1

Para ingenuos, los empresarios

Para ingenuos, los empresarios

Fausto Salinas Lovón
Para Lampadia

La candidez política o la tibieza de ciertas élites empresariales las ha colocado en una situación sumamente embarazosa este fin de semana.

Saludaron con una ingenuidad impropia para este tiempo, el mensaje de Pedro Castillo (en la CADE) que “aseguró a los empresarios que tienen todas las garantías para invertir en el país”, y  proclamaron que “las empresas privadas no pueden trabajar solas para construir un Perú mejor, sino articular con el Estado y organizaciones sociales”, el mismo día en que la primera Ministra, desde el Estado, le propinaba el punta pie más certero a la minería peruana anunciando el cierre de 4 minas en Ayacucho, las cuales habían sido previamente incendiadas por organizaciones sociales con la tolerancia del Estado.

Sólo un total desconocimiento de los usos de la política, podría explicar tamaña candidez.

Castillo, Cerrón, Mendoza, Arana y Vásquez, la coalición que ocupa y desangra el Poder Ejecutivo, no han venido a gobernar, han venido a tomar el poder, cosas que son muy distintas.  Los actos de gobierno son la coartada mientras se consolidan en el poder. Ya llegaron al poder. Están buscando mantenerse en él. Ejercerlo no es su prioridad por el momento. Ejercerlo bien, mucho menos.

Hablarles entonces a Castillo, Vásquez o Francke de mesas ejecutivas multisectoriales, de la importancia del turismo, de la equidad de género en el ámbito gerencial, de alianzas público privadas, de sostenibilidad o de diálogo con el Estado sub nacional, es hacerles el juego, es participar de los fuegos artificiales que ellos han montado para que no se vea como toman el poder, para no soltarlo nunca. Es ponerse en el mismo papel de LR, de Exitosa o de RPP, la prensa funcional.

Si, desde las élites empresariales no se tiene claro esto, si no se entiende que las principales armas de la política son el engaño y el doble discurso,

  • si no se recuerda que las dictaduras socialistas comienzan con los hidrocarburos (Brea y Pariñas / Camisea)
  • y el agro (Primera/ Segunda Reforma Agraria),
  • para luego pasar a las minas (Cerro de Pasco Corporation / Apumayo – Inmaculada, etc.),
  • la pesca (Banchero Rossi – Diario Correo),
  • las finanzas (Banco Popular)
  • y hasta la prensa que apoyó el golpe de 1968 (El Comercio)

Queda claro que quienes lideran a los empresarios peruanos no están sentados en la mesa para compartir el almuerzo con el gobierno y llevarse bien como ellos creen, sino que están en el menú.

No advertir que Castillo y su coalición le han declarado la guerra al país, es no tener idea de qué batalla se está librando en este momento en el Perú. Elites así, no solo empresariales, sino intelectuales, periodísticas, culturales, son tremendamente funcionales a la destrucción institucional. Ya las tuvimos, en los 70s. Parece que las tenemos también ahora.

El Perú necesita liderazgos empresariales claros, de principio, enérgicos como el que tuvo Raymundo Duarte contra Juan Velasco en los 70s, desde la Sociedad Nacional de Industrias. Las élites empresariales deben ser las primeras en advertir y combatir los riesgos del experimento político económico que Castillo y sus aliados quieren hacer en el país. No pueden ser parte de la corte de turno, ni sus habilitantes. Lampadia




Quien avisa no es traidor

Quien avisa no es traidor

Fausto Salinas Lovón
Desde Cusco
Para Lampadia

Otra vez en setiembre, el sino de la política peruana nos muestra que la corrupción, el engaño y la traición son una constante.

En esta misma época, en setiembre de 2000, hace apenas 20 años, se conoció como actuaba “detrás de cámaras” el régimen de Alberto Fujimori para ocultar actos de corrupción, mantener el poder y controlar la justicia. Una traición puso a la luz lo que muchos creíamos que sucedía en los entretelones de un gobierno que había logrado valiosos avances económicos para el país, pero que estaba como tantos otros gobiernos peruanos, minado por la corrupción y el engaño.

