1

La factura del corona virus la pagamos todos

La factura del corona virus la pagamos todos

Fausto Salinas Lovón
Exclusivo para Lampadia

1.- CUARENTENA. Es necesaria en la realidad peruana, a pesar de sus efectos socio económicos colaterales, pero no es suficiente. Solo es un mecanismo de contención, no de solución. Si no va de la mano con otras medidas adicionales, una vez que cese tendremos un nuevo pico de crecimiento de la infestación que ni la economía, ni la moral nacional podrán resistir.

2.- MEDIDAS ADICIONALES. Tienen que venir de las experiencias mundiales más efectivas: Japón, Taiwán, Singapur, Corea del Sur y la propia China. No vienen del relajo social italiano (cuya cifra de casos está superando en este momento a la de China), ni de la irresponsabilidad política española (que carga 4,858 ataúdes en los hombres del PSOE-PODEMOS a este instante), ni de la inacción anglo americana que ha colocado a USA en el primer lugar de la lista y ha desatado los contagios en Gran Bretaña, mucho menos de la experiencia mejicana que provoca al contagio. Los países del Asia se han enfocado en la identificación, seguimiento y gestión de los datos de contagio para contener la infestación y sus resultados saltan a la vista en el life track coronavirus. En el caso de China, sus medidas permiten mantener los casos en 81,000 hace varios días.

3.- GESTIÓN DE DATOS Y FOCALIZACIÓN DE LA GESTIÓN. Por allí va la cosa. No serán suficientes mascarillas, desinfectantes, kits de pruebas, ventiladores mecánicos, contratar más médicos y profesionales de la salud. Se necesita procesamiento de datos, estadísticas, tecnología de la información y uso y gestión de esa información. Necesitamos programadores, matemáticos y analistas en tanta o mayor cantidad que profesionales de la salud para que, al igual que en el Asia, cada contagiado no sea solamente un número más dentro de la estadística, sino la punta del ovillo que ayude a desenredar este problema.

4.- FRONTERAS CERRADAS.  Parece inevitable tener que mantener cerradas las fronteras una vez concluida la cuarentena hasta que se dispongan de pruebas rápidas de descarte a cada viajero que permitan evitar nuevos contagios de fuente externa. Esta medida obviamente agravará la crisis del turismo, la hotelería, el transporte, la artesanía, la restauración y los servicios conexos, que habrá que asumir, afrontar y mitigar. Habrá quiebras, despidos y deudas impagas, hay que decirlo y no dorar las píldoras. Sólo de la objetividad y franqueza del diagnóstico puede venir la comprensión de la magnitud del problema y la necesidad de medidas adecuadas.

5.- LA FACTURA DEL CORONA VIRUS LA PAGAMOS TODOS. No hay forma de creer que esta factura sólo la pagarán algunos o el Estado. La tenemos que pagar todos. Si sólo la paga el Estado, luego nos la cobra en déficit, más impuestos y menos obras. Si sólo la pagan las empresas, habrá quiebras, menos inversión y a la postre menos empleo. Si sólo le pasamos la cuenta a los trabajadores formales, habrá hambre, desesperación, menos consumo y deudas impagas. Si dejamos que sólo la paguen los que no son parte de la PEA formal y viven del día a día, solo es cuestión de tiempo para ver un estallido social de magnitudes impensadas. La carga se debe distribuir entre todos, con inteligencia y sin demagogia. Todos debemos sentir que estamos cargando esta cruz. La sensación de que sólo unos la cargan puede ser explosiva.

6.- LA MACROECONOMÍA PERMITE ALGUNAS LICENCIAS. Las reservas nacionales obtenidas de 30 años de sensatez económica, los fondos de contingencia obtenidos de impuestos, canon, sobre canon y años de inversión privada y la estabilidad macroeconómica permiten algunas licencias de excepción para afrontar esta crisis. No enfrentamos esta crisis con la economía de 1990 devastada por el populismo económico. Hay espacio entonces para un poco más de audacia en la mitigación de los efectos en los sectores marginales de nuestra población, incluidos nuestros hermanos venezolanos quienes también viven de ingresos de subsistencia, a cuyos médicos, radiólogos, enfermeras hemos marginalizado en lugar de poner en la primera línea de la acción sanitaria del Estado en los lugares más remotos del país.

CIERRE DE LAS FRONTERAS

En el caso peruano, una vez concluida la cuarentena al haberse detenido o por lo menos controlado la infestación, no quedará otro remedio que mantener cerradas las fronteras hasta que se dispongan de pruebas rápidas de descarte a cada viajero que permitan evitar nuevos contagios de fuente externa. Esta medida es inevitable por la incapacidad de nuestro precario sistema sanitario de enfrentar una nueva infestación, no tengamos miedo, es inevitable hacerlo. Controlada la infestación, si abrimos las fronteras, tendremos nuevos brotes que nos obligarán a retroceder y eso el país no lo soportara. Lampadia




Homenaje a uno de los forjadores de Singapur

“Los futuros historiadores se maravillarán de que el único partido que haya montado el tigre comunista y haya acabado comiéndose el tigre, en lugar de ser comido por él, fue el Partido de Acción Popular (PAP) dirigido por Lee Kuan Yew, Goh Keng Swee y usted [Sinnathamby Rajaratnam]. Ustedes tres arriesgaron sus vidas. Pero ustedes creyeron en una causa y estaban listos para sacrificarse por una causa mayor. Eso tomó coraje crudo”.

Con estas palabras, nuestro conocido Kishore Mahbubani, presenta a uno de los tres creadores de Singapur, de quién dice lo inspiró en su desarrollo cívico.

En Lampadia queremos compartir los comentarios de Mahbubani con nuestros lectores, porque encierran lecciones notables de visión, liderazgo y civismo, que los peruanos tenemos ahora la oportunidad de aquilatar y asumir.

Recomendamos muy especialmente la lectura de la carta póstuma de Mahbubanis a S. Rajaratnam:

Carta a S. Rajaratnam, mi mentor y profesor

Rajaratnam luchó por el ideal multirracial de una Malasia malaya después de que Singapur se uniera a Malasia en 1963, incluso cuando la élite malaya estaba decidida a preservar su dominio político. Después del desalojo de Singapur de Malasia en 1965, continuó creyendo en una sociedad que trataba a todas las razas como iguales.

THE STRAITS TIMES
20 de Enero, 2019
Traducido y glosado por Lampadia

En esta carta abierta dirigida a S. Rajaratnam, Kishore Mahbubani describe el impacto que el difunto Ministro de Relaciones Exteriores de Singapur tuvo sobre él.

Estimado Rajaratnam,

Usted ha sido una fuente de inspiración fuerte y silenciosa para mí toda mi vida, empujándome a ir más allá de los límites normales y las zonas de confort en las que nos gustaría envolvernos.

Su enorme coraje político fue la mayor fuente de inspiración. Lo demostró de la manera más feroz cuando asumió la misión virtual imposible de montar el tigre comunista, con sus compañeros políticos, especialmente Lee Kuan Yew y Goh Keng Swee. Esta peligrosa alianza con los comunistas en Singapur fue necesaria en la lucha para liberar a Singapur del dominio colonial británico. Los riesgos eran formidables. Hasta entonces, prácticamente todos los partidos no comunistas que montaban en el tigre comunista terminaron siendo devorados por el tigre.

Usted vio lo que sucedió en Europa del Este en la década de 1950.

  • Nikola Petkov, de Bulgaria, cuyo partido agrario era parte de la coalición del Frente de Patria que incluía al Partido Comunista, fue ejecutado en 1947 después de que los comunistas tomaron el control.
  • En Checoslovaquia, los comunistas habían expulsado a otros partidos del gobierno de coalición en 1948.
  • El Partido Comunista de Hungría liderado por Matyas Rakosi utilizó la “táctica del salami” para deshacerse de los no comunistas en el gobierno de coalición. No es de extrañar que su esposa Piroska, que era húngara, estuviera constantemente preocupada por su seguridad a lo largo de su larga lucha contra los comunistas en Singapur.

Los futuros historiadores se maravillarán de que el único partido que haya montado el tigre comunista y haya acabado comiéndose el tigre, en lugar de ser comido por él, fue el Partido de Acción Popular (PAP) dirigido por Lee Kuan Yew, Goh Keng Swee y usted. Ustedes tres arriesgaron sus vidas. Pero ustedes creyeron en una causa y estaban listos para sacrificarse por una causa mayor. Eso tomó coraje crudo.

CORAJE EN CUBA

El coraje también es contextual. Cuando lo acompañé a asistir a la Cumbre de No Alineados en La Habana, Cuba, en septiembre de 1979, sabíamos que estábamos entrando en una guarida de leones. Fuimos allí para oponernos a la invasión vietnamita de Camboya apoyada por los soviéticos en diciembre de 1978. Los vietnamitas habían instalado un régimen de asedias liderado por Heng Samrin. Castro y Cuba estaban entre los aliados más firmes de la Unión Soviética. Por lo tanto, ignorando todas las reglas de procedimiento, Castro instaló a la delegación de Heng Samrin como el representante legítimo de Camboya. Nosotros protestamos.

Castro ingeniosamente diseñó una pequeña reunión cuando llenó la sala con presidentes y primeros ministros que fueron aliados firmes de la Unión Soviética, como Saddam Hussein, Hafez al-Assad y Muammar Gaddafi. Era solo un humilde ministro de exteriores rodeado de jefes de gobierno. El ambiente en la habitación era francamente intimidante.

Cualquier persona normal hubiera sido intimidada por estar tan superada en armas y superada en número. Sin embargo, ni una sola vez te estremeciste. Luchó como un león y se mantuvo firme, ganándolr el renuente respeto de Fidel Castro y su equipo soviético. Y su coraje dio sus frutos. A pesar de que la delegación de Heng Samrin había sido legitimada en el Movimiento No Alineado de 94 miembros, no logró obtener la sede camboyana de la Asamblea General de la ONU apenas un mes después. Su feroz e implacable coraje en un momento de calor blanco me ha inspirado a pararme de vez en cuando y luchar contra la sabiduría convencional de la época.

LUCHANDO POR EL MULTIRACIALISMO

Usted mostró un coraje similar en la lucha por el ideal multirracial de una Malasia malaya después de que Singapur se uniera a Malasia en 1963. La élite malaya en Malasia estaba decidida a preservar su dominio político. Por lo tanto, el desalojo de Singapur de Malasia en 1965 podría haberse anticipado.

Pero no renunció a la causa. Continuó creyendo en una sociedad que trataba a todas las razas como iguales. Por lo tanto, la contribución más brillante que ha hecho a Singapur es la redacción del Compromiso de Singapur, que captura sus ideas con tanta fuerza:

Nosotros, los ciudadanos de Singapur,
nos comprometemos como un pueblo unido,
independientemente de la raza, idioma o religión,
a construir una sociedad democrática
basada en la justicia y la igualdad.
para alcanzar la felicidad, la prosperidad
y el progreso para nuestra nación.

Es significativo que la palabra “democrática” esté firmemente colocada en el compromiso. Creía que el sistema de un hombre y un voto, a pesar de sus defectos, es básicamente sólido, aunque algunos de sus colegas no estuvieron de acuerdo con usted. Como usted dijo: “Creo en la democracia. Aquí, Kuan Yew y yo no estamos de acuerdo … Lee Kuan Yew dice que no puede confiar en la democracia. Creo que puede y debe hacerlo”.

Lee Kuan Yew podría ser muy contundente e intimidante cuando expresó sus puntos de vista. Sin embargo, nunca dudó de su creencia en la democracia.

Sin embargo, si alguien te hubiera conocido en persona entonces, se habría sorprendido al escuchar esta feroz racha. En persona, nunca fue intimidante. Su temperamento amable y gentil, haciendo que todos a su alrededor se sientan a gusto, fue realmente notable.

Como Mahatma Gandhi, exudaba humildad natural. Nunca se jactó de sus logros, aunque uno de sus cuentos fue seleccionado para ser incluido en el volumen publicado en Nueva York en 1947, titulado Un mundo de grandes historias: 115 historias, Lo mejor de la literatura moderna. Se unió a los gustos de Ernest Hemingway y William Faulkner, F. Scott Fitzgerald y John Steinbeck, en este volumen. El único otro escritor asiático que aparece en este volumen fue el premio Nobel Rabindranath Tagore. Se había unido a la A-League de escritores globales. Sin embargo, en todos los años que estuvimos juntos, desde 1971 hasta 1991, nunca me mencionó esto una vez.

REALISMO GEOPOLÍTICO

Si se despertara hoy, su nariz geopolítica despiadadamente realista también sentiría que ahora estamos experimentando algunos de los cambios geopolíticos más poderosos en la historia humana.

Cuando era un joven de 25 años, apenas tres años después de la universidad, me invitó a mí y a otros funcionarios jóvenes a participar en sus reuniones ministeriales semanales. Parte de la mejor educación que obtuve en geopolítica fue a través de mi participación en estas reuniones semanales. Esta educación continuó cuando me senté con usted en el auto, llevándole desde Kuala Lumpur a visitar a su hermano en Seremban en la década de 1970, y cuando visitó Nueva York, cuando fui Embajador de Singapur en la ONU de 1984 a 1989. Conversaciones con usted fueron una gran alegría, especialmente después de haber comenzado su primer vaso de whisky a la hora del cóctel.

Su implacable realismo se basó en un principio clave: nunca te alejes de la verdad, incluso si esa verdad resulta ser dolorosa e inconveniente. Hubo un punto que nos repitió constantemente: “Nunca me digas lo que crees que quiero escuchar. Siempre dime lo que debo escuchar”.

En nuestras reuniones, daría la bienvenida a puntos de vista contradictorios, incluso disidentes. No repitió el error común de muchos líderes que se rodearon de aduladores. En su lugar, quería escuchar una diversidad real de puntos de vista, incluso si desafiaban la sabiduría convencional del momento o sus puntos de vista.

VISIONES DE CHINA

No hay duda de que le complacería la espectacular recuperación que ha hecho China. Usted fue el primer líder de Singapur en visitar China en marzo de 1975. En su primera visita, cuando visitó a Zhou Enlai, vio de primera mano la pobreza extrema de China. Pekín no tenía coches privados. Sólo bicicletas en la carretera. La gente estaba vestida con una uniformidad monótona. No había rascacielos, ni letreros de neón.

En su cuarta y última visita en 1985, vio a China tomar medidas hacia la modernización con sus zonas económicas especiales en el sur de China. China invitó al Dr. Goh Keng Swee a ser su asesor económico. Usted lo alentó diciendo: “Creo que una China modernizada y próspera que abarque a unas mil millones de personas será una revolución económica que tendrá consecuencias positivas para el mundo”.

Por lo tanto, estaría agradecido de ver a Beijing hoy. Como metrópolis, se parece más a Nueva York, la ciudad número 1 cuando vivía. Los comunistas chinos, contra quienes luchaste en una lucha de vida o muerte en las décadas de 1950 y 1960, se han convertido en uno de los más grandes creyentes en la economía de libre mercado.

