1

¡Ampay me salvo!

¡Ampay me salvo!

Carlos E. Gálvez Pinillos
Expresidente de la SNMPE
Para Lampadia

El 28 de enero el “Presidente Ingeniero” viajó a Tumbes, dentro de sus acostumbrados e inconducentes viajes al interior del país. Uno de sus propósitos en esta oportunidad era inaugurar las obras de rehabilitación de la Avenida Mariscal Castilla. Cuál no sería su sorpresa cuando al llegar al lugar encontró a una población indignada por la inundación sufrida en la zona “rehabilitada” ante el colapso de las instalaciones de desagüe recientemente construidas.

Lo más gracioso fue que, el “Presidente Ingeniero” no tuvo mejor ocurrencia que recomendar al Gobernador Regional que tenga mucho cuidado en la recepción de obras de la reconstrucción con cambios, haciendo hincapié que el Gobierno Central transfiere los recursos financieros y es la autoridad regional la responsable de que “cumpla con la correcta calidad y honesta ejecución de las obras, pues eso es fundamental” … ¡Plop!!!   ¡Ampay me salvo!!

Es claro y reconocido que los Gobiernos Regionales y Municipales, NO SÓLO no tienen capacidad técnica para diseñar, revisar, ejecutar y supervisar obras, sino que además son la fuente máxima de corrupción del poder ejecutivo. Por esto hemos insistido tanto en el debido uso de SERVIR para la gerencia descentralizada.

¿No sabe el “Presidente Ingeniero” que lo esencial de una obra o proyecto, público o privado, ¿es la Ingeniería de ese proyecto? ¿Que sin una buena ingeniería no hay forma de tener un buen resultado? ¿Que, en particular, el buen funcionamiento de las obras hidráulicas es altamente sensibles al diseño e ingeniería de estas? La mirada técnica de esos proyectos es esencial, no solo para que funcionen bien, sino para que perduren en el tiempo, pues no es cosa de habilidades artesanales y soluciones a la criolla, solo para la foto inaugural.

Aunque sé que estoy “lloviendo sobre mojado”, repito lo dicho en una serie de artículos previos, donde hemos mencionado que, para la obra pública, no se trata de “transferir más dinero”, “más rápido” y hacer seguimiento de “cronogramas de ejecución” desde el MEF para reportar más avances de la Inversión Pública, sino un buen diseño de obra, una adecuada selección de materiales, adecuada selección del contratista, adecuada calidad de concreto, y muchos otros etcéteras técnicos.

Señor “Presidente Ingeniero”, lo insto a dar prioridad a la aplicación de la mentalidad y capacidades que le inculcaron en la universidad durante su proceso de formación profesional, pues la obra pública necesita más técnica y menos discurso. Lampadia