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Las condiciones educativas duelen en muchos países

Las condiciones educativas duelen en muchos países

Bill Gates, probablemente, uno de los empresarios más preocupados por el bienestar de la humanidad, nos presenta líneas abajo, los elementos más importantes de su  conversación con el Maestro del Año del Estado de Washington, Nate Bowling. Alguien capaz de convertir maestros promedio en muy buenos y, maestros buenos en extraordinarios. Además, por supuesto, de ser un gran maestro con tres elementos muy importantes, vocación, capacidad de aprendizaje y experiencia.

Una de las cosas que dice Nate es que los alumnos más pobres necesitan a los mejores maestros y, éstos, mientras avancen en la dirección correcta, deben tener toda la libertad para acomodar su proceso educativo.

Otro importante testimonio de la necesidad de instalar en el sistema educativo, diversidad, innovación y libertad. Algo, lamentablemente muy lejano de la inspiración y estructura de la educación en el Perú.

Una conversación poderosa sobre escuelas, pobreza y raza

Por Bill Gates

22 de agosto, 2016

Traducido y glosado por Lampadia

Nate Bowling estaba sentado en mi oficina, hablando acerca de la enseñanza. Yo me considero un nerd, así que cuando el Maestro del Año del Estado de Washington usó la palabra al inicio de nuestra reunión, y lo dijo como un cumplido, me incorporé un poco en la silla.

“Yo bromeo acerca de ser un agricultor nerd,” dijo Nate. “Estoy tratando de cultivar una especie de beca de los estudiantes, y una pasión por el aprendizaje. Por lo tanto, llevar la pasión a la clase, y ver eso y altura de las circunstancias”.

Le pregunté Nate por qué está tan apasionado por la enseñanza. “Es una cuestión de vida o muerte”, dijo. “Si mis estudiantes no tienen éxito en la escuela, terminarán en un complejo industrial de prisiones”.

Nate enseña en el Lincoln High School, en Tacoma, cerca de 30 millas al sur de Seattle. La mitad de sus estudiantes son afroamericanos o hispanos. Más del 70 por ciento son elegibles para almuerzos a precio reducido, lo que hace a Lincoln un ejemplo clásico de lo que los educadores llaman la ‘nueva mayoría’, reflejando el hecho de que más de la mitad de los estudiantes de las escuelas públicas de Estados Unidos, viven en la pobreza.

La mayor parte de la ‘nueva mayoría’ no se gradúan de la escuela secundaria preparados para la universidad o para un trabajo bien pagado. Así que lo que sucede en diversas escuelas de alta pobreza como Lincoln, tiene mucha importancia para el futuro del país.

Afortunadamente, lo que está sucediendo en el Lincoln es bastante positivo. Tiene una tasa de graduación de 80%, por encima del promedio de las escuelas de Washington con una demografía similar, y el 40 por ciento de sus estudiantes están tomando cursos de nivel avanzado (AP).

Nate se apresura a dar crédito a su director y a sus colegas maestros. Si ellos no son  como él, no es de extrañar que los estudiantes de Lincoln estén haciendolo bien. Nate  no sólo era el Maestro del año en el estado, también fue finalista de Profesor Nacional del Año. Me dijo que todos los estudiantes que aconsejó en 2015-16 fueron aceptados a las universidades o escuelas de formación profesional.

“Todos los niños pueden aprender si tienen apoyo”, dijo. Enseña Gobierno AP a los de  grado 12 y para mi sorpresa AP-Geografía Humana en el 9º grado. Me preguntaba si era arriesgado, hacer que los estudiantes que a menudo no pueden leer en su grado,  reciban entrenamiento de altos estándares. Pero Nate no lo ve así.

“No puedo dar la clase como lo haría con un grupo de niños del mismo grado, pero esos niños pueden lograr”, dijo. “Mi director y yo tenemos un entendimiento. No estamos preocupados por que los niños pasen el examen AP. Sólo queremos que aprendan. Yo preferiría tener el 100 por ciento de los niños en la clase más difícil y que  25 pasen la prueba de AP, que tener 25 hijos en ella y que el 100% pase”.

A principios de este año, Nate llamó la atención nacional cuando escribió un post de blog provocador titulado “La Conversación que estoy estoy cansado de no tener.” El post, una brutal mirada a la brecha racial en las escuelas públicas de Estados Unidos,  generó más de un millón de comentarios y fue reimpreso en los principales periódicos. Lo leí antes de nuestra reunión y concuerdo en gran parte con él. Le pregunté a Nate acerca de la reacción que tuvo.

Gran parte de la retroalimentación fue positiva, dijo. Pero no toda ella. “La entrada en el blog me reveló lo que la gente cree sobre mis estudiantes”, dijo.