De hecho, en algunos aspectos, la economía china se ha vuelto incluso más dinámica que la mayoría de las economías: en pagos móviles, en comercio electrónico, en trenes rápidos e incluso en inteligencia artificial.

PRINCIPIOS PRINCIPALES DE LA POLITICA EXTERIOR

¿Y cómo le habría aconsejado a Singapur tratar con un mundo cuando China se convierta en la economía número uno?

Habría reiterado algunos de los principios básicos de la política exterior de Singapur que defendió poco después de la independencia de Singapur en 1965. Su consejo a los pequeños estados permanece intemporal. Usted dijo: “Cuando un país pequeño como Singapur se alinea con una gran potencia, no hay duda de quién se mantiene en consonancia con sus políticas. En otras palabras, la política exterior de Singapur, si está alineada, se convierte en una mera reproducción de la política exterior de su socio más poderoso”.

Luego agregó: “Una política no alineada, de hecho, nos da mayor libertad para hacer pronunciamientos o adoptar posiciones puramente en cuanto a los méritos, como los vemos, de asuntos internacionales específicos. Por otra parte, una posición alineada nos obliga automáticamente a tomar la posición que nuestro aliado principal y más poderoso asume en cualquier tema importante”.

En resumen, claramente advirtió a Singapur contra convertirse en un aliado o peón de un gran poder. Al mismo tiempo, como dijo Tommy Koh en su elogio: “Él (Raja) era un realista pero no era un fatalista. No creía que los pequeños estados fueran impotentes”.

Tommy Koh también describió bien otro de sus legados: “Una característica de la Escuela de Diplomacia de Singapur es ser realista con respecto al mundo, pero no ser intimidado por algunos estados poderosos”.

Estos principios forjados por usted siguen siendo la base de cómo Singapur lleva a cabo sus relaciones exteriores hasta el día de hoy.

Una de las visitas más inolvidables de mi vida fue cuando lo acompañé en una visita a Moscú en 1976. No podría haber sido una visita fácil para ti. Vietnam, Laos y Camboya habían caído ante los comunistas un año antes. Los líderes soviéticos sabían que Singapur había simpatizado con los esfuerzos estadounidenses para evitar que esto sucediera. Por lo tanto, podríamos haber tenido una recepción fría y hostil en Moscú.

En cambio, me sorprendió la calidez y la amabilidad de los funcionarios soviéticos que nos recibieron. La mesa de desayuno más impresionante que he visto en mi vida fue en la casa de huéspedes oficiales en Moscú. Una mesa de 30 pies de largo y 10 pies de ancho se llenó completamente con comida. Allí también nos reunimos con el entonces legendario ministro de Relaciones Exteriores de la Unión Soviética, el Sr. Andrei Gromyko.

Le dejó en claro que aunque Singapur no era comunista en casa, no era anticomunista en su política exterior. Singapur quería tener buenas relaciones con todas las grandes potencias. Por lo tanto, aunque Singapur dio la bienvenida a los buques de guerra estadounidenses en su puerto, también daría la bienvenida a los buques de guerra soviéticos. Gromyko también fue derribado por tu encanto. Recuerdo bien el consejo que nos dio cuando éramos sus diplomáticos: dijo que teníamos que ser encantadores porque “¿quién hablará con usted si no es encantador? Singapur es un país pequeño”. También nos enseñó a vestirnos bien.

Su nombre quedará grabado en la historia para siempre como uno de los cinco firmantes de la Carta de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN) el 8 de agosto de 1967. Si, como Rip Van Winkle, se despertara hoy, también se sorprendería por el espectacular éxito de la ASEAN. Cuando la firmó, poco sabía que duraría. De hecho, dos de sus predecesores, ASA y Maphilindo, murieron en dos años. En nuestro libro El Milagro Asiático, Jeffery Sng y yo intentamos explicar por qué la ASEAN tuvo éxito. No tengo dudas de que una de las razones por las que la ASEAN no murió de mortalidad infantil en sus primeros años fue porque usted fue el ministro de Relaciones Exteriores de Singapur durante este período. Su manera tranquila, modesta y sin pretensiones establece el tono para las discusiones amistosas entre los estados antipáticos del sudeste asiático. También imbuyó a la ASEAN con una profunda cultura de pragmatismo que ha resistido la prueba del tiempo.

Esta cultura del pragmatismo en la política exterior de Singapur, que trata con el mundo real tal como es, y no con el mundo que deseamos tener, ha sido uno de sus mayores regalos para Singapur. Es una cultura de pragmatismo que también fue compartida por los otros dos padres fundadores clave de Singapur, Lee Kuan Yew y Goh Keng Swee. La simple razón por la que Singapur ha sido la nación pequeña más exitosa desde que comenzó la historia de la humanidad (como documenté en un ensayo para el Huffington Post en agosto de 2015) es que Singapur, en su independencia en 1965, no fue liderado por uno sino por tres excepcionales y líderes dotados. Este fue el resultado de un extraordinario accidente de la historia.

Ustedes tres no podrían haber sido más diferentes en temperamento. Lee Kuan Yew, un brillante pensador y peleador, fue feroz e intimidante. Goh Keng Swee, un brillante pensador que hablaba abiertamente, también era feroz e intimidante. También fuiste un pensador brillante pero no intimidante, incluso después de que pronunciaste un discurso feroz y contundente.

DAVID MARSHALL

De hecho, incluso fuiste amable con tus enemigos políticos. Uno de los hechos poco conocidos sobre Singapur es que, aunque es un estado de mayoría china, su primer ministro principal fue un hombre de origen judío-iraquí, David Marshall. Marshall se había opuesto ferozmente a su partido político, el PAP. Es una rivalidad que se remonta décadas. Nos has contado una historia muy divertida sobre uno de los primeros encuentros que tuvo con David Marshall en la década de 1950:

“Y así nos dio una cena, una de las cenas más suntuosas. Era un hombre muy generoso. Había muchas cosas para comer. ¡Vinos tintos muy caros! Estábamos comiendo, y él trató de persuadirnos para que nos uniéramos a su grupo, llamado el Frente Laborista. Y disfrutamos de nosotros mismos, aprovechamos su cena muy costosa, una cena muy cara, y luego comenzamos a explicar sin rodeos por qué no podíamos unirnos al Frente Laborista. En broma, dijimos, ‘Porque Lee Kuan Yew es abogado, y David Marshall también es abogado. Pero un tipo diferente de abogado. Eso irritó a David Marshall, y él solo dijo: ‘No quiero hablar con ustedes, me voy a casa’. Salió, se subió a su auto y nunca se dio la vuelta. Nos miramos el uno al otro, Kuan Yew y yo, y dijimos, bueno, ya que la cena está aquí, disfrutémosla. Había vino tinto allí, y ¡se empapó!”

Sin embargo, a pesar de esta larga rivalidad con él, invitó a David Marshall a su oficina el 19 de mayo de 1978. David me dijo que pensaba que lo había invitado porque lo quería, como abogado, redactar su testamento. En cambio, ante el asombro absoluto de David, lo invitó a convertirse en el Embajador de Singapur en Francia. Como Lee Kuan Yew observó acerca de ti, “Raja no guardaba rencor contra los viejos oponentes y no mostraba animosidades permanentes”. Sólo las grandes almas tienen esta capacidad de gran perdón.

Es igualmente sorprendente que, incluso después de haber servido como viceprimer ministro de Singapur y haber cenado con los líderes más grandes del mundo, nunca perdió su toque común. Para usted, la creencia en el socialismo, con el deseo inherente de mejorar la suerte de sus semejantes, no fue una creencia abstracta. Estaba profundamente arraigada en su alma y personalidad. Viste a todos los seres humanos teniendo igual valor moral. Y trataste a todos y cada uno con igual amabilidad y generosidad.

Si nuestro mundo pudiera producir más líderes como usted, no hay duda de que la humanidad estaría mucho mejor. Gracias por ser un gran ejemplo en mi vida. Lampadia

Kishore Mahbubani es asesor senior (universidad y relaciones globales) y profesor en la práctica de políticas públicas en la Universidad Nacional de Singapur. Sirvió durante 33 años en el servicio diplomático de Singapur.

Este artículo está extraído de un ensayo más largo escrito para el número de diciembre de 2018 de Nexus, la revista del Instituto Nexus con sede en los Países Bajos.




Tenemos que reformar nuestro sistema educativo

Tenemos que reformar nuestro sistema educativo

En tan solo cinco décadas, Singapur pasó de ser una de las naciones más pobres y subdesarrolladas del planeta a una próspera, industrializada y moderna. Hoy Singapur tiene:

  • El mayor PBI per cápita
  • La mejor educación
  • Un Estado meritocrático
  • Los mejores funcionarios públicos, altamente remunerados
  • Los más altos índices de seguridad interna
  • Una cultura pro-desarrollo

Su exitoso modelo educativo es admirado en todo el mundo. En 2017, obtuvieron el primer puesto en el ranking mundial de escuelas, con los resultados basados ​​en matemáticas y ciencia. Sus estudiantes brillan en los primeros puestos de las pruebas internacionales de educación más exigentes, como las PISA, de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

En el siguiente artículo de The Economist se plantean 3 enseñanzas que podemos rescatar y utilizar en nuestro país para aprender del modelo de Singapur:

  1. Singapur trata de ver el sistema como un todo. Invierte fuertemente en la investigación educativa. Todas las reformas se prueban y los resultados se monitorean diligentemente antes de implementarse.
  2. Hace hincapié en un plan de estudios más restringido, pero más profundo, y busca garantizar que toda la clase progrese a través del plan de estudios.
  3. Se enfoca en desarrollar excelentes profesores. Para ellos es mejor tener grandes clases impartidas por profesores excelentes que más pequeñas dictadas por mediocres. Los profesores también están sujetos a rigurosas evaluaciones de desempeño anuales.

Con estas tres enseñanzas, que son fácilmente aplicables al Perú, queremos difundir su impacto positivo en los alumnos singapurenses. Lamentablemente muchos países son reacios a aprender la lección de Singapur. Según The Economist, “una razón es que Singapur favorece la pedagogía tradicional, con los profesores liderando la clase. Eso contrasta con la preferencia de muchos reformadores educativos por una enseñanza más flexible y más ‘progresiva’, con la intención de alentar a los niños a aprender por sí mismos”.

En Lampadia venimos insistiendo para que nuestra sociedad entienda que en educación necesitamos emprender una verdadera revolución. No podemos seguir teniendo una educación para el siglo XX, basada en currículos obsoletos (a pesar de ser de muy reciente diseño), centrada en el rol educador del maestro y no en el importante rol de facilitador. Tenemos que enseñar por proyectos que interrelacionen los conocimientos y reforzar el entrenamiento en capacidades blandas.

Insistimos en la necesidad de desarrollar un Pacto Social por la Educación’.

No es aceptable que los peruanos no tengamos claridad sobre lo que se necesita y que sigamos convalidando el error. ¡Revolución Educativa Ahora! Lampadia

Se permite copiar
Lo que otros países pueden aprender de los colegios de Singapur

Los rigurosos métodos de enseñanza y excelentes profesores mantienen al estado-isla como el mejor sistema educativo

The Economist
30 de agosto, 2018
Traducido y glosado por Lampadia

Cuando la isla de Singapur se convirtió en un país independiente en 1965, tenía pocos amigos y aún menos recursos naturales. Entonces, ¿cómo se convirtió en uno de los mejores centros de comercio y financieros del mundo? La estrategia, explicó Lee Kuan Yew, su primer primer ministro, fue “desarrollar el único recurso natural disponible en Singapur: su gente”.

Hoy, el sistema educativo de Singapur se considera el mejor del mundo.

  • El país ocupa constantemente el primer puesto en el Programa de Evaluación Internacional de Estudiantes (PISA) de la OCDE, una prueba trienal (cada tres años) de jóvenes de 15 años en docenas de países, en las tres categorías principales: matemáticas, lectura y ciencias.
  • Los alumnos singapurenses están aproximadamente tres años por delante de sus pares estadounidenses en matemáticas.
  • Singapur también obtiene los mismos resultados en los exámenes de niños más pequeños, y los graduados de sus mejores colegios se encuentran estudiando en las mejores universidades del mundo.

La isla-estado tiene mucho que enseñarle al mundo. Pero los otros países son alumnos reacios a aprender la lección de Singapur. Una razón es que Singapur favorece la pedagogía tradicional, con los profesores liderando la clase. Eso contrasta con la preferencia de muchos reformadores educativos por una enseñanza más flexible y más “progresiva”, con la intención de alentar a los niños a aprender por sí mismos. Aunque los estudios internacionales sugieren que la instrucción directa es una buena forma de transmitir el conocimiento, los críticos sostienen que Singapur tiene un modelo de “taladrar hasta matar” que convierte las clases en calabozos que enseñan matemáticas de manera poco creativa y miserable. Los padres se preocupan por el estrés que el sistema les pone a sus hijos (y también el estrés a ellos, ya que la mayoría lleva a sus hijos a clases particulares).

Sin embargo, Singapur muestra que la brillantez académica no tiene que venir a expensas de las habilidades personales.

  • En 2015, los estudiantes de Singapur también ocuparon el primer lugar en una nueva clasificación de PISA diseñada para analizar la resolución de problemas en colaboración, obteniendo puntajes incluso mejores que en lectura y ciencias.
  • También informaron que los alumnos estaban contentos, más que los niños en Finlandia, por ejemplo, un país que los educadores consideran como un ejemplo de cómo lograr resultados excepcionales con métodos de enseñanza más acérrimos.
  • No conforme con sus logros, Singapur está introduciendo reformas para mejorar la creatividad y reducir el estrés. Esto no es una señal de fracaso, sino más bien de un enfoque gradual y orientado a la evidencia de la reforma educativa, la primera de tres lecciones que Singapur ofrece al resto del mundo.

Mientras que otros países suelen promulgar reformas fragmentarias y descoordinadas, Singapur trata de ver el sistema como un todo. Invierte fuertemente en la investigación educativa. Todas las reformas se prueban y los resultados se monitorean diligentemente antes de implementarse. Se presta mucha atención a la forma en que deben aplicarse las nuevas ideas y los resultados en los colegios. Los libros de texto, las hojas de trabajo y los ejemplos prácticos son elaborados con cuidado (prácticas que, a menudo, se consideran obsoletas en Occidente) y se utilizan para brindar experiencia en las clases. El resultado es una buena alineación entre las evaluaciones, la responsabilidad y los estilos de enseñanza.

