón de un proceso que empezó el 2011; cuando, después de diez años de inclusión en serio y de una cierta distancia de nuestras políticas públicas con los efluvios ideológicos, nos entregamos a una nueva ola de ideologización y de negación de nuestros avances y desarrollos. Ya hemos explicado muchas veces que en 2011 se produjo un punto de inflexión en nuestra realidad. (Ver en Lampadia: En el 2011 se dio el Punto de Inflexión de nuestro Desarrollo).

Por el lado del mundo hemos enfrentado una serie de procesos importantes que muchas veces han sido usadas como disculpas para tapar nuestras debilidades.

  • Se recuperaron las economías de EEUU y Europa, pero se ajustaron las de los países emergentes, empezando por el ‘cambio de motores en vuelo’ de China, que ahora transita de los impulsos de la inversión y exportaciones al del consumo interno (ver en Lampadia: China: Un Gigante cambia de Piel).
  • Menores precios de los commodities. La gran disculpa de los países incapaces. Hasta el BM indicó que América Latina era la región más vulnerable del planeta. Éste y el próximo año, el crecimiento de la región será negativo. Pero el Perú es distinto, no debió caer en el saco de los demás. (Ver: Sudamérica: Crecimiento visto con lentes oscuros y El Perú no es igual a ningún otro país). Una cosa es el desastre labrado por los gobiernos de Venezuela, Brasil y Argentina; o la parada de la inversión privada en Chile promovida a pulso por el gobierno de Bachelet (“woman made”); y la frenada de la inversión privada en el Perú, producto de los conflictos socio-políticos que el gobierno no supo enfrentar y la paralizante sobre regulación de las inversiones; y otra cosa muy distinta es concluir que el Perú solo flotaba en nuevas condiciones globales que nos impedían invertir y crecer. En verdad tenemos muchos proyectos productivos y de infraestructuras ‘a punto de caramelo’, listos para florecer, que nos permitirían crecer pronto, más de 6% anual.
  • Menor financiamiento global por los cambios de la política monetaria de EEUU que por fin aumentó, ligeramente, sus tasas y que lo seguirá haciendo paulatinamente.
  • El regreso de Rusia, de la mano de Putin, a ser ‘el niño malo del barrio’.
  • La explosión de la violencia asesina desatada por ISIS.
  • La crisis humanitaria de doble cuño (tragedia para los migrantes y para los europeos) desatada por la masiva migración de sirios y nor-africanos a Europa.
  • Se sigue profundizando la nueva revolución tecnológica de la mano de la robótica, la inteligencia artificial y otras, que nos ofrecen importantes oportunidades de desarrollo y al mismo tiempo nos exigen dar un gran salto en educación, salud, infraestructuras y tecnología, para no perder el tren de la historia. (Ver en Lampadia: El futuro del empleo con Robots e Inteligencia Artificial (II)).

Y, ¿cómo debemos ver el 2016?

En Lampadia creemos que el 2016 nos da la gran oportunidad de retomar el camino de la prosperidad, el bienestar común y el enfoque o convergencia social hacia la consolidación del Perú como uno de los mejores países del mundo para vivir.

  • Después de hacer ‘balance y beneficio de inventario’, la evaluación del actual gobierno, que trajo la ideología y la confusión social de regreso a la vida pública, tenemos que concluir que no se puede elegir un gobierno sin hacer un acto de madurez y en función de una mirada de largo plazo.
  • Desde la promulgación de la Constitución de 1993 y con el regreso de la inversión privada a la vida económica del país, hemos revertido 30 años de parálisis y empobrecimiento (60s – 80s). Parece que el 2011 no nos la creíamos, pero después del tropezón del 2011 que apagó varias luces, es más fácil entender las diferencias entre una y otra realidad.
  • Nuestra nueva clase media, tal vez pensaba que no era necesario preocuparse de la vida política del país, pues todo avanzaba sin tener que involucrarse. Pero después del tropezón de los últimos años, no pueden renunciar al futuro al que estaban accediendo.
  • Si bien desde hace 20 años (CADEs y otros), la sociedad civil ha puesto sobre la mesa la necesidad de desarrollar importantes reformas institucionales, se puede decir que recién ha calado en la conciencia política y social y, por lo tanto, deberá ser preocupación esencial del electorado y del próximo gobierno.
  • Algo que además debe ayudarnos a tomar las decisiones correctas es la revolución tecnológica, que como hemos explicado puede ser muy disruptiva a no ser que sepamos prepararnos y ponernos al día con prontitud. Prepararnos implica crear riqueza para cerrar las brechas que nos separan del primer mundo en educación, salud, infraestructuras y tecnología. El Perú tiene las capacidades para hacerlo, pues tenemos gente trabajadora y creativa y, todos los recursos naturales que podemos necesitar. No dejemos de tener presente la advertencia de Yuval Harari: “Países que, como China, perdieron el tren de la Revolución Industrial, 150 años más tarde han conseguido recuperar el terreno perdido, en gran medida, en términos económicos, gracias a la mano de obra barata. Esta vez, quienes pierdan el tren no tendrán una segunda oportunidad. Hoy en día, si un país, un grupo de personas, se queda descolgado, no tendrá una segunda oportunidad, en particular porque la mano de obra barata no tendrá ninguna relevancia”.

