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Venezuela: A más revolución, más pobreza

Venezuela: A más revolución, más pobreza

Comentario de Lampadia:

El artículo de Oppenheimer, que publicamos líneas abajo, basado en el estudio independiente de tres universidades venezolanas, desnuda al “socialismo del siglo XXI”: Hoy, la pobreza en Venezuela es mayor que cuando empezó la dictadura de Chávez.

En Lampadia hemos seguido la situación venezolana de cerca, tratando de ilustrar los grandes errores de las “ideas muertas” con que justificaron su toma y abusivo mantenimiento en el poder.

Lo peor es que los problemas venezolanos no solo se han hecho aparentes en lo económico y social. También han llegado a extremos en lo político, pues fueron el ejemplo de la anti-democracia.

Sin embargo, Chávez y Maduro han contado con el padrinazgo brasileño,  la complicidad de los países del Alba y el vergonzante silencio del resto de países de la región.

La dictadura y la pobreza de los venezolanos son una mancha profunda en la historia de Latinoamérica, una gran vergüenza para todos.

El récord de pobreza en Venezuela

Andrés Oppenheimer

El Nuevo Herald

02/04/2015

La historia reciente de Venezuela debería ser de enseñanza obligatoria en todas las universidades del mundo, como ejemplo de un milagro económico al revés: a pesar de haberse beneficiado del boom petrolero más grande de su historia, el país hoy en día tiene más altos niveles de pobreza que antes.

Un nuevo estudio realizado en conjunto por tres importantes universidades venezolanas — la Universidad Católica Andrés Bello, Universidad Central de Venezuela y la Universidad Simón Bolívar — muestra que el 48.4 por ciento de los hogares venezolanos se encuentra por debajo de la línea de pobreza en el 2014, frente al 45 por ciento de los hogares en 1998, antes de que el difunto presidente Hugo Chávez asumiera el poder y el país se beneficiara de casi una década de aumento en los precios del petróleo.

Luis Pedro España, profesor de la Universidad Católica Andrés Bello y coautor del estudio, me dijo en una entrevista telefónica que la encuesta nacional de 5,400 personas fue realizada en octubre del 2014, y utilizó la misma metodología que un estudio similar realizado en 1998 por la oficina de estadísticas del gobierno de entonces.

El nuevo estudio de la pobreza contrasta con las cifras del gobierno del presidente Nicolás Maduro, según las cuales la pobreza ha disminuido bajo la “revolución socialista” de Chávez.

Según el Instituto Nacional de Estadística (INE) del gobierno de Venezuela, la tasa de pobreza ha caído del 44 por ciento de los hogares en 1998 al 27.3 por ciento de los hogares en el 2013. Sin embargo, el INE no ha publicado las cifras del 2014.

La Comisión Económica para América Latina y el Caribe de las Naciones Unidas (CEPAL), que utiliza cifras oficiales de Venezuela, informó recientemente que la pobreza en aquel país —incluyendo la pobreza extrema — se incrementó casi 10 puntos porcentuales durante el 2013. Sin embargo, la CEPAL tampoco proporcionó cifras para el 2014.

Cuando le pregunté a España por la disparidad entre su estudio y las estadísticas oficiales de pobreza, dijo que se ha producido una “brutal caída del poder adquisitivo de los venezolanos en 2014”, y que la disparidad radica en gran medida en que las cifras del INE y la CEPAL no reflejan las cifras del 2014.

Venezuela, que tras la destrucción de gran parte de su sector privado depende de las exportaciones de petróleo para el 96 por ciento de sus ingresos externos, es uno de los países más afectados por el colapso de los precios mundiales del petróleo. Después de que pasaron de $9 dólares por barril cuando Chávez fue elegido en 1998 a un récord de $145 por barril en el 2008, los precios del petróleo han caído a cerca de $45 por barril actualmente.

La gestión de Chávez y su sucesor, Maduro, espantó a la inversión nacional y extranjera, y dio lugar a una escasez generalizada de leche, papel higiénico y otros productos básicos, junto con una tasa de inflación anual del 64 por ciento, la más alta del mundo.

“Y todo indica que el 2015 va a ser peor”, dice España. “Todos los indicadores económicos muestran que nos estamos dirigiendo hacia una inflación del 100 por ciento o 120 por ciento este año, que será un récord en la historia de Venezuela”.

Maduro culpa a una supuesta “guerra económica” de la oligarquía y el imperialismo, y cita como ejemplo las recientes sanciones anuncias por Washington. Sin embargo, Estados Unidos dice que las sanciones se limitan exclusivamente a la revocación de visas de entrada para funcionarios venezolanos acusados de corrupción o abusos a los derechos humanos.

Mi opinión: Es difícil recordar otro caso de un país que haya recibido tanto dinero en los últimos años, y haya terminado más pobre que antes. Según el Banco Central de Venezuela, el gobierno obtuvo $325,000 millones dólares de exportaciones de petróleo entre 1998 y 2008 —más que el producto bruto interno de varios países latinoamericanos juntos.

Pero en lugar de aprovechar los buenos tiempos para invertir en educación, ciencia, tecnología e innovación, o por lo menos crear un colchón financiero para los años de las vacas flacas, Venezuela se embarcó en una fiesta populista de subsidios, corrupción y expropiaciones sin sentido. Es una película que hemos visto una y otra vez en América Latina, y que invariablemente termina mal.

Ahora, se ha caído el último argumento del mal llamado “Socialismo del siglo XXI”, que es el haber supuestamente reducido la pobreza. Como lo muestra el nuevo estudio de las tres universidades, el petro-populismo de Venezuela solo dio lugar a una ilusión pasajera de justicia social, y dejó al país con más pobres que antes.




Obama-Modi: Buena química para una alianza estratégica

Obama-Modi: Buena química para una alianza estratégica

La reciente visita del Presidente Norteamericano, Barack Obama, a la India, es una prueba de la importancia que esta tiene actualmente para la política exterior de los EEUU. Este es el segundo viaje de Obama a India y, también, la segunda vez que se reúne en persona con el nuevo Primer Ministro, el gran reformador Narendra Modi, en menos de cuatro meses. Algo absolutamente inusual.

El hecho de que Obama haya reservado más de dos horas de su tiempo para asistir a una parada militar por el aniversario de la independencia de la India es una muestra adicional de lo estratégico que es para los EEUU estrechar sus relaciones con el segundo país más poblado del globoyla decimoprimera economía mundial.

Sin duda la excelente química que parece haberse entablado entre los mandatarios ha facilitado un acercamiento entre dos naciones que tradicionalmente han recelado el uno del otro. Modi aseguró a la prensa que “las relaciones entre dos países se basan menos en puntos y comas y más en la relación entre los líderes, en la química que hay entre ambos (…). De hecho, lejos de la cámara, cuando hablamos, nos acercamos más el uno al otro (…) Barack y yo compartimos una gran amistad, incluso bromeamos y compartimos opiniones sobre muchos asuntos”. Además, señaló que ahora existe una “energía renovada” y que las relaciones bilaterales han escalado “a un nuevo nivel”.

Obama, por su parte, solo tuvo elogios para Modi, al que llamó un “amigo personal”. Según The Economist, “contóque Modi fue tratado como una “estrella de Bollywood”, cuando visitó Nueva York en septiembre. Además, indicó que estaba entusiasmado con la energía del primer ministro y su ambición, alabando su programa de reforma económica.