La segunda lección es apoyar el enfoque distintivo de Singapur para la enseñanza, especialmente de las matemáticas, algo que EEUU e Inglaterra ya están haciendo hasta cierto punto. Hace hincapié en un plan de estudios más restringido, pero más profundo, y busca garantizar que toda la clase progrese a través del plan de estudios. A los alumnos con dificultades se les brindan clases adicionales obligatorias para ayudarlos a mantenerse al día; incluso los menos capaces lo hacen comparativamente bien. Un análisis en 2016 en Inglaterra encontró que el enfoque de Singapur impulsó mejoras en los resultados, aunque fue algo diluido en la transición.

La tercera y más importante lección es enfocarse en desarrollar excelentes profesores.

  • Reciben 100 horas de capacitación al año para mantenerse al día con las últimas técnicas.
  • El gobierno también les paga bien.
  • Acepta la necesidad de clases más grandes (el promedio es de 36 alumnos, en comparación con 24 en la OCDE). Mejor, según el razonamiento, tener grandes clases impartidas por profesores excelentes que más pequeñas dictadas por mediocres.
  • Los profesores que desean más prestigio, pero no las cargas burocráticas de dirigir las escuelas pueden convertirse en “profesores de profesores”, con la responsabilidad de capacitar a sus pares.
  • Los mejores profesores reciben publicaciones en el ministerio de educación y grandes bonificaciones: en general, a los profesores se les paga lo mismo que a sus pares en las profesiones del sector privado.
  • Los profesores también están sujetos a rigurosas evaluaciones de desempeño anuales.

Clase perdida

El sistema no es perfecto. Otros países tal vez deseen evitar la división que hace Singapur de los estudiantes de alto y bajo rendimiento en colegios. Los beneficios de hacerlo no están comprobados y contribuyen al estrés sobre los exámenes. El tamaño de Singapur, además, permite un grado inusual de centralización. El director general del ministerio de educación dice que conoce a más del 80% de los directores por su nombre, lo que hace que sea más fácil controlar lo que está sucediendo. En la mayoría de los países, los sindicatos de docentes y los padres de familia son resistentes a las clases grandes, por ejemplo. Es una pena. La educación sería mucho mejor si más países copiaran la tarea de Singapur. Lampadia




Alianza del Pacífico suma cuatro estrellas globales

La XII Cumbre de la Alianza del Pacífico cerró con el anuncio del Presidente de México, Enrique Peña Nieto, quién en nombre de sus pares, los presidentes de Chile, Colombia y Perú, confirmó la incorporación Singapur, Australia, Nueva Zelanda y Canadá como “Estados Asociados” de la alianza.

La figura de “Estado Asociado” introduce un nuevo mecanismo de integración a la alianza. En opinión de Lampadia, esto no solo permitirá la ampliación de las relaciones económicas con cuatro países que ostentan magníficos estándares de desarrollo, también permitirá que al mantener un contacto más estrecho con estos países, podamos adoptar mejores políticas públicas en aspectos económicos, sociales e institucionales.

Punto 3 de la Declaración de Cali

Nuestro beneplácito por el anuncio del inicio de las negociaciones encaminadas a otorgar a Australia, Canadá, Nueva Zelandia y Singapur la condición de Estado Asociado a la Alianza del Pacífico mediante la celebración y puesta en vigor de acuerdos con altos estándares de calidad en materia de disciplinas comerciales. De esta manera avanzamos en la consecución de los objetivos fundacionales de la Alianza del Pacífico de fomentar un esquema de integración estratégica, que impulse el desarrollo económico y la competitividad de nuestras economías. 


En el caso de México y Canadá, estas negociaciones se realizarán sin perjuicio de la vigencia y funcionamiento del TLCAN del que ambos países son parte.

Fuente: entornointeligente.com

Estos avances tienen como objetivo construir un área de integración profunda para avanzar progresivamente hacia la “libre circulación de bienes, servicios, capitales y personas”; impulsar un mayor crecimiento, desarrollo económico y competitividad de las economías de sus integrantes; y convertirse en una plataforma de articulación política, integración económica y comercial, y proyección al mundo, con énfasis en la región Asia-Pacífico.

https://alianzapacifico.net/wp-content/uploads/2017/06/fc54f195-2d03-4116-b7a9-a4e1e5795147-1.jpg

Fuente:  alianzapacifico.net

Acompañado por sus homólogos de Chile, Michelle Bachelet; de Colombia, Juan Manuel Santos, y Perú, Pedro Pablo Kuczynski, el presidente de México recalcó que la Alianza del Pacífico ha demostrado que la integración “no es una simple aspiración, sino un proyecto que empieza a hacerse realidad”. Al concluir la Cumbre con la firma de la Declaración de Cali, los países miembros anunciaron que el 5 de septiembre, en Lima, Perú, se definirán los términos de la negociación que se llevará a cabo para el ingreso de los “Estados Asociados” a la alianza.

Image result for estados asociados alianza del pacifico

Fuente: elcolombiano.com

Con estos acuerdos se podría elevar el mercado de la Alianza del Pacífico de 200 millones a 300 millones de consumidores. Como afirmó Peña Nieto: “Ello permitirá que se generen más inversiones, se potencie el turismo que se da entre los países que integramos esta alianza, y que se generen oportunidades de empleo en nuestras sociedades a partir de la inversión”. Entre sus mayores ventajas serían:

  • Generar mayores inversiones.
  • Ampliar los mercados.
  • Reafirmar los objetivos de apertura, libre comercio y oportunidades de desarrollo.
  • Propiciar mayores espacios para los emprendedores.

En nuestra opinión, este desarrollo de la alianza, que vincula al Perú con países que en los últimos 50 años han logrado muy buenas condiciones de vida para sus pobladores y economías sólidas, puede ser aprovechado con grandes beneficios para nosotros, empezando por dar a conocer a nuestros ciudadanos, sus políticas públicas y sus estrategias de desarrollo.

Veamos algunas cifras de los países de la alianza y de los futuros Estados Asociados:

Ver la Declaración de Cali en Documentos: Declaración de Presidentes XII Cumbre de la Alianza del Pacífico.

Figurativamente, la incorporación de Singapur, Nueva Zelanda, Australia y Canadá a la alianza, equivale a incluir a la selección de futbol del Perú, a astros como Lionel Messi, Cristiano Ronaldo, Neymar, Bastian Schweinsteiger y Wayne Rooney.

“El escenario internacional nos ha puesto nuevos desafíos. Frente a esto hemos asumido un compromiso con la integración”, se afirmó en la Cumbre. Con la incorporación de estos nuevos socios, se abren posibilidades en otras partes del mundo y, además, resalta la importancia del libre comercio y la movilidad son algunos de los ejes de la cumbre. Lampadia




EEUU debería aliarse con China

Hasta hace poco, cuando se hablaba de la relación del Asia con occidente, o de China con EEUU, ésta se refería al crecimiento de China y su eventual primer lugar en la economía global. A esos pensamientos y análisis, hay que sumarle hoy día la evolución política reciente, que lleva a EEUU a alejarse del libre comercio, y a China, a pretender liderarlo. Este proceso ya no se puede entender desde el punto de vista de la retórica occidental. Si el liderazgo económico y político se mueve al Asia, debemos escuchar a los líderes intelectuales del Este.

Fuente: t3mexico.mx

Por eso, en Lampadia seguimos muy de cerca las opiniones de líderes del Este como Kishore Mahbubani, representante permanente de Singapur ante las Naciones Unidas (1971-2004), y actual decano de la Escuela de Políticas Públicas Lee Kuan Yew de la Universidad Nacional de Singapur, uno de los intelectuales más representativos del pensamiento asiático. Mahbubani siempre ha mantenido su posición de sumar y de tener una mayor sensatez en el manejo de decisiones que tengan impacto global, abogando por la necesidad de que la geopolítica global vaya tendiendo hacia la convergencia entre occidente y oriente, tema que analizó a fondo en sus libros “The New Asian Hemisphere” (El Nuevo Hemisferio Asiático) y The Great Convergence (La Gran Convergencia).

Mahbubani, ante todo, defiende los beneficios de la globalización: “La globalización no ha fallado. Todas las discusiones sobre la globalización están distorsionadas porque los analistas occidentales se centran en aproximadamente el 15 % de la población mundial que vive en Occidente. Ignoran el 85 % que son el resto. Los últimos 30 años de la historia humana han sido los mejores 30 años que los demás han disfrutado”.

Lo que Mahbubani afirma es que vivimos en un mundo interconectado. Si nuestra prioridad es restaurar el crecimiento económico, China debería tener interés en que la economía estadounidense fuera sólida y próspera (y viceversa). Es vital hacer hincapié en que la interdependencia global no sólo aumenta el ámbito económico, sino también en nuestra lucha para combatir el calentamiento global, las pandemias y los ataque del Estado Islámico.

Su propuesta es que haya una asociación de China y Estados Unidos para llevar a cabo obras de infraestructura, que en su opinión sería la unión perfecta. Estados Unidos necesita nuevas infraestructuras; la Sociedad Estadounidense de Ingenieros Civiles ha calculado una brecha de financiación de 1.44 mil millones de dólares en Estados Unidos entre el año 2016 y 2025, y advierte de una carga cada vez mayor en la actividad empresarial, las exportaciones y los ingresos. China tiene la capacidad financiera e ingenieril para construir este tipo de infraestructuras.

Fuente: blog.becool

Lo que el mundo necesita son proyectos de cooperación concretos que produzcan puestos de trabajo y beneficios. Como recalca Mahbubani, en la cumbre “One Belt, One Road”, Xi Jinping dijo, “El comercio es un motor importante que impulsa el crecimiento. Deberíamos aceptar al mundo exterior con una mente abierta, defender el régimen comercial multilateral, avanzar en la construcción de áreas de libre comercio y promover la liberalización y la facilitación del comercio y la inversión”.

Fuente:  tenacarlos.files.wordpress.com

Eso es exactamente a lo que ambos países deben dirigirse: hacia la convergencia. Lo que se necesita es un verdadero compromiso global. Esto implica que ningún país establezca la agenda mundial y que la gobernabilidad se vuelva más difusa. Esto crea un “orden” mundial multipolar, donde el control de los recursos se concentra en diferentes centros de poder, cuyo peso económico se ve reforzado por los acuerdos comerciales intra-regionales. Lampadia

El hecho que EEUU todavía sea incapaz de admitir que se convertirá en # 2 después de China es un problema

Esto es parcialmente la razón por la que Trump llegó al poder, dice Kishore Mahbubani

Por Nathan Gardels
Publicado en El WorldPost
02 de junio 2017
Traducido y glosado por
Lampadia

Fuente: www.singlitstation.com/

Kishore Mahbubani ex Embajador de Singapur en las Naciones Unidas, y actualmente decano y profesor de política pública en la Escuela Lee Kuan Yew de la Universidad Nacional de Singapur. Habló con The WorldPost de Singapur en una entrevista de gran alcance sobre la globalización, la inmigración, el ascenso de China, el presidente de los Estados Unidos Donald Trump y el Brexit.

A pesar de todos sus beneficios, ¿en qué grupos electorales nacionales clave ha fracasado la globalización y por qué?

La globalización no ha fallado. Todas las discusiones sobre la globalización están distorsionadas porque los analistas occidentales se centran en aproximadamente el 15 % de la población mundial que vive en Occidente. Ignoran el 85 % que son el resto. Los últimos 30 años de la historia humana han sido los mejores 30 años que los demás han disfrutado. ¿Por qué? La respuesta es la globalización. El ascenso de la clase media en Asia ha generado riqueza, fe en la posibilidad de instituciones internacionales justas y un sistema estabilizador basado en reglas que beneficie a la mayoría de la humanidad.

Entonces, ¿por qué hay una percepción de que la globalización ha fracasado? La respuesta simple es que las élites occidentales que disfrutaron de los frutos de la globalización no los compartieron con sus masas occidentales. Peor aún, no prepararon a sus poblaciones para el cambio causado por la extensión de la globalización. En un próximo libro, explico cómo Trump y Brexit son el resultado de este fracaso. En él, escribo:

En lugar de reaccionar pensativa e inteligentemente [al atentado del 11 de septiembre de 2001], la hubris intelectual predominante condujo a la desastrosa decisión de invadir Irak. EEUU tiene las mejores universidades del mundo y think tanks, así como los profesores y expertos más influyentes a nivel mundial. Sin embargo, ninguno de ellos dijo a sus conciudadanos que el evento más importante en 2001 no era el 11 de septiembre. Fue la entrada de China en la Organización Mundial del Comercio. La entrada de casi mil millones de trabajadores en el sistema comercial mundial obviamente daría como resultado una “destrucción creativa” masiva y la pérdida de muchos puestos de trabajo en Occidente.

Esto, para cortar una larga historia, fue una de las principales razones por las que, 15 años después, ocurrieron eventos como Trump y Brexit en 2016. Las poblaciones de la clase trabajadora podían sentir directamente lo que sus élites no podían sentir. Sus vidas estaban siendo interrumpidas por cambios fundamentales que tenían lugar en el orden mundial y sus líderes no habían hecho nada para explicarles lo que estaba sucediendo o para mitigar el daño.

Ante esto, hay una solución. Necesitamos líderes honestos y valientes en Occidente que digan a sus poblaciones las duras verdades, como hizo Lee Kuan Yew aquí en Singapur. Occidente, EEUU y Europa, sin duda pueden competir. Sin embargo, tienen que hacer ajustes importantes. Por ejemplo, no más de 35 horas semanales en Francia; no más subvenciones agrícolas en Europa; no más beneficios de pensiones toda la vida después de 55. Ese es el mensaje.

Sin fronteras que afirmen la afinidad cultural, los muros están aumentando a medida que las personas sienten que sus identidades están amenazadas. ¿Cómo pueden los líderes políticos y los partidos responder a las preocupaciones sobre la inmigración sin cerrar sus sociedades?

Es absolutamente cierto que la globalización ha desafiado las identidades culturales. Esto también explica Trump y Brexit. EEUU quiere seguir siendo un país anglosajón, no un país bilingüe con igual espacio para la población de habla hispana del sur de la frontera. Los británicos quieren ver un país anglosajón, no uno con inmigrantes polacos y musulmanes. Una de las columnas más chocantes que he leído en mi vida fue una columna de un liberal de toda la vida, Martin Wolf del Financial Times, que se opone al multiculturalismo. Incluso quería girar el reloj hacia atrás.

Pero no puedes girar el reloj hacia atrás. Con el fin de la era de la dominación occidental, nos estamos moviendo de un mundo mono-cultural dominado por Occidente a un mundo multi- cultural. Esto es tan obvio. Sin embargo, no puedo encontrar un solo político occidental que esté dispuesto a declarar lo obvio. Esta es la razón por la cual las poblaciones occidentales están confundidas. No han comprendido que en esta nueva era de la historia mundial, tienen que aceptar el multiculturalismo, incluso en casa.

