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Savater: Sobre la formación de ciudadanos

Savater: Sobre la formación de ciudadanos

Ayer publicamos la presentación de Luis Bustamante Belaunde sobre la formación de ciudadanos plenos. Ver en Lampadia: Educación y formación de ciudadanos plenos. Charla que Bustamante dio en el foro organizado por la Asociación de Clubes Departamentales, Provinciales y Distritales de Lima junto con Lampadia.

La formación de los jóvenes tiene que comprender las capacidades cognitivas (cada día más cerca al toque de una tecla), las habilidades blandas, aquellas que les permiten desarrollar un pensamiento crítico, resolución de problemas y trabajo en equipo, entre otras y, además, de manera muy importante y muchas veces ignorada, la formación de ciudadanos con conciencia de pertenencia y compromiso cívico.

Si no nos preocupamos por esto último, pasará como dice Fernando Savater: “Aquel que no tiene la suerte de tener una familia y unos padres y maestros esforzados y cariñosos, será educado por la banda de gangsters de su barrio, los peores ejemplos que vea por TV o las formas más brutales de la política”.

Recomendamos leer la magnífica entrevista de Somos a Savater:

“El reto es crear ciudadanos”

La educación democrática debería ser el gran soporte de la escuela, nos dice el pensador español, autor del clásico ÉTICA PARA AMADOR. Es un defensor del aprendizaje creativo desde el ocio y de aleccionar la razón, no las emociones.

Entrevista a Fernando Savater, Filósofo y escritor

Por Rafaella León

El Comercio – Somos, 05 de marzo de 2016

Glosado por Lampadia

 

¿Cómo debería ser la educación del siglo XXI? Buscando resolver esta interrogante, Fundación Telefónica organiza regularmente encuentros internacionales, en los cuales suelen destacar voces determinantes como la del filósofo Fernando Savater (San Sebastián, 1947). En este diálogo con Somos invita a reflexionar sobre el presente y el futuro de la escuela y sobre los dos objetivos clave de la pedagogía: enseñar a ser ciudadanos y a perseguir la felicidad.

¿Qué maestros necesitan los alumnos del siglo XXI?

Tienen que ser primero personas bien preparadas. Nadie puede dar lo que no tiene, transmitir conocimientos, pautas de vida que ignora. El maestro tiene que ser paciente, porque la educación es un trabajo de largo alcance, exige muchas veces tener condescendencia con los errores. Y luego tiene que tener coraje, valor. Muchas veces enseñar es ir a contracorriente, y hay que ser capaz de decir esto es lo que es, no importa que no esté de moda o esté menos valorado.

Los maestros pueden impartir buenas enseñanzas, pero el mundo trae otras, no siempre correctas. ¿Cómo preparar a los estudiantes para ello?

Todos somos de un modo o de otro educados, el problema es por quién. Aquel que no tiene la suerte de tener una familia y unos padres y maestros esforzados y cariñosos, será educado por la banda de gangsters de su barrio, los peores ejemplos que vea por TV o las formas más brutales de la política. Sin educar no se va a quedar, el problema es si lo buenos educadores lograremos llegar antes que los malos. Hay que prepararlos para enfrentarse a las dificultades del mundo.

Algunos maestros postulan que debe tenerse en cuenta también el lado emocional y no solo lo cognitivo en la enseñanza.

El lado emocional se cuida solo. La educación, sobre todo, es el desarrollo de condiciones racionales. Por supuesto, tienen vinculaciones con la vida afectiva, pero lo fundamental es lo racional y lo razonable. Lo primero es cómo utilizamos los instrumentos, y lo segundo, cómo nos relacionamos con las personas. El desarrollo de la razón en sus dos aspectos es el fundamento de la educación. Las emociones se educan en la familia, en nuestro mundo afectivo; las experiencias personales, amorosas, a todos poco a poco nos van educando en ese campo.

¿Cómo lograr captar la atención de los niños hoy en día, en que viven rodeados de estímulos, muchos de ellos electrónicos?

Mantener atento al niño de hoy es difícil, y sin atención no hay desarrollo intelectual. La educación no es educar a los niños para que aprendan a jugar, los niños juegan perfectamente sin ir a la escuela. La educación es para que aprendan a esforzarse y estar atentos.

¿Cómo entender la educación democrática en países donde la religión es una asignatura más en la currícula?

Uno de los elementos de ciudadanía que debe transmitir la escuela en su función pública es el laicismo, un factor esencial y no accesorio de la educación democrática. El laicismo quiere decir que los estudiantes podrán gozar de una cultura común, no viciada por grupos, por facciones, por separaciones que disgregan el meollo esencial de la cultura compartida.