A diferencia de la prédica de los “doomsayers” (los agoreros del desastre), algunos políticos y economistas que se multiplican en los medios de prensa anunciando nuestra supuesta incapacidad para crecer y crear riqueza, en este portal decimos que ¡El Perú es Infinito! Lampadia    




Una Agenda Digital sin la cual perderíamos el Tren

Una Agenda Digital sin la cual perderíamos el Tren

Como siempre, en Lampadia nos gusta compartir las grandes ideas y análisis sobre la revolución tecnológica que se avecina. Consideramos que debemos prepararnos y aprovechar la gran oportunidad que nos brinda la tecnología para lograr nuestra mayor ambición: ser un país exitoso en el concierto internacional. Para ello debemos ver que nuestras políticas públicas converjan con los procesos que gobiernan los países más prósperos de la tierra.

En esta ocasión compartimos un primer despacho sobre una reciente iniciativa de Microsoft para promover las políticas públicas que nos permitan avanzar en la digitalización del Estado, titulada “Una Agenda de Desarrollo Tecnológico para el Perú del Bicentenario”.

Como decimos en la presentación de esta nota, el futuro próximo ‘no es más futuro’, es ‘otro futuro’. Esta frase quiere significar que los cambios que vamos a vivir son de naturaleza estructural, una discontinuidad, o como otros se refieren a ella, un cambio disruptivo.

Ante este nuevo escenario, los diversos países de la tierra están en una carrera por ponerse al día en el uso de la tecnología, la mejora de la educación, la salud y las infraestructuras económicas y sociales. El Perú se está quedando atrás y no tiene políticas específicas para enfrentar este gran reto, este mandato por alcanzar la prosperidad. (Ver en Lampadia el ejemplo de la India: Digital India).  Una de las mejores maneras de dar un salto cualitativo en la calidad de los servicios que brinda el Estado a los ciudadanos y empresarios, es justamente el aprovechamiento de las capacidades que nos otorga la tecnología moderna. 

Para acercarnos a esta problemática y al mismo tiempo oportunidad, líneas abajo publicamos un video animado de Microsoft que presenta didácticamente cómo podemos aprovechar la tecnología del futuro para fomentar el desarrollo y la inclusión en el Perú. Lampadia

https://youtu.be/tJCazx96Zss

 




Una mirada a China sin tantos prejuicios

Una mirada a China sin tantos prejuicios

El análisis sobre la evolución y perspectivas de China de David Pilling, del Financial Times, que publicamos a continuación, nos ayuda a entender su nuevo espacio en el concierto global sin los lentes oscuros con los que muchas veces se ve su rol por parte de EEUU y los países Europeos.

La presencia determinante de China en los acontecimientos económicos, sociales y políticos es incuestionable e inevitable. Como dice Kishore Mahbubani, el decano de la Universidad Lee Kuan Yew de Singapur, cuando aparece una nueva potencia hay dos opciones de política, el tradicional y usual en la historia, de resistencia y enfrentamiento, o el de convergencia, buscando la suma positiva.

Hasta ahora, lamentablemente, tememos la primera opción como la más probable. Ojalá, la humanidad sepa ponderar esta situación debidamente. Lampadia   

Celebremos el ascenso de la imperfecta y febril China

Escrito por David Pilling, publicado en Financial Times el 16 de diciembre de 2015

Traducido y glosado por Lampadia

A pesar de todos los riesgos, debemos celebrar su ascenso a ser la segunda economía más grande del mundo

Es fácil imaginar que el tren de carga de la economía China pueda descarrilarse. Cuando llegué a Asia hace 14 años, mucha gente en Japón, donde la economía era entonces tres veces el tamaño de la de China en términos nominales, predecían precisamente eso. Seguramente pensaron que el sistema debería derrumbarse bajo sus propias contradicciones.

Era, después de todo, una economía dirigida por el Estado, propensa a una mala asignación de capital y dependiente de una inversión derrochadora. Tenía un aparato político represivo que gastaba más en seguridad interior que en la defensa nacional.

La ira de los funcionarios del partido comunista iba creciendo, muchos de los cuales estaban metidos en corrupción y participaban en el acaparamiento de tierras en una escala masiva. Medido crudamente, la economía estaba produciendo un crecimiento sorprendente. Sin embargo, estaba envenenando el aire, el agua y, no en pocas ocasiones, a los propios ciudadanos de China.

No hay nada de ese análisis que esté equivocado. La conclusión, sin embargo, de que las tensiones inherentes llevarían a un caos social y derrumbarían el sistema fue una ilusión.