Veinte años después, nuevamente en setiembre, una traición devela la forma como Martín Vizcarra “acomodaba la realidad”, “preparaba declaraciones” y “faltaba a la verdad” en busca de lo mismo de siempre: ocultar actos de corrupción, mantener el poder y controlar el curso de la justicia. Un gobierno que presumía de moralidad, mostraba que era precisamente de eso qué adolecía.

Está demás decir que a lo largo de estas dos décadas otros audios, videos, declaraciones de testigos, delaciones premiadas y confesiones, han mostrado lo mismo: corrupción y engaño detrás de la escena de la política oficial. Muchas otras traiciones han mostrado el “detrás de cámaras” del toledismo, aprismo, humalismo y de este mismo gobierno, para no hablar de gobernadores regionales, alcaldes, magistrados y fiscales.

  • ¿La traición de Karem Roca Luque a Martín Vizcarra permitirá que muchos peruanos vean que la corrupción y el engaño no pertenecen a uno u otro bando de la política peruana sino a toda ella?
  • ¿Las contrataciones de favor como la del patético señor Richard Swing, harán que muchos peruanos entiendan de una vez por todas que ver al “estado como botín” no es un atributo de algunos políticos sino de muchos de aquellos que quieren llegar al poder?

En “La corrupción que esconde el ruido anticorrupción I y II” (LAMPADIA 13.09.19 y 20.09.19) vimos que el problema de la corrupción era “más amplio, más antiguo y más serio” de lo que el relato maniqueo del presidente Vizcarra quería mostrar para enfrentar a sus opositores.  Dimos evidencias de que el “play list oficial de la música anticorrupción esconde una corrupción mucho mayor y de mayor nivel y que la verdadera lucha anti corrupción “no puede ser una bandera política de supervivencia” como lo fue hasta ayer, sino “una cruzada nacional, amplia, permanente y sin estridencias”.

Muchos peruanos no quisieron entenderlo. Estamos a tiempo de hacerlo.

El último caso de traición conocido ayer probablemente aparte a Martin Vizcarra del cargo, encumbre como presidente temporal al presidente del Congreso y nos ponga el 2021 en manos de algún falso moralizador cuyas radicales promesas sintonicen con el anhelo hipócrita de muchos ciudadanos que quieren combatir la corrupción en la política, sin combatirla previamente en casa.

La corrupción y el engaño seguirán siendo una constante de la política peruana mientras usemos el pronombre equivocado para entenderla: ellos en lugar de nosotros. Cuando entendamos que el problema está en “nosotros los peruanos” y no en “ellos los políticos”, habremos dado el primer paso necesario para comenzar en serio la solución de este problema. Reconocer que la corrupción está en el ADN nacional puede ser muy duro e injusto con muchos, pero es imperativo para enfrentar en serio este problema y no caer en el juego cínico de los políticos, a los cuales sólo la traición de sus allegados desnuda.

Entre tanto, se seguirá aplicando por necesidad aquello de que “quien avisa no es traidor”. Lampadia




¿Una Cuba reformada o reempaquetada?

La Cuba socialista está planeando una serie de cambios que ellos afirman son “potencialmente trascendentales”, con una nueva constitución establecida para reconocer el libre mercado y la propiedad privada, mientras divide los poderes políticos entre un presidente y un primer ministro. Pero, cabe la duda de si es verdad todos estos cambios y cuáles serán sus límites.

En una reforma de la constitución de 1976, se afirma que los medios fundamentales de producción seguirán bajo control central, pero la inversión extranjera será reconocida como un estímulo importante para el desarrollo, según un informe del periódico Granma. Sin embargo, se aclara que el Partido Comunista seguirá siendo “la fuerza líder superior de la sociedad y del estado” y no dice nada sobre cómo funcionará el cargo de primer ministro o quién lo ocupará.

El ex gobernante cubano Raúl Castro, el gobernante Miguel Díaz-Canel y el segundo secretario del gobernante Partido
Comunista de Cuba, José Ramón Machado Ventura, en la plenaria del primer período ordinario de sesiones de la IX
Legislatura de la Asamblea Nacional el sábado 21 de julio de 2018, en La Habana (Cuba).