A Modi se le conoce como Modi-fy, por su gran empuje reformador de un país que últimamente había bajado la guardia en su imperiosa necesidad de desburocratizarse y promover la inversión privada. Modi inició su gobierno poniendo en práctica su lema:“No red tape, only red carpet for investors”. (Ver en Lampadia: El cambio de timón promercado en la India).

El presidente estadounidense, señaló que se debe tener  paciencia, ya que una “nueva alianza” no se creará en una noche. Pero ambos líderes indicaron que esta relación se está dando naturalmente porque las dos naciones comparten los mismos valores: “[somos] las dos democracias más grandes del mundo (…), donde la gente cree en la libertad y la dignidad”, resaltó el mandatario norteamericano, en una clara alusión a China, el otro gigante asiático.

De hecho, la diplomacia estadounidense, busca ahora estrechar sus lazos con India para equilibrar el peso de China en el Pacífico. La ascensión de la República Popular no es solo económica, es también militar y ha empezado a dejar sentir su fuerza política. De hecho, los recientes sucesos en Hong Kong (donde los estudiantes tomaron las calles exigiendo más libertades), han sido una desilusión sobre la evolución de la China y han sido seguidos con cautela y preocupación por los gobiernos democráticos.

La India ha sido el aliado estratégico más importante de Rusia, por décadas. De hecho durante el desfile militar al que asistió Obama, prácticamente todo el material bélico exhibido era de fabricación soviética. Ambos países tienen aún una estrecha colaboración en este campo. No es casual que el presidente norteamericano haya criticado y amenazado con nuevas sanciones a Putin por su accionar en Ucrania desde Nueva Delhi. Estados Unidos espera que Modi vaya acercándose más a occidente y apartándose de la nueva Rusia imperialista.

En Moscú, la visita de Obama se ha seguido con enorme recelo. Otro país en el que ha causado escozor es Pakistán. Aliado clave de EEUU en la lucha contra el terrorismo, pero que mantiene un serio diferendo territorial con la India (por Cachemira), por ello, Obama fue firme pero vago en sus declaraciones sobre el combate al terrorismo.

Aunque no hubo grandes anuncios y la visita de Obama debió acortarse por la muerte del Rey Abdullahde Arabia Saudita, si ha quedado claro, que la “buena química” demostrada, permitirá que el comercio y los negocios entre estas dos potencias fluya.Las inversiones se incrementarán. Las reformas que impulsa Modi facilitarán enormemente este proceso. Se esperaque el comercioentre ambos se multiplique por cinco.

Para acelerar el intercambio, EEUU prometió invertir más de 15,000 millones de dólares en la infraestructura india durante los próximos cinco años, desarrollar un proyecto de Ciudades Inteligentes y apoyarla captación de inversiones privadas. Además deuna mayor cooperación militar,incluyendo la referida a energía nuclear para usos civiles. Una alianza que va por el camino correcto. Lampadia




A 50 años de su partida, extrañamos a Churchill

A 50 años de su partida, extrañamos a Churchill

Este año se conmemoran 50 años de la muerte de Winston Churchill (1874-1965) y 75 de que asumiera el cargo que lo inmortalizara: el de Primer Ministro de la Gran Bretaña asediada por los Nazis (1939-1945). A pesar, de que Churchill es identificado como profundamente británico, él se definía a sí mismo como “an English-Speaking union” (una unión de anglo parlantes, pero que también puede significar un sindicato anglófono), debido a que era hijo del Lord Randolph Churchill y la millonaria norteamericana Jennie Jerome. Sus orígenes, su formación, sus experiencias vitales y su trayectoria profesional de alguna u otra manera lo fueron preparando para ser el hombre providencial que guiara a su nación (y al mundo), en uno de los momentos más excepcionales de la historia de la humanidad: la Segunda Guerra Mundial. Parafraseándolo, se podría decir que “nunca en el campo del conflicto humano, tanta gente le debió tanto a una sola persona” (la cita original es “a tan pocos” y está referida a la heroica actuación de los pilotos de la Real Fuerza Aérea en la batalla de Inglaterra). 

Como a todos los niños de su posición fue enviado a estudiar a un internado, el prestigioso colegio de Harrow, en dónde fue profundamente infeliz. Odiaba los estudios y se destacó como un rebelde, pero estupendo ensayista y el mejor esgrimista de su clase. Luego ingresó,  tras tres intentos, al Royal Military College de Sandhurst. Allí se hizo oficial de caballería y fue enviado al Virreinato de la India. Se hizo de fama como corresponsal de guerra, cubriendo la independencia cubana (1895), y las campañas británicas en la India (1897), el Sudán (1898) y Sudáfrica durante la Guerra de los Boer (1899). A los 26 años escribía para varios diarios y era autor de cinco libros dedicados a sus experiencias. Esta tarea lo ayudó a reflexionar y profundizar sobre el difícil arte de la guerra y el papel del Imperio Británico en el mundo.

Luego de escapar de los Boer en Sudáfrica, ingresó a la Cámara de los Comunes. Así empezó una carrera política que duraría 60 años. Pronto destacó como un filudo polemista, por su inteligencia y don de mando. Ocupó distintos cargos hasta que llegó a ser Lord del Almirantazgo. Cuando estalló la Primera Guerra Mundial, Churchill promovió la utilización de tanques para romper la guerra en las trincheras, pero su iniciativa de abrir el frente de los Dardanelos terminó en un desastre, lo que le valió el apodo del “carnicero de Galípoli”. A manera de redención, renunció a sus cargos políticos y decidió servir en el frente como comandante del 6° Batallón de Fusileros Escoses. Llevando a la práctica una de sus frases célebres “el éxito no es definitivo, el fracaso no es fatídico. Lo que cuenta es el valor para continuar”, al poco tiempo volvióal Gobierno.

Alejado de los cargos políticos importantes en la década de los 30 fue uno de los pocos que se alarmó con el ascenso de Hitler en Alemania. Fue uno de los primeros en advertir de la carrera armamentista de los nazis y las ambiciones expansionistas de los fascistas italianos de Mussolini. Solicitó reforzar la armada y el ejército, pero nadie le hizo caso. Pronto los temores de Churchill se hicieron realidad con los desplazamientos de tropas alemanas que anexaron Austria. La poca firmeza de Francia y de Inglaterra ante este suceso, desencadenarían la guerra. Chamberlain, el primer ministro británico, viaja a conversar con y Hitler y propone la política de “appeasement” (apaciguamiento), falla de liderazgo a la que en Lampadia hemos llamado el “síndrome de Chamberlain”. Fue entonces, que Churchill reprochó a Chamberlain con su célebre premonición: “Os dieron a elegir entre el deshonor y la guerra… elegisteis el deshonor y tendréis la guerra”.

Meses después, Hitler invadiría Polonia y a Inglaterra y Francia no les quedaría otro remedio que declarar la guerra.  Fue entonces, en medio de la desesperación por el rápido avance de los alemanes que tomaron Noruega, Suecia, Bélgica y rompieron las líneas francesas que Chamberlain se ve obligado a renunciar.  El Rey, entonces, convoca a Churchill para que forme un nuevo gobierno. Desde entonces Churchill se erigió en el líder de una nación asediada por una de las maquinarias militares mejor preparadas de la historia y en uno de los mejores líderes de la humanidad. Su acumen, su capacidad de mando, su tesón, su fe inquebrantable en la victoria y su ejemplo salvaron al imperio y al mundo en su hora más difícil. 