Como ejemplo, Nate me mostró una carta que recibió de un abogado del estado de Nueva York que había leído su post. Lo guarda como un recordatorio del desafío que queda. “Básicamente traza todas las razones por las que los estadounidenses blancos no quieren que sus estudiantes asistan a la escuela con los negros americanos,” dijo Nate. “La gente responde a esta carta con rabia, pero si le doy vuelta como un conjunto de recomendaciones de política, reflejaría exactamente lo que tenemos en la sociedad actual. Hace el caso de las escuelas segregadas”.

Ciertamente estoy de acuerdo que aquellos de nosotros que viven en los suburbios por lo general no ven que está pasando en escuelas del centro de la ciudad. Es como dos mundos diferentes. Esta es una razón por la que Melinda y yo salimos a visitar diferentes escuelas de todo el país como parte del trabajo de educación de nuestra fundación, que tiene que ver con el apoyo a la ‘nueva mayoría’.

Pero incluso si el país mejora la integración y permiten que los fondos sean más equitativos -que son objetivos importantes- todavía tendríamos que asegurarnos de que cada estudiante tenga un buen maestro, y cada maestro reciba las herramientas y el apoyo para ser fenomenal. Nate le pregunté cómo cree que podemos hacer eso.

Parte de la solución, dijo, es crear incentivos para que los maestros excepcionales  estén en las escuelas de alta necesidad. Y eso empieza por reconocer que las demandas de la enseñanza en una escuela de alta pobreza son diferentes a las exigencias de la enseñanza en una rica. También significa que el profesor, tenga una efectiva autonomía. Mientras que están logrando resultados y enseñen con las normas apropiadas, argumentó, merecen libertad en la elección del plan de estudios que funciona para ellos y sus estudiantes.

Por supuesto, no todos los maestros comienzan con la misma eficacia. Nate lo sabe por experiencia. En su primer día en el aula hace 10 años, “yo estaba aterrado, y los estudiantes estaban aburridos. Miro hacia atrás en los planes de lecciones que hice hace cinco años y pienso, hombre, que deberían haberse ido!”

Es por eso que es un gran creyente del desarrollo profesional. “Creo en mi corazón que podemos tomar maestros promedio y hacerlos más eficaces y podemos tomar los maestros eficaces y hacerlos sobresalientes”, dijo Nate. “Uno de los errores que cometemos es que creemos que la enseñanza tiene que ver con la aptitud. Se necesita un nivel básico de aptitud para enseñar, pero sólo porque usted tenga un Ph.D. en algo, no significa que vaya a ser bueno en la comunicación del contenido. La enseñanza es en parte contenido, parte trucos  y se puede enseñar”.

Otra cosa que podría ayudar a los maestros, dijo Nate, es “tratarlos como los tesoros que son.” Él fue co-fundador de una organización, ‘profesores unidos’, para ayudar a los maestros a informar a las políticas del nivel distrital y estatal.

“Las escuelas son los componentes básicos de nuestra democracia”, me dijo. “Si vamos a crear una sociedad mejor, tiene que pasar por las escuelas. Y si vamos a construir una mejor sociedad a través de nuestras escuelas, tiene que pasar por una mejor enseñanza”.

Fue una conversación potente. Nate está hablando de algunos temas difíciles, pero son temas que tenemos que discutir. Al final me dio una sensación de esperanza sobre lo que es posible para la ‘Nueva Mayoría’. Me alegro de que Nate, el agricultor nerd, esté   cultivando estudiantes –y más maestros como él- por muchos años por venir. 

Lampadia




La Reforma Policial (IV)

El Presupuesto por resultados

Según lo ofrecido, continuamos con el análisis de la Reforma Policial. Una de las reformas que ha sido reclamada con insistencia por la sociedad civil. Este despacho es parte de nuestra biblioteca virtual sobre: Estado del Siglo XXI.

Una herramienta de gestión que ha probado ser muy positiva en distintas instancias del Estado, es el ‘presupuesto por resultados’, que permite un mejor control de la ejecución de los programas públicos y eventualmente facilita la participación de la ciudadanía. 

Resumen ejecutivo

La política que empieza a tener un efecto en la organización, racionalidad y resultados del ministerio del Interior y la Policía Nacional, ha sido la inclusión de un porcentaje creciente del presupuesto del sector dentro de la metodología del presupuesto por resultados. Esto ha permitido iniciar un proceso de interacción con el Ministerio de Economía que deberá llevar a definir claramente objetivos y organizar el gasto en función de esos objetivos.