Fuente: EFE

La verdad es la nueva Constitución no es más que un engaño, pues reafirma “el papel rector del Partido Comunista de Cuba como fuerza dirigente superior de la sociedad y el Estado”. Como afirma Ian Vásquez en Reforma constitucional cubana, ja, ja, ja, “De ninguna manera se abandona el modelo. Lo que importa es la política del régimen y eso no ha cambiado. Siempre ha hecho lo menos posible en términos de reforma para poder mantener el control. Mientras que dice asegurar un papel al mercado, por ejemplo, el régimen ha restringido todavía más al ya pequeño sector privado. Recientemente, anunció más impuestos y regulaciones, la reducción de actividades en las que puede participar el sector privado y la limitación a solo un negocio por empresario.”

El sector privado

El proyecto de Constitución “añade el reconocimiento del papel del mercado y de nuevas formas de propiedad, entre ellas la privada”, señaló un resumen del texto publicado en el diario oficial Granma. Ello permitirá la legalización de la pequeña y mediana empresa. Asimismo, agregó, admite “la importancia de la inversión extranjera para el desarrollo económico del país”.

La autorización para que las personas trabajen en el sector privado fue una medida que casi fue suspendida. Ahora se va a reanudar, pero bajo estrictas regulaciones que parecen enfocarse más en controlar y restringir el sector privado emergente que en estimular la inversión y la creación de empleos, más preocupados por limitar la acumulación de riqueza que por aliviar la pobreza.

El pequeño sector privado de la isla ahora emplea a aproximadamente el 13 % de la fuerza laboral cubana. El sector privado creció dramáticamente en los últimos años, para incluir a casi 600,000 propietarios y empleados por cifras oficiales, con muchos cubanos más emprendedores trabajando informalmente.

Los nuevos controles requerirán que los dueños de negocios utilicen una cuenta bancaria para registrar todas las operaciones, pagar impuestos y demostrar que sus suministros se obtienen legalmente. Además, las licencias comerciales están limitadas a una por persona, para evitar la acumulación de riqueza personal, todo parte de planes para “actualizar” el modelo económico de la isla.

En contraste, el sector estatal se estancó y se descapitalizó aún más. De hecho, muchas empresas privadas comenzaron a competir con éxito contra entidades estatales, especialmente en restaurantes, bares y discotecas, hoteles, construcción y transporte. Los salarios pagados por las empresas privadas rentables a menudo superaban los salarios pagados a funcionarios del gobierno.

Las extensas regulaciones que entran en vigencia en diciembre son excesivamente burocráticas. Aprovechando una multitud de ministerios, los comités interinstitucionales nacionales, provinciales y municipales ahora estarán facultados para autorizar, inspeccionar e informar periódicamente a las empresas privadas bajo sus jurisdicciones. Las regulaciones están repletas de requisitos de rendimiento asombrosamente específicos e innumerables infracciones legales que parecen diseñadas para permitir a los funcionarios del gobierno una amplia discriminación para imponer fuertes multas (o extorsionar sobornos), suspender licencias e incluso apoderarse de propiedades.

Según unos informes de McKinsey, algunas de estas regulaciones son:

  • Las guarderías deben asignar al menos dos metros cuadrados por niño, no tener más de seis niños por asistente
  • Los taxistas privados deben documentar que están comprando combustible en las gasolineras del gobierno, en lugar de comprar en el mercado negro.
  • Los funcionarios locales pueden denegar nuevas licencias basadas en “análisis previos”, incluso si el plan de negocios propuesto cumple con todas las especificaciones y pueden fijar los precios “cuando las condiciones lo justifiquen”.

Las regulaciones podrían ayudar a proteger a las empresas estatales de la competencia privada no deseada. Las autoridades cubanas han manifestado reiteradamente su interés en atraer inversión extranjera para compensar los cada vez menores ahorros internos. Sin embargo, es probable que los inversionistas extranjeros consideren que estas nuevas reglamentaciones son indicativas de una hostilidad hacia la empresa privada en general. Los inversionistas extranjeros también notarán que el gobierno cubano es bastante capaz de alterar precipitadamente las reglas del juego.