Subestimó los logros del partido comunista en traer mejoras tangibles a las vidas de cientos de millones de personas. Se subestimó, también, la fuerza de su mensaje patriótico: que, después de más de 100 años de humillación, China había logrado, finalmente “levantarse”, según auguró Mao Zedong.

Debido a algunas medidas, en lugar de derrumbarse, China ha ido viento en popa, de fortaleza en fortaleza. Su producción es más del doble del tamaño de la de Japón. En términos de paridad de poder adquisitivo, superó a los EEUU el año pasado, por lo que es la mayor economía del mundo. En sólo 15 años, su producto bruto interno per cápita ha pasado de un 8 % del nivel de EEUU al 25 %.

En Japón, muchos esperan en secreto que China cometa un error. No sin razón, temen un poderoso vecino vengativo con el libro de historia en la mano. Sin embargo, en América y Europa, también algunos han sido culpables de suponer que China es un castillo de naipes.

Libros con títulos como The Coming Collapse of China (El Venidero Colapso de China) han sido guías durante años. Es posible señalar los defectos y las injusticias del sistema autoritario sin predecir su inminente desaparición. En algún momento, el Partido Comunista cederá a otra cosa. Todas las dinastías caen. Sin embargo, con toda seguridad va a permanecer en el poder más tiempo del que muchos esperan.

El ascenso de China es el evento más importante de nuestra época. En las mentes de muchos occidentales, se vio ensombrecida por la amenaza del terrorismo y por una revolución tecnológica que trajo consigo regalos binarios de oportunidad y destrucción. Sin embargo, las consecuencias de la renovación de una nación que contiene una quinta parte de la población del mundo serán profundas, llevando el centro de gravedad del mundo de oeste a este.

Económicamente, ya ha transformado las perspectivas de los productores de materias primas desde Angola a Australia, a pesar de la reciente caída de los precios de los commodities por la desaceleración de China.

Políticamente, ha cambiado los cálculos de casi todas las naciones. EEUU ha girado a Asia incluso mientras sus diplomáticos ponderan la viabilidad de continuar las garantías de seguridad incondicionales para Japón y Taiwán. Atraídos por el imán de los negocios y el poder, el Reino Unido ha desafiado a Washington al unirse a un banco chino diseñado para desafiar el orden de posguerra,  personificado por las instituciones de Bretton Woods.

China ha demostrado que el éxito de Japón puede ser emulado, si bien no igualado, en una escala mucho más grande

Hay riesgos para el ascenso de China. Hay dos que destacan. El primero es la guerra. El récord de la humanidad en el ajuste hacia potencias emergentes no es bueno. A medida que se vuelve más fuerte, Pekín no aceptará la Pax Americana, al menos en lo que considera su área natural de influencia. Las posturas de China y EEUU alrededor de las islas artificiales en el Mar Meridional de China es un signo de lo que vendrá. Al igual que brotes de un nacionalismo enojado dirigido a Japón.

El segundo es el medio ambiente. Es comprensible que los chinos aspiren a un nivel de vida como el de EEUU, con los autos y las refrigeradoras de tamaños americanos. Lo mismo ocurre con los 1.3 mil millones de indios y cientos de millones más en Asia, África y América Latina. No está claro que el planeta pueda sostener tales ambiciones. Sin significativos avances tecnológicos, probablemente algo tendría que ceder. Esto nos lleva de nuevo a los conflictos.

A pesar de todos los riesgos, el ascenso de China debe ser celebrado. El Japón de la posguerra demostró al mundo que la prosperidad y la modernidad no fueron del dominio exclusivo de los blancos europeos y americanos. China ha demostrado que el éxito de Japón puede ser emulado, si abien no igualado, en una escala mucho más grande.

Este podría parecer un momento extraño para celebrar. ¿No se está viniendo a pedazos el modelo chino? El crecimiento ha caído más rápidamente de lo que muchos habían imaginado. Podría caer mucho más todavía. Eso podría precipitar una crisis financiera. La deuda se ha duplicado desde 2009. No fue difícil cubrir las grietas en el sistema con un crecimiento de dos dígitos. En 3 por ciento, podría no ser tan fácil.

Incluso si se evita la crisis completa, China simplemente puede quedarse atascada. Su fuerza laboral se está reduciendo. Su población está envejeciendo rápidamente. En sólo 15 años, casi una cuarta parte de su población tendrá más de 65. ¿No parecen ahora los fatalistas, adivinos?

En realidad, China no tiene que hacer gran cosa para cambiar el mundo. Debido a la magnitud de su población, si su gente a alcanza sólo la mitad del nivel de vida de los EEUU, su economía sería el doble de grande.