Introducción

La aplicación de la metodología del presupuesto por resultados (PPR) al Ministerio del Interior comenzó el 2011, con el “Programa Estratégico Seguridad Ciudadana”, que abarcó el 40% del presupuesto total asignado al Pliego. El objetivo principal de este programa era reducir la victimización en las zonas urbanas del país, es decir, el porcentaje de personas y hogares que fueron víctimas de uno o más eventos que atentaron contra su seguridad durante los últimos 12 meses. La victimización había empezado a ser medida sistemáticamente por la Encuesta Nacional de Programas Estratégicos (ENAPRES) desarrollada por el INEI a partir del 2010, como parte de esta exigencia. Para reducir ese indicador, el ministerio diseñó varios “productos”. Tres de ellos, por ejemplo, fueron considerados en una evaluación externa del programa: el patrullaje, los operativos y la mejor relación con la comunidad.

La evaluación externa

Esta evaluación externa fue hecha por un  panel independiente de expertos integrado por Nelson Shack (Coordinador), Lucía Dammert (Especialista Temática) y Felipe Chacón (Especialista en Metodologías de Evaluación).

La evaluación encontró, por ejemplo, que no existía relación entre la distribución del personal operativo y la densidad poblacional de cada departamento. También que la información estadística interna era muy deficiente de modo que no se podía establecer las metas con claridad ni cuántas operaciones había que hacer para alcanzarlas. No se sabía, por ejemplo, cuál era la capacidad operativa de las fuerzas policiales: “Aunque se sabe el número de vehículos de la PNP, el área de planeamiento no conoce cuánto rinden o cuál es su estado, ni sus necesidades de mantenimiento. Si no se conoce la capacidad instalada, no es posible definir la capacidad de producción operativa de las fuerzas policiales y por consiguiente, tampoco las metas (p. 12).

El informe advierte que no existe una base de datos ni instrumentos estandarizados para que la Oficina de Planificación del MININTER pueda administrar el sistema de seguimiento del propio programa presupuestal.

Sin embargo -anota el informe-, la PNP sí cuenta con información sobre el funcionamiento de las comisarías: ocurrencia de delitos, detenciones, incautaciones, y su dotación de recursos: armas y municiones, personal y vehículos por comisaría, patrullaje, operativos realizados. No obstante, “la Alta Dirección de la PNP no genera retroalimentación hacia las comisarías con respecto a su desempeño o posibles aspectos de mejora”.

Y agrega: “El MININTER cuenta con dos sistemas de seguimiento simultáneos: el del área de planificación y el del área operativa. Sin embargo, ambas áreas no comparten información al desarrollar la planificación estratégica y operativa” (p. 12).

“Además, los indicadores operativos existentes no se usan para analizar los costos y por tanto, no se puede conocer los niveles de eficiencia (del)  servicio” (p. 12). En general, el informe señala que el programa no muestra el costo real de productos y actividades y por tanto, no se conoce cuánto se destina efectivamente al gasto en Seguridad Ciudadana, que se mezcla con otros gastos.

En cuanto al patrullaje, que es uno de los “productos” del PPR, la evaluación señala que no existen instrumentos de seguimiento operativo -mediante el uso de GPS, por ejemplo-, para saber si “los patrullajes se realizan acorde a lo planificado, a lo pertinente y si existen déficits de recursos para cubrir las áreas especificadas” (p. 13).

Además, la evaluación constata que los recursos no se asignan en función de una focalización basada en índices de criminalidad. Es decir, no se actúa más allí donde los índices son peores. Recomienda “establecer un Mapa Nacional del Delito, con plataforma en tiempo real, generar un Observatorio de Criminalidad y un mapa del delito a nivel local que sirva de insumo para el Mapa Nacional”. Algo elemental.

La Matriz de compromisos

En resumen, no se puede medir la eficacia del programa, no se puede determinar el área geográfica efectivamente controlada, ni la calidad de los productos. La evaluación entonces culmina con una serie de recomendaciones que han sido la base de una “Matriz de Compromisos suscrita entre el Ministerio del Interior y el Ministerio de Economía y Finanzas”, que se puede ver en la página web del ministerio de Economía. Y cuyo cumplimiento es evaluado semestralmente. El MEF ha atado el incremento de recursos presupuestales al cumplimiento de las metas establecidas en esta matriz, condicionamiento que ha sido clave para empezar a introducir racionalidad en el gasto y la gestión del sector.