Las nuevas regulaciones dejan una cosa muy clara: el gobierno cubano, las empresas estatales y el gobernante Partido Comunista de Cuba no quieren arriesgarse a una competencia mayor para sus propios intereses. Lampadia




Tipología de la corrupción

Tipología de la corrupción

Jaime de Althaus
Para Lampadia

De la entrevista que le hiciera al gobernado de Ica, Fernando Cillóniz, en El Comercio (ver Otro gobernador regional que se las trae), se desprende una tipología de la corrupción en nuestro país que puede ser útil para diseñar medidas preventivas eficaces en la lucha contra esa calamidad.   

Sectoriales

Tenemos, en primer lugar, formas sectoriales de corrupción, es decir, modalidades particulares propias de cada sector, que es necesario identificar. Cillóniz describe algunas de las que se presentan en Salud, Educación, Transportes y la Policía.

1. Salud

En Salud descubrió que la causa principal de las crueles colas de amanecida que había en el hospital de Ica era la corrupción de algunos médicos que abandonaban sus consultorios a media mañana para ir a atender sus prácticas privadas. “Ese es un vicio, un cáncer que existe en todos los hospitales públicos del país”, señala el gobernador de Ica.

¿Cómo hizo para erradicar ese vicio en Ica? “Nosotros lo hemos extirpado con sanciones administrativas que han resultado en la destitución, bajo la ley Servir, de casi 30 médicos con 20 o 30 años de servicio. Además, hemos instalado tecnología digital que programa muy bien las citas y se evitan las colas”, explica.

Además, recurrió a SERVIR para ordenar el servicio: “Nosotros debemos tener unos 20, 30 gerentes públicos de Servir. La revolución de la salud pública en Ica tiene mucho que ver con los profesionales que Servir ha puesto a nuestra disposición”. 

Habría que añadir que un SIS reformado ayudaría mucho a prevenir la corrupción. Es decir, un SIS que pague no por atenciones realizadas –que fomenta la multiplicación innecesaria de atenciones-, sino que pague una cantidad fija por persona/red, lo que lleva a resolver con el mínimo de atenciones a fin de disponer de más dinero para invertir en mejoras, y lleva también a reorientar el servicio al primer nivel de atención, descongestionando los hospitales. Además, en la medida en que el SIS paga más también en tanto y en cuanto el paciente no paga por los medicamentos y no es derivado a clínicas o consultorios privados, el espacio para la corrupción se reduce. Este esquema, que comenzó a ser implementado el año pasado, lamentablemente ha sido dejado de lado.

2. Educación

En Educación también hay diversas prácticas corruptas. Cillóniz refiere que en el gobierno regional de Ica han sido destituidos alrededor de 10 maestros y directores, sea porque cobraban por aprobar alumnos o por denuncias de acoso y abuso sexual. No son las únicas perversiones en ese sector. En un estudio sobre la pequeña corrupción en el sector educación en Ayacucho, Ludwig Huber[1] encontró vicios en todos los niveles, “desde la pugna entre el gobierno regional y la Dirección Regional de Educación para colocar gente de su entorno en las UGEL provinciales, pasando por la corrupción en la burocracia y en las instituciones educativas, hasta el aula”. Cobros para contratar a un postulante a profesor son normales, por ejemplo.

¿Cómo hacer para prevenir esas corruptelas? Susana Silva, Secretaria de Integridad Pública, nos responde: “En educación, como en otros servicios fundamentales, lo recomendable es 1) hacer visitas inopinadas, 2) mecanismos de denuncia, 3) usuario oculto para identificar malos funcionarios”.

Por supuesto, la profundización de la meritocracia y la simplificación y eliminación de procesos, fortaleciendo los sistemas de seguimiento y evaluación, son vitales. Juan Pablo Silva, ex viceministro de Educación, nos dice: “Una medida clave es la selección mediante evaluación de directores de UGELs y escuelas. La meritocracia es clave. Complementándola con programas de desarrollo de capacidades. Luego hay que simplificar y eliminar procedimientos. Otra cosa que se hizo fue mejorar el front desk de las UGELs evitando que los usuarios tengan acceso a las oficinas de los responsables de realizar los trámites, que era el momento en que se producía la corrupción. También mejoramos el flujo de la información usando tecnología con el objetivo de liberar tiempo gastado en procesos burocráticos. Además, esto ayudaba a hacerle seguimiento a los procesos y detectar irregularidades (corrupción)”