¿Está de acuerdo con que hay que preparar a los chicos no para que tengan trabajos, sino para que ellos sean capaces de crear sus propias ocupaciones?

No hay que relacionar exclusivamente la educación con el trabajo. Naturalmente, una de las facetas para las que hay que preparar a las personas es para que puedan desarrollar labores, sea como empleados o como empresarios útiles en la sociedad. Pero la educación va mucho más allá, no es una fabricación de obreros. La educación tiene que crear ciudadanos, sin una directa relación con sus labores económicas. Ciudadanos capaces de utilizar la democracia, y luego, seres humanos completos, capaces de ser felices. Si la educación no pretende la felicidad, creo que se queda coja. El verdadero objetivo de la educación es preparar a las personas para ser humanamente felices. Porque ser ciudadano y ser humano es primero; luego es ser obrero. La formación de ciudadanos es la formación de los líderes políticos que tendrá el país. La formación de ciudadanos capaces de utilizar bien la democracia es básica.

¿El aprendizaje desde el ocio es importante?

Es el clásico aprendizaje. La palabra ‘escuela’ viene del griego ‘escolé’, que significaba ocio, estar al margen del trabajo. Irse a la escuela era salir del mundo laboral. Hoy desgraciadamente sabemos que muchos niños y adolescentes del mundo no tienen ese ocio imprescindible para su formación. Es importante que el niño, durante un periodo hasta los 16 años, esté fuera del mundo laboral y dedicado a su formación, a su ‘escolé’, a ese ocio no de aburrimiento, sino un ocio creador.

Lampadia

 




Educación y Habilidades para el Futuro

Educación y Habilidades para el Futuro

En Lampadia hemos insistido en que la educación de nuestros jóvenes requiere un “salto cuántico”, o un “Big Bang”, como se propuso en CADE 2014 en la presentación de la “Visión del Perú para el tercio de siglo” y en los cosejos de Lant Pritchett, Presidente de la Maestría en Políticas Públicas del programa de la Escuela de Gobierno Kennedy de Harvard para el Desarrollo, en el mismo evento, respectivamente.

Ver en Lampadia publicación de noviembre 2014:

La buena gestión del Ministro de Educación puede ser insuficiente – Tenemos que emprender una revolución educativa.

En CADE 2014, Pritsker nos dijo que al ritmo de mejora que llevamos, nos tomaría 30 años alcanzar a Vietnam en los resultados de las pruebas Pisa.

Posteriormente, en marzo pasado propusimos un “Nuevo Pacto Social por la Educación”, ver:

Dignifiquemos el rol de los maestros

 

 

Ahora queremos agregar un tema muy importante: el desarrollo de habilidades para el siglo XXI. The Economist Intelligence Unit (EIU) ha publicado un estudio “Dirigiendo la agenda de habilidades: Preparando a los estudiantes para el futuro”, en el que recogen las opiniones de expertos en educación, de ejecutivos de empresas y de estudiantes.

 

Para facilitar la revisión de este estudio veremos a continuación nuestro  resumen. Además, adjuntamos los enlaces al documento original en inglés y a una traducción glosada por Lampadia. Ver:

Driving the skills agenda: Preparing students for the future

(Documento completo de The Economist Intelligence Unit, patrocinado por Google. En su versión original, en ingles).

Dirigiendo la agenda de habilidades: Preparando a los estudiantes para el futuro

(Traducido y glosado por Lampadia).

Principales aportes del estudio de The Economist Intelligence Unit

La evolución de las necesidades de los negocios, los avances tecnológicos y las nuevas estructuras de trabajo, están redefiniendo lo que se consideran las habilidades más valiosas para el futuro.

“No vamos a ser capaces de predecir las habilidades que las personas van a necesitar en 20 años”.

Ideas fuerza del estudio:

  • Resolución de problemas, trabajo en equipo y comunicación son las habilidades que actualmente están en mayor demanda.
  • Los sistemas educativos no están proporcionando las habilidades que necesitan los estudiantes.
  • La tecnología está cambiando la enseñanza, pero los sistemas de educación se adaptan en lugar de dirigirla. 
 

 

Las habilidades demandadas por los empleadores están cambiando.

La educación es menos sobre llenar las cabezas de los estudiantes con conocimientos y más acerca de enseñarles a ser más efectivos, “un sistema de educación basado en el conocimiento es obsoleto”.

[Lampadia: ¿FIN DE LA SOCIEDAD DEL CONOCIMIENTO?]

En la última encuesta PISA de la OCDE a alumnos de 15 años, la educación financiera y la resolución de problemas fueron incluidas junto con las matemáticas, lectura y ciencias, por primera vez.