Para poder evaluar los requerimientos y la eficacia del patrullaje, por ejemplo, la matriz de compromisos recomienda “diseñar e implementar una operación piloto focalizada con protocolos de operación, concentrada en dos productos: patrullaje y comunidad organizada”. Al respecto, el ingeniero Francisco Carbajal, Director General de Planeamiento y Presupuesto del Ministerio del Interior, nos informa que el Ministerio ha contratado consultorías para diseñar el proyecto de la operación piloto, el personal y equipamiento que necesitaría una comisaría modelo según tipos de comisarías, y definir el patrullaje óptimo a fin de poder, por ejemplo, calcular el déficit existente, y los protocolos de patrullaje. No obstante, hay un retraso, porque la operación piloto correspondiente ya debía estar culminada a fines del 2015.

También recomienda diseñar e implementar un sistema de costos que permita diferenciar los costos de los productos “patrullaje por sector” y “operaciones policiales para reducir los delitos y faltas” en las comisarías, distinguiendo tipos de comisarías. Es decir, identificar los recursos necesarios y el costo de lo que es seguridad ciudadana propiamente dicha, según tipos de comisarías. Para eso se ha contratado también consultorías. Según Carbajal, se ha identificado los insumos por tipo de comisarías y se tiene ya la matriz de costos. Lo que hace falta, ahora, es sistematizar el software del MEF para incorporar esta información.  

Se tiene una definición provisional de 5 tipos de comisarías según cantidad de población atendida, donde se está revisando, por ejemplo, el área que debe haber en cada comisaría para las reuniones con las juntas vecinales. Esto se relaciona con otro de los compromisos de la matriz, referido a establecer mecanismos de coordinación con gobiernos locales y juntas vecinales y definir los protocolos de las juntas vecinales articuladas a las comisarías. Al respecto, Carbajal informa que ya se tiene un manual para dichos protocolos y lo que falta son los trípticos y videos para su difusión, algo que debió estar listo en junio del 2015.

Por supuesto, otros compromisos se refieren al desarrollo de un mapa nacional del delito y mapas del delito locales georeferenciados, usando el software del sistema de denuncias policiales (SIDPOL). Se ha avanzado en georeferenciar el SIDPOL a nivel de prueba, y se espera que este año 2016 1,200 comisarías podrán tenerlo operativo en la medida que se expanda la banda ancha.

Un tema importante son los indicadores de resultados. Como se sabe, la encuesta de la ENAPRES del INEI registra una sorprendente y difícil de explicar caída de 10 puntos en la victimización por delincuencia entre 2011 y 2014, pero la matriz de compromisos pide separar los delitos que corresponden a seguridad ciudadana, y añadir un indicador que incluya a las faltas y contravenciones, que son poco denunciadas. De otro lado, lo ideal sería que el indicador de victimización pudiera darse a nivel de comisarías.

Algo que no aparece en los compromisos es la necesidad de identificar el déficit de investigadores o detectives, una cifra que ni la Policía ni el ministerio del Interior poseen. No saben cuál es el déficit de personal policial dedicado a la investigación del delito. Carbajal explica que es posible medirlo a partir de la cantidad de denuncias que se resuelven y las que no se resuelven en un año. Se tiene ese indicador pero no lo han usado para hacer el cálculo de cuál sería el mencionado déficit.

Carbajal concluye que, gracias a los presupuestos por resultados, que ya son 7 y cubren el 56% del presupuesto del sector, que es de 10 mil millones, el presupuesto ha evolucionado en el sector. “Hasta el 2013 el presupuesto era muy desordenado. Carecía de sustento. Ahora todo tiene sustento, hay metas, números. La dirección ejecutiva de presupuesto de la PNP es dirigida por un oficial general, pero contrata a civiles en los equipos técnicos.  Por todo esto tenemos ahora más recursos en el sector”, explica.

Recomendaciones

  1. Profundizar el presupuesto por resultados en el sector Interior y exigir el cumplimiento de la matriz de compromisos a cambio de dar más recursos.
  2. Identificar el déficit de investigadores o detectives.

Entrevistas

Carbajal, Francisco, Director General de Planeamiento y Presupuesto del Ministerio del Interior, 21 de enero 2016

Reyes, Jaime, Jefe de gabinete de asesores del Ministro del Interior, y Javier Llaque, asesor, 16 de octubre de 2015

Bibliografía

INEI: Encuesta Nacional de Programas Estratégicos  2011-2014

Lampadia, “La Reforma Policial (I)”, 14 de enero de 2018

Lampadia, “La Reforma Policial (II)”, 8 de febrero de 2016

Ministerio de Economía y Finanzas: “Matriz de Compromisos de Mejora de Desempeño ‘Seguridad Ciudadana’”

Shack, Nelson (Coordinador), Lucía Dammert (Especialista Temática) y Felipe Chacón (Especialista en Metodologías de Evaluación): Evaluación de Diseño y Ejecución Presupuestal – EDEP Seguridad Ciudadana – Policía Nacional del Perú, 2013

Lampadia