3. Transportes: la mafia de los brevetes

En Transportes, reinaba, en Ica, la mafia de los brevetes. “Se entregaba brevetes a cambio de dinero a gente y a conductores de autobuses y de camiones que no saben manejar. Los accidentes de tránsito en el Perú tienen mucho que ver con que hay mucha gente que está manejando sin saber manejar. Por otro lado, era comodísimo para los pudientes pagar 1000 soles y recibir un brevete a domicilio, pero la gente pobre también tenía que pagar para acceder a un brevete”, narra el Gobernador. Según él, esa mafia está en todo el país.

¿Qué hicieron? “Pues destituimos a seis o siete funcionarios de la dirección regional de transportes, mafiosos completos articulados con la fiscalía, los jueces, los periodistas y congresistas”, cuenta Cillóniz. Ahora tienen que dar todos los exámenes y el brevete se entrega apenas se termina de aprobar el examen de manejo, en el acto”, agrega

Transversales

1. Viáticos con facturas falsas

Fuera de las modalidades sectoriales, hay prácticas corruptas transversales, presentes probablemente en todos los sectores de la administración pública regional y nacional. La autoridad regional relata, por ejemplo, que “en la propia sede del gobierno regional de Ica hemos destituido también unos 6 u 8 funcionarios, principalmente por rendir cuentas de viáticos con facturas falsas. Existe un mercado, y en todo el Perú, de venta de facturas de restaurantes y de hoteles, que uno llena a su antojo y le roba al Estado 50 soles, 70 soles, 120 soles, pero de manera sistemática. Llamas a la Sunat y descubres que la numeración no coincide. O al establecimiento. Eso a la larga suma un montón de dinero… Yo estoy convencido de que un porcentaje muy significativo del gasto público y, por ende, del déficit fiscal, es fraudulento”. 

Cillóniz da la pauta acerca de qué hacer en estos casos: habría que encargarle a las Oficinas de Control Interno (OCI) de todas las entidades que verifiquen la autenticidad de las facturas que se presentan.

2. Falsificación de certificados de estudios o de trabajo

Más grave aún es que “hay unos cientos de miles de burócratas que no entraron por méritos, sino por la puerta falsa, con un tarjetazo o comprando el puesto, o falsificando certificados de estudios, engañando al Estado… Nosotros hemos destituido médicos que tenían certificado médico falso. Llamas a Sunedu y resulta que es falso. ¡Estaban atendiendo a pacientes no siendo médicos! También hay certificados de trabajo falsos. Uno llama al establecimiento, resulta que nunca trabajó ahí. Es el mundo de la mentira”. 

La misma receta que en el caso anterior: que las OCI verifiquen la autenticidad de los certificados de estudios y de trabajo que han presentado los funcionarios, y abrirles proceso administrativo a los que los hayan falsificado con la finalidad de retirarlos de la administración pública. Esto debería ser una campaña nacional que, de paso, ayudaría a reducir el gasto público y mejorar la gestión. Pues con alta frecuencia se trata de personal no idóneo o que incluso eventualmente boicotea la gestión pública, como denuncia el propio gobernador regional.

3. Boicot de funcionarios

En efecto, “hay muchos funcionarios que han entrado con padrinos del humalismo, padrinos de todos los gobiernos, y tienen como consigna política boicotear el proceso de la gestión pública”, explica Cillóniz. “En el hospital regional de Ica, por ejemplo, el boicot se manifestaba en atoros provocados de las redes de desagüe para que se inunde el hospital… O ponen cucarachas en el comedor, en la cocina, y llevan a periodistas a fotografiar las cucarachas…  Nosotros tenemos gente, funcionarios, que ingresan a los sistemas digitales a tratar de tumbarse procesos de subastas públicas. Quieren el fracaso del gobernador…”.

¿Qué hacer en estos casos? Cillóniz da la respuesta: “Yo pensé que no se podía sancionar, pero sí se puede. Sí se los puede despedir cuando cometen una falta, inclusive por agredir a usuarios y a compañeros de trabajo. La Ley Servir lo permite y el tribunal Servir ratifica o corrige la sanción”.