Para ser justos, no son sólo las sociedades occidentales las que se enfrentan a este desafío. Singapur tuvo un momento Brexit en 2011. Una de las razones por las que George Yeo, ministro de Relaciones Exteriores de Singapur en ese momento, perdió su escaño parlamentario en las elecciones de 2011 es porque hubo una reacción contra los inmigrantes en Singapur. En un esfuerzo por impulsar el crecimiento económico, el gobierno trajo demasiados migrantes demasiado rápido. Aprendió su lección rápidamente. En resumen, cada sociedad tendrá que encontrar el equilibrio natural entre la reducción de los migrantes para proteger la identidad cultural y el aumento de los migrantes para promover el crecimiento económico. Una buena gestión política puede resolver esto.

Ahora que Estados Unidos ha renunciado al papel de liderazgo global que ha desempeñado durante décadas, China todavía es incapaz o reacia a llenar el vacío y Europa está enfrentando la agitación interna sobre su propia integración, ¿qué formas de cooperación global pueden impedir el retorno a una era de esferas de influencia?

Bill Clinton le dio en el clavo en un discurso que dio en Yale en 2003:

Si crees que mantener el poder y el control y la absoluta libertad de movimiento y soberanía es importante para el futuro de tu país, no hay nada inconsistente en [que EEUU siga actuando unilateralmente]. [Los Estados Unidos es] el país más grande y poderoso del mundo. … Pero si crees que deberíamos estar tratando de crear un mundo con reglas, asociaciones y hábitos de conducta con los que nos gustaría vivir cuando ya no seamos la superpotencia económica y política militar en el mundo, no harías eso. Sólo depende de lo que creas.

A medida que Estados Unidos avanza a ser el país número dos del mundo (y esto es inevitable), debe abandonar sus políticas destructivas de unilateralismo e iniciar una nueva era de políticas constructivas de multilateralismo. Es así de simple. Desafortunadamente, ningún líder estadounidense tiene el coraje de defender el multilateralismo. La raíz de muchos de los problemas en Occidente es la cobardía política de primer orden.

No habrá retorno a esferas de influencia exclusivas. Cada región tendrá múltiples opciones. América Latina ya no puede estar sujeta a la doctrina de Monroe. Los vínculos comerciales e inversionistas de China con América Latina serán tan grandes como los de los Estados Unidos. África recibirá muchos pretendientes, entre ellos China e India, Europa y Japón. La desaparición de las esferas exclusivas de influencia es el resultado de la creciente globalización y la consiguiente realidad de vivir en un mundo interdependiente pequeño.

El presidente de China, Xi Jinping, dijo que “la tecnología es el nuevo campo de batalla económico” y se comprometió a cambiar la economía china del modelo de exportación hacia el consumo interno y la producción con su programa ‘internet-plus’ llamado “Made in China 2025”, que busca la innovación tecnológica mundial. China también está expandiendo los lazos comerciales regionales y empujando hacia fuera la estrategia del lema “un cinturón, un camino” para conectar los mercados desde Pekín hasta Estambul. Por el contrario, la política de “América Primero” de Trump ha sido llamada “Made in America 1955” por los críticos, ya que busca proteger los mercados de manufactura industrial. También se ha comprometido a retirar los acuerdos comerciales mundiales. ¿Cómo podrían estas dos estrategias complementarse en lugar de crear un conflicto entre sí?

Una asociación económica entre EEUU y China es un matrimonio hecho en el cielo. EEUU es rico en tecnología, tiene una clase media opulenta (a pesar del reciente estancamiento) y tiene una necesidad desesperada de nuevas infraestructuras. China es rica en capital y ha desarrollado capacidades de construcción de infraestructuras de clase mundial. Si Estados Unidos y China fueran dos empresas, en lugar de dos países, forjarían entre ellos, naturalmente, una asociación económica. Desafortunadamente, son países, no empresas. Por eso los juegos geopolíticos de suma cero evitan la cooperación económica natural positiva que debería suceder.

La mayoría de los estadounidenses piensan que China es el jugador irracional e ilógico de la ecuación entre Estados Unidos y China. Para ser absolutamente justo y objetivo, China es racional y predecible. América no lo es. El sentido común a menudo no prevalece en el discurso político estadounidense. Cualquier político estadounidense que incluso se atreva a sugerir que sería lógico forjar una nueva asociación de infraestructuras entre Estados Unidos y China sería rechazado de inmediato. La gran pregunta es por lo tanto: ¿puede Estados Unidos ser racional con China?

¿Qué puentes pueden ser construidos para prevenir la hostilidad o incluso el conflicto directo entre Estados Unidos y China, las dos economías más grandes del mundo?

Una nueva asociación de infraestructuras entre Estados Unidos y China es el mejor puente a construir entre los dos países. Al mismo tiempo, todos los puntos fuertes y positivos actuales en la relación deben ser sostenidos. Estados Unidos puede seguir siendo un importante mercado para los productos chinos. China debe seguir enviando cientos de miles de jóvenes chinos a estudiar en universidades estadounidenses. Ambos deben colaborar también en cuestiones geopolíticas, como Corea del Norte.

El reciente acuerdo comercial entre Estados Unidos y China fue una gran ventaja. También lo fue la decisión estadounidense de actualizar su delegación a la cumbre “One Belt, One Road” en Beijing. Si Estados Unidos quiere ser realmente astuto, debe aprovechar las muchas oportunidades de negocios que ofrecerá la iniciativa “One Belt, One Road”. El pragmatismo y el sentido común debería reemplazar la ideología y el orgullo en el pensamiento americano de China.

Asombrosamente, China ahora está hablando el lenguaje de la mayoría de los líderes americanos. En la cumbre, Xi Jinping dijo, “El comercio es un motor importante que impulsa el crecimiento. Deberíamos aceptar al mundo exterior con una mente abierta, defender el régimen comercial multilateral, avanzar en la construcción de áreas de libre comercio y promover la liberalización y la facilitación del comercio y la inversión”. Seguramente cualquier líder estadounidense sensato estaría de acuerdo con cada palabra en esta declaración.

En general, ¿cómo se puede conciliar el imperativo de la cooperación global con la narrativa política ganadora articulada tan claramente por Trump, quien ha dicho, “no hay tal cosa como un himno global, una moneda global o una bandera global”?

La gran pregunta es si los líderes nacionalistas como Trump demuestran un profundo entendimiento del pequeño mundo integrado que se viene o si reflejan un intento de última hora de dos líderes para recrear glorias históricas que han desaparecido hace tiempo. Cuando Trump dice consistentemente que quiere “volver a hacer grande a América”, muestra que está conduciendo a Estados Unidos hacia el futuro mirando en el espejo retrovisor. Ninguna nueva política con visión de futuro será posible bajo Trump. Sin embargo, el péndulo político volverá a oscilar en los Estados Unidos – al igual que Stephen Harper fue reemplazado por Justin Trudeau en Canadá y Francois Hollande fue reemplazado por Emmanuel Macron en Francia, lo mismo podría suceder en EEUU. Debemos ser pacientes y esperar el cambio.

El resultado paradójico de Brexit es que el Reino Unido tendrá que reconstruir sus vínculos económicos con el resto del mundo y buscar nuevos mercados mundiales para reemplazar las oportunidades económicas perdidas en la UE. Por lo tanto, la primera ministra británica Theresa May, a pesar de sus esfuerzos por reconstruir una fuerte identidad británica, terminará creando una Gran Bretaña que es más globalizada que la Gran Bretaña que era miembro de la Unión Europea. La necesidad de desarrollar un compromiso económico más fuerte con el resto del mundo llevará a una calma necesaria de la retórica nacionalista. Con el tiempo, GB también podría producir una figura como Trudeau o Macron. Lampadia

 




¿Cuáles son los países más ricos del mundo?

Recientemente el Global Finance Magazine publicó la lista de los países más ricos del mundo, basada en información del Fondo Monetario Internacional. La lista de los 30 países más ricos está compuesta mayormente por naciones pequeñas.

¿Cómo se calcula la riqueza de un país? Mediante el PBI o Producto Bruto Interno, que a su vez, se calcula en base al valor de todos los bienes y servicios producidos por un  país, expresado en dólares internacionales, en función de la paridad del poder adquisitivo (PPA) per cápita.

Como ilustración, la cifra comparable del Perú es de $ 13,019 (al 2016).

Entre los resultados más interesantes tenemos que los países pequeños ocupan los 12 primeros lugares del ranking.

Singapur, en el puesto 4, un modelo de desarrollo que hemos presentado varias veces en Lampadia, una ciudad-estado que destaca en cuanto a meritocracia, Estado de Derecho, gobernanza y economía globalizada. Ver en Lampadia: 10 razones que explican el éxito de Singapur, Singapur piensa y planea su futuro y El verdadero modelo de Singapur.

Otro país interesante a analizar es Noruega. Como el principal productor de petróleo y gas de Europa Occidental. Un país que en el Perú, los profesores de economía de la PUCP calificarían como primario exportador, tiene uno de los mejores niveles de vida del planeta, pues supo maximizar su producción primaria para convertirla en desarrollo integral. Ver en Lampadia: Exitoso modelo que aprovecha sus RRNN.

Una de las relaciones más interesantes que se pueden observar es la del binomio de globalización y riqueza, la cual muestra la relación directa que existe entre el grado de apertura de los países al mundo con su crecimiento económico.

Como se puede ver en el gráfico superior, de los 10 países, 8 aparecen dentro de los más ricos del mundo, según el Índice de Globalización 2017 (IG), que desde hace muchos años realiza el think tank suizo KOF Swiss Economic Institute. En el tope está Holanda, con un indicador de globalización de 92.8. Lo siguen Irlanda (92.1), Bélgica (91.7), Austria (90.1), Suiza (88.8), Dinamarca (88.4), Suecia (88), Reino Unido (87.3), Francia (87.2) y Hungría (86.6).

El estudio calcula cuán “globalizado” es un país a partir de una combinación de datos estadísticos: económicos (grado de apertura comercial y de inversiones extranjeras), social (turismo internacional y proporción de inmigrantes) y político (participación en organismos internacionales y tratados con otros países).

Y es que el libre comercio, la más clara expresión de la globalización económica de las últimas décadas, produjo grandes avances de la humanidad en términos de reducción de la pobreza y de la desigualdad globales, la mortalidad infantil, el aumento de la esperanza de vida, la emergencia de una clase media global y el crecimiento de la población mundial al doble de lo que fue hace pocas décadas, con mejor calidad de vida, salud e ingresos. Ver en Lampadia: El libre comercio benefició a los países emergentes.

En palabras de Bjorn Lomborg (Director del Concenso de Copenhague), “Los beneficios del libre comercio, siendo muy importantes, no son tan obvios. Los consumidores obtienen una variedad mayor de bienes a menor precio: se estima que el estadounidense de clase media típico deriva del comercio internacional un 29% de su poder adquisitivo; es decir, puede comprar un 29% más con cada dólar que si no hubiera comercio internacional. El efecto es aún mayor (62%) para el decil más pobre de los consumidores estadounidenses. (…) La oposición al libre comercio ignora la interconexión del mundo en que vivimos. Según un informe de la ONU publicado en 2013, un 80% del comercio internacional se produce a lo largo de las cadenas de suministro de las empresas transnacionales.”

Este tema es especialmente relevante para el Perú, pues, para empezar, acá  algunos despistados políticos y economistas están en contra  con la apertura comercial. Ver en Lampadia: Porqué el populismo le está ganando a los liberales.

En América Latina y el Caribe, el más globalizado es Chile, que ocupa el puesto 40° a nivel mundial. Lo siguen Uruguay (55º), República Dominicana (59º), Perú (60º) y Panamá (62º).

Los resultados son claros: a medida que los países suben en el nivel de globalización, también crece su riqueza. Debemos prepararnos para defender el libre comercio y la globalización para proteger el crecimiento económico y la superación de la pobreza de los países emergentes como el Perú. Lampadia




De una isla sin futuro a líder del desarrollo

Pocos creyeron en la pequeña ciudad-estado de Singapur cuando se le otorgó la independencia en 1965. Tiene un terreno pequeño y no tiene recursos naturales. Pero, en tan solo 50 años, la antigua colonia británica se transformó en un importante centro financiero y tecnológico. Ahora, Singapur ha sido llamada la historia de desarrollo más exitosa del siglo XX.

Comparando 1965 y el 2015 Fuente: kompasiana

El economista Milton Friedman describió a Singapur como un ejemplo de cómo lograr un verdadero desarrollo. “Si comparas las condiciones de la gente en un lugar como Singapur con las condiciones de la gente en un lugar como China o Indonesia, verás que la libertad económica es un componente muy importante de la libertad total”, dijo en la BBC en la serie Free to Choose en 1980.

Comparando 1965 y el 2015 Fuente: Blazepress

Singapur es una historia de éxito del libre mercado. Los bajos impuestos, las pocas restricciones de capital y las políticas liberales de inmigración la han convertido en uno de los lugares más cosmopolitas de la Tierra.

En Lampadia hemos escogido 5 características clave para explicar su éxito y que consideramos relevantes para pensar en los lineamientos de desarrollo del Perú.

I. Servicio Público – Meritocracia
Singapur tiene uno de los mejores estándares de vida del planeta, buscan a sus futuros funcionarios públicos desde los colegios. Identifican a los mejores alumnos, les dan todas las becas posibles y gastan una fortuna entrenándolos. Los que llegan a los cargos más altos reciben remuneraciones espectaculares, que pueden llegan a US$ 2´000,000 anuales. Son funcionarios orientados hacia un manejo racional de las políticas públicas, con una mentalidad práctica, imbuidos de las mejores prácticas de los más eficientes funcionarios del sector privado y que tienen muy claro, que el desarrollo integral y duradero del país dependerá, fundamentalmente, de la fortaleza del sector privado que alienten y promuevan.
Ver en Lampadia: Instalemos un Estado Meritocrático en el Perú.

II. Estado de Derecho – Imperio de la Ley
Es un modelo extraordinario de Imperio de la Ley. Singapur se ubica entre los puestos más altos a nivel global en un índice del Imperio de la Ley, realizado por el World Justice Project. Las dos categorías principales en las que sobresale son: el orden y la seguridad.

La realidad es que un Imperio de la Ley eficaz es el fundamento de las comunidades de paz, equidad y oportunidades. El éxito de Singapur al posicionarse como hub de la globalización depende críticamente de la integridad de los sistemas legales que hacen cumplir los contratos y protegen la propiedad privada y pública. Su éxito económico se basa en la estabilidad y equidad de sus normas legales. Las principales corporaciones del mundo llevan sus oficinas y capital sin problemas al país porque están bien protegidos por la ley de Singapur.

Muchos critican la dureza de algunas de sus normas, y desvalorizan sus logros por la mano férrea con que su fundador, Lee Kuan Yew, desarrollo la institucionalidad del país. Pero no reconocen que hace mucho tiempo, establecidas las normas correspondientes, la ley se aplica sin que las autoridades tengan capacidad discrecional en su aplicación. 