El 13 de mayo de 1940, en la Casa de los Comunes, Churchill pronunció su famosa frase:

“I have nothing to offer but blood, toil, tears and sweat.” (Solo tengo para ofrecerles sangre, esfuerzo, lágrimas y sudor).

Entendió que sin el concurso de la URSS y de los Estados Unidos no podrían vencer y estrechó  alianzas con ambos. Cuando la victoria final estuvo cerca, empezó a delinear el mundo de la postguerra en una serie de encuentros con Roosevelt y Stalin. Esperaba preservar el papel del imperio británico, pero solo pudo contemplar como emergían dos nuevas potencias. Rápidamente, en 1946, como lo hiciera con el nazismo, advirtió el peligro que representaba para la democracia mundial el comunismo soviético: “Desde Stettin en el Báltico hasta Trieste en el Adriático, una cortina de acero ha descendido a través del continente. Detrás de esa cortina están las capitales de la Europa Central y Oriental tales como Varsovia, Berlín, Praga, Viena, Budapest, Belgrado, Bucarest y Sofía. Todas estas ciudades y las poblaciones alrededor de ellas han caído bajo la esfera de la Unión Soviética”.

Posteriormente, en el momento cumbre de su carrera, solo meses después de la rendición de Alemania, Churchill perdió el cargo de primer ministro. El pueblo inglés en una decisión que aún se presta a múltiples análisis no lo reeligió. Entonces, al viejo bulldog, como le llamaban no le quedó otra cosa que aceptar los hechos, pero volvería a ser Primer Ministro de 1951 a 1955, tratando de evitar el desmembramiento del Imperio, pero ya estábamos en otro mundo.

En su vida recibió múltiples reconocimientos, entre los que destacan, “Ciudadano Honorario de EEUU” y el Premio Nobel de Literatura de 1953. Murió en 1965. Se organizó un gran funeral de Estado en su honor y líderes de todo el mundo llegaron a rendirle honores a uno de los hombres más brillantes de la historia. La democracia y el bienestar que hoy gozamos no serían los mismos sin Churchill.

Sobre la democracia y socialismo nos dejó unos asertos que mantienen toda su vigencia:

“La democracia es la peor forma de gobierno, excepto por todas las demás”.

“El socialismo es una filosofía del fracaso, el credo de la ignorancia, y el evangelio de la envidia, su virtud inherente es la distribución igualitaria de la miseria”.

Líderes como él son los que se necesitan en este mundo, que transita en lo que ya se ha calificado como una suerte de guerra mundial de baja intensidad. Lampadia




China e India, dos excelentes socios para el Perú

China e India, dos excelentes socios para el Perú

El crecimiento de América Latina en la última década, qué duda cabe, se debe en gran medida al auge de China. El intercambio comercial entre Latam y China se ha incrementado exponencialmente en los últimos quince años. Para el gigante asiático su relación con nuestra región es crucial para mantener sus altos niveles de crecimiento. Así lo ha reconocido el presidente chino, Xi Jinping, al inaugurar el primer foro ministerial entre China y los 33 países de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), celebrado la semana pasada.

Como informó El País de España, el presidente Xi señaló: “En el próximo lustro, China seguirá manteniendo un ritmo de crecimiento medio-alto, lo que traerá más oportunidades para otros países del mundo, entre ellos los latinoamericanos y caribeños”. Por ello, animó a los países de nuestro continente a doblar el volumen de comercio bilateral para llegar a los 500,000 millones de dólares en los próximos diez años.

Asimismo, Xi “estableció el objetivo de invertir en la región hasta 250,000 millones de dólares en la próxima década. Esto supondría, unos 25,000 millones anuales, una cifra muy por encima de los aproximadamente 10,000 millones que las empresas del gigante asiático han desembolsado cada año desde el 2010 en estos países, según cifras de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL). Actualmente solo el 4.1% de las inversiones directas en el extranjero, de las empresas chinas, recaen en la región”, sostiene El País.

De darse estos niveles de inversión, la región se verá enormemente beneficiada, pues le permitirá contar con los recursos y acceso a un mercado que le ayudará a seguir creciendo y compensar la eventual disminución del financiamiento tradicional, producto del aumento de tasas de interés de la FED en los próximos años. De hecho, como hemos señaldo en Lampadia, el Perú se ha beneficiado enormemente de las inversiones de China. Ver en Lampadia (L): Inversiones chinas potencian desarrollo del Perú.

Preocupa, sin embargo, que esta indudablemente beneficiosa presencia en la región se traduzca luego en una influencia que interfiera en la evolución política de Latam al soportar a regímenes anti democráticos y que tienen modelos económicos que han empobrecido a sus pueblos. Los recientes préstamos de China a países como Argentina, Ecuador y, sobre todo Venezuela, no son una buena señal.

Como reseñamos hace poco: “La decisión de Beijing de rescatar a Rusia, sumada a la ayuda que recientemente les dio a Venezuela y Argentina, marca la muerte del mundo Bretton Woods de posguerra. También representa el comienzo del fin para el papel central de los Estados Unidos en la economía mundial y la influencia de Japón en Asia. (…) Al gobierno del presidente chino Xi Jinping no le interesa mejorar las economías, la salud de los regímenes impositivos o las reservas de los bancos centrales. Le importa la lealtad”. Ver en L: China, dos caras de la misma moneda.

¿Qué debiera hacer la región? Pues mantener excelentes relaciones con China en los planos comerciales, pero intentar equilibrar su influencia política acelerando alianzas con otros países asiáticos que prometan mercados del mismo potencial que el chino y puedan mediatizar el peso geopolítico del gigante asiático. Nos referimos concretamente a la India. Como hemos mencionado en Lampadia, esta es la democracia más grande del mundo (por el número de electores). Además, su primer ministro, Narendra Modi, viene impulsando una serie de reformas de libre mercado que son un excelente ejemplo de facilitación de negocios y que seguramente impulsarán el crecimiento de este subcontinente y que abren una oportunidad para que la región pueda abastecer a este inmenso mercado.

Lamentablemente, occidente, en vez de buscar una mayor convergencia con la China, como reclama hace años el singapurense Kishore Mahbubani (ver en L: Conferencia Magistral de Kishore Mahbubani), ha ido más hacia la confrontación. Esto ha alentado un mayor acercamiento de China con Rusia, que impide limitar los aprontes abusivos de Putin en los Balcanes y Europa del Este. En este aspecto, el relanzamiento de India hacia el crecimiento con el liderazgo de su nuevo Primer Ministro, Modi, es una oportunidad para mejorar balance geopolítico en un mundo, en el que EEUU y Europa van perdiendo espacios de influencia. En ese sentido, Japón y USA buscan equilibrar la creciente influencia China mediante el impulso de mejores relaciones con India. Una serie de acuerdos comerciales y diplomáticos apuntan en esa dirección. Ver en (L): La visión de país y reformas que el Perú necesita.

En el caso del Perú, por caprichos o intereses personales, hemos perdido muchos años en la consolidación de nuestras relaciones comerciales con la India. Ahora debemos priorizar y apurar la celebración del TLC o un amplio acuerdo comercial con este país continente, así como hacer un minucioso seguimiento a la gran reforma india que conduce el propio Modi. El Presidente Humala, en su reciente gira por oriente (Ver en L: La tournée de Dios), visitó Rusia y China (rematando en el Vaticano), perdió la oportunidad de conocer a Narendra Modi, el mayor reformador pro-mercado del mundo actual, un encuentro que buena falta le hace. Lampadia




Reminiscencias noventeras

Reminiscencias noventeras

En el 2015, la economía mundial mostrará preocupantes similitudes con lo vivido a fines de la década de 1990.

