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Mejor en lo sanitario (aunque insuficiente), y pobre en recuperación económica

Mejor en lo sanitario (aunque insuficiente), y pobre en recuperación económica

EDITORIAL DE LAMPADIA

Mejor en lo sanitario (aunque insuficiente), y pobre en recuperación económica

La exposición de la política de gobierno del presidente del Consejo de Ministros, Walter Martos, estuvo dirigida a contentar a los parlamentarios para obtener el voto de investidura. Evitó, entonces, como veremos, las medidas cruciales necesarias para recuperar rápidamente la economía y el empleo, y priorizó la explicación de ciertas mejoras en la estrategia sanitaria, algo que sin duda había sido un vacío en la exposición de Pedro Cateriano.

Pero las mejoras anunciadas en la estrategia sanitaria siguen sin dar la talla necesaria. Afirmó que “ganar esta batalla requiere del trabajo conjunto y organizado de todos los niveles de gobierno, el empresariado y la sociedad civil”. Pero no explicó cómo participaría el empresariado ni lo convocó a tarea alguna, ni menos aun a un comando público-privado, algo que Cateriano sí había hecho al anunciar que diversos gremios empresariales se unirían al Comando COVID.

Anunció que se profundizará la “Operación Tayta”, que se ampliará a varias regiones del país, pero no solicitó el aporte de la capacidad tecnológica y logística del sector privado para realmente ampliar de manera sustantiva la cobertura de esa estrategia. Consiste en ir a buscar a los contagiados más vulnerables en sus casas en los barrios más infectados, aislarlos y atenderlos. Pero hasta ahora el alcance ha sido muy limitado por falta de capacidad logística precisamente. No dio cifras ni metas de alcance. Para que su impacto sea significativo, necesita incorporar al sector privado.

Hay otras iniciativas privadas alcanzadas al gobierno sobre contact tracing y estrategia conductual, por ejemplo, que no han sido recogidas. Anunció, en cambio, la implementación de Centros de Atención Rápida Temporal en los distritos con mayor incidencia epidemiológica del Covid-19, con tratamiento sanitario a cargo del primer nivel de atención, nivel que en realidad ha sido relativamente desactivado. Veremos si funciona. Y la potenciación de los 1175 equipos de respuesta rápida que, por lo visto, hasta ahora no han tenido los resultados esperados.

Tal parece que se ha abandonado Te Cuido Perú, programa orientado a aislar y abastecer a los contagiados para cortar la cadena de contagios. Con logística privada hubiese podido funcionar.

Necesitamos una respuesta más potente para vencer a la pandemia. No ha sido presentada.

Pero donde la exposición fue muy pobre, fue en lo relativo a la recuperación económica. No se puede gobernar con el mínimo común denominador, es decir, con un plan menos que mediocre, cuando se ha tenido la caída más grande del globo. La visión que queda es que la economía se va a recuperar a través de ilusos programas estatales de empleo temporal en la ciudad y en el campo, de asistencia técnica y compras a Mypes (que apenas benefician a 30 mil y 14 mil empresas respectivamente, cuando hay 3 millones de Mypes), de una aceleración sin precedentes de la inversión pública -que sería un milagro-, y de unas APPs que son las mismas que hace años se anuncian y nunca se concretan.

Por supuesto, nada explícito acerca de simplificar regulaciones sectoriales y flexibilizar la contratación de personal para beneficiar a 3 millones de mypes y no solo al 1%, y recuperar rápidamente empleo. Nosotros habíamos sugerido que se convoque a los gremios de mypes para consultarles qué regulaciones sectoriales y laborales requieren para salir adelante y volver a dar empleo. E interesantemente algo de eso ha sido recogido cuando el Premier anunció la creación de “la Mesa Ejecutiva para el desarrollo de las MYPEs”, para identificar y solucionar los cuellos de botella, barreras y problemas que afectan y limitan la productividad de las MYPEs, lo que “engloba aspectos de regulación y de gestión”. ¡Ojalá esa mesa ejecutiva tenga la dinámica y el peso suficiente!

Se curó en salud omitiendo por completo referencia alguna a la gran palanca reactivadora que serían los proyectos mineros. Ese silencio es el más claro síntoma de la enfermedad ideológica peruana. Sin embargo, las bondades de la minería se insinuaron implícitamente cuando anunció que enviará “un proyecto de ley para establecer un mecanismo que permita estabilizar los recursos de canon, sobrecanon y regalía minera del vaivén de las cotizaciones internacionales a partir de establecer ahorros en un fondo de estabilización de estos recursos”. Quizá allí se coloque esos 13 mil millones de soles que Cateriano reveló que los gobiernos regionales no han usado. Sería muy bueno que se conformaran unidades ejecutoras en las zonas mineras para usar esos recursos en planes integrales de desarrollo, con los alcaldes no en la ejecución sino en el directorio. 

Puso énfasis en los programas sociales, cuando el mejor programa social es una reactivación económica acelerada por medio del tipo de medidas tabú no mencionadas. Nuevamente, no se aprovechará el segundo bono universal para hacer inclusión financiera, pues se lo distribuiría principalmente mediante la banca celular. Ni siquiera mencionó la cuenta DNI anunciada en el discurso de Cateriano.   

En lo directamente político, no le propuso al Congreso trabajar una agenda legislativa conjunta, algo fundamental para encauzar los impulsos populistas y alinear los esfuerzos nacionales contra la crisis. Sin embargo, sí reveló que le ha pedido a los ministros encargados de cada departamento, que se reúnan con los congresistas de su región para viajar juntos y sumar esfuerzos en la lucha contra la pandemia. Muy buena idea.

En el tema de la reforma política insistió en la eliminación del voto preferencial, lo que es necesario, pero sigue faltando demandar la aprobación de las reformas de gobernabilidad para facilitarle el trabajo al próximo gobierno, que deberá reconstruir la economía nacional.

En suma, un discurso que brilla principalmente por lo que no se dijo. Lampadia




Suicidio colectivo

Suicidio colectivo

EDITORIAL DE LAMPADIA

Habíamos preparado un editorial resaltando los mensajes positivos del discurso de Pedro Cateriano ante el Congreso, que ayudarían a crear un clima más esperanzado en el futuro del país, aunque faltara el anuncio de cambios en la estrategia sanitaria. (Ver el texto a continuación de este editorial).