The Rise and Fall of Great Powers (Auge y caída de las grandes potencias), por el profesor Paul Kennedy de la Universidad de Yale, sugiere que el poder militar y diplomático será lo siguiente. Aquellos que buscan fisuras en el sistema, las encontrarán en abundancia. Aquellos que imaginan que “la amenaza china” está a punto de desaparecer, se sentirán decepcionados. L

 

 




La transformación digital: Migrando hacia las redes

La transformación digital: Migrando hacia las redes

En Lampadia hemos enfatizado en muchas ocasiones los distintos aspectos y consecuencias de la Revolución Tecnológica en los sectores económicos, sociales y políticos del mundo, además de su impacto en el Perú y cómo debemos prepararnos para aprovecharla al máximo.

Es por eso que consideramos que la reciente presentación “La Transformación Digital: Ahora es el momento” del Director General Unidad de Consumo de Telefónica en Perú, Michael Duncan, en el último CADE Ejecutivos 2015, es especialmente importante y relevante en la coyuntura actual. 

Como afirma Duncan, “vivimos en medio de una revolución digital sin precedentes”. El mundo es cada vez más cambiante y requiere de una adaptación constante, innovadora y disruptiva. Por eso, la transformación digital es crucial para la adaptación de los negocios al nuevo entorno digital que requiere un nuevo uso de la tecnología disponible.

Esto trae consigo grandes oportunidades para aprovechar la ventaja competitiva de los emprendedores que sepan desenvolverse. Es por eso que los peruanos debemos mantenernos actualizados y preparados para el despliegue de las potencialidades de las tecnologías emergentes y tomar conciencia de esta realidad que trae la ‘tercera revolución industrial’ que ya está entre nosotros. Ver en Lampadia: La Tercera Revolución Industrial. Eso implica repensar nuestras prioridades y cambiar la velocidad en que diseñamos políticas públicas y las llevamos a la práctica.

Como muestra la presentación, el Perú sigue atrasado en la digitalización comparado con el resto de América Latina, quedándose en el puesto 90. Nos queda mucho por hacer y no podemos perder el tren de la transformación digital. 

En palabras del historiador israelí, Yuvah Noah Harari: “Países que, como China, perdieron el tren de la Revolución Industrial, 150 años más tarde han conseguido recuperar el terreno perdido, en gran medida, en términos económicos, gracias a la mano de obra barata. Esta vez, quienes pierdan el tren no tendrán una segunda oportunidad. Hoy en día, si un país, un grupo de personas, se queda descolgado, no tendrá una segunda oportunidad, en particular porque la mano de obra barata no tendrá ninguna relevancia.”

“¡Ahora es el momento actuar!” Lampadia

Ver la presentación completa aquí:

La Transformación Digital: Ahora es el momento




Impresoras 3D: 10 casas sostenibles en 24 horas

Impresoras 3D: 10 casas sostenibles en 24 horas

La revolución de las impresoras 3D no es novedad. En Lampadia venimos augurando sus ventajas y el poder democratizador de este invento: Impresoras en 3D, La Tercera Revolución Industrial y Organizaciones Exponenciales (I). Diez casas en un día, eso es una posibilidad que la tecnología nos brinda. Aún mejor, estas casas impresas en 3D son hechas con productos sostenibles (eco-friendly, o amigables al ambiente, en español), ya que se construyen con residuos de construcción reciclados mezclados con cemento de secado rápido.

La primera casa 3D del mundo en China

La impresora 3D no imprime una casa de una sola vez. Cada casa es impresa en piezas utilizando la tecnología FDM (Fused Deposition Modeling). Cuatro impresoras 3D de 6.6metros de altura, 10 de ancho y 32 de largo, imprimen pared por pared que luego se ensamblan. La única parte que todavía no se puede imprimir es el techo. Para entender más el proceso de fabricación y su rapidez, compartimos un video (en inglés) que explica cómo se hicieron diez casas en 1 día en China:

https://www.youtube.com/watch?v=zMoqHmksweU&feature=youtu.be

Las casas producidas pueden parecer un poco simples o frías, sin embargo, muestran el potencial para una evolución en los nuevos materiales y procesos de construcción para lograr la fabricación de casas en forma rápida y de bajo costo. La tecnología de impresión 3D requiere menos mano de obra y utiliza predominantemente materiales reciclados. Como resultado, la casa resulta ser muy económica. Cada una de estas casas de 200 metros2  cuesta, actualmente en China, menos de US$ 5,000. En un país como el Perú, con un gran déficit de viviendas y limitaciones económicas, donde muchas familias necesitan un hogar asequible, esta tecnología sería muy beneficiosa.

Se espera que la industria de la impresión 3D cambie casi todos los procesos de fabricación. Se espera que crezca un 300% en los próximos ocho años, como se muestra en el gráfico superior.