III. Educación de Vanguardia
Su exitoso modelo educativo es admirado en todo el mundo. En 2015, obtuvieron el primer puesto en el ranking mundial de escuelas, con los resultados basados ​​en matemáticas y ciencia. Sus estudiantes brillan en los primeros puestos de las pruebas internacionales de educación más exigentes, como las PISA, de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).

Y es que la educación es más que solo notas o calificaciones. También se enfocan en tener habilidades ‘blandas’ como: la comunicación, la colaboración, el pensamiento crítico, la creatividad, las artes y ser capaces de adaptarnos y relacionarnos con los otros. Crear conexiones no solamente en términos de relaciones interpersonales, sino ser capaces de entender la perspectiva de los otros. Así logran preparar a los jóvenes para el futuro incierto que les espera, que será muy diferente a la realidad actual, especialmente con los grandes avances de la Cuarta Revolución Industrial.

IV. Economía de Mercado y Bienestar Social
Al momento de su independencia, en 1965, el PBI per cápita apenas superaba los US$500. Cinco décadas después, es de más de US$56,000 per cápita. Según el índice de competitividad del World Economic Forum, Singapur es la segunda economía más competitiva del mundo.

Fuente: El Economista

Entonces, ¿cómo es que Singapur tuvo tanto éxito? La respuesta simple es: Un liderazgo excepcional. Singapur acogió el comercio exterior y la inversión privada. Las multinacionales consideraron que Singapur era un centro natural y se les incentivó a expandirse y prosperar.

Singapur utilizó su posición estratégica cerca de las líneas comerciales del sudeste asiático para convertirse en un gigante financiero, tecnológico y de materias primas. El imperio de la ley, los reglamentos empresariales integrales, la estabilidad política y la apertura a las innovaciones han hecho que sea el destino favorito de muchas empresas multinacionales.

El éxito de Singapur también se puede ver en los indicadores sociales. Redujeron su mortalidad infantil más rápidamente que cualquier otra sociedad, pasando de 35 por 1,000 nacidos vivos en 1965 a 2.1 en 2015. Su esperanza de vida también mejoró radicalmente, pasando de 67 años en 1965 a 82.4 años en la actualidad. Hay muchas otras áreas donde los estándares sociales de Singapur están en la cima del ranking. Singapur tiene el índice de propiedad de vivienda más alta de cualquier país del mundo, con 90% de los residentes viviendo en hogares propios.

V. Integración cultural y religiosa
Una encuesta nacional publicada el año pasado encontró que la mayoría de los singapurenses intentan vivir los ideales multirraciales y creer en la meritocracia. Más de siete de cada 10 ciudadanos de Singapur creen que el éxito personal es independiente de su raza o etnia, según la encuesta encargada por Channel NewsAsia y el Institute of Policy Studies.

Eso es un hallazgo notable para Singapur, cuya población es 74.2% china, 13.3% malaya, 9.2% india y 3.3% otros. Es también la nación más religiosamente diversa del mundo, según un análisis de 2014 realizado por el Pew Reseach Center, con una población formada por grandes porciones de budistas, cristianos, musulmanes e hindúes.

¿Cómo logró una integración multicultural? Una respuesta es la integración de vivienda forzada. En Singapur, el 85% vive en viviendas públicas muy decentes, en su mayoría propietarias, y las cuotas raciales significan que cada bloque, recinto y enclave caen en línea con los porcentajes de población étnica nacional mencionados anteriormente. Esto obliga a que personas de etnias y religiones diferentes vivan juntas.

El fundador de Singapur, Lee Kuan Yew, afirmaba que: “Los singapurenses deben permanecer abiertos y darle la bienvenida a aquellos que fortalecerán nuestro equipo y ayudarán a nuestros hijos vivir en un mejor lugar. Por su lado, los extranjeros deben esforzarse en integrarse a nuestra comunidad. Deben adquirir nuestros valores sociales, nuestros valores culturales, adoptar nuestras normas sociales y comprometer su lealtad y amor a Singapur”.

Conclusiones
Hoy, cuando las personas visitan Singapur y ven una ciudad-estado moderna, tienden a asumir que Singapur siempre fue así. En realidad, Singapur era uno de los países más pobres y desafortunados cuando se logró la independencia en 1965. No tenía recursos naturales.  Por esta razón, es útil estudiar la experiencia de Singapur. Si Singapur, contra todo pronóstico, tuvo éxito, otros países pueden hacerlo también. Lampadia

Otros links de Lampadia relacionados a Singapur:

Singapur piensa y planea su futuro
Hasta los campeones de Singapur buscan mejorar
10 razones que explican el éxito de Singapur
El verdadero modelo de Singapur
Aprendamos el sentido común de la modernidad
Excepcionalismo de Singapur según The Economist




El poder económico gira hacia el Asia

Desde los desarrollos políticos de Gran Bretaña con el Brexit y de EEUU con Trump, que de alguna manera marcan una regresión de sus políticas internacionales hacia el interior de sus países, alejándose de importantes espacios de interés en el plano internacional, así como del libre comercio y la globalización, en Lampadia estamos compartiendo con nuestros lectores, producción intelectual del Asia, especialmente desde Singapur, que goza de una perspectiva privilegiada en el debate político este-oeste que se empieza a formar.   

Fuente: Shutterstock

Días atrás publicamos la visión del 2017 desde el Asia y las ideas de Kishore Mahbubani, el gran intelectual singapurense sobre las relaciones de oriente y occidente, preparado para Davos 2017. Ahora presentamos líneas abajo un interesante artículo de Danny Quah, profesor de economía en la Escuela Lee Kuan Yew de Políticas Públicas de Singapur, quien afirma que, a pesar de los múltiples políticos que han culpado a la globalización y el libre comercio por una supuesta creciente desigualdad económica dentro de las economías desarrolladas, en realidad es la mejora de la igualdad de ingresos entre todas las naciones lo que ha creado esta tendencia a una reacción populista de proteccionismo.

Según Quah, “Durante los años noventa, existía una brecha de ingresos de 70% entre las economías emergentes y el G7. Esa brecha se redujo a menos del 14% en 2016 y desaparecerá en 2020”. La verdad es que el proceso de integración mundial se está consolidando, sin importar cuanto quiera negarlo Donald Trump. Los ajustes de las instituciones multilaterales son necesarios para que se permita una mejor gobernanza global y la convergencia entre las dos mayores potencias mundiales, EEUU y China, es esencial para la armonía y el mayor bienestar global.

Sin embargo, como afirma el profesor Quah, “los americanos comunes y corrientes se preocupan – a un nivel profundo e instintivo – de que ellos, o al menos sus líderes electos, lleguen a estar a cargo, y lleguen a escribir las reglas del juego. Otros en todo el mundo los están alcanzando, y lo que ahora está en las cartas es un futuro compartido, genuinamente global, donde ninguna nación es excepcional o indispensable”.

En efecto, en su último libro, ‘Orden Mundial’, Henry Kissinger nos advirtió que un estudio de Harvard mostraba que históricamente, de 15 casos de interacción entre una potencia emergente y una establecida, 10 terminaron en guerra. Y agregaba que no era sorprendente que hoy pensadores estratégicos significativos, a ambos lados, consideraran que el patrón histórico hacía inevitable el conflicto.

Por su lado Mahbubani, nos decía que estábamos construyendo una nueva y mejor civilización, que nadie habría pensado hace unos años que Singapur podría ser tan próspero como Londres. Pero aún había una gran resistencia a hablar de una gobernanza global que permitiera y cuidara la consolidación de la armonía entre occidente y oriente.

Más vale darse cuenta a tiempo de la dirección e intensidad de los nuevos vientos, que en nuestra opinión alterarán profundamente el mundo que se estaba construyendo: uno que era favorable al espacio de desarrollo que necesitan países como el Perú. Lampadia

A pesar de Trump, el poder económico seguirá girando hacia Asia en 2017

Danny Quah, profesor de economía en la Escuela Lee Kuan Yew de Políticas Públicas de Singapur

Publicado en Quartz

8 de febrero de 2017

Traducido y glosado por Lampadia

Si Estados Unidos se vuelve más proteccionista -tal vez porque piensan que el comercio está dejando que otros ganen mientras ellos pierden-, el Asia emergente buscará otros acuerdos de seguridad “, predice el profesor Quah. “¿Se beneficiará China de este nuevo equilibrio? No le hará daño a China, no”.

El mes pasado fue un fabricante de refrigeración. Este mes son los fabricantes de automóviles. Hasta ahora, el Presidente ha cumplido con sus promesas de campaña en dirigirse a las empresas que obtienen su fuerza de trabajo en el extranjero.

Durante mucho tiempo, Trump ha proclamado que quiere detener el ‘offshoring’ mediante la renegociación de acuerdos comerciales “injustos” y presionar a las firmas con sede en Estados Unidos para que repatrien sus operaciones en el extranjero -y, lo que es más importante, los empleos extranjeros- a los Estados Unidos.

Sería conveniente desechar gran parte de su discurso como posturas políticas. La campaña de Trump no fue la única en culpar a la globalización, ni tampoco fue el primero -políticos de ambos partidos tienden a demonizar los acuerdos comerciales en lugar de vender sus beneficios. Y a pesar de algunas regresiones altamente promocionadas por empresas como Carrier y Ford, pocos caracterizarían un ‘shakedown de empresa por empresa’ como una forma eficaz de debilitar las fuerzas del comercio mundial.

Aun así, la embestida muestra un sentimiento anti-globalización muy preocupante.

A raíz del Brexit, el ascendente nacionalismo europeo y las elecciones estadounidenses, se ha escrito mucho sobre la amenaza del populismo al crecimiento del comercio mundial y las instituciones económicas internacionales establecidas después de la Segunda Guerra Mundial. Hay una serie de explicaciones para este ‘giro hacia adentro’. Muchos han culpado a la creciente desigualdad económica dentro de las economías desarrolladas –parte de la culpa sería la subcontratación o la transición tecnológica.

Otros postulan que un factor motivador puede ser una disminución de la desigualdad. Danny Quah, profesor de economía en la Escuela Lee Kuan Yew de Políticas Públicas de Singapur, y Kishore Mahbubani, decano de la escuela, culpan a la mejora de la igualdad de ingresos en todas las naciones como la causa del aumento del populismo. Durante los años noventa, existía una brecha de ingresos de 70% entre las economías emergentes y el G7. Esa brecha se redujo a menos del 14% en 2016 y desaparecerá en 2020.

Mahbubani y Quah proponen que el cambio en el poder -incluyendo el poder adquisitivo- de las naciones más ricas a las economías emergentes y al este de Asia es una idea inquietante para los ciudadanos de los países desarrollados.

“Los americanos comunes y corrientes se preocupan – a un nivel profundo e instintivo – de que ellos, o al menos sus líderes electos, lleguen a estar a cargo, y lleguen a escribir las reglas del juego”, dice el profesor Quah. “Otros en todo el mundo los están alcanzando, y lo que ahora está en las cartas es un futuro compartido, genuinamente global, donde ninguna nación es excepcional o indispensable”.

Sólo el tiempo determinará cómo se llevará a cabo este cambio. No obstante, el actual clima anti-globalización plantea algunas preguntas para Asia, que, al menos hasta ahora, se ha beneficiado en gran medida de la globalización. Si el retorno al mercantilismo se acelera y el comercio mundial se ralentiza, ¿girará Asia? Y si el Oeste se aparta de impulsar soluciones internacionales, ¿llenarán otros esos zapatos?

“El Oeste solo representa el 12% de la población mundial. El 88% vive fuera del Oeste. 

Y, en total, sus condiciones de vida nunca han sido mejores.” – Kishore Mahbubani

“No es un juego de suma-cero.  No lo volvamos así.” – Danny Quah

Hay una idea de que las economías emergentes de Asia han crecido sólo porque los asiáticos exportan a los consumidores estadounidenses y que el consumo es demasiado débil en Asia para apoyar el crecimiento sostenible. Pero igual que en cualquier otra economía, los economistas nos dicen que, cuando los ingresos disponibles crecen, también lo hará el consumo.

“La demanda interna se ha mantenido notablemente resistente en la mayor parte de la región, apoyada por el aumento de los ingresos reales”, dice Changyong Rhee, Director del Departamento de Asia y el Pacífico del FMI. La demanda externa no será ayudada por la muerte de la Asociación Transpacífica, y el reequilibrio de China continuará teniendo efectos en el comercio mundial. Pero no se puede negar que la economía de Asia seguirá desempeñando un papel importante en la economía mundial a medida que sus mercados emergentes y fronterizos continúen creciendo.

De hecho, China, que habría sido excluida del TPP, ahora tendrá más posibilidades de impulsar el comercio con sus socios regionales. Los canales comerciales de Asia tienen un largo alcance, y sólo se fortalecerán si iniciativas como “One Belt, One Road” y la Asociación Económica Regional Amplia son exitosas.

A medida que Asia crece, la concentración de consumidores y los mercados en rápida expansión necesitarán infraestructuras e industrias para apoyarlos. Al mismo tiempo, a medida que el neo-mercantilismo occidental tome forma, las compañías estadounidenses tendrán que decidir cómo será su papel.

En una entrevista con el Wall Street Journal, John Dulchinos, vicepresidente de fabricación digital de Jabil, proveedor de empresas como Apple y Electrolux SA, dice: “En ningún otro país se puede escalar tan rápidamente. Uno tiene la capacidad de moverse rápidamente y hay una cadena de suministro de electrónica muy fuerte en Asia, centrada en China”.

Ya sean estadounidenses o asiáticos, las industrias que tengan éxito serán aquellas que no enfrenten a los humanos contra las máquinas, sino que usen la velocidad y precisión para permitir que los seres humanos funcionen mejor. Asia ha aprendido esa lección: es el centro mundial de manufactura avanzada y logística sofisticada.

Además, China es ahora el mayor mercado consumidor de teléfonos inteligentes y otros aparatos. Y sin importar el este o el oeste, los negocios astutos buscarán siempre capitalizar  las oportunidades disponibles. Asia tiene muchas. Lampadia




EEUU se encierra y China se postula al libre comercio

Hasta hace pocos meses, cuando se hablaba de la relación del Asia con occidente, o de China con EEUU, ésta se refería al crecimiento de China y su eventual primer lugar en la economía global. A esos pensamientos y análisis, hay que sumarle hoy día la evolución política, que lleva a EEUU a alejarse del libre comercia, y a China, a pretender liderarlo.

Este proceso ya no se puede entender desde el punto de vista de la retórica occidental. Si el liderazgo económico y político se mueve al Asia, debemos escuchar a los líderes intelectuales del Este.

¿Quién mejor para ilustrarnos sobre esta (nueva) realidad que nuestro conocido intelectual de Singapur, Kishore Mahbubani?

Recordemos que Mahbubani estuvo en Lima el 2009, ver su presentación en Lampadia. El escribió en “The New Asian Hemisphere” (El Nuevo Hemisferio Asiático) y en The Great Convergence (La Gran Convergencia), su tratado sobre la necesidad de que la geopolítica global vaya tendiendo hacia la convergencia entre occidente y oriente. Lamentablemente, lo que está sucediendo es todo lo contrario. Líneas abajo compartimos el artículo que Mahbubani preparó para la actual edición del World Economic  Forum.