Por eso, lo que jamás imaginamos es que se le negara el voto de confianza. Es una decisión suicida, en medio de una pandemia. Revela la hegemonía de la pequeña entraña de los intereses mezquinos por encima del interés nacional. Aprovechar el río revuelto para pescar a como dé lugar. La incapacidad para unir esfuerzos ante el enemigo común.

La señal para la inversión es pésima, de modo que la recuperación del país queda casi condenada; peor aún si el Congreso, envalentonado, aprueba la batería de leyes populistas que tiene en cartera. La gestión del gobierno, que ya era deficiente, se trabará aún más con un nuevo cambio de gabinete en menos de tres semanas.

Es prácticamente la anarquía, la ruptura de la civilización democrática. Pero hay que señalar que el primer responsable ha sido el presidente Vizcarra, que ha cosechado los vientos que sembró al haber disuelto (inconstitucionalmente a nuestro juicio) el Congreso anterior, como consecuencia de una crisis política que fue forzada y azuzada por él mismo al proponer el 28 de julio del año pasado el adelanto de elecciones.

Doble irresponsabilidad al disolver sin tener partido propio. La disolución del Congreso solo tiene sentido para zanjar la confrontación buscando un nuevo Congreso con mayoría propia para poder gobernar. Acá se trató solo de un ejercicio populista para acumular popularidad.

Definitivamente el Congreso actual ha resultado mucho peor que el anterior, que en medio de sus desatinos cuando menos tenía una fuerza que ordenaba el debate controlando impulsos populistas y no le censuró siquiera un ministro al presidente Vizcarra. ¿Pero éste? Jamás congreso alguno había negado el voto de investidura a un nuevo gabinete. Ni había aprovechado la pérdida brutal de ingresos y empleo de la gente para dar irresponsablemente cuanta ley o proyecto de ley populista puede imaginarse, hipotecando el futuro del país y socavando las bases mismas del crecimiento.  

Es increíble que una de las razones del baloteo haya sido la elocuente defensa de la minería hecha por el ex Premier. Que el Frente Amplio sea anti extractivista, vaya y pase. Pero que se sumen otros es un indicador de una enfermedad nacional. Si un paciente en estado de gravedad no quiere tomar el remedio que lo curará, es que ya no tiene, precisamente, remedio.

Quizá Cateriano debió hablar menos y actuar. Solo por defender unas ideas fue visto como arrogante. Y faltaron cambios en la estrategia sanitaria. Pero más cierto es que en Podemos, Alianza para el Progreso y buena parte de Acción Popular, se han juntado intereses pecuniarios vinculados a las universidades con prejuicios ideológicos impensables hace pocos meses en esos partidos y pequeñez política absoluta. Ha sido la alianza entre la ruindad y las izquierdas lo que se tumbó a Cateriano. En cambio, los enemigos íntimos, los protagonistas de la confrontación en el Congreso anterior, el Partido Morado y Fuerza Popular, coincidieron en el voto a favor. Habla bien de la actitud superior de Fuerza Popular en este caso.

¿Qué le queda a Vizcarra? Quizá lo que debió hacer con el Congreso disuelto: poner un primer ministro del Congreso, consultado con el Congreso, para ir a una cohabitación a la francesa. Uno que refleje el pensamiento populista y anti reformas de la mayor parte de bancadas. Pero eso sería mayor desastre aún. Dios nos coja confesados. Lampadia

[Proyecto de editorial antes de la censura del gabinete]

Cateriano en el Congreso
Un mensaje positivo; ojalá pueda cumplirse

Aunque faltó una nueva estrategia sanitaria

Fue positivo el discurso del primer ministro Pedro Cateriano ante el Congreso. Sin duda ayuda a crear un clima más esperanzado en el futuro del país. 

Tuvo anuncios interesantes en Salud (rectoría de Salud, telemedicina, historias clínicas, etc.), incluyendo un proyecto de ley para la creación del Organismo Público Descentralizado de Productos Farmacéuticos y Dispositivos Médicos, que reemplazaría a la actual Digemid, sumamente lenta y burocrática para otorgar registros y autorizaciones. 

Sin embargo, no explicó cambios en la estrategia sanitaria a fin de contener el nuevo embate de la pandemia, un vacío inexplicable. Nada acerca de conseguir el apoyo de la logística privada para aislar y abastecer a los contagiados y sus contactos, a fin de cortar la cadena de contagios. Aunque sí anunció que se está invitando a otros gremios empresariales (distintos al de las clínicas) a participar en el Comando Covid, lo que implica que por ese medio quizá se consiga el aporte tecnológico y logístico privada. Es imperioso. 

Hizo una elocuente defensa de la importancia de la minería, sobre todo para un momento de gran dificultad como el actual. En realidad, es increíble que haya quienes se oponen a poner en valor el recurso más rico e importante que tenemos para nuestro desarrollo, más aún cuando existe la tecnología para no perjudicar el ambiente. Anunció una serie de medidas para simplificar procedimientos y reducir plazos, a fin de facilitar la inversión. Explicó la modificación al Reglamento de Exploraciones Mineras para que, entre otras cosas, la ficha técnica ambiental (FTA) se apruebe en diez días hábiles con silencio administrativo positivo.

No se refirió directamente a Tía María ni a ningún proyecto minero en particular, pero en el capítulo de agricultura -no en el de minería- anunció la construcción de represa Yanapuquio en valle del Tambo, donde está Tía María, con una inversión de 608 millones de soles para irrigar más de 11 mil hectáreas. Esperemos que esa obra forme parte de un plan para sacar adelante el proyecto minero y que se nombre a alguien encargado de llevarlo a cabo. Pues, al final, ¿de dónde salen los recursos para las obras hidráulicas y para las obras en general?

Cateriano reveló que hay más de 13 mil millones de soles de canon que los gobiernos regionales no han ejecutado, y anunció un DU para usar expeditivamente ese dinero en salud y agua potable, por ejemplo, en el corredor minero. Pero allí debería aprovecharse para difundir masivamente las tecnologías de Sierra Productiva, que incluyen agua segura en las viviendas, pero permiten que los campesinos salgan de la pobreza por sus propios medios convirtiéndose en empresarios. Haku Wiñay tiene algo de esas tecnologías, pero debe ser reorientado sobre todo a los microreservorios familiares y al riego por aspersión. Ese programa debería ser priorizado porque es mucho más importante que varios de los programas de empleo temporal que mencionó el Premier (Trabaja Perú, por ejemplo), pues entraña una transformación estructural del agro andino -que es una deuda histórica del país-, y con efecto inmediato.