Uno de los sectores más importantes de este proceso es la revolución de la manufactura. Para la fabricación industrial, una de las etapas más intensivas en capital, tiempo y trabajo en el proceso de desarrollo de herramientas. La impresión 3D industrial elimina la necesidad de la producción de herramientas y, por lo tanto, los costes, los plazos y la mano de obra asociados con ella. Esta es una propuesta muy atractiva, que un número cada vez mayor de fabricantes están aprovechando. Además, los productos y los componentes pueden ser diseñados específicamente para evitar los requisitos de montaje con geometría compleja, eliminando aún más mano de obra y los costos asociados con los procesos de montaje.

Paredes de alta tecnología: La firma china WinSun juntó una mezcla de cemento y residuos de construcción 
para construir paredes capa por capa (en la foto) en un proceso de construcción rápida que podría 
transformar la forma en que se construyen viviendas asequibles

Además, es importante destacar que los materiales que se utilizan normalmente en una impresora 3D son, sorprendentemente, sostenibles y eco-friendly. Los materiales más comunes son piezas de plástico son acrilonitrilo butadieno estireno (ABS) y ácido poliláctico (PLA). Ambos son termoplásticos; se vuelven suaves y moldeables cuando son calentados y vuelven a un estado sólido cuando se enfrían. Además, el PLA es en realidad un polímero de azúcar derivado de plantas, comúnmente hecho de maíz.

Otra ventaja de los termoplásticos es que pueden volver a fundirse y reformarse en nuevos objetos varias veces (aunque no infinitamente, ya que su estructura finalmente se despolimeriza). Por lo tanto el objeto impreso puede ser reciclado algunas veces.

Esta invención es un avance valioso en la tecnología de la construcción. Aporta la posibilidad de viviendas de bajo costo, tal vez temporales, en las zonas de desastre. Cuando el desastre es superado y es lo suficientemente seguro para los ocupantes temporales de regresar a sus hogares (o construir nuevos), las casas 3D podrían ser recicladas y utilizadas en otras de dimensiones diferentes. Esta invención también puede ser una solución razonable para la construcción de escuelas y postas médicas.

Las casas impresas en 3D tendrán un gran impacto en el mercado y una mayor demanda hará que la tecnología baje sus precios. Dado el elevado número de nuestra población que habita casas que no están construidas con materiales nobles, esta opción podría ser un nicho de negocio muy prometedor para el Perú. Lampadia

 

 




Reinventando las empresas

Reinventando las empresas

Los emprendedores están rediseñando la materia prima del capitalismo

Comentario de Lampadia

La revolución tecnológica que se despliega en el mundo, no solo está referida a nuevos procesos, productos y servicios, también incide en nuevas formas de organización de las empresas, las relaciones entre la propiedad y la administración de las mismas, las formas de financiamiento y hasta nuevas estrategias de tercerización que permiten el desarrollo de nuevos negocios casi de la noche a la mañana.

El siguiente artículo de The Economist es un excelente referente de las nuevas tendencias de desarrollo empresarial:  

Publicado por The Economist, 24 de octubre de 2015

Traducido y glosado por Lampadia

Ahora que Uber está aumentando su actividad, los taxistas de Londres se encuentran aún más afligidos de lo habitual. Mientras tanto, los hoteleros del mundo están lidiando con Airbnb y los creadores de hardware con la computación en la nube. Al otro lado de las industrias, los disruptores están reinventando cómo funcionan los negocios. Menos evidente, pero igualmente importante, también están reinventando lo que es ser una empresa.

Para muchos gerentes, la vida corporativa todavía involucra tratar con una gran parte de propietarios anónimos, la mayoría de ellos representados por los gestores de fondos que compran y venden acciones que cotizan en bolsa. En las empresas de los insurgentes, por el contrario, el acoplamiento entre la propiedad y la responsabilidad es estrecho. Los fundadores, el personal y los sponsors ejercen un control directo. Todavía es temprano pero, si esta innovación se extiende, podría transformar el funcionamiento de las empresas.

El atractivo del modelo insurgente es, en parte, resultado de la creciente insatisfacción con las empresas de capital abierto. Es verdad que las mejores empresas de capita abierto son organizaciones notables. Ellas establecen un equilibrio entre los resultados trimestrales (que los mantienen atentos) y las inversiones a largo plazo (que los mantienen en crecimiento). Producen una gran cantidad de talentosos gerentes y productos innovadores. Saben movilizar talento y capital.

Pero, después de un siglo de dominación absoluta, la empresa de capital abierto está mostrando signos de desgaste. Una de las razones es que los directivos tienden a poner sus propios intereses por delante. Se suponía que la revolución de la década de 1980 del accionista y el valor de las empresas resolvería esta problemática incentivando a los gerentes a pensar como propietarios, pero ha sido contraproducente. Con el poder de opciones de compra de acciones, los directivos actuaron en su propio beneficio, impulsando los precios de las acciones con el fin de aumentar sus ingresos.