The Economist

(Gestión, 23 de Diciembre del 2014)

Crisis financiera en Rusia, precios del petróleo a la baja y un dólar fuerte, un nuevo boom en Silicon Valley y una resurgente economía estadounidense, debilidad en Alemania y Japón, divisas tambaleantes en los mercados emergentes, un demócrata en problemas en la Casa Blanca. ¿Es esta una proyección del mundo para el 2015 o un retrato de fines de los noventa?

La reciente historia económica ha estado tan dominada por la contracción del crédito del 2008-09 que es fácil olvidar lo que sucedió en las décadas previas. Pero mirar lo que sucedió hace quince años es instructivo, en términos de lo que hay que hacer y lo que se debe evitar.

Así como entonces, ahora Estados Unidos se halla a la vanguardia de una revolución digital y, en 1999, su PBI crecía más de 4% al año, casi el doble del promedio de los países avanzados, y el desempleo cayó a 4%, el nivel más bajo en 30 años. Los inversionistas extranjeros hacían cola, impulsando tanto el dólar como los precios de las acciones.

El optimismo sobre este país contrastaba con el pesimismo en el resto de la economía global, igual que hoy. La economía de Japón entró en deflación en 1997 y en Alemania, sus empresas sufrían estancadas por un rígido mercado laboral y otros costos. Los mercados emergentes estaban en crisis: entre 1997 y 1999, desde Tailandia hasta Brasil, las monedas colapsaron, mientras el capital extranjero huía y las deudas en dólares se volvían impagables.

A la larga, Estados Unidos también acusó problemas, pues la burbuja de las “dotcom” estalló y causó una caída bursátil generalizada, así como una retirada de la inversión privada, particularmente en tecnología. Para principios del 2001, ya estaba en recesión (aunque una moderada), junto con la mayoría de economías desarrolladas. Es inevitable que los paralelos no sean perfectos. La principal diferencia es China, que en 1999 era un actor pequeño, pero hoy es la segunda economía más grande del mundo.

Son tres las tendencias que desestabilizaron la economía global en esa época y que podrían hacerlo de nuevo. La primera es la brecha entre Estados Unidos, donde el crecimiento se está acelerando, y el resto, donde se está ralentizando. En ese entonces se advirtió que la economía mundial volaba “con un solo motor” y, para el 2015, el panel de expertos de The Economist proyecta un 3% de expansión en Estados Unidos y de 1.1% para Japón y la eurozona. En China, la tasa podría reducirse a 7%.

El segundo paralelo preocupante es la pésima perspectiva de las otras dos grandes economías avanzadas. El crecimiento de Alemania se ha derrumbado a alrededor de 1% y existe una profunda perturbación causada por años de escasa inversión y un gobierno demasiado obsesionado por sus metas fiscales y temeroso de continuar con sus reformas estructurales. Por su parte, Japón ha repetido el error que cometió en 1997: destruyó su escape de la estagnación con un incremento prematuro del impuesto a las ventas. El tercero es el peligro en los mercados emergentes. A fines de los noventa, fueron los tipos de cambio fijos y la excesiva deuda pública externa; ahora el cambio es flotante y las deudas son más bajas, pero existen muchas señales preocupantes, sobre todo en Rusia y otros exportadores de materias primas, especialmente en África.

En otros países, el peligro reside en el sector corporativo. Muchas empresas brasileñas están altamente endeudadas en dólares y una racha de incumplimientos podría ser menos espectacular que las crisis de deuda soberana de Asia hace década y media, aunque harían que los inversionistas se pongan nerviosos y empujen una subida del dólar.

Todo esto hace prever que el 2015 será escabroso. Los apostadores esperarán que un dólar al alza, emparejado con el adormecimiento de la eurozona y unas cuantas crisis en el mundo emergente causarán una nueva recesión en Estados Unidos. Pero por el lado optimista, hay que notar que los mercados bursátiles no se ven tan burbujeantes como antaño y aunque muchas empresas tecnológicas están invirtiendo de manera descontrolada, la mayoría presenta estados financieros decentes.

Además, el sistema financiero global se encuentra menos apalancado y, por tanto, menos vulnerable al contagio. En 1998, el incumplimiento del pago de la deuda rusa causó la caída del fondo de coberturas estadounidense LTCM. Hoy, tales efectos de repercusión son menos probables.

Si la economía mundial tambalea, restaurar la estabilidad será más difícil porque los gobiernos tienen menos espacio de maniobra. En 1999, la tasa de interés de la Reserva Federal era alrededor de 5%, lo que permitía recortarla cuando la economía se enfriaba, pero hoy las tasas en los países ricos están cercanas a 0%.

El escenario político también es distinto, y nada positivo. Entonces, la mayoría de habitantes en el mundo avanzado había recibido los frutos del boom: los salarios reales en Estados Unidos crecieron 7.7% en el periodo 1999-2000, pero desde el 2007, se han estancado, y han caído en Reino Unido y gran parte de la eurozona.

Hoy, los electores en esos países están enojados con sus gobiernos y lo muestran sus intenciones de voto por partidos de oposición. Si se les vuelve a sacudir el próximo año, su descontento se transformará en ira. La economía del 2015 puede lucir similar a la de fines de los noventa, pero probablemente la política será peor.




Venezuela se queda sola

Venezuela se queda sola

El régimen chavista ha perdido influencia política en la región

Por: Alfredo Meza (Caracas)

(El País, 18 de Diciembre de 2014)

En su primera reacción el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha querido subrayar “la valentía” del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, al reanudar de lleno las relaciones diplomáticas entre ese país y Cuba, y lo ha calificado “como el gesto más importante de su presidencia”. El gobernante venezolano, quien asiste en Argentina a la cumbre del Mercosur, puso el acento en la liberación de los tres cubanos presos en Miami por espionaje que han sido liberados como parte de las negociaciones. “Ya están en su tierra, libres, dignos, es una victoria de la moral, de la ética de la resistencia, de la lealtad a los valores, es una victoria de Fidel, del pueblo cubano”, ha manifestado.

Maduro ha elogiado a Obama como nunca antes y rescató el pasaje del discurso en el cual el gobernante estadounidense señala el fracaso del embargo como política para aislar al régimen cubano. “Pareciera una rectificación histórica lograda, de acuerdo a lo que están diciendo, con la ayuda del papa Francisco, nuestro Papa”, dijo. Ha sido apenas un alto en las tensas relaciones que mantienen ambos países desde 2001, cuando el entonces presidente Hugo Chávez criticó la guerra iniciada por Washington en Afganistán tras los atentados terroristas del 11 de septiembre en Nueva York.

La noticia se produce en medio de una cruzada que ha iniciado Maduro para tratar de convertir en una agresión a la Nación el anuncio de sanciones del Senado estadounidense a 56 altos funcionarios del régimen de Caracas, aún pendiente de la sanción del Ejecutivo de ese país para convertirse en ley. Las respuestas a esa moción de la bancada republicana han sido variadas: desde un acuerdo de rechazo aprobado por la mayoría chavista en la Asamblea Nacional hasta la quema de las visas de turista (https://www.youtube.com/watch?v=gkl-71VxjJA) propuesta en la televisora oficial por Iris Varela, ministra de Asuntos Penitenciarios.