Cateriano informó que el segundo bono universal se distribuirá por medio de la banca celular (en lugar de billeteras electrónicas), lo que supone desaprovechar una vez más el bono para hacer inclusión financiera. ¿Qué impide masificar billeteras electrónicas? En cambio, sí formuló un anuncio muy promisorio: inclusión financiera con cuenta DNI para todos, en poco tiempo. Una cuenta DNI no es exactamente una billetera electrónica, pero es posible depositar dinero en ella y desde allí pagar a otras billeteras electrónicas. Veremos.

Hubo otros anuncios esperanzadores. Por ejemplo, que desde junio pasado la plataforma de PerúEduca puede capacitar simultáneamente hasta 500 mil docentes. Eso es un cambio revolucionario. Puede ayudar a mejorar rápidamente la calidad del profesorado. Si eso se suma a la distribución de tablets con cursos interactivos incorporados, podemos soñar con un salto en la calidad educativa de la escuela pública en pocos años.

También anunció un tren de pasajeros Callao-Chosica, Choquequirao, la interconexión eléctrica con Chile, más competencia bancaria, 6 mil grilletes electrónicos, expediente penal electrónico, un observatorio de avance de obras, entre otros.

¿Qué faltó? Fuera de la estrategia sanitaria arriba mencionada, lo siguiente:

•          Anunciar una flexibilización de las normas laborales para recuperar millones de empleos formales perdidos y facilitar los emprendimientos. Podría convocar a las asociaciones de micro y pequeños empresarios para que formulen una propuesta de normatividad laboral inclusiva.

•          Un comando público-privado para recuperar economía (aunque sí lo convocó en el comando Covid),

•          Proponerle al Congreso trabajar una agenda legislatura conjunta. O una política de diálogo con las comisiones para frenar la hemorragia populista   

•          Aprobar reformas de gobernabilidad para darle viabilidad al próximo gobierno, que deberá reconstruir el país.

El balance del discurso, sin embargo, es positivo. Ahora hace falta que se cumpla lo anunciado. Podría pedirle a la Contraloría que empiece a sancionar a los funcionarios que demoran o que no deciden. Comencemos por allí. Lampadia




EN EL GABINETE o en la CALLE

EN EL GABINETE o en la CALLE

Fausto Salinas Lovón
Desde Cusco
Exclusivo para Lampadia

En la columna de la semana pasada, advertíamos que [“el elenco rojo” en el gabinete mantenía quieta la calle. La protesta, la movilización, la toma de carreteras y todos los demás mecanismos de extorsión política no eran imprescindibles ya que muchos “camaradas” estaban minando el Estado desde dentro, no hacía falta tirarle piedras desde fuera. Ahora que la cuota roja ha disminuido, que muchos de ellos han salido, los tendremos en la calle, protestando por lo que ellos mismos ocasionaron”]. Lampadia: De la Luz Verde a la Luz Propia.

No creímos que lo harían tan pronto. Actúan rápido. No le dieron a Vizcarra y a Cateriano ni una semana para acomodarse. Le enviaron el mensaje de inmediato: 2 camiones que transportaban minerales fueron incendiados en el corredor minero del Sur y se asaltaron e incendiaron las instalaciones de bombeo de otra mina. Aquí están las consecuencias de tenerlos fuera. La salida del “elenco rojo” tiene precio y había que ponerlo. Ya lo pusieron.

¿Será por eso que Pedro Cateriano dijo en la prensa nacional a Vizcarra: “creo que usted es de centro izquierda, no lo veo como un liberal a ultranza”?  ¿Era acaso el mensaje tranquilizador que tenía que enviar el Primer Ministro al elenco rojo de la política peruana que había salido con los cambios ministeriales, mediante el cual les decía que no se preocupen porque el principal actor forma parte de ese elenco? ¿Una forma cifrada de decirles que no han dejado del todo el gobierno y que mejor no incendien las praderas como lo han hecho ayer en la provincia de Espinar?

Como sucede en todo análisis de coyuntura política, siempre hay un alto porcentaje especulativo, hipotético, que sólo el tiempo y la historia confirman o desestiman. Pero, en este mismo campo, también es cierto que no hay coincidencias, casualidades, ni mensajes sin destinatario y todo lo que vemos son hechos, ante los cuales no somos inmunes: la minería es el principal sector económico atacado por mandato internacional por los grupos de izquierda del país y ha sido el primer en ser atentado luego de que el gobierno da un viraje ideológico ante la catástrofe sanitaria y económica generada por el gabinete Zevallos y su “elenco rojo”.

El problema es que este es sólo el primer mensaje. Vendrán otros.

  • ¿En las minas en Puno?
  • ¿En Tía María ahora que su principal antagonista ha quedado en evidencia como un inepto gobernante regional y no dudará en “hacer fuego” para desviar la atención en Arequipa?
  • ¿En las minas de Apurímac?
  • ¿Cajamarca se quedará quieta?
  • ¿En las empresas donde ha habido suspensiones laborales perfectas, ceses colectivos o despidos?
  • ¿En las calles donde miles de obreros y migrantes se han vuelto vendedores ambulantes por la fatal arrogancia planificadora del gobierno?

Una mirada al Reporte de Conflictos Sociales de la Defensoría del Pueblo nos puede dar una idea de “por donde” pueden llegar los mensajes.

Sin embargo, todo esto que es puro juego político, acomodo electoral, repartición del poder y acceso a recursos públicos. Eso de lo que muchos ciudadanos estamos hastiados.

A quienes en medio de esta crisis trabajamos, tributamos, defendemos a nuestras familias y a nuestros colaboradores y sólo queremos sobrevivir y salir adelante en esta crisis sin morir en el intento, este juego político nos hastía una vez más. Nos harta ver cómo los políticos en general y en particular la izquierda, destruyen el país desde el lugar en el que se les coloque. Sea en el gabinete donde ocasionaron los cerca de 400,000 contagios y las muertes por la pandemia o en las calles y en las carreteras donde no dudan en atentar contra una de las pocas actividades productivas que nos podría sacar del hoyo al cual ellos mismos nos han llevado.