Fuente: www.world-governance.org

Mahbubani, propone actualizar las instituciones mundiales —Naciones Unidas, las instituciones de Bretton Woods, la OMC— adaptándolas a la ascensión del resto e, igualmente, actualizar el pensamiento de Occidente, “En lugar de tratar constantemente de retener el control del mundo, Occidente debe aprender a compartir el poder. A los asiáticos se les debe permitir dirigir el FMI y el Banco Mundial. Igualmente importante, los expertos occidentales deben abandonar su condescendencia tradicional al hablar del resto. Las entidades asiáticas emergentes, como China, la India y la ASEAN, deben ser tratadas con más respeto. La India debería ocupar inmediatamente un lugar en el Consejo de Seguridad de la ONU, con el Reino Unido y Francia a un lado.”

“Todo esto suena inconcebible para muchas mentes occidentales. Pero hasta hace poco, era también inconcebible que el resto pudiera ser más optimista que Occidente. Occidente debe ahora hacer lo inconcebible para prepararse para el inevitable mundo inconcebible.”

Image result for rise china

Fuente: www.theamericanconservative.com

Lo que defiende Mahbubani no es crear nuevas instituciones que consagren el traslado mundial de poder, sino remediar el “déficit democrático” del sistema antiguo. Mientras que el populismo aumenta en Occidente, (dando como resultado situaciones como Trump y el Brexit), no ha surgido en las regiones más pobladas de Asia y África. Y, como resalta Mahbubani, “Occidente sólo representa el 12% de la población mundial. El 88% restante vive fuera de Occidente. Y sus condiciones de vida (con excepción de algunos países árabes y Corea del Norte) nunca han sido mejores.”

De esta manera, Mahbubani propone una convergencia y una mayor democracia global, al igual que Niall Ferguson en ‘Civilización: Occidente y el resto’ donde propone la idea de que el formidable progreso económico de China irá abriendo el camino a la democracia política. Mahbubani aboga por un proceso de convergencia. Ver sus ideas al respecto en Lampadia: WEF: ¿Se detendrá la gobernanza global en un mundo multipolar? y Mahbubani: “No nos equivoquemos con China”

Lo que se necesita es un verdadero compromiso global. Esto implica que ningún país establezca la agenda mundial y que la gobernabilidad se vuelva más difusa. Esto crea un “orden” mundial multipolar, donde el control de los recursos se concentra en diferentes centros de poder, cuyo peso económico se ve reforzado por los acuerdos comerciales intra-regionales.

¿Cómo, entonces, se podría asegurar la gobernabilidad global en un mundo multipolar?  “A medida que el mundo se vuelve cada vez más pequeño, necesitamos una mejor gobernanza mundial”, afirma Kishore Mahbubani.

En Lampadia seguimos a Mahbubani desde hace varios años. Nuestro país no tiene una vocación internacionalista y estamos bastante lejos de seguir los acontecimientos globales, pero los movimientos tectónicos que pasan por nuestros ojos, deben llevarnos a desarrollar una mejor visión de los hechos y a estar preparados para participar en el diseño de las políticas globales, como pronto, seguramente, va a ser necesario. Lampadia

Sí, este es el siglo del Asia.

Pero todavía hay motivos para el optimismo de occidente

An illuminated cube bearing the Chinese flag is seen in the entrance foyer of the London Stock Exchange in London

La ascensión de Asia. Eso no significa que Occidente tenga que ser pesimista
Fuente: REUTERS / Peter Nicholls

Kishore Mahbubani, 
Decano de la Escuela Lee Kuan Yew de Políticas Públicas de la Universidad Nacional de Singapur
Foro Económico Mundial
13 de enero de 2017
Traducido y glosado por
Lampadia

 

La gran cuestión de nuestro tiempo es simple: ¿debemos, todos los 7 mil millones de nosotros, sentirnos optimistas o pesimistas sobre el futuro de la humanidad?

La respuesta del mundo está dividida. Muchas sociedades occidentales se están ahogando en el pesimismo. Por el contrario, el resto nunca ha sido más optimista. Esto representa una inversión del patrón de los siglos anteriores, donde Occidente siempre fue más optimista. ¿Qué ocurrió? ¿Y qué nos dicen los hechos?

Los hechos son claros. La condición humana nunca ha estado mejor. La pobreza mundial está disminuyendo constantemente. En 2015, superamos ampliamente el Objetivo de Desarrollo del Milenio de las Naciones Unidas de reducir a la mitad la pobreza mundial. Según la NIC, la pobreza extrema podría reducirse a la mitad para el año 2030.

Las clases medias globales están explotando: de 1,800 millones en 2010 a 3,200 millones en 2020 y 4,900 millones en 2030. La tasa de mortalidad infantil mundial ha disminuido de un estimado de 60 muertes por mil nacimientos en 1990 a 32 en 2015. Esto se traduce en más de 4 millones de muertes infantiles menos por año. Si fuéramos racionales y objetivos, estaríamos celebrando la condición humana actual.

La auto-contemplación de Occidente

¿Por qué no celebramos? Una respuesta simple es que los intelectuales occidentales que dominan el discurso intelectual global sólo son conscientes de los desafíos a corto plazo de sus sociedades, no de las promesas globales a largo plazo. Francis Fukuyama ilustra esto bien. En un ensayo escrito después de la elección de Donald Trump, dice: “La derrota electoral de Hillary Clinton ante Donald Trump marca un hito, no sólo para la política estadounidense, sino para todo el orden mundial. Parece que estamos entrando en una nueva era de nacionalismo populista, en la que el orden liberal dominante que se ha construido desde la década de 1950 ha sido atacado por las mayorías democráticas enojadas y energizadas. El riesgo de caer en un mundo de nacionalismos competitivos e igualmente enojados es enorme, y si esto sucede, marcaría una coyuntura tan trascendental como la caída del Muro de Berlín en 1989. “[Nota: énfasis añadido.]

Por favor, estudiemos cuidadosamente sus palabras. El está confundiendo la condición de Occidente con la condición del mundo. Es cierto que el populismo ha aumentado en Occidente. Eso explica a Trump y el Brexit (y posiblemente Le Pen). Pero no ha surgido en las regiones más pobladas de Asia y África.

Más importante aún, Occidente sólo representa el 12% de la población mundial. 88% vive fuera de Occidente. Y sus condiciones de vida (con excepción de algunos países árabes y Corea del Norte) nunca han sido mejores.

Tomemos tres de los países más poblados de Asia: China, India e Indonesia. Las vidas de casi 3 mil millones de personas en estos países nunca han sido mejores. Y van a mejorar mucho en las próximas décadas, como muestra el gráfico.

La década de 2010 a 2020 es probablemente la mejor década que Asia haya experimentado. La población de clase media asiática va a pasar de 500 millones en 2010 a 1,750 millones en 2020. En resumen, Asia va a añadir 1.5 veces la población total de Occidente a la población de clase media mundial en una década.

¿Por qué está pasando esto? Una respuesta simple es el triunfo de la razón. La difusión de la ciencia y la tecnología occidentales lo demuestra más claramente. En el nivel más básico, los seres humanos en todo el mundo pueden ver los beneficios de la medicina occidental moderna. Como resultado, la razón está reemplazando a la superstición. En todas las esferas de la vida humana, desde las políticas económicas hasta la gestión ambiental, desde la educación hasta la planificación urbana, las prácticas óptimas occidentales están siendo adoptadas casi universalmente por todas las sociedades.

Entonces, ¿por qué todo el pesimismo?

Si el mundo está mejorando, ¿por qué el Oeste se vuelve más pesimista? La respuesta simple es que Occidente ha seguido una estrategia profundamente defectuosa desde el colapso de la Unión Soviética en 1991. Al igual que los defensores británicos de Singapur en la Segunda Guerra Mundial, apuntaron sus armas al mar en el Sur cuando los japoneses vinieron por tierra desde el Norte.

Para dejar este punto aún más claro, Occidente pensó que había ganado una colosal y épica lucha con su dramática victoria en la Guerra Fría. Como resultado, no se dio cuenta de que, al mismo tiempo, una lucha aún mayor había comenzado con el “retorno” de Asia. China decidió volver a unirse a la economía mundial en los años ochenta. La India lo hizo en los años noventa. El regreso de 3 mil millones de asiáticos, obviamente, iba a sacudir la economía global. Occidente no se dio cuenta.

No se dio cuenta porque las mentes occidentales estaban intoxicadas con un opiáceo insalubre de triunfalismo. El famoso ensayo de Francis Fukuyama “El Fin de la Historia” capturó este error. Como resultado, Occidente desarrolló una estrategia intervencionista defectuosa hacia el resto. Muchas de las intervenciones llevaron al desastre. Michael Mandelbaum señala que “el historial de la administración Clinton no fue alentador: prometió el orden en Somalia y lo dejó en caos. Fue a Haití para restaurar la democracia y la dejó en anarquía. Bombardeó Bosnia por el bien de la unidad nacional, pero presidió una partición de facto”.

Y el 11 de septiembre empeoró las cosas. Sedujo a los asesores neoconservadores de George W. Bush para invadir Irak, después de invadir Afganistán. Una década más tarde, los europeos vieron a dos tercios de sus refugiados proceder de tres países: Irak, Afganistán y Siria.

Pero ese no era el verdadero desastre. Mientras que los pensadores estratégicos occidentales estaban distraídos, no vieron que el acontecimiento más importante en 2001 no fue 9/11. Fue la entrada de China en la Organización Mundial del Comercio. La entrada de casi mil millones de trabajadores al sistema comercial mundial obviamente daría como resultado una masiva “destrucción creativa” y la pérdida de muchos puestos de trabajo.

Trump y Brexit son, por lo tanto, los resultados naturales y lógicos de una estrategia occidental defectuosa de no tratar con los desafíos económicos reales a Occidente. Mientras Occidente estaba distraído, China emergió. Según las estadísticas del FMI, en 1980, en términos de PPP, la participación de EEUU en el PBI mundial era del 25%, mientras que la de China era del 2.2%. En 2016, la participación de Estados Unidos se ha reducido a 15.5%, mientras que la de China ha aumentado a 17.9%.

El declive relativo de Occidente

Por lo tanto, hay razones estratégicas sólidas para el pesimismo occidental: de 1820 a aproximadamente 1980, el poder económico occidental creció de manera constante o mantuvo una enorme posición dominante a nivel mundial. En las últimas tres décadas, el PBI combinado de América del Norte y Europa Occidental se redujo de 51.5% en 1990 a 33.45% en 2014.

Un cambio estratégico aún más destructivo sucedió al mismo tiempo. Mientras que los trabajadores en Occidente sufrieron pérdidas de empleo y el deterioro de los ingresos, la élite occidental se convirtió en súper ricos de la globalización acelerada y el regreso de Asia.

RW Johnson describe bien cómo sufrieron los trabajadores estadounidenses: “Entre 1948 y 1973, la productividad aumentó un 96.7% y los salarios reales un 91.3%, casi exactamente al mismo paso. Eran los días de abundantes empleos en el acero y la industria automotriz cuando los trabajadores podían permitirse enviar a sus hijos a la universidad y verlos ascender a la clase media. Pero de 1973 a 2015 -la era de la globalización, cuando muchos de esos puestos de trabajo desaparecieron en el extranjero- la productividad aumentó un 73.4%, mientras que los salarios aumentaron sólo un 11.1%. Desde 2000, los salarios pagados a los graduados universitarios han caído. “

Una razón para ser optimista

Las preguntas existenciales que Occidente enfrenta hoy en día son bastante simples. ¿Está todo perdido? ¿Disminuirán constantemente el poder y la influencia occidental? ¿O hay esperanza para Occidente? ¿Puede beneficiarse también del resurgimiento del resto?

La respuesta simple es que Occidente puede beneficiarse de la oleada del resto. 12% de la población mundial puede ser arrastrada por el restante 88%. Para lograr esto, los líderes occidentales y expertos necesitan hacer muchos ajustes psicológicos significativos.

En lugar de tratar constantemente de retener el control del mundo, Occidente debe aprender a compartir el poder. A los asiáticos se les debe permitir dirigir el FMI y el Banco Mundial. Igualmente importante, los expertos occidentales deben abandonar su condescendencia tradicional al hablar del resto. Las entidades asiáticas emergentes, como China, la India y la ASEAN, deben ser tratadas con más respeto. La India debería ocupar inmediatamente un lugar en el Consejo de Seguridad de la ONU, con el Reino Unido y Francia a un lado.

Todo esto suena inconcebible para muchas mentes occidentales. Pero hasta hace poco, era también inconcebible que el resto pudiera ser más optimista que Occidente. Occidente debe ahora hacer lo inconcebible para prepararse para el inevitable mundo inconcebible. Lampadia

 




Viendo el 2017 desde Oriente

La gran pregunta en los países asiáticos en este momento es qué sucederá tras la victoria de Donald Trump en Estados Unidos. Según Kishore Mahbubani, escritor, decano de la Escuela de Políticas Públicas de la Universidad Nacional de Singapur y ex embajador en las Naciones Unidas, el centro de la atención debería estar en el cambio geopolítico que se viene.

Según Mahbubani, China e India son una fuerza que no puede seguir siendo tratada con desdén o desprecio. Incluso su pequeño país, Singapur, también tiene importantes lecciones que occidente debiera aprender. Mahbubani afirma que Singapur no tendrá las mejores empresas del mundo, pero tiene las mejores políticas públicas.

En Lampadia queremos compartir con nuestros lectores una reciente entrevista de NHK World (uno de los principales canales de Japón), a Mahbubani, que nos muestra una visión  qué es fundamental para entender el mundo de nuestros días.

Como afirmó Martin Wolf en ¿El fin de la globalización?), el impulso hacia una mayor integración económica se ha estancado y en algunos aspectos se ha revertido. La globalización ya no está impulsando el crecimiento mundial. Si se llega a producir un retroceso de la apertura comercial por parte de los países más ricos, sus efectos en los países emergentes serían dramáticos. Esta situación es casi el peor evento económico posible que se puede imaginar y golpearía muy duramente a los países y poblaciones más pobres del mundo.

Así lo hemos explicado en Lampadia en nuestro artículo: The wind beneath our wings, en el que explicamos que los países emergentes como el Perú, necesitan el libre comercio para su desarrollo. Debemos prepararnos para defender el libre comercio y la globalización para proteger el crecimiento económico y la superación de la pobreza de los países emergentes como el Perú.