Con el fin del embargo aún pendiente, Venezuela comienza a quedar como el único ariete del discurso antiimperialista en América. Cuba ha terminado de dar un paso definitivo hacia el progresivo regreso de la democracia, lo que supone un cambio en el escenario internacional de impredecibles consecuencias. La Habana ha advertido los riesgos de depender en exclusiva de las veleidades de la economía venezolana, cuyo flujo de ingresos depende de los precios del petróleo. Con la más reciente caída de la cotización del crudo parecía más perentoria la necesidad de cortar la total dependencia del dinero venezolano.

Con esa capitulación del régimen de La Habana también queda la interrogante de si se mantendrá en el tiempo el apoyo político cubano a la estrategia internacional de Venezuela, habida cuenta de las más recientes expresiones del gobierno de Caracas hacia Washington. Apenas el lunes Maduro, recordando las versiones más procaces de Hugo Chávez, había dicho: “agarren sus visas y métanselas por donde les quepan, yanquis insolentes”. “Ahora se abre un importante ejercicio de compresión de las consecuencias del restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre esos países”, afirmó en su cuenta de Twitter el politólogo chavista Nicmer Evans al conocer la noticia.

La analista Elsa Cardozo advierte retrocesos en el discurso antiimperalista venezolano. Desde Estados Unidos, recuerda, proviene principalmente el flujo de recursos que mantiene a flote a la economía venezolana y debe cuidar esas relaciones. “No es tan sencillo que siga asumiendo la estrategia imperialista internacional. Venezuela ha perdido mucha influencia política y económica a pesar de que recientemente se hizo de un asiento en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas o del acuerdo de entregar petróleo subsidiado a los países del Caribe cambio de apoyo a sus iniciativas. Proyecta una crisis económica y política y mucha conflictividad”, agrega.

Cardozo apela al pragmatismo que en situaciones similares a la actual ha aplicado el chavismo. Una vez superadas podía retomar su discurso antiestadounidense porque Cuba seguía a su lado, acompañándolo con un apoyo casi paternal. Esta vez todo luce distinto. ¿Habrá consultado este paso Castro con su par Maduro cuando este acudió a la cumbre del ALBA en La Habana el fin de semana pasado?




El Comercio en el Océano Pacífico

El Comercio en el Océano Pacífico

Publicado por The Economist el 17 de noviembre del 2014.

Traducido por Lampadia.

Desde los 1970s, el comercio a través del Pacífico ha superado largamente el del Atlántico. China, por ejemplo, ha llevado su necesidad de alimentos de alto valor proteico y de materias primas a América Latina y se ha convertido en el mayor socio comercial de Chile [y del Perú]. Según una estimación, en el 2010 le prometió más préstamos a América Latina que el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo y el Ex-Im Bank de los Estados Unidos combinados. Estas conexiones han convertido a los países en proceso de desarrollo al borde del Pacífico en una fábrica de crecimiento. Mientras que la economía de Estados Unidos creció a un promedio de 1.6% anual en la última década y la Unión Europea a un 1.7%, América Latina se ha expandido en un 4.6%, el este asiático en un 5.4% y el sudeste asiático en un 5.9%. [El Perú 6.4%]. Las 21 economías de la agrupación más grande del Pacífico, la Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), representan casi la mitad del comercio mundial. La región también ha visto un aumento asombroso en su prosperidad. En las partes más pobres de Asia, el tamaño de la clase media (aquellos que viven con $ 2.20 al día) se ha multiplicado por siete desde el cambio de milenio. En América Latina se ha duplicado.




El efecto de la caída del precio del petróleo en la economía mundial

El efecto de la caída del precio del petróleo en la economía mundial

La situación en el Medio Oriente, el conflicto en Ucrania y Ebola tocando las puertas de Nigeria hacían pensar que el precio del petróleo se dispararía. Incluso, el Fondo Monetario Internacional, efectuó estimaciones de cómo afectaría un petróleo alto a la economía mundial en un momento en que el avance del ISIS se convertía en una amenaza global. De acuerdo a esta proyecciones, según The Economist: “El PBI mundial se reduciría en un 0.5 a 1.5%; las bolsas de los países ricos caerían en 3.7% y la inflación sería al menos medio punto más alta. Nada de está ocurriendo, el crudo ha bajado en más de 25%. “Se desplomó  desde 115 dólares el barril al que se cotizó en junio pasado, a menos de 85 dólares a mediados de octubre, antes de recuperarse un poco”. Hoy (29 de octubre, 12:07) está en US$ 82.54.

El precio del  petróleo sigue siendo fundamental para el rumbo de la economía mundial todavía afectada por la crisis y, también para la geopolítica, la cual se halla en una fase de escalamiento muy riesgoso. Por lo pronto, el brusco descenso del precio del petróleo es una buena noticia para la salud financiera. “Un cambio del 10% en su precio genera un impacto de 0,2% del PBI mundial, dice Tom Helbling del FMI. Una caída de los precios normalmente aumenta el PBI (…). Una demostración de ello es lo ocurrido recientemente en los Estados Unidos, donde el gas de esquisto [shale gas] bajó los precios de la energía e impulsó las exportaciones de manufacturas en un 6%”.

Lo cierto es que la caída del precio del petróleo se debe a que la demanda es menor por la debilidad de la economía (Europa y Japón están demandando menos combustible) y a que hoy existe una oferta más amplia. De hecho la última caída (a US$ 80 el barril), se debió al aumento de las reservas norteamericanas, influidas por el shale.

Aunque algunos señalaban que la caída del precio del crudo afectaría la producción de shale gas debido a que los altos costos de extracción de este hidrocarburo harían insostenible su explotación, un reciente informe del Financial Times (FT) desmintió categóricamente este supuesto. Según este, los costos [de producción] ya han caído drásticamente, y podrían caer aun más. En promedio de explotación de esquisto en EEUU requiere un precio del crudo de US$57 por barril para ser rentable hoy en día, en comparación con US$70 por barril en el verano del año pasado, según IHS, la compañía de investigación (…)”.

Los costos podrían reducirse aún más según el FT: “Se cree que el costo promedio de un pozo de esquisto estadounidense podría bajar 60% adicional mediante un mejor manejo de factores tales como planificación, logística y relaciones con los proveedores. David Vaucher del IHS dice que todo indica que la productividad por pozo sigue mejorando” debido a los avances  de la tecnología, lo cual permitirá que este hidrocarburo sea más rentable cada día.  

Para The Economist, de mantenerse el nivel actual, la economía mundial podría crecer en un 0.5% adicional. “El mundo produce algo más de 90 millones de barriles al año. A un precio de US$ 115 por barril se generan aproximadamente US$ 3,800 billones al año; y a 85, sólo US$ 2,800 billones”. Esta diferencia de 1,000 billones equivales cinco veces el PBI del Perú.

De esta forma economías como China, Japón, India y Europa entre otras muchas, obtendrán importantes beneficios. Incluso, China tendrá mayores posibilidades de iniciar su programa de limpieza del aire contaminado en sus ciudades.  Para Europa en cambio, la reducción puede tener un efecto negativo. Esto podría terminar de impulsarla a la deflación, el gran enemigo de su salud económica y de sus posibilidades de recuperación.