El mensaje de la izquierda pone a prueba la dimensión del destinatario. O se acomoda al mismo como parece estarlo haciendo con concesiones, o lo confronta valientemente y separa las aguas entre quienes queremos salir adelante en esta crisis con esfuerzo y trabajo y quienes sólo quieren agudizar las contradicciones. Lampadia




La política en bancarrota

La política en bancarrota

Sylvia Eyzaguirre T.
Centro de Estudios Públicos – Chile

Foto: William Rojas

La analista Sylvia Eyzaguirre, afirma que en Chile, la crisis actual trasciende lo sanitario, económico y social, para expresarse más como una crisis política en medio de la pandemia. Algo absurdo en un momento tan grave con impactos profundos de corto, mediano y largo plazo.

Publicamos esta nota, porque en el Perú nos sucede lo mismo. Cuando más apertura, colaboración y confianza mutua debiéramos tener, adolecemos de brechas de confianza y enfrentamientos de carácter suicida.

El presidente Vizcarra ha caracterizado su gobierno por propiciar enfrentamientos políticos en aras de conseguir mayor popularidad, no ha sido capaz de construir puentes entre los distintos estamentos de la sociedad y más bien a bombardeado todas las estructuras institucionales.

Esperamos que el nuevo Primer Ministro, Pedro Cateriano, enmiende estos errores, como ha sugerido en sus últimas presentaciones, pero no hay tiempo que perder; se tiene que pasar del discurso a la acción.

Por ello es menester mantener la presión sobre el gobierno y estar a la expectativa sobre sus desarrollos. Hay que abrir la cancha y compartir la lucha contra el virus y la recuperación de la economía, con el sector privado y cuidar la calidad de los proyectos congresales.

En la línea de corregir los errores que han llevado al país a tener resultados catastróficos, tanto en lo sanitario, como en lo social y económico, llama la atención el anuncio del presidente Vizcarra de mantener en su entorno a los grandes responsables del desastre que nos afecta, Zeballos y Zamora. Ya no hay sitio para seguir con la misma agenda. ¡Basta!

¿Por qué se ha deteriorado tanto nuestra política?

Es lo que debiéramos reflexionar, pues en la respuesta a esta pregunta se encuentran las claves para la salida.

La mayor crisis que sufre el país no es sanitaria, económica ni social, – sino política. Por cierto, eso no significa minimizar la pandemia ni la crisis economía ni el malestar social. Cada uno de estos problemas presenta enormes desafíos para el país, pero podríamos hacerles frente con esperanza si nuestra clase política estuviera a la altura de las circunstancias.

Es ella la llamada a entregar las respuestas en aras del bien común, sin embargo, en sus respuestas prima el optimismo, la figuración personal y el cortoplacismo. ¿Cómo se puede entender entonces que el Congreso esté a favor de que el Estado regale a los más ricos cerca de 1,5 millones de pesos a través de exenciones tributarias con el retiro del 10%, mientras que no lo entrega a un peso a la clase media? No sorprende los senadores descolgados en la derecha, la demagogia hace rato que no tiene domicilio político, pero llama la atención que no haya ningún senador en la oposición capaz de resistir los cantos de sirena.

Pero el problema es más de fondo y muy anterior a esta crisis. La clase policía ha postergado una y otra vez las necesidades de las personas por su incapacidad de llegar a acuerdos. La discusión por los instrumentos los ha enceguecido al punto de que han olvidado de los objetivos. ¿Cómo se puede entender que el proyecto que extiende el acceso a sala cuna a los hijos de madres trabajadoras no se haya todavía aprobado si fue presentado por primera vez en 2012?, ¿Cómo se explica que duerma en el Congreso desde 2013 el proyecto que garantiza acceso universal a la educación parvularia a partir de los dos años?, ¿por qué todavía no hemos mejorado nuestro sistema de pensiones o lo seguros de salud? Por la misma razón que se encuentra parado el proyecto sobre el agua, a saber, porque para nuestros políticos la ideología es mucho más importante que las personas. Les importa mucho más la calidad de estatal o privado del ente que administrará el fondo de ahorros previsionales que mejorar las bajas pensiones de los jubilados, les importa más que los jardines infantiles sean estatales o privados que la necesidad de cientos de miles de mujeres y niños de acceder a la educación parvularia. La discusión política sobre los instrumentos es legítima, pero se frivoliza cuando pesa más que las necesidades de las personas.

Esta traición de la clase política a las urgencias ciudadanas me parece que está en el fondo de la desconfianza ciudadana a las instituciones políticas. Ella también explica la baja participación electoral y la alternancia de proyectos políticos opuestos. No somos bipolares, más bien la alternancia responde a la necesidad de apostar por lo opuesto ante el fracaso de lo elegido; pero la clase política no acusa recibo.

¿Por qué se ha deteriorado tanto nuestra política? Es lo que debiéramos reflexionar, pues en la respuesta a esta pregunta se encuentran las claves para la salida. Uno de los factores que ha contribuido al deterioro político tiene relación con el diseño del sistema político. Las ultimas reformas no han contribuido a darle mayor gobernabilidad al país ni tampoco legitimidad. Un régimen ultrapresidencialista con un Congreso proporcional no es coherente. El aumento de la representatividad en el Congreso no cumplió la promesa de hacer más atractivas las elecciones y tampoco aumentó la confianza de la ciudadanía; en cambio en conjunto con el voto voluntario incentivan el individualismo, la política clientelar, debilitan a los partidos políticos y aumentan la fragmentación, dificultando los acuerdos y afectando la gobernabilidad. Esta situación se agravará aún más con la elección popular de los gobernadores regionales.

El proceso constituyente nos ofrece la oportunidad de discutir un nuevo sistema político, que sea coherente, goce de legitimidad democrática y asegure gobernabilidad. Sin embargo, éste no nos asegura amistad cívica ni respeto a las reglas, dos aspectos esenciales para una democracia que nuestra clase política rompió.