Ayer compartimos con nuestros lectores la visión occidental del 2017, hoy tenemos la visión oriental. Lampadia

Las perspectivas para 2017 desde Asia

NHK WORLD – Tokio
4 de enero de 2017
Traducido y glosado por
Lampadia

Entrevista de Sho Beppu (NHK) a Kishore Mahbubani

La xenofobia y la frustración con la globalización se están extendiendo en países que son considerados modelos de democracia. ¿A dónde se está dirigiendo el mundo? ¿Está en el camino correcto? Le preguntamos a uno de los pensadores más importantes de Asia, su punto de vista sobre las perspectivas para el año 2017.

“Ha llegado el momento para que los líderes occidentales e intelectuales sean más humildes y acepten que tienen varias lecciones que aprender del resto del mundo”, dice el profesor Kishore Mahbubani, decano de la Escuela Lee Kuan Yew de Política Pública en Singapur. “Sólo quieren escucharse a sí mismos, y eso es muy peligroso.”

Tenemos un proverbio en Japón que dice que “no permitamos que lo inaceptable se vuelva la norma.” He encontrado esta frase particularmente relevante el año pasado.

Me pregunto, ¿acaso no nos estamos acostumbrando demasiado en escuchar los comentarios xenófobos de algunos políticos occidentales, tanto así que comenzamos a perder nuestro sentido de indignación?

Algunos dicen que nuestra democracia está en el borde, mientras que otros dicen que es un fenómeno en declive en Occidente, y sólo tendrá un impacto limitado en el resto del mundo.

Beppu: Podríamos caracterizar el año 2016 con 2 grandes conmociones políticas. Una de ellas es Brexit y la otra es la victoria de Trump en la elección presidencial de Estados Unidos. Hay muchas maneras de interpretar estos dos acontecimientos políticos. ¿Qué le impactó más?

Mahbubani: Bueno, creo que tienes toda la razón cuando dices que son “conmosiones” que ocurrieron en 2016. Se han producido cambios fundamentales en el orden mundial. Tres grandes cambios estructurales han tenido lugar al mismo tiempo y han afectado gravemente las condiciones de las personas que viven en Occidente.

Y los 3 grandes cambios estructurales son: Nº 1, el regreso de Asia, lo que ha significado que una gran cantidad de chinos e indios se han unido a la economía global y que ha llevado a la destrucción creativa y a que muchas personas pierdan sus puestos de trabajo. Luego tenemos la globalización, y el tercer cambio es, por supuesto, el rápido avance de las nuevas tecnologías, que ha hecho que el mundo sea más pequeño y más interconectado.

Los políticos occidentales han intentado continuar fingiendo que todo está igual. Y debido a que los líderes occidentales no lograron preparar a su población, entonces la gente se ha hartado de los políticos y dicen que nunca más confiarán en ellos. Nosotros decimos, traduciendo ligeramente, “arrojemos a los bastardos y probemos algo nuevo.” Y así fue como sucedió con Donald Trump.

Beppu: ¿Cree usted que esto representa la decadencia en el propio sistema democrático occidental?

Mahbubani: Bueno en realidad soy optimista con el Occidente, porque el Occidente ha pasado por un montón de retos, ha superado los desafíos y ha resurgido de nuevo. Así que este es otro reto importante. La diferencia hoy es que todavía no han reaccionado ante este desafío. Pero para hacer eso, tienen que cambiar su modo de pensar en primer lugar, y aceptar que el regreso de Asia es real y que ahora tienen que hacer frente a los asiáticos como iguales y no como inferiores. Y ese cambio de mentalidad no ha sucedido todavía.

Beppu: ¿Qué está obstaculizando que logren comprender completamente lo que está sucediendo ahora?

Mahbubani: Bueno, yo creo que el problema es que, sencillamente, si estás acostumbrado a ser número 1 durante tanto tiempo, y todo el mundo te dice que eres el No.1, ¿cómo entonces, psicológicamente, puedes adaptarte y aceptar que tal vez eres el No.2? Eso es muy difícil, sabes.

Una de las razones por las que a veces soy poco popular, especialmente con los intelectuales norteamericanos, es que expongo sus dobles estándares. Son muy rápidos para criticar a otros países cuando piensan que ellos se están cerrando. Pero la paradoja de Estados Unidos es que se trata de una sociedad abierta con una mente cerrada. Y su prensa, por desgracia, no se está abriendo a escuchar otros puntos de vista. Sólo quieren escucharse a sí mismos y eso es muy peligroso.

Beppu: ¿Qué piensas que ellos pueden aprender de la dinámica que estamos viendo ahora en Asia, particularmente la experiencia de Singapur, por ejemplo?

Mahbubani: Bueno, creo cuando Singapur cumplió 50 años en 2015 publiqué un artículo en el Huffington Post que decía algo muy extravagante. Decía que en toda la historia humana, desde hace miles de años, una sociedad nunca ha mejorado el nivel de vida y de integración de su gente con la rapidez que Singapur lo ha hecho. Y el artículo fue viral, conseguido 400,000 vistas, que es increíble, ¿verdad?

Pero si vas donde un líder estadounidense o los líderes europeos y dices: “¿Por qué no aprenden de Singapur?” La idea es casi inconcebible para ellos. Así que creo que ha llegado el momento de que los líderes occidentales e intelectuales sean más humildes y acepten que tienen lecciones que aprender del resto del mundo. Puede que no tengamos las mejores empresas del mundo en Singapur, pero tenemos algunas de las mejores políticas públicas en el mundo.

La experiencia de Singapur

Beppu: ¿Puede decirnos más acerca de la fuerza de las políticas de Singapur para la armonización de las distintas comunidades?

Mahbubani: Definitivamente, como usted sabe, es bastante notable. Yo soy étnicamente sindhi. Mi familia vino de Sindh, que ahora es parte de Pakistán. Y los sindhi son una minoría dentro de la comunidad indígena y la comunidad india es una minoría dentro de Singapur. Así que pertenezco a una minoría dentro de la minoría en Singapur, y sin embargo, me convertí en embajador en las Naciones Unidas en dos ocasiones.

Singapur es realmente una sociedad meritocrática, y mientras que Singapur siga siendo una sociedad meritocrática, va a estar bien. Además, proporcionará oportunidades para las minorías, y un modelo para otras sociedades multiculturales del mundo.

Beppu: ¿Qué hay de las políticas del país hacia los que perdieron en la globalización? Muchas personas se aprovecharon de la globalización – América, por ejemplo – pero no todos. Les pasa a otros países también. Que está haciendo su país para ayudar o ¿cómo lidiar con las personas que se sadrán de la competencia debido a la globalización?

Mahbubani: Bueno, creo que también en este caso vale la pena que las sociedades occidentales estudien lo que se ha hecho en Singapur, porque en Occidente tienen el concepto de ‘bienestar’ (wellfare). Singapur tiene el concepto de ‘prestaciones sociales condicionadas’ (más conocido como workfare), y la diferencia entre workfare y wellfare es que el wellfare te apoya cuando estás desempleado. El workfare trata de mantenerte empleado.                                                                                                                                    

Así, por ejemplo, en lo más alto de la crisis financiera de 2008-2009, el gobierno de Singapur pagó parte de los salarios de la gente en los niveles más bajos. Así incentivó que el empleador mantenga a la persona empleada por un par de años hasta superar la recesión y luego, cuando la economía se elevó nuevamente, el gobierno de Singapur detuvo el workfare y la gente siguió trabajando todo el tiempo.

Beppu: Cuando se trata de Singapur, muy a menudo se oyen críticas de que el sistema carece de la libertad de prensa. ¿Qué opinas de Singapur con respecto a si es que esta noción de libertad de la prensa es tan buena como otros aspectos del sistema de el país?

Mahbubani: Puede parecer como si Singapur está en desventaja, pero la paradoja es que el Reino Unido tiene la prensa más libre y tiene Brexit. Estados Unidos tiene la prensa más libre y elige a Donald Trump. Así que dime, ¿cuál es la virtud de tener libertad de prensa, si al final del día la gente está en una peor situación? Así que creo que en realidad el sistema de Singapur puede funcionar mejor para Singapur y, ya sabes, las diversas restricciones a la libertad de prensa en Singapur son a menudo diseñadas teniendo en cuenta las circunstancias especiales de Singapur.

Por ejemplo, en Francia se puede dibujar caricaturas del profeta Mahoma. En Singapur no se puede porque se deben respetar las sensibilidades religiosas de cada una de las religiones en Singapur. Si vives en una sociedad multicultural, tienes que imponer algunas restricciones sobre lo que las personas pueden o no pueden decir cuando se habla de otras religiones.

Beppu: ¿Crees que la diplomacia de los Estados Unidos bajo la próxima presidencia de Donald Trump haría que Asia florezca independientemente de -si lo ves desde ese ángulo- la intervención de los Estados Unidos? ¿O piensas que si hay un retiro de Estados Unidos de esta parte del mundo habrá más confusión en esta parte del mundo?

Mahbubani: Bueno, para empezar creo que nadie sabe qué va a hacer Trump y Trump  no sabe lo que Trump va a hacer. Pero al mismo tiempo, ha hecho una locura, alejarse del TPP. Y eso es un gran error, porque si Estados Unidos ya no está participando activamente en el juego económico de esta región, China va a dominar. Por lo que China ha ganado cuando Estados Unidos se alejó del TPP. Gran error.

Desafíos de Asia

El año 2017 puede ser un reto para Asia con respecto a que tendrá que hacer frente a sus propios problemas, y uno se refiere a las disputas territoriales en el Mar del Sur de China.

Es una situación lejos de ser ideal para Asia, ya que trata de volver a la etapa de centro del mundo, y luego está la difícil cuestión de las relaciones internacionales en el noreste de Asia.

Mahbubani: Cuando viajé en Europa y América, todo el mundo pensaba que estaba a punto de estallar la guerra en el sur de China. Así que cada vez que doy un discurso en el sudeste de Asia, le digo a mi público americano, te voy a dar una sorpresa… No habrá guerra en el Mar del Sur de China.

Ahora, ¿por qué puedo predecir con confianza que no habrá guerra en el Mar del Sur de China? Porque, mientras que las disputas continuarán, no es de interés de nadie iniciar la guerra en el Mar del Sur de China, por lo que al final del día predigo que se llegará a varios acuerdos bilaterales. Por ejemplo, podría haber una distribución de los recursos. Podrían  haber acuerdos de pesca.

Beppu: ¿Qué hay de las relaciones entre Japón y China? ¿Cuál podría ser la solución entre los dos países para mejorar sus relaciones?

Mahbubani: Por desgracia, en el caso de China y Japón, el rol de la historia es mucho más fuerte, y, francamente, no hay absolutamente ninguna razón para que algo que pasó hace 70 años siga dominando el futuro de las relaciones entre Japón y China. Así que creo que ambos lados deberían encontrar una manera de lidiar con la historia y decir que el pasado pertenece al pasado. No discutamos sobre la historia.

Beppu: Por lo tanto, profesor Mahbubani, para concluir la entrevista, mi pregunta es acerca de sus perspectivas de este nuevo año 2017 en términos del futuro de la propia globalización. ¿Cree que la tendencia de la globalización está en un punto de inflexión o piensa que a pesar de todo lo que está sucediendo, los acontecimientos políticos de 2016, es un proceso inevitable que va a continuar?

Mahbubani: Se está llevando a cabo una fusión de la civilización y si nos fijamos en las estadísticas, el mundo está cada vez mejor y mejor, en parte a través de la globalización. Y sobre la tendencia a largo plazo, soy optimista que la globalización va a continuar. Pero en 2017, en los primeros 6 meses, habrá mucha incertidumbre. Y la incertidumbre se debe a que no sabemos qué hará Donald Trump. Él será el líder del país más poderoso del mundo. Así que espero que después de los 6 meses, el mundo se asiente de nuevo en un ritmo constante de crecimiento y desarrollo más cómodo.

________________________________________

Lo que es interesante es que muchas personas parecen aliarse a la globalización al largo plazo mientras que consideren que recibirán ganancias, pero empiezan a odiarlo cuando ven que otros la disfrutan más. Lampadia

 




Excepcionalismo de Singapur según The Economist

Probablemente Singapur ha sido el país más exitoso del mundo durante los últimos 50 años. Hoy tiene el mejor estandar de vida del planeta, funcionarios públicos del mejor nivel (seleccionados meritocráticamente) un reconocido Estado de Derecho, los menores niveles de corrupción en el mundo y un sector privado innovador y pujante.

Teléfonos inteligentes, autos inteligentes, ciudades inteligentes… la etiqueta de “smart” (“inteligente”) se ve en una gama cada vez más amplia de la vida contemporánea. Esta es la tendencia a futuro que denotará qué países mejorarán y cuáles se quedarán atrapados en el pasado. Singapur busca innovar y ser disruptivo constantemente a pesar de ser uno de los países más exitosos del planeta. Ahora está en busca de algo totalmente nuevo para sus segundos 50 años de vida: ser la “nación inteligente”.

http://www.arabiangazette.com/wp-content/uploads/2014/06/singapore.jpg

Marina Bay, Singapur.  Fuente: thehoneycombers.com

Como hemos difundido en publicaciones anteriores, Lee Kuan Yew dirigió un Estado bastante autoritario, pero además de alcanzar éxitos económicos y sociales espectaculares, Singapur logró ser uno de los países más ordenados y con menos corrupción del mundo. Uno de sus desarrollos más importantes ha sido el establecimiento de la meritocracia entre los funcionarios públicos. Ver en Lampadia: 10 razones que explican el éxito de Singapur e Instalemos un Estado Meritocrático en el Perú.

Singapur también es uno de los países más impolutos y ordenados de Asia. Hasta hace poco el chicle estaba prohibido, así como fumar en la vía pública fuera de las zonas habilitadas para ello. Cruzar la calle por fuera del paso peatonal lleva sanción, al igual que comer en el metro. Con tantas exigencias, multas y órdenes, no es de extrañar que esta sea hoy una ciudad modelo. Los diferentes barrios que la componen: indio, árabe o chino, demuestran que no sólo ya no hay tensión racial, sino que esta pequeña ciudad asiática ha resurgido gracias a la mezcla de culturas y una dedicación al trabajo. Ver en LampadiaSingapur piensa y planea su futuro y Pensamientos sobre la sociedad del futuro.

En la reunión de APEC tuvimos en Lima a su Primer Ministro, quién representó lo que llamamos ‘sentido común de la modernidad’. 