Los países afectados serán sin duda los productores, pero en mayor afectado será sin dudas Venezuela. Rusia e Irán también serán afectados fuertemente. Venezuela, producto de la manipulación política de PDVSA, ya perdió más de un tercio de su producción, otra buena parte la tiene comprometida para para sus deudas a China y seguir apoyando a sus socios cubanos, por lo tanto se puede estimar, razonablemente, un eventual colapso del chavismo. Tanto los venezolanos como los rusos han comenzado a hablar de un complot de EEUU y sus aliados para golpear sus economías.

El caso de Brasil puede ser al final una historia para el estudio en las universidades. Petrobras descubrió inmensas reservas de petróleo debajo de una capa de sal de 5 kilómetros de profundidad. Luego del yacimiento, Lula manipuló las cosas para que los inversionistas privados de Petrobras no se beneficiaran con el descubrimiento. Sin embargo, con el desastroso manejo económico de Lula-Rousseff, hasta hoy no han podido hacer nada. Por lo tanto, se puede estimar que a los nuevos precios, ese petróleo quedará en los libros de “Amado”.

Finalmente, se puede decir que al ser el Perú un importador neto de hidrocarburos se beneficiará con un crudo barato, disminuirá el déficit de cuenta corriente, pero inhibirá la inversión petrolera, que en el Perú es más cara, regulada y complicada políticamente. Lampadia




Putin desata su furia contra EEUU

Putin desata su furia contra EEUU

Comentario de Lampadia

El siguiente artículo del Financial Times (Putin unleashes fury at US ‘follies’), escrito por Neil Buckley, el 24 de octubre pasado, muestra a un Putin que ha sorprendido a propios y extraños por la virulencia de sus expresiones. No solo no hace ninguna autocrítica por los recientes acontecimientos en Siria y Ucrania, sino más bien acusa a los EEUU de romper todas las reglas de convivencia internacional y se presenta como una víctima del imperialismo yanqui.

Algunos comentaristas especulan que esto refleja la furia de Putin después que Obama haya renqueado a Rusia al lado de ISIS y el virus del Ebola, como las tres peores amenazas globales. Pero el tono de Putin ha sorprendido incluso a sus admiradores. “Muy duro acerca de los EEUU, primera vez que es tan duro”, tuiteó” Margarita Simonyan, editor en jefe del ardiente  y pro-Kremlin canal de televisión. “Nuestra respuesta a Obama”.

Este artículo muestra que la polarización entre Rusia y EEUU está escalando a niveles alarmantes, que van mucho más allá de los casos específicos que han desatado esta situación. Recomendamos su lectura.

Putin desata su furia contra EEUU

Publicado en Financial Times el 24 de octubre del 2014. Traducido por Lampadia.

El presidente ruso, Vladimir Putin, asiste a una reunión de la

“Valdai International Discussion Club” en la localidad del Mar Negro de Sochi

El presidente ruso, Vladimir Putin, acusó el viernes a los EEUU de socavar el orden mundial post-Guerra Fría, advirtiendo que sin un esfuerzo activo para establecer un nuevo sistema de gobernanza mundial, el mundo podría colapsar en la anarquía y el caos.

Putin, en uno de sus discursos de mayor fuerza anti-EEUU en 15 años como el político más poderoso de Rusia, insistió que las acusaciones de que su anexión de Crimea muestra que está tratando de reconstruir el imperio soviético son “infundadas”. Rusia no ha tenido ninguna intención de invadir la soberanía de sus vecinos, insistió.

Al contrario, el líder ruso culpó a los EEUU de desencadenar la ruptura de Crimea de Ucrania y los miles de muertos en la guerra al este del país, respaldando lo que Putin llama un golpe armado contra el ex presidente Viktor Yanukovich en febrero.

“No empezamos esto”, dijo Putin. Citando una serie de intervenciones militares lideradas por Estados Unidos desde Kosovo a Libia, insistió que los EEUU se había declarado vencedor cuando la Guerra Fría terminó y “decidió… remodelar el mundo para satisfacer sus propias necesidades e intereses”.

“Esta es la forma en que los nuevos ricos se comportan cuando adquieren repentinamente una gran fortuna – en este caso, en la forma de liderazgo y dominación mundial. En lugar de administrar su riqueza sabiamente… creo que han cometido muchos disparates “, dijo en una conferencia de académicos y periodistas extranjeros en una sede de esquí Olímpico, cerca de Sochi.

El discurso fue una de las declaraciones más importantes de Putin sobre política exterior desde el 2007 en Munich, donde sorprendió al oeste acusando a los EEUU de “extralimitarse en sus funciones en todos los sentidos” y de crear nuevas líneas divisorias en Europa.

Algunos comentaristas especularon que este discurso refleja la furia de Moscú las recientes declaraciones del presidente estadounidense, Barack Obama, clasificando a Rusia junto al Estado Islámico de Irak y el Levante, conocida como Isis, y el virus Ebola entre las tres principales amenazas mundiales. Pero su tono sorprendió incluso a los partidarios.

“Muy duro acerca de los EEUU, primera vez tan [duro],” tuiteó Margarita Simonyan, la jefa de redacción de la fervientemente pro-Kremlin cadena de televisión RT. “Nuestra respuesta a B Obama.

Putin señaló que creía que los EEUU y Rusia deberían trazar una línea tras los recientes acontecimientos y sentarse con otras grandes economías para rediseñar el sistema de gobernanza global a lo largo de líneas “multipolares”.

Si bien reconoció que esto podría ser una tarea larga y agotadora, Putin advirtió que el no hacerlo podría traer serios conflictos que involucren a los principales países. También evocó el peligro de una nueva Guerra Fría, diciendo que los tratados de control de armas existentes corrían el riesgo de ser violados.

Sin embargo, cualquier esfuerzo dejuntar a los dos países para las negociaciones podría ser complicado por la insistencia del oeste que la anexión rusa de Crimea es una ocupación ilegal, y por la ira de Moscú sobre las resultantessanciones de la UE y EEUU.

Putin dijo que las sanciones socavan las reglas del comercio mundial y la globalización, pero afirmó que Rusia era un país fuerte que podía resistir las medidas, y que no “mendigarán” para conseguir que se levanten.

El presidente de Rusia propuso que la ONU podría “adaptarse a las nuevas realidades”, mientras que “pilares” regionales de un nuevo sistema, como la Unión Euroasiática planificada por Rusia formada de ex estados soviéticos, podría ayudar a mejorar la seguridad.

Pero insistió que estos movimientos sólo se volvieron necesarios desde que los EEUU pisotearon las normas existentes – por ejemplo, cuando invadió Irak sin el respaldo del Consejo de Seguridad de la ONU.

“Si el actual sistema de relaciones internacionales, el derecho internacional y los pesos y contrapesos… se interpusieran en el camino de los objetivos de [los Estados Unidos], este sistema es declarado sin valor, anticuado y en necesidad de demolición inmediata”, dijo.

La fuerza del lenguaje de Putin también tomó por sorpresa a los oyentes estadounidenses., Toby Gati, un ex funcionario de la Casa Blanca durante la presidencia de Bill Clinton, dijo dirigiéndose al Presidente durante la sesión de preguntas que “no reconoció” como su propio país al que el presidente ruso afirmó estar describiendo.




¿Debería haber sido presidenta Hillary?

¿Debería haber sido presidenta Hillary?

Por Timothy Garton Ash

(El Comercio, 26 de Octubre del 2014)

Comentario de Lampadia:

El artículo de Garton Ash coincide plenamente con nuestro artículo del 7 de julio del 2014. Ver en Lampadia: La caída de nuestros líderes es una tragedia.