De la luz verde a la luz propia

De la luz verde a la luz propia

Fausto Salinas Lovón
Desde Cusco
Para Lampadia

Para todos los que hemos advertido el fracaso del gobierno en el manejo de la pandemia y la economía, la salida de Vicente Zeballos ya es de por sí una buena noticia, porque era obvio que haciendo lo mismo y con los mismos actores no se iban a conseguir mejores resultados. Sin embargo, este cambio no sólo trae luces, sino también sombras, a partir de las cuales podemos ver que le espera al país.

LUCES

  • Implica que Vizcarra reconoce tácitamente que lo hecho no está bien y abre la posibilidad de un cambio y tal vez una mejora en la conducción gubernamental.  Reconocerlo expresamente implicaría asumir la tremenda cuota de responsabilidad que le corresponde, lo cual es mucho pedir.
  • Ha salido del gobierno el “elenco rojo” del gabinete que antes de la crisis sanitaria ya había trabado la minería, la inversión, el empleo y que durante ella, en lugar de comprar pruebas surcoreanas nos trajo seudo médicos cubanos para pagar favores políticos, infiltró de ideología de género las cuarentenas ocasionando más contagios, destruyó las micro y pequeñas empresas con prohibiciones generalizadas y protocolos impagables, en lugar de fomentar el empleo llevó a la quiebra a empresas para congraciar a sindicatos y convirtió al ataque a las empresas en su cortina de humo para ocultar una gestión deficiente.
  • Ha salido de la conducción política del país el señor Vicente Zeballos, cómplice en la destrucción institucional, incondicional de Vizcarra en la confrontación y parte del elenco de la felonía política más grande de la historia reciente, que tomó el poder por la derecha y luego cruzó el gobierno hacia la izquierda, entregando el poder al marxismo solapado, “políticamente correcto” por el cual el Perú no había votado.
  • Pedro Cateriano no ha llegado solo al gobierno. Podría ser una señal de independencia y de que su aceptación impuso algunas condiciones previas.
  • El nuevo Premier no tiene agenda electoral específica, por lo menos no es pública. Podría gobernar sin estar condicionado por los resultados electorales del 2021.

SOMBRAS

  • Pedro Cateriano si bien es un hombre del entorno de Mario Vargas Llosa, que nos llevaría a pensar que es de ideas liberales, ha sido también un hombre de confianza de la pareja Humala – Heredia, cuya Luz Verde acataba de manera indisimulada. El temor a que sea uno más del elenco estable del grupo de los “políticamente correctos” que se reciclan de un sector a otro del Estado desde el gobierno de Toledo es fundado. También el temor de que sea el eslabón que termine de evidenciar la conexión de Vizcarra con los Humala.
  • Pedro Cateriano tiene enconos personales contra el aprismo y el fujimorismo. Inicio su corta vida parlamentaria en esas batallas y dejó de ser congresista por culpa de Fujimori. Si convierte estos enconos en el eje de su labor gubernamental, sólo nos espera más confrontación, contienda y ruido mediático, ese que le gusta al señor Vizcarra. ¿Tal vez esa sea la razón por la cual lo eligió? Si fracasa entonces, ¿vendrán Fernando Olivera o José Domingo Pérez, maestros en el circo y la confrontación?
  • El “elenco rojo” en el gabinete mantenía quieta la calle. La protesta, la movilización, la toma de carreteras y todos los demás mecanismos de extorsión política no eran imprescindibles ya que muchos “camaradas” estaban minando el Estado desde dentro, no hacía falta tirarle piedras desde fuera. Ahora que la cuota roja ha disminuido, que muchos de ellos han salido, los tendremos en la calle, protestando por lo que ellos mismos ocasionaron. Siempre ha sido así, el problema es que pocos lo advierten, entre ellos Vizcarra que les abrió la puerta.
  • Vizcarra ha mantenido en el gabinete una parte de su elenco estable de incondicionales, cuya obsecuencia podría hacer naufragar cualquier intento reformista de Cateriano. Más aún, ha anunciado que Zeballos “no se desvinculará del Gobierno hasta el último día de mi mandato”. ¿Será que Cateriano está en la mente del presidente sólo como una figura ornamental para despistar a los adversarios y el entorno moqueguano seguirá gobernando como le place?

Dependerá de Pedro Cateriano el destino que le espere.

Cateriano puede asumir la responsabilidad recibida en toda su dimensión, ejercer el premierato con independencia, convocar a los mejores, concertar con el Congreso y no competir con aquel en populismo, actuar por el bien del país y no en pro de la imagen política de Vizcarra.  Puede llevar a cabo una iniciativa en favor de la Inversión y el empleo de grandes dimensiones y hacer que los peruanos asumamos nuestro rol en la lucha contra la pandemia y la miseria. Puede ser independiente de Vizcarra, reconvenirlo si es necesario y dejar el cargo si no le permiten actuar, brillando con luz propia.

Cateriano también puede ser lo que muchos creen que será. El hombre de la Luz Verde. El “políticamente correcto” que se pone a la sombra del presidente y sólo secunda las vacuas batallas contra la corrupción y la reforma política que da mucho rating en encuestas financiadas por el propio gobierno y retirarse del mismo esperando que la imagen de Vizcarra le sirva para obtener una curul o un nuevo ministerio, más adelante.

Cateriano puede escoger entonces su camino y como todos, escribir su propio epitafio político. Puede pasar de la Luz Verde a la Luz Propia. Ojalá que lo haga, por el bien del país. Lampadia




Entrevista a Director de Lampadia

Entrevista sobre la realidad nacional, donde se incide en problemas de empleo y educación.

 




Menos confrontación y más acción

Menos confrontación y más acción

El Presidente Ollanta Humala, fiel al estilo confrontacional con el que viene gobernando el país, decidió desoír los consejos de la gran mayoría de ciudadanos que le pedían un Primer Ministro de consenso y optó por un hombre de su extrema confianza y que por añadidura, como Ministro de Defensa, ha sido una pieza clave en exacerbar los ánimos. Pedro Cateriano que se define como un antiaprista y antifujimorista, desde su cartera no dejó de lanzar puyas a la oposición. Su designación en reemplazo de la censurada Ana Jara es, de cierta forma, una manera de devolverle el golpe a la oposición.