El auge de las grandes instituciones financieras (que controlan alrededor del 70% del mercado de valores de Estados Unidos) ha debilitado aún más el vínculo entre las personas que nominalmente son dueños de las empresas y las propias empresas. Los gestores de fondos tienen que lidiar con un grupo cada vez mayor de intermediarios, desde reguladores hasta sus propios empleados, y cada uno tiene sus propios intereses y beneficios. No es sorprendente que los gestores de fondos no logren controlar eficazmente a las empresas individuales.

Por último, listar una compañía en la bolsa se ha vuelto oneroso. Las regulaciones se han multiplicado desde el escándalo de Enron de 2001-02 y la crisis financiera de 2007-08. Aunque los mercados tienden a proyectarse a largo plazo, muchos administradores consideran que sus puestos de trabajo dependen de producir buenos resultados a corto plazo, trimestre tras trimestre.

Intereses contrapuestos, el cortoplacismo y las excesivas regulaciones imponen costos. Ese es un gran problema en un momento clave, en el cual las empresas de capital abierto están luchando para exprimir ganancias de sus operaciones. En los últimos 30 años las ganancias en el índice S&P 500 de las grandes empresas estadounidenses crecieron un 8% al año. Ahora, por segundo trimestre consecutivo, se espera que caigan en un 5%. El número de empresas que cotizan en las bolsas de valores de Estados Unidos ha caído a la mitad desde 1996, en parte debido a consolidaciones, pero también porque los gerentes más talentosos prefieren que sus empresas permanezcan privadas.

No es casualidad que otro tipo de organizaciones corporativas estén aumentando. Las empresas familiares tienen una nueva oportunidad. Los hombres de negocios están experimentando con “híbridos” que aprovechan los mercados públicos manteniendo un monitoreo constante. Inversionistas astutos como Jorge Paulo Lemann, de 3G Capital, se especializan en la compra de empresas de capital abierto y las opera como privadas, con una dotación de personal magro y un enfoque de largo plazo.

Pero la alternativa más interesante para las empresas de capital abierto es una nueva generación de nuevas empresas con un alto potencial con nombres exóticos como ‘unicornios’ y ‘gacelas’. En las mismas ciudades donde Ford, Kraft y Heinz construyeron imperios hace un siglo, miles de jóvenes están creando nuevas empresas en espacios de oficinas temporales, alimentadas con café y grandes sueños. Sus empresas son pioneras de una nueva forma de organización.

La diferencia central radica en la propiedad: mientras que nadie está seguro de quién es dueño de las empresas de capital abierto, las nuevas empresas hacen todo lo posible por definir claramente quién es dueño de qué. Desde el inicio de la vida de una empresa, los fundadores y los primeros reclutas poseen una participación mayoritaria e incentivan a las personas con participaciones de la propiedad o premios relacionados con el rendimiento. Esto siempre ha sido así para las nuevas empresas, pero hoy en día los derechos y las responsabilidades están meticulosamente definidas en contratos elaborados por abogados. Esto alinea los intereses y crea una cultura de trabajo esforzado y camaradería. Debido a que son privadas y no de capital abierto, miden los indicadores de desempeño (como la cantidad de productos que han logrado) en lugar de elaborados estándares contables.

Las nuevas empresas también aprovechan las nuevas tecnologías, lo que les permite ser globales sin ser grandes. Las startups solían enfrentar dificiles decisiones acerca de cuándo invertir en activos grandes, como los sistemas de propiedad y de computadoras. Hoy en día se pueden expandir muy rápido mediante la compra de servicios como y cuando se les necesita. Pueden incorporarlos en línea con unos pocos cientos de dólares, recaudando dinero de sitios como Kickstarter y Crowdsourcing, contratando a programadores de Upwork, alquilando equipo de procesamiento de Amazon, encontrando fabricantes en Alibaba, organizando los sistemas de pago en Square y conquistando el mundo rápidamente . Vizio fue la marca más vendida de la televisión en Estados Unidos en 2010 con sólo 200 empleados. WhatsApp persuadió a Facebook de comprarlo por US$ 19 mil millones a pesar de tener menos de 60 empleados y ventas de solo US$ 20 millones.

Existen tres críticas sobre la idea de que esto es una revolución. La primera es que se limita a una esquina de Silicon Valley. Sin embargo, la economía insurgente se está convirtiendo en la corriente principal. Las startups se encuentran en todos los negocios desde la venta de gafas (Warby Parker) hasta finanzas (Sinfonía). Airbnb coloca a casi 17 millones de personas en un verano y Uber transporta a millones de personas todos los días. WeWork, un equipo estadounidense que ofrece alojamiento para nuevas empresas, cuenta con 8,000 empresas con 30,000 trabajadores en 56 localidades en 17 ciudades.

La segunda es que las empresas eventualmente se volverán de capital abierto, porque la mayoría de nuevas empresas quieren, finalmente, venderse a una empresa de capital abierto. De hecho, un número cada vez mayor opta por quedarse privada y les resulta cada vez más fácil recaudar fondos sin tener que recurrir a los mercados públicos. Las empresas tecnológicas que se listan en las bolsas de valores lo hacen después de 11 años, cuando en 1999 lo hacían en cuatro. Incluso cuando se vuelven de capital abierto, los emprendedores tecnológicos mantienen el control a través de acciones de clase “A”.