¿Qué fue del mesías? Hablo de aquel por el que los estadounidenses bailaron en las calles gritando “yes we can!” en la inolvidable noche electoral de hace solo seis años. Aquel cuyo nombre estaba en boca de todos los europeos. Aquel que prometió que la humanidad recordaría ese momento “en el que se frenó la subida de los mares y nuestro planeta empezó a curarse”.

En vísperas de las elecciones legislativas del 4 de noviembre, exactamente seis años después de la elección de Barack Obama, los candidatos demócratas no quieren aparecer junto a él. Elizabeth Drew, una veterana observadora de la política norteamericana, escribe: “Es muy probable que no haya habido tanto rechazo de los candidatos a figurar junto al presidente de su partido desde la época de Richard Nixon”. Su índice de aprobación está en torno al 40%. En Europa ya casi no hablamos de él: hemos pasado del “¡Obama! ¡Obama!” al “No-drama-Obama” y luego al “Nobama”.

¿Qué ha ocurrido? ¿O esta desilusión es tan poco realista como la euforia inicial? Este verano, en Estados Unidos, he pedido a varios comentaristas que hicieran un balance de la presidencia de Obama. Por supuesto, todavía pueden pasar muchas cosas en los dos años largos que le quedan, pero seguramente ha tomado ya la mayoría de sus grandes decisiones, y cada vez da más la impresión —con sus canas, su desapego y sus discursos cansados— de que preferiría estar jugando al golf.

Hay que recordar que ningún presidente, desde 1945, había empezado en una situación tan difícil. Llegó al poder con la peor crisis financiera desde los años treinta, tras la desastrosa e innecesaria guerra de George W. Bush en Irak, con un sistema político disfuncional en torno a un Congreso manipulado y dominado por el dinero, y en pleno cambio histórico del equilibrio mundial de poder. Este año, China sobrepasará a Estados Unidos como primera economía del mundo (medido en paridad de poder adquisitivo). En un artículo que escribí desde Washington al día siguiente de la elección de Obama ya expresé mis dudas de que aquel ánimo esperanzado bastara para superar todos esos obstáculos.

Y no supe prever otro obstáculo. Aunque se proclamó que la llegada de un negro a la Casa Blanca era el final de la peor mancha en la mayor democracia del mundo, resulta que sigue habiendo muchos prejuicios. “Es innegable”, dice Drew, “que la raza del presidente es un factor importante en el lenguaje y los métodos tan destructivos que se emplean para atacarle”.

Dicho esto, ¿cuál es el balance provisional? Mi respuesta es: moderadamente bueno en política interior, muy malo en política exterior. La economía estadounidense es la que mejor va de todas las desarrolladas. Ha crecido casi el 8% desde el primer trimestre de 2008, mientras que la de la Eurozona ha caído más de un 2% en ese mismo periodo. El paro ha caído a menos del 6%. El déficit fiscal para el año 2014 fue inferior al 3% del PBI (el límite teórico de la Eurozona). Podemos debatir sin descanso de quién es el mérito —el Gobierno, Ben Bernanke, el gas de esquisto, el dinamismo de un mercado interior inmenso, el innato espíritu emprendedor de los estadounidenses, Dios Todopoderoso—, pero todo eso ha pasado durante la presidencia de Obama. Las restricciones de la ley Dodd-Frank al sistema financiero son tímidas e incompletas, pero la Agencia de Protección Financiera para el Consumidor, creada por él, ofrece nuevas formas de amparo frente a los banqueros. Asimismo, Obama ha hecho todo lo posible para empezar a reducir las emisiones de carbono, a pesar del poder de los grupos de presión en el Congreso.

El lanzamiento inicial de la página web de Obamacare fue un desastre, pero el programa ha permitido que alrededor de 10 millones de personas tengan por primera vez un seguro de salud. Dos profesores de Princeton han descubierto que, en su primer mandato, Obama dedicó mucho más dinero a programas contra la pobreza que otros presidentes demócratas. Ha hablado menos de los pobres pero ha hecho mucho más por ellos. Falta (todavía) una gran reforma de la inmigración, pero el motivo fundamental es que los republicanos están más preocupados en asegurarse las primarias frente al Tea Party que en obtener los votos de los hispanos. No está mal para ser una época de vacas flacas.

Por el contrario, en política exterior, el presidente del que el mundo esperaba tantas cosas ha hecho muy poco. No ha cometido “estupideces” como invadir Iraq. Pero eso es todo.

El estadista visionario del discurso de 2009 en El Cairo no aprovechó la oportunidad de la primavera árabe, en especial en Egipto, donde más de 1.000 millones de dólares de ayuda otorgaban a Estados Unidos la capacidad de influir en el ejército, de nuevo dominante y represor. Obama declaró una línea roja sobre el uso de armas químicas en Siria y luego dejó que el presidente El Asad la cruzara con impunidad. El Asad dirigió sus ataques contra la oposición moderada, para la que Hillary Clinton había pedido a Obama más ayuda. El resultado fue que el Estado Islámico (EI) se hizo fuerte. Su debilidad en las negociaciones con el primer ministro chií de Iraq, Nouri al Maliki empujó a algunos suníes descontentos a unirse también al EI. Y ahora Estados Unidos ha vuelto a intervenir en Iraq.

El prematuro premio Nobel de la Paz no se ha dedicado (aún) en cuerpo y alma a buscar una solución de dos Estados para Israel y Palestina, como hizo Bill Clinton, a pesar de saber que debe hacerlo. Ha reaccionado con tibieza a la indignante agresión de Vladimir Putin en Ucrania. La primavera pasada declaró que Rusia no era más que una potencia regional y que le preocupaba más que pudiera estallar un arma nuclear en Manhattan. El escándalo del programa masivo de vigilancia de la NSA ha irritado a varios aliados cruciales, sobre todo los alemanes, y él ni siquiera ha despedido a su máximo responsable de inteligencia, el general James Clapper, que había mentido al respecto ante el Congreso. El giro hacia Asia es una buena idea, pero ni China ni los aliados de Estados Unidos en la región están muy satisfechos con los resultados. Y luego está el desarrollo. El hombre que llegó al poder hablando de Norte y Sur en lugar de Oriente y Occidente ha contribuido menos al desarrollo en el Sur del planeta que George W. Bush, con los Objetivos del Milenio y otras iniciativas. Ah, y no ha cerrado Guantánamo. ¿Tengo que seguir?

Todo esto lleva a una pregunta interesante: ¿los votantes de las primarias demócratas se equivocaron al ordenar sus prioridades históricas? ¿El primer afroamericano antes que la primera mujer? Aunque ni Clinton ni Obama habían ocupado puestos de gobierno, Hillary tenía más experiencia y seguramente habría sido más dura en casi todos los temas. En 2008 tenía la edad apropiada, mientras que, si gana en 2016, tendrá 69 años. Y con ocho años más, más tiempo en el Senado y un periodo como secretario de Estado o vicepresidente, Obama habría estado más preparado para afrontar los retos de un mundo peligroso. Un buen ejemplo de historia alternativa.




Ahora tenemos que velar por la inversión y el crecimiento

Ahora tenemos que velar por la inversión y el crecimiento

En lo que va del año las estimaciones de crecimiento del país se ha ido reduciendo mes a mes. El viernes último, el BCR, volvió a recortar su estimación para el 2014. Esta vez sostuvo que el PBI se expandiría en apenas 3.1%, cuando anteriormente había asegurado que llegaríamos al 4.4%. Esta última cifra está muy lejos del optimista “por encima del 5%” que proyectó el MEF a fines del 2013, y por supuesto del promedio de la década pasada, 6% anual. Esta situación es sumamente preocupante.