Una actitud que puede encender innecesariamente el conflicto en un momento delicado del país. Como señaló Pablo Bustamante en la Hora N, “este es un mensaje del Presidente, en el que nos dice que está dispuesto a enfrentarse con quien sea. Esta es una falta del respeto al país y una falta de consecuencia con la situación que atravesamos en el aspecto económico e institucional”. En la misma línea de estas declaraciones, Martín Tanaka asegura que “nombrar a Pedro Cateriano Presidente del Consejo de Ministros es la respuesta a la oposición: no nos dejamos atarantar. Por supuesto, se está pensando en dar un mensaje a la oposición, no en la eficacia de las políticas públicas o en un plan de reformas para el último año de gobierno, que no existe”.

Desde que asumió el mando, este gobierno ha preferido dedicarse a lanzar o devolver golpes antes que buscar consensos. Este estilo ha enrarecido en demasía el ambiente político y ha generado un ánimo de permanente crispación que ha impedido que se discutan seriamente las reformas institucionales impostergables para apuntalar el crecimiento y el desarrollo social en un momento en que la economía se desaceleraba.

Enfrascarse en este “juego” le ha impedido a la pareja presidencial percibir que a pesar de la pésima calidad de nuestros congresistas, existen varias bancadas que han sido gobierno (fujimorismo, Perú Posible, Acción Popular, PPC y Apra), aún así no pudo articular propuestas para efectuar las reformas institucionales clave que necesita el país. Por el contrario, al parecer siguiendo los designios de un plan que les permitiera perpetuarse en el poder, intentaron agudizar las contradicciones atacando a la oposición y culpándola de todos los males nacionales y tildándola de corrupta. La frustración de tener que descartar este programa puede explicar este ánimo confrontacional. La buena noticia es que Cateriano es un demócrata y no defiende la Gran Transformación, sino que se sumó al Gobierno luego de que este suscribiera la Hoja de Ruta.  

La oposición se ha mostrado madura y ha preferido escuchar al flamante Premier antes de descargar baterías. Hasta ahora la actitud de Cateriano es conciliadora, pero la situación del país exige mucho más que eso. Es necesario que tenga un plan de acción para reencausar el crecimiento del país. Con la llegada del ex ministro de defensa a la PCM se ha perdido una brillante oportunidad de cambiar al bisoño y liviano equipo económico de este gobierno que hasta la fecha parece haber tirado la toalla. Segura, recientemente, ha declarado: “ya no podemos hacer nada más”. No se entiende, entonces, porque no se ha puesto en marcha la propuesta formar equipos de notables que puedan destrabar las inversiones públicas y privadas. Un tema clave para poner relanzar al país y devolverle la confianza a los agentes económicos (Ver en Lampadia (L): 7 equipos que aseguren el desarrollo de 7 proyectos). Segura, en cambio ha preferido confiar esta tare a las huestes del MEF, pero como todos sabemos, hasta ahora no ha logrado poner que ninguno de los proyectos se echen andar.

Cateriano debe enfocarse en un plan mínimo que debe tener como prioridad implementar medidas urgentes para reactivar la economía (para ello será fundamental  su mediación para que Tía María, Las Bambas, la Línea 2 del Metro, y el gasoducto del Sur aceleren su desarrollo), culminar las negociaciones para suscribir los TLCs con Turquía e India, asegurar un proceso electoral limpio (debe descartarse por completo la idea de instaurar el voto electrónico (ver en L: La peligrosa campaña por el voto electrónico) y controlar los arrestos populistas, establecer un plan para mitigar los efectos del Fenómeno de El Niño, solidarizarse con la lucha por la democracia que la oposición venezolana viene dando y denunciar los abusos y el autoritarismo de Maduro, y, finalmente, devolver a las relaciones con Chile a un nivel óptimo. A arremangarse la camisa, no para pelear, sino para recuperar el tiempo perdido. Lampadia




“Desde el inicio el objetivo fundamental del gobierno era político –electoral”

“Desde el inicio el objetivo fundamental del gobierno era político –electoral”

Para ex ministro de Economía del gobierno aprista Luis Carranza, las acciones de este régimen no buscaron generar crecimiento

Entrevista a Luis Carranza. Ex ministro de Economía y Finanzas

Por Mariella Balbi

(El Comercio, 04 de Abril de 2015)

¿El nuevo primer ministro podrá remontar nuestra alicaída economía?

No. La caída de nuestra economía viene de antes. El crecimiento se desacelera desde el 2013. La confianza de los inversionistas y el crecimiento de la inversión privada cayeron en el gobierno de Ollanta Humala. Entre el 2006-2011, la inversión privada creció con un promedio anual mayor a 15%, y la inversión pública creció cerca de 16%. Lamentablemente, en el 2014 la inversión privada cayó 1,5% y la pública en 3,6%. Una contracción fuerte. Esto se explica por varios factores: el discurso contradictorio del presidente Humala, las trabas a la inversión, el exceso de multas, la sobrerregulación, la ineficiencia del Ejecutivo para aprobar proyectos de infraestructura y darles viabilidad.

El presidente dijo que la censura a Ana Jara generó incertidumbre entre los inversionistas.

Eso viene de tiempo atrás. Está confundiendo la causa con el efecto. Hemos tenido vacío de poder desde que empezó este gobierno.

¿La gestión del primer ministro Pedro Cateriano podrá mejorar las cosas

Tendría que evitar un mayor deterioro político y la pérdida de confianza. El primer ministro debe tender puentes, reducir el nivel de confrontación. En un año electoral las inversiones se retrasan, pero no lo acentuemos. El presidente debe ver en la censura a Jara no un chantaje, un acoso, sino una oportunidad para cambiar su manera de hacer política y poder llegar a buen puerto el 2016.

¿Ana Jara tenía la confianza de los inversionistas?

No. No era relevante porque no tenía ningún poder real. Este gobierno ha puesto de lado a los primeros ministros. Sea quien fuere, se requiere que la persona tenga poder real.

¿Es decir?

No estar pintado en la pared.

¿Cateriano está pintado en la pared?

No basta tener poder real para generar inversiones. Cateriano tiene la confianza del presidente. Necesita tender puentes con las fuerzas políticas para evitar que se deteriore aun más el clima de desconfianza y confrontación. Está en las manos del gobierno. Si no lo hace, tendremos mayor deterioro político que terminará afectando más las expectativas de la gente. Y esto ocurrirá, con Ana Jara o con Cateriano.

¿Cateriano es confrontacional?

Él ha dicho que cambiará ese estilo. Esperemos que sea así. Si la polarización continúa, no generará confianza y tranquilidad en los agentes económicos.