Sería conveniente, en ese sentido, difundir y capacitar a los gobernadores regionales, alcaldes y a los gerentes y secretarios generales y a los jefes de personal, acerca de los procedimientos para abrir procesos en el marco de la ley Servir.

Hay aquí, pues, una llamada de atención a la Contraloría. El gobernador de Ica afirma: “El tribunal Servir es mucho más efectivo que la Contraloría. El servicio civil Servir es una institución que destaca”.

4. Sistema de justicia y control no funcionan: impunidad

Pues lo que no funciona son las instituciones encargadas de perseguir y castigar: “La frustración, sin embargo, es que todo esto lo hemos puesto en consideración del Ministerio Público y no pasa nada. No hay sanción, hay impunidad. El sistema de justicia de nuestro país es muy poco efectivo. Me refiero a la policía, al Ministerio Público, la Contraloría. La Contraloría no detecta estos casos que son flagrantes y masivos”.

Ese es el tema de la reforma del sistema judicial y policial, del que nos hemos ocupado en otros artículos.

5. Policías en mafias, mafias postulan a gobiernos locales

Cillóniz reconoce que la Policía Nacional ha ayudado enormemente a poner orden. Sin embargo, se pregunta, “¿cuántos policías están metidos en la mafia del tráfico de tierras y en las mafias de los sicarios y de narcotraficantes?”. Mafias que no solo captan policías, sino eventualmente alcaldes o gobernadores. Es más, las mafias mismas presentan sus candidatos. “Uno lo ve en estas campañas, hay mafias que están postulando. Entonces, si llegan, es imposible controlar la corrupción, porque son ellos la corrupción”, afirma el gobernador.

Por supuesto, esta posibilidad se ha agravado con la ley que prohíbe el financiamiento de las campañas por parte de empresas formales, dejando el campo libre a las organizaciones criminales. Esa ley tiene que modificarse a la brevedad, antes de que sea demasiado tarde.   

Los mega-operativos son fundamentales para ir eliminando estas organizaciones criminales. Para lo que resulta indispensable que a la Fiscalía se le amplíe el presupuesto para este fin, que en junio se le terminaba. Y debe eliminarse el procedimiento especial de acusación a fiscales y jueces establecido en el art. 454 del Nuevo Código Procesal Penal que los blinda impidiéndole a la Policía detenerlos en un mega-operativo.  

Congresistas y periodistas

Lo lamentable es el papel de los cuatro congresistas por Ica tomando el partido de los corruptos e intercediendo por ellos. Cillóniz los mencionó con nombre propio y describió sus intervenciones. “Uno supone que los padres de la patria deben estar de lado de la ley, pero es todo lo contrario. Es lo impensado”, concluye.

Lo increíble es que ni la comisión de ética del Congreso, ni Fuerza Popular, hayan abierto indagación contra esos congresistas (tres de ellos pertenecen a Fuerza Popular). Es la indiferencia total frente a hechos que no pueden pasarse por alto. Esa es la calidad de nuestra clase política.

Conclusión

Por eso, Cillóniz al final considera que una salida pasa por empoderar a la ciudadanía. “En Ica tenemos un programa muy interesante que se llama “Tecnológica”, para generar ideas y startups, incubadoras de ideas brillantes. Lo estamos haciendo con Fundación Telefónica y el Banco Interamericano de Desarrollo. Yo le estoy pidiendo a los chicos que inventen un sistema de detección de corrupción y maltrato de funcionarios públicos. Yo tengo mucha esperanza en la juventud”.

También confía en la prensa objetiva, independiente y veraz, aunque es consciente de que el chantaje periodístico es una práctica recurrente en todo el Perú. Ese es un tema serio, una verdadera enfermedad. Hay muchos periodistas venales y profundamente corruptos, sobre todo en provincias. ¿Sería posible montar un esquema de denuncias contra periodistas comprables o extorsionistas? No tenemos respuestas claras en este momento. Lampadia

 

[1] Huber, Ludwig (2007), “Hacia una interpretación antropológica de la corrupción”. En revista Economía y Sociedad, número 66, CIES, diciembre