Y es que el crecimiento del PBI es la clave del desarrollo integral (económico y social) de un país. Si la tasa de crecimiento no es óptima, la renta de una nación, es decir su nivel de riqueza, será escaso, su inversión limitada y su capacidad de crear empleo disminuida. Por lo tanto, además, el Estado no tendrá los recursos para atender sus obligaciones. Todo esto redunda directamente en una menor reducción de la pobreza, objetivo número uno de un país emergente como el Perú.

Como señala el reconocido economista de la Universidad de Columbia (EEUU), Xavier Sala-i-Martín: “No es difícil darse cuenta de que pequeñas diferencias en la tasa de crecimiento [PBI], sostenidas durante largos periodos de tiempo generan enormes diferencias en niveles de renta per cápita. Por poner un ejemplo, el Producto Bruto Interno (PBI) per cápita de los Estados Unidos pasó de 2,444 dólares en 1870 a 18,258 dólares en 1990. Ambas cifras en dólares reales de 1985. Es decir en poco más de un siglo, el PBI se multiplicó por ocho. Este cambio sustancial, que representó una tasa de crecimiento anual de 1.75%, convirtió a los EE.UU en el país más rico del mundo. (…) Consideremos ahora lo que hubiera pasado si el mismo país hubiera crecido al 0.75%El nivel de 1990 no habría sido de 18,258 dólares sino de 5,519 dólares: menos de la tercera parte. Esto significa que, en lugar de ser el país más rico del mundo, EE.UU tendría una renta per cápita del nivel de México o Hungría y disfrutaría de 1,000 dólares por persona menos que Portugal o Grecia. ¡Y la diferencia entre uno y otro escenario es solamente de un punto porcentual!” (Ver gráfico).

Es evidente, entonces que una leve variación del PBI tiene un impacto enorme en los niveles de renta per cápita y, consecuentemente, en la reducción de la pobreza y el bienestar social de un país. Como explica Sala-i-Martín, el crecimiento no siempre es sostenido, lo importante es tener un promedio adecuado a las posibilidades de cada país. Recordemos que el HSBC dice que para el 2050, el Perú podría ser la economía 26 del mundo con no más de 10% de pobres (no-extremos) si crecemos a un promedio de 5.5% anual. (Ver en Lampadia: 2050: ¿El Perú en el puesto 26?).

Esta no es una discusión ideológica. La historia de los pueblos y los datos empíricos determinan que así se produce el bienestar.

“Todo esto empezó a cambiar en 1760 cuando un nuevo sistema económico nacido en Inglaterra y Holanda, el capitalismo, provocó una revolución económica que cambió las cosas para siempre: en poco más de 200 años, el capitalismo ha hecho que el trabajador medio de una economía de mercado media no solo haya dejado de vivir en la frontera de la subsistencia, sino que incluso tenga acceso a placeres que el hombre más rico de la historia, el emperador Mansa Musa I, no podía ni imaginar”, señala el citado economista (Ver en L: El capitalismo reduce la pobreza del mundo).

Para demostrar la fuerza de los postulados del modelo de libre mercado, Sala-i-Martín, señala: “En 1970, el 30% de la población mundial vivía con menos de un dólar al día.  En el año 2011 (último año para el que disponemos de datos), la tasa de pobreza era de menos del 5%. (…) ¿Qué ha pasado desde 1970? Pues, entre otras cosas, que los países más poblados y más pobres del mundo abandonaron los sistemas socialistas de planificación que los condenaban a la pobreza y adoptaron el capitalismo como forma de organización económica. El caso más espectacular es el del país más poblado de todos: la China. (Un dólar al día es la definición de pobreza extrema que la ONU utilizó para fijar los objetivos del milenio en el año 2000)”.

Una magnífica demostración de estas relaciones entre crecimiento y pobreza se aprecian en una reciente conferencia en un instituto sueco, verla en Lampadia: Bill Gates y Hans Rosling debaten el fin de la pobreza extrema.

Sin ir más lejos eso es lo que ha sucedido en el Perú en las últimas décadas. Diversos estudios han demostrado como la pobreza ha venido reduciéndose en el Perú. Según cifras del INEI este indicador ha descendido del 58,7% en el 2004 a 23,9% en el 2013, y la pobreza extrema se ha reducido a 4.7%. Como ha señalado el economista Juan Mendoza, y otros expertos (ver en L: Al menos 80% de la reducción de la pobreza es por el crecimiento).

Es decir, el crecimiento económico, propiciado por el regreso de la inversión privada con la Constitución del 93, es el responsable directo de la disminución de la pobreza y los demás indicadores sociales.

Pero más importante aún que este fenómeno, es que, como ha demostrado Elmer Cuba de Macroconsult, “entre 2004 y 2013 la forma de la pirámide de ingresos ha cambiado a un rombo”. Esto se aplica en el conjunto del país, en los sectores urbanos y rurales. (Ver en L: La Rumba del Rombo).

Aunque muchos critican al PBI, como un indicador que solo mide la pobreza monetaria, un reciente estudio de la Universidad de Oxford demuestra que los índices que miden “la pobreza multidimensional” y el “Índice de Desarrollo Humano” reflejan lo mismo que consigue el denostado PBI. Los resultados del mencionado informen concluye que “para los hacedores de políticas [autoridades y expertos], la data también sugiere que el aumento de los ingresos se traduce en menores niveles de pobreza multidimensional. El crecimiento económico puede, entonces, no sólo ser la mejor manera de superar la pobreza extrema, sino también de reducir los aspectos no económicos, como las terribles carencias sociales” (Ver en L: No nos equivoquemos sobre cómo medir la pobreza).

Ahora que nuestra economía está cuesta abajo, debemos tratar de consensuar prioridades e instrumentos. Lo primordial es disminuir la pobreza y para ello tenemos que mantener la inversión y el crecimiento. Lampadia




Francia es el país que más turistas recibe en el mundo

Francia es el país que más turistas recibe en el mundo

Los turistas están expresados en millones. Tomado de movehub.com

Si alguna vez te has preguntado qué país es el destino turístico más popular, este mapa responde a dicha pregunta. En él se muestra qué países reciben la mayor cantidad de visitantes cada año.

Tal vez te sorprenda descubrir que Francia es el destino más popular. El país cuya capital es una de las ciudades más atractivas del mundo, le da la bienvenida a 81,4 millones de visitantes cada año. Eso es cerca de 20 millones más de turistas anuales de los que reciben los EE.UU., que ocupa el segundo lugar. Increíble, si se piensa que Francia es 15 veces más pequeña, pero claro, está llena de encantos como gastronomía (los mejores vinos y quesos, rica cultura, hermosas ciudades y museos de primer orden. Una combinación de un atractivo irresistible.

El ranking de los 12 países más visitados, solo figura un latinoamericano, México en el puesto 11, el cual recibe más de 23 millones de visitas.  Aquí la lista elaborada por movehub.com:

1. Francia 81’400,000

2 Estados Unidos 62’700,000

3 China 57’600,000

4 España 56’700,000

5 Italia 46’100,000

6 Turquía 34’000,000

7 Reino Unido 29’300,000

8 Alemania 28’400,000

9 Federación Rusa 24’900,000

10 Malasia 24’700,000

11 México 23’400,000

12 Austria 23 millones