¿Este gobierno nunca logró generar confianza?

Nunca. Siempre tuvo un discurso de confrontación. El rol de dirigir un país requiere aglutinar fuerzas, conducirlas, que todos empujen en la misma dirección. Desgraciadamente, ha ocurrido lo inverso. Estamos pagando las consecuencias de esa forma de hacer política.

¿Desde el inicio, el gobierno tenía un objetivo electoral, sin importarle el país?

Todo indica que desde el inicio el objetivo fundamental era político-electoral. Las acciones tomadas no buscaron generar un mayor crecimiento. Lo descubierto en la DINI, el uso de los programas sociales, querer comprar una refinería privada, la confrontación, tratar de destruir a los adversarios políticos apuntan a ello.

¿Usted es aprista?

¿A qué viene esa pregunta?

A que fue ministro de Economía del gobierno de Alan García…

No soy aprista, fui viceministro en el gobierno de Alejandro Toledo y ministro de García y, les agradezco la oportunidad. Mis comentarios han estado en función de lo que convenía al país: mejora de la inversión pública, presupuestos por resultados, advertir sobre la pérdida de competitividad de nuestra economía. Pero se vio como una crítica política y no como una recomendación técnica.

¿Por qué el inversionista no tiene confianza en el gobierno?

Por el discurso confrontacional, inconsistente. Porque no se abrevian los permisos y las aprobaciones demoran. Los costos de invertir han subido significativamente en el Perú. El Estado no es eficiente en hacer respetar contratos y derechos de propiedad.

¿El ex ministro Luis Castilla fue complaciente con los objetivos electorales del presidente?

Solo puedo decirle que descuidó la inversión pública, la infraestructura, la competitividad. Dejó que florecieran, como hierba mala, todas las regulaciones y que sectores, como Ambiente y Trabajo, entorpecieran la inversión. No se preocupó por la eficiencia del gasto público ni del social. Cayeron la competitividad y la productividad. En el gobierno anterior, la productividad explicó casi la mitad del crecimiento del Perú. Del 2011 al 2014, ha contribuido con 0,6% al crecimiento.

¿El ministro de Economía, Alonso Segura, tiene cierta autonomía o estamos en piloto automático?

Se equivocó en pretender hacer reformas a un año de dejar el gobierno. Las reformas se realizan en los dos primeros años de gobierno. La ‘ley pulpín’ no tuvo liderazgo ni apoyo político en el Congreso. Ya habíamos visto lo ocurrido con el sistema previsional para independientes. Él debería enfocarse en ejecutar rápido y bien proyectos de inversión como la línea 1 y el gasoducto sur.

¿Están retrasados?

Sí. Se concesionaron tarde, además. Hay que sostener el gasto y evitar que el crecimiento siga cayendo. Eso requiere mucho trabajo de ejecución, monitorear los proyectos. Ser aliado de las autoridades regionales y los alcaldes. Les ponen trabas y no pueden ejecutar. En el 2015 estamos viendo el desplome de la inversión pública.

El presidente parece satisfecho de los caminos y otras obras que inaugura.

Está bien eso, pero debió ser el triple de carreteras, tener un gasto público del 8% del PBI y no del 5%. Está bien que saque rédito político con las inauguraciones: otorga legitimidad al sistema democrático mostrando que da bienestar a la población. Pero su discurso ahí es confrontacional: busca deslegitimar el sistema y tiene una mira político-electoral.

Este gobierno se ufana de duplicar la inversión pública del gobierno aprista…

En soles han gastado más. Pero no en porcentaje del PBI, correspondiente a una economía cada vez más grande. El gobierno anterior recibió un PBI de US$80 millones. Este recibió un PBI de US$180 millones. El nivel de inversión pública, respecto al PBI fue en el 2010 de 5,9%. En estos cuatro años no hemos superado esto. Debería estar en 8% de inversión pública respecto al PBI.

¿Por qué descuidó esto el Ministerio de Economía?

Para eso existen los consejos de ministros. Se discuten las prioridades nacionales y las políticas sectoriales que tienen impacto en la economía. Tampoco hubo eficiencia del gasto público, ni resultados concretos para el bienestar de la población. Los programas sociales se han utilizado con fines político-electorales.

¿Populismo?

Sí. Es un gasto populista. El programa Juntos crece sin cumplir las condiciones de salud y educación. Además se está ampliando para zonas periurbanas donde hay oferta de empleo. Entonces, para qué trabajar si recibo un subsidio. Beca 18 tiene un presupuesto de US$300 millones, pero no está focalizado. No tiene articulación. Tampoco se vela por la calidad de la enseñanza.

¿Qué se pretende entonces?

El objetivo no es la empleabilidad de la gente ni la productividad del país sino crear un bolsón electoral. Igual que en Brasil, donde 50 millones de personas dependen del dinero público. Dilma Rousseff dijo a los beneficiarios que los otros postulantes les quitarían esta asistencia. Lo mismo dice el presidente Humala.

¿Los programas sociales se diseñaron con un fin electoral?

Tal como se están desenvolviendo las cosas todo apunta a ello. Es comprobable. Este año tenemos un presupuesto de S/.5.000 millones para programas. El resultado debería ser el bienestar de la población. Pero la pobreza pasó del 50% el 2006, a 27,8% el 2011. Una reducción exitosa. Lamentablemente al 2013 la pobreza está en 23,9%. Deberíamos estar por debajo del 20%. La disminución de la pobreza en este gobierno no es significativa. No hay un objetivo de gestión pública, sino político-electoral. Al gobierno no parece interesarle la salud de los niños. Prefiere crear bolsones de población que dependen de transferencias y subsidios.

¿Clientes políticos?

Así es.

¿Ha habido inclusión social?

No. Es solo una frase. Este gobierno pudo ser el mejor gobierno del Perú republicano. Perdió una oportunidad extraordinaria para crecer y reducir la pobreza. Con un crecimiento del 2% no hay inclusión social. El crecimiento es lo que incluye. No hemos visto mejora en las condiciones reales de la población. En educación perdimos tres años, los indicadores de salud no han mejorado sustancialmente.

¿El empleo ha caído?