La tercera objeción es que la propiedad de estas nuevas empresas está aislada del resto de la economía. Las empresas de capital abierto le brindan a la gente común una participación en el capitalismo. Las startups están dominadas por un pequeño grupo de capitalistas de riesgo con acceso privilegiado. Eso es cierto, pero la gente común puede invertir en startups directamente a través de plataformas como SeedInvest o indirectamente a través de los principales fondos de inversión como T. Rowe Price, que invierte en ellas desde sus inicios.

Las nuevas startups de hoy no van a tenerlo todo a su favor. Las empresas de capital abierto tienen su lugar, especialmente para las industrias de capital intensivo, como en petróleo y gas. Muchas startups fallarán inevitablemente, incluyendo algunas de las más famosas. Pero su enfoque sobre la construcción de negocios va a sobrevivir y servirá como una adición llamativa a la caja de herramientas capitalista. Airbnb y Uber y el resto se adecuan mejor a las redes virtuales y a las tecnologías que cambian rápidamente. Ellos son los pioneros de un nuevo tipo de empresa que puede hacer un mejor trabajo convirtiendo sueños en negocios. L

 

 

 




El inexorable ascenso de los robots

El inexorable ascenso de los robots

Martin Ford, creador de una empresa de desarrollo de software en Silicon Valley ha escrito un último libro con el título de este artículo (Rise of the robots – Technology and the threat of a jobless future), que nos presenta sin miramientos el difícil mundo que está en pleno desenvolvimiento. (Ver comentario de Lampadia al final del artículo).

Ford nos alerta sobre la emergencia de un nuevo mundo, con nuevos paradigmas y con un ritmo de cambio acelerado e imprevisible. Para ilustrar a nuestros lectores hemos traducido y glosado la presentación del libro, algunas líneas de argumentación y aprovechado en explicar, con palabras de Ford, el significado de ‘Singularity’ (Singularidad):

La presentación:

“¿Cuales son los empleos del futuro? ¿Cuántos habrán? ¿Y quienes los tendrán? Podemos imaginar y esperar que la actual revolución industrial se desarrolle como la última: incluso mientras algunos empleos se eliminen, que más sean creados para manejar las innovaciones de una nueva era. En ‘Rise of the robots’, el emprendedor de Silicon Valley, Martin Ford argumenta que este no es el caso. Mientras la tecnología continua acelerándose y las máquinas empiezan a hacerse cargo de ellas mismas, menos gente será necesaria. La ‘Inteligencia Artificial’ está en curso de convertir los ‘buenos empleos’ en obsoletos: muchos asistentes legales, periodistas, trabajadores de oficina e incluso los programadores de computadoras están destinados a ser reemplazados por computadoras y software inteligente”.

“Mientras continua el progreso, los trabajos de ‘blue collar’ y ‘white collar’ [trabajos de cuello azul y de cuello blanco, referidos a trabajadores manuales, por un lado, y administradores y técnicos, por otro], se evaporarán, ajustando a las familias de clase trabajadora y de clase media aún más. Al mismo tiempo, las familias están siendo asaltadas por una explosión de los costos, especialmente de dos mayores industrias: educación y cuidado de la salud que, hasta ahora, no hayan sido transformadas por la tecnología de la información”.

“El resultado, bien puede ser, desempleo masivo y desigualdad al mismo tiempo que una implosión de la propia economía de consumo”.

“En ‘Rise of the robots’, Ford detalla lo que las máquinas inteligentes y los robots pueden alcanzar, e implora a los empleados, académicos y hacedores de políticas públicas a enfrentar las implicancias. Las anteriores soluciones para las disrupciones tecnológicas, especialmente las referidas a mayor educación y capacitación, no funcionarán y debemos decidir ahora, si el futuro verá una amplia prosperidad o niveles catastróficos de desigualdad e inseguridad económica”.

Algunas puntualizaciones:

  • En EEUU, en 1970, se empezó a disolver la relación simbiótica entre una creciente productividad y el aumento de los salarios.
  • El 2 de enero de 2010, el Washington Post reportó que durante la primera década del siglo XXI, la creación neta de empleo en EEUU fue cero.
  • Desde entonces, en el mismo país, la desigualdad aumentó hasta llegar a niveles no vistos desde 1929.
  • El acceso a mayor educación y capacidades, no necesariamente ofrecerá una protección efectiva contra la automatización del futuro.
  • El impacto de la tecnología de la información cubrirá todo el tablero y virtualmente, todas las industrias existentes serán menos intensivas en empleo mientras las nuevas tecnologías se absorben en los modelos de negocio.
  • La aterradora realidad es que si no la reconocemos y nos adaptamos a las implicancias del avance tecnológico, podemos tener que enfrentar una ‘tormenta perfecta’ con los impactos paralelos de un espiral de desigualdad, desempleo tecnológico y cambio climático, que podrían amplificarse y reforzarse mutuamente. 