Hotel Marina Bay Sands, Singapur. Fuente: www.marinabaysands.com

El ejemplo de Singapur es muy importante para el Perú, especialmente en medio de la necesidad de terminar de definir el camino de un nuevo gobierno. Por ello, compartimos un artículo de The Economist sobre el balance del gobierno de Lee Kuan Yew y los retos de sus próximos 50 años. Interesante ver como un país tan exitoso se avoca a pensar en como tener un futuro aún mejor. Lampadia

El excepcionalismo de Singapur

Para continuar floreciendo en su segundo medio siglo, la milagrosa ciudad-estado del sudeste asiático necesitará cambiar sus caminos, sostiene Simon Long

The Economist
18 de julio de 2015
Traducido y glosado por
Lampadia

A los 50 años, según George Orwell, todos tienen la cara que se merecen. Singapur, que celebró su aniversario número 50 como país independiente el pasado 9 de agosto, puede estar orgulloso de su vigor juvenil. La vista desde la piscina infinita en el techo de Marina Bay Sands, un hotel de tres torres, casino y centro de convenciones, es futurista. Un bosque de rascacielos resplandece a la luz del sol, templos de globalización que llevan los nombres de algunos de sus profetas: HSBC, UBS, Allianz, Citi. Se elevan por calles muy transitadas donde el tráfico fluye suavemente. Abajo se encuentra la Marina Barrage, la cual mantiene el mar del río Singapur serpenteando a través de lo que queda del antiguo centro colonial de la ciudad. En la distancia se ven bloques de gran altura, donde viven la mayoría de los singapurenses. El mar está lleno de buques, transbordadores y portacontenedores. Al oeste se encuentra uno de los puertos de contenedores más activos de Asia y un enorme complejo de refinería y petroquímica. En la punta oriental de Singapur, tal vez el aeropuerto más eficiente del mundo. Pero la vista sigue siendo sorprendentemente verde. El orgullo del gobierno de crear una “ciudad en un jardín” no parece tan fantástico. 

Singapur es, para usar una palabra que sus líderes favorecen, un lugar “excepcional”: la única ciudad-estado que funciona plenamente en el mundo; un verdadero centro mundial del comercio, finanzas, transporte y viajes; y el único entre los países más ricos del mundo que nunca ha cambiado a su partido gobernante. En su reunión del 1 de mayo, su primer ministro Lee Hsien Loong afirmó que “para sobrevivir hay que ser excepcional”. Este informe especial examinará los diferentes aspectos del excepcionalismo de Singapur y se preguntará si su supervivencia está realmente amenazada. Argumentará que Singapur está bien situado para prosperar, pero que en su segundo medio siglo enfrentará amenazas muy diferentes a las que enfrentó en su nacimiento accidental, no planificado, hace 50 años. Ellos requerirán respuestas muy diferentes. El mayor peligro que enfrenta Singapur puede ser la complacencia -la creencia de que las políticas que han tenido tanto éxito durante tanto tiempo pueden ayudarlo a negociar un nuevo mundo.

En 1965 Singapur se vio obligado a abandonar una corta federación con Malasia, el país al norte, al que se unía con un puente. Lee Kuan Yew, que se convirtió en primer ministro de Singapur, siempre había visto su futuro como parte de Malasia, llevando a su país a una federación con su vecino en 1963. Pero tuvo que ajustar su pensamiento cuando Singapur fue expulsado en 1965. Para entonces, se había convencido de que Singapur, de mayoría china, siempre estaría en desventaja en un gobierno dominado por malayos.

La muerte de Lee en marzo de este año, de 91 años, atrajo homenajes de todo el mundo. Pero Lee habría estado más orgulloso de la reacción en Singapur. Decenas de miles de personas hicieron cola durante horas en el calor bochornoso o la lluvia torrencial para visitar su ataúd en homenaje. La multitud mostró otro milagro: Singapur, un país que nunca estuvo destinado a ser, compuesto por inmigrantes racialmente diversos -una mayoría china (alrededor del 74%) con minorías sustanciales de malayos (13%) e indios (9%) – había adquirido una identidad nacional. Las multitudes no sólo estaban de luto por Lee; celebraban un improbable patriotismo.

Lee Kuan Yew mismo definió la excepcionalidad de Singapur. Como primer ministro hasta 1990, construyó un sistema político a su imagen. En línea con su máxima de que “la poesía es un lujo que no podemos permitirnos”, fue implacablemente pragmático, lo que le permitió gobernar (sobre todo) como un benevolente dictador. La Ley de Seguridad Interna de la era colonial ayudó a aplastar a la oposición a partir de los años sesenta. El Parlamento ha sido más una cámara que hacía eco que un control del poder ejecutivo. Ningún candidato de la oposición ganó un asiento hasta 1981. La prensa nacional camina de puntas en la línea del gobierno; las demandas por difamación han intimidado y a veces han arruinado a los políticos de la oposición y han golpeado la última línea de la prensa extranjera (incluyendo The Economist).

Singapur, a veces se bromea, es “Asia-lite”, en el corazón geográfico del continente, pero sin el caos, la suciedad, el agua del grifo y el tráfico. También ha sido una “democracia-lite”, con todas las formas de competencia democrática, pero despojada del bullicio desordenado -y sin la sustancia. Parte del “excepcionalismo de Singapur” es un sistema de gobierno unipersonal legitimado en las urnas y, 56 años después de que el Partido de Acción Popular (PAP) de Lee tomara el poder, enfrenta poca amenaza inmediata de perderlo. El sistema tiene muchos defensores en casa y en el extranjero. Singapur tiene muy pocos delitos y prácticamente ninguna corrupción oficial. Se sitúa en la parte superior de la mayoría de los indicadores de “desarrollo humano”, como la esperanza de vida, la mortalidad infantil y el ingreso por persona. Sus líderes buscan mantenerse en altos estándares. Pero es discutible si el sistema construido por Lee puede sobrevivir en su forma actual.

Afronta dos desafíos distintos. Una es la falta de balances de poder en el caso de una fuerte oposición política. Bajo la influencia del incorruptible Lee y sus colegas, el gobierno sigue siendo limpio, eficiente e imaginativo; pero para asegurar que se mantenga así, una  democracia sustantiva puede ser la mejor esperanza. En segundo lugar, la confianza en el PAP, como lo demuestra la elección más reciente en 2011, ha disminuido. El partido ha sido dañado por dos de sus propios éxitos. Uno de ellos es de la educación, donde sus escuelas, colegios y universidades, tan admirados, han producido una generación de ciudadanos altamente educados y cómodos que no tienen mucha tolerancia con el estilo de gobierno del PAP. En un jubiloso mitin anual para hacer campaña por los derechos de lesbianas, gays, bisexuales y transexuales (LGBT) el 13 de junio, una multitud estimada en 28,000 personas mostró su desprecio divertido por el conservadurismo social iliberal que el PAP ha impuesto. Los singapurenses más jóvenes también se irritan ante la censura y ya no tienen tanto miedo de las consecuencias de oponerse al PAP.

Un segundo éxito del PAP que ahora le juega en contra, es un gran aumento en la esperanza de vida, ahora entre los mayores del mundo. Esto ha aumentado el número de ancianos, algunos de los cuales ahora sienten que el PAP ha roto una promesa central que les había hecho: que a cambio de estar obligados a ahorrar una gran parte de sus ganancias, disfrutarían de una jubilación despreocupada. Y no sólo los ancianos han comenzado a cuestionar las políticas del PAP. Muchos ciudadanos de Singapur se sienten incómodos por el rápido flujo de inmigrantes. Estas preocupaciones apuntan a los dos problemas más importantes y vinculados de Singapur: la escasez del espacio y el rápido envejecimiento de la población.

Lampadia




Hasta los campeones de Singapur buscan mejorar

Hasta los campeones de Singapur buscan mejorar

En tan solo cinco décadas, Singapur pasó de ser una de las naciones más pobres y subdesarrolladas del planeta a una próspera, industrializada y moderna, cuyo exitoso modelo educativo, entre muchos otros logros, es admirado en todo el mundo. En 2015, obtuvieron el primer puesto en el ranking mundial de escuelas, con los resultados basados ​​en matemáticas y ciencia. Sus estudiantes brillan en los primeros puestos de las pruebas internacionales de educación más exigentes, como las PISA, de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). Pero ahora, el mismo Ministerio de Educación de Singapur quiere impulsar un cambio radical en su educación.

Y es que la educación es más que solo notas o calificaciones. Es tambien tener habilidades como: la comunicación, la colaboración, el pensamiento crítico, la creatividad, las artes y ser capaces de adaptarnos y relacionarnos con los otros. Crear conexiones no solamente en términos de relaciones interpersonales, sino ser capaces de entender la perspectiva de los otros.  Es por este motivo que el Ministerio de Educación de Singapur ha publicado un video que hace hincapié en la importancia del esfuerzo como indicador de éxito.

Enseñar no es sólo acerca de centrarse en la nota final; se trata de dotar a los estudiantes con las habilidades para hacer frente a los desafíos de la vida. Ver cómo mdm pua es el apoyo y orientación enseñado a 15 años de edad, shirley aceptar y aprender del fracaso, la inspiración para escribir su propia historia de éxito.
Ganas de hacer este tipo de una diferencia?
Únete a nosotros!

El anuncio, publicado en el Día del Maestro, cuenta la historia de una alumna, Shirley, que tiene dificultades con el curso de geografía. Su profesora, la Señora Pua, trabajó con ella arduamente para mejorar y aprender. Sin embargo, vuelve a salir desaprobada en el examen. La Señora Pua le dice a Shirley que no se entristezca, ya que el esfuerzo puede ser más importante que las calificaciones.

Este mensaje tan importante se da en un país que fomenta una carrera académica desde una edad muy temprana. Por ejemplo, el paso de la escuela primaria a la secundaria se regula mediante un examen llamado PSLE (Primary School Leaving Examination). Es una prueba que se toma a los 12 años. En función de los resultados, los alumnos pasarán a secundaria en una de las tres vías siguientes: Express, NA (Normal Academic) o NT (Normal Technical). La mayoría de los ‘Express’ terminarán entrando en la universidad, mientras que la mayoría de NA y NT terminarán en la formación profesional o en la técnica, respectivamente, salvo quien decida ponerse a trabajar a los 16 años.

La crítica del anuncio es justamente que la educación en Singapur está muy enfocada a las calificaciones, y por supuesto, este país tan exitoso no se duerme en sus laureles. Ya están viendo como enriquecer la educación para complementar los logros tradicionales.

En Lampadia venimos insistiendo para que nuestra sociedad entienda que necesitamos en educación necesitamos emprender una verdadera revolución. No podemos seguir teniendo una educación para el siglo XX, basada en currículos obsoletos (a pesar de ser de muy reciente diseño), centrada en el rol educador del maestro y no en el importante rol de facilitador. Tenemos que enseñar por proyectos que interrelacionen los conocimientos y reforzar el entrenamiento en capacidades blandas.

No es aceptable que los peruanos no tengamos claridad sobre lo que se necesita y que sigamos convalidando el error. ¡Revolución Educativa Ahora! Lampadia

Ver líneas abajo la publicación de la BBC al respecto:       

¿Podrá un spot cambiar la forma de pensar de los singapurenses sobre la educación?

Por Yvette Tan

BBC News

8 de Setiembre de 2016

Traducido y glosado por Lampadia

El sistema educativo de Singapur está considerado como uno de los mejores en el mundo. Fuente: Youtube

Un anuncio publicitario que desafiando la manera en que los singapurenses ven la educación ha puesto a hablar al país.

El sistema educativo de Singapur, uno de los mejores en el mundo, es conocido por su énfasis en las notas y exámenes. Pero un video por el Ministerio de Educación (MOE por sus siglas en inglés) sugiere que la actitud podría estar cambiando.

El corto, basado en una historia real, muestra a la Señora Pua, una profesora de la geografía, haciendo lo mejor posible para alentar y ayudar a su estudiante Shirley, que sigue fallando en sus pruebas.

El vídeo se centró en Shirley y la Sra Pua, su profesora de geografía que la tomó como discípula. Fuente: Youtube

A pesar de no pasar sus exámenes, Shirley fue alabada por su arduo trabajo y determinación para tener éxito. Fuente: Youtube

A pesar de todo su arduo trabajo, entusiasmo y progreso, Shirley todavía vuelve a fallar su siguiente examen, pero se siente alentada por la Señora Pua, quien le afirma que el éxito no se trata de sacar buenas notas sino de hacer todo lo posible.

“Me alienta ver al Ministerio transmitir este mensaje – Es un pequeño paso hacia un objetivo mayor, donde los estudiantes reciben una educación integral más allá de los conocimientos académicos. ¡Felicitaciones!” dijo un mensaje en la página de Facebook del Ministerio de Educación en respuesta al video.

“Me gustó que el anuncio no terminara dramáticamente, [con la estudiante] logrando notas  altas. ¡Inspirador!” dijo otro comentarista.

“Sollozando como un bebé”, dijo otro.

‘Intenten convencer a los padres ‘

El Ministerio de Educación dijo que el video, publicado el pasado viernes con motivo del Día del Maestro de Singapur, buscaba “reforzar el desarrollo integral de los estudiantes”.

“Nuestros maestros siempre se han centrado en la formación del carácter y de hacer una diferencia en las vidas de nuestros estudiantes en la escuela y más allá”, dijo.

El país también ha venido implementando nuevos programas para las escuelas secundarias, con un mayor valor atribuido a las artes y la educación al aire libre.

Pero algunos dicen que todavía hay mucho camino por recorrer antes de cambiar las actitudes sociales.

En la década de 1960, Singapur tenía analfabetismo generalizado, ahora tiene los mejores resultados escolares de todo el mundo

“Este anuncio es tan engañoso. He visto a los profesores comunicarse con los padres si a sus hijos no les va bien en el colegio. El sistema educativo de Singapur es una locura”, dice una publicación en Facebook.

“Esto es sólo un anuncio,” dijo otro post. “En realidad, basado en mi propia experiencia, a los maestros les gusta sofocar a los estudiantes más que animarlos.”

“Intenten convencer a los padres”, dijo otro.

Los niños comienzan la carrera académica a una edad temprana en Singapur

Fuente: GettyImages

Una encuesta reciente del gobierno muestra que las familias en Singapur gastan conjuntamente aproximadamente $ 1.1 mil millones de dólares de Singapur (US$ 827 millones) al año en clases particulares, casi el doble que hace una década.

Y funciona – Singapur consiguió el primer puesto en 2015 en el ranking mundial de escuelas, con los resultados basados ​​en matemáticas y ciencia. El Reino Unido fue puesto 20 y EEUU, 28.

Nicholas Ong, que se graduó del Anglo-Chinese School (Independiente), una de las escuelas de Singapur, dijo que “los niños que crecen en Singapur empiezan la carrera académica a una temprana edad”.

“Mis padres no me imponen muchas exigencias académicas, pero siempre había una presión subliminal de la sociedad para obtener buenas calificaciones”.

Un profesor en una universidad en Singapur, que no quiso dar su nombre, dijo a la BBC que el anuncio podría alentar a “una nueva narrativa entre los habitantes de Singapur sobre la educación: que el proceso es tan importante como el resultado”.

“Creo que el Ministerio de Educación se dirige en la dirección correcta al reconocer, e incluso hasta cierto punto, afirmar que existen diversas rutas en la vida más allá de una centrada en las calificaciones. [Pero] los padres y los estudiantes a menudo avivan el fuego de la tensión sobre las notas a causa de una estrecha definición de lo que puede ser el éxito”. Lampadia