La tasa de crecimiento del empleo viene reduciéndose y en algunos sectores se ha perdido empleo. El empleo no crece a la velocidad debida, crece más el informal. Contradictorio, ¿no? Al inicio se criticó la minería y ahora se le prenden velitas para que impulse el crecimiento.

“Los programas sociales repartieron plata con el pretexto de la inclusión”

¿Este será un quinquenio perdido?

Desperdiciado.

Para el gobierno, el crecimiento del 2,3% era inevitable por la crisis externa.

No es verdad. La situación externa explica como máximo el 30% de bajo crecimiento. El resto, 70%, es responsabilidad exclusiva de causas internas. No seré repetitivo. El gobierno pensó que el crecimiento estaba garantizado al 6%. Y los programas sociales se dedicaron a repartir plata con el pretexto de la inclusión, pero con un motivo político electoral detrás. Si las condiciones externas son buenas se puede crecer al 8%; si no, hay que llegar al máximo de nuestro potencial. Pudimos crecer al 5% como mínimo.

¿Lo firma?

Por supuesto.

¿En el 2015 creceremos el 5,5% o el 4,8%, como dijo el ministro Segura?

No. Será cercano al 3%, si se logran estabilizar las expectativas de los agentes económicos. Pero si continúan el clima de confrontación política, la desconfianza con el sector privado, las demoras en aprobaciones, el crecimiento será del 2%. Si el 2015 queremos crecer por encima del 4%, la inversión privada debe crecer cerca del 5%. Con este escenario político y económico, con deterioro de expectativas no es razonable suponer esto. Según el gobierno, la inversión pública crecerá más de 10%. ¿Qué están haciendo para garantizarlo?

¿Y en el 2016?

Venimos de una inercia mala, hay un proceso electoral y retraso en la inversión privada. Demorará remontar expectativas. No será un crecimiento alto, dependerá de quién gane.

La Confiep considera que la censura de Jara no contribuye a la estabilidad económica.

Esto es un reflejo del deterioro de las condiciones políticas del país que afectan la inversión. Por eso Confiep pide consensos.

¿El proyecto Tía María está en riesgo?

Evidentemente está en riesgo. Al igual que Conga, demuestra la enorme debilidad del Estado. Las mesas de diálogo no deben dejar el liderazgo a dirigentes mineros y resolver las demandas de la población en un plazo determinado. Este gobierno se dejó ganar la iniciativa Conga. Hubo incapacidad política. A partir de esto el gobierno se ha puesto de costado.

¿La DINI le ha hecho seguimientos?

No tengo la menor idea. No me interesa. El reglaje masivo que hemos visto es dañino para la democracia.




La Paz es el camino de la Prosperidad y de la Libertad

La Paz es el camino de la Prosperidad y de la Libertad

Se acaba de informar que el Perú, a través de su Ministro de Defensa, Pedro Cateriano, ha firmado un convenio con el gobierno ruso para fabricar helicópteros militares en la Pampa de la Joya en Arequipa.

Esto coincide con uno de los momentos más delicados de la paz mundial, con dos nuevos conflictos: el de la anexión de Crimea por Rusia, la desestabilización violenta de Ucrania y el asesinato de 289 inocentes del vuelo MH17 de Malaysia Airlines, el primero y; la aparición en escena de ISIS y su autoproclamado Califato, que asesina inocentes a mansalva, ufanándose de sus crímenes y que amenaza con tomar casi todo medio oriente, el norte de África, Portugal, España y Austria. 

En ambos conflictos está directamente implicado Vladimir Putin, el ex miembro de la KGB que ahora domina Rusia a su antojo. Según Timothy Garton Ash, en 1994 escucho a Putin decir que Rusia había entregado de forma voluntaria “inmensos territorios” a las antiguas repúblicas soviéticas, entre ellas zonas “que históricamente han pertenecido siempre a Rusia”. (…) Rusia no podía abandonar a su suerte a esos “25 millones de rusos” que habían pasado a vivir en el extranjero. El mundo debía respetar los intereses del Estado ruso “y del pueblo ruso como gran nación”.

Nuevamente Rusia y Putin son una grave amenaza para la paz mundial. El mundo civilizado debe repudiarlos con decisión, fuerza y coherencia.

Europa occidental ha impuesto varias sanciones a Rusia, entre ellas, un embargo de la venta de alimentos, pero, increíblemente, el trio de gobernantas socialistas de Brasil, Argentina y Chile, quieren ver si se ganan alguito vendiendo sus alimentos. Por fin la díscola Francia, acaba de anunciar que suspenderá la entrega de buques de guerra a Rusia.

Todo este proceso está originando que, 100 años después del inicio de la Primera Guerra Mundial, el mundo esté entrando en una estúpida carrera armamentista. Lo de Ucrania cae por su propio peso, pero la pacífica Polonia se ha visto precisada a protegerse de las ambiciones imperialistas de Putin. Lo mismo está sucediendo con otros países de la región. La OTAN acaba de acordar en Bruselas que sus países miembros aumenten sus presupuestos de defensa al 2% de su PBI.

A esto se suma el desarrollo de armamentos de China y Japón, que no lo hacía desde su derrota en la Segunda Guerra Mundial. Además, por supuesto, subsisten y se agravan otros conflictos como el de Israel con los palestinos, la guerra civil de Sudán del sur y otros.

Como se puede apreciar en el primer gráfico, líneas arriba, durante las últimas décadas la humanidad ha vivido un período notoriamente más pacífico. Según el mismo Mahbubani, citado en dicho gráfico, este ha sido uno de los factores más importantes de la prosperidad global, pues cada vez hemos perdido menos gente en las guerras que “solo dejan a las sociedades peor, nunca mejor”.

Hace unas semanas publicamos en Lampadia: El Perú debe sumarse al boicot contra Rusia. En esa publicación se planteaba que el Perú debía ocupar de una vez, un mayor espacio de liderazgo en un concierto internacional debilitado institucionalmente. Y a diferencia de los gobiernos de Brasil y Argentina, seguidos por la Chile de Bachelet, no debíamos venderle a los rusos ni una cebolla, y debíamos también suspender la negociación del TLC y retirar de nuestro Embajador de Moscú.

Por otro lado es de esperarse que antes que sean las armas, las que determinen el futuro de la humanidad, sean los propios rusos los que se deshagan de Putin, quien también abusa de su población, con un régimen despótico que se ha adueñado del país. Lampadia