Las encuestas realizadas para ilustrar este informe incluyen las habilidades mencionadas en el gráfico de líneas arriba.

La vida de los estudiantes de hoy es muy diferente a la vida de los estudiantes para los cuales se desarrollaron los sistemas educativos existentes.

La resolución de problemas tiene que empezar temprano para ser eficaz.

Los colegios pueden desarrollar maneras de enseñar a resolver problemas durante toda su educación.

“El conocimiento importa a la hora de contratar a alguien, pero lo que realmente estoy buscando es un jugador de equipo”.

“La alfabetización digital se ha convertido en una cuarta alfabetización, añadida a la lectura, escritura y aritmética”.

Según los expertos, las habilidades del siglo 21 no se pueden enseñar de forma aislada. Para ser eficaces, deben integrarse en todas las áreas, por lo que el desarrollo de habilidades se vuelve inseparable de la enseñanza de conocimientos.

Se requerirá una mejora de las calificaciones de todos los docentes, para que puedan enseñar estas habilidades al mismo tiempo que los contenidos.

Tenemos que cambiar la formación pedagógica.

Los sistemas educativos están reaccionando lentamente a esta idea.

La tecnología tiene un papel fundamental en el desarrollo de habilidades.

Los jóvenes tienen una afinidad innata con la tecnología, y sería una pena no aprovecharlo de manera eficaz.

Sudáfrica tiene una mayor brecha entre los resultados educativos de los estudiantes ricos y pobres que en otras partes del mundo, y si no hacemos nada, la tecnología lo va a exacerbar.

Las escuelas en Singapur fomentan que los estudiantes formulen preguntas durante la clase a través de mensajería instantánea.

Según un informe de 2014 de McKinsey, “De la Educación al Empleo: Llevando a la Juventud de Europa al Trabajo”, esta brecha podría tener un impacto significativo en el rendimiento de las empresas”.

“Hay una desconexión entre el lado de la demanda y del lado de la oferta de habilidades”.

“Los sistemas de educación, o los educadores, casi nunca hablan con las empresas, los empleadores, los padres, o con toda una serie de actores que están en el lado de la demanda de las competencias que se supone deben facilitar a los alumnos a adquirir”.

 

 

Los empresarios sienten que deben jugar un papel más activo en la decisión de lo que se les enseña los estudiantes y que su posición como partes interesadas debería ser más explícita.

“En América Latina, las habilidades socioemocionales son una gran parte de la brecha entre lo que los empleadores necesitan y lo que los jóvenes tienen”.

¿Son las habilidades tales como la resolución de problemas, la creatividad, la comunicación y el trabajo en equipo un complemento de lujo, los cuales sólo pueden permitirse en países en los que ya se ha dominado los fundamentos? La necesidad de mejorar los niveles de competencias básicas no exime a un país de la necesidad de también fomentar las habilidades blandas o no cognitivas en sus estudiantes.

“En América Latina, todavía hay una enorme necesidad de que los niños terminen la escuela con una alta competitividad en lectura y matemáticas, algo que muchos no están logrando”.

“Pero además existe una necesidad de desarrollar las habilidades sociales, que históricamente han sido las familias las que las han proporcionado”.

“Los maestros tienen que entender que estas no son habilidades que se enseñan, sino habilidades que son modeladas”.

“Los profesores ya no son el oráculo”, pero no se puede concluir que el intercambio de conocimientos ya no tiene un papel crucial en la educación.

Lo que ha cambiado, sin embargo, es la expectativa de que el conocimiento que se considera importante en la actualidad sea el mismo conocimiento que se necesitará mañana.

El aula tradicional, con un maestro en la parte delantera y los estudiantes en apretadas filas, han quedado atrás, al igual que el aprendizaje de memoria como el núcleo de la educación.

No es suficiente que los maestros estén bien versados ​​en la materia, deben reconocer que las habilidades que un estudiante adquiere a través del aprendizaje son tan importantes como el contenido.

La tecnología desempeña un papel importante. Esto sólo puede ocurrir si se proporciona acceso al soporte tecnológico a los que más lo necesitan. Si no se canaliza, la tecnología tiene el potencial de simplemente profundizar la inequidad.

Es imposible decir a qué retos se enfrentarán los estudiantes de hoy en día, o cómo será el lugar de trabajo del futuro.

“Los estudiantes deben estar preparados para un mundo aún desconocido”.

Nuestra opinión: El reto por una educación de excelencia para todos los peruanos es uno de los objetivos nacionales más importantes y urgentes. No podemos adormecernos por la presencia de un ministro que transmite confianza, mientras no iniciemos la “Revolución Educativa” que deberíamos enfrentar cuanto antes. Lampadia