La Singularidad (traducido y glosado por Lampadia):

En mayo de 2014, Stephen Hawking, el genio de la física, la madre de las ciencias, escribió con otros autores: “La creación de una auténtica maquina que piense sería el mayor evento de la historia humana”. Una computadora que exceda el nivel de la inteligencia humana puede ser capaz de “vencer a los mercados financieros, superar las invenciones de los investigadores humanos, sobre manipular a los líderes humanos y de desarrollar armas que no podamos, ni siquiera, entender”. Desmerecer esto como si fuera ciencia ficción, puede terminar siendo “potencialmente, el mayor error de la historia”.

La primera aplicación del término “singularidad” para un futuro evento impulsado por la tecnología se acredita generalmente al pionero de la informática John von Neumann. El tema se concretó en 1993 por el matemático de la Universidad Estatal de San Diego Vernor Vinge, quien escribió un artículo titulado ‘La Singularidad Tecnológica está en camino’, “dentro de treinta años, tendremos los medios tecnológicos para crear inteligencia sobrehumana. Poco después, será el fin de la era humana”.

En astrofísica, una singularidad se refiere al punto dentro de un agujero negro donde las leyes normales de la física no funcionan. Vinge visualiza la singularidad tecnológica en términos similares: representa una discontinuidad en el progreso humano que estaría fundamentalmente opacada hasta que se ocurra. El intento de predecir el futuro más allá de la singularidad sería como que un astrónomo intente ver el interior de un agujero negro.

La batuta pasó a Ray Kurzweil, que publicó su libro ‘La singularidad está cerca: Cuando los humanos trasciendan la biología’ en 2005. A diferencia de Vinge, Kurzweil, quien se ha convertido en el principal evangelista de la Singularidad, no tiene reparos en tratar de mirar más allá del horizonte de eventos y brindar una visión muy detallada de cómo se vería el futuro. La primera máquina verdaderamente inteligente, nos dice, será construida a finales de la década de 2020. La singularidad en sí ocurrirá alrededor de 2045. Kurzweil es un brillante inventor e ingeniero. La revista Inc. una vez se refirió a él como el “heredero legítimo” de Thomas Edison.

Una vibrante comunidad, poblada de personajes brillantes y coloridos, se ha unido en torno a Kurzweil y a sus ideas. Estos “Singularians” han llegado tan lejos como para establecer su propia institución educativa. Singularity University, con sede en Silicon Valley, ofrece programas no acreditados a nivel de postgrado centrados en el estudio de la tecnología exponencial y cuenta con el patrocinio corporativo de Google, Genentech, Cisco y Autodesk.

Entre las más importantes predicciones de Kurzweil está la idea de que, inevitablemente, nos vamos a fusionar con las máquinas del futuro. Los seres humanos serán mejorados con implantes cerebrales que aumentarán drásticamente la inteligencia. De hecho, esta amplificación intelectual es vista como esencial si queremos comprender y mantener el control de la tecnología más allá de la singularidad.

Quizá el aspecto más controvertido y discutible de la visión post-Singularidad de Kurzweil es el énfasis que sus adherentes ponen en la perspectiva inminente de la inmortalidad.

Mi propia opinión es que algo como la Singularidad es ciertamente posible, pero está lejos de ser inevitable. Podría resultar que el catalizador esencial para la Singularidad – la invención de la super-inteligencia – sea imposible o sólo se lograse en un futuro muy remoto. Varios de los mejores investigadores con experiencia en la ciencia del cerebro han expresado este punto de vista. Gordon Moore, cuyo nombre parece destinado a ser para siempre asociado con el avance exponencial tecnología, es escéptico de que algo como la Singularidad jamás ocurra. L

Nuestro comentario:

Más allá de las especulaciones más extremas, es muy claro que la propensión de los diversos sectores de la economía por crear empleo serán sustancialmente disminuidos.

El Perú sufre de muchas brechas y atrasos. En la medida que no seamos capaces de cerrarlas o acortarlas sustancialmente en un plazo corto, podremos quedar desplazados de la vida pos revolución tecnológica. Evidentemente, estamos hablando de nuestros pobres, pues los que tienen mejores estándares de vida no tendrán problema para ser parte de ese mundo.

Esto significa que si los peruanos entendemos esta amenaza en su debida proporción, debiéramos nuclearnos alrededor de nuestras agendas pendientes y dejar atrás las rencillas y juegos de poder de corto plazo y sin propósito cívico. El tablero de nuestra acción colectiva ha sido ampliado sustancialmente ante esta amenaza. No cerremos los ojos y cosechemos las oportunidades que esta nueva realidad trae a los pueblos responsables. Lampadia